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Entrevista: No hay una síntesis donde todo coexista armónicamente, y esto se debe a la desigualdad

América del Sur/Uruguay/Septiembre 2016/Entrevista/https://redaccion.lamula.pe/

Entrevista a Mabel Moraña, una de las principales voces en los estudios latinoamericanos.

Mabel Moraña es unas de las voces principales en los estudios latinoamericanos. No solo se ha enfocado  en autores particulares sino que ha mapeado un amplio y heterogéneo corpus que permite entender el sistema literario de América Latina en su complejidad.  Moraña (profesora y directora del Latin American Studies Program en la Washington University en St. Louis) ha enfatizado las relaciones entre literatura e ideología a través del estudio de modernidades, políticas estatales y culturales . Dentro de sus publicaciones destacan aquellos dedicados a investigar  la obra de autores peruanos, tales como Mariátegui y los estudios latinoamericanos(2009), el Arguedas/Vargas Llosa. Dilemas y ensamblajes (2014) y una próxima publicación sobre Gamaliel Churata.

En el marco del seminario “Género y modernidad” que dictó en la PUCP el pasado junio, aprovechamos para conversar con ella sobre el estado actual de la crítica literaria, el latinoamericanismo en EEUU, acerca de Antonio Cornejo Polar, Ángel Rama, Pierre Bourdieu, política y memoria, traducción cultural, entre otros temas de estética-ideológica.

(Fotos: Raúl García)


1. Has dedicado trabajos a José Carlos Mariátegui, a José María Arguedas, a Gamaliel Churata, a Antonio Cornejo Polar, por lo cual la primera pregunta resulta casi inevitable, ¿cuándo y cómo surgió tu interés por las literaturas peruanas?
Bueno, yo soy uruguaya, y salí del Uruguay durante el periodo de la dictadura, en ese momento a Venezuela donde empecé a trabajar con el Centro de Estudios Latinoamericanos “Rómulo Gallegos”. Allí conocí a Antonio Cornejo Polar, quien viajaba con mucha frecuencia al Centro, que era realmente un espacio de investigación latinoamericana. Él a veces impartía conferencias y entonces entré en contacto con las culturas andinas. De hecho mi primer trabajo, que publicó Antonio Cornejo Polar en la Revista de Crítica Literaria Latinoamericana, fue sobre Scorza. Luego me fui de Venezuela a Estados Unidos para hacer mi doctorado en la Universidad de Minnesota. Allí mi tesis doctoral fue sobre el periodo de entreguerras en América Latina, de 1910 a 1940, y uno de los capítulos era sobre el periodo de Leguía en Perú y sobre el tema del indigenismo; también había estudios sobre americanismo, populismo, etc.

De ahí comencé a trabajar la obra de Mariátegui sobre quien he escrito en diversas ocasiones sobre el tema de la cultura nacional, la cuestión del indigenismo. Publiqué un libro colectivo que se llama Indigenismo hacia el fin del milenio y años después publicamos con Guido Podestá otro libro colectivo llamado José Carlos Mariátegui y los estudios latinoamericanos. Lo publicamos en una colección que yo dirigí durante mucho tiempo en el Instituto Internacional de Literatura Iberoamericana. Teníamos varias series de libros y una de las que yo inaugure fue sobre críticos latinoamericanos, entonces publicamos un volumen dedicado a pensar la obra de Mariátegui desde nuevos ángulos teóricos y críticos. Se trataba de poner la obra de estos críticos a la luz de nuevos debates.

Después, en 2014, publiqué el estudio más largo sobre literatura peruana, el que se titula Arguedas / Vargas Llosa: dilemas y ensamblajes. Ha tenido mucho éxito ya que obtuvo varios premios, como el premio de la Modern Languages Association (MLA) en EEUU y también de Latin American Studies Association (LASA). A consecuencia de eso estamos ahora traduciéndolo al inglés. Luego hay un trabajo sobre Gamaliel Churata que acabo de terminar, aún está sin publicar.

Recordando la obra de Antonio Cornejo Polar enfatizas que esta respondió a “necesidades académicas, y a coyunturas ideológicas precisas”. En este sentido ¿qué necesidades académicas y coyunturas ideológicas han marcado la crítica de Mabel Moraña?
Yo aprendí mucho del trabajo de Antonio Cornejo Polar y muchos, no solamente yo, hemos seguido por las líneas que él abrió. También traté de incorporar bastante los estudios sociológicos de Aníbal Quijano; también por supuesto de Ángel Rama, quien trabajo lo que en su momento él denominó “el área cultural andina” definiendo toda la región peruano-boliviana y también ecuatoriana, tratando de encontrar constantes para el estudio de esas culturas que tienen alta incidencia de cultura indígena.

Yo creo que mi formación, desde los años en la Universidad de Minnesota, tuvo que ver sobre todo con el estudio de las relaciones entre literatura e ideología. Un estudio ideológico de la literatura donde se trata de analizar las connotaciones, no mecánicamente entre literatura-sociedad, sino también la relación con los aspectos ideológicos, la formación de conciencia social, el modo en que se representa el conflicto social. Creo que esa fue básicamente la línea que define, más o menos, la orientación crítica de mi trabajo. Yo he trabajado desde la época colonial en adelante sobre un campo históricamente y culturalmente muy amplio; trabajé bastante el barroco mexicano colonial, un poco las literaturas del siglo XIX, y luego todo lo que es la crítica de la modernidad. Lo estético-ideológico sería el eje que organiza mi trabajo, aplicado a distintos contextos culturales y socio-históricos, pero siempre buscando ese eje y viendo cuáles son las formas de representación que se adoptan en cada caso.

Has dicho que lo que Mariátegui llamó el “problema del indio” ha pasado a recibir “nombres más sofisticados y eufemísticos: otredad, alteridad, diferencia, subalternidad”. ¿En qué consiste para ti una crítica eufemística?, ¿es un producto más de las tendencias de la globalización que marca la distancia de las sociedades indígenas?
Yo creo que lo principal que distingue un foco como el de Mariátegui sobre el problema del indio y el tema ya más amplio de la otredad es que esta segunda consiste en teorizaciones mucho más amplias. Son pensadas no solamente para sociedades vinculadas al tema étnico sino también al tema de la diferencia de raza, pero también diferencias de género y también diferencias en habilidades corporales (por ejemplo en minusválidos). Hablar de “diferencia” quizá sea eufemístico, pero también es una forma teórica más abarcadora, porque los problemas de la globalización, de la migración, plantean ese enfrentamiento constante entre identidad y diferencia. Por esto hay que, de alguna manera, teorizar qué es lo que encuentra el sujeto al cambiar de contexto, y no solo internacionalmente, por ejemplo en el caso de Perú que es una sociedad tan marcada por las migraciones internas, qué pasa cuando se produce esa migración de sierra a costa. Al respecto Cornejo Polar teorizó bastante cuando trabaja el tema del sujeto migrante; él ahí también se ocupa del tema de la diferencia en torno a la cuestión andina, pero también en cuanto a la situación de la cultura chola y a otras formas de mestizaje. En los estudios de etnicidad el tema de la diferencia, por supuesto, no se limita al problema indígena sino que también abarca a la población afro hispánica, a cualquier diferencia que distingue a sectores de la población de la dominante social.
Yo iba más bien hacia otro terreno: ¿hasta qué punto el acercamiento de Mariátegui, el modo en que encara el llamado problema del indio, resulta más directo, buscando interactuar con sujetos concretos, distinguiéndose por lo tanto de otra crítica que valiéndose de un bagaje teórico más amplio pierde al objeto de estudio y termina teorizando sobre castillos de arena?
Lo que pasa es que esa otra crítica a la que te refieres es muy diferente al periodo de Mariátegui, en los años 30, en el contexto del populismo y del aprismo. En esos años el tema del indio aparece como un tema conflictivo, beligerante y con un gran potencial subversivo. Ese elemento hace diferente el tratamiento de la cuestión indígena a cuando lo hacemos cuando esa llamada “amenaza social” no está planteada. Hoy en día se trata de teorizar más bien cómo integrar esos contingentes sociales a las nuevas formas del Estado, por ejemplo en Bolivia, donde el Estado mismo se va modificando. Entonces el tema de la diferencia está armado de otra manera, porque hay otra relación entre esos sectores sociales tradicionalmente marginados, y el poder. El sistema global exige estos cambios de enfoque porque hay que inscribir lo local en contextos mayores, donde se pueda articular de alguna manera. Mariátegui igual que Quijano, igual que Cornejo Polar han trabajado mucho ese tema de la articulación de lo local dentro de América, dentro de una visión continental, y esa relación local-regional-nacional-internacional.

“LA HISTORIA Y LA POLÍTICA NO SON BLANCO Y NEGRO, LA GENTE NO SIEMPRE HACE ELECCIONES LIMPIAS”

¿Cuál fue tu vínculo con Ángel Rama y cuál crees que son hasta ahora las vigencias de su pensamiento? Recuerdo que un momento lo consideraste “un interlocutor silenciado” de las últimas teorizaciones de los estudios latinoamericanos.
Yo lo conocí en Caracas, no mucho, porque coincidimos poco. No lo conocí en Uruguay, pero él estaba en Caracas donde era una personalidad cultural, allí formó Biblioteca Ayacucho. En esos años él viajaba mucho, yo también salí a hacer mi doctorado en EE.UU., luego coincidimos y conversamos unas cuantas veces. Marcó realmente un hito en la crítica latinoamericana, al igual que Cornejo Polar. Se ha ido divulgando mucho el pensamiento de Rama y se ha discutido mucho, sobre todo en el contexto del latinoamericanismo internacional. Tú sabes, nadie es profeta en su tierra, y se le ha conocido mucho más fuera que en Uruguay, fuera de América Latina.

Ahora ya ha ganado muchísimo espacio; libros como La ciudad letrada o como Transculturación narrativa han tenido una gran divulgación, una gran influencia porque han permitido pensar las relaciones de las culturas periféricas con la modernidad, con los grandes centros culturales a nivel internacional, sobre cómo pasan esos contenidos culturales, cómo se transculturan las culturas americanas, con base vernácula y autóctona fuerte. Rama estudia cómo se realiza esa combinación entre, por ejemplo, el discurso cinematográfico y la literatura de Rulfo. Se trata de ese tipo de conexiones que no aíslan la cultura latinoamericana de una manera fundamentalista dentro de sus propias coordenadas sino que la ven en contextos mayores. Rama trabajaba sobre todo esa idea: tratar de inscribir un fenómeno cultural, o una generación, un grupo o una estética particular dentro de grandes panoramas. Él podía leer de esa manera histórico-cultural los desarrollos latinoamericanos.

Volviendo a Rama, sobre su trabajo has precisado que se dirigió hacia “prácticas culturales que respondían a los desafíos de nuevas circunstancias sociales y políticas a partir de las cuales se iban definiendo nuevos espacios y estrategias discursivas y representacionales”. A partir de esto, ¿qué lecciones nos puede brindar Rama para entender nuestro actual contexto de crítica cultural?, ¿cuál es el desafío al que el investigador debe responder?
Él se dedicó a muy distintos temas; sobre todo enseñó un método, enseñó a prestar mucha atención a la relación entre literatura y cambio social, a percibir que además esa relación es muy compleja y está atravesada por muchas variantes. Por esto uno de los grandes descubrimientos culturales de Rama fue Arguedas; Arguedas realmente cambió la visión que Rama tenía. Ambos somos uruguayos, venimos de un país sin indios actuales (obviamente tuvimos una población indígena, pero fue extinguida muy pronto), de manera que es un país básicamente de base europea. Entonces para un crítico como Rama percibir un escritor como Arguedas, capaz de incorporar todas esas vertientes culturales y crear una literatura como Los zorros, resultó deslumbrante. Estos son textos que son impensables para un escritor del sur evidentemente, no solo porque no podría producirlo sino también por la comprensión de esa estética. Arguedas fue un gran desafío para Rama, y fue el escritor que más lo impactó en esa época.

Lo que ha quedado ha sido ese mensaje de que la vinculación entre literatura y sociedad no debe ser desestimada. También Rama prestó mucha atención a la función del intelectual, a como el intelectual y el escritor, particularmente, cambiaba a lo largo de los años, por eso estudia el modernismo, la profesionalización del intelectual, su relación con los cambios internacionales, etc. Esto Rama lo experimenta consigo mismo. Uruguay era sobre todo, antes de las dictaduras, un país muy provinciano, muy cerrado sobre sí mismo, sobre la cultura rioplatense; con el exilio todos los intelectuales salieron (salimos) y entonces se produce una confrontación de lo que realmente es la América Latina real que muchos de nosotros no conocíamos, pues Uruguay es un país muy aislado en ese sentido. Fue la influencia del contexto histórico y esto influyó en Rama y en otros intelectuales.

Has precisado que el tema de la traducción es un eje en la obra de Antonio Cornejo Polar, y partiendo de este aspecto viene la siguiente pregunta: ¿Cuál es el principal reto del crítico como traductor de epistemologías en conflicto?, ¿qué es lo más complicado en este proceso?
Es tremendamente complicado, es uno de los grandes retos de nuestra época, sobre todo porque la migración está causando una constante mezcla y revolución de intercambios culturales. Entonces ya no se trata de cómo traducir lingüísticamente sino cómo traducir culturalmente. En una traducción lingüística se está yendo texto a texto, de un código lingüístico al otro, me parece que se trata de encontrar equivalencias más o menos puntuales, mientras que la traducción cultural implica tratar de pasar no solamente a otra lengua sino a otro código cultural, conceptos u otra cosmogonía diferente. Por ejemplo, ahora al llevar a cabo este trabajo sobre Gamaliel Churata veía justamente eso, es uno de los grandes, problemas: ¿cómo, dentro de la epistemología occidental, dentro de una noción de tiempo lineal, entender esa noción de tiempo que se repite, de los muertos que regresan en la concepción andina, esa noción de que pueden coexistir los contrarios?

Estas últimas son nociones que la epistemología occidental rechaza, entonces, cómo traducir esos conceptos ya no es un tema solamente de palabras sino de encontrar la manera de comprender, incorporar –sin desnaturalizar- esas otras versiones. La traducción cultural es un tema mucho más complejo que el lingüístico, aunque lo lingüístico evidentemente implica la traducción cultural. Si tú traduces del italiano al español, del inglés al español se está dentro de la concepción occidental, ahora si tú traduces del quechua al francés hay una diferencia de mundos, de vivencia de la cultura, de cómo se inició el mundo, de mitos, de categorías que no son equivalentes. Por esto hay que aprender a respetar cada registro porque no todo es traducir de una manera puntual.

“En Mestizaje e hibridez: el riesgo de las metáforas”, Cornejo Polar indicaba «El masivo empleo de una lengua extranjera [el inglés] para el estudio de la literatura hispanoamericana está suscitando además —aunque tal vez nadie lo quiera— una extraña jerarquía en la que los textos de esta condición resultan gobernando el campo general de los estudios hispanoamericanos. Me temo, en este sentido, que estamos generando una extraña crítica diglósica». ¿Crees que a estas alturas esta crítica diglósica es un imperativo?, ¿cómo trazar una línea de fuga en medio de un mercado académico diglósico?
Mira es un gran problema. Yo publico el 90 % de lo que escribo en español y es una gran lucha y una suerte que hay que tener para encontrar editor. Claro, los libros en español se venden menos; si tú quieres hacer circular tu investigación en español quedas reducido a un mercado de lectores muy acotado. Yo continuó haciéndolo porque trabajo mucho con América Latina y me interesa ese diálogo. Todos nosotros hemos aprendido la necesidad de aprender inglés, pero en EE.UU. no se ha entendido aún la necesidad de aprender español, aunque es una lengua que hablan 40 millones de personas dentro del país. Yo no solamente estoy publicando en español sino que cree muchas series editoriales en español para la difusión de libros en español, pero también me doy cuenta que se pierde el diálogo con un gran mercado, se pierde la comunicación, la divulgación de ideas.

El latinoamericanismo tiene una base en EE.UU. hoy en día, por la cantidad gente que hay y por la cantidad de recursos que manejan. Ese latinoamericanismo en EEUU articula el del resto del mundo, un ejemplo es cuando se hacen congresos de LASA (al último fueron más de 5 mil personas y no fue de los más grandes). De manera que es un foco que si uno desperdicia completamente limita también la audiencia, de lo que el investigador quiere dar a conocer. Por esto es un poco difícil negociar esa cuestión, yo trato de publicar en español, lo traduzco luego al inglés y lo hago circular.

Uno trata de atender ambas audiencias, pero la verdad es que las editoriales prefieren que uno escriba en inglés porque en ese caso les es mucho más fácil capturar a todas las bibliotecas públicas o las bibliotecas universitarias y allí colocan ya miles de ejemplares; tienen más resistencia de publicar libros en español y eso va condicionando el mercado. Como en EE.UU. la gente tiene que publicar para obtener puestos y permanencia en los puestos entonces en muchos casos optan en escribir en inglés, para conectar, porque después quienes los evalúan –que no son necesariamente hispanistas- no hablan en español y cómo van a evaluar la producción de una persona que no escribe en inglés. Entonces hay todos esos condicionantes presentes, pero Cornejo Polar se refería también al hecho de que el latinoamericanismo va perdiendo su base.

El latinoamericanismo se solía trabajar mayoritariamente en español, lo cual ya es bastante colonialista en sí porque ya las lenguas indígenas quedaron fuera y nosotros hablamos como si el español no fuera una lengua colonial, que lo es. El español es a la lenguas indígenas lo que el inglés es para el español. Nunca pensamos en eso porque nos parece que el español es la lengua latinoamericana, pero es una lengua que vino vía el colonialismo y que ha marginado completamente, sino extinguido, cantidad enorme de variantes del náhuatl, del quechua, del maya quiché. Entonces el español tiene ese mismo precepto de marginar a las lenguas no dominantes, igual que el inglés está haciendo con el español. Fíjate que son políticas de Estado con respecto a las lenguas indígenas como aimara, quechua, guaraní, etc. que en muchos casos no se enseñan en los colegios aunque son fundamentales como lenguas nacionales.

«NOS PARECE QUE EL ESPAÑOL ES LA LENGUA LATINOAMERICANA, PERO VINO VÍA EL COLONIALISMO»

Ahí hay que redefinir lo nacional, lo nacional no es lo criollo dominante solamente, es también lo criollo pero aparte están las otras formaciones culturales y ese es el mensaje de Cornejo Polar, de Mariátegui, de Quijano, es decir, que el mapa de lo nacional que parece unificado, centralizado realmente lo que contiene es una gran cantidad de sistemas culturales que no están en armonía entre sí, que son antagónicos, o como decía Cornejo Polar un “antagonismo sin dialéctica”. Finalmente no hay una síntesis donde todo coexista armónicamente, y esto se debe a que hay desigualdad y donde hay desigualdad siempre hay conflicto latente.

9. La apropiación de autores o marcos teóricos responde a proyectos de nación o de modernización de las élites dirigentes, en este caso, ¿a qué se debió que un autor como Foucault calara tanto en América Latina y no, por ejemplo, Bourdieu?
Primero es una percepción a veces equivocada pensar que Bourdieu caló menos. El problema con Bourdieu es que muchas de sus categorías, por ejemplo las nociones de violencia simbólica, campo cultural, incluso sus estudios sobre masculinidad se naturalizaron muy rápido. Son categorías que todo el mundo usa sin saber que vienen de Bourdieu y en muchos casos no se cita. Ha entrado de una manera muy natural en el discurso crítico. Mi libro se llama Bourdieu en la periferia y está dedicado a ver como en distintas partes de América Latina se adoptó a Bourdieu en estudios de género, en estudios sociológicos, en crítica literaria.

Lo que pasa es que el aparato crítico y teórico de Foucault es mucho más amplio, entonces se ha visto a Bourdieu como una metodología mucho más pragmática que sirve para analizar y para entender la cultura en esa distribución de campos que él hace. La aplicación de Bourdieu es muy práctica, mientras que Foucault siempre fue leído más como un filósofo político y los estudios sobre el poder, sobre el panóptico, las tecnologías del yo, sobre los micro-poderes, todo eso en la época en que se divulgó servía para entender las dictaduras, los estados populistas. Foucault era un método pero también una concepción de lo social, filosóficamente hablando, aparte todos esos grandes estudios suyos del archivo cultural de Occidente fueron muy influyentes y siguen siéndolo porque brindan una comprensión de la epistemología occidental. Bourdieu, en cambio, fue siempre visto como un sociólogo, lo cual no quiere decir que no haya entrado mucho, pero fue de otra manera.

Por lo general realizamos aplicaciones de un marco teórico sobre una situación dada, por ejemplo Bourdieu para analizar tal fenómeno social en América Latina, pero no sería más interesante preguntarnos, ¿cuánto podría el pensamiento latinoamericano enseñarnos para leer a Bourdieu y entenderlo dentro de un contexto político no europeo?
Mi libro se llama Bourdieu en la periferia y justamente lo que hace es analizar una serie de críticas que se han hecho a Bourdieu. En varios momentos del libro indico como Bourdieu mismo se hubiera beneficiado si hubiera leído más la crítica y la historia cultural de América Latina, la que no conoce. Hay muchas variantes al modelo que él propone y que se dan porque América Latina y Europa son sociedades completamente diferentes, pero se han hecho esfuerzos para la aplicación de Bourdieu en México al campo de la educación o a los estudios de género, como indico en mi libro, con buenos resultados. También en el Brasil, Argentina, Chile, etc.

Se han utilizado categorías y metodologías de Bourdieu para entender los distintos sectores que conforman la cultura, el poder cultural, cómo se ejerce y cómo influyen los discursos que se producen, pero por ejemplo los campos intelectuales indígenas funcionan de manera distinta, la cuestión de la enseñanza funciona de otra manera, la función del maestro, de la religión, de la creencia en relación a la ciencia, los saberes tradicionales, chamánicos son diferentes. Evidentemente a un sociólogo francés que trabaja en los contextos europeos que conoce tampoco se le puede pedir que tenga un pensamiento universal, pero justamente por esto hay que hacer ajustes de aplicación y buena parte de mi libro señala las críticas que se pueden hacer, y que se han hecho, a Bourdieu. Por ejemplo desde Brasil ha sido bastantes criticado porque no considera variantes locales.

En tu trabajo sobre “El ojo que llora” señalas que esta obra nos enfrenta a lo que se sabe y a lo que se ignora, a lo que se ve y lo que se siente, a lo que no se quiere saber, a lo que no se sabe sentir, a la negación, a la pérdida, a la impunidad, a la imputabilidad, a lo representado y a lo irrepresentable”. En este sentido ¿qué es lo que crees que se está impidiendo ver, sentir?
En mi trabajo sobre “El ojo que llora” lo que hice fue un trabajo de interpretación de arte público. Es un monumento construido a base de cantos rodados que llevan inscritos los nombres de las víctimas, pero para empezar, ¿cuál es el concepto de víctima?, ¿quién es víctima? Por ejemplo si había campesinos en Ayacucho, uno de los principales espacios de actuación del senderismo, y fueron convencidos por la fuerza o violentados hasta el punto de actuar de un lado o de otro, lo cual paso con gran frecuencia debido a la pobreza de la zona, la intimidación, la violencia, etc. Muchos actuaron de un modo u otro sin convicción sino llevados por la necesidad y la dinámica histórico-política del momento; a veces no se llegaba a comprender el conflicto general donde cada individuo estaba inscrito. ¿Cuál es la víctima entonces? Daría la impresión que en ese conflicto todos fueron víctimas, incluso el que apretó el gatillo y mató del otro lado, inclusos los de la fuerza del orden que venían a reprimir, ellos también eran víctimas de un sistema ya que estaban obedeciendo órdenes que en buena fe podría parecerles que eran las del lado correcto.

La historia y la política no son blanco y negro, no es que la gente siempre haga elecciones limpias, en muchos casos está llevada por la dinámica de extrema miseria, de miedo, de violencia, entonces es muy difícil decir usted fue víctima y usted no. Entonces ahí los deudos venían a buscar los cantos rodados con el nombre de sus hijos y no estaban, reclamaban y les decían que era porque habían estado del otro lado. Esa es la polémica, sobre quién tiene derecho o el privilegio de ser reconocido como héroe o como víctima, quién marca esa línea en la historia donde unos quedan de un lado y otros de aquel. Estos conflictos tienen por característica que al final está demonizado el ambiente social y ya ni sabe quién es la víctima. Habrá quienes sí lo son y con esto no quiero decir que no haya responsables y que haya que caer en la impunidad, de ninguna manera; siempre hay culpables, siempre hay que hacer el esfuerzo de recuperar esa idea de la justicia social y de la justicia política.

En el caso de la definición de víctima, de agresor, es muy difícil crear una línea de límite, por esto cuando se armó esta polémica de los nombres Vargas Llosa (risas) dio esa “solución salomónica” de dar vuelta a las piedras para que no se vea el nombre hasta que pasen varias generaciones. Esto es como condenar a las víctimas otra vez a no ser observados y tiene un valor simbólico demasiado negativo. La verdad es que esos monumentos a la memoria son muy interesantes y muy conflictivos. Por esto en general son tan abstractos, son anónimos, dan una visión general para que cada uno vea a quien está homenajeando, para que conmemore a quien en su corazón piense que tiene que conmemorar, pero no hay un juicio histórico porque nadie quiere hacerse responsable. El conflicto real es que no hay paz sin justicia social, y para eso debe utilizarse una noción de culpa, de delito que tiene que ser penado, para hacer justicia a la víctima, pero la determinación de esas denominaciones se hace tremendamente complicada en contextos concretos.

«EL CONFLICTO REAL ES QUE NO HAY PAZ SIN JUSTICIA SOCIAL, Y PARA ESO DEBE UTILIZARSE UNA NOCIÓN DE CULPA, DE DELITO QUE TIENE QUE SER PENADO, PARA HACER JUSTICIA A LA VÍCTIMA»

¿Cómo configurar un proyecto de memoria que no caiga en una idea reduccionista de la víctima?
Es una categoría prácticamente insoslayable y al mismo tiempo problemática, entonces yo no creo que nadie tenga esa receta de cómo se puede hacer. Por esto en muchos casos, como te digo, se cae en la abstracción total, en cuestiones simbólicas como la altura, la luz, la transparencia, lo que evoca supuestamente el alma, evitando la nominación porque eso está sujeto a una concreción que a la historia le resulta muy difícil capturar. Luego está el otro gran tema y es que la memoria es finalmente coaptada por el poder y a veces el Estado hace algo para que ya no se hable más, es una manera de terminar el problema y no hablar más del asunto.

En muchos casos todas las salidas a esos tipos de conflicto son salidas pactadas por la impunidad, se hacen pactos de no hablar más del asunto. Varias de las dictaduras latinoamericanas terminaron así, con leyes de impunidad, ese es el precio de terminar el conflicto y después el procesamiento de los culpables se hace tarde y mal. Son procesos sucios, esencialmente contaminados por esta cuestión, no es que haya justicia social y todo quede cristalino; además esta no es una herida que cierra de ninguna manera, pasan generaciones y generaciones y al final se estaciona como todo en la historia, pero no quiere decir que se haya hecho justicia ni aunque hayan ido trescientos a la cárcel, ¿cómo se compensa entonces esa pérdida social? Por todo esto el tema de la memoria es muy delicado, porque todo el mundo tiene derecho a desarrollarlo, si tú has perdido un familiar ese reconocimiento social es una manera de sentir que la sociedad está contigo, pero al mismo tiempo son cosas muy manipuladas desde el poder.

Uno de los rasgos más interesantes de tu libro «Arguedas/Vargas Llosa. Dilemas y ensamblajes» es el uso que haces del concepto de máquina literaria, usada por Deleuze y Guattari en Capitalismo y esquizofrenia. Partiendo de que la máquina literaria forma parte de un agenciamiento colectivo tenemos entonces que las posturas estéticas son siempre políticas. Así, por un lado tenemos la ficción (tema predilecto de Vargas Llosa) y por otro la verosimilitud (que Arguedas enfatizaba en la mesa Todas las sangres). En este sentido ¿cómo estas poéticas corresponden a los proyectos de nación que estos autores representan?
Para empezar se expresa metafóricamente, alegóricamente a través del modo en que está presentado el mundo ficticio, de las clases sociales que están representadas en ese mundo, cómo se mueven, dónde están los héroes, los culpables, es decir, se va haciendo un diseño social desde el cual se puede deducir cuál es el concepto de nación. En el caso evidentemente de Arguedas es un proyecto donde a él lo que más le preocupa es la noción de inclusión, de integración de distintos sectores sociales, de distintos sectores étnicos, etc., y es un elemento fundamental en Arguedas, de ahí Todas las sangres con esa cantidad de metáforas, alegorizaciones de la confluencia popular. Ya que la idea de nación es una idea moderna hay que ver cómo se sitúa cada uno de estos escritores con respecto a la modernidad, del progreso, del orden social, de la tecnificación, de la urbanización, sobre qué pasa con los sectores sociales que no entran o que no son articulados a ese proyecto.

Vargas Llosa habla simplemente de una modernidad sin el indio, dice que lamentablemente alguien tiene que pagar el costo social de la modernización, si el indio no se puede asimilar a este proyecto social debe quedar atrás. Arguedas no está en esa posición; sin renunciar a la modernidad Arguedas dice que hay muchas modernidades posibles, no solo la modernidad capitalista donde ciertos conceptos de productividad, de progreso son dominantes, sino formas de modernidad que respetan la diferencia de concepciones del mundo, de relación con la naturaleza. Evidentemente esas otras modernidades no son las que están triunfando, de ahí que El zorro de arriba y el zorro de abajo sea un texto completamente desquiciado desde el punto de vista del lenguaje porque se trata de una modernidad que ha arrasado con las formas de vida autóctonas, con los valores, con la subjetividad, con el lenguaje, ya está todo combinado en esa tremenda, demoníaca mezcla final de Los zorros. Es una especie de metáfora de una nación imposible, una torre de babel donde los distintos sectores necesariamente no se comunican y coexisten de una manera desquiciada, completamente irracionalizada, o sea, lo que la modernidad ha hecho es romper las lógicas de las culturas autóctonas sin lograr sobreponer una racionalidad productiva.

Entonces la problemática de Vargas Llosa es otra, es un gran escritor, un escritor estrella dedicado a articularse a los grandes mercados internacionales, de ahí que su estética haya sido victoriosa con el premio Nobel porque es una visión de América que de alguna manera es comprensible, pero evidentemente su preocupación no es lograr una integración, él registra la multiculturalidad, pero no le preocupa la utopía, lo que llama en el caso de Arguedas “la utopía arcaica”, porque para él eso pertenece al pasado, puede ser lírico, muy bonito pero impracticable. Esta idea es complaciente con el Estado, tan complaciente que él quería ser el Estado. De hecho él propone una imagen cultural comprensible y que puede ser absorbida en otras culturas, mientras que Arguedas es excesivamente localista, es decir, la problemática de Arguedas está demasiado marcada por el conflicto, por un conflicto sin resolución y nadie quiere oír que hay un conflicto sin resolución. Sus desenlaces parece que no son comparables, pero sí lo son en el sentido de que hay toda una trayectoria que conduce a un resultado determinado, entonces se pueden analizar los caminos que se han seguido y cuáles son las variantes porque después de todo ambos venían de un mismo país. Que el Perú haya dado esas dos líneas tan marcadas y tan antagónicas es muy interesante.

“DECIMOS IZQUIERDA PORQUE NOS FALTA VOCABULARIO PARA REFERIRNOS A NUEVOS MOVIMIENTOS QUE EVOCAN LA IZQUIERDA DE LOS 70”

Has dicho que “negociar lo local implica (…) la articulación de las narrativas nacionales a un nivel transnacional, y la configuración de agendas locales diseñadas para desafiar y domesticar diseños globales”. ¿Consideras que las actuales políticas de izquierda en América Latina están orientándose hacia este tipo de negociación?
Ese artículo tiene años ya, no sé cómo lo escribiría hoy en día, pero es imposible hablar de la izquierda latinoamericana así globalmente porque lo que está pasando en un país es completamente diferente de lo que pasa en otro. Decimos izquierda porque nos falta vocabulario realmente para referirnos a nuevos movimientos que de alguna manera evocan la izquierda que nosotros aprendimos a identificar en los años 70. Ahora esta izquierda no roja sino rosada, decimos, ha conquistado el poder y estar en el poder es mucho más complicado que estar en la oposición en el sentido de que ahora hay que concretar el cambio social, la democratización, la justicia y eso es muy complicado, entonces cada país o cada sector está tratando de encontrar fórmulas distintas. Lo que está pasando en Bolivia evidentemente no guarda mucha conexión con lo que está pasando en Venezuela, y lo mismo en Uruguay donde hubo un ex -tupamaro como Presidente del país hasta hace poco y donde sigue el frente que articula las izquierdas y es otra manera de entender la izquierda institucionalizada que no se parece al proceso que está teniendo lugar en Bolivia y menos aún en Venezuela.

En cada caso creo que nadie ha rechazado totalmente una articulación con la globalización porque sería suicida, sería cerrarse en una misma burbuja, creo que no sería viable, pero sí se están tratando de buscar fórmulas de negociar lo local en relación con los impulsos de la globalización, encontrar formas de inscribir las distintas economías, los reclamos, las formas de vivir el neoliberalismo. Lo que se está buscando ahora son niveles de márgenes, intersticios a partir de los cuales lo local se pueda ir desarrollando y las culturas latinoamericanas van teniendo éxito en esta supervivencia dentro del neoliberalismo, van haciendo lo que se puede para inscribir sus propias agendas y sus propios reclamos. Esta es una operación muy compleja porque se trata de una globalización controlada, sobre todo desde los poderes asiáticos, y América Latina está recibiendo fondos, inversiones, pero en realidad sabemos poco de lo que pasa en el mapa financiero internacional. Lo que sí hay que decir es que el costo social, político, cultural y económico del neoliberalismo ha sido y sigue siendo inmenso, devastador, para América Latina.

Finalmente hablemos un poco de tu investigación sobre Gamaliel Churata, ¿cómo entender «El pez de oro» desde las tensiones locales-globales?

Todos los escritores andinos y también de otros contextos siempre recaen sobre el gran tema de las políticas de la lengua, eso es fundamental porque a través de la lengua vienen epistemologías, porque la lengua es un sistema y un registro del poder, porque implica las formas y los medios de articulación de lo local con lo global. El pez de oro está pensando desde el horizonte estético-ideológico de las vanguardias, desde el pensamiento de Mariátegui, desde el grupo Orkopata y el Boletín Titikaka, todas esas materializaciones culturales provincianas que de alguna manera están desafiando la centralidad de Lima, y también desde la posición de la altiplanicie boliviana donde trabajo Churata. En este sentido el pensamiento de Churata es un pensamiento reivindicativo y descolonizador ya que él se da cuenta que los grandes modelos y paradigmas de las culturas europeas están arrasando con las culturas autóctonas, locales, sin embargo no está para despreciar completamente –como no está nadie para ese momento- el occidentalismo. El gran problema es la articulación entre esas vertientes del pensamiento liberador europeo y la defensa de lo no-europeo.

Ahora, sobre la lengua, uno de los grandes problemas del indigenismo es su ventriloquía, siempre un autor está hablando por otro y el indio aparece como una especie de títere que es utilizado, se le ponen palabras en su boca, pero no sabemos realmente cómo pensaba. Los indigenistas son casi todos urbanos, mestizos, criollos que hablan por el indio, en general con muy buena voluntad, tratando de recrear ese mundo, pero sin un conocimiento directo, de ahí la importancia de Arguedas que está mucho más embebido de la cultura quechua. Por ejemplo Churata no hablaba ni quechua ni aimara, tenía un conocimiento exterior, pero se da cuenta de la gran importancia de reivindicar esos lugares de producción cultural, es decir, el quechua y aimara no tienen que ser siempre un referente de la cultura mestiza sino que pueden hablar por sí mismos.

Ahora, hablar de literatura indígena es de por sí un concepto híbrido, de lo literario como un concepto occidental donde se está forzando la oralidad a ser traducida al registro de lo letrado. Por eso una fuente de inspiración para Churata es Guamán Poma de Ayala, porque le parece que ahí hay una especie de compromiso entre las dos cosas, pero este es un gran tema contra el cual luchó también Arguedas toda su vida, buscando distintas formas de combinar, de introducir palabras en quechua o inventar una lengua capaz de transmitir el conflicto cultural y social de la cultura indígena.

Fuente:

https://redaccion.lamula.pe/2015/07/15/no-hay-una-sintesis-donde-todo-coexista-armonicamente-y-esto-se-debe-a-la-desigualdad/christianelguera/

Fuente imagen:

https://lh3.googleusercontent.com/71xUFKQR06-4Tr5Ghdk7XQbJrHDus3EPK9T14lSj-f1jXkRz7e2-APsbTKHoprMpuuvXCK0=s128

Fotos: Raúl García

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Uruguay: Culminó el V Congreso Nacional de Educación

América del Sur/Uruguay/18 Septiembre 2016/Fuente: lavoz901/Autor: Radio La Voz

En el estadio cubierto del Centro Provincial de Educación Física (Cpef) N°3 Profesor Hugo Mario La Nasa de Concepción del Uruguay, finalizó este viernes el V Congreso de Educación Posibilidad de Alteridad (con) Ciencia Pedagógica, ceremonia que fue encabezada por el intendente José Lauritto y el director de Educación Especial del Consejo General de Educación (CGE), Sergio Dines y de la que participaron más de 1800 docentes

Ante tan significativo evento, el director de Educación Especial del CGE, Sergio Dines, evaluó la instancia como muy significativa y agregó que “el primer territorio que se habita es el vínculo como concepto central”. Y continuó, «este V Congreso Nacional de Educación es una Praxis de la política educativa provincial reflejada en sus protagonistas, los docentes. Como parte del CGE debemos agradecer el apoyo del municipio, la Dirección Departamental y a todos los colaboradores de una ciudad movilizada por la educación y la cultura”.

Por su parte, el presidente Municipal, José Laurito, se comprometió a continuar apoyando este tipo de instancias, mantener viva la iniciativa con total apoyo comunal y agradeció la organización encabezada por el CGE y el compromiso asumido como espacio de realización de políticas educativas del gobierno provincial.

La instancia formativa contó con más de 1800 asistentes que participaron de las conferencias de expertos y talleres que se realizaron durante las dos jornadas de formación. Si bien el eje temático de esta edición, versó sobre la Patologización y Medicalización de las Infancias y las Adolescencias, las jornadas se han visto enriquecidas con distintos aportes y miradas que hacen a la integralidad de la Educación y del sistema educativo en su conjunto.

Fuente de la noticia: http://www.lavoz901.com/despachos.asp?cod_des=252650&ID_Seccion=14&fecemi=17/09/2016&Titular=culmino-el-v-congreso-nacional-de-educacion.html

Fuente de la imagen: http://media.elentrerios.com/fotos/2016/06/16/o_1466087758.jpg

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Uruguay: Jornadas Nacionales sobre Política Educativa, Sindicalismo y Trabajo Docente

Uruguay/17 septiembre 2016/Fuente: Fhaycs

Se desarrollará en la ciudad de Concepción del Uruguay  los días 4 y 5 de mayo de 2017. Este espacio, destinado a docentes, investigadores y estudiantes de grado y posgrado; dirigentes y militantes sindicales, público en general interesado en la temática, se propone recuperar y poner en discusión las diferentes líneas de investigación y experiencias pedagógicas junto a los múltiples tópicos de debate que encuentran en las problemáticas históricas y actuales de la escuela pública y los trabajadores de la educación su objeto teórico.

Convocan a participar: las cátedras de Política Educativa e Investigación Educativa de la FHAyCS UADER, sede Concepción del Uruguay, en conjunto con el Instituto de Investigaciones y Estadísticas de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (IIE-AGMER) y el Instituto de Investigaciones Pedagógicas Marina Vilte de la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (IIPMV-CTERA).

Objetivos

Generar un ámbito para la socialización de resultados de investigaciones y experiencias pedagógicas en torno a los ejes temáticos de las Jornadas.

 Fortalecer el marco de diálogo académico entre las instituciones abocadas a la producción científica y las organizaciones sindicales docentes.

 Poner en discusión los discursos acerca de los problemas vinculados con la educación pública y los trabajadores de la educación a través del tiempo.

Promover la reflexión sobre el papel de los actores educativos y sus concepciones político-pedagógicas en el marco de los procesos de transformación social.

Ejes temáticos

Política y legislación educativa

Historia del sindicalismo docente

Identidad y regulaciones del trabajo docente

Investigación y formación docente

Experiencias pedagógicas emancipadoras

Cronograma

Fecha límite para el envío de resúmenes: 25-11-2016

Fecha límite para comunicar la aceptación de los resúmenes: 09-12-2016

Fecha límite para el envío de ponencias: 03-03-2017

Fecha límite para comunicar la aceptación de las ponencias: 31-03-2017

Para inscribirse y acceder a las diversas formas de participación ingrese Aquí

::Comunicación Institucional FHAyCS UADER

Fuente noticia: http://fhaycs-uader.edu.ar/secretarias/comunicacion/todas-las-noticias/actividades-fhaycs/5194-jornadas-nacionales-sobre-politica-educativa-sindicalismo-y-trabajo-docente

Fuente noticia:http://www.clacso.org.ar/difusion/Jornadas_politicas_educativas/jornadas_02.jp

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Uruguay: Estudiantes toman las calles para exigir un mejor sistema educativo

América del Sur/Uruguay/17 Septiembre 2016/Fuente:LaradiodelSur /Autor: Norellys Alastre

Este viernes 16 de septiembre, una multitud de estudiantes de educación media de Paraguay, se movilizaron hasta el Ministerio de Educación en rechazo contra el sistema educacional actual de la nación, y solicitar una mejor “infraestructura, así como libros escolares, almuerzo y boleto estudiantil para los sectores secundarios”.

La protesta se llevó a cabo en las calles de la capital paraguaya Asunción, donde igualmente, se solicitó la inversión en el sector educativo, del 7 % total de Producto Interno Bruto (PIB), como lo recomienda la Unesco.

Asimismo, se informó que los estudiantes acusan al Gobierno y a su ministro de educación, Enrique Riera, de tener practicas autoritarias similares a las de la dictadura de Alfredo Stroessner, por lo que demostraron su rechazo a las políticas del Gobierno del presidente Horacio Cartes.

“Lo que estoy viendo hoy es que la dictadura esta presente más que nunca (…) Nuestro Ministro de Educación nos dice que si nosotros reclamamos los que no pertenece vamos a llevar cero en nuestras libretas, hago una pregunta ¿el no vas a poner cero? Porque nuestros docentes están con nosotros”, expresó uno de lo líderes estudiantiles, presente en la movilización.

En tal sentido, una vocera extendió su invitación a todos los estudiantes a que se sumen al movimiento, y resaltó que la lucha “es por todos”, confirmando al mismo tiempo la presencia del sector universitario en el lugar.

Cabe resaltar, que a la movilización estudiantil se presentó el Ministro de Educación, el cual con una actitud provocadora dio la orden de echarle agua a todos en el lugar, “dale, tiren agua”, dijo, logrando encender los ánimos de los estudiantes que reclamaban sus derechos.

Fuente de la noticia: https://laradiodelsur.com.ve/2016/09/16/estudiantes-paraguayos-toman-las-calles-para-exigir-un-mejor-sistema-educativo-video/

Fuente de la imagen: https://i0.wp.com/laradiodelsur.com.ve/wp-content/uploads/2016/09/estudiantes-paraguay.jpg?w=600&ssl=1

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Se crea la Red Latinoamericana de Estudios y Experiencias Interculturales

América del Sur/Uruguay/17 Septiembre 2016/Fuente: UNESCO

Se reunieron en Montevideo, Uruguay, los fundadores de la Red Latinoamericana de Estudios y Experiencias Interculturales, promovida por la UNESCO, en el marco de la celebración del Decenio Internacional de Acercamiento de Culturas (2013-2022).

Esta Red ha sido impulsada por más de 15 investigadores, activistas universidades, institutos y cátedras de diferentes países de América Latina, con el fin de difundir el acercamiento de culturas, la diversidad, y promover prácticas interculturales en la Región.

“La Red es un aporte muy importante para la Región, contribuyendo al entendimiento mutuo y el acercamiento de culturas, como elementos esenciales para la construcción de paz y el desarrollo sostenible” señaló Andrés Morales, especialista regional de Ciencias Sociales y Humanas para América Latina y el Caribe de UNESCO. También destacó que esta Red debe trabajar muy de la mano con otras redes e iniciativas interculturales e interreligiosas ya existentes para que se fortalezcan mutuamente.

“América Latina necesita redes que no solo reflexionen sobre la interculturalidad, sino que también promuevan y ejerzan prácticas interculturales, especialmente para la resolución de conflictos”, resaltó Manuel Ramiro Muñoz, director del Instituto de Estudios Interculturales de la Universidad Javeriana de Cali en Colombia, y uno de los principales promotores de la Red.

Durante toda la jornada los miembros fundadores intercambiaron visiones sobre las oportunidades de la Red, propusieron iniciativas de trabajo conjuntas, y apoyo a iniciativas propias de los miembros.

Acordaron empezar a trabajar en la validación de un proceso de indicadores de interculturalidad que viene trabajando la Universidad Católica de Perú, a su vez propusieron hacer un primer mapeo de las iniciativas interculturales que están realizando cada uno de los miembros para compartir experiencias, y participar en el Foro Internacional de Interculturalidad que se organizará en Cali, Colombia en 2017.

La reunión de la Red se dio en el marco del primer Foro Abierto de Ciencias de América Latina y el Caribe – CILAC, una de las más importantes actividades regionales de ciencias, tecnología, e innovación de los últimos tiempos, que contó con más de 200 panelistas de 20 países, en más de 100 actividades simultáneas.

Miembros fundadores de la Red Latinoamericana de Estudios y Experiencias Interculturales:

  • Manuel Ramiro Muñoz – Director del Instituto de Estudios Interculturales de la Universidad Javeriana de Cali (Colombia)
  • Gaia Pagano – Coordinadora general del Instituto de Estudios Interculturales de la Pontificia Universidad Javeriana de Cali (Colombia)
  • Fidel Tubino – Departamento de Humanidades de la Pontificia Universidad Católica del Perú (Perú)
  • Hellen Cristina de Souza – Centro de Formación y Actualización de Profesionales de la Educación Básica del Estado de Mato Grosso – CEFAPRO (Brasil)
  • Yuri Hamed Zapata Webb – Universidad de las Regiones Autónomas de la Costa Caribe Nicaraguense – URACCAN (Nicaragua)
  • Pablo Ceto – Universidad Ixil (Guatemala) • María Antonieta Campos Melo – Centro de Fortalecimiento Integral de Capacidades Locales -CEFIC- de la Universidad Católica de Temuco (Chile)
  • Jorge Enrique González Rojas – Cátedra Diálogo Intercultural de la Universidad Nacional (Colombia)
  • Pablo Vommaro – Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales – Clacso (Argentina)
  • Felipe Arocena – Departamento de Sociología de la Universidad de la República (Uruguay)
  • Mónica Olaza – Facultad de Psicología de la Universidad de la República (Uruguay)
  • Carmen Beramendi – Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales – Flacso (Uruguay)
  • Frédéric Vacheron – Sector Cultura Oficina Regional de UNESCO Montevideo (Uruguay) y Observatorio UNESCO Villa Ocampo (Argentina)
  • Andrés Morales – Sector Ciencias Sociales y Humanas Oficina Regional de UNESCO Montevideo (Uruguay)

Fuente: http://www.unesco.org/new/es/media-services/single-view/news/first_meeting_of_the_latin_american_network_of_intercultural-1/#.V9xQ7RDbu1s

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Cooperación genuina, bosque, medio ambiente, Nicaragua

Valorar la sabiduría comunitaria para fortalecer la lucha por la tierra y el bosque

América del Sur/Uruguay/17 Septiembre 2016/Fuente: Ecoportal

Cuando se remplaza un área de bosque por el monocultivo de eucalipto, una represa o un proyecto de minería, la destrucción es evidente a simple vista. Sin embrago, lo que muchas veces es invisible para quien mira de afuera – y, por eso, poco comprendido – es el conjunto de impactos profundos que esa destrucción ocasiona en la vida de las comunidades que habitan en ese lugar por muchas generaciones, así como en el mismo bosque y las incontables interconexiones entre los seres vivos que hacen parte de este, incluyendo a la propia comunidad.

Con el bosque, las comunidades generan un conjunto de conocimientos y sabiduría que ayudan a garantizar su bienestar y salud física, mental y espiritual, su cultura, su identidad y su autoestima. Por eso, las acciones que buscan recuperar y revalorizar la sabiduría, salud y bienestar de las comunidades afectadas por proyectos destructivos, de forma amplia e integral, son fundamentales para fortalecer las luchas de resistencia de esas comunidades. También son fundamentales para cuando las comunidades buscan revertir el proceso de destrucción, captando y dándole más fuerza y sentido a la lucha por la reconquista de su territorio.

Varias veces hemos denunciado en el boletín de WRM los nuevos mecanismos de “compensación” para aplacar la crisis climática, propuestos por “especialistas” de las transnacionales, gobiernos e instituciones financieras, así como de grandes ONGs. Los denunciamos por su falta de sabiduría, por ser falsas soluciones para la crisis climática y porque REDD+, por ejemplo, valoriza un bosque solamente a partir del carbono que existe en el mismo. A su vez, el mecanismo de compensación por la pérdida de la biodiversidad valoriza un bosque solamente a partir de la presencia de determinadas plantas o animales. Esa visión se colisiona frontalmente con las visiones y sabidurías que las comunidades que dependen del bosque han construido a lo largo del tiempo. Ellas siempre consideran su lugar como algo único – para ellas dos lugares iguales no existen. Es en el lugar donde viven las comunidades donde han creado sus lazos, sus historias contadas y recontadas, sus conocimientos, su colectividad, su identidad y cultura. Es en ese lugar, también, donde encuentran las condiciones para vivir bien a través de los alimentos y nutrición que el bosque provee, como las plantas, fuentes de agua y animales, que ayudan a tratar y sobretodo prevenir las enfermedades físicas y mentales.

Este boletín busca reflexionar sobre aquella dimensión más amplia que tiene el lugar para las comunidades, sin que ellas recurran a la valoración de ciertas categorías pre-establecidas, como el carbono. Más que eso, en su sabiduría, las comunidades se sienten parte del bosque. Eso es radicalmente diferente de los supuestos de quienes elaboran las políticas que prometen “salvar” los bosques hoy impuestas sobre esas comunidades. Mientas las comunidades hablan de su lugar con cariño y respeto, las políticas oficiales hablan sobre el mismo lugar en términos de “categorías” como, por ejemplo, la presencia o no de “bosques de alto valor de conservación” o “bosques con alto valor de carbono”. Bajo esa lógica, un bosque de “alto valor” por ejemplo podría ser remplazado por otro con características parecidas en términos de determinadas especies de plantas, mientras que el resto del bosque es considerado sin valor, es decir, puede ser destruido por no entrar dentro de la “categoría”. Mientras las comunidades hablan de lugares para referirse a un conjunto de seres y significados, incluyéndose a ellas mismas, los “especialistas” que elaboran cada vez más mecanismos para “solucionar” las crisis de deforestación y clima hablan hoy, por ejemplo, de “paisajes”, es decir, algo que ellos observan y usan a la distancia de acuerdo a sus intereses y de los cuales no se sienten parte.

Aquí nuestra intención no es la de romantizar la relación que las comunidades han mantenido con sus lugares, con el bosque. Lo que queremos es llamar la atención al hecho de que los grandes proyectos destructivos no solo destruyen los boques. Esas invasiones de tierras también ponen en riesgo y tienden a destruir sabidurías y un conjunto de costumbres, historias, relaciones, tradiciones y prácticas que determinan el vínculo entre las comunidades y sus lugares, que además le dan forma a su identidad y aseguran su bienestar. Al destruir los bosques, se terminan por destruir conocimientos imprescindibles para la comprensión y conservación de estos bosques. Pero más allá del proyecto en particular que viene invadiendo y destruyendo sus territorios, las comunidades también deben lidiar con otros “ataques” a sus medios de vida, más enfocados en la esfera de su imaginario en relación su identidad colectiva como campesinas o campesinos, indígenas o los habitantes ribereños. Por ejemplo, los mensajes constantes que propagan una “monocultura” de un determinado estándar de consumo, muchas veces con una visión urbana, es dominada por grandes empresas transnacionales. Sus propagandas buscan, a través del proceso de la globalización, transformar cualquier habitante del mundo en un “consumidor” de sus productos – la mayoría de las veces, productos muy perjudiciales para la salud de ese mismo consumidor.

Todo eso contribuye en romper el vínculo entre las comunidades y su lugar, y destruir su sabiduría, su identidad y su cultura. De esta forma se vuelve muy difícil resistir y luchar. En los casos en que una comunidad reconquista su territorio arrasado por el monocultivo, por la mina o por otro medio, ésta suele quedarse sin referencia, ya que no puede simplemente retomar su modo de vida porque las condiciones para eso no existen más. El resultado es una crisis profunda en las comunidades que se expresa de diferentes formas, siendo una de las más fuertes el fenómeno de suicidios entre jóvenes indígenas en varios países.

Buscando profundizar en estos desafíos más intrínsecos que confrontan las comunidades cuando son sujetas a la invasión y destrucción de su territorio y de los bosques, producimos esta edición de nuestro boletín. No solo queremos mostrar y reflexionar sobre esa realidad más compleja vivida por las comunidades que dependen del bosque para que éstas sean más comprendidas, sino que además buscamos contar algunas historias inspiradoras y llenas de fuerza desde las regiones de América Latina, África y Asia, de cómo las comunidades resisten y luchan para mantener y reencontrar el sentido de vivir y de su salud, incluso en situaciones sumamente adversas.

Fuente: http://www.ecoportal.net/Temas-Especiales/Biodiversidad/Valorar-la-sabiduria-comunitaria-para-fortalecer-la-lucha-por-la-tierra-y-el-bosque

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Sindicatos uruguayos realizan huelga de cuatro horas

América del Sur/Uruguay/15 de septiembre de 2016/Fuente: 20minutos

Los sindicatos uruguayos iniciaron el jueves un paro general de cuatro horas en reclamo de mejoras salariales y en rechazo a un plan de ajuste fiscal y del presupuesto elevado por el Ejecutivo al Parlamento. El dirigente de la central obrera única, Jorge Bermúdez, dijo a radio Universal que la huelga se realiza porque el gobierno «acude a una política que apunta a reducir el déficit fiscal y la inflación achicando el consumo y frenando el desarrollo de la evolución de los salarios».

Según datos oficiales de agosto la inflación interanual fue de 9,38%. Bermúdez explicó en la página oficial de la central que también demandan una reforma educativa «al servicio del país productivo», e hizo presente «la difícil realidad que vive el Mercosur ante la aparición de dos gobiernos como el de Brasil que es ilegítimo y el oligárquico de Argentina».

En algunos sectores, como la educación, la huelga de hoy se extiende durante toda la jornada. Los sindicatos de este sector rechazan un proyecto de gobierno para construir centros de enseñanza empleando capitales privados. Este es el séptimo paro general de cuatro horas que realiza el sindicalismo uruguayo en contra del gobierno del presidente Tabaré Vázquez, que también enfrentó otras dos huelgas generales de un día completo desde que asumió el poder el 1 de marzo de 2015.

30.000 trabajadores de distintos sectores de Uruguay marcharon hoy en Montevideo en reclamo de mejoras salariales y aumento del presupuesto educativo, en una movilización convocada por la principal central sindical de ese país, el PIT-CNT, en el marco de una huelga parcial de cuatro horas. El presidente de esta organización, Fernando Pereira, destacó a la prensa la importancia de esta movilización en la que hacen un llamado al Gobierno uruguayo a «seguir creciendo en el sector educativo».

«En 10 años el sector educación tuvo un incremento del 70 % del salario real y aun así el salario para un maestro no llega a 800 dólares mensuales», aseguró el sindicalista. «¿De qué estamos hablando? De que aún con todas esas evoluciones hay que seguir creciendo en el sector educativo», agregó. Añadió que «cuando se reclama más dinero» para la educación, se reclama para una «educación popular» que atienda a «todos los sectores» de la sociedad.

En cuanto a las mejoras salariales, recordó que con estas movilizaciones «no se reclama volver al modelo neoliberal (de los Gobiernos) entre 1990 y 2005», períodos en los que no rigió la negociación tripartita entre Gobierno, patronales y sindicatos. A criterio del sindicalista, el Gobierno uruguayo debe enfocarse en «las fuerzas populares» para continuar con el desarrollo de su «agenda de cambios», como contraposición a ese «modelo».

La movilización partió desde la sede de la Universidad de la República, ubicada en la principal avenida de Montevideo, y su punto de llegada fue en cercanías del Palacio Legislativo. Además de educación y mejoras salariales, el sector sindical mostró su apoyo a la expresidenta brasileña Dilma Rousseff y a Venezuela en su presidencia pro témpore del Mercosur. En ese sentido, Pereira resaltó «la solidaridad internacional» del movimiento sindical, que a su juicio, «si bien puede estar mirándose el ombligo», no se olvidan de sus vecinos.

«En ningún minuto nos olvidamos de que acá al costado hay un golpe de Estado, que tiene forma constitucional, pero que golpeó a una presidenta electa por más de 50 millones de brasileños», aseguró acerca de la situación política de Brasil.

De igual forma, señaló que confían en que los venezolanos «no permitan que vuelva la derecha», ya que en su opinión, el país caribeño «está hackeado por todos lados y diversos intereses».

Otra de las demandas del PIT-CNT en la movilización fue la profundización del Sistema Nacional Integrado de Salud, y una protesta en contra del sistema de pensiones mixto que rige en el país. Este método divide los aportes jubilatorios de algunos trabajadores entre un sistema intergeneracional público y fondos de ahorro previsional privados. La huelga, que se desarrolló entre las 9:00 hasta las 13:00 hora local (de 12:00 a 16:00 GMT), llevó por consigna «Si a los trabajadores nos va bien, al país le va bien», es la segunda de carácter parcial que se convoca en el 2016 y la quinta desde que el presidente del país, Tabaré Vázquez, asumió el mando en marzo de 2015.

Además, en el tiempo que lleva de mandato Vázquez, ha habido dos paros generales de 24 horas, uno el 6 de agosto de 2015 y el otro el pasado 14 de julio.

Ver más en: http://www.20minutos.com/noticia/60881/0/sindicatos-uruguayos-realizan-huelga-de-cuatro-horas/#xtor=AD-1&xts=513357

Fuente: https://noticias.terra.com/mundo/latinoamerica/miles-de-trabajadores-uruguayos-marchan-por-mejoras-salariales-y-educacion,6bac9c1ac9b7a19de9749cc3bd6ea227v46uptah.html

Imagen: www.frontera.info/Edicionenlinea/Fotos/Internacional/1451827-N.JPG

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