Redacción: Noticias UNO
En total, 172 niños han muerto o resultado heridos por minas o restos de explosivos. La más pequeña era una niña de solo un año. Solo en 2019, ha habido 36 ataques a escuelas y 80 a infraestructura de agua y saneamiento. UNICEF pide a las partes que pongan fin a las hostilidades.
Las minas se han convertido en un peligro para la salud física y el bienestar psicológico de medio millón de niños en el este de Ucrania, ha advertido este lunes el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia.
La región se ha convertido en uno de los lugares más contaminados por las minas terrestres, a pesar de las recientes medidas destinadas a proteger los derechos de los menores afectados por este conflicto que se desarrolla desde hace más de cinco años.
Según Afshan Khan, director regional de UNICEF para Europa y Asia Central, es inadmisible que los niños continúen «yendo a escuelas con agujeros de bala y refugios antiaéreos y que vivan en vecindarios que son bombardeados intermitentemente y están cubiertos de minas terrestres».
Después de reunirse recientemente con familias y niños en la región fronteriza con Rusia, explicó que «hace tiempo que falta una solución política» al conflicto, antes de pedir “a todas las partes que pongan fin a los combates en el este de Ucrania».
Cinco años de peligro constante
Si bien el enviado de UNICEF reconoció que el reciente respaldo del Gobierno a la Declaración de Escuelas Seguras es un paso positivo para proteger los colegios de los ataques y reducir el uso de estos por las fuerzas militares, enfatizó que más de cinco años de conflicto han sido devastadores para los niños a ambos lados de la línea divisoria.
«Los niños que conocí en el este de Ucrania tienen esperanzas y sueños como todos los niños, pero han sufrido enormemente después de cinco años de vivir en peligro constante», dijo Khan, quien agregó que UNICEF y sus aliados están listos para apoyar medidas destinadas a proteger aún más a los niños y garantizar la plena implementación de la Declaración de Escuelas Seguras”.
En todo el este de Ucrania, UNICEF y sus socios brindan apoyo psicosocial y educacional sobre el riesgo de minas a cientos de miles de niños, jóvenes y cuidadores. La Agencia de la ONU también apoya la reparación de escuelas y jardines de infancia dañados, así como instalaciones vitales de agua y saneamiento.
Esos esfuerzos se llevaron a cabo pese a que, en 2019, solo se financió el 37% del llamamiento de emergencia de UNICEF para apoyar a los niños y sus familias en la región.
A fines de febrero de 2014, una crisis política en el país se convirtió en una confrontación violenta cuando Rusia se anexó Crimea, lo que provocó el estallido de un conflicto a gran escala entre fuerzas gubernamentales y separatistas en el este del país.
Fuente: https://news.un.org/es/story/2019/12/1466121