Colombia / 17 de diciembre de 2017 / Autor: Redacción / Fuente: El Espectador
El «aprendizaje automático» cambiará la forma en que vivimos (para bien o para mal).
De acuerdo con un artículo escrito por el experto en tecnología en El País de España, Enrique Martín, el aprendizaje automático o “machine learning” cambiará la forma en la que vivimos y trabajamos. De hecho, esta tecnología de aprendizaje ya está presente en nuestras vidas diarias: en el software de los teléfonos, en los carros, en softwares de mapas, incluso en el algoritmo de Facebook.
Según Israel Olalla, ingeniero español de Google, el machine learning deriva de la Inteligencia artificial y consiste en desarrollar códigos o procesos que le permita a las máquinas aprender a través de un conjunto de datos que se le entregan y que, conforme al desarrollo de la máquina, se van corrigiendo. En otras palabras, es moldear la experiencia y la manera en que un cerebro (en este caso, una máquina) la procesa.
De acuerdo con Martín, este aprendizaje está cambiando el modo en el que los humanos percibimos el mundo: se reduce el tiempo de toma de decisiones, de comunicaciones entre nosotros. “El aprendizaje automático será la tecnología que defina una era”, escribió. Incluso señala que esta tecnología crece a la par con los datos abiertos y la infraestructura de “nube” que cada vez se alimenta más con grupos de datos más grandes. De acuerdo con la International Data Corporation, 7 de cada 10 compañías del mundo tienen su información “subida” en la nube (aunque solo 3 de 10 sepan realmente cómo usar la herramienta). Adiós a edificios con pisos dedicados a alojar abarrotados archiveros: todo se aloja en la nube. De esos datos se alimenta la máquina programada para el aprendizaje automático, y entre más información tenga, más rápido y efectivamente aprende y se corrige.
El potencial del aprendizaje automático es increíble, sobre todo para grandes empresas de tecnología como Grant o Google que al final, son quienes necesitan, financian y hacen uso del machine learning a gran escala. Según él, el aprendizaje automático reduce el tiempo en el que se crean pronósticos precisos y fiables y puede tener un impacto en la capacidad de las empresas para planificar, hacer presupuestos, identificar anomalías en grandes conjuntos de datos, etc.
Pero hay quienes se oponen a este “avance de la ciencia”, o que por lo menos son escépticos con respecto a sus efectos, y con razón. El reconocido físico Stephen Hawking tiene una idea más fatalista sobre el potencial del “machine learning”. Desde 2014 ha advertido sobre el avance de la inteligencia artificial “para evitar que de destruya la raza humana. Necesitamos encontrar una manera de identificar amenazas potencialmente antes de que tengan la oportunidad de escalar y poner en peligro a la civilización”, dijo.
En noviembre de este año reiteró su escenario apocalíptico y dijo a la revista Wired que “si la gente diseña un virus de computador, alguien diseñará una Inteligencia Artificial que se mejore y se replique a sí misma. Esto sería una nueva forma de vida que superaría a los humanos”.
Malas noticias para el señor Hawking: el aprendizaje automático que se apoya en la infraestructura de la nube es parte integral de casi todas las estrategias de tecnologías de las empresas que trabajan con datos, y no solo ha llegado a las organizaciones, cada vez se intrinca más en la vida de los seres humanos. En ese orden de ideas, un apocalipsis a lo Hawking sería una versión más interesante de esa aburridísima película, Yo Robot, en donde la inteligencia artificial se ha perfeccionado a tal punto que las máquinas esclavizan a la raza humana en venganza por ser tratadas en calidad de microondas, y la única persona capaz de detenerlas es tan humano que no se da cuenta de que es (¡oh, sorpresa!) un robot.
Puede que sea tan sencillo como lo que dice Francoi Chollet, ingeniero de aprendizaje automático de Google a El País, “la IA se ocupará de las tareas en las que los humanos no somos muy buenos, y lo harán mejor. Serán una herramienta, no la competencia». O tan preocupante como lo que dijo Elon Musk, fundador de empresas como Solar X (que entre otras cosas, también usan estas tecnologías), durante una reunión de gobernadores en Estados Unidos en junio de este año: “la inteligencia artificial representa el raro caso en el que necesitamos ser proactivos con la regulación, en vez de reactivos. Creo que, para el momento en el que estemos reaccionando, será muy tarde. La inteligencia artificial representa un riesgo fundamental para la existencia de la civilización humana”.
En algo están de acuerdo: sin importar si tememos o no, el machine learning está aquí, aprendiendo de usted, entre sus dedos, mientras lee esto en el celular.
Fuente:
https://www.elespectador.com/tecnologia/que-es-machine-learning-y-porque-sera-tan-grande-como-la-llegada-de-internet-articulo-728101