Page 161 of 651
1 159 160 161 162 163 651

Duras críticas de UNICEF al proyecto de reforma de la Ley Penal Juvenil: “Es regresivo”

Por:  Mariana Iglesias.

UNICEF, como otras organizaciones y organismos de protección de la niñez, promueve que se reforme la Ley Penal Juvenil actual, escrita en la dictadura. En marzo el Gobierno presentó en el Congreso un proyecto que se debate en tres comisiones de Diputados. Pero UNICEF salió a criticar varios puntos de ese proyecto, al que considera regresivo. Lo más negativo: la baja de la edad de imputabilidad y el aumento de las penas.

«El Estado argentino tiene una deuda con este tema de más de 35 años. Ahora está la oportunidad de tener una ley con enfoque de derechos humanos, pero si bien con este proyecto acordamos en algunas cuestiones, sobre todo, tenemos grandes diferencias. La más grande, la baja de la imputabilidad -dice Sebastián Waisgrais, especialista en Inclusión Social de UNICEF-. Quizás el mayor problema sea el contexto. Es un año difícil, electoral, hay grandes niveles de pobreza y recortes presupuestarios. El área social está 20 puntos por debajo del presupuesto. Una ley con perspectiva de derechos necesita inversión social. La privación de la libertad no es la respuesta cuando faltaron respuestas anteriores, cuando se vulneraron todos los derechos».

Mariángeles Misuraca, oficial de Protección y Acceso a la Justicia de UNICEF, dice lo mismo: «Se debe trabajar antes, cumpliendo y garantizando los derechos de los niños. No alcanza con modificar la ley, hay que modificar el sistema. Bajar la imputabilidad no es la respuesta. Eso es regresivo. Las leyes no pueden ser regresivas porque no se puede ir hacia atrás con los derechos. Si eso ocurre, Argentina puede ser sancionada internacionalmente. También estamos en contra de que se eleven las penas cuando justamente lo que hay que hacer con los adolescentes es trabajar en otro proyecto de vida».

«La única política que debe tener el Estado es evitar que los chicos cometan delitos. Los chicos que el Estado quiere encerrar llegan en su mayoría con consumos problemáticos, algunos hasta de combustibles, indocumentados, desnutridos, sin haber ido a la escuela, en situación de calle. Este proyecto de ley penal juvenil no cambia eso, sólo que entren cada vez más chicos al sistema penal. Este proyecto que se presenta es para una ley penal clara y dura, no es restaurativa de derechos. Mientras el resto de la región analiza cómo elevar la edad de imputabilidad porque se dieron cuenta que es una herramienta que no da resultado, acá quieren bajarla. El tema es cómo queremos que sea nuestra sociedad dentro de diez años, con otra realidad o con las cárceles llenas de chicos», opina el especialista en derecho penal y derechos del niño Martiniano Terragni.

El Gobierno ya envió a Diputados el proyecto para bajar la edad de imputabilidad

El especialista cita a otro colega, Mariano Kierszenbaum, quien sostiene que el sistema penal juvenil tiene que pensarse como un traje a medida de cada chico: si fue abusado, si vivió en la calle, si fue a la escuela, si tiene familia. Y que no sirve una ley estándar.

Para UNICEF, «la gravedad de los aspectos negativos y regresivos del proyecto de ley son de relevancia» y remarca que «disminuye la edad mínima de responsabilidad penal sin ninguna fundamentación teórica o empírica que la justifique, además de contrariar con esta medida compromisos internacionales adoptados por el Estado, y pone en juego la responsabilidad ante el sistema interamericano y demás órganos de los tratados».

Para el organismo de niñez, este proyecto va contra criterios no sólo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación sino también de la Corte Interamericana de Derechos Humanos «acerca de la relación entre el sentido de la sanción penal juvenil y la duración de las medidas privativas de la libertad, al no fijar penas máximas de privación de la libertad para la franja de condenados de 16 y 17 años de edad, pudiendo aplicarse las mismas penas que a los adultos».

Además, critica la duración máxima del proceso penal, que se establece en 3 años, y sostiene que «ello no cumple el estándar de acceso a la Justicia en un plazo breve ni razonable, que se habilita la prisión preventiva por 2 años (1 año máximo, prorrogable a 2), estableciendo un plazo muy prolongado que podría equipararse al previsto para los adultos».

UNICEF también señala que este proyecto permite «la intervención judicial en niñas, niños y adolescentes no punibles que, encontrándose por debajo de la edad mínima de responsabilidad penal, deberían quedar por fuera del ámbito penal».

«Todos aquellos aspectos (o casi todos) en los que el proyecto es positivo, son aspectos programáticos, que según la experiencia de Argentina nunca son luego implementados, por falta de decisión política o falta de un presupuesto adecuado -sostienen desde UNICEF-. Por el contrario, los aspectos negativos del proyecto son operativos. Con lo cual comenzarían a regir de manera inmediata (baja de la edad de imputabilidad, supresión del límite de penas…). Esto conduciría a incorporar, por ejemplo, a una gran cantidad de niños a un derecho penal con organismos no especializados, con penas elevadísimas equiparadas con las de las personas adultas».

En 2018, el Comité de los Derechos del Niño, en sus Observaciones Finales sobre la Argentina, se refirió a la situación de Justicia Penal Juvenil en el país. Recomendó al Estado argentino que «apruebe una ley general de Justicia juvenil compatible con la Convención y las normas internacionales en materia de Justicia juvenil, en particular en lo que respecta a garantizar que la privación de libertad sólo se utilice como último recurso y por el período de tiempo más breve posible, y que no incluya disposiciones que puedan endurecer las penas o reducir la edad de responsabilidad penal», y que «promueva la adopción de medidas no judiciales, como las sanciones alternativas, la libertad condicional, la mediación, el apoyo psicológico o el trabajo comunitario, y, cuando sea posible, utilice medidas alternativas a la imposición de penas”.

El proyecto de ley para bajar la edad de imputabilidad ya se presentó en el Congreso

También el año pasado, UNICEF presentó “Las voces de las y los adolescentes privados de libertad en Argentina”, un estudio sobre los chicos y las chicas detenidos en Centros Cerrados. El último relevamiento nacional dice que son 7200 los que cumplen algún tipo de medida penal: 1300 en Centros Cerrados. La mayoría por delitos menores. El 3,8% tienen menos de 16 años: no deberían estar presos. Cifras oficiales también dicen que sólo el 1 por ciento de los delitos graves son cometidos por adolescentes.

Fuente del artículo: https://www.clarin.com/sociedad/duras-criticas-unicef-proyecto-reforma-ley-penal-juvenil-regresivo_0_fI2RbM2HU.html

 

Comparte este contenido:

La cuarta marcha contra los travesticidios en Argentina llenó las calles de política

América del Sur/ Argentina/ 02.07.2019/Fuente:actualidad.rt.com.

Este año, la movilización es «plurinacional» para incluir a migrantes. Exigen el fin de los travesticidios y transfemicidios, el cupo laboral trans y la Ley de Reparación Histórica.

Señor, señora, no sea indiferente: se mata a las travestis en la cara de la gente». Con ritmo y efusividad, las que cantan son trans, travestis, mujeres y disidencias en la cuarta marcha nacional contra los travesticidios y transfemicidios, que se realizó este viernes en Buenos Aires, Argentina. Es una movilización que nació en 2015, después del asesinato de Diana Amancay Sacayán. La fecha elegida para la movilización recuerda la mítica revuelta en el bar Stonewall, que cambió la lucha por los derechos LGBT+ y se convirtió en el día internacional del orgullo.

Julia Muriel Dominzain

Es el cuarto año que se hace y, desde ahora, se decidió mencionarla como «plurinacional» para incluir en el enunciado a personas travestis y trans migrantes. «Este año, conscientes de la diversidad que compone nuestro colectivo, nos dimos en llamarnos plurinacionales», dice el comunicado del Comité Organizador de la movilización.

«No nos pararon los milicos (militares), ni la policía, ni la sociedad. Ahora no nos para la lluvia. No nos para nada», grita una chica trans desde un escenario móvil. Todas, todos y todes avanzan en medio de unas gotas que a veces son poquitas y cada tanto, bastantes. Ya es de noche cuando las columnas caminan desde la Plaza de Mayo hasta el Congreso Nacional.

Julia Muriel Dominzain

Se calcula que, solo en 2019, hubo 37 víctimas de travesticidios y transfemicidios sociales. La cifra la estiman organizaciones sociales y no fuentes oficiales, justamente porque estas no miden el fenómeno.

Hay todavía quienes no reconocen su existencia como tal. Por eso, el juicio por el asesinato de la activista de derechos humanos trans Diana Amancay Sacayán fue tan importante: la condena perpetua contra Gabriel David Marino dejó asentado que fue por ser «coautor del homicidio agravado por odio de género y violencia de género». A Diana la asesinaron de 13 puñaladas. Era una luchadora por el cupo laboral trans en la Provincia de Buenos Aires.

Lo cierto es que según el Instituto Nacional contra la Disciminación y el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), la esperanza de vida promedio de la población trans es entre los 35 y 45 años. Después de esa edad, son sobrevivientes.

Cuarta marcha plurinacional contra los travesticidios y transfemicidios. Buenos Aires. 2019. / Julia Muriel Dominzain

Los motivos de las muertes son tantos como los derechos que no tienen garantizados. Por eso, incluso, se usa el concepto de «travesticidio social«. Es la exclusión de la casa, después de la educación, más tarde la falta de trabajo, salud y oportunidades las que pueden llevarles a la muerte.

«Las condiciones de discriminación estructural y los obstáculos para acceder a derechos exigen respuestas estatales serias, a la altura del problema», escribieron en un comunicado del Centro de Estudios legales y Sociales (CELS).

Cuarta marcha plurinacional contra los travesticidios y transfemicidios. Buenos Aires. 2019. / Julia Muriel Dominzain

«En un contexto de ajuste económico en el país, estas demandas cobran una centralidad adicional, ya que las personas históricamente excluidas son aún más excluidas», agregaron.

Las consignas de la marcha son claras: el fin de los travesticidios y transfemicidios, el cupo laboral trans (un derecho con presencia disímil entre las provincias y que en general no se aplica) y la Ley de Reparación Histórica, un proyecto para dar una pensión a quienes fueron víctimas de violencia institucional: 9 de cada 10 trans fueron violentadas por la policía alguna vez en su vida.

Cuarta marcha plurinacional contra los travesticidios y transfemicidios. Buenos Aires. 2019. / Julia Muriel Dominzain / RT

En Argentina, desde 2012, existe le Ley de Identidad de Género, que garantiza el derecho a poder ser identificado y tratado del modo en que cada cual se autoperciba. Desde el escenario, recordaron que fue durante el kirchnerismo que se conquistó ese logro. Algunas, algunos y algunes cantaron «¡Vamos a volver!».

Fuente de la noticia: https://actualidad.rt.com/actualidad/319506-cuarta-marcha-travesticidios-argentina

Comparte este contenido:

Educación sexual integral: un puente entre deseos y tensiones

Por: Carolina Sánchez Agostini.

 

La educación sexual sigue en los diarios. Más allá de las polémicas, esto manifiesta una profunda preocupación por las relaciones afectivas y el proyecto de vida de adolescentes y jóvenes. No es para menos. Cuando superamos las disputas generales y podemos estudiar, encuestar y dialogar con los y las adolescentes resulta evidente que es urgente mejorar nuestra propuesta educativa para acompañarlos mejor.

Recientemente, como parte de un proyecto más amplio, tuve la oportunidad de realizar un cuestionario de diagnóstico en el último año de un colegio secundario sobre relaciones afectivas: el 63% de las mujeres afirmó haberse sentido controlada o con falta de libertad; el 53% de mujeres y 41% de varones, atrapados y sin poder dejar la relación; el 56% de las mujeres se sintió en algún momento humillada o insultada por su pareja; y el 42% asustada. Sumado a esto, el 59% de los varones y el 63% de las mujeres expresó que su pareja no soportaba que hablara con otras personas.

También preguntamos sobre sus sueños y deseos: el 80%, tanto chicos como chicas, sostuvo que desearía encontrar un amor que lo/la acompañe siempre. A la hora de elegirlo, las características más importantes para este grupo fueron: que sea buena persona, que pueda contar con él/ella en momentos difíciles y que tenga sentido del humor.

Los contrastes de este caso puntual son inquietantes y, aunque no son todavía extrapolables, convocan a la reflexión educativa. Si quiero una persona que sea buena, me haga bien, esté dispuesta a acompañarme en los momentos difíciles y podamos divertirnos juntos, ¿por qué entonces elijo a alguien que me quita libertad, me humilla, me insulta o me intimida?

Durante un diálogo sobre experiencias afectivas que le resultaron dolorosas, una joven de 25 años comentó algo que resonó fuertemente: “me siento quemada”. Así como existe el “síndrome de burnout” (del quemado) vinculado al trabajo, este puede palparse hoy, igualmente, en el campo de las relaciones. La intensidad de relaciones tóxicas la han saturado y situado en la desconfianza. Así aparece el contraste angustiante entre querer y merecer un proyecto relacional basado en el amor y el respeto mutuo, y haber perdido la esperanza en que esa relación es posible.

La educación integral es un proceso que implica un profundo cambio en la persona que -desde la autoestima, los valores y los vínculos sanos- aspira a convertirse progresivamente en la mejor versión de sí misma.

Sin embargo, frecuentemente y ante las urgencias por atajar problemas, tendemos a pensar la educación sexual primordialmente en términos preventivos, es decir, “hacia dónde no queremos ir” (ITS; HIV; embarazo adolescente, etc.). A su vez, una perspectiva educativa no puede dejar de plantearse lo esencial y un horizonte que responda “hacia dónde sí queremos ir”: este empieza en que cada uno de los niños, niñas y adolescentes entienda cuánto vale, qué quiere y qué proyecta para su vida. Y significa detenerse para entender qué lo ha lastimado, qué lo ilusiona, qué miedos tiene, qué necesita para tener una vida feliz.

Tales desafíos introducen de manera evidente la importancia del vínculo entre las familias y las escuelas para brindar a chicos y chicas un acompañamiento que estimule su autonomía progresivamente y los lleve a una vida afectiva plena y saludable, en la que un proyecto relacional basado en el amor y el respeto mutuo sea un deseo que llegue a hacerse realidad.

Fuente del artículo: https://www.clarin.com/opinion/educacion-sexual-integral-puente-deseos-tensiones_0_Vj6a9zxDV.html

Comparte este contenido:

Entrevista: «La ausencia de límites es una forma de maltrato infantil»

Por: lacapital.

Lucas Raspall, médico psiquiatra y psicoterapeuta, miembro de Fundación América por la Infancia, señala que no hay nada que justifique una agresión verbal o física hacia un niño. Cuáles son las consecuencias de la violencia que se soporta a edades tempranas.

omingo 21 de Abril de 2019

—¿Qué acciones u omisiones de los progenitores son consideradas maltrato infantil?

—Hay muchas conductas que pueden ser consideradas como malos tratos, más allá de esa violencia física que nadie dudaría en reconocer y señalar, como puede ser un golpe de puño. Los tirones de pelo u oreja, zamarreadas, pellizcones, chirlos y cachetadas son también malos tratos, nunca justificados. No hay razón para seguir sosteniendo que «un correctivo» cada tanto está bien: es maltrato y punto. Luego, las omisiones suelen entrar en los malos tratos por negligencia, esos casos en los que el cuidador se desentiende o expone al niño a situaciones de riesgo o daño. En el otro extremo, la sobreprotección puede también ser considerada una forma de maltrato, dado que inhibe o traba en el niño el desarrollo de recursos que son fundamentales para su vida.

—¿Qué dice la ley al respecto en términos generales? Se dieron cambios significativos con el nuevo Código Civil…

—Históricamente en el Código Civil la patria potestad incluía en el derecho de corrección de los padres hacia los hijos. Quizás sea en el término «corrección» donde el cuidador se amparaba para el uso de la violencia para educar. Me interesa señalar que no es una forma de violencia «menor» sino que es, ante todo, violencia. Efectivamente, en el artículo 647 del nuevo código se establece la prohibición de los malos tratos. Es más, la idea de «patria potestad», que refiere a un poder de los padres sobre los hijos, viró hacia la función de protección y cuidado de los niños, a favor de ellos y respetando siempre sus derechos.

Un niño o niña que es criado en un ambiente violento desde que nace o cuando es muy pequeño, ¿qué consecuencias psíquicas suele sufrir? ¿Es igual el impacto si la violencia se ejerce en forma directa sobre el niño o si por ejemplo su madre es víctima de violencia de género o bien hay una relación de violencia entre los padres (o nuevas parejas de los padres)?

—Las consecuencias de la crianza de un niño en un ambiente violento las conocemos hoy con profundidad desde distintas miradas. Las conclusiones de importantes investigaciones son terminantes a la hora de afirmar que los malos tratos generan en el niño un estrés tóxico que daña el organismo en su totalidad. No sólo repercute negativamente sobre el desarrollo psicológico (con su sustrato neurobiológico) sino que agrede todo el sistema, evidenciado luego en alteraciones endócrinas, dificultades en la adquisición de aprendizajes o capacidades propias de la etapa evolutiva, síntomas aislados, enfermedades y, en algunos casos, trastornos psicopatológicos. El impacto de este daño en la infancia puede ser lo suficientemente grande como para tener consecuencias a largo plazo, fenómeno que explica la mayor predisposición o vulnerabilidad que estos niños tienen en la vida adulta de padecer depresión, trastornos de ansiedad, dependencia a sustancias y tantos otros cuadros. Sin detenerme a cuantificar el nivel de daño, podemos afirmar que para un niño tanto la experiencia de ser violentado o que un familiar o cuidador con el que tiene un vínculo íntimo e importante lo sea es suficiente como para dañarlo de manera significativa.

Cuando un niño es maltratado, ¿siempre va a tener consecuencias negativas en su desarrollo?

—Las consecuencias van a depender de distintos factores: primero, el tipo de maltrato, cuánto se sostuvo en el tiempo, quién fue o es el agresor —es tanto peor cuánta más relación e intimidad tienen—, la posibilidad de salir o no de ese circuito… Luego, el momento de la vida del niño en que sucede, si tiene una red sobre la que apoyarse —otras relaciones importantes que lo acompañen—, si existen otros problemas en su entorno inmediato. También la fortaleza psicológica y biológica del niño, reconociendo que hay quienes tienen mayor resistencia —resiliencia— y otros que son más vulnerables.

En el caso en que se manifiestan las consecuencias, algunas se presentan en el corto plazo, mientras suceden las agresiones, y otras en el largo plazo, incluso cuando estas situaciones ya han quedado atrás.

¿Cómo se logra que los padres reviertan las conductas de maltrato sobre los hijos? ¿Es posible? ¿De qué depende ese cambio?

—El primer paso es siempre tomar conciencia. Que los límites son necesarios, de eso no hay ninguna duda. La ausencia de límites es una forma de maltrato -por negligencia-. De que la forma para marcarlos no es con malos tratos, físicos o psicológicos, de eso tampoco. Después de una sincera introspección, reconociendo que esos tironeos o dolorosas palabras no fueron realizadas con mala intención sino por desconocimiento de otras formas, viene el paso en el que aprender otros recursos es posible. Si la decisión de cambio es firme, pronto comprenderá la madre, el padre o el cuidador que existen modos en los que el límite se señala con igual fuerza sin dejar de tratar con afecto y cuidado.

¿Puede suceder que un padre y o una madre sean violentos con un hijo y no con otro u otros?

—Sí puede ser. Toda madre y padre sabe que con cada uno de sus hijos le pasan cosas diferentes, le cuestan más unas cosas y otras se le hacen más sencillas. En ocasiones, el niño que exige al cuidador en ese aspecto que más le cuesta podría desencadenar en el adulto reacciones -nunca justificadas- que trepan en una escalada de violencia. Por esto, quien detecte dentro suyo esa irritación o malestar que precede a las reacciones que debemos siempre evitar, debe buscar -de hacer falta- la ayuda que corresponda para entender el por qué de su conducta y cómo cambiarla.

Alguien que fue violentado por sus padres o entorno familiar, ¿será agresivo con sus propios hijos?

—Esto depende del grado de conciencia que cada uno tenga de su historia y cómo explica lo sucedido. No se trata de indagar la relación con los padres y cuidadores con fines rencorosos o para culparlos por todo lo malo que hoy nos pasa, sino para cortar la cadena de maltrato -de una vez por todas-. Si no se toma conciencia -repetiré esto hasta cansarme-, entonces las cosas se seguirán dando de la misma manera, aumentando las chances de tratar mal a los propios hijos.

Hoy es muy común que existan familias no tradicionales en su constitución ¿es incorrecto pensar que las nuevas formas de familia por sí mismas pueden ser nocivas para los niños o niñas? Qué opinión tenés al respecto….

—No creo que sean nocivas en sí mismas, pero sí plantean nuevos escenarios que es necesario empezar a observar con detenimiento y estudiar a fines de encontrar los huecos en los que las necesidades de los niños queden sin cubrir. Cada momento de la historia, cada etapa, presenta novedades; de poco sirve quedarnos en señalar si nos gusta o no, es una realidad y punto. Veamos qué podemos hacer para que ellos crezcan sanos y felices: es lo que más importa.

¿Cómo se suelen detectar los casos de maltrato infantil?

—Los casos de maltrato suelen ser detectados en servicios de atención médica, en escuelas, cuando no ya en tribunales -en la Justicia-. Pero en todos estos casos es ya tarde. Es preciso trabajar en la promoción de los buenos tratos en la infancia, concientizando y ofreciendo a los cuidadores espacios para aprender. Y en esto quiero ser claro, tenemos que entender que el maltrato no debe quedar solamente ligado a los golpes que dejan moretones o fracturas de huesos y tampoco a las humillaciones permanentes. Hay malos modos que gozan aún -y lamentablemente- del aval de la sociedad.

—¿Qué señales da un niño o niña víctima de maltrato? ¿Es la escuela un lugar donde se ven esas señales claramente?

—En la escuela se pueden observar, tanto como en otros lugares de concurrencia asidua del niño. Las señales, más allá de las consecuencias físicas que pueden tener algunos golpes, se advierten en el comportamiento. Cambios de humor, irritabilidad, ensimismamiento, deterioro de algunas relaciones con pares, pérdida de confianza en los adultos, mala conducta, impulsividad, agresividad, miedos infundados. Todas éstas podrían ser manifestaciones de una víctima de maltrato. Por otro lado, síntomas en el cuerpo -somatizaciones— como dolores frecuentes de panza, cabeza u otro, síntomas gastrointestinales, en piel, sistema nervioso…

¿El entorno, la crisis socioeconómica, la falta de recursos de todo tipo, cuánto influye en la violencia familiar? Hay más violencia contra los chicos en familias de bajos recursos económicos o es sólo un mito…

—La violencia traspasa toda barrera… sí pueden cambiar sus formas en determinados sectores o lugares pero, en la medida en que toda la sociedad no tome conciencia, se trata de una sombra que se escurre por debajo de la puerta de cada hogar, club, escuela… También es cierto que hay determinados entornos que son violentos en sí mismos, como lo es crecer en una casa en la que no hay qué comer. La desigualdad violenta; no es tanto la pobreza, sino la percepción de una desigualdad que no es justa de entrada. Las necesidades básicas no satisfechas violentan, las urgencias también.

—Si uno conoce que en su familia hay alguien que maltrata a los hijos, debe denunciarlo, intentar hablar… Siempre es una situación difícil. ¿Qué recomendás? ¿Y si es un vecino?

—Siempre hay que intentar acercarse y hablar con ese vecino o familiar, en el momento y el lugar adecuado, sin exponerlo ni juzgarlo: no somos quiénes para hacerlo. Buscar que tome conciencia, ofrecer ayuda. Si el caso es más severo, entonces quizás sí corresponde la denuncia para impedir que esa forma de violencia se repita o que el riesgo o daño sea aún mayor.

¿Cuáles son los pilares de una infancia feliz? ¿Es posible una infancia feliz?

—¡Claro que es posible! Y sé que muchos a esta altura de la nota responderán «yo tuve una infancia feliz y soy normal a pesar de que mi papá o mi mamá cada tanto me daba un chirlo»… No dudo en que, en tales casos, prevaleció el amor y la disposición de ellos sobre lo otro, pero podemos convenir en que los malos tratos no fueron los que construyeron esta imagen o recuerdo de la infancia. Ahora, cuáles son los pilares, no me resulta sencillo escribir una suerte de receta. Pero estoy seguro de que un trato afectuoso y respetuoso de las necesidades del niño (para esto, hay que saber reconocerlas), una disposición sensible que sepa interpretar lo que le pasa y una adecuada disponibilidad para acompañarlos son la base de una infancia feliz.

Fuente de la entrevista: https://www.lacapital.com.ar/mas/la-ausencia-limites-es-una-forma-maltrato-infantil-n1757064.html

Comparte este contenido:

Argentina: Lanzan una web para ayudar a las familias a exigir el derecho a una educación inclusiva

Argentina / 30 de junio de 2019 / Autor: Redacción / Fuente: Télam

Se trata del sitio www.porunaeducacioninclusiva.org que brinda herramientas y recomendaciones para que las familias de niños y jóvenes con discapacidad puedan elegir y agilizar tramites referentes a su educación y salud.

La Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) lanzó una página web que brinda herramientas para que las familias de niños y jóvenes con discapacidad utilicen para exigir que se cumpla el derecho a una educación inclusiva.

El sitio www.porunaeducacioninclusiva.org visibiliza los obstáculos más frecuentes que las personas con discapacidad deben enfrentar en las escuelas, como la negativa de inscripción y dificultades en cuanto a la accesibilidad, entre otras.

”Ninguna escuela pública o privada puede rechazar la inscripción o reinscripción de una persona por motivos de discapacidad”, explica la página que otorga recomendaciones y modelos de reclamo para presentar ante escuelas y los ministerios de Educación y Salud.

La Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, tratado con jerarquía constitucional (ley 27.044), establece en su artículo 24 que las personas con discapacidad tienen derecho a estudiar y aprender en escuelas comunes con los apoyos y ajustes que sean necesarios, y no pueden quedar excluidas del sistema general de educación.

Fuente de la Noticia:

https://www.telam.com.ar/notas/201906/370197-lanzan-una-web-para-ayudar-a-las-familias-a-exigir-el-derecho-a-una-educacion-inclusiva.html
ove/mahv
Comparte este contenido:

Revista «Para Juanito» Número 16 (Julio de 2018) – Educación, discapacidad e inclusión: construir lo común (PDF)

Argentina / 30 de junio de 2019 / Autor: Fundación La Salle Argentina

Número 16 (Julio de 2018) – Educación, discapacidad e inclusión: construir lo común – Néstor Carasa: Estado de situación de la Educación Especial / Marcela Nicolazzo: Pensar sin discapacidad / Sebastián Urquiza: Conducir y educar como un modo de resistir / Silvana Corso y Analía Taboada: Inclusión educativa y formación docente / Patricia Barbuscia: Cambio de paradigma: La Educación Domiciliaria y Hospitalaria como principio rector y de Justicia social / Bettina Monzani, Clarisa Pollastrini, Erica Saavedra y Flavia Tsipkis: La inclusión: un trabajo para dibujar horizontes / Natalia Gómez y Damián Santarán: Arte, procesos y sentidos / Equipo del Nivel Secundario Especial de La Salle Bs. As.: Ser desde la palabra y la acción: Pensar la inclusión (de existencias compartidas) desde la participación / Equipo de orientación de La Salle Rosario: ¿Integración, inclusión, alteridad? Un lugar para lo humano /

Link para la descarga:

http://fls.org.ar/online/wp-content/uploads/2018/08/para-juanito-16-web-color.pdf

Fuente de la Reseña:

Revista «Para Juanito»

ove/mahv

Comparte este contenido:

El «Nobel de Educación» y nuestra deuda pendiente

Argentina / 30 de junio de 2019 / Autor: Andrés Hatum / Fuente: La Nación

Transformadores de la vida de nuestros hijos, se necesitan más docentes como Peter Tabichi y Martín Salvetti, que hacen un gran esfuerzo con un presupuesto muy bajo

Cuando Peter Tabichi escuchó su nombre en la premiación del llamado «Nobel de la Educación» que otorga la Fundación Varkey no podía salir de su asombro. Es que Peter llegó a Dubái, la sede del premio, con el sueño de un maestro humilde que está acostumbrado a la pobreza y la escasez de recursos. Hoy Tabichi es acreedor de un millón de dólares, que invertirá en sus proyectos educativos.

Este keniano, maestro de Ciencias y Matemáticas, es hermano franciscano y enseña en una zona remota y semiárida del valle del Rift en Kenia. Tabichi no es la única historia de esfuerzo que vimos en la premiación en Dubái. Cada uno de los 10 finalistas tiene detrás una experiencia docente impresionante y también de sacrificio.

La Argentina tuvo su representante, por primera vez, en la final de esta premiación. Martín Salvetti, docente de una escuela técnica en Temperley, hablaba de la pasión que todos los docentes de su escuela le ponen al trabajo y a lograr apasionar a los alumnos: «Es importante hacerles saber que ellos son los líderes del cambio en sus propias comunidades». Salvetti generó un cambio sustancial en la motivación de los chicos a partir de un proyecto de radio y motocarros. «Están entusiasmados trabajando en algo que les gusta, y esa es la única manera de comprometerlos y retenerlos en la escuela», considera Salvetti.

El marco que ofreció Dubái para la entrega del premio fue excepcional. No solo el hotel Atlantis donde se desarrolló el evento, una obra descomunal que se levanta en Palm Jumeirah, la isla artificial más grande del mundo, también el nivel de los oradores y su compromiso con la educación. Braydon Bent, un instagramer de 10 años, británico, fue el presentador oficial y quien disparó las primeras preguntas incómodas a los primeros entrevistados: «Es mi generación la que va a vivir en este nuevo mundo. Entonces, les pregunto: ¿Qué nos van a dejar ustedes a nosotros?»

Además de líderes como Tony Blair (Reino Unido), Manuel Santos (Colombia), Matteo Renzi (Italia), expertos y ministros de educación inundaron el centro de convenciones. El factor común para todos estos especialistas es que sin educación difícilmente un país pueda llegar a ponerse a tono con las transformaciones del mundo actual. Nada nuevo. Sin embargo, muchos países miran detrás de un paredón de indiferencia. Como nos dijo Martín Salvetti: «Tal vez nuestro problema como país sea no tener políticas de largo plazo y la posibilidad de invertir en proyectos de investigación». La verdad que duele.

Docentes que hacen un esfuerzo enorme con un presupuesto muy bajo. Docentes que sacrifican su vida por hacer que sus alumnos asistan a clase a pesar de los contextos adversos que los rodean. Políticas públicas que nunca llegan a implementarse porque cada gobierno genera cambios pendulares de estrategias. Finalmente, sindicatos que solo miran su ombligo y evitan cualquier cambio que altere el status quo. Claro, los cambios pueden restarle poder a sindicalistas que difícilmente hayan pisado un aula en las últimas décadas sin saber qué significa el esfuerzo de tener un alumno a quien motivar, desarrollar y educar para el futuro. Estas son las cuestiones que se debatieron en Dubái en la entrega del premio al mejor maestro del mundo, realidades que nos tocan de cerca a los argentinos.

«El lunes vuelvo a la escuela a seguir trabajando», nos dijo Salvetti luego de la premiación. «Vine a absorber mucho conocimiento. Quiero poder replicar algunas cosas. Y si queremos como país crecer a futuro, tenemos que apoyar la educación» Definitivamente, es una tarea pendiente de todos los argentinos para que existan más maestros como Martín, transformadores de la vida de nuestros hijos.

Fuente del Artículo:

https://www.lanacion.com.ar/educacion/el-nobel-educacion-nuestra-deuda-pendiente-nid2260278

Fuente de la Imagen:

https://www.france24.com/es/20190324-profesor-ciencias-kenia-nobel-educacion

ove/mahv

Comparte este contenido:
Page 161 of 651
1 159 160 161 162 163 651