Por ello -explicó- no resulta casual la rúbrica de la Ley de Protección Integral a la Primera Infancia y al Desarrollo Temprano, la cual marca un precedente en el país al ampliar este concepto hasta los ocho años como lo establece la Organización Mundial de la Salud.
De acuerdo con una nota de prensa oficial, la legislación es la primera en Panamá que garantiza los servicios y atenciones para la niñez en aspectos como salud, nutrición, aprendizaje temprano, identidad y crianzas con pautas adecuadas.
Al respecto, Cortizo aseguró que esta ley se traduce en desarrollo, economía competitiva, empleo, vida y oportunidades, al tiempo que habla de una política de estado que va más allá de un gobierno.
Precisó que toda inversión durante la primera infancia potencia el bienestar colectivo y familiar e impacta en la sociedad en términos de salud, educación, deporte, estabilidad social, crecimiento económico, capital humano y competitividad.
Cortizo recordó que esta ley forma parte del Plan de Acción que le presentó al país durante su campaña electoral, así como la creación de la Secretaría Nacional para la Atención de la Primera Infancia.
Durante su recorrido, visitó la comunidad El Cacao, con un índice de pobreza multidimensional de 78,4 por ciento, en la que puso en marcha un programa de electrificación rural que suministrará energía a 113 residencias.
A juicio de las autoridades, ‘la electricidad rural posibilita la diversificación de la matriz productiva y genera cambios positivos en la vida de las personas’, además de evitar la deserción escolar, brindar mayor acceso a la tecnología y generar oportunidades económicas para los jóvenes.
Según el reciente Índice de Pobreza Multidimensional a nivel de distritos y corregimientos, casi la cuarta parte de la población panameña carece de educación, vivienda, saneamiento, trabajo, salud y agua, entre otros servicios básicos.
El estudio refiere que en 98 de los 671 corregimientos existentes en Panamá, más del 90 por ciento de sus habitantes son pobres, mientras que al menos 55 de estas áreas pertenecen a la Comarca Ngäbe-Buglé.