Uruguay/Julio de 2017/Fuente: El País
A menos de una semana de ser presentada, la propuesta didáctica sobre educación sexual para Primaria desencadenó críticas de figuras públicas. La guía —aunque las autoridades odian este término porque señalan que no se trata de una imposición— de 91 páginas había generado consenso entre el Consejo de Educación Inicial y Primaria (CEIP), la cooperación internacional, la sociedad civil que trabaja en el tema y hasta el director de la asociación de colegios católicos. Pero una columna del periodista Hoenir Sarthou, en el semanario «Voces», hizo reaccionar a algún diputado y hasta al máximo jerarca de la Iglesia Católica, el cardenal Daniel Sturla.
«Hay en el texto elementos para sostener que la aspiración de fondo, fiel a la ideología inspiradora, va más lejos, y pretende que la identidad de género e incluso la identidad sexual pueden ser también elecciones o imposiciones», escribió Sarthou. Y explicó: «Así, se indica a los docentes que no deben decirles a los niños que los varones tienen pene y que las niñas tienen vulva». En su lugar, sugiere la propuesta didáctica, «algunos niños tienen pene y otros tienen vaginas» y a la inversa con las niñas.
Según Patricia Píriz, del Programa de Educación Sexual de Primaria, «hay posiciones que se basan en un esencialismo, en blanco o negro». Pero esta maestra, que participó en la elaboración de la guía, señaló que «no somos solo carne aislada de contexto, de los procesos históricos: hasta el cuerpo cambia por cuestiones sociales».
Desde 2008 las escuelas y jardines públicos de Uruguay tienen un programa de sexualidad que incorpora el llamado «enfoque de género». Píriz aclaró que no se trata de una cuestión ideológica, sino educativa, porque de hecho la propuesta contó con el respaldo de las consultas a docentes, al sindicato, a la ATD, las inspecciones técnicas y departamentales y «fue elaborada por idóneos».
La guía, que contó con el apoyo del Fondo de Población de Naciones Unidas y la ONG Gurises Unidos, llevó tres años de elaboración. Primaria participó, según comentó el director de Gurises Unidos, Gonzalo Salles, para que se contemplase la mirada interna y se evitasen los problemas suscitados con propuestas previas (como la elaborada por el colectivo Ovejas Negras).
Si bien «hay algunos aspectos en que se nota la visión de género, sobre todo en el capitulo dedicado a las actividades», son compartibles «el planteo conceptual, las definiciones, el enfoque didáctico, el papel de la escuela y del docente», dijo el director del colegio Jesús María, Rafael Ibarzábal.
No tan moderado, Sturla criticó ayer en su audición radial que emite Radio Oriental lo que considera una imposición ideológica «propia de los estados totalitarios».
La diputada nacionalista Graciela Bianchi, que se ha dedicado a la docencia en Secundaria, dijo que citará «de inmediato al Codicen» para que explique los fundamentos pedagógicos del documento denominado «Propuesta didáctica para el abordaje de la educación sexual en Educación Inicial y Primaria». La legisladora dijo que estaba de acuerdo con la columna de Sarthou y aludió a que el periodista y abogado «no es de derecha».
Píriz explicó que la guía fue aprobada por el CEIP dentro de la «potestad que tiene como desconcentrado: no todo texto se eleva al Codicen», dijo. La especialista sostuvo que «la educación sexual es un derecho de los niños» y que se debe brindar acorde a las leyes aprobadas.
Cardenal Sturla dijo que la guía es de países totalitarios.
El arzobispo de Montevideo, cardenal Daniel Sturla, no está contento con la guía sexual que diseño la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP). Para él plantea serias dificultades. Es más, sostiene que el texto es digno de los estados totalitarios, y no de una sociedad democrática.
Sturla citó el artículo 41 de la Constitución de la República, el cual establece que la educación de los hijos es responsabilidad primera de los padres.
En su audición radial en Oriental, Sturla remarcó que el texto de la guía contradice a la Constitución en su página 36.
«Es importante comunicar a las familias que la educación sexual es un derecho de los niños, niñas y adolescentes, por lo cual los padres, madres y/o referentes familiares no pueden permanecer indiferentes a dicho derecho, aun cuando no coincida con sus valores y creencias». «Esto no está bien», remarcó Sturla.
«El Estado democrático tiene que velar para que los padres cumplan su patria potestad, pero no puede ponerse en el lugar de los padres y darle a esos chicos una educación que no es la que su familia considere conveniente. Esto es propio de los estados totalitarios, pero no puede serlo de uno democrático», sentenció el cardenal.
Sturla recordó las declaraciones del Papa Francisco, quien criticó a las instituciones que pretenden adoctrinar a los niños sobre este tema.
Fuente: http://www.elpais.com.uy/informacion/enfoque-guia-sexual-escolar-desata.html