Page 116 of 935
1 114 115 116 117 118 935

España: El Gobierno prevé aumentar en 200.000 las plazas de FP en cuatro años

Europa/España/23 Julio 2020/eldiariolaeducacion.com

El presidente del Gobierno ha presentado esta mañana el Plan de modernización de la FP con el que, además de conseguir la integración de la formación profesional del sistema educativo y para el empleo, pretende aumentar la oferta de plazas y modernizar y digitalizar los diferentes estudios.

España tiene un importante problema en su formación profesional. Sobre todo, en las titulaciones medias de FP, donde nos encontramos muy por detrás de la media de la UE. Algo que hace que la mitad de las personas trabajadoras del país no tengan una titulación o una certificación.

Esto, según el documento del Plan de modernización presentado esta mañana por Pedro Sánchez, presidente del Gobierno. En total, reza el texto, hay 11.043.300 personas sin acreditación alguna. El Gobierno pretende que en cuatro años esta cifra descienda en 3.352.000.

Este es uno de los puntos importantes de este proyecto, pero no el único. Junto a temas como la necesaria digitalización de los estudios, se encuentra, por ejemplo, la apuesta de aumentar las plazas de FP en 200.000 más en los próximos años.

La falta de una oferta pública suficiente ha sido en los últimos años, sobre todo tras la crisis de 2008, una de las más importantes críticas de la comunidad educativa de formación profesional. Miles de chicas y chicos se han quedado fuera de las aulas todos los años por no tener dónde estudiar.

La creación de estas 200.000 nuevas plazas provocaría que de aquí a 2023 hubiese algo más de un millón de estudiantes. Según los datos del Ministerio de Educación y Formación Profesional, en el presente curso se han matriculado en estos estudios algo más de 860.000 personas.

Tanto para la acreditación como para el aumento de las plazas de formación profesional, así como para el resto de las acciones previstas por el Plan, el Gobierno se compromete a realizar una inversión de 1.500 millones de euros en cuatro años. Este 2020 será de 316,4 millones.

Uno de los mayores problemas de España es la carencia de suficientes chicos y chicas matriculadas en los grados medios. Mientras un porcentaje más que suficiente de alumnado en bachillerato, en la FP equivalente estamos muy por debajo de la media de la UE. De hecho, si se consultan los datos estadísticos del Ministerio, desde el curso 2013-2014 hasta el curso 2018-2019, el número de estudiantes matriculados en grado medio es el mismo. De hecho, hay 30 personas menos. Eso sí, el Plan presentado hoy afirma que en el presente curso esta cifra ha crecido de forma importante.

Apuntaba allá por 2008 Oriol Homs en su estudio dedicado a la formación profesional, La Formación Profesional en España. Hacia la sociedad del conocimiento, publicado por La Caixa, que el reto de los graduados en grado medio difícilmente podría solventarse si no era posando la mirada en la secundaria obligatoria. Es el momento de la educación en el que hay que lograr que un mayor número de personas consigan titular para, después, poder optar a los estudios profesionales medios.

El sociólogo decía en aquel momento que «el problema de fondo hay que buscarlo en el elevado índice de fracaso escolar (…). Esta es la razón última que explica el escaso número de jóvenes que acceden a los ciclos de grado medio». A ello, también sumaba que «el interés del grado medio al acabar la ESO es menor» que el del bachillerato.

Y a pesar de que desde entonces hasta ahora, el dato de abandono escolar temprano ha mejorado de manera importante, parece que esto no se ha traducido en un aumento de demanda de este tipo de salidas profesionales.

Además de las creación de miles de plazas en los próximos años o del reconocimiento a millones de trabajadores de sus competencias profesionales, el Plan de modernización presentado hoy pretende poner el foco en cuestiones como la digitalización de la etapa, la innovación y el emprendimiento, la renovación del catálogo de ciclos, la potendiación de la FP dual para que pueda llegar a pymes y micropymes también, la mejora de la orientación profesional o la creación de los centros de FP como organizadores de tecnología aplicada.

Fuente: https://eldiariodelaeducacion.com/2020/07/22/el-gobierno-preve-aumentar-en-200-000-las-plazas-de-fp-en-cuatro-anos/

Comparte este contenido:

España: 40 millones para los programas de refuerzo del próximo curso

Europa/España/23 Julio 2020/eldiariolaeducacion.com

  • El Gobierno ha aprobado en el Consejo de Ministros, la inversión de 40 millones de euros para diferentes actividades a las que se pueden adherir los centros educativos con el objetivo de paliar las situaciones provocadas por los cierres escolares del último trimestre del curso pasado.

El nuevo programa de apoyo, PROA+, es uno de los ases en la manga del Gobierno de Pedro Sánchez para hacer frente a las situaciones tan complicadas en lo educativo que ha supuesto el cierre de los centros educativos desde mediados de marzo hasta el próximo mes de septiembre.

Diferentes investigaciones han puesto el acento en la pérdida de contenidos curriculares que han vivido miles de chicas y chicos, principalmente los más desfavorecidos del sistema, durante estos meses. Pasar casi medio año (natural) sin pisar las aulas es un problema para la inmensa mayoría del alumnado.

Con la reedición de los PROA, el Gobierno quiere paliar algunas de las situaciones que hayan podido resultar más complicadas. Para ello dotará el programa con 40 millones de euros que serán repartidos entre las comunidades autónomas en función de factores como la población escolar total, la tasa de idoneidad en cada territorio o el número de alumnos y alumnas con necesidades específicas de apoyo educativo.

Los beneficiarios podrán ser centros públicos o centros privados concertados.

El Ministerio de Educación y FP establece los objetivos del PROA+: garantizar la continuidad del alumnado, especialmente el más vulnerable; mejorar el funcionamiento de los centros mediante la flexibilización de su organización garantizando las medidas sanitarias; reforzar la equidad; facilitar la adaptación de las programaciones didácticas hacia las competencias clave; responder a las necesidades educativas surgidas del cierre y el confinamiento en relación al bienestar socioemocional de estudiantes y profesorado, y, finalmente, reforzar la dotación y formación de los equipos docentes y de orientación.

Fuente e imagen tomadas: https://eldiariodelaeducacion.com/2020/07/21/40-millones-para-los-programas-de-refuerzo-del-proximo-curso/

Comparte este contenido:

Libro (PDF): Educación 2050. Construyendo hoy la educación de mañana

Reseña: Juan Carlos Casco

 

Un trabajo para comenzar a construir hoy la educación del 2050 en torno a los grandes desafíos sociales, económicos, tecnológicos y laborales de nuestro tiempo; planteando un conjunto de acciones prácticas para transformar la educación desde la experiencia de más de 20 años en el desarrollo de proyectos de transformación educativa en diferentes países.

Educación 2050 forma parte de cuatro trabajos de prospectiva que comenzamos a elaborar en 2015, el primero de los cuales es Extremadura 2050, publicado en 2019 y los que cerrarán la serie son España 2050 y Global 2050.

La importancia de pensar a largo plazo en la educación tiene sentido siempre que haya una voluntad y decisión inquebrantables para actuar ahora. En la realidad en la que vivimos es más importante la acción que la reflexión. Por ese motivo nos hemos aventurado a escribir Educación 2050, porque con anterioridad hemos dedicado 20 años a hacer, a abordar innovaciones educativas desde la praxis en diferentes países con diversos actores educativos.

Para diseñar el futuro de la educación no podemos preguntar al pasado, aunque este ejercicio era útil cuando el mundo era estable y la realidad sólida, pero se volvió arriesgado cuando se convirtió en líquida, e inútil cuando se ha vuelto volátil.

Tampoco podemos empezar a hacer realidad hoy la educación del 2050 sin un ejercicio de prospectiva, desde el análisis de las grandes tendencias del futuro. No podemos adivinar el futuro, pero sí conocer sus inercias y plantear escenarios para elaborar respuestas inteligentes en el presente.

En la construcción de una realidad tan multipolar como la educación no funcionan los consensos, porque el consenso supone un acuerdo de mínimos que en la práctica se traduce en dejar las cosas como están. Hemos de aceptar que la invalidez del consenso en determinados asuntos ha de ser suplida por un liderazgo apoyado en la autoridad de personas que gozan de prestigio internacional. Cuando no hay consenso posible, solo es posible avanzar desde el liderazgo.

Aunque el futuro es esquivo y va por libre, la única forma de encauzarlo es creando una visión acorde a sus tendencias, capaz de generar un nuevo relato que dé un sentido y significado histórico a la comunidad educativa y se haga cargo del estado de ánimo de la gente.

Los descontentos del presente, si se canalizan bien, a la postre son los logros del futuro; unos logros de los que toda la sociedad termina apropiándose y sintiéndose orgullosa (incluso aquellos que se opusieron abiertamente). Así ocurrió con el Primer Contrato Social de la Educación por el que se logró la educación gratuita y obligatoria, con el Segundo que extendió la formación universitaria, y ahora con el Tercer Contrato Social de la Educación que se está gestando en este momento para hacer frente a los grandes desafíos sociales, económicos, tecnológicos y laborales del siglo XXI.

Educación 2050 aborda desde la praxis un nuevo paradigma educativo,  superador del actual que está completamente agotado en sus planteamientos, estándares y varas de medir. Un modelo empecinado en unos parámetros obsoletos impuestos por organismos como la OCDE o los informes PISA.

Educación 2050 plantea respuestas prácticas a los desafíos de una nueva era, el Virtuceno, que está removiendo los cimientos mismos de la civilización y avanza imparable. Pese a la emergencia del coronavirus, las grandes tendencias del futuro siguen siendo las mismas, únicamente se ha acelerado su progresión en los ámbitos de la economía, la tecnología, el trabajo o la educación.

Educación 2050 no arroja datos ni cifras, no describe el mundo de la educación, sino que pone encima de la mesa las claves y acciones prácticas para transformarla.  El ejercicio de reunir la información, datos y cifras que avalan las tendencias son accesibles y fáciles de obtener a través de numerosas fuentes documentales que avalan el fracaso de un modelo agotado.
Nuestro propósito es construir los caminos, poner en práctica las experiencias y generar nuevas propuestas con las que los organismos internacionales, gobiernos e instituciones educativas puedan diseñar nuevas políticas públicas, programas y proyectos de innovación educativa.

Cuando hablamos de educación desde un enfoque holístico, el análisis se derrama e invade otros campos como el mundo de la tecnología, la economía, la filosofía o el trabajo, pues todos ellos están interrelacionados y forman parte de una misma realidad y unidad de acción. Por ese motivo tratamos el cambio educativo desde la óptica del mundo económico, laboral o tecnológico.

La educación a lo largo de la vida, el aprendizaje de competencias clave, el desarrollo de la creatividad, la innovación, el emprendimiento y el liderazgo como alternativa a un empleo cada vez más escaso, el desempleo estructural, los nuevos roles de los actores educativos… Son aspectos clave que se abordan en 2050 para avanzar un nuevo paradigma educativo, que es inmaduro aún y no tiene respuestas a todos los interrogantes que se plantean, por lo que convoca a la comunidad educativa internacional para construirlo entre todos.

No sabemos cómo va a ser el mundo del futuro pero sí sabemos qué competencias serán esenciales para que las personas construyan sus proyectos vitales, por ese motivo proponemos avanzar rápido y hacer cambios cuanto antes. No sabemos las necesidades que tendremos en 2050, pero sí sabemos las habilidades que necesitaremos para satisfacerlas.

Para comenzar a hacer realidad hoy la educación de 2050 necesitamos líderes de verdad, se precisa coraje y valentía política en los gobernantes. Tomar decisiones que pueden ser valoradas como impopulares por los adalides del cortoplacismo.

La educación necesita líderes que estén por encima de la miserable refriega política del día a día, líderes que piensen en las futuras generaciones antes que en las próximas elecciones, líderes que tengan un proyecto de país a largo plazo y una hoja de ruta educativa para hacerlo realidad.

Si aparecen dirigentes capaces de pensar en el futuro y comprometerse con el cambio, estaremos en la antesala de un nuevo estilo de hacer política y ante una gran oportunidad para la educación que puede ser bien valorada por los votantes.

Si las familias hacemos inversiones en la educación de nuestros hijos y  esperamos 20 años o más para esperar resultados ¿Por qué nuestros gobiernos no pueden actuar de la misma manera?

Para quienes quieran hacer el ejercicio de pensar a largo plazo y actuar de manera inmediata, Educación 2050 les aporta claves fundamentales.

Pensar la educación del 2050, la España del 2050 y el mundo Global de 2050 es un ejercicio que tiene sentido si empezamos a actuar hoy. Nosotros lo estamos haciendo y te invitamos a que te sumes.

 

Autor/a:    Casco Casco Juan Carlos –  Talavera Siles Telémaco

 

Editorial/Editor:          Emprendedorex © 2020

Año de publicación:    2020

País (es):                       España

Idioma:                         Español.

 

Descarga:      Educación 2050. Construyendo hoy la educación de mañana

 

Fuente  de la reseña:    http://juancarloscasco.emprendedorex.com/educacion-2050/

Comparte este contenido:

Héctor Ruiz Martín: “La ciencia puede ayudar a mejorar la educación, esto es algo más que una moda”

Por: Jesús Méndez.
.

 

A pesar de las evidencias sobre cómo aprendemos, la docencia se ha visto tradicionalmente como un arte. Ahora puede ser el momento de que esto cambie. En ¿Cómo aprendemos? se recogen principios fundamentales para las escuelas, algunos de ellos sorprendentes. Además, durante la pandemia, su autor ha presentado un segundo libro, Conoce tu cerebro para aprender a aprender.

Justo unos días antes de que se decretara el estado de alarma nos recibía en su despacho como director de la Fundación Internacional para la Enseñanza de la Ciencia (ISTF), en la parte alta de Barcelona. Héctor Ruiz Martín es biólogo y máster en genética evolutiva, pero lleva ya muchos años dedicado a la docencia y a la investigación sobre ella.

Ha publicado en la editorial Graó el libro ¿Cómo aprendemos? Una aproximación científica al aprendizaje y la enseñanza, el primero de una colección que él mismo coordinará y que han llamado “Educación basada en evidencias”. Es una suerte de manual con los ingredientes principales que, según los estudios, deberían encontrarse en las escuelas.

Algunos de ellos pueden parecer sorprendentes, casi tanto como el hecho de que apenas haya lugares donde acudir para conocerlos. Su tono es tranquilo, pero apasionado. Se percibe la emoción por los temas que trata y por el momento que advierte respecto a ellos.

En la presentación del libro en Barcelona dijo que estamos viviendo un momento muy emocionante en la educación, una especie de boom con el interés por las evidencias científicas sobre la docencia. Sin embargo, muchos de los estudios a los que se acuden son de los años 70, o incluso anteriores. ¿Por qué esta paradoja?

Es curioso, pero es un hecho. La ciencia ha ido avanzando por un lado y la educación por otro, y no ha habido apenas comunicación entre ellas. De hecho, cuando ha habido transferencia de una a otra ha sido generalmente desde la pseudociencia, hay muchísima pseudociencia en las escuelas. Seguramente porque es muy fácil de comprar, porque tiende a aportar soluciones fáciles, sin matices y con mucha seguridad. No sé por qué ahora hay más interés por la ciencia, porque realmente hay algunos principios bastante sólidos sobre cómo aprendemos que tenemos incluso desde los años 50.

“En las escuelas hay mucha pseudociencia porque es muy fácil de comprar, aporta soluciones fáciles, sin matices y con mucha seguridad”

Y, curiosamente, los profesores que más compran esa pseudociencia o neuromitos son los que están más interesados por la ciencia para ayudarles en su labor.

Sí, eso está estudiado. Y es así porque tienen ese interés, pero no disponen del tiempo ni de los recursos para informarse adecuadamente.

Eso sorprende, que no haya ningún lugar oficial al que puedan acudir y obtener esa información.

No, no lo hay. Es que está todo por construir. Donde hay más movimiento es en Estados Unidos e Inglaterra, aunque es algo de hace una década, no más. Y creo que esto es algo más que una moda. Creo que en esta ocasión podemos estar presenciando el momento en que la profesión docente va a empezar a incorporar la evidencia científica sobre cómo aprendemos como una herramienta para respaldar su labor. Porque la ciencia puede contribuir a mejorar la educación.

Salvando las enormes distancias, creo que puede ser como cuando la medicina empezó a incorporar también el conocimiento científico. Y eso no hace que de repente la docencia vaya a basarse solo en la evidencia, siempre va a tener su parte de arte. La cuestión es que hasta ahora prácticamente solo había tenido arte.

Dice que el libro no es un libro de recetas, sino de principios generales. ¿Por qué esa decisión?

Sí, serían algo así como los ingredientes. Una receta en educación se entiende como un método, y el problema es que hay demasiadas variables en juego. Cuando aplicas un método en contextos diferentes ofrece resultados muy distintos, ya sea por las características de los que aprenden, de los recursos disponibles o incluso por las preferencias de los propios docentes, y no hay que olvidar la parte de arte de la que hablábamos. Lo importante es que los ingredientes generales formen parte de la receta.

“No significa que de repente la docencia vaya a basarse solo en la evidencia, siempre va a tener su parte de arte. La cuestión es que hasta ahora prácticamente solo había tenido arte”

Uno de esos ingredientes principales de los que habla es la memoria, no entendida como la tradicional memorización sin comprensión, sino como la habilidad que nos permite aprender cualquier cosa. Pero es algo que no se puede mejorar en abstracto.

Exacto. Es que una cosa es el concepto popular de la memoria y otro el concepto científico. El aprendizaje ocurre gracias a esa capacidad que tiene el cerebro a la que llamamos memoria, pero esta no es un músculo que se pueda ejercitar como tal, eso es un mito. Por eso no tiene sentido obligar a aprender poemas o cosas del estilo con ese fin.

De lo que depende que la memoria funcione mejor es de los conocimientos previos que se tengan sobre un tema o área en particular. Más que un músculo en concreto, la imagen correcta sería la de millones de músculos: cuando ejercitas un tema en concreto estás ejercitando uno de ellos, pero no los demás.

De ahí que, como se dice en el libro, una herramienta eficaz en clase sea la de activar esos conocimientos previos antes de explicar otros nuevos. ¿Cómo puede hacerse?

De muchas formas. Simplemente comentando al principio de la clase una noticia, una anécdota, una situación o experiencia… Algo relacionado con el tema que haga que los alumnos expliquen o piensen qué saben sobre ello. Hacerles conscientes y dejar sensibilizados esos conocimientos. Porque la única manera de aprender es conectarlo con algo que sepas. Si yo ahora te hablo en un idioma que no conoces, no recordarás nada de lo que te diga.

En el libro se dice que una de las mejores maneras de estudiar es la práctica de la evocación, es decir, repasar mentalmente qué se sabe sobre un tema que se ha leído o estudiado previamente. Se citan muchos estudios que lo demuestran, pero la mayoría de los alumnos ni lo saben ni lo practican. ¿Cómo puede ser?

“La única manera de aprender es conectarlo con algo que sepas. Si yo ahora te hablo en un idioma que no conoces, no recordarás nada de lo que te diga”

Porque nadie les ha enseñado, y es algo que los alumnos aprenden por azar, de forma espontánea, sin que esté relacionado con la inteligencia. No tenemos ninguna intuición sobre cómo funciona nuestro cerebro que nos lleve a hacerlo de la forma más eficaz. Hoy sabemos que la mayoría de ellos estudian leyendo y releyendo, lo cual es más cómodo pero mucho menos útil. De hecho, aunque puede dar resultados a corto plazo, estos son menos duraderos. Y cuando aumenta la exigencia, deja de funcionar.

Una oportunidad que se menciona para promover la evocación —además de enseñarla y fomentarla como tal— es la evaluación continua. Se dice que las pruebas o exámenes no deberían ser el final del proceso, sino parte de él. Y que no deberían usarse notas.

Sin evaluación no puede haber feedback. Y el feedback es clave para el aprendizaje, pero ha de hacerse bien. Esto no sucede si solo te dice estás aquí, te tiene que decir qué es lo que tienes que hacer para llegar a donde queremos llegar.

Las notas solo te dicen: estás aquíY además se interpretan como un etiquetaje, algo que hay que evitar a toda costa porque genera muchos problemas. A los que han sacado una mala nota porque les deja en un estado de indefensión aprendida, la sensación de que “no valgo para esto” —cuando en realidad, si no hay ningún problema grave, todos pueden llegar a alcanzar el nivel que se pide en la escuela—. A los que sacan buenas notas, porque les fuerza a conservar ese estatus, muchas veces a través de memorizaciones superficiales. Y porque no les prepara bien para posibles fracasos, que en algún momento acabarán sucediendo.

Deberíamos sustituir las notas por estadosPor ejemplo: necesitas trabajar más esto, estás cerca o lo has conseguido, incidiendo en el esfuerzo invertido y en las estrategias que han usado en el proceso. Eso promueve la autoeficacia, que es clave para la motivación. Y sí, las evaluaciones deberían ser repetidas y periódicas: con ello promovemos la evocación y rebajamos la tensión, porque diluimos el riesgo, con lo que ayudamos además a los alumnos con problemas emocionales. Y das también oportunidades de éxito a corto plazo, que son motivadoras.

“Deberíamos sustituir las notas por estados. Por ejemplo: necesitas trabajar más esto, estás cerca o lo has conseguido, incidiendo en el esfuerzo invertido y en las estrategias que han usado en el proceso”

Una de las grandes tendencias en la educación es la enseñanza por proyectos. ¿Qué tiene que tener este método para funcionar bien? ¿Sirve para todo y para todos?

Los proyectos tienen una gran ventaja, que es el aspecto de la motivación, pero deben estar bien diseñados para que los alumnos piensen el máximo tiempo posible sobre lo que quieres que aprendan, y no sobre cosas superfluas. A veces se trabaja una presentación sobre un tema y lo que terminan aprendiendo es Power Point. En general funcionan mejor a nivel académico cuanto más mayores son.

Además, hay que enseñarles a colaborar (una forma sería a través de evaluaciones conjuntas de todo el grupo). Y hay que evitar la sobrecontextualización: a veces no son capaces de abstraer lo aprendido y aplicarlo a otros contextos diferentes.

Por ejemplo, pueden aprender sobre la relación distancia-tiempo trabajando en un proyecto sobre viajes en barco, pero luego tener dificultades para apreciar que los mismos principios se aplican en un contexto como el atletismo. En general, no creo que todo deba hacerse por proyectos, debería combinarse con la instrucción directa, la cual incluye cualquier actividad fuertemente guiada por el profesor. De hecho, los proyectos son mejores cuando ya has aprendido, porque permiten aplicarlo y transferirlo. Bastantes escuelas lo están haciendo así.

Sin embargo, otra de las tendencias actuales es la del aprendizaje por descubrimiento, donde la función del docente es principalmente la de acompañar al alumno. ¿Hasta qué punto han demostrado su validez?

El principal problema aparece cuando las prácticas se llevan a los extremos, especialmente para los niños que ya vienen con menos oportunidades desde casa. Lo que sabemos es que la manera más efectiva para aprender algo nuevo es que alguien que lo domina te lo enseñe o te guíe en su aprendizaje, lo que llamamos instrucción directa. Y eso no significa pegar un rollo.

“Yo no creo que todo deba hacerse por proyectos, deberían combinarse con la instrucción directa guiada por el profesor”

Una clase por instrucción directa puede ser interesante y motivadora e incluir múltiples actividades en que los alumnos piensen sobre lo que están aprendiendo. A medida que el alumno va ganando dominio ya sí es positivo irse apartando paulatinamente.

¿Qué mitos o falsas creencias están más presentes ahora en las escuelas?

Hay varios, como el de los estilos de aprendizaje, que afirma que cada niño tiene una forma de aprender distinta. Pero no hay ninguna prueba de ello: lo que queremos que aprendan en la escuela se basa en su significado, no en el canal sensorial por el que se lo presentemos.

En general estos neuromitos suponen una pérdida de tiempo, recursos y oportunidades. Pero hay un caso especialmente grave en mi opinión, que puede causar daño y que tiene que ver con una malinterpretación del aprendizaje por descubrimiento: me refiero a algunos métodos bastante extendidos que se proponen para aprender a leer —como el método global— y que se basan en la creencia de que la lectura es algo natural.

“Los neuromitos, como el de los estilos de aprendizaje y el de la lectura por método global, suponen una pérdida de tiempo, recursos y oportunidades”

Estos métodos prescinden o minimizan la enseñanza explícita de la relación entre fonemas y grafemas —las letras y sonidos— y consideran que los niños aprenden a leer por mera exposición a las palabras y los textos. Hay muchas pruebas de que estos métodos son menos eficaces y que más niños se quedan atrás por ellos.

El primer capítulo del libro se abre con una frase de un jugador de béisbol: “Es increíble todo lo que no sabes sobre el juego al que has estado jugando toda la vida”. ¿Por qué esta cita?

Porque es muy significativa. Es de Mickey Mantle, una estrella del béisbol. La vi en la película Moneyball, que cuenta la historia real del director de un equipo que decidió empezar a usar la ciencia y la estadística para mejorar el rendimiento de sus jugadores. Cuando vi la frase pensé que era lo mismo que yo había vivido con la educación. Es increíble lo que puedes dar por sabido sobre cómo funciona el aprendizaje y luego entrar en la ciencia y darte cuenta de cuánto era lo que no sabías.

[Unos meses después de esta charla presencial, Héctor Ruiz ha publicado un nuevo libro. Se titula Conoce tu cerebro para aprender a aprender, donde recoge muchas de estas claves pero dirigidas de forma directa a los estudiantes. Aprovechamos para hacerle más preguntas, esta vez, a distancia].

¿De qué depende la habilidad de aprender?

No solo depende de las cualidades innatas, es cuestión de técnica y estrategia. Sin embargo, normalmente no enseñamos a los estudiantes a aprender. Cada uno desarrolla sus métodos y no suelen ser muy efectivos.

¿Cómo está repercutiendo la ausencia de escuela debido al nuevo coronavirus en los estudiantes? La afectación puede variar mucho según las condiciones de cada familia, pero ¿qué debería ser lo primordial para que la repercusión fuera lo más leve posible?

“La pérdida en el ámbito de la lectura es la que afecta de manera más desigual a los alumnos en función de su nivel socioeconómico. Los que pertenecen a familias con menos recursos son los más perjudicados”

Para responder a esta pregunta podemos fijarnos en el fenómeno de pérdida estival: los periodos largos sin escuela hacen que los alumnos experimenten cierta regresión respecto a lo aprendido. Esta pérdida afecta a todos los alumnos y, según los estudios disponibles, lo hace especialmente en tres aspectos: en cuestiones de cultura general y, sobre todo, en matemáticas y en competencia lectora.

Ahora bien, lo más preocupante es que diversos estudios reflejan que la pérdida en el ámbito de la lectura es la que afecta de manera más desigual a los alumnos, en función de su nivel socioeconómico. Los que pertenecen a familias con menos recursos son los más perjudicados. Volver nuestra atención hacia aspectos tan esenciales como la lectura, incluyendo la motivación para leer, el disfrute de la lectura y, cómo no, la mejora de la comprensión lectora, podría ser una de las claves a tener en cuenta.

Un estudio de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura analiza los factores que excluyen a los alumnos en todo el mundo. Menos del 10 % tiene leyes para garantizar la plena inclusión. El 40% de los países empobrecidos no ha dado apoyo a los alumnos desfavorecidos en la crisis del coronavirus.

  Fuente de la entrevista: https://www.agenciasinc.es/Entrevistas/La-ciencia-puede-ayudar-a-mejorar-la-educacion-esto-es-algo-mas-que-una-moda
Comparte este contenido:

España: «El virus obliga a pensar en interdependencias que el capitalismo nos enseña a no pensar»

«El virus obliga a pensar en interdependencias que el capitalismo nos enseña a no pensar»

 Katharine Viner / Naomi Klein

Entrevista con Naomi Klein :: La crisis climática, la igualdad social y la justicia deben ser las cuestiones sobre las que debe girar la reconstrucción del mundo pospandemia

La activista, escritora y académica es la primera titular de la Cátedra Gloria Steinem de medios, cultura y estudios feministas de la Universidad Rutgers (Nueva Jersey, EEUU). La versión libro de bolsillo de su libro On Fire (2019) será publicada por la editorial Penguin el 24 de septiembre.

¿Qué le parece el confinamiento?

Para quienes estábamos impartiendo clases a través de Zoom, y ese ha sido mi caso, además de mantener una escuela en casa, haciendo malabarismos y descubriendo cómo hacer cosas en el horno, ha sido muy cómodo. Ahora volveré a Canadá para pasar el verano con mi familia y en cuarentena, porque en Canadá, cuando regresas de EEUU, tienes que pasar una cuarentena muy estricta. Ya llevo casi dos semanas sin salir de casa. De hecho, estoy empezando a desarrollar alguna fobia a salir del confinamiento.

Hay una cita muy buena en uno de sus últimos ensayos que dice: «Los humanos somos un riesgo biológico, las máquinas no lo son». Me llegó a los huesos y me hizo sentir miedo por el futuro. Ha escrito cosas muy interesantes sobre un «Nuevo Acuerdo sobre las Pantallas».

Silicon Valley tenía una agenda antes del coronavirus en la que ya imaginaba sustituir muchas, demasiadas, de nuestras experiencias corporales insertando tecnología en medio del proceso.

Por eso, para aquellos pocos espacios en los que la tecnología aún no media en nuestras relaciones, había un plan -por ejemplo, sustituir la enseñanza presencial por aprendizajes virtuales, la medicina del contacto personal por telemedicina y la entrega en persona mediante robots. Todo está siendo resignificado como tecnología sin contacto tras la COVID-19, es un modo de sustituir el diagnóstico del problema, que ahora es el contacto.

Pero en lo personal, lo que más echamos de menos es el contacto. Y necesitamos ampliar el menú de opciones que tenemos para vivir con la COVID-19, porque no tenemos vacuna y no está próxima. Incluso si se dan grandes avances, van a pasar muchos, muchos meses, posiblemente años, antes de que pueda desarrollarse a la escala que necesitaríamos.

Entonces, ¿cómo vamos a vivir con esto? ¿Vamos a aceptar una «normalidad» previa a la COVID-19 pero muy menguada y sin las relaciones que nos sostienen? ¿Vamos a permitir que nuestros hijos reciban todo su aprendizaje a través de la tecnología? ¿O vamos a invertir en personas?

En vez de poner todo el dinero en un ‘Nuevo Acuerdo sobre las Pantallas’ y en tratar de resolver los problemas de un modo que disminuya nuestra calidad de vida, ¿por qué no nos ponemos a contratar profesores a todo trapo? ¿Por qué no tenemos el doble de profesores en clases con la mitad de alumnos y empezamos a pensar en la educación al aire libre?

Hay tantas formas en las que podemos pensar para dar respuesta a esta crisis que no aceptamos esa idea de que tengamos que regresar al statu quo previo a la COVID-19, solo que en una versión peor, más vigilados, con más pantallas y menos contacto humano.

¿Sabe de algún gobierno que tenga ese discurso?

Me anima escuchar a Jacinda Arden hablar de una semana laboral de cuatro días como solución al hecho de que Nueva Zelanda es muy dependiente de los ingresos del turismo. Nueva Zelanda es, probablemente, el país que mejor ha lidiado con la pandemia, al menos mejor que otros en lo que se refiere a tasas de mortalidad. No puede abrir las puertas a los turistas como lo ha hecho en el pasado y de ahí nace la idea de que quizás los neozelandeses deberían trabajar menos, cobrar lo mismo y tener más tiempo libre para disfrutar de su propio país con seguridad.

¿Cómo bajamos el ritmo? Pienso mucho en eso. Parece que cada vez que pisamos el acelerador de «que todo siga igual» o «de regreso a la normalidad» el virus aparece de nuevo y dice: «Frenad».

A todos nos encantan esos momentos de frenar pero el gobierno del Reino Unido está empeñado en regresar a la normalidad pase lo que pase, abriendo todo, por ejemplo los pubs, y está desesperado por que nos vayamos de vacaciones. Es urgente que nada cambie en nuestras vidas, que nos limitemos a regresar a una realidad igual a la de antes.

Eso es una locura. Es muy pequeño el porcentaje de población que quiere abrir las puertas de nuevo como si nada. De hecho, hay una mayoría de personas mucho más preocupada por tener que regresar al trabajo antes de que sea seguro o por mandar a sus hijos al colegio antes de que lo sea. A veces, se presenta como dar a la gente lo que pide, pero no es eso lo que muestran las encuestas.

Hay ciertas similitudes en el modo en que Donald Trump y Boris Johnson han gestionado la crisis. La están convirtiendo en una especie de prueba de masculinidad y, en el caso de Johnson, incluso después de haber pasado la enfermedad. Jair Bolsonaro hablaba de que era atleta y sabía como gestionarlo [el presidente brasileño reveló que tenía coronavirus poco después de hacer esta entrevista]; Trump habló de lo bueno de su genética.

Me interesa su punto de vista sobre las protestas por los derechos civiles a raíz de la muerte de George Floyd. ¿Por qué cree que han sucedido ahora? Es intrigante que, en medio de una crisis como esta, se produzcan grandes manifestaciones contra el racismo por todo el mundo.

No es la primera ola de movilizaciones de estas características. Pero creo que hubo algunos aspectos que fueron únicos debido a la crisis de la COVID-19 y al impacto descomunal en las comunidades afroamericanas en ciudades como Chicago, por ejemplo, donde, según algunas fuentes, hasta el 70% de los fallecidos de COVID-19 eran afroamericanos.

Ya sea porque son quienes desempeñan trabajos de más riesgo con menor protección, por el legado de contaminación ambiental en sus comunidades, el estrés, el trauma o un sistema sanitario que las discrimina, las personas negras cargan de manera desproporcionada con las muertes por el virus. Es un hecho y desafía la idea de que todos estamos juntos en esto.

En este momento traumático, esos asesinatos, el de Ahmaud Arbery, el de George Floyd, el de Breonna Taylor, se abren paso. Y surge una pregunta recurrente: ¿qué hacen en esas protestas tantas personas que no son negras? Eso es nuevo. Al menos en la escala en la que ha sucedido. Muchas de estas manifestaciones fueron multirraciales de verdad; manifestaciones multirraciales lideradas por personas negras. ¿Por qué esta vez ha sido diferente?

Tengo algunas ideas. Una tiene que ver con que la pandemia ha introducido una cierta suavidad en nuestra cultura. Cuando bajas la velocidad, sientes más las cosas; cuando estás en una carrera constante por la supervivencia, no te queda demasiado tiempo para la empatía. Desde que todo esto comenzó, el virus nos ha obligado a pensar en relaciones e interdependencias. Lo primero en lo que piensas es, de todo lo que toco, ¿hay algo que lo haya tocado alguien antes? Lo que como, el paquete que acaban de entregarme, la comida de las estanterías. Son conexiones en las que el capitalismo nos enseña a no pensar.

Creo que vernos obligados a pensar de manera más interconectada puede habernos ablandado al pensar en estas atrocidades racistas, como algo que no es solo un problema de otras personas.

Esta es una gran cita de su último libro, On Fire: «Todo lo que ya era malo antes del desastre se ha degradado al nivel de lo insoportable». El modo en que la policía trata a los hombres negros es insoportable.

Siempre que nos golpea un desastre escuchamos el mismo discurso: «El cambio climático no discrimina, la pandemia no discrimina. Estamos juntos en esto». Pero eso no es cierto. Los desastres no funcionan así. Ejercen de intensificadores y magnificadores. Si tenías un trabajo en un almacén de Amazon que ya estaba afectándote antes de que esto comenzara o si estabas en alguna residencia de mayores y ya se te trataba como si tu vida no valiera nada, ya era malo antes, pero todo eso se magnifica hasta convertirse en insoportable ahora. Y si antes era desechable, ahora se te puede sacrificar.

Eso por hablar solo a la violencia visible. Tenemos que hablar más sobre la violencia escondida, la violencia doméstica. Sin rodeos, cuando los hombres se estresan, las mujeres y los niños lo sufren. Estos confinamientos son estresantes porque las familias no tienen manera de tomarse un tiempo los unos de los otros. Incluso la mejor familia necesita algo de espacio. Si añades despidos y presión económica el resultado es el que vemos, una situación actual muy mala para las mujeres.

Pasó gran parte del año pasado trabajando en la campaña de Bernie Sanders y en el denominado ‘Green New Deal’. ¿Cómo ve todo eso ahora? ¿Se siente más o menos optimista respecto a su potencial?

En cierta manera, es más complicado. Menciona a Bernie y, sin duda, hubiera preferido que el resultado fuera un candidato presidencial que basa su campaña en el ‘Green New Deal’. Solo podremos ganar cuando haya una interacción entre un movimiento de masas que presione desde el exterior con una receptividad en el interior del sistema. Creo que tuvimos esa oportunidad con Bernie.

Con Joe Biden es más difícil, pero no imposible. Al final de On Fire planteé diez razones a favor de un ‘Green New Deal’ y los motivos por lo que es una buena política climática. Una de esas razones es que funciona a prueba de recesiones. Si miramos atrás, vemos que el movimiento climático tiene una trayectoria pobre en cuanto resultados cuando la economía va relativamente bien. El tipo de soluciones que ofrecen los Gobiernos tienden a ser neoliberales y basadas en el mercado, impuestos climáticos o políticas basadas en energías renovables que se perciben como elementos que encarecen el coste de la energía. También impuestos al carbono que elevan el precio de la gasolina. En cuanto llega la recesión, no cabe duda de que el apoyo a ese tipo de políticas se evapora. Lo vimos después de la crisis financiera de 2008.

Lo que importa a la hora de hablar del ‘Green New Deal’ es que toma forma a partir de uno de los programas de estímulo económico más importantes de todos los tiempos: el New Deal de Roosevelt durante la Gran Depresión. Por esta razón, el mayor golpe que recibí cuando publiqué el libro hace poco más de un año fue: «Pero no hacemos cosas como esta cuando la economía va bien».

Las únicas oportunidades en los que podemos señalar con claridad en la dirección de un cambio social rápido, grande, que actúe como catalizador -y sobre esto no me cabe duda alguna- es en momentos de gran depresión o guerra. Sabemos que podemos cambiar rápido. Lo hemos visto. Hemos cambiado nuestras vidas de forma sustancial. Y hemos descubierto que los Gobiernos tienen billones de dólares que podrían haber movilizado durante todo este tiempo.

Todo esto tiene un potencial radical. Siento que tenemos una oportunidad. No me describiría como optimista porque hablamos de un futuro por el que tenemos que pelear. Pero si miramos en dirección a los momentos de la historia en los que se han producido grandes cambios, son momentos como el actual.

The Guardian / El Diario. Traducido por Alberto Arce.

Fuente de la Información: https://www.lahaine.org/mundo.php/el-virus-obliga-a-pensar

 

Comparte este contenido:

España: La Concejalía de Mayores activa por primera vez en Ponferrada un plan de verano para la tercera edad

La Concejalía de Mayores activa por primera vez en Ponferrada un plan de verano para la tercera edad

Las actividades del programa ‘Vida activa’ están dirigidas a los usuarios de los Centros de Día de El Plantío y Flores del Sil incluirán talleres de Taichi, baile, manualidades, cestería, scrapbooking, memoria y teléfonos inteligentes

Las actividades del programa ‘Vida activa’ están dirigidas a los usuarios de los Centros de Día de El Plantío y Flores del Sil incluirán talleres de Taichi, baile, manualidades, cestería, scrapbooking, memoria y teléfonos inteligentes

La Concejalía de Mayores del Ayuntamiento de Ponferrada ha presentado esta viernes la ampliación del programa ‘Vida activa’ para abarcar por primera vez la temporada estival. «Tras el impacto de la pandemia, era ineludible adoptar medidas extraordinarias para los y las usuarias de los centros de día. La situación que han vivido ha sido especialmente dura y es fundamental recuperar cuanto antes los hábitos y los talleres que ejercitan un envejecimiento activo y saludable», explicó la concejala María Luisa Varela.

Las distintas actividades, dirigidas a los usuarios de los Centros de Día de El Plantío y Flores del Sil incluirán talleres de Taichi, baile, manualidades, cestería, scrapbooking, memoria y teléfonos inteligentes, y se llevarán a cabo entre el 20 de julio y el 18 de septiembre.

Varela defiende «el gran paso adelante que supondrá para su bienestar que las socias y los socios de los centros de día recuperen la cotidianidad, ocupando activamente su tiempo y retomando las relaciones personales para paliar los efectos del aislamiento que azotan especialmente física y psicológicamente a la tercera edad».

Tal y como apunta la Concejala de Podemos, la propuesta ha sido diseñada escrupulosamente en base a las recomendaciones sanitarias con las máximas garantías para las personas usuarias. Todos los talleres se desarrollarán en grupos reducidos y al aire libre.

Fuente de la Información: https://www.leonoticias.com/ponferrada/concejalia-mayores-activa-20200717140128-nt.html

Comparte este contenido:

España: Al ritmo de cada estudiante en clases presenciales o a distancia

Europa/España/19-07-2020/Autor(a) y Fuente: www.educaciontrespuntocero.com

Con el objetivo de que los centros dispongan de todas las opciones para el próximo curso, la plataforma adaptativa Snappet ha desarrollado la opción ‘Snappet en casa’, que permite trabajar desde los hogares contenidos curriculares para Matemáticas, Lengua castellana e Inglés. Se puede solicitar un proyecto piloto gratuito.

El curso que viene se presenta con  gran incertidumbre. ¿Cuándo podrán volver los alumnos al aula? ¿Habrá nuevas llamadas a confinarse temporalmente? Todo apunta a que los centros deben planificar el próximo curso teniendo en cuenta esta situación y eso lleva a buscar una solución de aprendizaje que se pueda usar en clase y también en casa. Por ello, la plataforma de aprendizaje adaptativo Snappet incluye la opción ‘Snappet en casa’, y se adapta a los posibles escenarios, trabajo online, trabajo en el aula o mezclando los dos. Son contenidos curriculares para Matemáticas, Lengua castellana e Inglés (en las lenguas autonómicas catalán, valenciano, euskera y gallego).

Con un chat

clases presenciales o a distancia

Para resolver los posibles problemas de comunicación entre profesores, alumnado y familias en esta ‘educación a distancia’, Snappet ha desarrollado un chat en la plataforma de forma que puedan estar en contacto de forma sencilla y eficiente.

Una de las principales características de la plataforma es que los docentes pueden ver en tiempo real el progreso de los estudiantes, de forma que pueden mandar las tareas adaptadas a las necesidades de cada uno de ellos, tratando así la diversidad en el aula. De igual modo, su tecnología adaptativa permite que avancen a su ritmo.

En cuanto a los dispositivos, Snappet ofrecía tabletas de 7 pulgadas a los centros que no dispusieran de equipos propios. A partir del próximo curso, a esta opción se suma contar con Chromebooks en el aula, ya que así lo han solicitado numerosos colegios.

Pruebas piloto

clases presenciales o a distancia

Todos los centros educativos que deseen probar Snappet en sus aulas pueden hacerlo gracias a una prueba piloto que ofrece acceso libre a esta plataforma de aprendizaje adaptativo. Con una duración de 8 semanas, permite así el acceso a miles de actividades interactivas de Lengua, Matemáticas e Inglés, incluyendo todas las lenguas de las distintas comunidades. Además, los docentes disfrutarán de formación continua gracias a los ‘coaches’ que le acompañarán en todo el proceso.

Además, y en el caso de que los centros no dispongan de dispositivos (siempre pueden emplear los propios), Snappet se los facilita, así como un router para evitar problemas de conectividad.

Más de 500 colegios se inscribieron el pasado curso, destacando sus múltiples posibilidades:

¿Qué nos dicen los maestros que han participado en el piloto? La personalización real en el aula, la inclusividad, la alta autonomía de los niños, los alumnos aprenden de sus errores, la mejora en el rendimiento, el cambio de dinámica en el aula, la motivación, el gran volumen de ejercicios de todo tipo para poder tener siempre lo que necesitan a mano, sin tener que dedicar horas y horas buscando y adaptando, optimizar el tiempo en el aula y poder dedicar más tiempo a cada alumno…

Todos los centros que deseen probarlo puede hacerlo escribiendo un correo electrónico a la dirección info@snappet.es.
Fuente e Imagen: https://www.educaciontrespuntocero.com/noticias/clases-presenciales-o-a-distancia/
Comparte este contenido:
Page 116 of 935
1 114 115 116 117 118 935