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El reto de la lectura en tiempos digitales

 Autor: Carina Farreras

Los especialistas piden mejorar la enseñanza en las etapas iniciales y reforzar el gusto literario durante toda la formación

Uno de cada cinco niños españoles no comprende lo que lee a la edad de nueve años. Puede leer de corrido pero no recuerda lo que ha verbalizado o, simplemente, no lo entiende. La falta de comprensión lectora condicionará el resto de su aprendizaje y, por tanto, su éxito educativo futuro.

Además, si no se corrige a tiempo, antes de que termine la primaria, sus posibilidades de disfrutar con los libros quedarán seriamente mermadas. “El placer de leer lleva a desear aprender toda la vida, por eso es tan importante en la formación de la persona y debería centrar el objetivo de toda la educación”, afirma Rafael Bisquerra, catedrático de la facultat de Educación de la UB.

Así lo entiende también la Federación del Gremio de Editores que en su último Informe 2017 pide explícitamente al Gobierno que la educación pivote en torno a la lectura, evitando regular su enseñanza, como ordena la actual ley de educación, la Lomce, de forma “vaga y confusa”.

Los datos de comprensión lectora según el último informe Pirls han mejorado en nuestros país 15 puntos pero aún quedan por debajo de otros lugares donde la lectura es una de las tareas prioritaria en los primeros años de la educación formal. “Los niveles de lectura de un país están en consonancia con la importancia social que se le da a esta actividad”, considera Enric Prats, profesor de Pedagogía de la UB. “Y la española está claramente por debajo de la media de la OCDE”, sostiene. Catalunya es aún inferior a la media nacional.

En España, sin leer, también se vive. Según los barómetros del Centro de Investigaciones Sociológica (CIS) sólo la mitad de la población lee en algún formato de papel (libro, cómics, revista, periódicos) una vez al mes y un 35% no lo hace casi nunca, ni siquiera por exigencia del trabajo. A esta fotografía se añade que cuatro de cada diez personas no abren un libro en todo un año.

Estas perspectivas podrían cambiar en el futuro. Según el informe de la Federación del Gremio de Editores, se está ensanchando la base social porque en las últimas décadas se ha escalado en la formación de la población en general, y hay más universitarios que nunca.

Otro factor positivo es el aumento de la franja de grandes lectores, que ha pasado de dos a tres personas de cada diez. Este crecimiento de lectores tendrá un efecto en la educación. Unos padres que disfrutan de la lectura y tienen libros en el hogar predispone a niños lectores, según las investigaciones.

“El chaval debe descubrir que se lo pasa bien leyendo, que le reporta satisfacción, porque si leer le produce estrés, cuando es pequeño, o aburrimiento, cuando es mayor, sólo estamos creando las condiciones para que evite esa experiencia”, afirma Bisquerra, experto en educación emocional y eficiencia lectora. Por tanto, la introducción a la lectura, ese periodo en el que aprende a dar significado a los caracteres, parece clave. “No se trata sólo de dominar una técnica sino de que el niño encuentre recompensas a ese esfuerzo”, indica el profesor.

Para Mireia Manresa, profesora de Didáctica de la Lengua y Literatura en la UAB, se debería dejar de entender que la lectura es un aprendizaje técnico. En su opinión, habría que dejar de situar la enseñanza de la lectura y la comprensión de los textos de manera exclusiva en los primeros años de primaria y extender las ayudas a la comprensión de manera progresiva y constante en todas las etapas. “Parece que, como ya saben decodificar, ya saben leer, y eso no es cierto”, considera.

Sumergirse en un libro exige haber adquirido ciertas competencias como “saber escuchar, con atención, y en silencio”, indica Bisquerra. “Leer tiene mucho que ver con escuchar, es estar atento a una historia ajena, que conecta con emociones propias”, explica. El maestro tiene que trabajar la atención y el silencio con sus pequeños alumnos “mucho más que en el pasado porque los estímulos que recibe el niño son mayores y no se ha entrenado en la espera”, concluye el catedrático.

“En las escuelas de primaria se trabaja bien el aprendizaje de la lectoescritura”, explica Álex Cosials, especialista en la promoción de la lectura y las bibliotecas escolares desde la Fundación Jaume Bofill, “pero faltan horas de práctica”. Desde su punto de vista, las familias pueden contribuir a mejorar las habilidades de sus hijos. “A veces, bastaría que la nota que recibe la familia en la evaluación del alumno, ese ‘debería leer más’, estuviera acompañada de una explicación a las familias sobre cómo ayudar al chaval a leer”, aconseja Cosials, que recuerda que el rendimiento lector también está asociado a condicionantes como los entornos sociales, económicos y culturales.

En todo caso, sugiere a los padres que hagan lecturas compartidas con sus hijos y también visitas a bibliotecas y librerías. Conversaciones sobre las emociones que provoca el texto o los nuevos descubrimientos que aportan. Acompañar. No abandonar al crío solo con el libro de la noche en cuanto ya sabe pronunciar las primeras palabras de un cuento.

Fuente del Artículo:

http://www.lavanguardia.com/vida/20171225/433873013038/reto-lectura-tiempos-digitales-informes-espana.html?facet=amp

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Colombia: ¿Los dueños del capital impondrán al presidente?

Por: Manuel Humberto Restrepo Dominguez

La crisis del capital de 2008 sacó al neoliberalismo de las pocas dificultades que todavía le causaba la política y ratificó su hegemonía para organizar la vida. Los “dueños” del mundo eliminaron su condición de victimarios y responsables de la desigualdad, desastres humanitarios y catástrofes provocadas al planeta y se presentaron como victimas, que rápidamente subordinaron la capacidad de la política poniéndola a sus pies y controlar las decisiones de estado y reducir la potencia de derechos humanos como el trabajo, al que le arrebataron mas de 60 millones de empleos en menos de un año (2008-2009). En las dos décadas siguientes hambruna, discriminación, racismo, destierro, exclusión y esclavitud provocadas por su obsesiva manera de acumular fueron convertidas en datos sin responsables. 70 millones de desterrados, otros 70 de esclavizados o 1000 millones de hambrientos se volvieron una cosa natural por la que nadie se ruboriza ni responde, ni los dueños del capital ni los gobernantes a su servicio, que por incumplir las tareas de estado son violadores de derechos.

2018 inicio con 8 ricos que tienen mas riqueza que 3700 millones de personas, a las que podrían evitar el hambre, el destierro, la enfermedad o el analfabetismo y continuar siendo ricos. El 82 por ciento de la riqueza mundial generada en 2017 fue a sus bolsillos mientras la mitad de la población no recibió nada (Oxfam, Forbes y Crédit Suisse Global Wealth). B. Gates, Amancio Ortega, Buffett, Slim, Jeff Bezzos, Zuckerberg, Ellison y Bloomberg son los mas visibles “dueños” que junto con otros pocos le permiten vivir o morir a millones de seres humanos que padecen las humillaciones y viven sin derechos. Este ilimitado poder desborda las cuadriculas que separan la vida en ciencias, disciplinas, formas de existir, es un poder holístico que sencillamente entiende a la política como una herramienta para mantener ese poder y acrecentar su capital. Los “dueños” pueden eliminar competidores, destituir gobernantes, promover golpes de estado o poner de presidente a quien les plazca aunque nunca hablen de candidatos o elecciones. Han convertido al estado en otro medio de producción de su riqueza, es su empresa principal con capacidad coactiva y represiva para obtener y transferirles recursos mediante negocios de todo orden y vinculo en todos los ministerios y entidades.

Al mirar Colombia, es reconocible que solo cuatro ricos concentran demasiado capital y poder (Sarmiento Angulo, Santo Domingo, Ardila lulle, Gilinski) con capacidad para subordinar la política y decidir quien ha de gobernar. Controlan la subjetividad, el alimento, las movilidad, la manera de actuar. Son dueños de medios de información (T.V, prensa, radio), bancos, seguros, comunicaciones, gas, infraestructuras, finca raíz, vías, aviación, inmobiliarias, incursionan en la justicia, el deporte, el turismo, tienen holding, franquicias y consorcios. Por su mandato la propiedad privada es sagrada y la publica satanizada. Son autosuficientes para poner decisiones políticas a sus pies e intervenir la agenda del gobierno y la dinámica de las instituciones con reglas de mercado (también alimentado por mafias incrustadas en el estado). Los dueños han acelerado el paso de la política hacia el mercado, desvirtuando la esencia de la democracia basada en competidores que tratan de garantizar la realización de derechos y del bienestar colectivo, usurpada por otra forma (politiquería) tomada por competidores que tratan de obtener el poder para reforzar su poder y sustraer los bienes públicos para llevarlas a las cuentas privadas de los dueños y sus múltiples redes de beneficio privado.

El mercado estimula la creación de empresas electorales organizadas y dirigidas por clientelas triunfantes que hacen negocios (legales, ilegales o mixtos) comprando y vendiendo paquetes de electores (como si fueran acciones), no tienen programa político, no responden a principios éticos y su ideología es el capital. Hacer política (politiquería) es un objetivo de la empresa electoral, su negocio, nunca su virtud. De esta manera sin debate colectivo, sin coherencia ideológica y sin sentido de humanidad las empresas electorales (en lo local a la manera de franquicias y en lo global a la manera de Holding) producen a los candidatos que son elaborados como productos para ser vendidos y consumidos por mayorías que puestas en desigualdad, hambre y desesperanza, aceptan la recomendación de dejarse llevar por la corriente y tratar de sacar algún provecho propio. Muchos de estos productos ni siquiera cumplen los mínimos de calidad, la cuarta parte de aspirantes al congreso procedentes de derecha y ultraderecha, han sido puestos al descubierto en fraudes, corrupción o crímenes y simplemente sus empresarios los anuncian como productos imperfectos a los que se les trata de mejorar corrigiendo imagen, sonrisa, gesto en las manos y mirada.

Lo evidente es que a los ricos (y a las élites en general) no le interesan los pobres (salvo para sobreexplotarlos) les interesan sus votos y su plusvalía, no su dignidad ni sus ansias de vivir en paz. Esa ventaja les permite llevar la delantera en la coyuntura electoral y por veto o cooptación persisten en bloquear la construcción de poderes populares, promover la intolerancia y negar a sus adversarios. El consenso sobre el prelegido para sostener el poder y garantizar la movilidad del capital libre de barreras y alteraciones como las que puede traer una paz real con justicia social y para todos parece haberlo indicado Luis Carlos Sarmiento por ser uno de los 120 mas ricos del mundo (Forbes), el quinto banquero mas rico del planeta (elcolombiano.com), el presidente del Holding Aval (el mas sólido del país), poseedor de una fortuna cercana a 12 billones de dólares que triplica la de Trump (semana.com) y ser el gran ejecutor de inversiones con recursos de la nación, de múltiples maneras ha señalado que prefiere en palacio a quien de niño lo recorrió de la mano de su tío abuelo presidente y en los últimos siete años con apoyo irrestricto, firme y duradero del presidente Santos, su gobierno y su partido, recibió su preparación de gobernanza (nueva forma del poder globalizado) y visitó el país distribuyendo peso a peso un capital de 25 billones y cientos de miles de viviendas induciendo a creer que la política son hechos (capital) y no derechos y él, esta prelegido para gobernar.

Nada es definitivo pero derecha y ultraderecha son hijas del capital y su doctrina es mas sencilla que la de la de las ideas políticas que promueven libertades, derechos y bienestar. El difícil reto popular para enfrentar a la doctrina del capital que remueve contradicciones y une a sus disidencias, es hacer unidad entre organizaciones sociales, defensores de derechos y de la paz firmada, victimas, inconformes y sectores políticos progresistas. Eliminar barreras para enfrentar en unidad las directrices del capital (que al final junta a derecha y ultraderecha en el holding) es muy complejo pero nunca imposible. Es difícil derrotar al preelegido, como lo ha sido derrotar la guerra y el miedo a pesar del sistemático genocidio de luchadores populares, pero se puede. Siempre es posible si se descifra el enigma como lo hizo Heracles para vencer a Anteo o David para derrotar a Goliat y mejor aún si la esperanza sigue firme para consolidar la paz real y se trabaja a fondo en individual y en colectivo para lograr un ascenso en la conciencia colectiva sin odios, pos-verdades, ni absolutos.

Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=237499&titular=%BFlos-due%F1os-del-capital-impondr%E1n-al-presidente?-

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Emilio Gutiérrez Soto y la lucha por la protección de los periodistas

Por: Amy Goodman

El periodista mexicano Gutiérrez Soto está en un centro de detención de inmigrantes de El Paso, Texas

Desde hace 25 años, el Comité para la Protección de los Periodistas ( CPJ , por su sigla en inglés) publica un informe anual con la lista de los periodistas asesinados a lo largo del año en todo el mundo. La lista de este año incluye el asesinato de 42 periodistas y cuatro trabajadores de los medios; algunos de ellos mientras cubrían situaciones de guerra, otros asesinados en represalia por sus investigaciones periodísticas. Otros 20 fueron asesinados en circunstancias en las que el CPJ no puede confirmar que estuvieran relacionadas con su trabajo. Según cita el informe, una cifra récord de 262 periodistas fueron encarcelados en todo el mundo este año. Turquía, China y Egipto encabezan la lista de países con mayor cantidad de periodistas detenidos por segundo año consecutivo. Mientras tanto, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lleva a cabo una campaña implacable para desacreditar el periodismo en su país, a menudo con una retórica que podría incitar a sus seguidores a la violencia. La política de Trump de aumentar las deportaciones masivas podría incluso enviar a un periodista mexicano, actualmente encarcelado en Estados Unidos, de regreso a México, donde podría ser asesinado.

Emilio Gutiérrez Soto se encuentra retenido en un centro de detención de inmigrantes de El Paso, Texas, junto con su hijo Oscar, de 24 años de edad. Ambos huyeron de México en 2008, en busca de asilo político después de que Emilio recibiera amenazas de muerte por su trabajo como periodista.

Emilio nos concedió una entrevista telefónica para Democracy Now! desde el centro de detención del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos ( ICE , por su sigla en inglés) en el que se encuentra recluido: “Yo escribí algunas notas informativas en donde relataba el actuar de los militares en la zona noroeste de Chihuahua, precisamente en el municipio de Ascensión, Chihuahua, y concretamente en la población de Palomas, que es la frontera con el estado de Nuevo México. Esto causó una reacción de disgusto en el secretario de la Defensa Nacional, que envió al jefe de la Quinta Zona Militar en Chihuahua, el general Alfonso García Vega, a amenazarme de que ya había escrito unas notas, en concreto tres, en donde hacia los señalamientos de corrupción, de asaltos cometidos en contra de la población por parte de los uniformados del Ejército. Y pues me sentenció, me dijo: ‘Ya escribiste tres notas, y no va a haber una cuarta’. Y claro que hubo una cuarta nota”.

Eso fue en 2005. Un día de 2008, Emilio recibió un mensaje urgente de un amigo, que había oído de boca de alguien del ejército que el periodista era blanco de asesinato. Emilio agarró los documentos necesarios para viajar, preparó a su hijo, Oscar, y juntos huyeron a Estados Unidos. Después de siete meses de detención fue liberado, a la espera de un fallo judicial sobre su solicitud de asilo político. Emilio y Oscar subsistieron trabajando en un camión de comida en Nuevo México hasta el pasado mes de julio, cuando el juez falló en su contra. Padre e hijo fueron llevados a la cárcel de inmigración esposados. Desde el centro de detención, Emilio apeló el dictamen.

“Una deportación de nosotros implica obviamente la muerte. Si no hubiera la anuencia del Gobierno [mexicano] para que los grupos delictivos pudieran trabajar con esa impunidad, seguramente serían otras las condiciones, pero el Gobierno mexicano facilita a los grupos criminales que actúen en total impunidad. El Gobierno mexicano, como todos lo sabemos, es el más corrupto que existe en todo el hemisferio y obviamente no goza de ninguna credibilidad”, dijo Emilio en la entrevista con DN!.

El Comité para la Protección de los Periodistas informó que México es el país con mayor cantidad de periodistas asesinados explícitamente en represalia por su trabajo. La semana pasada, el periodista Gumaro Pérez Aguinaldo fue asesinado en el sureño estado de Veracruz. Recibió varios disparos de arma de fuego mientras asistía a un desfile de Navidad en la escuela de su hijo. Es al menos el periodista número 12 en ser asesinado en México en este año.

El viernes anterior al día de Navidad, Bill McCarren, director ejecutivo del Club Nacional de Prensa de Washington DC y Beto O’Rourke, congresista demócrata de Texas, se reunieron con Emilio y Oscar en el centro de detención del ICE en El Paso, y luego se reunieron con William Joyce, director interino de la oficina local del ICE en El Paso, y con el consejero principal local del ICE , Elias Gastelo, para solicitar la liberación de Emilio y Oscar. Además de la prueba fehaciente de la frecuencia con la que ocurren asesinatos de periodistas en México, McCarren presentó una petición con 18.000 firmas recogidas a lo largo de Estados Unidos, que exige la liberación de Emilio y Oscar. Según McCarren, el consejero principal Gastelo los instó a “bajar el tono”. McCarren lo interpretó como que deberían realizar su campaña de apoyo a Emilio de manera menos visible. El líder del Club Nacional de Prensa expresó: “Estamos aquí para arrojar luz cuando creemos que alguien fue detenido arbitrariamente. Es nuestro trabajo asegurarnos de que todos sepan su nombre”.

El miércoles, la Junta de Apelaciones de Inmigración de Estados Unidos les otorgó a Emilio y Oscar una suspensión completa de su orden de deportación. El caso se va a trasladar de la región fronteriza de Texas a Virginia, donde los defensores de Emilio esperan que su grave situación reciba la debida consideración. Además, su equipo legal solicita que sean puestos en libertad inmediatamente mientras esperan la apelación.

Incluso en Estados Unidos, donde la libertad de prensa está consagrada en la misma Constitución, el clima para el trabajo periodístico ha empeorado tanto que una coalición de organizaciones lideradas por la Fundación por la libertad de prensa ha organizado el Índice de Libertad de Prensa de Estados Unidos. Este índice tiene como objetivo “proveer el acceso confiable y fácil a la información sobre la cifra de violaciones a la libertad de prensa en Estados Unidos; situaciones tales como periodistas que enfrentan cargos, periodistas detenidos en la frontera de Estados Unidos, o que les hayan pedido que entregaran sus dispositivos electrónicos”.

El periodismo es una profesión inaceptablemente peligrosa en todo el mundo. La democracia depende de la existencia de una prensa libre fuerte, y está en todos nosotros exigirla y defenderla.

Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=236073&titular=emilio-guti%E9rrez-soto-y-la-lucha-por-la-protecci%F3n-de-los-periodistas-

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Reír sin dejar de pensar

Por: Fernando Buen Abad Dominguez

Aunque los territorios de sus frecuentaciones filosóficas, literarias y musicales, son siempre recorridos con respeto meticuloso, Dolina se las ingenia para ser un “irreverente” de la inteligencia que imbrica su sentido del humor con una lista larga de cualidades creadoras en las que reír no es enemigo pensar. Rara avis.

Algunos creen que es muy fácil hacer humor en Argentina (patria de Dolina). Que las fuentes del cliché en la “melancolía”, lo “trágico” y la pesadumbre “tanguera” o “gaucha”, son caldo propicio para la comedia o que todo invita a la risa súbita por escuchar “relatos de la vida” tratados (a veces) como relatos futboleros… pero no. En la historia del sentido del humor argentino hubo y hay todo tipo de versiones y perversiones que, en búsqueda de risas y sonrisas, transitan los más escalofriantes y diversos devaneos ideológicos. Y no faltan quienes creen que siendo chistosos “todo se perdona”. Ahí están, en esa Historia, los más machistas y los más racistas; ahí están los más pesimistas y los más surrealistas. Con dictaduras o sin ellas, hay humoristas del teatro, televisión y cine… de la gráfica periodística, la caricatura y de no pocas revistas emblemáticas. No se consignarán aquí los nombres. Hay trabajadores del humor empeñados en cultivarlo como fuerza humana dignificante y hay parásitos de la banalidad empecinados en hacer de la burla, el escarnio y el linchamiento cultural un negocio “chistoso”. Tampoco se los nombrará aquí. ¿Se puede decir lo mismo de cualquier país?

Entre todas esas categorías de distingue, porque se distancia, la excepción que marca Dolina que no es un “humorista” ni es un cuenta chistes. Se distingue porque sus móviles están lejos de agotarse en la risita o en la risotada (aunque las provoque). Se distancia porque se ha empeñado en invitar a pensar de modos diversos los más diversos temas. Su “base de operaciones” es lo que él llama “La Venganza será Terrible”, programa de radio que remonta varios centenares de transmisiones y varios lustros. Más de una emisión completa puede ser escuchada y vista en YouTube o en alguna de las “redes sociales” que también publican transcripciones de las emisiones radiales.

Esa versión del humor cultivada por Dolina, da cita a coartadas narrativas múltiples sometidas al rigor de la improvisación y la libertad creativa. Tal cual. Todo eso cimentado en una cultura general amplísima y un culto riguroso al respeto por la inteligencia del destinatario. No hay chabacanería involuntaria, todo está calculado, ni hay anarquía del desmadre. Temas, tiempos y profundidades conceptuales se ciñen al requisito sistemático de la inteligibilidad que no supone inferioridad del interlocutor ni supone superioridad del que actúa lo que sabe a sabiendas de que realmente sabe. Lo dicho rara avis.

Y todo eso ocurre en un tono delicioso que cuida su vocabulario mientras lo barniza con acentos de “compadrito” o con retruécanos gauchescos. Todo eso ocurre entre erudiciones (algunas de ellas tangueras) y franca ignorancia sincera que no se disfraza ni se maquilla porque funge como un actor más en el escenario del juego placentero que hace de la Cultura, en su sentido más amplio, un entretenimiento no ofensivo. Sin didactismos petulantes. Todo con sello argentino o quizá rioplatense. Brilla con poder propio el dominio de la Dialéctica que haría las delicias de Hegel.

Pero especialmente es un lujo de matices. A cada aparente generalidad le acompaña toda suerte de advertencias, directas o indirectas, todo género de precisiones y salvedades que esculpen “la parte conceptual” (que es todo) para eludir la bravata epistemológica de las generalizaciones bobas. Así el juego de palabras es una casa de espejos en los que nunca falta la nota aclaratoria, el “pie de página” que distingue una afirmación general de sus sentidos relativos. Y siempre con humor inteligente y siempre inteligible. En esas condiciones se adentra en exploraciones filosóficas o históricas, en chismes de barrio o en “manuales del usuario” que le sirven de plataforma para suscitar una comunidad de sentido basada en el humor. He ahí el carácter espléndido en las reglas de su juego. Ausente, desde luego, en este intento de descripción.

Cuenta Dolina con un grupo de trabajo -colaborador y cómplice- que lo acompaña “en escena”, y fuera de ella. Grupo que se multiplica por cientos cuando la emisión radiofónica suma al “público en la sala” con radioescuchas fieles a la ubicuidad del programa y a la velocidad de sus contenidos. Es, lo dicho, una comunidad de sentido que juega con el saber y con la “ignorancia” una apuesta exquisita que nos incluye a todos. Dolina y su equipo actúan, cantan, leen mensajes del público, disertan, desertan, desarman y rearman capítulos enteros de la Cultura… para espejar un modo de ser y vivir la realidad que les tocó vivir como argentinos y como coautores de la experiencia común que construye ese peculiar derecho social que es el derecho al humor inteligente. Derecho mayormente mancillado o cancelado.

No es un espacio fácil de crear ni de mantener. A lo largo de su historia “La Venganza será Terrible”, con sus antecedentes y sus consecuencias, cuenta altibajos que son, todos, similares al propia obra de Alejandro Dolina [1] . Lo saben muy bien sus seguidores que conforman una feligresía que vive y entiende lo popular de una manera especial e irrefutable. La vida misma. De ahí se alimenta esa experiencia de Cultura y Comunicación que es la obra de Dolina, rigurosamente capaz de sintetizar las constelaciones y aventuras de los Dioses Griegos con las anécdotas de los barrios; algunos capítulos enciclopédicos y los anecdotarios futbolísticos más diversos.

Es falso que hablar del humor seriamente sea lo mas aburrido, o lo más petulante. Es falso que el cultivo del humor dependa sólo de la “gracia” que se tenga o de un misterio extraterrestre asimilado por alguna virtud extravagante. El humor es también una táctica y una estrategia narrativa que en manos de Dolina se rehúsa a las bagatelas léxicas o conceptuales recurrentes en el argot mediático, científico o académico. Por eso se agradece el trabajo que se esmera en respetar la inteligencia no como una dádiva de clase o distintivo de status, sino como una necesidad y un derecho, cada día más acosados, y del que los pueblos tienen “hambre”. A eso nos da otra lectura a “La Venganza será Terrible”. Porque será.

Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=237506&titular=re%EDr-sin-dejar-de-pensar-

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La estrategia del 1% y la nuestra

Por: Raúl Zibechi

Los datos de los días recientes iluminan la estrategia del 1 por ciento más rico de la humanidad. Los medios divulgaron hacia finales de enero un estudio de Oxfam, donde se asegura que de toda la riqueza generada en 2017 en el mundo, 82 por ciento quedó en manos del 1 por ciento más rico, mientras la mitad de la población no recibió absolutamente nada. La economía funciona apenas para beneficiar a una ínfima minoría que concentra cada vez más poder (goo.gl/qZwgNJ).

El segundo dato proviene del Foro de Davos, donde se reúne el sector que representa los intereses del 1 por ciento. Todas las crónicas aseguran que los CEOS de las multinacionales y los hombres (hay pocas mujeres) más poderosos del mundo, estaban felices y convirtieron el encuentro anual en los Alpes suizos en una verdadera fiesta. Casi todos llegaron en jets privados; por los cuatro días de encuentros y conferencias y el acceso a las sesiones privadas pagaron 245 mil dólares (goo.gl/UBSLLa).

Realmente, tienen razones de sobra para estar felices. Las cosas, sus cosas, marchan de maravilla. Las cotizaciones en la bolsa de Wall Street se multiplicaron por tres desde la crisis de 2008. El índice Dow Jones estaba en 8 mil puntos durante 2009 y estos días cotiza a 26 mil. Una escalada permanente, aunque las economías están estancadas o apenas crecen. No hay ningún dato de la economía real que respalde el crecimiento exponencial de las bolsas, lo que muestra su desconexión con la producción y su conversión en meros casinos.

Los datos que muestran el acaparamiento de riqueza nos descubren la estrategia silenciosa del 1 por ciento. Más de 80 por ciento de la riqueza que se genera en el mundo es para ellos. Alrededor de 20 por ciento va para casi la mitad de la humanidad, esa que se mira en el espejo de la riqueza y aspira, con o sin sentido, a estar cerca de los más ricos esperando que se les caigan algunas migajas. Para la otra mitad, nada, no hay futuro, sólo pobreza y represión.

La dominación siempre busca apoyarse en tres patas: las clases dominantes, las clases medias y los sectores populares. El arte de la dominación siempre ha sido sostenerse con base en la hegemonía, que se consigue ofreciendo un lugar a los sectores medios y venderle la ilusión de progreso a los de más abajo.

En los periodos de oro del capitalismo, entre el fin de la Segunda Guerra Mundial y la crisis del socialismo real (1945 a 1991, aproximadamente), la sociedad funcionaba integrando a los trabajadores mediante el salario estable con plenos derechos. Eso les permitía obtener seguridad para sus familias, que esperaban (y a menudo conseguían) el tan soñado ascenso social. Las clases medias ya estaban en una posición más o menos confortable. Fueron los años del desarrollismo y la cultura del consumo.

Esa estrategia fracasó, por varias razones: rebeliones descolonizadoras en el tercer mundo; rebeliones fabriles contra el trabajo opresivo en el primer mundo; rechazo del patriarcado y el machismo por las mujeres en todo el mundo, rebeliones juveniles en las grandes urbes; ocupación masiva de las ciudades por oleadas de campesinos migrantes, y varias revoluciones como la cubana, la vietnamita y la de los guardias rojos chinos, entre muchas otras.

Lo cierto es que la clase dominante comenzó a replegarse sobre sí misma, a construir murallas para defender sus intereses y a desentenderse del resto de la humanidad, en particular del 50 por ciento más pobre y, a veces, más rebelde. Dejó de lado la integración de los trabajadores, estrategia que había urdido para neutralizar la onda expansiva de la revolución rusa (1917).

Ahora, el 1 por ciento enarbola una estrategia que consiste en reducir la población del planeta a la mitad, como señalan algunos estudiosos del Club de Bilderberg, otro espacio de los más ricos (goo.gl/C2mcdS). Es cierto que son especulaciones más o menos fundadas, porque el 1 por ciento no se arriesga a publicitar sus intenciones, como no lo hacen cada vez que deciden emprender un genocidio contra los sectores populares.

Esa estrategia viene endulzada, como diría León Felipe, con cuentos. Los gritos de angustia y los llantos, escribe el poeta, los ahogan con cuentos. Uno de esos cuentos, el más terrible por eficiente, son las promesas de derechos, ciudadanía y respeto de la voluntad popular. El sistema político brasileño es un cadáver pudriéndose a cielo abierto, sostiene un analista luego de la condena a Lula (goo.gl/ZUqhr4). Quizá por eso la bolsa de Sao Paulo bate todos los récords.

Una de las tácticas preferidas de la estrategia del 1 por ciento es el fraude electoral. Hay tres tipos, según dice la experiencia. El fraude posterior al voto, como sucedió recientemente en Honduras. El fraude antes, durante y después de la emisión del voto, técnica que se aplica en México desde 1988, por lo menos. La tercera es aceptar al vencedor y luego sobornarlo y/o amenazarlo de muerte. Esto es lo que sucedió en Grecia, según Yanis Varoufakis, el ex ministro de Syriza quien lo vivió desde dentro.

Hay más técnicas para asegurar el poder de los poderosos, siendo el golpe de Estado con genocidio (como en Chile y Argentina, entre otras) las más extremas. Lo que está claro es que el 1 por ciento se ha blindado: tiene el poder del dinero, de las armas legales, las ilegales y de los medios. Cada día acumula más poder.

Es evidente que, hoy por hoy, no los podemos derrotar, ni por las malas ni por las buenas. ¿Entonces? El problema somos los y las de abajo, porque depende de nosotros y de nosotras el seguir creyendo en los cuentos de arriba. Cuentos que tuvieron cierta credibilidad cuando el sistema aspiraba a integrarnos. El problema consiste en seguir confiando en estrategias insostenibles, porque ya no existen las bases materiales y sociales que las hicieron posible.

Como no nos vamos a rendir, el camino debe ser construir lo nuevo. Para sobrevivir en la tormenta, no tenemos otra opción que construir dos, tres, muchas Arcas de Noé (como decía el Che respecto de Vietnam). Espacios de autonomía para afrontar el colapso que nos descerrajan los de arriba.

Fuente: http://www.jornada.unam.mx/2018/02/02/opinion/019a1pol

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Ideas para la democratización del SNTE

*Rogelio Alonso

La democracia, como es bien sabido, no se limita únicamente al ámbito de elección de alguna autoridad o representante, sino que va más allá: debería permear en el funcionamiento de la estructura misma de una organización. El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), sin duda, debe pulir muchos elementos tanto de sus procesos electorales, como de la dinámica misma de la organización. Para reflexionar sobre ello, en cuanto al primer aspecto, se retomará la forma en que se eligen a los Comités Ejecutivos Seccionales, mientras que en el segundo, el papel de los Representantes de Escuela y los Comités Ejecutivos Delegacionales.
En cuestión electoral, las prácticas del SNTE tienen que buscar la manera de perfeccionar dos aspectos: la forma en que se emiten los sufragios y el valor que tiene cada uno de ellos. Hay una situación que ilustra ampliamente el primer aspecto: los miembros de un Comité Ejecutivo Seccional saliente tienen derecho a participar y votar individualmente en el congreso en el que se elige a la nueva dirigencia sindical, por el contrario, el resto del magisterio tiene que depositar sus intenciones electorales en un intermediario: un comité delegacional. Así pues, los miembros de los Comités Ejecutivos Seccionales tienen el privilegio de sufragar directamente, mientras que el resto del magisterio tiene que hacerlo de manera indirecta a través de un intermediario.
El depósito de las intenciones de voto en un delegado puede traer además otro riesgo. En términos democráticos, existe un vicio al cual se le conoce como “tiranía de las mayorías”: cuando los intereses de las mayorías se imponen, anteponiendo precisamente el principio de las mayorías, pero además, someten y erradican a los de las minorías. Algo similar sucede cuando los trabajadores eligen delegados para que sean ellos quienes con su voto representen sus intenciones. Esto trae consigo un riesgo inminente para la democracia sindical: la intrascendencia de los intereses electorales diferentes a los del conjunto de delegados. Así pues, sólo por ejemplificar, puede que en una delegación de 500 trabajadores, 200 no simpaticen con las preferencias electorales de los delegados y, al votar éstos en función de lo que diga la mayoría de su delegación, los 200 trabajadores en cuestión (que fungen como minoría) serán ignorados electoralmente. De este modo, las prácticas electorales sindicales, en algunos de sus niveles, favorecen prácticas tiránicas de las mayorías.
Como se mencionó anteriormente, las prácticas electorales del SNTE también, en algunos niveles, representan un agravio a un principio democrático elemental: la igualdad en el valor de los sufragios. Así pues, por ejemplo, en las elecciones de los nuevos Comités Ejecutivos Seccionales, las intenciones electorales de un miembro del comité saliente tiene valor de un voto, mientras que la del resto del magisterio, se aglutinan en un voto depositado por el delegado o conjunto de delegados.   De este modo, surge un cuestionamiento evidente: ¿por qué la intención de un miembro del Comité vale un voto, mientras que la intención de decenas de maestros tiene el mismo valor al ser emitida por el voto de un delegado o un conjunto de delegados? De este modo, se puede decir que en algunas prácticas electorales sindicales (no en todas), el voto de algún integrante del Comité Seccional tiene un valor infinitamente superior al de un profesor de la base.
La situación anterior deriva además en una condición poco favorable para la vida democrática: dificultades para suscitar procesos de alternancia. Al tener un peso mayor el de los integrantes de los miembros de los Comités Ejecutivos Seccionales salientes, quienes tienen pase directo a los congresos extraordinarios para elección de autoridades sindicales y votan de manera individual y directa, es evidente que tienen mayor trascendencia en la decisión electoral que la organización tome. De esta manera, el interés de este grupo tendrá mayor peso en las urnas que el de los trabajadores de la base, lo que lógicamente podría traer consigo la continuidad excesiva en los puestos de gobierno sindical por personas afines a un mismo grupo. Los sanos procesos de alternancia de una institución democrática, sin duda se pudieran alcanzar, entre otros factores, mediante la práctica del voto individual y directo en la elección de las más altas jerarquías de gobierno sindical.
Uno de los pilares de la democracia es la participación activa de la mayor cantidad posible de los miembros de una organización, de modo que el diálogo, las decisiones y las acciones no siempre estén centralizadas en las altas jerarquías de gobierno sindical. En cuanto a esto, vale la pena que la dinámica organizacional del SNTE revitalice dos instancias básicas: los Representantes de Escuela y los Comités Ejecutivos Delegacionales. En cuanto a los primeros, actualmente algunos miembros del Comité Ejecutivo Seccional han usurpado algunas de las atribuciones que de acuerdo al Estatuto vigente de la organización tienen los representantes de centros escolares, tales como servir de enlace entre sus representados y los órganos de gobierno sindical. Aunado, a lo anterior, se han descuidado y, en algunos casos, prácticamente olvidado, algunas funciones trascendentales de los Representantes de Escuela, tales como la participación en reuniones bimestrales con sus homólogos de otros planteles y el Comité Ejecutivo Seccional, además de celebrar reuniones de trabajo con sus compañeros de plantel.
En relación a los Comités Ejecutivos Delegacionales, desafortunadamente su participación en el funcionamiento de la organización se ha ido limitando hasta, en algunos lamentables casos, servir únicamente para la organización de eventos sociales. En algunos casos, esta instancia sindical ha dejado de ejercer facultades importantes que le adjudican el Estatuto sindical, tales como la atención y trámite de asuntos y conflictos de trabajo, la gestión de plazas, prestaciones laborales y profesionales destinadas a los miembros de la Delegación, la creación de grupos de estudio, culturales o científicos, la demande de la eficiencia de los servicios médicos para los miembros de la agrupación, etc. Así pues, se observa que, contrario a los principios democráticos, las facultades importantes de algunas instancias de la organización sindical, tales como los Representantes de Escuela y los Comités Ejecutivos Delegacionales, han sido arrebatadas por miembros de la misma organización sindical. La vida democrática y la participación dentro de la dinámica organizacional del SNTE no debe iniciar desde las más altas jerarquías, sino a la inversa, debiendo replantearse de modo que las instancias de representación más cercanas a las bases tengan una trascendencia real en el funcionamiento de la organización.
En suma, considerando situaciones como las que en este escrito se han enunciado, es evidente que si se pretende hablar de un sindicato democrático, el SNTE debe subsanar algunas prácticas que impiden una democratización plena de la organización. Lo anterior sin duda pasaría no sólo por la modificación de los estatutos sindicales, sino, además, por la vigorización de los ya existentes. En materia electoral, deben buscarse los mecanismos para hacer que el voto individual y directo de cada miembro de la organización sea el vehículo para la elección de autoridades sindicales de alta jerarquía.  Si bien la figura de un delegado es –o debería ser– importante en diversas tareas sindicales, no debería ser el depositario de los votos de la base, pues éstos se simplifican en un solo sufragio perdiendo drásticamente su valor matemático y, además, corriendo el riesgo de contaminación de los intereses de las mayorías.  Al practicar el sufragio individual y directo, se estaría también eludiendo uno de los efectos negativos de la vida democrática: la tiranía de las mayorías, es decir, la relegación de quienes piensan diferente a los grupos mayoritarios.
En cuanto al funcionamiento de la organización sindical se deben fortalecer y hacer valer las facultades que tienen las diferentes instancias de representación, sobre todo aquellas más cercanas a las bases, tales como los Representantes de Escuela y los Comités Ejecutivos Delegacionales. De esta manera, al ampliar las posibilidades de acción para más actores, sin duda la vida democrática del sindicato se acrecentaría, evitando la centralización del diálogo y la toma de decisiones en los más altos puestos de gobierno y así generando un mayor interés de la base en el acontecer de la vida sindical.
*Rogelio Javier Alonso Ruiz. Docente colimense de Educación Primaria (Esc. Prim. Distribuidores Nissan No. 61 T.V.) y de Educación Superior (Instituto Superior de Educación Normal del Estado de Colima). Licenciado en Educación Primaria y Maestro en Pedagogía. 
Twitter: @proferoger85
REFERENCIAS
SNTE. Estatuto. México: Autor, 2013.
Fuente del Artículo:
http://www.educacionfutura.org/ideas-para-la-democratizacion-del-snte/
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La reforma educativa de ARENA y el descalabro de la educación nacional

Dr. Luis Armando González

El Salvador

luisinde61@gmail.com

En 1995, a partir de la Propuesta de la Comisión Nacional de Educación, Ciencia y Desarrollo, el gobierno de Armando Calderón Sol (1994-1999) dio inicio a una reforma educativa que llevó al descalabro educativo en El Salvador. Traicionando los ideales humanistas y críticos contenidos en la mencionada propuesta, la reforma tomó un decidido cauce neoliberal, con lo cual se cumplía el propósito de los grupos empresariales emergentes en la postguerra –los “ricos más ricos de El Salvador”—, y sus representantes políticos en ARENA— de poner al sistema educativo en función de un modelo económico terciarizado, maquilero y remesero.

Para imponer este modelo económico era necesaria una  reforma económica que se hizo, naturalmente, según los lineamientos del “Consenso de Washington”; también era necesaria una reforma educativa que formara no sólo a quienes desempeñarían las tareas laborales requeridas por ese modelo económico, sino a los “consumidores” de los bienes y servicios generados por éste. Como ganancia adicional, se debilitaría la organización del magisterio –ANDES 21 de Junio–, fraccionando su quehacer gremial y despolitizando sus demandas.

Desde sus inicios, el enfoque economicista se impuso en la reforma educativa; un economicismo –nutrido del paradigma neoliberal— que impregnó tanto sus objetivos –estar en función del nuevo modelo económico— como la filosofía de la educación, los conceptos, creencias, valores y prácticas pedagógicas y didácticas.

Las consecuencias educativas de ese proceder fueron desastrosas. Prácticamente, todos los ejes vitales del sistema educativo fueron drásticamente erosionados desde 1995 hasta 2009: a) deterioro de la infraestructura de la educación pública; b) precaria formación docente (inicial y en servicio); c) debilitamiento de la calidad de la educación en sus componentes científicos, filosóficos, literarios y éticos; d) precarización y desprestigio de la profesión docente; y e) quiebre de la función de la educación como mecanismo de integración social y cultural.

En la medida en que la educación pública se descalabraba, la derecha empresarial, política y mediática promovía la mercantilización de la educación, lo cual se tradujo en la privatización creciente de la oferta educativa, que pasó a convertirse en un negocio redondo desde los niveles parvularios hasta la educación superior.

En fin, la reforma educativa de la derecha lo que dejó al país fue una educación publica en abandono, un mercantilismo educativo cuyo fin exclusivo es la rentabilidad, el mito de que la educación privada es superior a la pública, una cultura educativa anclada en el éxito fácil, el didactismo, la anulación de la ciudadanía (los alumnos y sus familias vistos como clientes), unas expectativas consumistas infladas y un ahogamiento de las capacidades intelectuales, científicas, filosóficas y éticas, en los alumnos y, en general, en la sociedad.

Fue esa educación descalabrada por la derecha la que heredó el primer gobierno del FMLN en 2009. No se trataba, por lo que se ha apuntado, de fallas menores o incluso de una falla en particular: la reforma educativa de ARENA afectó negativamente los ejes fundamentales del sistema educativo. Y para superar ese descalabro se hacía (y se hace) preciso  atender cada de uno de esos ejes, lo cual requería (y requiere), además de tiempo, importantes recursos financieros de lo cuales no se ha dispuesto desde 2009, aunque más agudamente desde 2014.

Y es que, en  la gestión de gobierno del Presidente Salvador Sánchez Cerén, el fortalecimiento de la educación nacional es una de las principales prioridades. Esto ha supuesto, para este gobierno, atender el descalabro educativo causado por ARENA, y sus socios en la reforma educativa, por diferentes flancos. Uno, vital, es la formación de los maestros en servicio, convertida en foco de atención por el gobierno anterior y cuando el Presidente Sánchez Cerén fungía como Ministro de Educación. Otro eje atendido es la inclusión educativa, mediante los programas de paquetes escolares y alimentación escolar. Un tercer eje es la dignificación docente que ha sido reivindicada, más allá de aspectos económicos, a través del diálogo franco y abierto entre las autoridades de gobierno y el magisterio. Un cuarto eje, dificil de atender dadas las estrecheces financieras del gobierno, es la infraestrucura educativa, la cual ha sido potenciada incluso con tecnología para Internet. Un quinto eje, relacionado con el anterior, es el acceso a tecnologías de la Información y la Comunicación orientadas a favorecer  el proceso educativo. Y, por último, el eje de la calidad de la educación, para lo cual se está apostando por el cultivo de un conocimiento crítico, científico, filosófico y literario, la ética y el compromiso con la realidad nacional.

Como se ve, son varios los frentes de ataque que se han abierto para revetir el descalabro educativo causado por la derecha desde 1995 hasta 2009. En algunos de ellos se ha avanzado más que en otros. Eso es inevitable, dada la envergadura de las tareas a realizar en cada uno de ellos y dada las limitaciones financieras con las que ha tenido que lidiar este gobierno. Quizás si se hubieran puesto todos lo empeños en uno sólo de los ejes los resultados, para el mismo, serían a estas alturas absolutamente sarisfactorios, pero el asunto es que el sistema educativo no descansa sólo en un eje: es como si las cuatro patas de una mesa estuvieran deterioradas al extremo y se gastaran todas las energías en reparar sólo una.

Siguiendo con la imagen de la mesa, las cinco patas de la educación nacional (formación docente, infraestructura educativa, calidad de la educación, dignificación docente y funciones integradoras de la educación) fueron erosionadas drásticamente por la reforma educativa de ARENA. El segundo gobierno del FMLN, encabezado por el Presidente Salvador Sánchez Cerén, está empeñado no sólo en reparar esas cinco patas, sino en añadirle otras patas más a nuestro sistema educativo. Puesta la mirada en el futuro inmediato, nuestro país estaría preparado para una nueva reforma educativa, a partir de la cual se institucionalice el andamiaje educativo, inclusivo, crítico, científico y humanista, que se ha venido afianzando a partir de 2014.

Fuente del Artículo:

https://www.alainet.org/es/articulo/190704

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