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“La ética convergente es capaz de eliminar conflictos concretos, nunca la conflictividad”

América del sur/Argentina/Noviembre 2016/Noticias/http://www.telam.com.ar/

Doctorado en Filosofía por la Universidad de Maguncia (Alemania), discípulo de Karl Otto-Apel y presidente de la Asociación Argentina de Investigaciones Eticas, Ricardo Maliandi pasa la mayor parte de sus días en Mar del Plata, ahora coordinando las próximas Jornadas Nacionales de Filosofía Práctica que tendrán lugar muy pronto en la Universidad de Ciencias Empresariales y Sociales (UCES).

Por Pablo E. Chacón

Maliandi es una de las pocas personas que puede acreditar una titulación como filósofo. Premio Konex 1986 por su especialización en ética, en 2012 obtuvo el Premio Nacional en la categoría Ensayo Filosófico.

Nacido en La Plata en 1930, es el teórico de la ética convergente. Publicó, entre otros libros, dos volúmenes de su especialidad (y un tercero en prensa), Etica: conceptos y problemasValores blasfemos y Volver a la razón.

Esta es la conversación que tuvo con Télam.

T : Cuénteme sobre las próximas Jornadas en la UCES. 
M : Se trata de unas Jornadas Nacionales de Filosofía Práctica, organizadas por dos instituciones a las que pertenezco: la UCES (Universidad de Ciencias Empresariales y Sociales) y la ANCBA (Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires). En la primera de ellas dirijo la Licenciatura en Filosofía, en la que además dicto la asignatura Ética; en la segunda soy Académico titular y dirijo la Sección de ética del Centro de Estudios Filosóficos. De modo que me he hecho cargo de esto como una actividad de extensión en mi carácter de miembro de ambas instituciones.  Las Jornadas tendrán lugar en una de las sedes de la UCES (Paraguay 1338) los días 9 y 10 de octubre próximo. La idea surgió a través de un diálogo con Guillermo Lariguet, amigo y colega de la Universidad Nacional de Córdoba, donde es Profesor de Filosofía del Derecho. Pensamos que vendría bien un debate filosófico en el que se convocara a diversos especialistas sobre cuestiones que constituyen actualmente motivos de preocupación general, como las de género, aborto, contaminación ambiental, política y economía. Pude haber agregado, desde luego, más problemas y más participantes, pero en estas cosas también es necesario establecer algunos límites, sobre todo de espacio y tiempo. Tenía una larga lista de colegas, tanto de Buenos Aires como del interior, a los que hubiese querido invitar, y en razón de los mencionados límites tuve que restringirme a unos pocos. Les he enviado a los demás invitaciones a que se acerquen por lo menos para intervenir en las discusiones, y espero que algunos concurran. En compensación, tampoco yo presentaré esta vez comunicación. Mi labor ha consistido en armar las diversas mesas (cada una con tres expositores y un coordinador) y espero participar en las discusiones.

Las mesas del primer día tratarán temas más bien generales: las diversas orientaciones actuales de la filosofía práctica: la fenomenológica, la kantiana, la hegeliana, la analítica y la latinoamericana. Tampoco son las únicas, pero entre ellas se puede obtener una imagen aproximada de cómo se mueve hoy la filosofía en su consideración de problemas prácticos. El segundo día se abordarán los problemas concretos ya mencionados. Tengo que mencionar especialmente que el cierre se hará con una conferencia del doctor Bernardo Kliksberg, uno de los mayores representantes de los actuales esfuerzos por mostrar las implicaciones éticas de la economía.

T : ¿Cómo definir en pocas palabras la ética convergente de la cual tengo entendido, está por salir un tercer tomo?
M : La ética convergente es una propuesta filosófica programática en la que he venido trabajando durante décadas, desde cuando era investigador del Conicet, cargo en el que obtuve hace ya tiempo mi jubilación. El sentido de convergencia es aquí doble: alude por un lado al intento de articular aportes de dos teorías éticas elaboradas en el siglo XX: la axiológica de Nicolai Hartmann y la discursiva de Karl-Otto Apel. De la primera he tomado su peculiar percepción de la conflictividad en las cuestiones morales, y de la segunda su criterio de fundamentación ética, precisamente en una época proclive al escepticismo en ese ámbito. La convergencia es a mi juicio el modo racional de resolver conflictos.

Sostengo que los principios éticos son criterios racionales para resolver o evitar conflictos concretos; pero el problema subsiste porque hay al menos cuatro principios, y dado que una actitud moral no puede prescindir de ninguno de ellos, la única alternativa racional es el intento de maximizar la convergencia, que a su vez resulta posible debido a la complejidad de cada principio. Si las exigencias emanadas de ellos fuesen monolíticas, la convergencia quedaría excluida. Pero como son polisémicas (ambiguas), siempre se puede alcanzar algún grado de conciliación. La ética convergente es un intento de mostrar que la moralidad es más compleja de lo que suele creerse, y que no es razonable optar por el cumplimiento óptimo de algún principio determinado, porque ello implica la transgresión de otro u otros. Compárese con  el famoso chiste de Groucho Marx: Estos son mis principios; si no les gusta, tengo otros. Es un modo irónico de aludir a la falta de principios. Pero en ética convergente puede decirse, muy en serio: Cumpliré estrictamente con este principio; por lo tanto, transgrediré los demás. Hartmann vio muy bien que el principal problema ético no es el de la contraposición entre lo bueno y lo malo, sino la que se da entre lo bueno y lo bueno, o entre lo malo y lo malo. Y Apel demostró que hay exigencias normativas necesariamente presupuestas en cada acto de argumentación, pero también que ellas no pueden cumplirse siempre. La ética convergente tiene en cuenta y reelabora ambos aportes.

T : ¿Cómo y cuándo conoció a Karl Otto-Apel, y qué fue lo fundamental de aquel encuentro?
M : Cuando yo trabajaba (hace ya más de 50 años: de1960 a 1964 ) en mi tesis doctoral, sobre Hartmann, en la Universidad de Maguncia, en Alemania, Apel estaba haciendo su tesis de Habilitación con Gerhard Funke, quien era a la vez mi co-director de tesis doctoral (mi director era Fritz-Joachim von Rintelen), y de quien tuve las primeras noticias de Apel. Pero no conocí personalmente a éste sino mucho después, en 1975 (cuando era ya investigador del Conicet y profesor de Ética en la UBA) en un congreso que había organizado en Grecia la Federación Internacional de Sociedades de Filosofía. El encuentro decisivo, sin embargo, fue en 1981, cuando lo visité en su casa en el Taunus y tuvimos un largo diálogo de unas ocho horas.

Por primera vez entendí bien su pragmática trascendental (a su vez un sorprendente modo de articular el trascendentalismo kantiano con la filosofía lingüística) y la ética del discursoque de ella deriva. Lo fundamental fue que me presentó algo que yo buscaba desde hacía años: una fundamentación apriorística de la ética que fuera real y racionalmente sustentable. Era también una prueba de que en filosofía siempre puede aprenderse algo nuevo. Yo tenía ya 51 años y había vuelto a encontrar un maestro. Puedo decir que a partir de aquel diálogo comencé a elaborar mi idea de una ética convergente. Entablamos con Apel una amistad que se mantiene desde entonces, y nos hemos encontrado muchas veces, en Alemania, en Argentina, o en otros lugares en ocasión de congresos, como en Boston y en Moscú. Con dos colegas argentinos, y también viejos amigos, Julio De Zan, de Santa Fe, y Dorando Michelini, de Rio Cuarto, hemos difundido el pensamiento de Apel en nuestro país. Luego fueron sumándose otros, ex discípulos como Alberto Damiani, Andrés Crelier, Gustavo Salerno o Leandro Paolicchi.

T : Leyendo algunas de sus cosas, me entero de sus reflexiones sobre la técnica. Al respecto, dos cuestiones. ¿Qué piensa de su desarrollo respecto de la ética? ¿Está la ética atrasada respecto a la técnica? Y la segunda: su opinión sobre la idea de obsolescencia humana, de Günther Anders.
M : Desde mis reflexiones sobre la técnica, que estuvieron vinculadas a mi interés por la antropología filosófica, ha pasado mucho tiempo. No es que el tema haya dejado de interesarme, sino que la cuestión de la ética convergente logró absorberme con más fuerza. Es cierto que entre la ética y la técnica hay diversas relaciones, y de alguna de ellas he seguido ocupándome. No tanto de la comparación entre los desarrollos de ambas, ni de la influencia que lo técnico ejerce sobre las concepciones morales, sino más bien del tipo de ética aplicada que se ocupa de la técnica. En mi caso, especialmente en el caso de la biotecnología.

Pero vayamos por partes. Actualmente la reflexión sobre la técnica ha llegado a erigirse como una nueva disciplina, la filosofía de la técnica, que exige dedicación especial. Un ex-alumno marplatense, Diego Parente, lo ha hecho, y ahora me discute mi vieja concepción protésica de la técnica, en la que, no obstante, sigo creyendo. Pero tengo que recurrir ahora a él cuando quiero actualizar mi información sobre algún aspecto particular de ese tema. En lo que sí, en cambio, he seguido trabajando (al menos parcialmente) en relación con la técnica, es en la propuesta de lo que he llamado principios bio-tecno-éticos, que son una especificación de los principios cardinales expuestos en mi Ética convergente y de los llamados principios de ética biomédica, de Beauchamp y Childress y ya clásicos en la Bioética.

De Günther Anders había oído hablar ya cuando estudiaba en Alemania, en una época en que aún proseguía el largo proceso de desnazificación. Pero aunque sus ideas (conocidas más a través de comentaristas) me interesaban y me siguen interesando, nunca las estudié sistemáticamente. Me alegra saber que su libro sobre la obsolescencia del hombre se ha traducido al castellano, y trataré de conseguirlo. Sólo leí de él, parcialmente, sus cartas a Klaus Eichmann. En líneas generales, le digo que actualmente en la técnica advierto ante todo los aspectos conflictivos: la técnica se nos ha vuelto imprescindible y peligrosa a la vez. Es tan malo padecer tecnofilia como tecnofobia. Nuevamente, lo razonable tiene que ser alguna forma de convergencia.

T : ¿Cómo pensar al cachorro humano respecto de otros animales superiores y cómo articular su deducción con la ética convergente?
M : En la actualidad, la cuestión de los derechos de los animales ha comenzado a tomarse en serio, y esto implica una ampliación de la tematización ética. Pero creo que hay aún mucho camino que andar todavía antes de arribar a concepciones suficientemente claras. En la ética convergente no he introducido el tema hasta ahora, pero pienso que es algo posible. Por de pronto, la duda acerca de si tenemos derecho a comer animales, y la consecuente asunción del vegetarianismo, abre la puerta a un tema menos frecuente pero asimismo legítimo: el del derecho de los vegetales. Es cierto que hacer diferencias entre la especie humana y las especies animales equivale a incurrir, como dice Peter Singer, en especismo, algo similar al racismo. Pero  creo que el vegetarianismo podría considerarse una forma de reinismo, es decir, de dar privilegio al reino animal sobre el vegetal. Lo que en el fondo ocurre es que la vida misma es esencialmente conflictiva: los seres vivientes viven a expensas de otros seres vivientes. Dicho muy escuetamente, se me ocurre que la única convergencia posible tiene que combinar el respeto a la vida con el reconocimiento de que ese respeto nunca puede ser óptimo.

T : ¿Es usted optimista, pesimista sobre el futuro de la humanidad bajo el despiadado régimen del capital-parlamentarismo extractivo?
M : Ser optimista o pesimista es optar por extremos. Pienso que la actual situación mundial provocada por el neoliberalismo es muy grave, pero también que hay una serie de acontecimientos y signos de que, sin dejar de estar alerta frente a la probabilidad de grandes desastres, aún es posible guardar alguna esperanza. No una esperanza utópica o ingenua, en el sentido de creer que sea posible alguna vez la conciliación y el bienestar generalizados; pero sí la de que las cosas puedan mejorar. O de que, por ejemplo, como dice Galeano, la libertad y la justicia, hermanas siamesas condenadas a vivir separadas, vuelvan algún día a unirse, espalda contra espalda. Ese tema ilustrará la tapa y será mencionado en la contratapa del tomo III de mi Ética convergente, que está en imprenta y espero ver aparecer muy pronto. Para la ética convergente es posible resolver o evitar conflictos concretos, pero no es posible eliminar  la conflictividad, y esto significa que siempre habrá conflictos, porque la solución de cada conflicto es la fuente de algún conflicto nuevo. Es lo que distingue también a los regímenes totalitarios de los democráticos. En aquellos se cree que es posible eliminar la conflictividad, mientras que la democracia tiene como fundamental condición la de reconocer la estructura conflictiva de las interrelaciones sociales.

Fuente:

http://www.telam.com.ar/notas/201309/34565-la-etica-convergente-es-capaz-de-eliminar-conflictos-concretos-nunca-la-conflictividad.html

Fuente imagen:

https://lh3.googleusercontent.com/5aVUx93GQ5h_a8qOiaWOZ7DwTO26c6bxttFZ2_Qy7VcctKGDjUEIX87IK8odmKmx104AM6g=s85

 

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“Ya no basta con reformas educacionales, hay que cambiar la naturaleza misma del sistema”

América del Sur /Chile/Noviembre 2016/Noticias/http://m.elmostrador.cl/

El intelectual francés, experto en el sistema escolar, aprovechó su visita a Chile para conversar con El Mostrador. Preocupado por fenómenos como Donald Trump, el Brexit o el aumento por todas partes de la popularidad de una derecha que llama “extrema”, con un discurso nacionalista, xenófobo y cuasifascista, afirma que lo que está unido a “la derechización de la derecha es la descomposición de la izquierda”. Todas, cuestiones asociadas a la formación de ciudadanía desde lo que considera una escuela en crisis: “Si miramos los resultados de pruebas nacionales e internacionales, uno se debe persuadir de que el sistema ya no funciona y que somos incapaces de decir que debemos hacer otra cosa”.

François Dubet viene de ser acusado, nada más y nada menos, como uno de los “asesinos”  de la escuela francesa. Se trata de una publicación sensasionalista hecha por una periodista parisina (Mais qui sont les assassins de l’Ecole?, de Anne Barjon) y que causó un poco de revuelo en el ambiente educativo francés. Él se lo toma con humor, a pesar del malestar que le causó. Se vale de la ocasión, como el intelectual que es, para perfilar sus ideas y contestar a través de uno de sus últimos libros, escrito con la experta Marie Duru-Bellat, y titulado 10 propositions pour changer d’école.

Aprovechamos, pues, de conversar sobre su último libro con François Dubet, de visita en Chile, producto de una invitación hecha por Alexis Cortés, académico del Departamento de Sociología de la Universidad Alberto Hurtado, en el marco de un proyecto Fondecyt que investiga la ochentera y mítica ONG –muy MAPU, muy “Touraine boys”– llamada SUR. Uno de los emblemáticos jóvenes sociólogos que trabajaron en SUR fue el hoy lobbista y liberal Eugenio Tironi, que por aquellos años estudiaba a los pobladores pobres chilenos.

Dubet recuerda esos años vivamente, conoce desde dentro esa historia, pues era parte del equipo de sociólogos franceses que acogieron a estos jóvenes idealistas de izquierda. ¿Qué le sucedió a toda esa generación? Confiesa que es un tema que le inquieta desde el punto de vista sociológico también, es decir, desde el punto de vista de la crisis intelectual del pensamiento de izquierda.

¿Reformar o reemplazar el sistema escolar?

Sin más preámbulos, vamos de lleno al tema que le ha dado renombre mundial: la comprensión sociológica de la escuela y de los sistemas escolares.

Dubet afirma de entrada y directamente que “sufrimos hace ya algún tiempo de una suerte de febrilidad de reformas escolares que no cambian nada; son reformas que lo único que hacen es fatigar aún más a los profesores y los vuelven escépticos: ellos ya no creen más en las reformas, porque cambian todo el tiempo las cosas y seguimos haciendo lo mismo, decimos que siempre cambiamos todo, pero en realidad no cambiamos nada”.

Lo que sucede, profundiza, es que “la escuela ha cambiado completamente de naturaleza, principalmente a causa de la masificación escolar. Y así, desde hace años que hemos querido cambiar el sistema escolar, es decir, hacerle reformas y más reformas e instalar vez por vez dispositivos especiales, pero en realidad hemos hecho todo eso para evitar –fundamentalmente– lo que de verdad debiésemos hacer, que es cambiar de sistema escolar. Hacemos reformas para evitar decir que el sistemas escolar no es más el mismo y que es necesario entonces pasar a otro modelo escolar”.

Prosigue, serio y concentrado en esta idea: “Es por eso que hemos elegido ese título un poco sutil para mi último libro, para decir que ya no basta ni es necesario seguir insistiendo con reformas localizadas para seguir mejorando el sistema escolar: hoy es necesario verdaderamente cambiar la naturaleza misma del sistema, redefinir los saberes, redefinir la manera de aprender, los aprendizajes, redefinir la comunidad escolar, etc. etc.”.

Huelga advertir que su último libro no hace referencia a cambiar el sistema escolar, sino a cambiar de sistema escolar, por ello el título 10 propositions pour changer d’école, para profundizar que –como dice él– “si miramos los resultados de pruebas nacionales e internacionales, uno se debe persuadir de que el sistema ya no funciona y que somos incapaces de decir que debemos hacer otra cosa”.

“Debemos encontrar otra manera para calificarnos y valorizarnos como individuos. En otros países perder el match de la escuela no significa perderlo todo en la vida –pienso en los países escandinavos–, pues hay otros sistemas de calificación y formación de y para los individuos en la vida, no todo se termina con la escuela, en realidad la vida sigue después de la escuela”, señala Dubet».

Lecciones de democracia o prácticas democráticas?

Si bien es cierto que la escuela fue hecha para formar a ciudadanos y que, como a cualquier persona, le inquieta el traumatismo del terrorismo y de las tragedias que afectan al mundo contemporáneo, mucho más le inquieta el darse cuenta de que “muchos estudiantes no están comprometidos con este sistema ciudadano democrático, que no creen más en este sistema”.

El problema es que la respuesta más común ante este problema está ligada al fenómeno de la derechización del pensamiento de derecha, es decir, se afirma rápidamente “que hay que volver a una escuela más exigente y más estricta con el laicismo. Yo en cambio defiendo la idea de que hoy en día,  en una sociedad más abierta y más democrática, hay que encontrar otro modo de formación de ciudadanos. La democracia no se aprende dando clases de democracia, sino con prácticas democráticas en la escuela: es necesario que los estudiantes aprendan a respetar a los otros pero en  la vida escolar –enfatiza–, que aprendan la tolerancia pero en la vida escolar, que se aprenda la solidaridad pero en la vida escolar , y no según el modelo tradicional, que consiste en dar clases o lecciones de democracia en paralelo de la vida, que suponemos sigue su curso como si nada. Hoy las escuelas deben ser más consistentes y fuertes y activas en esto de las prácticas democráticas”.

Todo esto lo afirma François Dubet, preocupado además por fenómenos como Donald Trump, el Brexit o el aumento por todas partes de la popularidad de una derecha que llama “extrema”, con un discurso nacionalista, xenófobo y cuasifascista. Afirma que lo que está unido a “la derechización de la derecha es la descomposición de la izquierda”.

Ciertamente que “todo esto no es un problema escolar en sí mismo, es un mecanismo que sobrepasa a la escuela, pero es claro que la escuela debe reaccionar a esto, y debe encontrar una manera de educar a los niños en un sentimiento de vida en común. Y esto quiere decir dos cosas: de una parte se deben limitar las desigualdades escolares, porque si les decimos a los jóvenes que estamos en un mundo común y estamos creando al mismo tiempo desigualdades extremas, nuestro discurso es casi ridículo; y, por otra parte, se debe crear, más allá de diferencias culturales, religiosas y sociales, una escuela que construya la vida en común pero desde la vida escolar misma, no con simples lecciones”.

La escuela no es el centro de la vida

Termina, recordando un tema que para él, en su último libro, es crucial: esa especie de círculo vicioso en el que estamos al colocar a la escuela al centro de todo. “Todo pasa como si todo se jugara en la escuela; la escuela tiene prácticamente el monopolio de la definición de la valorización de los individuos. Esto tiene un efecto desastroso para la escuela misma, esto hace que se aumente la competición escolar porque no hay otra elección que la escuela; pero, al mismo tiempo, sabemos que la acentuación de competición escolar tiene además un efecto desastroso sobre el aumento de la desigualdad escolar. Debemos encontrar otra manera para calificarnos y valorizarnos como individuos. En otros países perder el match de la escuela no significa perderlo todo en la vida –pienso en los países escandinavos–, pues hay otros sistemas de calificación y formación de y para los individuos en la vida, no todo se termina con la escuela, en realidad la vida sigue después de la escuela”, señala.

Concluye, con mucho énfasis: “Hacemos como si todo se jugara en la escuela, pero en realidad no podemos demandar a la escuela tener el monopolio de la definición de la valorización de los individuos: eso me parece escandaloso”.

Fuente:

http://m.elmostrador.cl/destacado/2016/11/21/ya-no-basta-con-reformas-educacionales-hay-que-cambiar-la-naturaleza-misma-del-sistema/

Fuente imagen:

https://lh3.googleusercontent.com/0_ieOJn-XepgJTj1gaAy1OkZmahWDMYqWbE_LcLD4YSEpTYUkn7P7VDfSMi6c3Nvf637_w=s137

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Cambio climático: África despierta

África/Noviembre 2016/ Noticias/http://www.laregion.es/

La gran esperanza de que el COP22 (Conference of the Parties 22 – ONU y la Agencia Mundial de Meteorología) en Marrakech fuese la puesta en marcha de lo aprobado la reunión de París se ha queda en eso, esperanza, que se mantuvo hasta el final ya que después de China (con 26 centrales nucleares nuevas) y USA con un plan de Obama muy ambicioso apoyado por las palabras de Ernest Moniz (USA Secretary of Energy) «la reunión del Cambio Climático pide respuestas globales, incluyendo el amplio empleo de poder nuclear»), ratificaron el plan que seguirían para la reducción del CO2, también lo presentaron otros países: Canadá, Francia, México e incluso Chile. No nos debemos quedar en eso, hay materias en las que sí se ha hablado y presentan novedades que se han puesto de manifiesto en el COP22 en Marrakech, la primera que aunque han firmado la mayor parte de los países la resolución adoptada en París, uniéndose China y USA (tiene el inconveniente que tropieza con el Presidente electo Trump), aún nadie se ha comprometido a donar el dinero acordado a partir del año 2020, de hecho en esta conferencia se está hablando más de lo que hay que hacer para el 2050,

El segundo hecho muy importante es que los países africanos quieren su lugar en la toma de decisiones en estas reuniones, el anfitrión el rey Mohamed VI puso en de manifiesto la desigualdad entre los países del norte y del sur y ha dicho: “La crisis climática es la última injusticia que golpea a los más vulnerables. Además, los efectos del cambio climático conciernen de igual modo, o quizá en mayor medida, a los países en desarrollo, sobre todo a los estados africanos y latinoamericanos menos desarrollados.

¿Sería pertinente calificar de sostenible un desarrollo que deja sumergida en la pobreza a una mayoría de seres humanos? ¿Es acaso legítimo que las prescripciones para la protección del clima sean dictadas precisamente por los principales responsables del calentamiento atmosférico?”. A lo cual no le falta razón ya que África es responsable de sólo el 4% de las emisiones de gases de efecto invernadero, y añadamos lo dicho por Melanie Kermarc, directora del proyecto Woods Hole Research Center, y responsable de los procesos de reducción de emisiones derivadas de la deforestación y degradación de los bosques (REDD) en la República del Congo, que señaló que es necesario mejorar las condiciones de vida de la población local y optimizar las acciones a tomar frente a la deforestación, un pequeño, ejemplo de lo que está sucediendo es África.

Para poder salir airosos de la reunión la directora de la Fundación Empresa & Clima en calidad de observadora de la ONU dice: “Es una cumbre más técnica que la de París, pero importante porque, demuestra la voluntad de los países de convertir sus compromisos políticos en acciones y, porque se ha mantenido el clima de entendimiento conseguido en la pasada cita, pese a los temores por la victoria de Trump”, seguido de lo dicho por el Secretario de la ONU Ban Ki-moon “Espero que Trump comprenda la seriedad y la urgencia del fenómeno del cambio climático (…) Confío en que va a escuchar y evaluar esto y tomar las decisiones más acertadas”. Trump sigue presente en todo los actos del mundo.

Una novedad en una cumbre del Cambio Climático es la repercusión que ha tenido sobre leas mujeres, haciendo hincapié en las más afectadas durante los desastres naturales, muchos de ellos producidos por el Cambio Climático, donde por primera vez tienden a ser las principales responsables del uso de energía en el hogar. En los países en desarrollo, el acceso a la energía es importante para ellas no sólo para cocinar, sino también para la educación y la salud. Las mujeres de África lo han puesto de manifiesto, y el rey Mohamed VI ha reclamado que el mundo mire hacia ese continente y se ha erigido en el “paladín” de la defensa del mismo (África es responsable de sólo el 4% de las emisiones de gases de efecto invernadero), Marrakech y sus cerca de 10 siglos de existencia quiere seguir haciendo historia en este milenio con un acuerdo, que sabemos que es de mínimos, con compromisos de algunos países hacía en año más lejano que el de París, el 2050, que es el que en los estudios científicos se baraja cómo más posible para poder introducir nuevos medios de producción de energía, incluso el periódico The Economist escribió “el que ha sido más fuerte de lo normal en esta ocasión fue el Niño, lo que ayuda a explicar las temperaturas de 2016 que han batido récords en 2016. Y futuros Niños pueden sostener sorpresas mayores”, un golpe muy duro para los que atribuían a causas humanas el calentamiento sufrido.

Se han realizado previsiones para 2040, de modo que estemos preparados en 2050, así se pasará del 23% de energía consumida de las renovables al 37%, lo que indica que aún seguiremos dependiendo del petróleo cuyo consumo aumentará en 12 millones de barriles diarios, con lo que continuará el 0,5% de incremento anual del CO2 en el sector industrial. El consumo del gas natural (industria, producción de energía, calefacción y hogar) será un 50% mayor. Simplemente recordar que su uso genera entre otros gases CO2 y NO2 que son tan perjudiciales para las personas cómo para los gases de efecto invernadero. Los dos conjuntamente con el SO2 fueron los causantes de la mortífera niebla de 1952 en Londres, y la de este año en China que causó miles de muertos.

Con anterioridad hubo escritos donde se decía que había estudios sobre el calentamiento global, de los que se desconozco cuáles son y qué grado de certidumbre científica tienen, y que dicen que demuestra que animales y plantas desarrollan mutaciones genéticas, cambios en la forma o patrones de conducta, aquí comprobamos que se sigue dando datos que producen “miedo” entre la población. Claro que en ocasiones se “olvidan” de datos y hablan de reducción del agujero de ozono en la Antártida, cuando es conocido por los estudios de la NASA que ha realizado a lo largo de este siglo que la razón por la que existe y se abre y cierra es función de las necesidades del planeta.

No deja de ser curioso que Renault-Nissan fuese el patrocinador oficial del COP22 que proporcionó una flota de 50 vehículos eléctricos, sin entrar en lo que son y la no emisión que tanto proclaman, sólo decir que utilizan energía y hasta el día de hoy no hay ninguna energía limpia, ni tampoco es momento para hablar del reciclaje de los “acumuladores de de energía” que mueven su motor. Mejor no hacerlo, ya hemos visto cómo se aplazan los temas, ¿quizás por qué aun no se quiere asumir el dinero aprobado el París que los países industrializados tiene que dar? Lo cierto que es que aunque no ha sido, cómo esperábamos una gran mayoría, sí que podemos decir que ha sido la mejor despedida de todas las Cumbres sobre el Cambio Climático, dignas de las 1.000 y una noche dado el hermoso lugar que se ha celebrado.

Para finalizar África tiene líder y reclama un puesto en la toma de decisiones, veremos el futuro y cuantos lo siguen, tienen claro que los han explotado, lo siguen haciendo y están pagando las consecuencias del “buen vivir” de Occidente, quieren agua, energía y salir del secular atraso en el que se encuentran.

Fuente

http://www.laregion.es/articulo/mundo/cambio-climatico-africa-despierta/20161120125752665221.html

Fuente Imagen:

https://lh3.googleusercontent.com/zPyyEQqvo9hxrJlLxgMI6yu5PWNWnz1Bmot9Wl-xqhi3DuTgG2DrlUIrNbYY2NY4JD8_uQ=s85

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Reino Unido: Schools will teach ‘soft skills’ from 2017, but assessing them presents a challenge

Reino Unido/Noviembre 2016/Noticias/https://theconversation.com/

When students go back to school in January 2017 there will be some significant changes to their timetables. As well as learning areas like English, maths and science, there will be some new things to grapple with called “capabilities”.

The Australian curriculum will be focusing not just on the 3Rs – reading, writing and arithmetic – but also on the kinds of “soft” skills young people will need if they are to be successful throughout their lives.

The new capabilities are:

  • Information and communication technology – using technology to access information, create products and solve problems
  • Critical and creative thinking – learning how to think and find ways to approach problems
  • Personal and social – recognising others’ emotions, supporting diversity and working together
  • Ethical – understanding values and concepts that underpin views
  • Intercultural – learning about your own and others’ cultures and beliefs.

From 2017 teachers will be expected to teach and assess these capabilities, although state and territory education authorities can determine whether the capabilities will be assessed.

In Victoria schools will be required to assess progress in the development of students’ capabilities, and there will be a specific focus on improving critical and creative thinking.

Why “soft” skills are important

To call these skills “soft” is actually unhelpful. It implies they are not as important or demanding as the so-called hard stuff like the 3Rs. They are. They include attributes such as collaboration, perseverance, problem solving, empathy and self reflection. The rationale for their inclusion in any curriculum is sound.

Economists like James Heckman have made the case in terms of improved life outcomes such as higher employment rates and lower rates of crime.

Psychologists such as Angela Duckworth and Martin Seligman have shown how capabilities predict success in education more powerfully than conventional measures such as IQ. For example, students with greater self discipline apply themselves more to their schoolwork and are less likely to be distracted.

Employers the world over acknowledge that they are vital to the future prosperity. In a global world, people need to understand different cultures to collaborate across borders.

And the globally regarded Programme for International Student Assessment (PISA) tests selected collaborative problem-solving in 2015 to sit alongside English, maths and science – a sure indication that this capability is both important and assessable.

But how do you assess these skills?

At the school level, just how do you assess these more generic capabilities? And when you get beneath the surface, what exactly is being assessed?

Work on assessing capabilities is underway in Asia and North America. A major study by the Organisation for Economic Development (OECD) into the assessment of creative and critical thinking is taking place in fourteen countries including Wales, France and Brazil.

From work like this, we know that we need to think about teaching methods (how useful assessment is for learners); practicalities (how doable it is for teachers in busy classrooms); and various technical issues of assessments (being sure results are reliable, valid and fair).

Most of all, we cannot helpfully assess any capability unless we can precisely define it for students, teachers, parents and employers.

The Victorian Curriculum and Assessment Authority (VCAA) has helped by selecting four key capabilities and mapping out in detail likely progression from Foundation through to Year 10.

Elsewhere in the state there is a trial being supported by the Mitchell Institute involving eleven schools.

Early learning from these schools suggests teachers need to change the way they teach to encourage more rigorous group work, better project planning, more effective feedback and the use of well-framed questions to drive authentic enquiries into real-world problems.

Assessing capabilities is harder than assessing subjects – and the evidence base is much less well-formed.

Knowing that a student achieved a level 8b in critical and creative thinking is not particularly useful.

But from the trial we are finding that students need to become more critically reflective and develop digital portfolios of evidence.

Digital portfolios are collections of student work that demonstrate their achievements either to the school or also, as in the case of open badges, publicly.

More nuanced assessment needed

Teachers have to use progress criteria more reliably. Experts from outside school can provide expert, authentic feedback.

Online tests developed by VCAA are now available for some aspects of capabilities.

In our own work for the OECD we have discovered how assessment needs to be more nuanced than the production of simple grades producing feedback specifically designed to improve learners’ progress.

Across the world there are initiatives which demonstrate that capabilities can be both developed and assessed.

These include Building Learning Power, the Partnership for 21st Century Learning, AC21S, and New Pedagogies for Deeper Learning which is now being tried in more than 70 Victorian schools.

For more than a hundred years we have focused on teaching and assessing disciplinary knowledge in schools. Now we need to focus on capabilities as well. While it will not necessarily come naturally to all teachers, it is vital work.

Fuente:

https://theconversation.com/schools-will-teach-soft-skills-from-2017-but-assessing-them-presents-a-challenge-68749

fuente imagen:

https://lh3.googleusercontent.com/_BzGt1K2cd9RFqiLPT-aDcMTpKtu44qaGp2cHNwCnNVHjifCdKqiJZkCBT8lB0lybiRfyrk=s85

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Trabajadores de Argentina exigen a Macri frenar los despidos masivos

América del sur/Argentina/Noviembre 2016/Noticias/http://www.noticias24.com/

La fuerza obrera y movimientos sociales de Argentina participaron este viernes en una masiva movilización considerada histórica por la dirigencia sindical debido a la participación de trabajadores de todos los sectores del país que se unieron para exigir al Congreso la sanción de una ley de Emergencia Social que establezca los recursos para crear un millón de empleos.

Trabajadores de la economía informal, agricultores, recicladores urbanos, cooperativistas, camioneros, marinos mercantes, obreros del calzado, perfumistas y de la alimentación se unieron a la marcha que concentró más de 200.000 personas en la plaza del Congreso, en Buenos Aires, capital de la Argentina.

Los trabajadores y fuerzas sociales exigieron que se sancione la ley de Emergencia Socialpara crear un millón de puestos de trabajo, establecer un aumento especial del 15% de la Asignación Universal por Hijo y la Asignación por Embarazo, y un incremento en 50% para las partidas alimentarias y nutricionales, reseñó Política Argentina.

Desde la llegada del empresario Mauricio Macri a la presidencia, en 2015, la tasa de desempleo subió de 5,9 al 9,3% en el segundo trimestre de 2016, lo cual indica que un millón 162 mil 779 ciudadanos argentinos está sin trabajo, reseñaron datos divulgados en agosto por el Instituto de estadísticas del país suramericano.

El incremento en la tasa de desocupación se produjo como consecuencia de la política de despidos masivos en el sector público promovido por el actual mandatario.

Ante esto, los trabajadores y movimientos sociales unieron fuerzas. “Venimos a decirle al Gobierno que deje a un lado los justificativos, la excusa de la pesada herencia, y que la termine con los despidos. Queremos trabajo digno y salario justo para los trabajadores informales, porque el ajuste está tocando las puertas de nuestras familias”, manifestó Juan Carlos Schmid, dirigente de la Confederación General del Trabajo de la República Argentina (CGT), citado por Página 12.

La consigna de la jornada fue “Unidad para la justicia Social” con la participación de miembros de las seccionales de la denominada Gran Buenos Aires, de las localidades de Lanús, Avellaneda, Tres de Febrero, La Matanza, San Isidro, San Fernando, entre otros.

Schmid hizo la salvedad de que durante muchos años criticaron a la CGT por desconocer la realidad de miles de trabajadores informales y desocupados, “pero respondía a que había trabajo: a esa realidad social es a la que queremos volver”, aseveró.

El ministro de Modernización, Andrés Ibarra, advirtió que el presidente Macri puede vetar la ley en caso de que resulte sancionada por el Congreso antes de fin de año y dijo que el Gobierno seguirá de cerca el tratamiento parlamentario de la iniciativa, apuntó Política Argentina.

Fuente :

http://www.noticias24.com/internacionales/noticia/119798/trabajadores-de-argentina-protestaron-para-exigir-a-macri-frenar-los-despidos-masivos/

Fuente imagen:

https://lh3.googleusercontent.com/ljneYmFlRCv4F4NIa9_0c5vdMi3mplyNhqslgOX1OQvLvp6NFZyKFl2L4pC59RyvhypjrDk=s85

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Africa: Palm Oil Producers in Africa Sign Deal to Save Forests

Ten African countries have committed to better ways of producing palm oil in a bid to save forests.

This follows the signing of a joint declaration at the ongoing COP22 climate talks in Marrakech, Morocco.

Palm oil is the most widely used vegetable oil globally, with half of all packaged products containing the ingredient.

It is estimated to be worth $50 billion and projected to rise to $88 billion by the year 2022.

The product is used in manufacturing of consumer goods such as bread, soap, shampoo, cereal and cosmetics.

But to produce the oil, a lot of forest land in the tropics is cleared. The World Wide Fund reports that an area equivalent to 300 football fields of tropical rainforest is cleared every hour around the world for palm oil crops.

In Africa, top palm oil producing countries include the Central African Republic, Cote d’Ivoire, Cameroon, Democratic Republic of Congo, Sierra Leone, Ghana, Liberia, Nigeria, Gabon and Congo-Brazzaville. Together, they are home to more than 70 per cent of Africa’s rainforests, which is 13 per cent of the global total.

Nigeria is currently Africa’s largest palm oil producer and the fifth in the world, with 2.5 million hectares under production.

Over the years, the palm oil industry has been accused of massive deforestation, pushing many indigenous species into extinction.

«These governments recognise the significant market signal that global businesses are providing through their desire to source sustainable palm oil at scale,» said Dominic Waughray, the Head of Public-Private Partnerships at the World Economic Forum.

Oil farmland

«Palm oil, if produced sustainably, can play a key role in poverty alleviation by helping farmers thrive economically,» said Paul Polman, the chief executive officer at Unilever, a major buyer of palm oil, welcoming the move.

The practise has been linked to climate change, because cutting down native forests often involves burning of invaluable timber and remaining forest undergrowth, thereby emitting immense quantities of smoke into the atmosphere.

In addition to environmental consequences, entire communities have been displaced all over the world, and many animal and human rights abuses reported.

Whereas the environmental impact is not as bad in Africa as it is in South East Asia, there are concerns that multinational palm oil producers have now fixed their eyes on Africa as their next spot for growth.

Over the years, campaigners have been pushing for a total ban on use of palm oil in order to save the forests.

In Uganda, Kenyan-based consumer goods manufacturer Bidco was recently cleared of charges of environmental breach, offering reprieve to the firm that has been fighting claims that it is involved in malpractices.

Uganda’s High Court dropped the case against the manufacturer for alleged deforestation for a vegetable oil farmland in Kalangala.

The case had been filed by three environmental groups which claimed that Bidco had influenced Uganda National Forestry Authority to de-gazette forest reserves on Bugala Island for the firm to grow palm oil.

Fuente :

http://allafrica.com/stories/201611180675.html

Fuente imagen:

https://lh3.googleusercontent.com/H6g1ARNGdFwpvcs7NGMJjckLXcer3nTmNk4ejMmZm-4KQZ6jK1CWPq_WJLPuHY_1K3KwbQ=s85

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Estados Unidos: Donald Trump llega a un acuerdo millonario para cerrar un caso judicial sobre un proyecto educativo

Estados Unidos/21 de Noviembre de 2016/El País

El presidente electo pagará 25 millones de dólares para poner fin a las demandas por engaño de la Universidad Trump.

Donald Trump ha cambiado de opinión y ha decidido alcanzar un acuerdo económico para acabar con seis años de demandas contra un polémico proyecto educativo suyo. El presidente electo de Estados Unidos ha acordado pagar 25 millones de dólares para cerrar los casos por las acusaciones de negligencia en la Universidad Trump, que operó entre 2004 y 2010, y ofrecía cursos sobre negocios inmobiliarios y habilidades empresariales.

El acuerdo, anunciado este viernes por la Fiscalía de Nueva York, llega 10 días antes de que uno de los casos entrara en la fase de juicio en San Diego. La polémica judicial, que ya persiguió al magnate inmobiliario durante la campaña electoral, amenazaba con eclipsar las primeras semanas de Trump tras ganar las elecciones presidenciales del 8 de noviembre y antes de asumir el cargo el 20 de enero.

El centro educativo, que no tenía licencia universitaria, ofrecía seminarios gratuitos y paquetes de cursos que podían llegar a costar 35.000 dólares. En las demandas, se alega que, mediante agresivas campañas de marketing, los estudiantes alegan que fueron engañados sobre los conocimientos que aprenderían en las clases. Algunos de los extrabajadores de la Universidad Trump han admitido que la operación era una “fachada y una mentira completa”, y la han descrito como un “esquema fraudulento”.

Durante la campaña, Trump atacó a Gonzalo Curiel, el juez que lleva el caso en San Diego, al esgrimir que, pese haber nacido en EE UU, no podía ser imparcial al tener orígenes mexicanos. El republicano dijo que el magistrado podría estar molesto por su promesa electoral de construir un muro fronterizo con México y deportar a los inmigrantes indocumentados que viven en EE UU.

Trump había dicho en las últimas semanas que no estaba asustado por el proceso judicial, que la mayoría de los estudiantes estaban contentos con el funcionamiento de su centro educativo y que, incluso, no descartaba reabrirlo en el futuro.

Fuente: http://internacional.elpais.com/internacional/2016/11/18/estados_unidos/1479506896_765425.html

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