Uruguay/26 de agosto de 2016/www.eleconomistaamerica.com
Promover la inclusión educativa de los niños con discapacidad a través de una propuesta de formación académica basada en los nuevos paradigmas es el objetivo del primer curso sobre educación inclusiva dirigido a maestros de apoyo que fue lanzado hoy por autoridades educativas de Uruguay junto a Unicef.
Se trata del proyecto «Educación Inclusiva, Incluir como Oportunidad», una alianza entre Consejo de Educación Inicial y Primaria (CIEP), Unicef y la Facultad Latinoamericana en Ciencias Sociales (FLACSO), que durante un año buscara enriquecer el marco teórico y práctico de docentes que ejercen como itinerantes.
Estos 250 profesionales de la educación de todo el país suramericano pertenecen a la Red Mandela, un proyecto de escuelas y jardines de infantes inclusivos que busca potenciar el desarrollo de los niños con el fin de generar igualdad de oportunidades.
El representante de Unicef en Uruguay, Paolo Mefalopulos, destacó durante el lanzamiento de este curso -realizado hoy en Montevideo y al que acudió el presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez- la importancia de esta actividad en el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
«Garantizar que todos puedan acceder a una educación inclusiva es una meta que debe movilizar las energías de todos los actores del Gobierno, sociedad civil, sector privado, medios de comunicación y toda la ciudadanía», expresó.
De igual modo, valoró «el esfuerzo que ha realizado» el Estado uruguayo «para asegurar» que todos los niños del país puedan acceder a una educación de calidad.
Agregó que desde hace tres años junto a la Red Mandela atienden a unos 8.000 niños con discapacidad en 30 escuelas y jardines de infantes en todo el territorio uruguayo.
«Este curso, al igual que la escuela Mandela, busca innovar y promover nuevas prácticas, y estimular la cooperación y sinergia entre los estudiantes, maestros y la comunidad», aseveró.
Por su parte, la directora de FLACSO en Uruguay, Carmen Beramendi, precisó que comenzar un proceso de articulación interinstitucional para promover una educación inclusiva es «realmente en si un acto de inclusión».
A su vez, hizo un llamado a «hacer todos los esfuerzos» para que quien está «por fuera» en igualdad de oportunidades se integre a la sociedad y las instituciones, para avanzar en un concepto de inclusión que permita realizar las practicas educativas.
La ministra de Educación y Cultura uruguaya, María Julia Muñoz, remarcó la importancia de esta actividad, por lo que recordó que hace una década durante el primer Gobierno de Vázquez (2005-2010) «cambió la educación» con el inició del plan dedicado a maestros comunitarios.
«La inclusión es un deber que tenemos como cuidadanos para con nuestros país. Son 250 uruguayos que van a transformar la realidad de nuestra educación para mejorar la calidad de vida de todos nuestros conciudadanos», concluyó.
Los maestros de apoyo son los que acompañan a sus similares de aulas en todos los procesos de enseñanza y aprendizaje de los niños con discapacidad que asisten a las escuelas comunes.