Saltar al contenido principal
Page 206 of 454
1 204 205 206 207 208 454

Entrevista a Gonzalo Pontón sobre La lucha por la desigualdad (I)

Entrevista a Gonzalo Pontón
Por: Salvador LópezArnal
“Había mucha luz en las casas de los ‘ilustrados’, pero las chozas y las viviendas de los pobres seguirían a oscuras durante muchos años”
Presentación: Gonzalo Pontón (Barcelona, 1944) es licenciado en Historia Moderna y Contemporánea por la UB. A los veinte años se incorporó a la editorial Ariel y ha sido fundador de las editoriales Crítica (1976) y Pasado & Presente (2011). Se calcula que a lo largo de 50 años, ha publicado más de dos mil títulos, de los cuales unos mil son libros de historia. En 2016 publicó su primer libro: La lucha por la desigualdad que sido Premio Nacional de Ensayo de 2017 otorgado por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte.

Déjeme darle mi más sincera enhorabuena por su libro, por su grandísimo libro (que incluye una cronología magistral). 776 páginas, casi 40 páginas de bibliografía comentada, innumerables notas… ¿Cuánto tiempo ha dedicado a la investigación y escritura de su libro? ¿Desde cuándo lo tenía en mente?

Entre 2009 (fecha de mi jubilación oficial) y 2011 dispuse de dos años, vamos a llamarlos sabáticos, durante los cuales trabajé intensamente, y obsesivamente, en investigar las fuentes de mi tema -la heurística-. Luego necesité cinco años más, no tan acuciantes, para redactar La lucha por ladesigualdad. Una historia del mundo occidental en el siglo XVIII.

De los más de dos mil libros que ha publicado a lo largo de 50 años de trabajo editorial, la mitad son libros de historia. ¿Por qué ese interés tan acentuado por la historia? ¿No le importan tanto la filosofía, la literatura, la biología o las ciencias formales por ejemplo? ¿No tienen tanta importancia para saber a qué atenernos en el mundo de hoy?

El lema de Crítica –su programa- al iniciar su andadura, en 1976, era: “Esta editorial, que pretende contribuir a la formación de una cultura crítica, quiere poner al alcance de todos, junto a obras clásicas todavía vigentes, lo más vivo y valioso del pensamiento contemporáneo”. Un vistazo al catálogo histórico de Crítica puede dar cuenta de si esos propósitos se han cumplido, o no. En cualquier caso, una buena parte de lo que he publicado ahí son colecciones, dirigidas por los mejores especialistas, sobre el conocimiento filosófico, político, económico, social, literario, científico y artístico. Otro tanto puedo decir de Pasado & Presente, donde he seguido publicando libros de esa misma temática, quizá aún con más intensidad, tratando de ser fiel al lema de esta editorial: “Pasado & Presente quiere ofrecer al lector las reflexiones más rigurosas sobre nuestro pasado (histórico, científico y cultural) y al mismo tiempo intervenir, con espíritu crítico y curioso, en el debate intelectual y moral del presente. Esto es, pensar el futuro”. Es cierto que en ambos textos programáticos sobrevuela la voluntad de un cierto historicismo, y es un hecho que debo haber publicado cerca de mil títulos de historia, seguramente por dos razones: primero, por mi propia formación académica y, después, por mi concepción de la historia como ciencia y como arma: para interpretar el mundo y para tratar de cambiarlo.

La lucha por la desigualdad es el título de su libro. ¿Quiénes lucharon por la desigualdad? ¿Con qué objetivos: más dinero, más riqueza, más poder político, voluntad de poder en estado puro?

Entiendo la lucha por la desigualdad en el contexto de la lucha de clases. Cuando la clase dominante ve peligrar su posición por la amenaza de las clases subalternas, utiliza todo el poder que puede conseguir para preservar sus privilegios y la injusticia de su dominio -su desigualdad-, que defenderá a muerte. Así, la aristocracia feudal contra la burguesía; la burguesía contra el proletariado.

El subtítulo del ensayo: “Una historia del mundo occidental en el siglo XVIII”. ¿Qué límites tiene ese mundo occidental al que hace referencia? ¿Por qué el siglo XVIII? ¿Qué tiene de especial ese siglo que solemos llamar el siglo de la Ilustración? ¿Por qué no los siglos de Bruno o Galileo?

La larga sombra del siglo XVIII se proyecta aún sobre el siglo XXI. En aquella época se produjo un salto cualitativo en los niveles de desigualdad europeos, un “equilibrio puntuado”, en términos evolutivos. Hasta entonces la desigualdad tenía bases esencialmente agrarias, las propias del régimen feudal, lo que la hacía permanente, pero estática. Tras la acumulación primitiva de capital que supuso un comercio cada vez más predatorio, el capitalismo inició un nuevo avatar: el manufacturero basado en el carbón y el algodón, los pilares de la Revolución industrial. A diferencia de lo que había ocurrido con el capitalismo comercial, este paso no requirió grandes inversiones, pero sí una mano de obra numerosa e indigente. La encontró en los campesinos, que los terratenientes habían desahuciado del campo, los artesanos de las ciudades, ahora proletarizados tras la destrucción de sus gremios, y en el saldo demográfico que llenaba las ciudades de miserables. La explotación de esa mano de obra cautiva, sobre todo de mujeres y niños, dentro del continente europeo, y la de los esclavos –negros y blancos— que extraían las materias primas en las colonias, fue inmisericorde, pero determinó el espectacular éxito económico de la burguesía.

Dueña del poder político y económico, la burguesía vio en el consumo de artículos y mercancías, que antes había sido exclusivo de la aristocracia feudal, la satisfacción de su éxito. Se lanzó entonces a un sistema de producción cuya única finalidad, como había establecido Adam Smith, era el consumo. Ese modelo económico desde el lado de la oferta, iniciado a finales del siglo XVIII pero que ha llegado a la exasperación en nuestros días, ha llevado a las clases subalternas a supeditar la vida a la consecución de los recursos económicos necesarios para sobrevivir en el capitalismo, a la abolición del ocio y a la renuncia a la educación y la cultura, pero también a la dilapidación, hasta entonces desconocida, de materias primas semielaboradas y a la extenuación de los recursos naturales del planeta, que es aún el modelo de sociedad en que vivimos hoy.

Con el fin de blindar su poder en el tiempo, la burguesía se dotó de referentes doctrinales que sancionaran su legitimidad sin que se alterara el orden social. Se alió entonces con los miembros más proclives del Antiguo régimen y con la intelligentsia, los “ilustrados”, para formar una elite de nuevo cuño que controlara los medios de comunicación y la opinión pública. Esta nueva elite estableció sus propios ámbitos de socialización en los que tejió una red de vínculos familiares, económicos y políticos que le permitió un acaparamiento de oportunidades y el acceso a una bolsa de valores de información privilegiada y exclusiva que impermeabilizó férreamente ante las clases subalternas. Para ello creó instituciones educativas específicas para sus miembros al tiempo que se oponía ferozmente a la alfabetización y escolarización de las clases subalternas, expulsándolas tanto de la formación no deseada como de la información privilegiada. No solo eso: acuñó un lenguaje específico -una “imagen manifiesta” (Dennett)- en contraposición a la realidad, que establecía en la conciencia colectiva una reverencia acrítica hacia las directrices de las elites que se presentaban no solo como infalibles, sino como las únicas posibles, ya que la sola alternativa era la “anarquía”.

Se consiguió, así, consolidar una desigualdad categórica: desigualdad económica, sí; pero también desigualdad intelectual: las dos mordazas del tambor con las que el capitalismo controla, todavía hoy, a la sociedad global.

El prólogo del libro lo ha escrito Josep Fontana. ¿Ha sido profesor, maestro suyo? ¿Qué papel cree usted que ha jugado el profesor Fontana en la historiografía española de estas últimas décadas?

Josep Fontana es, sin discusión, el mayor historiador español de la segunda mitad del siglo XX y de lo que llevamos del XXI. Su obra como historiador, tanto desde la cátedra como en la investigación, es de una amplitud, de una densidad y de una intensidad admirables. Desde sus trabajos sobre las bases económicas y fiscales de las sociedades del Antiguo régimen hasta sus más recientes y comprometidos libros de historia del siglo XX, pasando por sus abundantes reflexiones sobre el oficio de historiador y el papel de este en sociedades en crisis, el profesor Fontana ha conjugado el análisis histórico de sociedades pasadas con el destino de los hombres y mujeres de hoy para denunciar la explotación del hombre por el hombre y la necesidad de seguir luchando para construir un mundo mucho más justo e igualitario, es decir, más humano.

En el prólogo, el doctor Fontana comenta que usted ha construido una máquina de guerra “que desarrolla poderosamente” con el objetivo de demoler los mitos del siglo de las Luces. ¿Cuáles son los principales mitos que, en su opinión, rodean y envuelven al acaso mal llamado “siglo de las luces”?

Las “luces” es un vocablo usado desde el Renacimiento con la misma intención que en el siglo XVIII. No quiere decir nada más allá de que se opone a la pretendida oscuridad de la Edad Media (cf. Dark Ages). Pero bajo la advocación de “siglo de las Luces” se ampara la pretensión burguesa de haber abierto entonces las ventanas a la educación y al conocimiento. Es cierto, pero no es la verdad. “Para que la sociedad sea feliz, y la gente se sienta cómoda en las peores circunstancias, es necesario que existan muchas personas que, además de pobres, sean ignorantes”, escribía Bernard de Mandeville en los años veinte del siglo XVIII. Para luchar por su desigualdad, la burguesía creó instituciones educativas específicas para sus hijos y desdeñó la enseñanza de las viejas e inútiles universidades. Al mismo tiempo, se opuso ferozmente a la alfabetización y escolarización de las clases subalternas, especialmente las campesinas -un trabajo propio de las bestias de carga, según el ilustrado Forney- para que se mantuvieran en el lugar que les había asignado la divina providencia; es decir para que trabajaran sin descanso y para que no pusieran en cuestión el nuevo orden social burgués: “No hay arma más peligrosa que el conocimiento en manos del pueblo al que hay que engañar para que no rompa sus cadenas” (Philippon de la Madeleine).

Había mucha luz en las casas de los “ilustrados”, pero las chozas y las viviendas de los pobres seguirían a oscuras durante muchos años.

Abre usted su libro con una de Cervantes , Don Quijote de la Mancha, 2ª parte, capítulo XX. La copio: “¡A la barba de las habilidades de Basilio!, que tanto vales cuanto tienes, y tanto tienes cuanto vales. Dos linajes solos hay en el mundo, como decía una agüela mía, que son el tener y el no tener, aunque ella al de tener se atenía”. ¿Es una ley histórica universal? ¿Es la conjetura del Manifiesto formulada siglos antes y acaso con otro lenguaje? ¿No hay otra ni puede haber otra?

¿Qué eufemismo usa la lengua inglesa para no tener que decir ‘pobres’ y ‘ricos’?: Los ‘have’ y los ‘have-not’, los que tienen y los que no tienen. Los ‘have’ cada día tienen más y los ‘have-not’ cada día menos. No es una cuestión específica del siglo XVIII. Si en 2007, al empezar la gran recesión, 500 familias disponían de la misma riqueza que la mitad más pobre de la humanidad (3.500 millones de personas), en 2015 se habían reducido a 62 y en 2018 van a ser, quizás, una decena, cuyos nombres son bien conocidos: Jeff Bezos, Bill Gates, Warren Buffett, Amancio Ortega, Mark Zuckerberg, Bernard Arnault, Carlos Slim, Larry Ellison, Larry Page e Ingvar Kamprad, que han ganado, solo en 2017, 149.000 millones de dólares.

Hoy hay más de 1.000 millones de seres humanos que viven en la pobreza extrema; otros 500 millones ganan 1,5 $ al día; mueren seis millones de niños por falta de alimentos y medicamentos cada año y otros 125 millones están sin escolarizar.

En una entrevista de finales de 2017 usted señaló que cualquier opinión sobre un período político debe situarse en el contexto histórico. De acuerdo, muy de acuerdo. Si aplicamos su razonable observación al período que ha estudiado, ¿no es acaso demasiado crítico con el siglo de la Ilustración? ¿No es demasiado exigente cuando afirma (son sus palabras de cierre) que la Ilustración no fue un movimiento original y unitario, paneuropeo, destructor del cristianismo, padre de la democracia, defensor de la igualdad y redentor de los oprimidos? ¿No hay una parte de la Ilustración que sí que fue eso?

Creo que lo que yo he hecho en mi libro (o, por lo menos, he intentado hacer) ha sido precisamente situar la Ilustración en su contexto histórico, el contexto de las Revoluciones burguesas, y probar que la cultura que prevaleció fue la cultura de las clases hegemónicas. Los burgueses del siglo XVIII obtuvieron la cobertura intelectual que necesitaban de los intelectuales de su clase, no de improbables “intelectuales” plebeyos, que no existían. Los philosophes franceses, los economistas políticos británicos, los pietistas de Prusia, los cameralistas de Austria, los jurisdiccionalistas italianos y hasta algunos de los proyectistas españoles –es decir, los “ilustrados”– defendían sin fisuras una sociedad basada en la libertad, la propiedad, la jerarquía y el orden, dictada por Dios e inmutable en el tiempo. Como escribió Diderot –el más decente de todos los “ilustrados”—: “La sociedad será feliz si la libertad y la propiedad están garantizadas […] En la democracia, incluso en la más perfecta, la igualdad entre sus miembros es una quimera […] El populacho es demasiado estúpido, demasiado miserable y está demasiado ocupado como para ilustrarse”. Y como escribió Voltaire –el más indecente de todos ellos–: “Los hombres están divididos en dos clases, una la de los ricos que mandan y, otra, la de los pobres que sirven. El género humano no puede subsistir sin que haya una infinidad de hombres útiles que no posean absolutamente nada. […] El hombre común ha de ser dirigido, no educado: no merece serlo… Nueve de cada diez ciudadanos deben seguir siendo ignorantes, porque el vulgo no merece ser ilustrado y se le debe tratar como a los monos”.

Por lo demás, permítame insistir, si la Ilustración no fue eso, ¿qué fue entonces en su opinión?

Ya lo explicó Kant en ¿Qué es la Ilustración?, en diciembre de 1783, tan desgraciadamente, y tan parcialmente, traducido al castellano. El texto completo de Kant a la pregunta del pastor Johann Friedrich Zöllner se inscribe en una defensa de la libertad de opinión pública, es decir de la Öffentlichkeit burguesa. Según Kant, los hombres deben abandonar su falta de madurez y utilizar los conocimientos que ya tienen con independencia de lo que digan otros. El famoso Sapere aude! procede de Horacio y se halla en el contexto de una pulsión pragmática y utilitaria, con una apelación a no perder tiempo. Lo que hace Kant es lanzar un reto intelectual a todos aquellos que, disponiendo como disponen de los conocimientos de la Revolución científica, y de las obras filosóficas y económicas de su tiempo, no deben ignorarlas viviendo con la placidez de un rústico, sino que deben ponerse a la tarea sin pérdida de tiempo. ¿Qué tarea? La construcción de la sociedad burguesa, prescindiendo del mundo del Antiguo régimen, porque este no iba a cambiar por sí solo. La Ilustración se erigió, así, en el intelectual orgánico de la burguesía.

Voltaire, Montesquieu, D’Holbach, Locke, incluso Diderot y Rousseau componían una suerte de «gauche divine», según sus palabras, al compartir la misma conciencia de clase hegemónica. Le s horrorizaba, también son sus palabras, “que los niños campesinos fueran a la escuela y dejaran de labrar los campos, no sabían lo que es la solidaridad, apelaban más bien a una vaporosa fraternidad universal”. ¿No podríamos decir que también ellos hicieron o contribuyeron a hacer lo que podía hacerse y que no fue poco, lo mismo que usted ha comentado al hablar de nuestros años de transición en esa entrevista a la que hacía referencia anteriormente?

Empiezo por el final: a diferencia de lo que pasó en la transición (yo prefiero llamarla ‘transacción’), los ilustrados de toda Europa no vivían bajo la amenaza cierta de un golpe militar. Su mayor amenaza era la Iglesia católica (ni siquiera eso en los países protestantes), que no era despreciable, como explico en mi libro, pero que no tenía nada que hacer si el poder burgués del estado decidía intervenir. Sostengo que los que llamamos ilustrados dieron cobertura intelectual a la clase dominante (a la que casi todos pertenecían) y eso me parece totalmente razonable. Pero es radicalmente falso que no pudieran hacer otra cosa. Algunos intelectuales del siglo XVIII como Boulanger, Maréchal o Babeuf, en Francia; John Millar o Mary Wollstonecraft, en Gran Bretaña; Bergk o Erhard, en Alemania; Radicati, en Italia, Ramón Salas, en España, etc. se arriesgaron a perder la cátedra, la libertad e, incluso, la vida para defender una sociedad más justa, más culta, menos desigual. Todos ellos aparecen en mi libro, pero no en el repertorio heredado de la Ilustración que durante más de dos siglos nos ha brindado, sospechosamente, un relato casi sin fisuras sobre sus logros y los pretendidos valores universales que nos legaron sus autores. ¡Qué coincidencia que no aparezca ninguno de los que acabo de citar!. Justamente en línea con mi afirmación de que hay que situarse en el contexto de una época para analizarla, la propaganda burguesa lo ha hecho ignorando las realidades económicas y sociales del contexto en que aquellos intelectuales escribieron sus obras, separándolos de su tiempo en una iconografía exenta e ignorando los textos, los pasajes o los párrafos que no convenían porque desmienten de forma palmaria muchos de los méritos que han atribuido a aquellos intelectuales, hijos, al fin, de su tiempo y comprometidos con él.

Permítame insistir un poco más. ¿No fueron Marx, Engels, Jenny Marx, Bakunin y tantos otros, unos ilustrados heterodoxos? A ellos sí que les importaba que los niños campesinos fueran al colegio. Francisco Fernández Buey tal vez hubiera dicho de ellos que eran “algo más que ilustrados”.

Justamente Marx et alii demuestran lo que acabo de escribir. Todos ellos eran burgueses, como Boulanger, Millar o Erhardt, pero desclasados como ellos. Y no solo no ejercían de tales, sino que se rebelaban contra su clase. El mundo que quería construir Marx no era el de la revolución burguesa, sino el de la revolución proletaria. ¿Quién si no un burgués, con la formación y la educación burguesa, podía escribir El Capital? ¿Acaso hubiera podido hacerlo Helene Demuth, tal vez Friedrich Lessner?

No, no hubieran podido. Descansemos un momento si no le importa.

De acuerdo.

Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=241077&titular=%93hab%EDa-mucha-luz-en-las-casas-de-los-

Comparte este contenido:

Eduard Vallory: “La escuela tradicional es castradora, mata expectativas”

Eduard Vallory es el fundador de Escola Nova 21, una red de 480 colegios públicos y concertados de Cataluña unidos para modernizar la enseñanza

Para Eduard Vallory (Barcelona, 1971) el principal problema de las escuelas tradicionales es su lógica del silencio. Aulas en las que los alumnos asimilan los contenidos como verdades definitivas. «Ya lo dijo Hume, las verdades son provisionales, si no la ciencia no avanzaría», explica Vallory. En un entorno de verdades definitivas, o sabes o no sabes. Ese sistema conduce al estudiante a avergonzarse de la ignorancia y eso bloquea el aprendizaje.

Cuando le hablan de abandono escolar prematuro, Vallory lo entiende a la perfección. Durante años pensó que era incapaz. Repitió tres veces Bachillerato y estuvo a punto de dejar los estudios. Vivía un doble mundo: uno en el que su autoestima se hundía y otro en el que se sentía capaz de cualquier cosa. Los scouts le salvaron. Entró en la universidad con 22 años, sin conocimientos de inglés, y se graduó en Filosofía y Periodismo. Más tarde pasó por la Universidad de Chicago, por Cambridge y por la Universidad de Nueva York, todo ello gracias a diferentes becas y préstamos. Ahora es el director del Centro para la UNESCO de Cataluña.

Vallory, que participó hace unas semanas en el debate Aprendizaje: aula y neurociencia organizado por el think tank Aspen Institute y la Fundación La Caixa, ha conseguido algo insólito: unir a la escuela pública y a la concertada para que innoven juntas. Es el fundador de Escola Nova 21, una red de 480 colegios de Cataluña que se han unido para transformar el sistema educativo y darle la vuelta a las aulas tradicionales.
Pregunta. ¿Qué es lo primero que eliminaría del modelo de enseñanza actual?

Respuesta. No podemos perpetuar un sistema educativo que le dice a un niño de 12 años tú no vas a servir para nada. Es algo que sucede en muchos centros y que va en contra del mensaje que lanza la sociedad: independientemente de la situación que tengas en casa, ven a la escuela y sacaremos lo mejor de ti. La educación es obligatoria por un motivo y no podemos poner una etiqueta a un alumno de «no quiere aprender porque no le da la gana». Todos los niños tienen derecho a que les digan tú puedes hacer cosas fascinantes en tu vida. Si partimos de la base de que la escuela es selectiva, seguiremos dando por válido que hay estudiantes que estorban y les apartaremos para que no molesten.

P. ¿Cómo consiguió sentar a la pública y la concertada a trabajar juntas en una misma dirección?

R. El año y medio que pasé en la Universidad de Nueva York como profesor visitante me sirvió para hacer un parón en mi carrera y reflexionar. Visité escuelas de todo tipo: flexibles, creativas, más disciplinarias… A mi vuelta a Cataluña, empecé a pasar días enteros en colegios, solo haciendo preguntas y observando su modo de funcionar. En un año y medio visité unas 50. Me di cuenta de que a diferencia de lo que sucedió en Cataluña en la década de los 60 y los 70 con lo que se llamó Escola Nova, un movimiento cooperativo de escuelas innovadoras que bebían de la Institución Libre de Enseñanza, ahora no tenían esa fuerza. Así que les expliqué que aisladas no sobrevivirían y que para revolucionar el sistema había que hacerlo juntos. Teníamos que acabar con el mensaje de que hay escuelas buenas y malas.

P. Durante su visita a esos centros, en el caso de los públicos, se encontraría con profesores resistentes al cambio. No todos están dispuestos a cambiar de metodología.

R. Para garantizar proyectos educativos estables las escuelas tienen que ser autónomas, tener un proyecto educativo propio y un claustro que lo haga posible, y eso está contemplado en las leyes autonómicas de educación. El problema es el sistema funcionarial que tenemos, por el que todos los profesores son intercambiables. Han superado una oposición y se espera de ellos que expliquen exactamente lo mismo en todos los centros. Si tienes un centro innovador al que llegan 12 docentes nuevos cada curso, eso te destroza. Tienes que formarlos y algunos se oponen. Es el mito de Sísifo; permanentemente estamos subiendo la piedra y vuelve a caer. La sociedad tiene que saber que esto no es casualidad, es culpa de la incompetencia del diseño del sistema.

No puedes tratar a los niños como si fuesen productos equivalentes de una fábrica: no todos aprenden igual

P. La propagación de cambio, ¿depende más de la voluntad de la Administración o de los propios docentes?

R. El proyecto Escola Nova 21 empezó con 25 escuelas -de ellas 18 públicas- que consideramos modélicas. Allí los profesores daban formación a otros compañeros por iniciativa propia, era un movimiento autodidacta. Al final, son profesionales que se rebelan contra la escuela despersonalizada. La clave es que juntas desarrollen procesos de cambio y expliquen al resto de escuelas que si quieren cambiar pueden. Pero no solo depende de la voluntad de los profesores, sino de que la Administración no les ponga problemas. Si entendemos las escuelas como un entorno de verdades definitivas, es vergonzoso que tengan que cambiar, pero si damos valor al proceso de cambio, las escuelas que se plantean nuevas fórmulas tendrán buena reputación.

P. ¿Conoce algún ejemplo reciente en el que la Administración haya bloqueado el cambio?

R. El colegio público El Martinet, en Ripollet (Barcelona), es un ejemplo de innovación. Hace unos años les comunicaron que por los metros cuadrados de su patio, estaban obligados a instalar una pista de baloncesto. Ellos contestaron que tenían un polideportivo junto al centro y que no la necesitaban. Querían poner en marcha un proyecto de patio experimental, con menos uso de la pelota, y aún así les instalaron la pista. Se rebelaron y la cubrieron de tierra para llevar a cabo un diseño propio, y, de nuevo, les obligaron a retirarla. Es la antítesis de la autonomía de centro y del uso eficiente de los recursos. El mobiliario o el patio no son un capricho, sino una respuesta a una necesidad educativa. Al colegio concertado Montserrat le obligaron a comprar pupitres para poder hacer exámenes separados.

La Secundaria tiene que revolucionarse con el método socrático y científico, mucho más atrevido y potente

P. ¿Qué elementos de la escuela convencional no vamos a encontrar en los colegios de Escola Nova 21?

R. Tú no vales, tú eres un terremoto, siempre ensucias… son etiquetas que condenan. Las expectativas son determinantes. No es casualidad que hay un porcentaje tan bajo de niñas en el ámbito científico-tecnológico, a partir de los 10 años les dicen que ellas no sirven para eso. Tampoco es casualidad que si estás entre el 20% de los alumnos con un perfil socio económico más bajo, tengas seis veces más probabilidades de repetir curso que alguien con las mismas competencias pero más recursos en casa. La escuela es castradora, mata las expectativas. Otro rasgo es el docente aislado, se necesita el trabajo cooperativo de los maestros. Y por último la posición pasiva de los alumnos, tienen que construir conocimiento.

P. Estas escuelas, ¿siguen la filosofía de dejar que cada niño actúe según su instinto o abogan por poner límites a su conducta?

R. Depende de las edades. Si cuando tienen cuatro años el profesor quiere imponer el silencio, se va a encontrar con que solo puede hacerlo a través de la obediencia, que es la antítesis de la autorregulación. Lo primero es entender los procesos de desarrollo de los niños. Hay casos que pueden necesitar atenciones particulares. Un alumno que no habla, tiene que aprender a expresarse; uno que tiene un liderazgo muy fuerte, a modularlo en función del contexto. El problema es cuando se generaliza y se piensa: cuanto antes empiecen a obedecer, mejor. Pensar que todos los niños son iguales es un error. En el modelo industrial, no hay sitio para excepciones; todos aprenden lo mismo al mismo tiempo. No puedes tratar a los niños como si fuesen productos equivalentes de una fábrica.

P. Los colegios que innovan y las facultades de Educación no están avanzando al mismo ritmo. ¿Están trabajando en la modernización de los programas con la Universidad?

R. Necesitamos escuelas estrella, de referencia. Si todo el mundo es igual, no tienes ningún incentivo para cambiar. En países como Finlandia, las escuelas con un mayor enfoque en innovación son las que están formando a los futuros maestros; en esos centros es donde está la evidencia del avance. En España, las prácticas se hacen en colegios que no son ejemplares y que reproducen las dinámicas de hace 30 años. Para pasar del enfoque tradicional memorístico al competencial, hace falta inspiración. La Universitat de Vic y la UOC han puesto en marcha un programa experimental para profesores en activo en el que se trabaja sin asignaturas, por proyectos. Utiliza como referencia los colegios de la red Escola Nova 21. El máster en formación del profesorado de la Pompeu Fabra y la UOC también se está modificando con el objetivo de formar docentes que sean agentes del cambio.

P. ¿Cree que otras comunidades pueden poner en marcha un proyecto similar con las públicas y las concertadas? ¿Cuánta financiación requiere?

R. No es una cuestión de dinero, sino de voluntad. Detrás de Escola Nova 21 hay una alianza entre el centro UNESCO de Cataluña, la Fundación Jaume Bofill, la UOC, la Fundación La Caixa -que aporta 300.000 euros al año- y la Diputación de Barcelona -que aporta 100.000-. De las 480 escuelas, el 65% son públicas y el 35% concertadas. Ningún partido político se ha manifestado en contra y nos contactaron desde numerosos ayuntamientos para intergrarse en la red. La idea es que este proyecto pase a ser política pública y por eso el Consorcio de Educación de Barcelona (integrado por la Generalitat y el Ayuntamiento) ha creado la Red de Escuelas por el Cambio.

P. La educación Secundaria está muy enfocada a aprobar la Selectividad. ¿Qué cambios se pueden asumir con esa limitación?

R. En los institutos se sigue una lógica academicista de que todos los alumnos irán a la Universidad, y ese método de enseñanza tiene un impacto gigante en el abandono escolar prematuro -del 19% entre jóvenes de entre 18 y 24 años- y en las repeticiones de curso. La Secundaria tiene que empezar a revolucionarse con el método socrático y científico, mucho más atrevido y potente. Hay adolescentes con un potencial brutal que estamos desaprovechando. Hay que apostar por el trabajo cooperativo y no tener a los alumnos repitiendo conceptos como si estuviéramos en la época preinternet.

Fuente: https://elpais.com/economia/2018/03/15/actualidad/1521133990_416051.html?id_externo_rsoc=TW_CC

Comparte este contenido:

Entrevista Tracy Brabin: ‘Necesitamos devolver la alegría a la educación de los primeros años’

Con el cierre de guarderías y grandes recortes en el gasto, el sector de los primeros años es una ‘bomba de relojería’, dice el ministro de la sombra

Wuando la ex estrella de telenovelas de televisión y guionista convertido en Tracy-MP Brabin asumió el cargo de ministro de la sombra para los primeros años en julio pasado, sabía que no era una opción obvia para el papel. «No soy educador. No he venido de una formación política. Pero yo era un niño de cenas en la escuela libre y tengo mucho sentido común «.

A principios de este año, la diputada reveló que sufrió la falta de vivienda cuando era niña, después de que su familia perdiera su hogar y esperara que el consejo la reafiliera. Su padre era un trabajador de fábrica. La educación, dice, hizo una gran diferencia en su vida.

Brabin fue elegido diputado por Batley y Spen en una elección secundaria desencadenada por el asesinato de Jo Cox, quien se había hecho amiga después de que las dos mujeres tocaran juntas las puertas durante las elecciones generales de 2015.Cuando se conocieron, Brabin encontró a la mujer más joven impresionante. «Era una mujer increíble y extraordinaria.Pensé: «Dios mío, Batley y Spen tienen la maldita suerte de tenerla».

Ella vio a Cox como un campeón de causas cercanas a su corazón y pronunció su primer discurso político en la recaudación de fondos de Cox durante la campaña electoral. «Mi hermana es enfermera, mi madre es pensionista y mi sobrina es maestra. Eran sus electores y necesitaba saber que estaban a salvo «.

En ese momento, Brabin, quien nació en Batley y se educó en la escuela secundaria Heckmondwike, fue mejor conocida por su papel de Tricia Armstrong en Coronation Street a finales de la década de 1990. La primera persona de su familia en obtener un título, estudió drama en la Universidad de Loughborough e hizo una maestría en escritura de guiones en el London College of Communications, antes de escribir para Heartbeat, Hollyoaks y Shameless.

«Jo fue quien me dijo, Tracy, deberías pensar en hacer política».

Su cometido, los primeros años, es importante. En el momento en que los alumnos de entornos desfavorecidos abandonan la escuela secundaria, tienen 19,2 meses menos que sus pares más acaudalados, según muestra un informe reciente del Education Policy Institute [pdf] . Sin embargo, en los primeros años, la brecha es solo de 4.2 meses y múltiples estudios han indicado que las intervenciones en este punto tienen el potencial de reducir significativamente la brecha de logro a largo plazo.

Las guarderías deberían contratar graduados y ser dirigidas por un graduado, dice ella. Aumentar los salarios ayudaría.»Pero no se trata solo de salarios más altos. También necesitamos alentar la investigación y el desarrollo, y tener curiosidad acerca de las mejores prácticas. Necesitamos personal talentoso para que se le den oportunidades de autodesarrollo profesional «.

Esto será música para los oídos de los dueños de guarderías y cuidadores de niños, quienes han estado argumentando durante años que la financiación del sector por parte del gobierno es insuficiente.

Entre 2009 y 2016, las cifras del Instituto de Estudios Fiscales muestran que el gasto por alumno en los primeros años se redujo en aproximadamente un 17% en términos reales. Desde las elecciones de 2015, Ofsted informa que ha habido una pérdida neta de más de 1,000 viveros buenos o sobresalientes . Brabin está preocupado de que el sector de los primeros años esté en crisis: «una bomba de tiempo que hace tictac».

El Reino Unido está virtualmente solo en Europa occidental al proporcionar educación temprana a través del mercado, a pesar de que hay evidencia de que las guarderías provistas por el estado que emplean maestros capacitados aseguran mejores resultados a largo plazo para los niños.

En 2017, la Comisión de sueldos bajos [pdf] informó que uno de cada seis trabajadores en el sector de cuidado de niños recibe el salario mínimo y, como resultado, algunos entornos esperan cerrar después del aumento del salario mínimo este año. «Eso es una locura», dice Brabin. «Es un sector que ha sido infravalorado».

Ella ve los planes del gobierno para nuevas evaluaciones de referencia en la recepción como un paso atrás. «Hablando con los practicantes, parece bastante unánime que las evaluaciones iniciales no sean populares. Evaluar a todos los niños en un entorno en solo un día cuando podrían estar cansados ​​o enfermos parece ineficaz, cuando los adultos que los cuidan, día tras día, podrían estar mejor ubicados para juzgar las habilidades de cada niño. También hay un énfasis preocupante en matemáticas e inglés cuando la creatividad y el juego pueden ser poderosos indicios de capacidades entre los niños pequeños «.

A medida que los laboristas piden opiniones del público sobre cómo debería ser su propuesto Servicio Nacional de Educación, Brabin no quiere hablar sobre cómo su partido intenta abordar algunos de los temas más amplios: si debería eliminar gradualmente las escuelas de gramática, o qué la fiesta haría para aumentar la responsabilidad local en las academias, por ejemplo, aunque ella personalmente piensa que «la participación de la autoridad local en las escuelas es vital, absolutamente vital».

Ella también es reacia a decir exactamente cuánto más dinero invertiría el trabajo en los primeros años. Los planes detallados de política todavía están en «una etapa de desarrollo». «Por el momento, se trata de escuchar al sector y trabajar con los profesionales más exitosos».

Ella tiene un objetivo claro en mente. «Creo que la alegría ha sido eliminada del sector a causa de Ofsted y las calificaciones y los salarios y la presión de lo alto.Vamos a encontrar la alegría No se trata de dinero siempre, se trata de una calidad de positividad. Tenemos que confiar en que los practicantes de los primeros años sepan lo que están haciendo «.

Fuente: https://www.theguardian.com/education/2018/may/01/tracy-brabin-put-joy-back-into-early-years-education

Comparte este contenido:

La científica que reclama acercar los huertos a las aulas

Profesora de las que no quedan. Elisabeth Rodríguez Acevedo creó un club de científico en una escuela de Perú. Allí desarrolló, en 2002, lo que hoy se llama pedagogía por proyectos. Ella montó el aula con materiales informáticos para ser reutilizados, así como la plantación de un huerto, clave para la educación medioambiental, su especialidad.

El colegio de educación primaria sigue donde lo dejó, enOtuzco, en la sierra del departamento de La Libertad. Sin embargo, esa localidad rural, explotada por la industria extractiva desmedida, luce un proyecto educativo que le ha servido para atomizar el ingenio de esta profesora que ahora reside en Barcelona realizado un doctorado en la Universitat Autónoma de Barcelona (UAB).

En la escuela de Otuzco, han pasado por sus manos 490 niños, entre los cuales, hoy una es periodista en el Congreso de la República, otro es arquitecto y otros se han dedicado a la ingeniería y la agroindustria. “Estudiamos la biografía de los científicos para motivar a que los jóvenes investiguen”. Como la escuela andaba escasa de recursos, Elisabeth creaba redes de trabajo con las instituciones locales para que sus estudiantes de 11 años pudiesen emprender sus propios proyectos: crear néctares, yogures, etc. “He viajado con algunos alumnos a la Mostratec de Brasil (feria científica) y a la COP16 (Convención de las NNUU contra el Cambio Climático). “Hace falta hacer una escuela abierta porque las aulas de ciencia se centran en la teoría pero los estudiantes no ven muchos procesos”, defiende la profesora.

De su idea educativa medioambiental a partir de huertos, Elisabeth consiguió algunos premios. Uno de ellos le sirvió para crear una cabina de termoterapia para los alumnos que padecían enfermedades respiratorias.

La implicación de Elisabeth con sus alumnos siempre fue de más. Vocación absoluta por la ciencia y por la divulgación científica. Una mujer que se ha propuesto poner en valor el trabajo de alguno de sus compañeros, entre ellos, el de Augusto Aldávez Pajares, de 83 años. Con él, hizo una expedición a Lagunas con una hipótesis: demostrar que una alga local tenía las proteínas de la carne que tantos niños no podían comer por falta de recursos económicos.

EXPEDICIÓN  DE LAS ALGAS NOSTOC (CUSHURO)

El caviar andino. La profesora Elisabeth vio unas algas en un mercado local, se enteró de donde las traían y propuso al Aldávez una expedición. Llegaron a Lagunas, encontraron hasta variedades de la misma alga, las estudiaron y vieron que podía ser el recurso ideal para acabar con la malnutrición y la anemia de los menores de la zona. “Tenemos que unir a los ministerios de educación, salud, economía y medio ambiente para que preserven este recurso medioambiental que puede dar de comer a mucha gente que lo necesita”, explica la profesora. Sin embargo, hasta ahora, todo intento en esta dirección ha fallido, aunque sí se han interesado grandes personalidades del mundo gastronómico y ya se ha catalogado la especie.

La profesora e investigadora (casi doctora) Elisabeth se empeña en que su país, Perú, reconozca el legado científico de Aldávez. Incluso habla de impulsar la grabación cinematográfica de su figura científica.

Plato elaborado con algas nostoc / C.V.
Plato elaborado con algas nostoc / C.V. 

PROYECTO SEMILLEROS

Semilleros’ es el trabajo más fructífero de la científica. El libro recopila 31 experiencias de los alumnos de la escuela de Otuzco y ha sido parte del trabajo de máster de la profesora. Además, cuenta la trayectoria de su modelo educativo con los huertos en la escuela. “Aprender con un huerto no es perder el tiempo, ni producir, si no, investigar”, remarca la profesora. “Los niños aprenden valores como el compromiso de cuidar un vegetal, toman responsabilidad, conocen la importancia del paso del tiempo, a parte de la técnica como conocer los tipos de abono adecuados a cada planta, los sistema de riego, etc”, asegura Elisabeth.

SINAPSIS

Elisabeth Rodriguez, es integrante del grupo de investigación Gresc@ de la UAB, desde donde trabaja por la formación del profesorado de ciencias por medio de huertos y para el desarrollo de nuevos métodos de enseñanza basados en proyectos.

El 22 de mayo participará en la I Jornada de Estudios Latinoamericanos en Barcelona en la Universitat de Barcelona (UB). Además, se encuentra sumergida en la preparación de una presentación de las algas nostoc en la próxima edición de SINAPSIS, uno de los encuentros científicos más conocidos de Europa que se celebrará los días 24, 25 y 26 de octubre. En él, quiere dar a conocer las propiedades de estas algas y reivindicar su cuidado y su valor en el ecosistema peruano.

De Barcelona, es una enamorada de la obra modernista de Gaudí por su trabajo con motivos florales y vegetales de la naturaleza en cada uno de sus proyectos. Tanta es su admiración al arquitecto catalán, que ha escrito un libro de poesías, ‘Excelso‘, inspirado en su obra.

Fuente: https://www.metropoliabierta.com/el-pulso-de-la-ciudad/medioambiente/la-cientifica-que-reclama-acercar-los-huertos-a-las-aulas_6594_102.html

Comparte este contenido:

Entrevista a Jurjo Torres Santomé: “La educación laica, democrática e inclusiva para todas y todos es una meta muy distante en este momento”

Manuel Menor Currás entrevista a Jurjo Torres Santomé.

TE (Revista Trabajadores de la Enseñanza), CCOO

Nº 365,  Marzo-Abril de 2018, págs. 18 – 22

En Políticas educativas y construcción de personalidades neoliberales y neocolonialistas (Morata, 2017), Jurjo Torres aporta una mirada política muy actual sobre nuestro sistema educativo. Fruto de la preocupación por cómo lo privado disputa el terreno al espacio público, analiza con gran detalle cómo la construcción del nosotros colectivo –que había sido razón principal de la universalización de la educación– está siendo aceleradamente sustituida por un individualismo competitivo y excluyente.

.

¿Qué fue del optimismo transformador que dominó las expectativas de muchos educadores en los años setenta?

Sufrió un duro golpe, fruto de una izquierda que gobernó más con la mirada puesta en la Conferencia Episcopal e incluso en la derecha, que con una idea clara de lo que debía ser una educación pública, laica e inclusiva. Que el PSOE gobernara nos llevó a confiarnos y a bajar la guardia y, cuando reaccionamos, la educación privada y concertada, o sea la educación católica y segregadora, habían ocupado demasiado espacio. Excesivos cargos públicos del gobierno socialista escolarizaban a sus hijas e hijos en esas redes, con lo cual pusieron en evidencia que no confiaban en su propio ideario socialista.

En estos 40 años posteriores a la Constitución, ¿qué balance merece la evolución del sistema educativo?

Se logró legislar la etapa 0-6 como claramente “educativa”, desterrando modelos como “maternal” o “preescolar”; se alargó la obligatoriedad hasta los 16 años; la diplomatura de Magisterio e Infantil se alargó un año más y se integró en las facultades universitarias; se empezaron a democratizar centros y aulas; se apostó por los centros de profesores como espacios de actualización y para compartir experiencias y saberes entre el profesorado, etc. Pero tampoco se me escapa que en las últimas décadas los retrocesos son notables: los CEP perdieron por completo su autonomía y la mayoría de ellos desaparecieron, se introdujeron nuevos lenguajes como “competencias”, “estándares de rendimiento”…, lo que, junto con la obsesión con PISA, está generando nuevos problemas y acabando por completo con la autonomía profesional para transformarnos en una especie de “entrenadores” para que el alumnado supere evaluaciones externas. Los ministerios, consejerías y servicios de inspección trabajan cada día más con mirada de sospecha que de cooperación con el profesorado, lo que choca frontalmente con las familias, que cada vez confían más en el profesorado y protestan por las políticas de recortes y la LOMCE porque dificultan enormemente su trabajo.

¿Hubo realmente un pacto educativo en 1978?

Hubo un muy tímido pacto que se fue anulando poco a poco en las décadas siguientes. Entre otras cosas, no se admitió el laicismo y se optó por una “libertad” educativa que sirviera de tapadera para seguir adoctrinando y consolidar la educación privada y la concertada; para dejar las editoriales de libros de texto, en su mayoría, en manos de la Iglesia católica, con lo cual, como no se revisa el rigor ni la actualización, ni los sesgos que incorporan, en todas las asignaturas que trabajan con ese “desprofesionalizador” recurso didáctico sigue en ascenso el avance de una cultura escolar conservadora, católica y neocolonialista. La cultura del miedo, que administró muy bien la derecha recién “bautizada” como democrática, y un ejército con constante ruido de sables, atemorizó a un partido socialista que día a día iba cediendo espacios.

¿En qué se cumplió mejor el supuesto consenso del art. 27? ¿Basta con que se haya alcanzado una escolarización relativamente amplia?

Se escolarizó a toda la población en edad escolar, se acabó con las escuelas puente para la población gitana integrándola en los centros públicos, se multiplicó notablemente el número de becas, se destinó mucho dinero para dotaciones de materiales didácticos y educativos (bibliotecas, laboratorios, gimnasios…), se crearon numerosas plazas para profesorado, se establecieron y dotaron numerosos CEP a lo largo de todo el Estado, se hicieron notables esfuerzos para actualizar al profesorado en ejercicio… Piensa que la Dictadura nos había dejado una situación desastrosa, sin nada; hasta ese momento, en la escuela pública prácticamente solo se escolarizaban las clases sociales más populares y quienes habitaban en los núcleos rurales; el resto lo hacía en los colegios religiosos privados.

Por supuesto, eso no es suficiente, y conformar un sistema educativo realmente democrático exige un trabajo transformador más de raíz. En todo el tiempo transcurrido desde la muerte de Franco nunca hubo una revisión realmente democrática, con los debates abiertos imprescindibles para decidir qué contenidos curriculares deberían ser obligatorios. Además, aquellos movimientos de renovación pedagógica de la segunda mitad de los setenta fueron muriendo, y aquella riqueza de debates, experiencias e innovaciones escolares fueron cediendo ante burocracias y discursos tecnocráticos avalados desde esferas de poder político.

¿Cabe quejarse de muchos incumplimientos del artículo 27?

¡Obviamente! Y eso explica un sistema educativo fragmentado en tres grandes redes: pública, privada y concertada, y algo que no debe pasar desapercibido: la opción desescolarizadora. Podemos decir que cada grupo se educa en un espacio propio. Acostumbro a decir que muchos centros escolares vienen convirtiéndose en clubes privados, clubes destinados a grupos sociales específicos. De ahí que la ley les “permita” seleccionar el tipo de familia que les interesa. La educación laica, democrática e inclusiva para todas y todos es una meta muy distante en este momento.

Se ha vuelto a hablar mucho de otro “pacto”. Si es tan necesario, ¿por qué no se deroga la LOMCE?

Siempre ha sido la derecha, desde la oposición, quien ha recurrido a la necesidad de pactos; en especial cuando consideraba que la libertad de educación podía poner restricciones a su modo de educación y a sus idearios escolares, con los que seguir promoviendo concepciones católicas, segregando por sexos, eligiendo como usuarios de su servicio a las clases sociales más acomodadas y con mayor capital cultural; y no asumiendo la inclusión de estudiantes con discapacidades, por ejemplo.

Derogar la LOMCE, un compromiso adquirido por todos los demás grupos parlamentarios, significaría cortocircuitar el proyecto educativo y privatista neoliberal y neocolonialista del PP. De ahí que esté apostando por “entretenernos” hasta que finalice esta legislatura de Gobierno. Son conscientes del crecimiento de Ciudadanos (Cs) y de que, por tanto, tienen todas las posibilidades de continuar en la siguiente legislatura con la misma filosofía neoliberal, dado que a Cs tampoco les viene mal esta LOMCE. Aunque es probable que, siguiendo la máxima del Gatopardo de Lampedusa, “si queremos que todo siga como está, necesitamos que todo cambie”.

Ha habido ocho leyes escolares desde 1978. ¿Desde cuándo se ha colado el neoliberalismo en el sistema educativo español?

El neoliberalismo se introdujo de manera más visible en la medida en que una medida provisional como la concertación de aulas y centros escolares se asentó como definitiva. Desde finales de los 80, la privatización no hizo más que avanzar y se empezó a recortar la gratuidad de los libros de texto y material didáctico; al principio, más en las comunidades gobernadas por el PP. Este avance del neoliberalismo es constatable también en las opciones que adoptó el Partido Popular en los territorios donde gobernaba; por ejemplo, en la Comunidad Valenciana y en la de Madrid ofreciendo rebajas fiscales a las familias para que pagaran la escolarización de sus hijas e hijos en la etapa que siguen denominando “preescolar” y de “guarderías”. O sea, optando por el “cheque escolar” en vez de preocuparse por ofrecer suficientes y bien dotadas escuelas infantiles públicas, con un profesorado bien formado y especializado.

Posteriormente, se recortaron las becas y se comenzaron a introducir préstamos bancarios para estudios superiores. Y, para colmo, en el último gobierno del PSOE, Zapatero incluyó a nuestro país para que PISA evaluara en la ESO las competencias financieras (ningún país de Europa donde existe un Estado de Bienestar acepta esa prueba: Finlandia, Suecia, Alemania, Holanda, etc.). Esta sustitución de la educación económica por la financiera dificulta mucho cuestionar las políticas económicas neoliberales dominantes.

.

.

¿Qué rasgos principales de personalidad y comportamiento cívico se esperan del modelo educativo neoliberal?

Si el neoliberalismo quiere tener éxito y consolidarse como la única alternativa viable, lógica y objetiva, necesita instrumentalizar la esfera cultural y de los medios de comunicación para conformar un “sentido común” donde la mayoría de las personas la acepten o, al menos, la vean como la solución con menos riesgo. Esta meta exige políticas educativas que incidan en contenidos y valores que conformen seres coherentes con la filosofía neoliberal. Este nuevo ser humano podemos caracterizarlo como un ser competitivo que vive en un mundo obsesionado con el rendimiento y la productividad, mercantilizó todos los ámbitos de su sentido común y es una persona obsesionada. Guiada por ideas mercantiles a la hora de planificar y organizar su vida personal, el tiempo de ocio, las relaciones sociales y profesionales o las decisiones laborales, dirige su vida en términos de coste-beneficios. Obcecado con la búsqueda del interés propio, está en constante competencia y comparación con los demás, a quienes ve como rivales; la estadística y los datos cuantitativos le guían para realizar comparaciones y valoraciones de sus antagonistas: entre empresarios hay rivalidad, no hay amistad; la aspiración a triunfar en la vida conlleva acabar con los competidores. Es una personalidad autoritaria, que carece de contenidos, procedimientos y valores sociales que le lleven a contemplar el bien común y la justicia social. Le definen estos cuatro caracteres: es un ser economicista, consumista, endeudado y numérico.

El conservadurismo que imbuía nuestro sistema educativo ¿le ha servido al neoliberalismo para incubarse mejor?

El conservadurismo está en los restos de un nacionalcatolicismo obsesionado con los mandamientos de la Iglesia sin preocuparse críticamente por los asuntos terrenales, denunciar las injusticias, luchar por conformar un mundo más justo, democrático, fraternal, inclusivo y sustentable. Con escasa formación filosófica y sin apenas conocimiento de lo que realmente supuso el legado de la Ilustración, ha generado un ser jerárquico, que considera la vida como sufrimiento y que este mundo será siempre injusto: de lo contrario no tendría sentido el cielo. Y, a menudo, un ser machista que ni sabe relacionarse en igualdad con la mujer, ni con otras culturas y pueblos. Para este ser fatalista, sin optimismo para mudar la realidad, educado en unos valores que presuponen que la injusticia es lo normal, lo lógico es resignarse, ser abnegados, hacer caridad, sufrir, tener paciencia para tolerar injusticias, aceptar el trabajo alienado y la explotación. Esto explica que la LOMCE haya dotado con tanto poder a la Iglesia en el sistema educativo; a una Iglesia fundamentalista, como la entendía la Conferencia Episcopal de Rouco Varela, no a la partidaria de la Teología de la Liberación. De haber sido a esta , este país ya habría asumido el laicismo más ortodoxo.

Lo que enseñan los profesores, el cómo enseñan, los libros que proponen, ¿son muy resistentes a esta tendencia?

Obviamente hay un sector resistente a las políticas educativas neoliberales y es mayor en la red pública, pues goza de libertad para explicitarlo y trabajar de otro modo. Pero en la red pública –donde más innovaciones se realizan– cada vez es y será más difícil en la medida en que la Administración vaya controlando las direcciones y cercenando la democratización de los centros y -lo que es más peligroso- en cuanto las reválidas y evaluaciones externas se vayan asentando. Por eso la LOMCE se preocupó tanto de este tipo de controles y de convertir el currículum escolar en un proyecto cerrado: el RD que los establece especifica por primera vez en la historia con claridad no solo los objetivos, contenidos y competencias de las disciplinas, sino también los estándares de rendimiento, los criterios de evaluación y los resultados de aprendizaje evaluables de modo cuantitativo. O sea, que ha pasado a la historia aquello de que el currículum debe ser abierto y flexible, adecuado al alumnado específico con quien se trabaje.

¿Qué otros estrategias del neoliberalismo están colonizando más al sistema educativo?

También es muy relevante el funcionamiento de los centros, que pasan a organizarse de modo jerárquico, cual una empresa: un equipo directivo ordena y manda, y el profesorado y alumnado obedecen. Al tiempo, se dificulta el trabajo más motivador, organizado alrededor de proyectos curriculares integrados, centrados en la autonomía e investigación del alumnado. La filosofía neoliberal trabaja con una constante sospecha de que el profesorado no se implica lo suficiente. Se procura redirigir la profesionalidad docente hacia comportamientos más eficientistas, a suprimir o ayudar a ver como innecesaria la formación educativa que enfatice dimensiones filosóficas, sociológicas, políticas, éticas o estéticas, para obsesionarse exclusivamente en la practicidad inmediata; en el fondo, para transformar a maestros y profesores, más que en profesionales reflexivos y críticos, en una especie de entrenadores que ayuden al alumnado a pasar los test de evaluación.

¿Qué tipo de profesorado se precisa hoy para atender las necesidades de una ciudadanía consciente de sus derechos y libertades en un mundo tan cambiante?

Considero urgente formar y actualizar lo mejor posible al profesorado, un problema que seguimos sin abordar bien cuando, además, en la formación inicial del profesorado de Educación Secundaria seguimos teniendo un problema importante. Se ha mejorado la formación psicopedagógica con el máster correspondiente, aunque demasiado concentrado en un curso con prácticas en los centros. Pero no se acaba de abordar la formación inicial, la del grado universitario. Tenemos una dinámica un tanto contradictoria. Por una parte, una universidad que cada día especializa más sus titulaciones en todos los ámbitos, mientras que el sistema educativo demanda una formación más interdisciplinar, algo más generalista en las mismas áreas y materias que se están trabajando en la ESO y en el Bachillerato.

La universidad debería, a mi modo de ver, ofrecer titulaciones de grado, por ejemplo, en ciencias experimentales, ciencias sociales, artes, humanidades, etc. En Educación Infantil y Primaria urge ofrecer una mayor formación cultural a un profesorado al que únicamente se le está ofreciendo una formación centrada casi exclusivamente en las áreas de pedagogía, psicología, didácticas y sociología de la educación. Formación lógicamente indispensable y que no se debe recortar, sino incrementar con mucha más formación cultural en las distintas áreas de conocimiento.

Si cabe ser optimista respecto a las políticas educativas, ¿en qué se debe cifrar esa actitud?

A medida que fue pasando el tiempo, los gobiernos se dedicaron a reorientar los focos de atención de la ciudadanía hacia los modos individualistas y neoliberales, hasta tratar de convencernos de que ya no existen clases sociales. Contribuye a ello el mantra de la cultura del esfuerzo, que desdibuja e invisibiliza las diferentes condiciones socioculturales que afectan y condicionan la vida de cada persona. Esta cultura del esfuerzo es la reconversión católica de la vida en la tierra como “valle de lágrimas”, en la que cada ser humano nace con una dotación de talentos con que operar y rentabilizar lo más posible, trabajando y sufriendo aquí para no ser sancionado en la otra vida, como nos amenaza el evangelio de Mateo. Con este conservadurismo católico el neoliberalismo trata de impedir los análisis de las condiciones de vida, de las estructuras institucionales, económicas, culturales, sociales y educativas de las que nos dotamos y con las que organizamos nuestra convivencia los seres humanos.

Las estadísticas gubernamentales y oficiales suelen instrumentalizarse obviando esas diferencias estructurales condicionantes, que deben ser tomadas en consideración para diagnosticar el sistema educativo y poder tomar medidas adecuadas en los núcleos de población urbana o rural cuyos centros escolares y entornos socioculturales tienen mayores déficits. Pero eso dificultaría el avance de la educación privada y la consiguiente transformación de sus colegios en “clubes” particulares en que se obstaculiza el “aprender a vivir juntos”. En la medida en que recuperemos el debate público y democrático acerca de los grandes fines y urgencias del sistema educativo, creo que iremos avanzando hacia la conformación de un mundo más democrático, justo, inclusivo y sustentable.

Fuente: http://jurjotorres.com/

Comparte este contenido:

“La libertad de elección, sin límite, genera desigualdad e inequidad” Entrevista a Lucía Martínez y Álvaro Ferrer. Save the Children

Europa/España/03 Mayo 2018/Autor: Pablo Gutiérrez del Álamo/Fuente: El diario la Educación

La administración educativa ha de tener un papel mucho mayor en la planificación escolar, en el seguimiento de políticas inclusivas y en intentar mezclar alumnado de difernetes estratos sociales. Entre otras cosas para mejorar los resultados educativo. Esta es una de las concluciones principales del informe ‘Mézclate conmigo’ de Save the Children.

Hace unos días Save the Children publicó un informe sobre segregación escolar. Se han centrado exclusivamente en la segregación provocada por la situación socioeconómica del alumnado, en función de los datos recogidos por PISA cada tres años. La situación no es nada halagüeña.

Hablamos con sus dos autores: Lucía Martínez y Álvaro Ferrer. Además de que el alumnado en peor situación acaba segregado en determinados centros, hay un porcentaje de más o menos el 9% de centros educativos con una gran concentración de alumnado con dificultades, es decir, que más de la mitad las niñas y niños están en situación de riesgo.

¿Cuál es la situación de segregación escolar?

Lucía: Hay un problema de segregación. Hemos analizado los últimos 10 años, y hemos visto que ha ido aumentando de manera considerable. Somos el 6º país de Europa con mayor nivel de concentración: tenemos un índice del 31% y en los dos últimos años hemos aumentado un 14,5%, un aumento bastante considerable. Evidentemente se debe a un inmobilismo de las autoridades políticas.

Álvaro: Además, estamos por encima del promedio de la UE y de cualquier país de nuestro entorno. Compartimos la parte alta del ranking con países de Europa del Este. Los países con los que solemos compararnos no están a estos niveles. España tiene un problema muy serio de segregación escolar

¿Por qué os habéis centrado en la segregación de carácter económico?

Lucía: Nos hemos querido centrar en lo que tiene que ver con la segregación socioeconómica. Lo hemos hecho porque nos parecía que era un problema que estaba invisibilizado, porque existen estudios al respecto de otros tipos de segregación, como la segregación por sexos o por origen, que se han analizado bastante. Pero esta era una parte que nos parecía que era como el elefante en la habitación, que era enorme y nadie le estaba prestando ninguna atención. Nos parecía fundamental abordarlo.

Álvaro: En un país que tiene los indicadores de pobreza infantil de España. Tiene sentido mirarlo.
Lucía. En la discapacidad, que es quizás en la que se ha prestado más atención, había un colectivo detrás que reclamaba y, sin embargo, en la parte que tiene que ver con la pobreza, esa petición es más complicada.

Hace unas semanas entrevistamos a Marie McAndrew, profesora y experta canadiense en inclusión, que nos cantaba que la segregación socioeconómica era la más importante, al menos en Canadá…

Álvaro: El factor determinante de las probabilidades de éxito educativo, profesional y económico no tiene tanto que ver con la condición de migrante que con los recursos de que disponen esas familias. El factor determinante es la condición socioeconómica, es la pobreza. Esto se analiza mucho con los migrantes y también con el caso de los gitanos. Nosotros creemos que esto amplía el foco y hace visible un problema que hasta ahora no estábamos mirando.

¿Qué recorrido le queréis dar al estudio? ¿Lo enviaréis a los partidos?

Lucía: En Save the Children estos estudios se hacen siempre con un fin que es impulsar políticas públicas que tengan un cambio positivo. Ahora, tras la presentación, estamos en un momento de difusión, pero la idea y el fin último es conseguir cambiar las cosas. Empezaremos con la estrategia de incidencia política en la que a lo mejor podemos contar con otras entidades con las que trabajar y sí, lo trasladaremos a los decisores políticos.

Álvaro: De hecho, ya se está haciendo el envío a los grupos parlamentarios en el Congreso, también se enviará a las consejerías de Educación, y además, hay oportunidades en el calendario político que ya están abiertas: el pacto por la educación en Euskadi y la próxima ley vasca de educación es una oportunidad. La Comuntat Valenciana tiene abierto un proceso para una nueva ley de educación en la que esperamos que este tema también entre. En el informe pedimos directamente un pacto estatal por la equidad y la inclusión en la escolarización que ponga los objetivos, indicadores claros, recursos y líneas de actuación, que haya un compromiso político del Ministerio y de los gobiernos autonómicos.

Planteáis propuestas como que los centros puedan contratar docentes, algo que se ha hecho tímidamente en Cataluña y que ha recibido grandes críticas…

Álvaro: nuestra propuesta va vinculada claramente al objetivo de combatir la segregación. Por eso decimos que deben ser específicamente centros que tengan problemas de segregación y tiene que estar vinculado a unos objetivos de inclusión y a un proyecto educativo que hable de inclusión. No hemos entrado a determinar qué porcentaje tendría que ser, pero sí definimos el marco. Teniendo en cuenta que la autonomía de contratación no es el fin per se, sino la equidad y la inclusión.

También incorporamos rendición de cuentas; implica que tiene que haber un control muy claro por parte de las administraciones sobre dónde se está ejerciendo esa autonomía y qué objetivos y qué resultados está dando. No planteamos un modelo generalizado donde todos los centros podrían contratar profesorado.
Lucía: Depende mucho, la idea es que el enfoque sea muy territorializado y, evidentemente, ese porcentaje va a variar…

Ponéis, efectivamente, el foco mucho en lo local, pero las competencias son autonómicas…

Lucía: En cualquier caso hablamos de coordinación entre el poder autonómico y el municipio. No se trata de desentenderse si no de bajar las políticas al municipio…

Álvaro. Nuestro papel al final es poner sobre la mesa qué políticas creemos que van a ser efectivas. Pero, es verdad, que a veces no se trata solo de dinero. Por ejemplo, cuando decimos que las administraciones tienen que tener más papel en la planificación de la oferta educativa no se trata tanto de dinero como de tener los mecanismos de coordinación. El padrón lo tienen los ayuntamientos que conocen muy bien la composición social de la población. Eso hay que utilizarlo a nivel educativo. Implica que tienen que tener más papel las comunidades educativas locales, también las adminstraciones locales.

Lucía. Sí, es más un empoderamiento, un equilibrio entre diferentes administraciones…

Pero al final tiene que ver con quién gestiona el dinero y quién lo pone…

Álvaro: Sí, pero la segregación es una realidad local, con particularidades. Si se cruzan los datos de los que hablamos hay un potencial enorme para combatir la segregación e impulsar políticas más inclusivas. Nosotros hablamos de la detección del alumnado desfavorecido; cruzando datos del padrón con mejor coordinación con los servicios sociales…

Lucía: no solamente que va a acabar siendo más inclusivo y equitativo, sino económicamente más eficiente. Al final estás utilizando los recursos de manera más apropiada.

¿La segregación es un problema de las ciudades?

Lucía. Yo creo que depende de la composición social del territorio. En cuanto a concentración de alumnado vulnerable, en un territorio pequeño, probablemente sea menor si responde a la realidad del territorio. Pero en cuanto a segregación, no lo sé. No hay grandes diferencias en la concentración si comparamos lo que ocurre a nivel urbano y a nivel rural, excepto en el caso de Euskadi. En este caso se debe a que las zonas rurales son más ricas que las de otros terrotirios de España. Tiene que ver más con el factor pobreza que con el terrotorio.

En cualquier caso, decís que el distrito único no funciona.

Álvaro. Sí, una de las cosas que analizamos es la zonificación. Hay muchas políticas que impactan, cada realidad es distinta y cada política impacta de manera diferente. Decimos que la manera de hacer funcionar la zonificación para que reduzca la segregación es haciendo zonas de escolarización de tamaño medio. En las zonas muy pequeñas la población será homogénea, y las zonas muy amplias, que permitan fácilmente la huida de familias de clase media, tampoco funcionaría. Necesitamos un tamaño medio, y tener en cuenta cómo se diseñan esas zonas. Es decir, que nos aseguremos que dentro de ellas hay una población heterogénea. En muchas comunidades autónomas se ha hecho en función de los barrios históricos de las ciudades, no se ha hecho una política activa. El rol de las administraciones locales es importante: analizar la composición social para asegurarnos de que hacemos zonas de planificación escolar con una población heterogénea.

Lucía: Esto conlleva que puede haber dos pueblos vecinos en donde tienes que hacer una única zona. Sería cuestión de jugar con la composición del territorio para lograr la máxima heterogeneidad posible del alumnado.

Aquí me surgen dos problemas. El transporte de alumnos y la resistencia de las familias. Por otro lado, grandes barrios en ciudades con una población bastante homogénea… ¿cómo rompemos esa dinámica de segregación en zonas especialmente vulnerables?

Lucía. Es lo que comentaba de la zona de dos pueblos. Cada uno de ellos no tiene por qué ser una sola zona. Se puede jugar con la unión de diversas zonas para conseguir la máxima heterogeneidad.

Álvaro. El factor proximidad hay que tenerlo en cuenta para que los desplazamientos que tengan que hacer las familias sean lo mínimo posible. Pero con población muy aislada igual tenemos que plantearnos políticas de transporte y que las familias tengan que desplacerse si eso permite la heterogeneidad. Y no sería la primera vez. En Cataluña, en algunos municipios se ha hecho. Pero lo ideal es que sea una política que se haga en los centros en los que no haya otra política que funcione.

¿Y en los barrios más homogéneos?

Álvaro: Se puede partir la zona radialmente y romper la estructura natural del barrio. Es verdad que hay zonas urbanas que todos los barrios que colindan todos tienen una composición social parecida. Habrá que jugar: usar políticas de transporte, pero hay otros factores como las políticas de recursos, hacer atractivas determinadas ofertas de los centros y garantizar la calidad. Compensar, por una parte los efectos que pueda tener esa concentración e intentar hacer atractivos esos centros. Además, hemos visto que en esos barrios también hay diversidad y aún así se da una lógica de segregación. Hay margen de mejora incluso dentro de estos barrios.

Lucía: No hay una única receta, hay varias. Y dependiendo del contexto, del momento, del objetivo que se busque habrá que utilizar unas u otras.

Álvaro: Lo que sí necesitamos es una administración educativa remangada con la caja de herramientas en la mano mirando cada realidad. Eso es lo que se necesita: políticas activas. Que sea un objetivo y, con todas estas herramientas, ver en cada contexto cuáles hay que utilizar.
Lucía: Y esas herramientas ya están. En realidad, si analizas las propuestas, no hemos inventado la rueda. Son políticas que existen y que no se están utilizando o se están utilizando de manera no apropiada.

Entre planificación y libertad de elección…

Álvaro: No nos mostramos en contra de la elección de las familias. Lo que decimos es que la libertad de elección no beneficia igual a todas las familias. Beneficia más a las familias que están en una posición socioeconómicamente aventajada, frente a las que vienen de un contexto desfavorecido.

Señaláis que las aventajadas son las que elijen…

Lucía: Por varios motivos. Le dan mucha importancia al impacto de la educación de sus hijos y conocen cómo funciona el sistema educativo. En las familias de nivel socioeconómico más bajo no se da tanto. De ahí esa descompensación. Por eso es necesario que la administración compense regulando ciertos elementos.

Álvaro: Necesitamos regular la libertad de elección, y es posible. Se puede buscar un equilibrio. La libertad de elección, sin límite, genera desigualdad e inequidad. Es un hecho claro. Necesitamos mecanismos correctores. Es posible plantearse ese marco donde las familias elijan entre distintos proyectos educativos, que tienen que ser de calidad todos ellos; luego, empoderar a las familias que en ese proceso de elección no participan en igualdad de condiciones, y, el tercer elemento, que haya mecanismos correctores que garanticen un equilibrio en la composición social de los centros. No estamos inventando nada nuevo. Desde 2012 la OCDE está diciendo esto, lo llama sistemas de elección regulada o controlada.

Otro punto que señaláis, es que los docentes de los centros con mayor concentración tienen menos formación que otros. ¿A qué creéis que se debe?

Lucía. A que muchos profesores más formados acaban huyendo de los centros donde hay una alta complejidad, porque es muy complicado ejercer en este tipo de escenarios. Y que a lo mejor, los menos formados ni siquiera pueden aumentar la formación porque en unas circunstancias tan complejas ¿quién es capaz de, además, tener una formación, seguir formándote?

Álvaro. Probablemente ese profesorado que se queda sea el que está en fases iniciales de la profesión. Me atrevería a decir que el porcentaje de interinos será alto. A lo que se añade niveles de desmotivación. El contexto no les motiva a un desarrollo profesional… Lo que sí es claro es el patrón de huida. El profesorado que está en fases mayores de su desarrollo profesional, que realiza más formación, tiende claramente a huir de esos centros.

Algo que sabemos que ocurre y a lo que no se atiende… la pobreza impacta en los resultados educativos.
Álvaro. Es una de las cosas que más nos ha sorprendido es el impacto que tiene sobre indicadores educativos. Tiene un impacto claro sobre los problemas que se discuten en la agenda política: el abandono escolar, sobre la repetición. No estamos hablando solo de un debate de equidad.

El problema no es visible porque no se han hecho indicadores oficiales de segregación, pero no será porque no nos lo hayan dicho organismos internacionales. Desde 2011 la comisión Europea y el Consejo de la UE, cuando aprobaron las estrategias contra el abandono escolar, mencionan como una de las políticas para prevenirlo las políticas activas contra la segregación. Y España, cuando ha desarrollado su plan estatal contra el abandono no menciona la segregación. La OCDE lo lleva diciendo desde 2012: como una política para favorecer la equidad educativa. España no ha hecho nada. Recientemente las observaciones finales del Comité de Derechos del Niño y el comité de Derechos Económicos y Sociales de la ONU le han dicho específicamente a España que tiene que abordar la segregación. Hasta nos hemos encontrado con un informe de Banco Mundial que dice que España y Europa tienen un problema de segregación escolar que puede impactar sobre la cohesión social y sobre el crecimiento.

Lucía. Creo que los problemas son visibles pero lo que no se ha hecho es atribuir esos problemas a la causa. Todo el mundo observaba varias cosas evidentes relacionados con la segregación pero nadie identificaba la segregación como causa de ello.

A partir de 2012, según los datos que manejáis, las cifras empeoran. ¿Por qué?

Lucía. Si tienes un problema de segregación al que no prestas atención ni pones ninguna solución, se va a agravar. A partir de 2012 este problema se está escapando de las manos y así va a seguir, con la misma tendencia, si no se hace nada. Es un problema de falta de compromiso por parte de los distintos gobiernos. El caso de la Comunidad de Madrid es paradigmático. En los últimos 10 años ha subido un 36% pero en los dos útlimos años ha sido bastante radical. De todas formas, creemos que estamos a tiempo de revertir la siguación.

Álvaro. La segregación la definimos como un círculo vicioso que tiende a empeorar, un proceso de empeoramiento que crece exponencialmente si no se atiende pronto. Por eso se ve la curva claramente y tiene el riesgo de seguir. Hay mecanismos de abordaje, pero el problema es urgente. No podemos mirar para otro lado.

No todo es un problema de inversión. Pero muchas de las actuaciones sí cuestan dinero. ¿Habéis hecho algún cálculo?

Lucía. Hace falta una inversión con perspectiva de equidad, invertir allí donde hace falta. Cuantificarlo… no hemos hecho ese ejercicio.

Álvaro: La reflexión que hacemos es más general. Coinciden temporalmente los años de la segregación con los de recortes de inversión, afectando particularmente a la escuela pública, y además, si uno mira las partidas de educación compensatoria, todo lo que tiene que ver con equidad, han sido las más afectadas. Parece bastante claro cuál ha sido el mix. Un factor importante es que la segregación es previa a la crisis, porque antes de la crisis no hacíamos las políticas de equidad bien.
Los centros de alta y baja concentración tienen recursos parecidos porque esta cuestión de atender con más recursos a los centros con más necesidad no se ha hecho bien. Y corremos el riesgo de seguir haciéndolo así. Necesitamos un enfoque de equidad a la hora de distribuir los rescursos. Y hay maneras de hacerlo. Por ejemplo, la ILA de escolarización inclusiva en la Comunidad de Madrid plantea una tasa de necesidad para calcular cuánto tenemos que dotar de profesorado, de ciertos perfiles o de equipos de orientación a los centros.

Habláis en el informe de mínimos y máximos de alumnos con necesidades en los centros.

Álvaro: Hay un factor importante: las oficinas de escolarización. Tiene que haber oficinas únicas porque la matriculación no puede estar en los centros educativos. La detección de necesidades educativas de apoyo educativo tiene que hacerse antes de la escolarización, en la que meteremos las vinculadas a niveles socioeconómicos y, además de previa, debe estar vinculada a estas oficinas únicas de matriculación. No puede ser una responsabilidad exclusivamente de los centros, porque hay un margen para que, por determinados intereses, puedan tocar las cifras.

Aquí tenéis un nuevo escollo, la concertada y la posible selección del alumnado…

Alvaro: Para nosotros es claro: todos los centros que reciben financiación pública tienen que estar sometidos a la misma normativa de admisión. Es lo que dice la norma. Pero tenemos que buscar las políticas para hacerlo real. Ahí tenemos que garantizar que hay gratuidad y que el acceso es en condiciones de equidad y de inclusión en todos los centros. Tiene que haber una intervención más fuerte de la administración. Ahora mismo hay un problema de corresponsabilidad, lo decimos claro, por parte de la concertada. Creemos que hay que sentarlos en la mesa, porque la concertada forma parte de la realidad social, y es una buena manera de generar esa corresponsabilidad. Hay que hacerlos corresponsables y empoderar a esas mesas de escolarización que no se están utilizando en muchas CCAA. Pero también es necesario que la administración garantice que si hay barrera, desaparecerán. Cualquiera. Tema de las cuotas.

Esto también es dinero. La concertada siempre ha sostenido que no reciben financiación suficiente.

Lucía. Todo lo que ha dicho Álvaro ha de ir acompañado de una financiación suficiente de la concertada como para poder ofrecer ese proyecto educativo siempre basado en la inclusión.
Álvaro: Tenemos que asegurar de que la financiación es suficiente para garantizar la gratuidad y la equidad. Y luego hay que dotar en función de la necesidad a todos los centros sostenidos con fondos públicos. Eso es lo que tenemos que asegurarnos.

Imagen: http://eldiariodelaeducacion.com/wp-content/uploads/2018/05/DSC_8832.jpg

Fuente: http://eldiariodelaeducacion.com/blog/2018/05/03/la-libertad-de-eleccion-sin-limite-genera-desigualdad-e-inequidad/

Comparte este contenido:

Entrevista a Lola Escalante: “Entre el 14% y el 19% de la población infantojuvenil padece trastorno de ansiedad”

Por: El Faro Ceuta/ 02-05-2018

La Decana del Colegio Oficial de Psicólogos de la ciudad habla con El Faro de Ceuta

La Decana del COP de la ciudad explica las aportaciones que la Psicología puede hacer a las problemáticas en los centro educativos, dentro de un pacto social y político por la Educación.

–¿Cuáles son los problemas del alumnado que el profesional de la Psicología puede abordar en los Centros educativos?

– Verás, la Psicología estudia la conducta humana, que engloba no solo la conducta, lo que se puede ver desde fuera, que es el síntoma, sino también aquello que no se ve, que son las emociones y los pensamientos, las creencias, por tanto el profesional de la Psicología desarrolla sus funciones en todos los ámbitos sociales, y en todas las etapas evolutivas. Centrándonos en el ámbito escolar intervenimos en “el abandono escolar”, los abandonos no suelen ser por razones de limitaciones cognitivas, sino por causas conductuales, emocionales y/o sociales.

Según manifiesta el estudio “Aspectos emocionales en el ámbito educativo: Una asignatura pendiente”. Instituto Álvaro Cunqueiro de Vigo, un 60% de las demandas atendidas por problemas de aprendizaje se basaban en problemas emocionales consistentes en ansiedad, rasgos depresivos, extrema inseguridad, timidez, impulsividad, rasgos obsesivos-compulsivos, sentimientos de inferioridad, privación afectiva, inmadurez emocional, además de baja autoestima.

Un gran número de alumnado no recibe atención psicológica, ni respuesta educativa curricular adaptada a esas causas, por lo que obtienen bajos resultados académicos y pueden abandonar los estudios. Otro asunto a resaltar es “la diversidad del alumnado” como puede ser alumnado extranjero, diversidad funcional cognitiva, sensorial y/o motriz, altas capacidades, Trastorno de Espectro Autista (TEA), Trastornos del lenguaje, desventajas socioculturales, escolarización tardía, y/o con trastornos emocionales.

“Asesorar a progenitores mejoraría indudablemente las relaciones paternofiliales, evitando la intenvención de la Justicia”

Algunos datos alarmantes son que entre el 14%y el 19% de población infantojuvenil padecen trastorno de ansiedad, lo que interfiere en el proceso de aprendizaje y puede ser la causa del fracaso escolar; que la prevalencia de la depresión se estima entre un 4% y un 9% entre menores. En el 30% de los casos continúa hasta la edad adulta, con un desajuste social a largo plazo que aumenta el riesgo de suicidio.

La principal causa de consulta son los problemas de conductas. Con una prevalencia entre los 13 y 16 años, y que se manifiesta entre el 3 y 8% de los y las menores.

En cuanto a los Trastornos de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), que no siempre se hace un buen diagnóstico, justificar comportamientos agresivos, que tanto se están dando en los centros educativos, por el diagnostico TDAH o elegir la prescripción farmacológica como principal o única medida de intervención, impide que el alumnado aprenda a regular su atención.

Otro tema que preocupa es el ”Acoso Escolar y Ciberbullying”. Por citar algo, pueden existir ideación suicida o intentos de suicidio y/o autolesiones en cerca del 10% de los casos. Otro tema preocupante son los casos de violencia filioparental. Por decir un dato, en el año 2015 ascendieron a 4.898 las denuncias presentadas y solo una parte pequeña de las agresiones se denuncian.

El asesoramiento a progenitores mejoraría indudablemente las relaciones parternofiliales, evitando la intervención de la Administración de Justicia. Las Adicciones a las nuevas tecnologías y redes sociales, se estima que el 21,3 % de los jóvenes están en riesgo de convertirse en adictos. Adiciones relacionadas con incremento de ansiedad y depresión, dificultades del sueño y problemas de autoimagen.

Las Adiciones a drogas, según la Encuesta del plan Nacional sobre Drogas ESTUDES entre los 14 a 18 años un 76,8% de los adolescentes consumen alcohol, un 31,4% tabaco, un 25,4% Cannabis y un 2,8% Cocaína. En relación con la Prevención de violencia de género en la etapa de Educación Primaria se consolida la conducta del “buen trato” o queda reforzado el “mal trato”.

En esta etapa se dan las primeras relaciones de parejas. El diseño de intervenciones psicoeductivas en el currículum ordinario facilitaría el aprendizaje de las conductas de “buen trato” y el abordaje preventivo de conductas agresivas. Valores como la igualdad quedan diluidos y minimizados en los centros educativos, dependiendo de la buena voluntad, del compromiso del cuerpo docente; sin adjudicaciones horarias, ni desarrollos curriculares concretos. Es decir, que el trabajo de la igualdad queda de la mano de la sensibilidad y posibilidad de los centros educativos.

La detección precoz mejora el pronóstico. La promoción de la regulación emocional que impiden el aprendizaje, como ya ha demostrado la neurociencia, son metas a conseguir en el ámbito educativo Toda esta problemática puede ser la causa de la violencia en las aulas, tema que tanto preocupa actualmente en nuestra ciudad.

–Pero además del alumnado está el profesorado ¿Cómo puede ayudar el profesional de la Psicología a este colectivo?

– Es importante que el profesorado sepa también autogestionar sus emociones, y por tanto gestionar el estrés y resolver conflictos de una forma asertiva y esto no es algo innato, en la mayoría de los casos los adultos y adultas somos bastante “analfabetos emocionales”, por tanto no podremos comprender las conductas, que es el síntoma de lo que se está moviendo a nivel emocional de los menores, si no podemos manejar nuestras propias emociones.

Una labor preventiva es formar al profesorado en estos temas, muchas veces una causa directa o indirecta del síndrome de Burnout, que sufren un gran número de profesorado, lo que va a afectar no solo a la salud del profesional, también al centro por las bajas laborales que conlleva y por tanto a la calidad de enseñanza. En cuanto al equipo directivo podemos asesorarlo y formarlo para temas como el liderazgo de personas, la dirección de equipos, el manejo de la comunicación directa, operativa y capacitada para resolver conflictos y en la dinamización de procesos innovadores.

–Otra tema importante es la familia, ¿cuál puede ser vuestro trabajo con estas?

– Los padres y las madres están preocupados por saber cómo educar, necesitan conocer las características y las necesidades de cada etapa evolutiva. Los profesionales de la psicología podemos proporcionar esta información en todo el proceso evolutivo en todas las áreas, emocional, social, cognitivo, conductual, de comunicación y lenguaje, orientarles de manera preventiva en este sentido y prestarle atención psicológica, en caso de necesidad.

Es importante hacerlos partícipes en las dinámicas del Centro educativo como contexto complementario de la educación.

–¿Cree que el modelo de Orientación Educativa está dando respuesta a toda esta problemática?

– El modelo que existe en la mayoría de los centros educativos no está dando la respuesta suficiente a las complejas problemática, con uno o dos Orientadores Generalistas en el mejor de los casos, o profesionales de equipos externos que tienen que atender a varios centros.

Estos orientadores están desbordados para dar respuesta a la diversidad de problemáticas que las que se enfrentan cada día. Y no es solo una cuestión de escasez de profesionales, es un problema también de especialización profesional, ya que se pretenden que ejerzan complejas labores de evaluación, diagnostico e intervención, sin importar cuál sea su titulación.

La organización Colegial de la Psicología estima necesaria la existencia de Equipos de Intervención Multiprofesional en los centros educativos. Debería haber unos equipos plurales, en los que cada profesional aporte según su formación específica, entre los que deben estar el Psicólogo Educativo.

La Necesidad de los profesionales de la Psicología Educativa es una demanda expresada por familias y por directivos de Centros, según se plasma en los “Acuerdos sobre la inserción del Psicólogo/a Educativo en el Sistema de Educación Español no universitario”, suscrito en el 2010 por la CEAPA, CONCAPA, DEDADI, COP, Conferencia de Decanos de Psicología y Psicólogos Educativos.

En este Acuerdo se plantea que “Existen necesidades educativas, sentidas y expresadas desde la Comunidad Educativa, que sólo pueden ser adecuadamente satisfechas por profesionales cualificados. Sin menoscabo de la existencia de otros especialistas, se considera necesaria la incorporación del Psicólogo Educativo a los distintos centros docentes”.

–¿Cuáles son las funciones de la Psicología Educativa?

– Su función prioritaria es atender y fomentar el desarrollo psicológico en todos sus componentes – psicomotor, cognitivo, emocional y social para favorecer el desarrollo integral, el bienestar psicológico y social y por tanto promover la salud. Concretamente las funciones son realizar evaluaciones psicológicas para prevenir y diagnosticar trastornos del desarrollo y del aprendizaje, discapacidad cognitiva y altas capacidades y otros trastornos del comportamiento y alteraciones emocionales, detención de necesidades educativa especiales y otros problemas de salud mental; Implementar metodología que favorezcan la prevención primaria en áreas de la inclusión y eviten el sobrediagnóstico; desarrollar intervenciones psicológica, así como la derivación a servicios externos.

–¿Podría darme ejemplos de intervenciones psicológicas educativas en España?

– El programa INTEMO de Inteligencia Emocional, financiado por el Gobierno de España y la Comunidad Autónoma de Andalucía, desarrollado por profesionales de la Psicología del Laboratorio de Emociones de la Facultad de Psicología de la Universidad de Málaga. Consiste en un entrenamiento para jóvenes de entre 12 y 18 años que se centra en el aprendizaje de habilidades emocionales.

El resultado es el desarrollo de las competencias emocionales y sociales que reducen los niveles de agresividad, violencia y conductas disruptivas, disminuyendo así el acoso escolar o bullying, el ciberbullying y otros tipos de violencias.

El programa “Intervención Emocional y Social (SEL)” desarrollado durante 3 años, impartidos por 13 profesionales de la Psicología entrenados. Los resultados mostraron una reducción significativa de la agresión física y verbal en el tiempo a través de la reducción del afecto negativo, la ira y los sentimientos hostiles. El programa TEI, Tutoría Entre Iguales, para prevenir el Acoso Escolar.

Se sigue llevando a cabo, demostrando que las situaciones de acoso desaparecen en un 95%, se minimiza la victimización y disminuye el nivel de estrés, de ansiedad y depresión y se reduce el absentismo escolar, aumentan los niveles de autoestima y autoconcepto y se fomenta el empoderamiento, la motivación, el rendimiento académico y el clima del centro.

El programa Educación Responsable que se está desarrollando en más de 100 centros en España. Sus resultados muestran beneficios en el rendimiento académico, reducción de los niveles de ansiedad y mejora en la comprensión emocional del alumnado.

Y no nos olvidemos del famoso Programa KIVA contra el acoso escolar, que está desarrollado por psicólogas educativas de Finlandia.

–¿Qué piensa de la propuesta de la presencia de la Policía en los colegios para abordar el problema de la violencia en las aulas?

– Los Cuerpos de Seguridad realizan su función, pero creo que no podemos empezar la casa por la ventana y los esfuerzos deben ser dirigidos hacia evitar el problema y no solo a resolverlo cuando ya se está dando. Creo que es importante la prevención para que la problemática no ocurra y para esto hay que ir a la raíz, a la causa y no solo al síntoma, que es lo que se suele hacer.

Si se trabaja preventivamente con las familias, profesorado y alumnado podrán desarrollar los recursos y habilidades para que el problema no se desencadene o se detecte pronto antes de que pueda convertirse en una patología y/ o un problema social, como está ocurriendo.

Me gustaría poner en evidencia que muchos de los retos a los que se enfrenta el sistema educativo están relacionados con problemas psicológicos y de salud mental infato-juvenil, los cuales dificultan la labor educativa.

Los Centros educativos suponen un contexto idóneo para detectar precozmente factores de riesgo para prevenir y abordar las dificultades psicológicas, sociales y cognitivas. Los costes generales de los trastornos mentales y del cerebro en España en el año 2010 alcanzaron los 83.749 millones de euros anuales, aproximadamente un 8% de PIB, lo que supero el gasto público sanitario total. Cerca del 75% de personas adultas que acceden a los servicios de salud mental han presentado algún trastorno diagnosticable antes de los 18 años, sin embargo sólo 1 de cada 4 niños es identificado y tratado durante esta etapa.

De estos datos se pueden deducir la importancia las intervenciones tempranas en salud mental. Y por último me gustaría añadir que estimamos que es necesario reconocer y regular mejor los equipos de orientación, que es conveniente contar en los Centros educativos con profesionales no docentes para afrontar los retos existente para la mejora de la calidad de una Educación Integral, a todos los niveles, no solo a nivel académico y cognitivo, sino también a nivel emocional y social.

Para poder cumplir con todo esto creemos necesario la creación de Equipos de Intervención Multiprofesional, en los que cada Centro educativo cuente con uno de estos equipos que podría estar compuestos por diversos profesionales que prestarían los servicios profesionales que correspondan, según la capacitación que le facilita la formación de sus respectivas titulaciones.

En cuanto a los psicólogos/as Educativos/as desde el Consejo General de la Psicología consideramos que debería estar establecido expresamente que a ellos compete las funciones de “evaluación, diagnósticos e intervención sobre trastornos del desarrollo, del aprendizaje, mentales y del comportamiento en el contexto educativo”.

–¿Cuáles son los distintos ámbitos donde puede ejercer su trabajo y qué presencia tienen los profesionales de la Psicología en Ceuta?

– Como decía antes, estamos formados para comprender e intervenir para el cambio del comportamiento humano, nuestra presencia es necesaria en todos los ámbitos sociales donde esté presente la persona a lo largo de todo su desarrollo evolutivo.

Todavía hay un gran desconocimiento sobre nuestras funciones y se nos sigue relacionando sólo con la Salud Mental, todavía muchas personas no consultan a un psicólogo o psicóloga por miedo al qué dirán. Nuestras áreas de trabajo son desde Psicología Perinatal (periodo en el que acompañamos a la mujer y la familia desde el embarazo hasta los primeros años del bebé), infanto-juvenil, Psicología Clínica y de la Salud, Psicología de Emergencias y Catástrofes, Psicología del Tráfico y la Seguridad, Psicología Educativa, Psicología del Deporte, Psicología de la Intervención Social, del Envejecimiento, Neuropsicología, Aeronáutica, Área de Género, Jurídica, Psicología del trabajo, Organizaciones y Recursos Humanos son algunas de las más conocidas.

En el Colegio de Psicología de Ceuta creemos que hay poca presencia del Profesional de la Psicología en los distintos ámbitos sociales en nuestra ciudad, en sectores donde la Psicología es necesaria para prevenir, mejorar e intervenir en situaciones cotidianas y por supuesto en situaciones difíciles de gestionar por su gran repercusión tanto individual y/o familiar, como social, algunas de ellas de gran impacto social, como las que se están dando, desgraciadamente en nuestra Ciudad, violencia en las aulas, abusos sexuales, problemas con los MENAS, violencia de género, inmigración y un largo etc.

Desgraciadamente encontramos que hay una gran diferencia en cuanto a las colaboraciones y convenios que los distintos Colegios de Psicología suscriben con Instituciones tanto Privadas como Públicas de otras Comunidades Autónomas y con las que tiene el Colegio de Psicología de Ceuta y nuestra Ciudad Autónoma.

Observamos que en el resto de las CCAA las colaboraciones con los Colegios de Psicología son muy importantes, externalizando la prestación de servicios, que la Comunidad Autónoma no tiene recursos para prestar a los Colegios Profesionales.

Aprovecho para demandar a las distintas Instituciones que cuenten con el Colegio de la Psicología de Ceuta, sentimos que en muchas ocasiones se olvidan o no son conscientes de la importante contribución que podemos prestar para la mejora de la salud y el bienestar social en general y en concreto en muchas áreas que consideramos que son deficitarias, en cuanto a la presencia de profesionales de la Psicología; así como asesores de la conducta humana en Comisiones de Expertos sobre distintas temáticas, como es el caso que hoy nos ha ocupado, el Pacto por la Educación.

Nos hubiera gustado aportar algunas demandas elaboradas desde el Consejo General de la Psicología, como las comentadas aquí, para que se hubieran defendido en las reuniones que las Consejerías de Educación de las Comunidades Autónomas han tenido con el Ministerio para la elaboración de dicho Pacto.

*Fuente: https://elfarodeceuta.es/lola-escalante-entre-el-14-y-el-19-de-la-poblacion-infantojuvenil-padece-trastorno-de-ansiedad/

Comparte este contenido:
Page 206 of 454
1 204 205 206 207 208 454
OtrasVocesenEducacion.org