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España: Méndez de Vigo a las deportistas de Universo Mujer: “En los Juegos de Río habrá 46 millones de españoles detrás y nos sentiremos muy orgullosos de todas vosotras”

Europa/España/22 de Julio de 2016/Fuente: Ministerio de Educación, Cultura y Deporte

El ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, y el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, han suscrito hoy en el Centro de Alto Rendimiento del Consejo Superior de Deportes en Madrid, el protocolo de adhesión de la compañía eléctrica al Programa Universo Mujer para el desarrollo de la mujer a través de los valores del deporte femenino.

Íñigo Méndez de Vigo ha comenzado su intervención explicando que, cuando fue nombrado ministro de Educación, Cultura y Deporte, uno de los proyectos que le planteó el presidente del Consejo Superior de Deportes fue el Proyecto Universo Mujer cuyo objetivo era el fomento y el desarrollo del deporte femenino.

El ministro ha manifestado que “el deporte femenino necesita mayor visibilidad, mayor fomento y aceptación”. “Con esta iniciativa se va a dar mayor profesionalidad al fútbol femenino y se van a potenciar los programas de fomento de deporte base en el que están implicadas las federaciones de Piragüismo, Gimnasia, Triatlón, Natación, Rugby y Bádminton, hoy aquí presentes». Además, ha destacado la importancia del ejemplo de los deportistas, de los que ha explicado “son los referentes para muchos niños. Referentes en esfuerzo, en superación, en compañerismo y en trabajo en equipo”.

El ministro de Educación Cultura y Deporte ha concluido su intervención destacando los numerosos éxitos del deporte femenino y ha valorado positivamente el crecimiento de la práctica deportiva entre las mujeres en los últimos años, añadiendo “España tiene una buena salud deportiva y ahora vamos a demostrarlo. En los Juegos de Río habrá 46 millones de españoles detrás y nos sentiremos muy orgullosos de todas vosotras. Nos alegramos de que este programa mejore el deporte femenino. Ánimo, muchas gracias y mucha suerte”.

Por su parte, Ignacio Galán ha explicado que “para Iberdrola es una tremenda satisfacción colaborar con el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte para apoyar el deporte femenino en nuestro país. Mediante esta colaboración con el área de Mujer y Deporte del CSD vamos a apoyar a las federaciones nacionales de Fútbol, Gimnasia, Rugby, Triatlón, Natación Piragüismo y Bádminton, que cuentan ya con programas de deporte femenino desde la base y nos gustaría que se incorporaran más en el futuro”, concluyó Galán.

En el acto también han estado presentes el presidente del Consejo Superior de Deportes, Miguel Cardenal, el director general de Deportes del Consejo Superior de Deportes, Óscar Graefenhain, el presidente de La Liga, Javier Tebas, los presidentes de las Federaciones de Piragüismo, Gimnasia, Triatlón, Natación, Rugby y Bádminton, así como un numeroso grupo de destacadas figuras del deporte femenino, como la campeona del mundo de bádminton, Carolina Marín, la capitana de la selección absoluta de waterpolo, Pilar Peña, las gimnastas Ana Pérez y Claudia Heredia, la triatleta Miriam Casillas, las componentes de la selección femenina de Rugby y una amplia representación de deportistas femeninas de distintas federaciones españolas y los presidentes de las Federaciones de Piragüismo, Gimnasia, Triatlón, Natación, Rugby y Bádminton.

Fuente: http://www.mecd.gob.es/prensa-mecd/actualidad/2016/07/20160721-mujer.html

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“Queremos medios públicos para decir la verdad, no para hacer la guerra a los privados”

Entrevista al periodista Pascual Serrano, autor de “Medios democráticos. Una revolución pendiente de la comunicación” (Foca)

Europa/España/22 de Julio de 2016/Autor: Enric Llopis/Fuente: Rebelión

Pluralidad, rigor, veracidad y participación democrática. Los medios de comunicación públicos hay todavía que inventarlos, pero los citados podrían ser algunos de los criterios de actuación. “A los ciudadanos se les convence con argumentos y razones, queremos medios públicos para decir la verdad y no para combatir a los privados o hacer una guerra de ondas”, afirma el periodista Pascual Serrano, autor de “Medios democráticos. Una revolución pendiente en la comunicación” (Foca). El escritor aborda en el libro los cambios en el modelo de comunicación promovidos por los gobiernos progresistas de América Latina, que han abierto camino a iniciativas como el reparto equitativo del espectro radioeléctrico, la inclusión del principio de veracidad informativa en las constituciones y leyes o la imposibilidad de que el sector financiero y los políticos tengan participaciones en el capital de los medios. Pascual Serrano considera además que las figuras del periodista y el comunicador comunitario tendrían que converger, y que los últimos cambios políticos en Brasil, Argentina y Venezuela pueden conducir a un grave retroceso. “Los cambios requieren procesos sociales que duran años, y se revierten en cuestión de minutos”. “Es la historia de la humanidad”.

¿Qué diferencias estableces entre un periodista y un comunicador comunitario, figura muy en boga en América Latina? Tal vez un periodista se apoye en hechos, datos e informaciones contrastadas, mientras que el comunicador difunde un “mensaje”, acompaña en las luchas sociales y da voz a los invisibilizados en un conflicto. ¿Cómo resolver la disyuntiva?

-Creo que tendría que darse un punto de convergencia. A mi juicio es un error actualmente pensar en un comunicador militante al margen de los principios periodísticos; pero también resulta erróneo que el periodista se sitúe fuera de los valores de una sociedad. Me parece que se están contraponiendo las dos figuras, en su quehacer e incluso entre ellos. A veces parece, incluso, que los comunicadores comunitarios alardeen de no haber estudiado periodismo. Tendría que producirse una mezcla, un injerto entre ambos.

Dedicas un capítulo del libro “Medios democráticos” a Brasil. Y citas al sociólogo Emir Sader para subrayar las limitaciones de las reformas emprendidas por Lula: “Al no avanzar en la democratización de los procesos de formación de la opinión pública, el gobierno pone en peligro todos los avances acumulados desde 2003”. ¿Es lo que ha ocurrido con la llegada a la presidencia de Temer?

-Es una profecía que se ha cumplido, el tiempo le ha dado la razón a Emir Sader y a los que decíamos que no se estaba haciendo lo suficiente. Al final Dilma Rousseff ha sufrido un golpe de estado con la complicidad de los medios de comunicación, porque fueron incapaces de crear una estructura democrática de medios. Aunque también es verdad que lo tuvieron muy difícil. Primero, porque nunca tuvieron mayoría suficiente en el legislativo para aprobar las medidas necesarias. Además, porque pretendieron hacerlo del modo más razonable desde una perspectiva de izquierdas: crear un ambiente de sensibilidad social para enfrentarse al problema (si hoy lo hiciera cualquier gobierno en Europa, creo que se estrellaría). Así, Lula impulsó la I Conferencia Nacional de Comunicación (diciembre de 2009), tras un año de debates en todo el país. Cerca de 30.000 personas discutieron sobre comunicación en los barrios.

-¿Qué ideas surgieron de la eclosión popular?

-Hubo 672 propuestas, aprobadas por 1.684 delegados, y la conferencia resultó todo un éxito. Diferentes sectores sociales coincidieron en que había que democratizar la comunicación, repartir mejor las licencias, terminar con los oligopolios y crear unas garantías de decencia en los contenidos informativos. Pero el gobierno de Lula no se atrevió a avanzar. Durante la presidencia de Lula da Silva llegó a elaborarse un anteproyecto de ley de un nuevo Marco Regulatorio para las Telecomunicaciones, que terminó en un cajón. Así las cosas, un movimiento de periodistas y organizaciones sociales impulsaron un borrador de ley de medios “alternativa”. Pero el gobierno nunca fue más allá: es difícil valorar en qué medida no pudo o no se atrevió. En 2014, ya durante la presidencia de Dilma Roussef, se aprobó el llamado “Marco Civil de Internet”, con el fin de garantizar la neutralidad de la red. Sin embargo, al final, los medios de comunicación han sido muy activos en el derrocamiento golpista de Dilma.

-En el libro recoges unas declaraciones de Orlando Pérez, director de “El Telégrafo”, un periódico público de Ecuador. Afirma lo siguiente: “No sabemos qué es un periodismo público, debemos inventarlo”. ¿Por dónde habría que empezar?

-En efecto hay que inventarlo, y lo dice un ejemplo con pocos precedentes: el director de un periódico público. Las democracias occidentales no suelen tenerlo, pero sí existen en Bolivia, Ecuador o Venezuela. Ahora bien, el periódico público no debería ser una especie de folleto o agencia de prensa gubernamental, sino un medio con todas las garantías de pluralidad, rigor, veracidad y participación democrática. Todavía hay que inventarlo. Se producirán, seguramente, tensiones con sectores de los gobiernos que crean que pueden quitar una noticia que no les guste. A los gobiernos hay que explicarles que los medios públicos no van a ser su correa de transmisión. Pero también hemos de entender que un ministro esté más legitimado para escribir en un medio público que un columnista, a quien nadie ha votado. Por otra parte, muchas veces he visto en Cuba que no se trata tanto de que el gobierno no deje, como de falta de audacia del periodista.

-¿Qué ejemplos de medios públicos reúnen las condiciones de rigor, veracidad y participación democrática que señalabas?

-Hay todo un espectro. Creo que “El Telégrafo” de Ecuador está haciendo un buen trabajo, pero también me parece que medios como “El Correo del Orinoco”, en Venezuela, olvidan totalmente la información internacional. Ésta es una de las cosas que critico en el libro. Por otro lado, “Telesur” intenta realizar una buena labor, aunque las televisiones nacionales venezolanas no lo hagan tan bien. ¿Qué falla? Es complicado, porque cuando existe una alto grado de confrontación política, resulta muy difícil conseguir que una televisión pública se ubique de manera plural y equidistante. Toman partido y, por tanto, pierden legitimidad.

-¿Qué significa “hacerlo bien” o desarrollar una “buena labor” en una radiotelevisión pública?

-En primer lugar, dar voz a todos los colectivos. Si hay un determinado grupo de opositores que representan a un sector de la sociedad, han de tener voz en la televisión pública. Ahora bien, si se trata de un sector que pretende derrocar de manera violenta a un gobierno, evidentemente hay que criticarlo y sancionarlo. Pero la oposición legítima ha de estar representada. ¿También el Partido Popular? Por supuesto, y su hubiera un partido falangista que dice querer ganar las elecciones, también debería tener su espacio. Los medios privados son los que prohíben y vetan partidos. Nosotros queremos medios públicos que funcionen de otro modo.

-¿Con qué formato y discurso?

-Una cosa es explicar lo que hace el gobierno, y otra desplegar la propaganda o un discurso de aplauso ciego. Tampoco se trata de apoyar, sino de explicar las cosas. Si el gobierno de Venezuela ha construido y repartido un millón de viviendas, hay que contarlo. El dato no es apoyo, sino periodismo. Informar de que con la “Operación Milagro” se les ha devuelto la vista a dos millones de latinoamericanos, es periodismo. Esto es lo que nos ocultan, y lo que nosotros hemos de contar. Si hay una trama golpista de la OEA contra el gobierno de Venezuela, eso se cuenta pero no con un discurso de arenga política o de panfleto. Porque las formas son muy importantes. Los medios comerciales han aprendido muy bien las formas: desarrollan un discurso político e ideológico bajo una apariencia de neutralidad. Nosotros hemos de aprender, pero no para hacer lo mismo, sino para darnos cuenta de que no podemos ir con un discurso panfletario y un megáfono.

-En el libro pones ejemplos de artículos de las constituciones latinoamericanas que apuntan un nuevo modelo comunicativo. También legislaciones, decretos y reglamentos. ¿Hay riesgo de que todo ello quede en “papel mojado”? También la letra de la Constitución de 1978, el Estatuto de Radiotelevisión Española y de las televisiones autonómicas, los libros de estilo y defensores del lector de algunos medios apuntan, sobre el papel, a una mayor democracia.

-Puede haber un riesgo, pero se ha de distinguir entre normas privadas y públicas. Las de los medios privados no sirven para nada, porque no son apelables ante ningún juzgado. El libro de estilo de “El País”, el código deontológico de “Tele 5” o el código ético de “Antena 3” son “papel mojado”. En el ámbito privado, lo único importante es que lo que haces le guste a tu jefe, para al día siguiente poder ir de nuevo a trabajar. Todo es una gran mentira. El defensor del lector de “El País” o el de TVE son una farsa. La difusión en TVE de un supuesto desnudo de la dirigente andaluza de Podemos, Teresa Rodríguez, o de las presuntas virtudes curativas del aroma de limón sólo supusieron un “reproche” por parte del Defensor del Espectador, el Radioyente y el Internauta de RTVE. Lo que realmente sirve son las legislaciones que digan, como ocurre con los médicos o los ingenieros, que se actuará contra el profesional que no cumpla.

-¿Qué medidas efectivas destacarías de cuantas han adoptado los gobiernos “progresistas” en América Latina?

-Primeramente, el reparto de los tres tercios del espacio radioeléctrico: un tercio para los medios públicos, otro tercio para el negocio privado y además una tercera parte para los medios comunitarios. Es una medida que se ha aplicado en Ecuador, Bolivia, Uruguay, Argentina y Venezuela. Tiene un efecto colateral, inevitable: que en algunos lugares los movimientos sociales que se queden con ese tercio no sean representativos. En Brasil, por ejemplo, las iglesias evangelistas se han hinchado de medios comunitarios. Es el problema cuando no existe una sociedad organizada. También es muy importante que sectores bancarios, políticos e iglesias no puedan ser dueños de medios de comunicación. Es un principio que figura en la Constitución de Ecuador, y que después se incorporó a la legislación venezolana. Por último, garantizar la veracidad de la información, tal como establece el Artículo 20 de la Constitución Española, pero no se cumple ni existe una ley que lo desarrolle. Este principio viene recogido en el Decreto de aplicación de la Ley de Responsabilidad Social de Radio y Comunicación de Venezuela, la Ley de Radiodifusión y Televisión de Ecuador; y la Ley de Lucha contra el Racismo y Toda Forma de Discriminación de Bolivia.

-“Lo indiscutible es que hoy en América Latina se está construyendo el futuro de otro sistema de medios de comunicación posible”. Es la frase con la que cierras el libro. ¿Tiene limitaciones el modelo?

-Nos encontramos ante un camino inédito. Como decía Simón Rodríguez, maestro de Simón Bolívar, “inventamos o erramos”. En América Latina van haciendo su camino, probando, inventando, y de sus errores vamos aprendiendo todos. Errores como que haya periodistas que se dejen arrebatar por esa militancia de quien se siente indignado por décadas de agresividad de los medios privados contra los procesos democráticos; y, en consecuencia, adoptan una posición de militancia y combatividad en los medios públicos. Creo que eso no es bueno, tenemos que demostrar una profesionalidad. Queremos medios públicos para decir la verdad, no para luchar contra los medios privados. No se trata de entablar una guerra de ondas. Todo esto se ve, por ejemplo, en una televisión pública como la venezolana. Así no se convence a nadie.

-¿De qué se trata entonces?

-Cualquier “antichavista” que vea la televisión pública, va a encabronarse. No hay que encabronar a la oposición. Queremos convencer a los ciudadanos de unos determinados procesos y valores, y se convence con información, argumentos y razones. Si no contamos con ellos, es porque no tenemos razón, y entonces no hay que convencer de nada.

-Valores, principios, argumentos, razones… ¿Qué peso ha de tener la tecnología?

-En este apartado radica uno de los errores que tradicionalmente ha tenido la comunicación popular. Nos hicieron falta 50 años para darnos cuenta de que los comunicados requerían márgenes. Ahora, en los documentales, nos harán falta otros 50 años para darnos cuenta de que hay que poner dos cámaras, enfocar, iluminar y mejorar el sonido. Esto es algo que los medios comerciales tienen asumido, pero a base de superficialidad, frivolidad y trivialidad. Tenemos que profundizar, y esto no es incompatible con los formatos alegres y divertidos.

-¿Por ejemplo?

-Un documental de Michael Moore o de Naomi Klein, se me ocurre. En el campo audiovisual pueden hacerse trabajos muy valiosos sin dormir a nadie. Aunque no es fácil, y requiere técnica. No basta con tener claras las ideas políticas.

-La “revolución comunicativa” que abordas en el libro, ¿puede retroceder con los cambios en la presidencia de Argentina y Brasil o de mayoría parlamentaria en Venezuela? ¿Hay un riesgo de “frenazo” a las reformas?

-Totalmente, y además con una eficacia terrible. El ejemplo más claro es Argentina, que necesitó debatir durante dos años la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, aprobada en 2009, durante la presidencia de Cristina Fernández. En los debates participaron y realizaron aportaciones sindicatos, distintas organizaciones sociales, políticas, de derechos humanos, cooperativas, medios comunitarios y universitarios, entre otros. Se desarrollaron 24 foros auspiciados por 11 gobernaciones y 25 universidades nacionales. La ley estuvo parcialmente suspendida durante tres años debido a la impugnación del grupo Clarín, que se resistía a perder su condición de oligopolio. En diciembre de 2012 la Corte Suprema de Argentina resolvió el fin de la suspensión cautelar, por lo que la legislación ya podía aplicarse. Pero tras ganar las elecciones presidenciales (diciembre de 2015), Macri suspendió la ley en dos minutos.

-¿Cuál es la conclusión?

-En dos minutos el trabajo popular de una sociedad movilizada se puede paralizar. Los cambios sociales necesitan procesos de años, en cambio, revertir los avances y retroceder se hace en minutos. Es la historia de la humanidad…

-Por último, ¿qué medios recomendarías para informarse sobre la realidad política de América Latina? ¿Aconsejarías aislarse del “ruido” digital, puede Internet confundir y saturar más que aportar información?

-En papel, considero que el mejor medio sobre política internacional continúa siendo “Le Monde Diplomatique”. En Internet probablemente leería “La Jornada” de México o “Página 12” de Argentina, también “Brasil de Fato” o “Carta Maior”. Fuera del contexto latinoamericano, recomendaría a periodistas como Rafael Poch o Robert Fisk. Por otra parte, creo que el ciudadano o el periodista pueden terminar con una “empanada” considerable -por el exceso de información- si no parten de una buena base, si no saben reconocer la legitimidad de las fuentes o si carecen de un conocimiento histórico previo y de un nivel cultural adecuado. Pero creo que nos hallamos en una situación preciosa, siempre con el punto de partida comentado. Con los conocimientos previos, uno puede encontrar el diamante en el estercolero de Internet. Aunque sin una base suficiente, uno termina mucho menos informado que antes de Internet.

Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=213329

 

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México: IMSS certifica educación en guarderías

México/Crónica/19 de julio de 2016/Por: Cecilia Higuera

El director general del Instituto Mexicano del Seguro Social, Mikel Arriola y el Gobernador de Baja California, Carlos Mendoza Davis, firmaron el primer convenio de colaboración para acreditar el programa de estudios de las estancias infantiles del IMSS, que por equivalente tiene aval de la Secretaría de Educación Pública (SEP).

La finalidad es que los menores que permanecen en las estancias del Seguro Social, tengan pase directo para poder ingresar a segundo grado de preescolar, luego de que la educación que reciben en las guarderías quedará reconocida oficialmente por la SEP.

Mikel Arriola resaltó además que el referido convenio de colaboración se suscribirán en estados de la República, a fin de establecer las acciones, compromisos y responsabilidades para validar que las guarderías del IMSS en la entidad otorguen el documento que acredite los estudios de educación preescolar que reciben los niños, facilitando su acceso al segundo año de preescolar y asegurando el derecho constitucional a la educación.

Dicho acuerdo se suscribió en el marco de la Estrategia Nacional de Inclusión que impulsa el Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, y fue atestiguado por el titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), José Antonio Meade.

Además las partes garantizan una alimentación saludable, variada y suficiente a los infantes para prevenir enfermedades degenerativas en la edad adulta. Con esto, no sólo se aplican medidas efectivas para combatir el sobrepeso y la obesidad infantil, sino también representan un impulso importante para construir vidas saludables a largo plazo.

Arriola Peñalosa dijo que el compromiso es seguir cumpliendo con esta obligación de seguridad social para brindar el servicio a padres y niños, pero ahora, con un valor agregado que se genera de la Agenda de Inclusión que es el acceso a la educación preescolar.

En la firma de este convenio estuvo presente la Directora General del Consejo Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las Personas con Discapacidad (Conadis), Mercedes Juan López.

Tomado de: http://www.cronica.com.mx/notas/2016/972983.html

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Película. Rojo como el cielo

Rojo como el cielo: Como consecuencia de un fatídico accidente, Mirco, un niño italiano protagonista de esta historia, sufre una lesión cerebral que le supondrá una ceguera crónica. ¿Será capaz de superar las dificultades que ello supone?

La historia se remonta a la infancia de Mirco, época en la que era un alegre y brillante niño de Toscana que se enloquecía por las películas. Por ese entonces, nadie sospechaba que un juego le cambiaría el destino para siempre, pero así fue cuando el viejo rifle con el que se entretenía Mirco se disparó de forma accidental y lo hirió en la cabeza.

Basada en una historia real, sucedida en una villa de la Toscana a inicios de la década de los setenta, Rojo como el cielo cuenta parte de la vida de Mirco, un niño de 10 años, obsesionado con las películas. Un día, sufre un accidente con un rifle que lo deja permanentemente sin vista. Es enviado a un colegio especial para personas invidentes, pues en esta época los niños discapacitados son obligados a estudiar separadamente de los demás . Mirco se encierra en sí mismo y cree que volverá a ver. Un día conoce a Felice, un niño que nació ciego y quien le pregunta a Mirco cómo son los colores. Él le responde que los colores son como representaciones que uno puede sentir (ejemplo: el color café lo representa con la corteza de los árboles; el azul con ir en bicicleta mientras el viento te golpea en la cara, entre otros ejemplos). Pronto se vuelven amigos.

Un día, el profesor de Mirco le pide a la clase un ensayo sobre la naturaleza, pero el niño tiene pensado hacer otra cosa. Le pide ayuda a su amigo Felice, pero para ello necesitan una grabadora que está resguardada en la oficina del director. Un vez que la consiguen, junto con las cintas, Mirco graba los sonidos que pueden ayudarle con su trabajo; por ejemplo: el ruido de la regadera, el sonido del viento y el canto de los pájaros, entre otras cosas. Todo esto lo lleva a cabo con la ayuda de su amigo. Una vez editado, el niño se lo presenta a una niña, Francesca, quien es hija del conserje y todas las tardes escucha la radio en su estación favorita; ahí relatan historias de aventura y fantasía. Ambos se vuelven amigos; tiempo después, una tarde se escapan para irse al teatro a ver una película, porque Francesca nunca ha visto alguna. Su intención es entrar sin pagar la entrada; sin embargo, son descubiertos por el guardia, quien los echa del lugar.

Después de que el profesor escucha la cinta de Mirco sobre la naturaleza, llama al director para saber cómo calificar al niño. Tanto Mirco como el profesor esperan que el director se sorprendiera, pero sucede todo lo contrario: además de regañarlo por haber tomado la grabadora sin permiso, también se le reprende por no haber hecho el ensayo como se le había solicitado. Mirco entristece y evita ir a clases; incluso deja de hablar con los demás, sólo se queda en su cama sin hacer nada. Su profesor no se queda de brazos cruzados y le regala una grabadora, diciéndole que siga con sus cuentos, ya que sabe que tiene un gran talento oculto.

Pronto a Mirco le viene una gran idea: hacer un cuento y contarla como lo hacen en la radio. Junto con Francesca, Felice y el resto de sus compañeros de clase, quienes poco a poco se integran para ayudar a hacer el cuento, a partir de los dictados de su imaginación y el sonido de objetos a su alcance. Empiezan a hacer un cuento de aventuras y magia, pero pronto son descubiertos por una de las monjas y son llevados a la oficina del director, quien intuye que el responsable de todo aquello es Mirco. Lo castiga quitándole la grabadora y no dejándolo participar en el recital que se hace todos los años en el colegio para recaudar fondos.

Al saber tal castigo, el profesor de Mirco en seguida se dirige a la oficina del director, donde empieza una disputa. El director con su mente cerrada de que los niños no tendrán una vida «normal», ya que no son aceptados ante las demás personas. El profesor le dice que no se ha dado cuenta que los niños pueden hacer las mismas cosas que quienes cuentan con el sentido de la vista, sólo que no se les ha dado la oportunidad y le pide que Mirco se encargue de dirigir y participar en el recital. El director acepta, ya que están bajos de presupuesto y el recital es la única manera de evitar que el colegio cierre. Feliz, el profesor le comunica a Mirco la gran noticia, levantando los ánimos del entristecido muchacho.

El día del recital, cuando los adultos entran al pequeño teatro del colegio, les entregan una banda negra para que se tapen los ojos a la hora de empezar. El recital comienza y todos los asistentes quedan maravillados, al ser la primera que acuden a un recital donde sólo hay que escuchar e imaginarse cómo es cada ruido que se presenta; como si estuvieran tomando el lugar de una persona que no puede ver. Al final del recital, todos aplauden, inclusive los padres de los niños y, entre ellos, los padres de Mirco, quienes deciden llevárselo a casa en vacaciones de verano. Una vez ahí, Mirco se encontrará con su antiguos amigos de juegos quienes lo tratan como si nada hubiera sucedido y Mirco no hubiera perdido la vista. Aunque Mirco nunca vuelve a ver, se convierte en uno de los más famosos editores de sonido.

Descargar en: https://www.youtube.com/watch?v=0lgQc66P1PU

Imagen: http://www.agendamenuda.es/images/que-hacer/cine/cuartel/rojo-como-el-cielo.jpg

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Grecia integrará a los niños refugiados en el sistema educativo público

Grecia/18 de Julio de 2016/ UNICEF

Según datos del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), el 40 % de los más de 50.000 inmigrantes atrapados en Grecia tras el cierre de las fronteras son menores de edad.

 Grecia contratará 800 maestros de primaria y secundaria a partir de septiembre para la educación de los menores refugiados que se encuentran en el país, según anunció hoy el ministro de Educación, Investigación y Religión, Nikos Filis.

«El ministerio va a contratar a 800 maestros que trabajarán en clases especiales dentro de las escuelas públicas y en escuelas en los campamentos», explicó Filis tras una reunión con la directora general de la organización humanitaria Save the Children Internacional, la ex primera ministra de Dinamarca, Helle Thorning-Schmidt, informó Efe.

Los menores inmigrantes que viven en centros cercanos a núcleos urbanos acudirán a las escuelas públicas, mientras que aquellos que se encuentran en zonas rurales tendrán clases dentro de los campamentos.

«El primer problema al que nos enfrentamos es educar a estos niños no en un gueto, sino dentro del sistema de educación pública griega», dijo Filis.

Además de las clases se construirán jardines de infancia dentro de los campamentos, para que los niños más pequeños reciban atención cerca de sus familias.

En estas clases se enseñará inglés, griego, y materias acordes con la edad y nivel educativo de los niños.

Thorning-Schmidt declaró que Save the Children trabajará de forma activa en el comité del ministerio de Educación, asesorará y ayudará a encontrar refugiados que ayuden con la traducción de las clases y en la enseñanza de la lengua materna de los niños.

La integración en el sistema educativo de estos menores ha sido una reivindicación recurrente de organizaciones no gubernamentales y activistas, que en muchos casos construían sus propias clases en los campamentos informales.

El ministerio de Educación griego creó dos comités de expertos el pasado mayo para diseñar actividades educativas en los campos de refugiados durante el verano y un curso propiamente dicho a partir de septiembre que integraría a estos niños en el sistema educativo griego.

En algunos centros de refugiados ya comenzó un programa piloto en el que se daban clases de inglés a algunos niños.

La contratación de profesores se llevará a cabo a través de un anuncio público y un tribunal seleccionará a los 800 maestros.

Según datos del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), el 40 % de los más de 50.000 inmigrantes atrapados en Grecia tras el cierre de las fronteras son menores de edad.

Fuente: http://www.eluniversal.com/noticias/internacional/grecia-integrara-los-ninos-refugiados-sistema-educativo-publico_346405

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Residencias estudiantiles: fórmula de calidad con bienestar

América del Sur/Colombia/15 de Julio de 2016/Autor: Ignacio Mantilla/Fuente: Diario El Espectador

Hace algunos meses recibí la visita de Rodolfo Hernández, actual alcalde de Bucaramanga, quien en su calidad de egresado de la Universidad Nacional guarda profunda gratitud a su alma mater.

En la corta conversación que sostuvimos me describió con especial precisión la habitación que ocupaba en la residencia estudiantil, me señaló el lugar exacto de su ubicación y con emoción me contó algunas de sus experiencias y anécdotas de esa envidiable vida estudiantil que disfrutó. Destacó que, como joven proveniente de Piedecuesta, sin esa residencia él no hubiese podido formarse como ingeniero.

Y es que hasta hace algún tiempo, el ingreso a la universidad en Colombia era prácticamente imposible para quienes no vivíamos en las grandes ciudades. Las residencias estudiantiles eran para muchos la mejor o única opción de adelantar los estudios universitarios.

Pero el lugar de vivienda de los padres no sólo era un factor determinante para realizar estudios superiores; también lo era para cursar el bachillerato completo en muchos municipios del país. En mi caso, cuando yo era niño y vivía en el bello municipio de Los Santos (Santander), allí solo era posible estudiar la primaria. Para formarse como bachiller había que ir a Piedecuesta o a Bucaramanga; y cuando la familia era grande, como en nuestro caso, resultaba mejor trasladar la familia entera para apoyar los estudios de todos los hijos. Constituíamos así, familias desplazadas por la falta de oportunidades en educación.

Aprovecho para mencionar anecdóticamente que la formación era particularmente rígida y excesiva. Recuerdo, por ejemplo, que en primero de bachillerato, en el Seminario San Alfonso de los Padres Redentoristas, tomábamos clases de latín, francés, griego, inglés y, por supuesto, castellano, para referirme únicamente a los idiomas. Años después, aprendiendo alemán, me fue útil haber conocido tan temprano la gramática y las cinco declinaciones del latín. Mi sorpresa fue aún mayor cuando supe que en Alemania, además del idioma alemán, como es natural, era aceptado también presentar la tesis doctoral en latín (lo cual estuvo, naturalmente, fuera de mis capacidades). Sin embargo, yo diría que ésta era una época en la que en el bachillerato se nos mantenía entretenidos “a punta de pénsum”. Además de la cantidad de materias y las horas de lectura, estudio y deporte, se dedicaba la hora del almuerzo para que alguno de nosotros continuara la lectura, en voz alta, de un libro seleccionado.

Superado el bachillerato, si se decidía continuar la formación profesional (lo cual no era lo común por entonces), en las familias de Santander con escasos recursos sólo podían darnos a elegir entre dos universidades: la UIS en Bucaramanga o la Universidad Nacional en Bogotá. Naturalmente quienes tenían la fortuna de ganar un cupo en la Universidad Nacional (como fue el caso del alcalde y muchos otros), se enfrentaban inmediatamente al problema de su vivienda en la ciudad, pues al no poder acudir al familiar, al pariente lejano apenas conocido o al paisano para buscar alojamiento, las residencias estudiantiles eran la gran salvación que se complementaba con las cafeterías para tomar tres comidas diarias.

Hoy existe una gran semejanza con la aspiración de muchos para realizar estudios de posgrado en el exterior; y la oferta de residencia y cafetería en las universidades extranjeras es destacada por los estudiantes colombianos actuales y por quienes fuimos estudiantes en el exterior, como una de las mayores aliadas para el éxito en los estudios.

¿Cuándo perdimos en Colombia esta fortaleza de la educación superior? En la Universidad Nacional las dificultades en la administración de sus residencias estudiantiles en Bogotá condujo a su cierre definitivo en 1984, al igual que los comedores y la cafetería central, con las consecuencias que todos conocemos, especialmente nefastas para quienes provenían de otras regiones del país. Por fortuna, esto no ocurrió en otras sedes de la Universidad y, en particular, en la sede Manizales las residencias son ejemplares.

Estas falencias han sido perversamente suplidas por quienes expresan como positivo para la educación universitaria no tener que ir a otra ciudad a estudiar, reforzando así las razones para brindar programas de dudosa calidad que atraen a los incautos jóvenes y padres de familia. La complicidad de algunos gobiernos ha jugado también un papel importante, pues el deber del Estado de ofrecer educación de calidad se ha relajado, se ha abandonado o se ha delegado a entes privados, en algunos casos sin intereses distintos a los económicos.

La mayoría de los colombianos se han limitado a exigir cobertura universitaria regional y en alguna medida ésta ha sido erróneamente atendida, sacrificando lo esencial: su calidad. El balance de cobertura frente a calidad y frente a bienestar está pendiente de lograrse.

Desde la Universidad Nacional estamos empeñados en fortalecer nuestro carácter nacional y retomar o ampliar la oferta de residencias estudiantiles en nuestras sedes andinas, formulando un proyecto de modernas viviendas estudiantiles, principalmente para la sede Bogotá. Así, los jóvenes provenientes de diversos municipios podrán vivir dignamente y lograr un buen rendimiento académico, para que convertidos en profesionales competentes regresen a potenciar el progreso de sus regiones de origen.

Naturalmente, requerimos de un nuevo y audaz modelo de administración de vivienda estudiantil. La invitación está abierta para que entre todos encontremos la forma óptima de llevar a cabo esta apuesta por las residencias estudiantiles de la Universidad Nacional, patrimonio de todos los colombianos.

* Rector, Universidad Nacional de Colombia

Fuente: http://www.elespectador.com/opinion/residencias-estudiantiles-formula-de-calidad-bienestar

 

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Senegal: una escuela que premia la diferencia

Senegal/14 de julio de 2016/ Fuente: radiopolar
Khady llevaba cinco años en casa con su abuela cuando la fueron a buscar. Estaba tumbada en un banco, totalmente ida, con la mirada ausente. Su madre la abandonó al descubrir que tenía discapacidad mental y de su padre nunca se supo. Tras un accidente de coche, se quedó coja de la pierna izquierda y desde entonces, camina con cierta dificultad. Khady llevaba años sin pisar la escuela porque no era capaz de seguir el ritmo de la clase. Todos los niños se burlaban de ella y, para defenderse, iba por ahí con su cantimplora pegando a todo el mundo. Además, no articulaba una sola palabra y la relación que tenía con su entorno era, en consecuencia, muy negativa.
La realidad de una persona con discapacidad en Senegal, especialmente en las zonas rurales, puede ser muy dura, aunque Khady es una niña afortunada. En el año 2014 empieza a asistir al centro Jacobo Romero Rivera, la segunda escuela pública de educación especial en Senegal, situada en Palmarin, una comunidad rural en la región de Fatick. Hoy no queda ni rastro de esa niña problemática, marginada y solitaria que era Khady. Ahora es muy sociable y sonriente, ya sabe hablar, tiene muchos amigos, además le encanta bailar sin avergonzarle su cojera y asiste a todos los eventos culturales de su comunidad. Es una alumna constante, motivada y trabajadora. “Me pidió una libreta para escribir y dibujar en casa”, dice su abuela. «Estoy muy contenta con su cambio de actitud, está mejorando mucho y al fin está integrada». Que Khady vaya a la escuela, aprenda y tenga cierta autonomía es posible gracias a Bego y Jon, la pareja gallego-francesa de cooperantes que impulsó la iniciativa de crear un centro en Palmarin.
Todo empezó en el año 2010, cuando Bego trabajó como psicóloga y maestra de educación especial en las distintas escuelas de la comunidad gracias a una beca del Centro Universitario de Cooperación Internacional para el Desarrollo (CUCID) de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Durante un año trabajó con los alumnos que presentaban dificultades de aprendizaje y problemas del lenguaje, como ya había hecho en otros centros de Perú, Bolivia y Nepal. Mientras desarrollaba su trabajo, descubrió varios casos de niños que no asistían a la escuela o que la abandonaban debido al escaso apoyo que recibían y al estigma que arrastraban por su discapacidad. En Senegal, 59 de cada 1.000 personas tienen alguna discapacidad y esta realidad afecta más a las mujeres que a los hombres, según un informe de la Agencia Nacional de Estadística y Demografía publicado en 2014. Además, la situación es compleja porque las personas con discapacidad a menudo son rechazadas por sus familias debido a sentimientos de vergüenza o culpabilidad.
Durante su estancia en Palmarin, Bego aprendió serer, el idioma local, y comenzó una labor de sensibilización en la comunidad acerca de la discapacidad física e intelectual que todavía continúa hoy. “Es imprescindible eliminar el estigma, sobre todo en los niños, que son rechazados debido a las falsas creencias conectadas al castigo divino”, asegura Bego. Su compañero Jon añade: “Antes de arrancar el proyecto nos hemos reunido con los padres, los jefes del pueblo, los profesores, el cura, el imán, el alcalde y también con el departamento de inspección educativa senegalés. Es fundamental que todas las partes implicadas estemos bien informadas, nos coordinemos y nos apoyemos”.
La escuela está ubicada en el recinto del colegio público de Palmarin, lo que garantiza la integración y la interacción con todos los niños del pueblo. Además, comparten los espacios de juego, los recreos y la biblioteca. “Algunos niños, con un refuerzo escolar y algunas horas de apoyo, pueden seguir el ritmo de la clase, otros no pueden y necesitan una atención más individualizada y adaptada a sus capacidades”, asegura Bego. “Aquí asisten los niños que, debido a sus necesidades educativas especiales, no se benefician de la educación en un colegio convencional. Aunque si algún alumno tiene posibilidades de reintegrarse en una escuela ordinaria, los maestros hablan con la familia y con el centro para que así sea. Es el caso de Cecile, que después de un año en el Jacobo Romero Rivera, comenzó a hablar, a leer y escribir con solo seis años. Actualmente asiste sin apoyo al sistema público ordinario”.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 15% de la población mundial presenta alguna discapacidad y, según la UNESCO, un 90% de los niños y niñas con discapacidad no asisten a la escuela en los países en desarrollo. Y Palmarin era un claro ejemplo. Este colectivo son uno de los grupos más marginados del mundo y constituyen la mayor minoría del planeta. Entre las razones por las que son rechazados destacan las relacionadas con las viejas supersticiones y el castigo divino. Debido al fuerte arraigo de estas ideas, las personas que presentan alguna discapacidad sufren incomprensión, marginación, rechazo e incluso son perseguidos en algunos casos.
Así ocurrió con Charles Camile, el alumno más joven de la escuela, que tiene tres años y padece una parálisis cerebral infantil debido a las complicaciones que tuvo su madre durante el parto. “Cuando nació CC –así le llaman– y se enteraron en el pueblo, algunos me perseguían porque querían deshacerse del bebé, convencidos de que mi hijo era una reencarnación del diablo”, afirma Rosalie, su progenitora. “Estoy muy orgullosa de mi hijo y no me importa lo que digan los demás, pero al principio no salía de casa y tenía mucho miedo de que le pudiera pasar algo”. CC tiene una movilidad muy reducida y una dependencia absoluta, sin embargo, está bien cuidado y recibe la atención que necesita. Gracias a la labor de sensibilización que ha hecho la Asociación J’aime Rever en la comunidad, Rosalie ya no teme por la vida de su hijo. “No solo han dejado de perseguirlo, sino que ahora todo el pueblo protege a mi bebé. En la escuela, todos los niños le adoran y cuidan de él”, dice.
Bego y Jon, fundadores de la asociación e impulsores del proyecto educativo, fueron puerta por puerta explicando a los padres que los niños con diversidad funcional no son reencarnaciones del demonio, sino que las causas de una discapacidad son otras y nadie es culpable de la situación.
La escuela Jacobo Romero Rivera, cuyo nombre hace honor al primo de Bego, que fue víctima del accidente de tren ocurrido en Santiago de Compostela en Julio del 2013, abrió sus puertas en Octubre del 2014 con el objetivo de proteger y defender el derecho universal a la educación, como recoge el Artículo 26 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
La evolución de los alumnos es la mejor garantía de su capacidad de aprendizaje. Gracias a ellos, al apoyo de la comunidad y al permiso del ayuntamiento la construcción de la escuela fue posible. Los obreros, electricistas y pintores del pueblo se involucraron en el proyecto y realizaron la obra con la ayuda de varios abuelos, que también quisieron aportar su granito de arena.
Hoy, el centro tiene 17 alumnos repartidos entre dos aulas. El programa educativo y los materiales pedagógicos están adaptados a las necesidades específicas de cada alumno. “Evaluamos a cada niño para conocer sus habilidades, su contexto socio-familiar, sus deseos, intereses y necesidades, que luego definen su programa de desarrollo individualizado (PDI). Este incluye el aprendizaje de tareas prácticas, como ir a la compra o cocinar pequeños platos; el desarrollo de habilidades sociales, como saludar, presentarse o conversar con los miembros de la comunidad; y tareas básicas de higiene, cuidado personal y autonomía en general. Asimismo, los alumnos aprenden lenguaje, lectura, escritura y cálculo”, comenta Bego, encargada de desarrollar el programa educativo. «Utilizamos como base el programa de educación pública senegalesa junto con diferentes programas de educación especial y lo adaptamos a la realidad del país», abunda. Para ello, cuentan con dos profesoras locales que han sido formadas específicamente para el puesto.
Agnés, de casi 24 años, tiene una historia similar a la de Khady. Vivía con su abuela porque su madre también la abandonó. Preocupada por su futuro, Anne Marie acudió a la escuela para inscribir a su nieta. Agnés jamás había cogido un lápiz hasta ese momento. Cada actividad era un descubrimiento y un nuevo estímulo al que respondía con ilusión. A pesar de su discapacidad intelectual y de la privación total de educación que ha tenido, Agnés ahora sabe escribir, pintar, coser, contar y hasta puede leer algunas palabras.
Cuando encontraron a Paul, andaba por el pueblo vagando, recogiendo basura y estaba casi siempre solo. Le expulsaron de la escuela porque no paraba quieto y no hablaba. Paul tiene 13 años y un trastorno generalizado del desarrollo no especificado. Presenta algunos rasgos de autismo que afectan a su interacción social, comunicación y conducta, aunque eso no le impide asistir a la escuela y aprender, como los demás. Tampoco queda nada del Paul de hace años. Le encanta jugar al fútbol con sus compañeros, reparar aparatos electrónicos como radios, linternas o ventiladores y le fascina amasar plastilina.
Casi todos los alumnos tienen autonomía para ir y venir solos de la escuela. Además, se ayudan unos a otros durante las horas de clase. En los recreos juegan con los alumnos que antes se burlaban de ellos y hoy han aprendido a quererlos y aceptarlos como son.
El trabajo que realiza la escuela hace posible que las personas con discapacidad participen de manera activa y efectiva en la sociedad, como recoge el artículo 24 de la Convención de la ONU sobre los derechos de las personas discapacitadas, aprobada en diciembre del 2006 y ratificada por Senegal en la ley de orientación social nº 2010-15 relativa a la promoción y protección de los derechos de las personas discapacitadas, aprobada el 6 de Julio del 2010.
En pocos años, el cambio en la manera de ver y entender la discapacidad en la comunidad de Palmarin demuestra que es posible alcanzar el objetivo de escolarización universal de todos los niños con independencia de sus capacidades físicas o mentales. Al menos, en este lugar es posible, y ahora están más cerca de alcanzar una sociedad más igualitaria, más inclusiva y, por tanto, más justa. Nada de esto habría podido ocurrir sin la participación y el apoyo de toda la comunidad, que ya no entienden la discapacidad como un castigo de Dios sino como una diferencia que enriquece y refuerza la visión de la comunidad. En Palmarin, finalmente, cada niño es valorado por lo que es, y no por lo que sabe.
Esta comunidad rural y aislada, con acceso limitado al agua o la energía, y un porcentaje altísimo de analfabetismo, ha podido, ha querido y ha sabido transformar su mentalidad predominante por una más sensible y comprensiva frente a las personas más vulnerables. Este pequeño cambio supone un paso gigante hacia un desarrollo más sostenible y humano. Ahora es un lugar donde todos los niños tienen derecho a ser niños.
Fotografía: Paul, de 13 años, tiene un trastorno del desarrollo no especificado y ahora asiste a la escuela y está aprendiendo a relacionarse con los demás (M. M.).
(Por Marta Moreiras, publicado en elpais.com)

Fuente: http://www.radiopolar.com/noticia_121272.html

Imagen: http://www.radiopolar.com/images/noticias/20160706142815.jpg

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