Page 362 of 2438
1 360 361 362 363 364 2.438

Por qué la USICAMM no valora a los maestros: ¿y Carmelo?

Por: Abelardo Carro Nava

¿Por qué la USICAMM no aprende de lo que el caso de Carmelo aporta y lo aplica en su propia estructura?

La evaluación para el ingreso al magisterio de este año se desarrolló en un clima de total incertidumbre. Las súplicas circularon a raudales en las redes sociales: “qué no se vaya la luz”“qué no me falle el internet”“qué mi computadora funcione al cien”“qué la plataforma no me vaya a sacar”“qué ahora sí obtenga un lugar”.

Y así fue.

Tal presagio no auguraba nada bueno. De hecho, nada bueno traería consigo una evaluación en línea como la que la Unidad del Sistema para la Carrera de las Maestras y Maestros (USICAMM) diseñó para esta ocasión.

El desastre fue evidente, y no de ahorita, desde que inicio a operar este órgano administrativo una vez que la “reforma” a la reforma educativa de 2013 desapareció el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) así ha sido.

Ineficiencia, ineficacia, ineptitud, incapacidad, vaya, el adjetivo es lo de menos porque los hechos dan cuenta de ello: “Entré a las 8:55 a.m., supuestamente iniciaba a las 9:00 a.m., me apareció en la pantalla que tenía que esperar 30 minutos, me quitó ese tiempo que pude haber aprovechado para contestar y eso sí, fueron puntuales a la hora de sacar(me) del sistema a las 12:00 p.m., pero para comenzar no fueron puntuales, qué fraude” – escribía una maestra –. “Tuve problemas en ingresar al primer examen, no pude realizarlo, no me permitió entrar y lo intenté muchísimas veces y con diferentes sistemas de navegación y nada; me pasé esas 3 horas intentando muchísimas veces, pésimo el sistema” – informaba otra profesora –. “Me sacó (del sistema) el primero, solo respondí 50 preguntas. Llamé 2 veces, me dieron indicaciones; hora y media queriendo entrar. Envié mi reporte de incidentes y a la hora de la segunda evaluación, me dejó entrar rápidamente, todo fluyó muy bien hasta que logré concluir, pero me siguen faltando las 50 preguntas de la evaluación anterior” – escribía otra maestra –. Finalmente, “Yo sentí una plataforma muy estable, al principio no se activaba mi cámara, tan solo la actualicé y listo. Dos veces salí de mi examen con la tecla Esc, ingresé de nueva cuenta y todo perfecto” – compartía otra profesora –.

Este tipo de relatos pueden encontrarse en distintas redes sociales a partir del 12 de junio. Hay muchos. Es obvio, mientras en algunos casos todo fluyó sin ningún contratiempo, en otros no sucedió así. ¿De esta forma la USICAMM contribuye a la excelencia de la educación en un marco de inclusión y equidad bajo los principios previstos en la Ley General de Educación y lo referente a la nueva escuela mexicana tal y como se señala en el Art. 8, numeral II de la LGSCMM?, ¿de esta manera la USICAMM asegura el establecimiento de procesos públicos, transparentes, equitativos e imparciales tal y como se refiere en el Art. 10  y 39 de la misma ley?, ¿no tuvo el recurso y tiempo suficiente para prever todo lo concerniente al empleo de una plataforma para el desarrollo de una evaluación de esta naturaleza?, ¿por qué las inconsistencias?

Y luego “el reporte de incidencias”; un documento que, como lo he dicho y afirmado, confirma el estado de indefensión en el que se deja a quien participó en este proceso de admisión por dos razones: a) la misma Unidad resolverá esas incidencias ¿con base en qué? y b) el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) difícilmente levantará un dedo para intervenir puesto que, con seguridad, afirmará que no es ámbito de su competencia al ser un proceso de admisión, pero eso sí, cuando sea llamado por los resultados de la valoración de los elementos multifactoriales derivados de la emisión de la convocatoria respectiva (Art. 39, numeral IV), con seguridad sí se hará presente, ¿para qué? En consecuencia, los afectados en este proceso ¿tendrían que demandar a este órgano administrativo y a la propia Secretaría para que se reponga el proceso?

Y, por si fuera poco, la segunda parte de este examen dejó mucho que desear: “Diseño de reactivos basados en la memorización y mal redactados” – escribía una profesora –. “Cuál fue la instancia que elaboró el 2º instrumento. El primero muy bien ya que cumple con los criterios que debe poseer el maestro. El segundo corresponde a un modelo tradicionalmente memorístico y arcaico” – señalaba otra maestra –. “El instrumento de valoración de habilidades docentes de la NEM eran reactivos memorísticos de lectura y video, ¿acaso esta es una de las habilidades de la NEM? Aunado a la cantidad de faltas de ortografía. Congruencia por favor” – comentaba un profesor –. “Congruencia con el discurso USICAMM. La NEM señala aprendizajes significativos basados en pensamiento crítico, análisis, reflexión y poner a los docentes ítems que están basados en aprendizaje memorístico. Muy diferente hubiera sido añadir los videos, la lectura…” – escribía otra profesora –.

¿De esta manera la USICAMM apreciará los conocimientos, aptitudes y experiencia necesarios para el aprendizaje y el desarrollo integral de los educandos asegurando la contratación del personal que cumpla con el perfil profesional necesario?, ¿de esta manera es como se debe concebir a la nueva escuela mexicana? Peor aún ¿cuál fue el criterio para formular los reactivos del segundo examen y quién fue el responsable de tal hecho?

Muchos, evidenciamos la serie de inconsistencias administrativas de los procesos de admisión ocurridos bajo la Coordinación Nacional del Servicio Profesional Docente (CNSPD). Muchos, advertimos que con la reforma al artículo 3º de 2019 no se resolverían tales inconvenientes. Muchos, confirmamos esta situación cuando se aprobó la Ley General del Sistema para la Carrera de las Maestras y Maestros pues, fue un hecho, la continuidad del esquema de la desparecida CNSPD.

En suma, mientras no se pugne por una reforma a estos ordenamientos, tales arbitrariedades seguirán latentes en cada uno de los procesos. Como parece obvio, los afectados serán los participantes, pero también, los millones de alumnos que son parte de este intricado Sistema Educativo Nacional.

Bien dicen que la pandemia le cayó como anillo al dedo a algunas instituciones y hay algo de cierto en ello: la USICAMM encontró una forma de no hacer visible la restricción y discriminación de la que son objeto, los aspirantes y participantes en los procesos de admisión y promoción del magisterio.

Con negritas:

¿Por qué la USICAMM no aprende de lo que el caso de Carmelo aporta y lo aplica en su propia estructura?

Fuente: https://profelandia.com/por-que-la-usicamm-no-valora-a-los-maestros-y-carmelo/

Comparte este contenido:

Pensamiento crítico en el aula para combatir las ‘Fake News’

Por: Educación 3.0

El docente debe ayudar a reflexionar, a investigar, a generar una opinión y aprender a argumentarla para fomentar el pensamiento crítico de sus estudiantes”, defiende en este artículo Mayra Manente, profesora de Física en la Universidad de Buenos Aires y el Instituto Joaquín V. González.

Una de las ventajas que nos ofrecen las redes sociales es la de darle voz y participación a todos sus usuarios, dando lugar a lo que algunos autores llaman ‘cultura participativa’. Esto favorece la participación democrática y la elaboración de producciones de autoría compartida, pero también puede dar lugar a las noticias falsas o ‘Fake News’.

Éstas tienen una fuerte influencia en el mundo; basta un tuit para influenciar nuestras decisiones. Los principales problemas se encuentran en su fácil y rápida difusión, en que no siempre es posible saber quién las publica y en la dificultad de sus lectores para identificarlas. Muchos se preguntarán, ¿qué tiene de malo una noticia falsa circulando por la web? ¿A quién puede dañar?

Los peligros de no contrastar la información

Combatir las fake news Pensamiento crítico en el aula

En el último año las ‘Fake News’ cuestionaron la existencia del coronavirus, su letalidad y origen. También se puso en duda la mascarilla advirtiendo que podría causar hipoxia (reducción de oxígeno) en los usuarios, pero uno de los casos más impactantes fue la que sostenía que la ingesta de dióxido de cloro podía servir como remedio ‘casero’ para prevenir el contagio. Esto no solo circuló en redes sociales, sino que fue sostenido por el ex presidente Donald Trump y la presentadora de televisión Viviana Canosa, entre otros.

Si hacemos una pequeña búsqueda en Internet rápidamente se puede descubrir que el dióxido de cloro se utiliza como blanqueador, desinfectante y para destruir impurezas en el agua. Conociendo esta información ¿alguien bebería dióxido de cloro? Hubo una familia que sí confió en estas afirmaciones y un niño pequeño terminó intoxicado, lo que nos demuestra que estas ‘Fake News’ pueden dañar al público que las consume sin analizarlas antes de forma crítica.

Desarrollar el pensamiento crítico en el aula

Tal es el impacto que tienen estas noticias en las decisiones de las personas que la Organización Panamericana de la Salud tiene una sección en su página web destinada a dar respuestas científicas a los mitos comunes sobre vacunación y

COVID-19, y lo mismo ocurre con la Fundación Huésped, que ofrece una sección a responder mitos sobre la transmisión del virus pandémico.

Con el objetivo de formar a ciudadanos responsables, se consideran valiosas las competencias del siglo XXI publicadas por UNESCO y se incorporan en los diseños curriculares tanto de Primaria como Secundaria. Entre las que componen al currículum global se encuentra una posible solución, el desarrollo del pensamiento crítico en el aula. Una persona que lo ha desarrollado, según Robert Ennis, sería capaz de formular preguntas sobre un contenido y buscar sus respuestas; juzgar la credibilidad de una fuente; emitir juicios de valor; identificar los supuestos; decidir una acción a seguir e interactuar con los demás y de emplear estrategias retóricas apropiadas en una discusión o presentación. Estas capacidades pueden enseñarse desde el nivel primario en cualquier asignatura, pero prevalece como objetivo específico de las asignaturas afines a ciencias.

¿Es posible educar en ‘Fake News’ en el aula?

Como sostiene uno de los últimos informes de la OCDE, los estudiantes aún no identifican las fake news y en las aulas se puede notar que tienden a replicar información de manera contundente pero no pueden argumentarla. Siguiendo a

a la historiadora de la Educación Ines Dussel, hay mucho de ‘no-escuela’ en el horario escolar: los centros se enfrentan a la tarea de fomentar un uso responsable del contenido digital.

Este pensamiento crítico en el aula que se le pide al estudiante pertenece a los currículums que sostienen un enfoque progresista, donde se tienen en cuenta los intereses del alumno, se otorga autonomía al estudiante y se invita a trabajar mediante la resolución de problemas. Sin embargo, la existencia de estos no resulta suficiente para desplazar al aún vigente currículum de enfoque tradicionalista que fomenta un aprendizaje memorístico que han experimentado los docentes durante su escolarización y formación. La escasez de cursos de capacitación en estos temas deja en manos de los docentes la tarea de enseñar a pensar críticamente.

Pensamiento crítico en el aula

Una estrategia que se puede aplicar es la enseñanza basada en problemas: abordar algunos contenidos de la materia mediante la resolución de problemas o interrogantes en relación a la vida cotidiana y el interés de los estudiantes, que culminen con la elaboración grupal de una respuesta argumentada y defendida ante el resto de la clase. Muchos docentes no se animan a abordar esta estrategia por no manejar totalmente el contenido y eso es un error.

En términos de Michel Foucault, lejos de seguir replicando el discurso donde el docente es el centro del saber y la única autoridad, lo que aquí buscamos es un docente que no dé la respuesta correcta en el 100% de los casos, sino que ayude a reflexionar, a investigar, a generar una opinión y aprender a argumentarla. La falta de respuestas por parte del docente debe verse como una oportunidad para invertir los roles del aula y una posibilidad para que los estudiantes construyan su propia opinión sin forzarlos a coincidir con la de un adulto.

La implicación docente: elemento clave

Es necesaria la colaboración de profesionales activistas y críticos que se enfoquen en problemáticas sociales profundas que interpelen a los estudiantes, como el virus. El discurso de ‘a los alumnos no les interesa nada’ debe terminar, identificando su interés en sus temas de conversación, en temáticas que circulan en redes sociales o incluso que mencionan los influencers. Es importante no caer en la tentación de considerar que el interés de los adultos es compartido con los estudiantes: si ellos no ven sentido en lo que están haciendo terminarán trabajando para complacer al profesor sin apropiarse del contenido.

En relación a las preguntas, estas no deben ser ni muy simples ni muy complejas. Las preguntas que se propongan deben ser entendidas por el estudiante, no deben ser demasiado técnicas y por otro lado, deben responderse con una investigación, no con una definición. Por ejemplo: ¿influye el consumo de tabaco en la aparición de caries bucal? El cierre de la investigación nunca debe quedar entre el grupo y el docente. Idealmente puede ser una presentación oral donde los alumnos y el docente puedan hacer preguntas para profundizar el contenido o incluso debatir sobre opiniones opuestas.

La formación en pensamiento crítico en el aula no puede esperar más, la información que circula por la web no es del todo confiable y pese a que podemos oponernos a las competencias del siglo XXI o quienes las proponen, en ellas encontramos una alternativa para solucionar el problema de consumo acrítico en Internet. Si bien la aplicación de una propuesta actualizada de formación docente continua está aún por llegar, existen estrategias que permiten comenzar a trabajar esta competencia en el aula.

Fuente e Imagen: https://www.educaciontrespuntocero.com/entrevistas/pensamiento-critico-en-el-aula-fake-news/

Comparte este contenido:

7 sencillas (y divertidas) formas para que tus hijos se aficionen a las matemáticas durante el verano

Por: ABC

La clave para que esta asignatura deje de ser el «coco» para los más pequeños.

Son, sin lugar a dudas, uno de los patitos feos dentro de nuestro sistema educativo. Hablamos de las matemáticas, una asignatura que se nos puede ir atragantando con el paso de los años si no le encontramos ese enfoque práctico (y en cierta medida ameno) del que gozan otras materias.

Por ello, el mejor momento para cortar de raíz este rechazo se encuentra en la infancia, cuando aún no han aparecido esos estímulos negativos. La capacidad de absorber conocimientos por parte de los más pequeños les convierte en una especie de «esponjas» quienes, mediante actividades cotidianas y en momentos del año más relajados como el verano, pueden interiorizar sus primeras lecciones matemáticas de una manera simple y efectiva.

Se acerca el final del curso escolar para los más pequeños de la casa. Unos meses en los que, aparte de disfrutar de unas merecidas vacaciones, podemos aprovechar para que refuercen sus conocimientos en determinadas materias de una manera más lúdica y natural.

Pero si existe una asignatura amada y odiada a partes iguales por todos los que, antes o después, hemos pasado por la escuela, esas son las matemáticas. Y es que los expertos coinciden en que la forma en que afrontamos las primeras enseñanzas de una materiao el interés que son capaces de generar nuestros profesores, influye directamente en el tipo de relación que tendremos con ella a lo largo de nuestra vida.

En el caso de las matemáticas, suele argumentarse que una de las clave de este rechazo radica en que el lenguaje simbólico y abstracto de esta materia exige a los niños un esfuerzo continuado en edades en que las áreas del cerebro relacionadas con el razonamiento aún no han madurado. El cerebro requiere una mayor actividad cognitiva o esfuerzo a la hora de argumentar o buscar soluciones a un problema matemático en comparación, por ejemplo, con una actividad narrativa.

La clave para que las matemáticas dejen de ser el «coco» de las asignaturas para los más pequeños puede estar en que se apliquen a su vida cotidiana con ejercicios prácticos y que formen parte de su día a día. Por tanto, sí es posible cambiar esa animadversión que existe sobre ellas, sobre todo en periodos como la adolescencia. «Las matemáticas son básicas para la vida cotidiana, así como para desarrollar el pensamiento y la lógica o la capacidad de dar respuesta a problemas. Pero, desde el punto de vista de los niños, su gran ventaja es que les ayudan a comprender mucho mejor el mundo que les rodea» afirma Tamara Chubarovsky, experta en desarrollo infantil.

Primeras matemáticas

Estas son aquellas que tienen lugar en la mente del niño hasta los 5 años. Esta edad no es para aprendizajes formales, académicos y explícitos, tampoco es el momento de forzarles para que aprendan letras y números, más allá de su interés o aprendizaje espontáneo. Según Tamara, «lo ideal es que en la etapa de infantil (o a 5 años) prime el juego espontáneo, la experimentación. Con el juego libre los niños pueden adquirir las máximas habilidades motrices, interactuar con sus iguales y con la naturaleza, aprender del mundo a través de los sentidos (tocando, sintiendo, viendo, oyendo y oliendo) y, finalmente, desplegando su creatividad y su imaginación. Aunque pensemos que pueden estar perdiendo el tiempo, están sentando las bases para que el futuro aprendizaje sea significativo y profundo».

Para convertir estas ideas en acciones, Chubarovsky, quien el próximo día 17 de junio impartirá el Taller on-line Matemáticas Mágicas 2, desvela una serie de divertidas actividades para que nuestros hijos pierdan el miedo a las matemáticas durante el verano.

7 formas para que nuestros hijos se aficionen a las matemáticas durante el verano

Rimas y canciones

Donde se cuenten y, a la vez, se realicen movimientos. Existen canciones que sirven para acompañar diversas dinámicas: saltar a la comba, juego de palmas de a dos, marcar ritmos uno solo, etc. «Lo importante es la combinación de ritmo, movimiento y palabra» afirma la especialista.

Juego de los átomos

Los niños caminan libremente por el espacio hasta que dices un número, por ejemplo el 5. Entonces rápidamente deberán formar grupos de 5. Repetiremos la dinámica diciendo diferentes números.

Esta dinámica también se puede hacer con los ojos cerrados, y según la edad se puede reflexionar: ¿Cuántos grupos de 5 se formaron?, ¿cuántos niños se quedaron fuera?…

Contar con el tacto

Se trata de juegos en los que damos golpecitos a un niño en la espalda y debe adivinar cuántos toques fueron. De igual forma, podemos inventar una historia para acompañar este juego.

Experimentar con las cantidades

Colocar sillas o poner la mesa teniendo en cuenta cuántos somos, quién falta hoy o quién hay de visita, requiere una percepción de cantidad por parte del niño . Repartir de manera justa un pastel, trozos de manzana o lo que sea… es la base de las cuatro operaciones y un claro ejemplo de cómo las actividades cotidianas pueden ayudar a que ejercite su cerebro desde un enfoque matemático.

Orientarse en el tiempo

Las actividades cotidianas, como levantarse, desayunar, jugar, recoger, poner la mesa, comer, levantar la mesa, dormir, etc, son las que ordenan el tiempo, las que aportan las primeras nociones de que una actividad viene antes y otra después. De aquí la importancia de los rituales y los ritmos diarios y mensuales. Reforzamos la noción de tiempo anual acompañando las estaciones a través de Rimas con movimiento, cuentos, canciones y otras actividades.

Cantar y contar.

La música es matemática, lógica y orden. También al recitar de forma rítmica retahílas y rimas, moviendo el cuerpo, sentimos ese orden y lógica musical y matemática. Cuando los niños consiguen moverse con buen ritmo y contar, les resultará más fácil aprender la aritmética. De hecho, muchos niños con dificultades en la aritmética, también tienen dificultades para moverse de forma rítmica y coordinada.

Contar y caminar rítmicamente

Según la edad y posibilidades puedes realizar muchísimas variantes caminando con los niños en círculo de forma rítmica y contando a la vez. Si tienes poco espacio podría marcar el ritmo desde el propio sitio, aunque andando la experiencia es más rica. Por ejemplo: caminar rítmicamente contando uno, dos – uno, dos – uno, dos … y en dos siempre dar un paso un poco más fuerte con el pie para acentuarlo. Se puede hacer lo mismo, pero contando hasta tres: uno, dos, tres -uno, dos, tres… En vez de dar pisotón más fuerte, podemos dar una palma en el tres.

En resumen, las matemáticas rodean el día a día del niño. Tan solo debemos identificar aquellas actividades que les resulten más amenas y naturales, para darles un enfoque matemático. El futuro nos dará la razón.

Fuente e Imagen: https://www.abc.es/familia/educacion/abci-7-sencillas-y-divertidas-formas-para-hijos-aficionen-matematicas-durante-verano-202106180127_noticia.html

Comparte este contenido:

Japón pondrá en 2022 un robot transformable en la Luna

La agencia espacial japonesa planea poner el año que viene un robot transformable en la Luna, con el propósito de preparar el despliegue de un futuro rover tripulado, que llegaría a nuestro satélite en 2029. Es parte de un ambicioso plan japonés de incursión espacial, que incluye misiones tripuladas permanentes en la Luna y luego en Marte.

Un pequeño robot transformable será colocado por la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) en la Luna durante 2022, preparando las condiciones necesarias para el desembarco de un rover tripulado en 2029. Las acciones marcan el progreso del plan japonés para dejar su huella en el espacio: piensa concretar misiones tripuladas permanentes tanto en nuestro satélite como en Marte.

Japón parece decidido a no quedar atrás en la incipiente «carrera espacial» del siglo XXI, protagonizada por Estados Unidos y China pero que también presenta esfuerzos y proyectos en desarrollo de Rusia, Europa, Canadá y Emiratos Árabes Unidos, entre otros países o grupos de naciones: para ello ha desarrollado un módulo de aterrizaje lunar y está trabajando en un rover.

Previamente, la agencia espacial japonesa ha encargado a una conocida marca de juguetes que desarrolle un pequeño robot transformable junto a otras empresas y universidades, para probar las condiciones del polvo en la Luna. Se trata de un diminuto dispositivo en forma de bola, que pesa solamente 250 gramos.

Según una nota de prensa, el artefacto lunar mide solamente 80 milímetros de diámetro previamente a su transformación. Será utilizado principalmente para estudiar las condiciones del regolito o «arena lunar»: se trata de una capa de materiales no consolidados que reposan sobre roca sólida y caracteriza a la superficie de la Luna.

Datos vitales

El análisis de estos aspectos es crucial para poner a punto la tecnología de conducción autónoma que empleará el rover presurizado con tripulación, que Japón llevará a la Luna en 2029. El robot transformable destinado a recabar estos datos será transportado por un módulo de aterrizaje lunar, que además contará con una cámara para tomar imágenes de la superficie de la Luna.

Los datos que se obtengan permitirán analizar el rendimiento del algoritmo de localización que utilizará el futuro rover tripulado, como así también el impacto de la «arena lunar» en su desenvolvimiento en la superficie del satélite terrestre. Sin embargo, esto sería solamente el comienzo de un plan mucho más ambicioso.

Japón piensa en los rovers tripulados presurizados como un elemento trascendental de apoyo a la exploración lunar humana, que según la agencia espacial del país oriental vivirá su apogeo en la década de 2030.

En los mismos buscará tener en cuenta condiciones como la gravedad lunar (que es una sexta parte de la existente en la Tierra), la accidentada y compleja geografía del satélite o aspectos como la radiación y la temperatura en la Luna. El objetivo es crear el escenario para que las misiones tripuladas permanentes sean más eficientes desde todo punto de vista.

Japón conquista el espacio

Pero la Luna no será el único destino de la «conquista» espacial japonesa: también planea concretar posteriormente misiones tripuladas permanentes hacia Marte, el planeta rojo hoy «dominado» por Estados Unidos y China. Su ambición no es nueva, ya que en 1998 había lanzado una primera sonda de observación a Marte, un artefacto de 535 kilos llamado Nozomi (Esperanza).

Para concretar estas misiones será crucial el desarrollo de rovers verdaderamente eficientes. Para ello, JAXA ha unido esfuerzos con la empresa Toyota para crear una nueva tecnología de movilidad lunar, que posteriormente se adaptaría a las características de Marte.

Bajo un nuevo concepto de «movilidad espacial», los vehículos se alimentarían mediante pilas de combustible, empleando métodos limpios de generación de energía. Además, tendrían una alta densidad energética para poder hacer frente a las duras condiciones ambientales y a la superficie de la Luna y Marte.

El robot transformable diseñado para estudiar la superficie lunar de la agencia espacial japonesa, que se enviaría a la Luna durante 2022. Crédito: JAXA/Tomy Company/Sony/Doshisha University.

Fuente: https://tendencias21.levante-emv.com/japon-pondra-en-2022-un-robot-transformable-en-la-luna.html

Comparte este contenido:

Los cientos de niños negros que acabaron en escuelas para «subnormales» en Reino Unido en las décadas de los 60 y 70

Ashley John-Baptiste

En el Reino Unido de las décadas 1960 y 1970, cientos de niños negros fueron etiquetados como «educativamente subnormales» y enviados erróneamente a escuelas para alumnos que se consideraba tenían poca inteligencia. Por primera vez, algunos exalumnos han hablado de sus experiencias para un nuevo documental de la BBC.

En la década de 1970, cuando tenía 6 años, Noel Gordon fue enviado a lo que se conocía en aquel momento como un internado «educativo para subnormales» (ESN), situado a 24 kilómetros de su casa.

«Esa escuela era un infierno», dice Noel. «Pasé 10 años allí, y cuando me fui a los 16, no pude conseguir trabajo porque ni siquiera podía deletrear o llenar una solicitud de empleo».

Aproximadamente un año antes de unirse a la escuela ESN, Noel había sido ingresado en el hospital para que le extrajeran un diente. Le administraron un anestésico, pero resultó que tenía anemia de células falciformes no diagnosticada y el anestésico desencadenó una reacción grave.

Noel dice que los problemas de salud resultantes lo llevaron a ser percibido como con dificultades de aprendizaje y a ser recomendado para una «escuela especial». Sin embargo, ni él ni sus padres recibieron ninguna prueba o explicación de su discapacidad.

«Alguien vino y dijo que habían encontrado un internado especial con una matrona donde se ocuparían de mis necesidades médicas», dice Noel.

Durante esa conversación también dijeron que Noel era «un idiota. Estúpido».

Pero los padres de Noel no se dieron cuenta de que su nueva escuela era para los llamados «subnormales» desde el punto de vista educativo. Se habían mudado a Inglaterra desde Jamaica a principios de los años 60 y tenían grandes expectativas en la educación de su hijo.

Noel pasó la primera noche en el internado llorando, pensando en su madre. Sentía que la escuela era fría e institucional.

«Aún me viene el olor de los viejos escritorios de madera. ¡Ah! y el abuso racial en mi primer día«, dice.

Un estudiante le lanzó insultos raciales en el aula, pero no fue reprendido: el maestro simplemente le dijo que se sentara.

La escuela no seguía el plan de estudios del resto. Y aunque un maestro le dio a Noel un cuaderno para que escribiera, nunca le enseñaron gramática básica o cómo escribir. Hizo algunas sumas y restas básicas, pero durante las clases principalmente hacía manualidades y jugaba.

Noel cuando era niño.

FUENTE DE LA IMAGEN,NOEL GORDON

Pie de foto,Noel cuando era niño.

Sus padres sólo se dieron cuenta de qué tipo de escuela era cuando Noel, que entonces tenía 7 años, fue golpeado por un alumno de 15 años y su padre lo visitó por primera vez.

Recuerda que su padre le dijo al director: «Esta es una escuela para niños discapacitados», utilizando un término obsoleto.

Dice que el director respondió: «Sí, pero no nos gusta usar esa palabra, los llamamos aprendices lentos».

El padre de Noel, aunque devastado, se sintió impotente para cambiar las cosas.

Noel no tuvo la oportunidad de realizar exámenes y obtener calificaciones. Reflexionando sobre ello ahora, dice que ser etiquetado como subnormal desde el punto de vista educativo lo hizo sentir inferior por el resto de su vida y le generó muchos problemas psicológicos.

«Dejar la escuela sin ningún título es una cosa, pero dejar la escuela pensando que eres estúpido es completamente diferente. Te quita la confianza», dice.

La etiqueta

El término «educativamente subnormal» derivó de la Ley de Educación de 1944 y se utilizó para definir a quienes se creía que tenían una capacidad intelectual limitada.

«Esa etiqueta hizo que los niños se sintieran inferiores», dice el profesor Gus John, activista de la educación, quien llegó a Reino Unido desde el país insular caribeño Granada en 1964 como estudiante, y pronto se dio cuenta del problema.

«Los estudiantes de las escuelas ESN no irían a la universidad. Si tenían suerte, se convertirían en labradores.

«El término paralizaba y mataba cualquier sentido de autoconfianza y ambición«.

Gus John, activista y académico.

FUENTE DE LA IMAGEN,LYTTANYA SHANNON/ROGAN PRODUCTIONS

Pie de foto, Gus John, activista y académico.

Las escuelas primarias y secundarias de ESN clasificaban a los niños entre los que tenían «discapacidades de aprendizaje moderadas», discapacidades de aprendizaje «graves» o aquellos «imposibles de enseñar».

Estas categorías eran amplias y cuando se recomendaba a los estudiantes para las escuelas ESN, los profesores y psicólogos no siempre daban razones sólidas.

Si bien algunos de estos centros tenían buenos ejemplos de enseñanza, en muchos se pasaban por alto las necesidades de los alumnos.

Los estudiantes negros fueron enviados a estas escuelas en proporciones significativamente más altas.

Los realizadores del documental vieron un informe de 1967 de la ahora desaparecida Inner London Education Authority (ILEA , la Autoridad de Educación del Interior de Londres), que mostraba que la proporción de niños inmigrantes negros en las escuelas ESN (28%) era el doble que la de los de las escuelas ordinarias (15%).

«El porcentaje de niños negros en las escuelas ESN comparado con el de las escuelas normales era escandaloso», dice Gus John.

Pero ¿por qué se definió a tantos niños negros como «subnormales«?

«Racismo desenfrenado»

Las cifras de las décadas de 1960 y 1970 muestran que, en promedio, el rendimiento académico de los niños negros era más bajo que el de sus homólogos blancos. Eso alimentó la creencia generalizada de que los niños negros eran intelectualmente inferiores a los blancos.

Niños en una escuela primaria convencional en Brixton, Londres, en 1970.

FUENTE DE LA IMAGEN,GETTY IMAGES

Pie de foto, Niños en una escuela primaria convencional en Brixton, Londres, en 1970.

Un informe de la autoridad local filtrado en 1969, escrito por un director llamado Alfred Doulton, argumentó que los niños antillanos en general tenían un coeficiente intelectual más bajo.

La afirmación se basaba en los resultados de las pruebas de coeficiente intelectual a los que se sometía comúnmente a los alumnos de primaria.

Uno de los principales defensores de esas teorías fue Hans Eysenck, exprofesor del Instituto de Psiquiatría del King’s College de Londres.

Creía que la inteligencia estaba determinada genéticamente y citaba un estudio estadounidense que parecía mostrar que el coeficiente intelectual de los niños negros caía, en promedio, 12 puntos por debajo de los niños blancos.

Sobre ello, Gus John dice en el documental: «Cuando personas como Eysenck escribieron sobre raza e inteligencia, lo que en realidad estaban haciendo era justificar todos esos tropos que habían estado flotando durante el período de esclavitud, en el que la gente creía que no solo que los negros eran subhumanos sino también que no se podía esperar que actuaran o fueran tan inteligentes como los blancos«.

Muchos maestros veían a los niños negros como intelectualmente inferiores y temían que el hecho de que hubiera «demasiados» alumnos negros en una clase afectara negativamente el logro de los alumnos blancos.

Tras una protesta de padres blancos en Southall, al oeste de Londres, en junio de 1965, el gobierno emitió una guía que abordaba las necesidades sociales, lingüísticas y las posibles necesidades médicas de los niños inmigrantes, y recomendaba mantener un límite de aproximadamente el 30% de inmigrantes en cualquier escuela.

Bus en los 1960s
Pie de foto, Algunas autoridades locales transportaban en autobús a los niños inmigrantes a escuelas fuera de su área local.

Como consecuencia, muchas autoridades locales adoptaron la política de transporte en autobús: enviar a los niños inmigrantes a escuelas fuera de su área local en un intento de limitar el número de minorías étnicas en las escuelas.

La práctica finalmente se abolió en 1980.

«El sistema educativo alimentó y legitimó la idea de que los menores negros caribeños eran menos inteligentes que otros niños. Por eso muchos de ellos terminaron en las escuelas ESN.

«Fue un racismo desenfrenado«, dice Gus John.

El problema del lenguaje

Muchos equipararon erróneamente la raza con la capacidad intelectual. Pero como argumentó la fallecida psicóloga educativa Mollie Hunte, los malos resultados de los estudiantes negros no se debieron a su capacidad intelectual sino a que las pruebas utilizadas para evaluarlos tenían un sesgo cultural.

Como explica Gus John, los exámenes utilizaban referencias y vocabulario con los que los niños caribeños recién llegados no estaban familiarizados.

«Un elemento clave fue el idioma», dice el profesor John. «Si habían crecido en un hogar jamaicano, usaban inglés jamaiquino —patois o criollo—.

«El problema que tenía la mayoría de los estudiantes caribeños era que como era un derivado del inglés estándar, nadie creía que necesitaran apoyo con el idioma».

Como resultado, no recibieron la ayuda adicional que recibieron otros niños inmigrantes que no hablaban inglés antes de llegar.

Según el profesor John, los maestros no intentaron comprender las barreras culturales que enfrentaban los niños negros y las evaluaciones no consideraron sus circunstancias domésticas y socioeconómicas, ni el impacto de la migración.

Muchos niños viajaban a Reino Unido una vez que sus padres se habían instalado. Llegaban a un país desconocido para vivir con extraños virtuales, a quienes no habían visto en años.

«Ese desplazamiento causó mucho trauma», dice el profesor John. «Hubo dolor y duelo. Esos niños a menudo no volvían a ver a sus abuelos».

«Descartados«

Según el activista de la educación, había una cultura de bajas expectativas entre los profesores.

Las dificultades de aprendizaje se confundieron con problemas de aprendizaje y los niños negros simplemente fueron «descartados» y enviados a las escuelas ESN.

Eso es lo que le sucedió a Maisie Barrett, de Leeds, una ciudad del norte de Inglaterra, quien fue enviada a uno de estos centros a los siete años, en la década de 1960.

«Inicialmente fui a una escuela convencional. Allí, una maestra le dijo a mi madre que no podía aprender. Nos dijeron que estaría mejor en una escuela especial».

Masie a los 5 años, en su primer día en el colegio convencional.

FUENTE DE LA IMAGEN,MAISIE BARRETT

Pie de foto, Masie a los 5 años, en su primer día en el colegio convencional.

Maisie dice que la decisión de enviarla a una escuela ESN fue un error que arruinó sus oportunidades de vida. Como a Noel, no le enseñaron lo necesario.

«Jugábamos, teníamos discotecas… Yo lo llamo una ‘escuela libre’ porque la educación era muy básica y jugamos mucho más de lo que estudiábamos», dice.

Fue solo en sus 30, décadas después, que a Maisie le diagnosticaron dislexia.

«En lugar de ayudarme con mis dificultades de aprendizaje, simplemente me tacharon de estúpida. Los maestros nunca se tomaron el tiempo de averiguar por qué tenía problemas para aprender. Eso arruinó mi confianza», dice.

«Era lenta, pero un maestro debería haberse tomado el tiempo para ayudarme a aprender».

Según Maisie, la falta de aprendizaje y apoyo era solo una parte del problema.

«Fui a una escuela que era una institución racista«, dice.

Oportunidad tardía

Maisie Barrett.

FUENTE DE LA IMAGEN,LYTTANYA SHANNON/ROGAN PRODUCTIONS

Pie de foto, Maisie Barrett.

Con el tiempo, tanto a Noel como a Maisie se les ofreció la oportunidad de asistir a escuelas ordinarias. Para entonces, era demasiado tarde.

En el caso de Noel, fue a una escuela secundaria local a tiempo parcial desde los 12 años y pasó el resto de la semana en la escuela ESN.

«En la escuela secundaria de medio tiempo, me ausentaba debido a la intimidación de no tener amigos y no poder leer», dice Noel.

Maisie dejó su escuela ESN a la edad de 13 años y comenzó en la escuela secundaria regular.

«Mi mamá me puso en contacto con una trabajadora social negra que, después de evaluarme, dijo que yo era inteligente y señaló que me ubicaran en la escuela ESN por racismo», dice Maisie.

Sin embargo, para entonces, incapaz de leer o escribir, Para Maisie la escuela secundaria fue extremadamente desafiante y terminó sin calificaciones.

No tan «especiales»

Inicialmente, muchos caribeños que emigraron al Reino Unido durante las décadas de 1960 y 1970 tenían una visión favorable de las escuelas ESN.

A menudo denominadas «escuelas especiales» por los maestros, los padres caribeños, con poco conocimiento sobre el sistema educativo británico, pensaban que estas brindarían un mejor apoyo y aprendizaje a sus hijos.

«Cuando le dijeron a mi madre que me habían recomendado para una escuela especial, la recuerdo sonriendo. Ella pensó que una escuela especial significaba una escuela mejor«, dice Maisie.

Esta presunción sobre las escuelas «especiales» también se derivaba de las experiencias de los caribeños con los centros educativos en sus lugares de origen.

«La educación británica era vista como un camino hacia la movilidad social y las aspiraciones de los padres eran muy altas», dice Gus John.

«Los maestros tenían un perfil alto en las comunidades caribeñas, y los padres inicialmente confiaban en los profesores británicos. Fue un shock descubrir que sus hijos estaban siendo descritos como subnormales».

Sin embargo, cuando empezaron a notar las dificultades de sus hijos con los conceptos básicos de lectura y escritura, se preocuparon y surgieron grupos de padres dispuestos la acción.

Por ejemplo, en 1970, después de descubrir que había un número desproporcionadamente alto de niños negros en las escuelas ESN del norte de Londres, un grupo llamado North London West Indian Association se quejó formalmente ante la Junta de Relaciones Raciales, alegando discriminación en virtud de la Ley de Relaciones Raciales de 1968.

Remedios

En 1971, un libro titulado «Cómo el niño antillano se vuelve subnormal desde el punto de vista educativo en el sistema escolar británico» resultó fundamental para cambiar la opinión de los padres negros.

El autor, el escritor y maestro granadino Bernard Coard, enseñaba en una escuela ESN y había notado la gran cantidad de niños caribeños allí. Cuando un grupo de padres preocupados le pidió que investigara el tema, escribió el libro en un tiempo récord.

Sostuvo que las escuelas ESN estaban siendo utilizadas por las autoridades educativas como un «vertedero» para los niños negros, y que los maestros estaban confundiendo el trauma causado por la inmigración con una falta de inteligencia.

Bernard Coard, autor y exprofesor.

FUENTE DE LA IMAGEN,LYTTANYA SHANNON/ ROGAN PRODUCTIONS

Pie de foto, Bernard Coard, autor y exprofesor.

El trabajo fundamental de Bernard Coard condujo a una acción positiva y a un fuerte aumento en las escuelas complementarias para negros.

Eran escuelas sabatinas creadas por padres negros con el objetivo de elevar el nivel educativo de los niños. Enseñaban materias del currículum junto con la historia negra, para elevar la autoestima de los niños, ayudarlos a obtener calificaciones y prepararlos para el empleo.

Después de años de presión y campañas, la Ley de Educación de 1981 consagró la inclusión en la legislación y el término «educativamente subnormal» fue abolido como una categoría definitoria.

Una investigación del gobierno sobre la educación de niños de grupos étnicos minoritarios publicada en 1985 encontró que los bajos puntajes de CI promedio de los niños antillanos no eran un factor significativo en su bajo rendimiento académico.

En cambio, se descubrió que el prejuicio racial en la sociedad en general jugaba en ello un papel crucial.

Pero tanto para Noel como para Maisie, el impacto de su tiempo en las escuelas ESN permanece.

«La etiqueta ESN paralizó mi confianza. Nunca me dieron las herramientas para ser la persona que podría haber sido», dice Maisie.

A pesar de escribir dos libros y obtener cuatro títulos después de dejar la escuela, incluidos los estudios caribeños y la escritura creativa, Maisie ha tenido dificultades para encontrar trabajo a lo largo de los años.

Actualmente desempleada y con dos hijos adultos, trabajó como trabajadora de apoyo para disléxicos, pero fue despedida hace unos años.

Maisie siente que se ha pasado la vida «tratando de ponerse al día» desde que dejó la escuela ESN.

Noel descubrió que realmente le gusta aprender y ha acumulado una serie impresionante de diplomas como adulto, incluida una licenciatura en informática.

Pero aunque la pared de su casa está cubierta de certificados, todavía tiene dificultades para leer y escribir.

Retrato de graduación de Noel.

FUENTE DE LA IMAGEN,LYTTANYA SHANNON/ROGAN PRODUCTIONS

Pie de foto, Retrato de graduación de Noel.

«Esa escuela ESN me ha arruinó», dice Noel.

Y a pesar de los importantes avances realizados desde entonces, persisten las disparidades en la educación de los niños negros.

«Las preocupaciones que solíamos tener sobre los ESN todavía persisten, en vista de la cantidad de niños negros en unidades de derivación de alumnos», dice Gus John.

Estas unidades fueron establecidas en 1993 para acoger a alumnos excluidos de las escuela ordinarias.

Pero hay en ellas una cantidad desproporcionada de alumnos negros, hasta tres veces más en algunos de estos centros.

Al considerar el impacto a largo plazo de las escuelas ESN, el mayor pesar de Gus John es que «toda una generación fue disuadida de soñar en grande».

Fuente: https://www.bbc.com/mundo/noticias-57255577

Comparte este contenido:

Cambios de centro de trabajo, entre la norma y la opacidad: ahora en Zacatecas.

Por: Abelardo Carro Nava

El proceso de cambio de centros de trabajo, regularmente, si no es que siempre, se ve rodeado de una serie de omisiones, opacidades e irregularidades administrativas en las distintas Secretarías de Educación de la República Mexicana. Es, sin duda, un tema que no debe tomarse a la ligera pues la movilidad del personal adscrito a estas dependencias es un derecho del que goza todo trabajador, independientemente de la o las razones que lo hayan llevado a tomar una decisión de esta naturaleza.

Así lo establece la Ley General del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros (LGSCMM) en su artículo 90, correspondiente al Título Sexto, Previsiones Generales: “La Secretaría establecerá, mediante disposiciones de carácter general, de conformidad con la legislación laboral aplicable, las reglas de los procesos para la autorización de cambios de centros de trabajo, dentro de la entidad federativa de que se trate, así como los cambios de una entidad federativa a otra. Los cambios de adscripción se realizarán únicamente al término del ciclo escolar, salvo por necesidades de servicio o por razones de enfermedad, peligro de vida y seguridad personal debidamente comprobadas. En dichas disposiciones, se contemplarán los términos de participación de las representaciones sindicales para garantizar los derechos y las prestaciones laborales en términos de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y la demás normatividad aplicable. Las autoridades de educación media superior, las autoridades educativas de las entidades federativas y los organismos descentralizados tomarán las medidas necesarias a efecto de que el periodo mínimo de permanencia en el centro de trabajo será de dos años, salvo por causas de fuerza mayor. Los cambios de centro de trabajo que no cuenten con la aprobación de la autoridad correspondiente serán sancionados conforme a la normatividad aplicable. Dichos cambios, en ningún caso, serán objeto de regularización”.

Pero también, el Reglamento Interno de la Secretaría de Educación Pública (RISEP) en su Artículo 27, referente a las atribuciones de la Dirección General de Recursos Humanos y Organización, Fracción XVIII: “Administrar y operar el proceso de control de plazas del personal de las unidades administrativas de la Secretaría, así como coordinar los procesos de movilidad de su personal”.

Y bueno, para tales propósitos, la Unidad del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros (USICAMM) emitió, en 2021, las Disposiciones Generales del Proceso para la Autorización de Cambio de Centro de Trabajo cuyo objetivo, como su nombre lo indica, consiste en regular el proceso para la autorización de cambio de centro de trabajo del personal docente, técnico docente, asesor técnico pedagógico, de dirección y supervisión, dentro de las entidades federativas, así como los cambios de una entidad federativa a otra, en educación básica y en educación  media superior.

Ahora bien, con estos referentes que en el papel lucen muy bien, las distintas áreas o departamentos que forman parte de las estructuras de las Secretarías de Educación de los estados, implementan diversas acciones que forman parte del proceso referido y, para lo cual, de acuerdo a sus circunstancias, recursos o materiales, pero, sobre todo, con el conocimiento del personal presumiblemente participante, comienzan a desarrollar las actividades para que se logre este propósito, y es aquí donde las cosas dejan de lucir muy bien, pues las inconsistencias surgen cuando las convocatorias son elaboradas y publicadas sin conocimiento de causa y sin considerar las posibles consecuencias que podrían desprenderse entre los aspirantes y las propias dependencias administrativas dado que los criterios de valoración que se establecieron para revisar la documentación recibida, así como la emisión de resultados, distan mucho de ser transparentes. Para muestra un botón, o dos botones, si usted gusta.

Hace unos días, en Tamaulipas, fueron rechazadas solicitudes de cambio de centro de trabajo de algunos profesores porque su techo financiero no estaba actualizado. Una situación que la Secretaría de Educación de Tamaulipas no resolvió con la brevedad que el caso ameritaba para que los trabajadores de la educación, adscritos a esa dependencia, no enfrentaran una problemática al momento de participar en el proceso de movilidad de este año. En este caso, la Coordinación Estatal del Servicio Profesional Docente, no tomó en cuenta la situación que “vivían” esos maestros por lo que, en un principio, no fueron considerados, sin embargo, después de acudir a otras instancias en esa misma Dependencia, logró resolverse de manera favorable para éstos. ¿Desconocimiento, omisión u opacidad de parte de quien se encuentra al frente de una responsabilidad de esta naturaleza? Afortunadamente tal problema fue resuelto y el personal demandante se vio favorecido pues la razón les asistió en ese momento.

Desafortunadamente en Zacatecas la cosas no ha tenido el mismo fin, pues la emisión de resultados derivados del proceso de este año presentó ciertas irregularidades, entre las que destacan: a) emisión de una primera lista de ordenación sin nombres y, posterior a ello, publicación de otra lista con nombres en las que se observaba que se habían movido los lugares dados a conocer en la primera de ellas, ¿por qué dos listas?; b) valoración de los documentos recibidos sin que los criterios de revisión fueran claros, transparentes y equitativos, por ejemplo en el tema de la antigüedad, a diversos solicitantes se les asignó una antigüedad menor de la que poseen (debidamente comprobada mediante constancia que la misma dependencia entrega) y a otros se les incrementó ¿la razón?; c) criterios de desempate inconsistentes pues, siguiendo con el ejemplo de la antigüedad, la dependencia no reportó la información, necesaria y suficiente, pero sobre todo, transparente, de los indicadores de desempate empleados entre dos, tres, cuatro o cinco participantes que tuvieran los mismos años y meses de servicio, en el centro de trabajo, etc.; d) inconsistencias en la emisión de constancias por parte de la Secretaría pues, esta institución, emitió constancias de servicios y de promoción con datos diferentes que, por obvias razones, influyeron en la valoración de los criterios de desempate ¿no existe una base de datos confiable y debidamente actualizada?.

Este tipo de omisiones, opacidades e irregularidades administrativas en esa entidad federativa originó, como parece obvio, una sentida protesta por parte de los afectados, profesores y profesoras de distintos niveles educativos quienes, en días pasados demandaron la revisión de este proceso, hecho que obligó a la autoridad educativa a abrir sus puertas para establecer una mesa de diálogo que, hasta el momento en que cierro estas líneas, ha permitido revisar cada uno de los casos en lo que, como he señalado, existen este tipo de cuestiones; no obstante, ¿qué hubiera pasado si nadie se hubiese inconformado?

Tengo en mi memoria, la imagen de algunos funcionarios de alguna Secretaría de Educación, quienes, de manera conjunta y secreta con representantes de alguna Sección del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, con listas en mano, “palomeaban” quienes serían acreedores a dichos cambios de centro de trabajo.

Un pasado, a todas luces negro que, desde luego, tiene que desaparecer. Esperemos no sea el  caso en la entidad que refiero.

Al tiempo.

Referencias:

SEGOB. (2019). Decreto por el que se expide la Ley General de Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros. DOF. Recuperado de: https://dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5573860&fecha=30/09/2019

SEGOB. (2020). Reglamento Interior de la Secretaría de Educación Pública. DOF. Recuperado de: https://www.dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5600454&fecha=15/09/2020

SEP. (2021). Disposiciones Generales del Proceso para la Autorización de Cambio de Centro de Trabajo. USICAMM.

Fuente: http://www.educacionfutura.org/cambios-de-centro-de-trabajo-entre-la-norma-y-la-opacidad-ahora-en-zacatecas/

Comparte este contenido:

SEP: La absurda línea de continuidad

Por: Juan Carlos Miranda Arroyo

Durante su anuncio como secretaria de Educación Pública, Delfina Gómez, adoptó, extrañamente, dos caras…

La Secretaría de Educación Pública (SEP) que es responsable de la administración federal de la educación en México, por el momento, en la actual gestión (2018-2021), no tiene intención de cambiar el rumbo. Prevalece una absurda línea de continuidad con respecto a lo realizado durante el periodo sexenal anterior (2012-2018). Hay evidencias y rastros que conducen a esa conclusión.

Desde que la Maestra Delfina Gómez asumió el relevo en la titularidad como autoridad educativa federal (en la cima de la burocracia), en febrero de 2021, sólo se ha asomado una sola intención: “hacer el máximo esfuerzo para que nada cambie”.

Durante su anuncio como secretaria de Educación Pública, Delfina Gómez, adoptó, extrañamente, dos caras: 1) Una posición crítica, por una parte, y 2) Una actitud de autocomplacencia, por otra.

En la fase crítica, por ejemplo, destaca lo siguiente como ejemplo: “Agregó que muchos maestros, como ella, vivieron o fueron testigos de abusos, de simulaciones, desvíos y de negligencia, en suma, de la corrupción de la noble Secretaría; se pasó de figuras notables y verdaderos idealistas a simples burócratas, administradores de una institución sin alma, automatizada y utilizada.” (1)

Con otra cara, en la etapa de autocomplacencia, sorprendió a más de una y un observador debido a una de sus primeras declaraciones como secretaria del ramo educativo, pues Delfina mostró identificación con otra línea de trabajo y orientación: el no cambio. La crítica a la institución no se volvió crítica de la gestión de su antecesor: “No vengo a hacer cambios”.

Todo indicaba, por lo tanto y para ella, que todo estaba bien. Que la administración de la “Excelencia Musical” había hecho su trabajo en forma adecuada. “Las cosas públicas de la educación estuvieron en buenas manos”, es algo que se podía interpretar de sus dichos.

Al final, lo que la Maestra Delfina muestra, en lo que va de este relevo (febrero-junio de 2021), es que los impulsos de continuidad de la Reforma 2013 y de devaluación del magisterio, forman parte de la línea de políticas públicas educativas propias del periodo Moctezuma-Gómez en la SEP: (2018-2021). ¿Cuándo y cómo se romperá esta línea? ¿La legislatura federal (Cámara de Diputados) que iniciará su periodo (2021-2024) en septiembre próximo, se hará cargo de lo que se requiere en el contexto legislativo o de diseño de leyes? ¿Esa institución del Estado mexicano será factor de ruptura? Ello implicaría insertar los cambios que sean necesarios en términos de las prioridades educativas nacionales, no corporativos.

Particularmente, el diseño institucional y el marco legal que se eligieron en la coyuntura de cambios de 2019, no permite reivindicar a las y los maestros en servicio: La ley del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros de la educación obligatoria (Ley SICAMM), no está a la altura ni cerca de la revaloración magisterial que se requiere, puesto que lo que asegura es la conservación de las prácticas corporativistas.

Existen múltiples quejas de las y los profesores, así como de las y los directivos escolares debido a las inconsistencias existentes en su operación e interpretación sesgada, y que perjudican las intenciones de promoción, en lo que toca a los criterios para que las y los candidatos ser aceptados en los procesos de evaluación (me refiero a los trámites previos; ni siquiera se trata de problemas sobre el modelo de la evaluación, aunque ese es otro tema a considerar).

Docentes que cuentan con más de 10 años de servicio y que han realizado estudios de posgrado, han sido sistemáticamente rechazados por la Unidad respectiva que está a cargo de la SEP (USICAMM), durante el proceso de inscripciones para promociones verticales u horizontales, por no contar con un título de Normal Básica (de este modo, se rechazan a titulados con licenciatura o posgrado de instituciones de educación superior diferentes). Hecho que resulta, sin duda, un grave error en términos de la revaloración magisterial basada, principalmente, en la experiencia profesional dentro de la escuela pública; docentes que, además, se han preparado a través de programas de posgrados en educación.

Eso, sin duda, constituye un conjunto de actos de discriminación profesional. Más allá de la ideología de la “meritocracia”, éste es un asunto de consistencia o de congruencia académica y educativa.

Acerca de la USICAMM, las Cartas de Francisco están sobre la mesa (Francisco Cartas es el actual titular de esa Unidad): Que renuncie, de acuerdo, por ineptitud e incapacidad, pero hay que recordar que el problema, además de administrativo y burocrático, es estructural y de diseño institucional.

Sin embargo, los pronunciamientos y omisiones de la actual titular de la SEP, son sintomáticos. En su discurso, en Palacio Nacional, de febrero de 2021, la Maestra Delfina: “Abundó que hace dos años inició el cambio en la Secretaría, su limpieza, su despertar, pero hoy ese cambio, no solo debe continuar, como lo ha hecho efectivamente Esteban Moctezuma Barragán, de manera contundente, sino también deberá adquirir mayor velocidad y profundidad.” (misma fuente)

¿De verdad no se requieren cambios en la operación de las diferentes áreas de la SEP? ¿Todo bien en la USICAMM? ¿Y los programas nacionales como el PETC o el PRONI?
Debido a las inconsistencias mencionadas (desafortunados procesos de promoción), así como los desatinos de parte de la autoridad educativa federal, en lo que concierne a los criterios institucionales que se habrán de adoptar para el regreso a clases presenciales, con el consenso del magisterio en servicio o en activo, da la impresión o queda la percepción de que la SEP y el sistema educativo, todo, es como un gigantesco barco a la deriva… Sin capitán a bordo.

Más preguntas: ¿Dónde están los demás actores de la escena educativa nacional? ¿Dónde están las representaciones sindicales (oficialistas y disidentes) para luchar por la marginación que han sufrido muchas y muchos agremiados? ¿Qué opinan las y los especialistas en educación sobre estos actos de discriminación profesional?

En la base, es decir, en las escuelas, las y los docentes no están de acuerdo con la línea del “no cambio” en la SEP, sobre todo cuando se tienen evidencias de la inoperancia, la soberbia y la improvisación de la USICAMM. ¿Qué tendrá que suceder para que inicien los cambios y se subsanen las fallas institucionales? ¿Cuándo y cómo se impulsarán nuevos vientos de cambio en la estructura y los procedimientos para la promoción de docentes y directivos? ¿La próxima legislatura se abrirá a la sociedad para rediscutir los destinos de la educación pública en México o se mantendrá la absurda línea de continuidad, también, desde ahí?

La Maestra Delfina habrá de operar una doble ruptura: Con la Reforma de 2013, cuyos resabios continúan, y con las/los funcionarios y las orientaciones que dejó Esteban Moctezuma durante su paso por la dependencia.

Fuente consultada:

(1) Boletín SEP no. 31. Asume Delfina Gómez Álvarez como titular de la Secretaría de Educación Pública.

jcmqro3@yahyoo.com

@jcma23

Fuente: https://profelandia.com/sep-la-absurda-linea-de-continuidad/

Comparte este contenido:
Page 362 of 2438
1 360 361 362 363 364 2.438