Page 32 of 47
1 30 31 32 33 34 47

Conectividad: vínculo pedagógico entre la escuela y las redes sociales

Por: Ángela Marcela Cuartas Beltrán

Los jóvenes de hoy no aprenden como los de ayer, ya que nacieron en una cultura diferente y su funcionamiento cerebral no es el mismo. 

Día a día, la tecnología se apodera del entorno en el que se vive, lo transforma de tal manera que convierte a las personas en seres autodependientes que no son capaces de interactuar de forma real y física con el medio que los rodea. Los niños y niñas que han nacido en el siglo XXI se están desarrollando y desenvolviendo en una era digital casi de manera exclusiva, todas sus relaciones sociales se circunscriben a las adquiridas y desarrolladas a través de las redes sociales.

El estadounidense Prensky (2001) se refiere a ellos como nativos digitales, y afirma que “Los procesos de pensamiento lineales que dominan los sistemas educativos de hoy pueden retardar el aprendizaje de los cerebros que se han desarrollado con los procesos de los juegos y la navegación por Internet”. Para él, los jóvenes de hoy no aprenden como los de ayer, ya que nacieron en una cultura diferente y su funcionamiento cerebral no es el mismo; el gran impacto que ha generado la tecnología en la última década hasta ahora comienza y cada día se va convirtiendo en un mecanismo fundamental. Los teléfonos celulares y los computadores cada vez son más asequibles, lo que aumenta la conectividad, pero a la par genera cambios negativos en los seres humanos como la carencia de valores, el aislamiento social y la falta de socialización física.

Para despertar el interés del estudiante en cuanto al aprendizaje, se debe utilizar la conectividad, abrir un espacio a través de las redes sociales para la adquisición de conocimientos y fomento de valores. La conectividad y la comunicación se pueden transformar pedagógicamente para el fomento de valores a partir de las redes sociales. Facebook es la red social líder entre los estudiantes del colegio La Aurora IED, según estudio de campo. Las agresiones virtuales, el acoso cibernético y la divulgación de sus actividades diarias se viven a menudo entre los estudiantes de esta institución educativa, sin tener conciencia de las consecuencias que esto puede llegar a generar.

La idea es darle un sentido de uso positivo a la conectividad a partir de la red social como medio de comunicación pedagógica, es decir que adquieran el conocimiento de manera atractiva, moderna y fuera del aula convencional. Involucrar la conectividad y las redes sociales en la enseñanza facilita la labor docente en el quehacer pedagógico, ya que es un recurso atractivo y moderno para los estudiantes. El reto está en involucrar a toda la comunidad educativa para que se integre alrededor de este modelo.

La teoría digital o de enseñanza para la era digital fue desarrollada por el mexicano George Siemens, quien explica el efecto que la tecnología ha tenido en la forma como se vive, como nos comunicamos y como aprendemos los seres humanos en la actualidad. Para Siemens, la tecnología y el aprendizaje forman parte de un proceso que ocurre al interior de ambientes imprecisos; el punto de partida de la teoría es el individuo que obtiene toda la información de una red que está continuamente actualizándose, lo que deja obsoleta a la anterior.

La comunicación juega un papel muy importante en la actividad educativa, no solo como elemento de interacción sino en el desarrollo de las relaciones humanas Es esencial fusionar la conectividad, las redes sociales y la enseñanza dentro de la teoría de la comunicación educativa, ya que las aulas, escenarios de aprendizaje, y las instalaciones del colegio son espacios necesarios para desarrollar la exploración, además se presta para la interacción entre docentes y estudiantes y la comunidad educativa en general.

Mientras la conectividad es principalmente tecnológica, la comunicación es esencialmente humana y social. La tecnología aparece como un elemento base transformador en el proceso de la comunicación, pero sus acciones y efectos aunque son intermediados por las TIC, están relacionados con lo social. Se requiere una comunicación pedagógica para lograr un uso adecuado de las TIC.

El mundo virtual busca copiar y adaptar elementos propios de la realidad a su mundo para generar una mayor experiencia de fidelidad en los usuarios que habitan ella, como las experiencias sensoriales (audio y video), la inmersión (realidad virtual) o la fusión del mundo real y el mundo virtual (realidad aumentada). Pero hay un elemento que ha causado mayor impacto en los usuarios, especialmente los jóvenes, las redes sociales.

Cuando se habla de redes sociales, se piensa en las más básicas o de mayor uso como Facebook o Twitter, pero existe una amplia gama de ellas en la red. Los modos de comunicación que se emplean en las mismas alteran el comportamiento de los usuarios de manera positiva o negativa, como lo explica la baronesa Susana Green Field, autora de libro Su cerebro en los medios sociales, el cual explica que el uso desmedido de estas redes puede causar una conducta típica adictiva, que causa un daño en las mismas zonas cerebrales que las de los drogodependientes (Greenfield, 2014).

Los valores y la tecnología

Los jóvenes y en general la sociedad se encuentra a la vanguardia de los aparatos tecnológicos y la interacción entre programas y redes sociales, que de cierta manera han esclavizado a la sociedad. Pero, ¿cómo interfiere este modernismo tecnológico con los valores? La tecnología tiene una enorme influencia en el crecimiento y desarrollo moral, pues la internet es utilizada muchas veces de manera descontrolada, lo que genera adicciones y afecta seriamente los valores de los niños y niñas, jóvenes y adultos en general, que se ven atraídos por todo ese mundo de ilusión y consumismo que se mueve en la red.

Para este trabajo se encuestaron a 75 estudiantes del colegio La Aurora IED, entre 11 y 14 años de edad, para identificar su actitud frente al acceso y uso de internet, los equipos tecnológicos, las redes sociales y la viabilidad de usarlas como mecanismo de aprendizaje.

¿Cuáles de los siguientes elementos tecnológicos tienes en casa?

Celular: 0% – Computador mesa: 41% – Portátil: 16% – Smart TV: 3% – Todas las anteriores: 32%

La totalidad de los estudiantes cuentan con algún equipo tecnológico en casa, incluso la mayoría, 32%, cuentan con todos los elementos que se propusieron. Es decir que sí se encuentran a la vanguardia de la tecnología.

¿Tienes internet en casa?

Sí 89% – No 11%

89% de los encuestados cuenta con red de internet en casa, así que la conectividad y la comunicación son esenciales en su vida escolar, familiar y social en general.

¿Cuentas con una red social actualmente?

Sí 89% – No 11%

89%, la mayoría de los encuestados, cuentan con una red social, lo que quiere decir que están en constante comunicación e interacción con el medio y el mundo exterior.

¿Qué te gusta hacer cuando estás conectado al internet?

Ver videos 8% – Hacer videos y montajes 5% – Compartiendo en el Facebook 70%

Aunque las respuestas son variadas frente a lo que hace el encuestado mientras está conectado a internet, claramente se observa que 70%, la mayoría, comparten en la red social Facebook, además de chatear, con un porcentaje de 14%.

Para finalizar la encuesta, el siguiente interrogante es clave para la reflexión de este artículo.

¿Te gustaría hacer actividades escolares en el Facebook o página virtual?

Sí 86% – No 14%

86% de los encuestados les gustaría hacer las tareas y quehaceres escolares a través de la red social Facebook y aprovechar la página virtual. Esto los motivaría de forma diferente en sus quehaceres escolares.

Conclusiones

La accesibilidad que tienen los estudiantes del colegio La Aurora IED a las redes, la conectividad y los equipos tecnológicos en el hogar, al igual que el uso y dominio de los mismos, podría facilitar la enseñanza de algún tema académico; motivándolos a cumplir con sus responsabilidades académicas de forma diferente, los docentes pueden apoyarse en las redes sociales como ayuda pedagógica para facilitar su labor. Se debe rescatar el medio moderno virtualizado que usan para comunicarse como las redes sociales y el dominio que poseen frente a él.

Los estudiantes reconocen la conectividad y las redes sociales como medio de comunicación, pero su uso inadecuado ha generado comportamientos negativos como distorsión de los valores, falta de socialización real y limitación de su vínculo social y afectivo a la virtualidad.

Se debe aprovechar el uso extensivo que hacen los estudiantes de las redes sociales para ayudarlos a mejorar su comunicación de manera pedagógica e ir involucrando diferentes temas académicos. La conectividad y las redes sociales se pueden convertir en una herramienta pedagógica para los docentes de la institución, la clave está en encontrar la manera de convertir aquello que les gusta a los estudiantes en un instrumento útil al momento de enseñar y desplegar elementos que les permita hacer conciencia frente al uso de los elementos tecnológicos y el contenido que consultan o consumen a diario en internet.

Referencias

Moreno Roldán, N. (19 de diciembre de 2012). Eduteka. Obtenido de Aprendo y disfruto la ética con las TIC:http://eduteka.icesi.edu.co/proyectos.php/2/15898

Pires, H. F. (2010). Redes sociales y redes de colaboración. Geografía: Las nuevas formas de apropiación social del conocimiento en el siglo XXI. Revista Tierra Libre.

Prensky, M. (2001). Nativos e inmigrantes digitales. Cambridge, Massachusetts: SEK.

Siemens, G. (2004). Conectivismo, aprendiendo la era digital.

Fuente artículo: https://compartirpalabramaestra.org/opinion-y-analisis/columnas/conectividad-vinculo-pedagogico-entre-la-escuela-y-las-redes-sociales

Comparte este contenido:

REDES SOCIALES EN PERSPECTIVA DE GÉNERO: guía para conocer y contrarrestar las violencias de género on-line

Coordinación: Núria Vergés Bosch

Autorías: Alex Hache Núria Vergés Bosch Gema Manzanares Reyes, EnRedadas María Martha Escobar, EnRedadas Haydeé Quijano Rosado Indira Cornelio Anamhoo © INSTITUTO ANDALUZ DE ADMINISTRACIÓN PÚBLICA

Edita: Instituto Andaluz de Administración Pública

Diseño: 4tintas ISBN 978-84-8333-683-0 (Ed. electrónica)

Presentación: Las redes sociales somos tú, yo, ellas, nosotros y todas. Son un espacio relacionado con la familia, las amigas, las conocidas, la calle, la plaza pública y la sociedad en general. Las redes sociales permiten encontrar oportunidades, intercambiar recursos, cubrir necesidades y poner en común nuestro ser social, nuestras sociabilidades, nuestras formas de ser, pensar, hacer y vivir mundos. Los espacios conectados también representan un campo de acción para escenificar demandas y reclamos por parte de los movimientos sociales y los colectivos pro-derechos así como para todas las personas que defienden la igualdad y justicia social de género. El uso de las redes sociales en internet permite dar a ver, conectar, amplificar, crear sinergias, grupos y otras redes de transformación social y política. No obstante, en la sociedad actual, tampoco internet, nuestros móviles y las redes sociales on-line están libres de violencias de género. La inercia heteropatriarcal y machista sigue afincada en nuestras estructuras. Aunque con algunas diferencias, las violencias y discriminaciones contra las mujeres, personas trans y disidentes sexuales pueden ser tan intensas en Internet como en el espacio público y privado off-line. Los machismos persisten, a la vez que nuevos neomachismos aparecen y se actualizan utilizando las nuevas tecnologías y las redes sociales como plataformas de actuación violenta privilegiadas y en auge. El uso de las TIC puede facilitar y multiplicar exponencialmente los efectos de las violencias machistas. Además de facilitar el anonimato y la suma de agresores, las redes sociales permiten la repetición, viralidad, difusión e, incluso, la normalización de estas violencias. Dentro de ese entramado de redes sociales que se despliegan en nuestras vidas conectadas y fuera de Internet operan una multitud de posibilidades que se entrelazan fuertemente. Por todo ello, es cada vez más importante entender dónde y cómo nos movemos por los espacios conectados, para poder saber cómo operar e influenciar cambios positivos, así como para poder cuidar y cuidarnos entre nosotras para contrarrestar y sobrepasar estas violencias, agresiones y vulnerabilidades que pueden amplificar, complementar o, incluso, cambiar las que ya se experimentan en la vida física. Pese a la gravedad de las violencias on-line, el interés de nuestras administraciones para producir datos e información pública es gravemente ausente, así como políticas específicas al respecto. Además, entradas en la era del Big Data que analiza y comercializa gran parte de la información que compartimos en las redes, sorprende la inexistencia de datos públicos sobre ataques y violencias de género on-line. Si queremos acercarnos a estas violencias de género sólo podemos acudir a estudios puntuales de la academia, de instituciones internacionales, de algún departamento o institución pública, de alguna periodista comprometida y/o, como pioneras en esta y otras luchas de género, remitirnos a las entidades y colectivos feministas que se esfuerzan para visibilizarlas y hacerles frente.

Por todo ello esta publicación incluye, en una primera parte, la presentación de algunas de las características de las redes sociales en general y de las plataformas de redes sociales on-line. Lo abordamos de forma crítica y con perspectiva de género, así como relacionamos internet, las identidades, la privacidad y la seguridad con el género. Seguidamente nos adentramos en las violencias de género y, específicamente, las violencias de género on-line. Partimos de un análisis del panorama de datos cuantitativos y cualitativos existentes para, en la medida de lo posible, visibilizar qué está pasando si nos preguntamos sobre este tipo de violencias. Después, en una segunda parte, exponemos en detalle las violencias de género on-line, así como las posibilidades de hacerles frente. En este sentido, identificamos y definimos un conjunto de violencias de género que están ocurriendo en las redes sociales on-line y presentamos, a la vez, pistas, recomendaciones e iniciativas para profundizar en ellas y lograr autodefendernos, así como contrarrestarlas. Esta publicación pues, está pensada para que pueda utilizarse también como guía y manual para entender mejor cuales son los componentes de género que atraviesan las redes sociales on-line. Sin embargo, y sobre todo, buscamos contribuir a que desde una posición más informada, crítica y feminista se puedan detectar y conocer las violencias de género on-line y,en la medida de lo posible y en un futuro próximo, se puedan sobrepasar. Por ello, esta publicación puede resultar muy útil a las mujeres, especialmente a las mujeres vocales, feministas y disidentes sexuales y de género, que de forma creciente se ven afectadas por las violencias de género on-line. Además, por el idioma utilizado, las autorías, voces y miradas, así como la mayoría de datos y referencias utilizadas, esta guía resulta especialmente interesante para las mujeres latinas e iberoamericanas.

Descargar: aqui

Fuente: https://donestech.net/files/redessociales.pdf

Comparte este contenido:

Se filtran nuevamente exámenes escolares en Egipto

África/Egipto/07 junio 2018/Fuente: Prensa Latina
El examen de secundaria (Thanaweya amma) de lengua francesa en Egipto se filtró hoy en las redes sociales, un hecho que por reiterado se ha convertido en una constante desde hace varios años.
De acuerdo con un funcionario del Ministerio de Educación, después de verificar el examen publicado en línea se evidenció que era idéntico al que los estudiantes realizan actualmente.

La identificación del autor del delito, agregó, se realizará rápidamente ya que éste se olvidó de borrar su número de identificación personal de la imagen que circuló en Internet.

Los alumnos que se someten a los exámenes Thanaweya amma, cuyos resultados determinan los destinos universitarios y futuros cursos de estudio, reciben un código individual con su hoja de examen.

Una fuente del ministerio dijo a la prensa que 12 páginas de Facebook que ‘promovieron trampas’ escolares fueron cerradas en las últimas 24 horas.

Estas páginas tratan los exámenes como un negocio, y algunos usan los exámenes para atraer suscriptores antes de venderlas por grandes sumas de dinero’, agregó.

El pasado 3 de junio el examen de idioma árabe se filtró en Internet durante su aplicación. Según el jefe del departamento de exámenes generales del Ministerio de Educación, Khaled Abdel Hakam, un grupo de estudiantes de secundaria en la gobernación de Menoufiya, en el norte del país, publicaron online las preguntas y respuestas.

Durante los últimos tres años las preguntas y respuestas de varios exámenes de diversas materias se filtraron anticipadamente en línea, lo que provocó repetidas cancelaciones, y repeticiones de esas pruebas en todo el país.

Ante esos hechos reiterados, en 2017 el Parlamento aprobó enmiendas a una ley que endurece las penas por fraude académico y otras violaciones de exámenes, incluidas la publicación de preguntas y documentos de exámenes y la posesión de teléfonos móviles y otros dispositivos inalámbricos en las salas aulas al momento de las evaluaciones.

Este año escolar más de 650 mil estudiantes egipcios se someten a los Thanaweya amma.

Fuente: http://www.prensa-latina.cu/index.php?o=rn&id=185347&SEO=se-filtran-nuevamente-examenes-escolares-en-egipto
Comparte este contenido:

Argentina: Odio en clase. Los últimos casos de antisemitismo en las escuelas

Argentina/19 de Mayo de 2018/Clarín

El caso de la profesora de Castelar fue un caso extremo pero no el único. El INADI y la DAIA registran estos hechos.

El caso de la docente que defendió a Hitler en el aula mientras daba clases de Historia, despertó el repudio generalizado de algunas de las entidades más representativas contra la discriminación como son el INADI y la DAIA. En las organizaciones se mostraron preocupados por la cantidad de denuncias que se reciben dentro del ámbito educativo, tanto que es el segundo lugar donde más se discrimina en el país.

Desde la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas, que todos los años publica un informe anual con denuncias antisemitas, revelaron algunos antecedentes en donde están implicados los docentes: “Donde más acciones de este tipo se da es en las redes sociales, muchas de personas anónimas. Dentro de las escuelas o facultades recibimos unas cinco por año”, dijeron.

El año pasado se recolectaron por ejemplo cinco denuncias dentro de las facultades de la UBA. Todas relacionadas con pintadas esvásticas dentro de los establecimientos. Algunas, además, con frases como “Haga patria mate a un judío» o “Muerte a los putos/tortas/homosexuales y travas”. Otras dos ocurridas en baños de escuelas secundarias de la capital federal.

Una de las que llama más la atención ocurrió en el 2014, también en la UBA, cuando una denunciante afirmó que, cuando la docente a cargo terminó de tomar lista en una clase de Sociedad y Estado del CBC, se dirigió hacia ella informándole que no la había nombrado. Al decirle su nombre, la titular cuestionó: “¿Es de origen judío? Esos apellidos habría que prohibirlos; a partir de ahora te llamas María”.

 En 2015, una denunciante afirmó que su hijo fue agraviado por un preceptor, mediante la siguiente expresión: “judío, por qué no venís con pantalones cortos. No va con un judío la ropa formal, como militar”. Ese mismo año también fueron denunciados los siguientes comentarios realizados por parte de un docente de Sociología de la carrera de Diseño Industrial en la UBA a sus alumnos: “¿Qué hacíamos los monarcas cristianos en Europa? Corríamos a los judíos de todos lados, porque nos horrorizaba que los tipos estos lucraran… ¿Y que hacían los judíos? Hacían guita…”.

Desde el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo contaron que están muy preocupados: “Lo que pasó fue muy grave”. Los abogados de la entidad ya iniciaron una investigación del caso luego de haber recibido una denuncia formal contra la mujer por parte de un ciudadano.

“La educación es el segundo ámbito donde más se denuncia la discriminación. El primer lugar es el ámbito laboral. En el 2017, en el ámbito educativo, el 60% de las denuncias por motivo discriminatorios se dieron en instituciones públicas a nivel nacional y provincial y el 40% en instituciones privadas”, contó a Clarín, Aníbal Gutiérrez, director de Promoción del INADI.

«Es algo que nos tiene preocupados. Las escuelas son la formación de las nuevas generaciones y esto no debería ocurrir. Trabajamos día a día para que esos números bajen. Tenemos talleres y capacitaciones con docentes, uno de ellos ‘formación de formadores’ ya juntó a casi 400 profesores desde que empezó el año. Todo enfocado en cómo corregir la discriminación», indicó Gutiérrez.

Fuente: https://www.clarin.com/sociedad/odio-clase-ultimos-casos-antisemitismo-escuelas_0_HJm0DBoRf.html

Comparte este contenido:

Los libros, contra la intolerancia

Por: Isidoro Moreno Navarro

La celebración del Día del Libro es una buena ocasión para reivindicar el placer de leer. No es verdad que todo el conocimiento esté hoy en “las redes”, ni que los click en el teclado del ordenador puedan sustituir a la experiencia táctil de pasar las hojas de un libro. Yerran quienes así lo creen y ell@s se lo pierden. Por supuesto, no hay incompatibilidad entre ambos formatos pero uno no sustituye al otro.

Quienes han tratado de secuestrar el conocimiento, sobre todo crítico con las realidades sociopolíticas, quienes han tratado de imponer su pensamiento único, han estado contra los libros desde que estos aparecieron, con la escritura. Esta, al principio, como todos los grandes inventos humanos, estuvo al servicio exclusivo de los poderosos: sirvió para convertir la voluntad de estos en leyes con aspiración de eternidad e inmutabilidad, sirvió para llevar bien las cuentas de los impuestos que tenían que pagar los cultivadores antes autónomos convertidos en campesinos (una clase social oprimida) y para que los conocimientos importantes fueran monopolio de unos pocos (los escribas y la minoría que sabía leer). Pero, como ocurre siempre, pronto también la escritura sirvió para difundir “otra mirada” sobre la realidad, sirvió para reflejar el pensamiento crítico respecto a las verdades de los poderosos. Y los libros se convirtieron en armas para emancipar el pensamiento. Por eso han sido perseguidos, prohibidos o destruidos físicamente como parte de etnocidios o de “limpiezas ideológicas” planificadas. ¿Recordáis Fahrenheit 451?

En Andalucía es preciso recordar, como ha hecho la plataforma Granada Abierta, la quema en 1499 de los libros de la Madraza, la primera universidad de la ciudad, por orden del cardenal-inquisidor Cisneros para “desarraigarles [a los granadinos] del todo de su perversa y mala secta”, violando las cláusulas de la capitulaciones.

Como se ha recordado este domingo en la plaza de Bib-Rambla, “a la quema de libros en Granada, siguió la de códices aztecas y mayas durante la conquista de América. Y no hay que olvidar la hoguera de los nazis en la Plaza de la Ópera de Berlín, que redujo a cenizas los libros comunistas y judíos. Ni la quema de libros que el régimen franquista organizó en 1939 para celebrar la victoria sobre la II República. El diario Arriba justificaba así aquel atentado contra la cultura: «Condenamos al fuego a los libros separatistas, liberales, marxistas, a los de la leyenda negra, anticatólicos, a los del romanticismo enfermizo, a los pesimistas, a los del modernismo extravagante, a los cursis, a los cobardes pseudocientíficos, a los textos malos, a los periódicos chabacanos«. Y, lamentablemente, la quema o expolio de libros continúa en nuestros días y sigue siendo una práctica habitual de los vencedores en todas las guerras. En la guerra de Bosnia en 1992, los serbios bombardearon la Biblioteca de Sarajevo con más de 2 millones de volúmenes, y durante la invasión de Irak en 2003, los estadounidenses hicieron lo mismo con la Biblioteca de Bagdad. Tampoco se libró de la barbarie la Biblioteca de Tombuctú, durante la guerra de Malí, en África occidental, saqueada por al Qaeda, que destruyó centenares de legajos y manuscritos de la cultura andalusí.”

Los intolerantes, los fundamentalistas de diversos colores, los totalitarios, siempre han sido y son enemigos de los libros. La mejor forma de oponernos a ellos es teniendo siempre un libro en nuestra mesa o en cualquier sitio a mano, para regalarnos el placer de leer. Y transmitiendo este placer a nuestros hijos y nietos desde sus primeros años, regalándoles libros, para que no crean que con lo digital basta. Está bien que sepan utilizar las nuevas tecnologías pero está mucho mejor que, a la vez que estas, tengan también la pasión y la afición por los libros. Disfrutarán mucho más y será más difícil engañarlos.

Fuente: https://www.rebelion.org/noticia.php?id=240755

Comparte este contenido:

Redes sociales: comunicación y educación

Por: Gustavo Hernández Díaz

“La educación debe mediar entre el hombre y las redes sociales, entre el hombre y las comunidades virtuales. Urge comprender el hecho educativo y el proceso comunicacional desde la misma cultura. Saber cómo interactúa la gente con las tecnologías desde sus mestizajes culturales populares y urbanos”

Preguntas necesarias

Lo primero que se aprecia en Redes sociales: comunicación y educación, coedición de ABediciones/Ucab y la Fundación Empresas Polar (2017), es su planteamiento pedagógico sobre el papel de las tecnologías en la sociedad de la comunicación. Dicho de otro modo, la educación debe mediar entre el hombre y las redes sociales, entre el hombre y las comunidades virtuales. Urge comprender el hecho educativo y el proceso comunicacional desde la misma cultura. Saber cómo interactúa la gente con las tecnologías desde sus mestizajes culturales populares y urbanos.

También es oportuno destacar que para el Dr. Manuel Moreno Castañeda, rector de la Universidad Virtual de Guadalajara, México, Redes sociales: comunicación y educación desarrolla una serie de interrogantes sobre la pedagogía de la comunicación. “Entre las preguntas que pueden hacerse los investigadores que aquí presentan sus trabajos y los posibles lectores, algunas tienen que ver con el potencial de las tecnologías como recursos para mejorar los procesos de aprender y enseñar; y, otras más específicas, con las posibilidades mediáticas más recientes, por ejemplo: ¿las redes subliman o mejoran la comunicación humana? ¿Podrían las redes sociales generar un cambio educativo que supere la forma tradicional de enseñanza en el contexto de las universidades públicas? ¿Cuáles son las ventajas del uso de las redes sociales electrónicas en el entorno educativo universitario?”.

e-Pedagogía

La red social ha cambiado nuestras vidas con la presencia de la interactividad, rapidización y el desasosiego líquido (Zygmunt Bauman). Es por ello que Ruth Díaz Bello sostiene: “el objetivo es tomar conciencia de esas transformaciones que se han sucedido en nuestras vidas que nos permitan liderar nuevos cambios, para hacer los ajustes que nos permitan sacar provecho de las potencialidades que se anuncian con los desarrollos tecnológicos de la información y la comunicación”.

Para Guillermo Moreno Galindo la calidad educativa puede describirse de esta manera: “a) equidad entendida por oportunidades de educación para todos y de la misma forma; b) uso adecuado del tiempo y de los recursos; c) impacto de esa enseñanza en la transformación individual y social del aprendizaje”.

Según Mariano Fernández y Vanessa Miguel, “las redes de conocimiento deberían sustentarse en el papel de la investigación científica como eje de producción de conocimientos socialmente válidos, los cuales permiten hacer frente a la sobrecarga informativa o infoxicación”.

Ángel Alvarado se pregunta si las redes sociales forman o solo informan (o en tal caso desinforman). “El carácter formativo o informativo que pudiese ser asignado a las redes sociales en el campo educativo está determinado por el uso que haga y promueva el docente de ellas, de sus conceptos y posturas sobre la enseñanza y el aprendizaje, en fin, con su hacer e identidad pedagógica”.

Rosa Amaro de Chacín discierne sobre un par de conceptos: didáctica medial y gestión del aprendizaje. “Aproximarnos a una didáctica medial para referirnos al ámbito de la didáctica en el cual se concreta la configuración de propuestas innovadoras que implican críticamente la tecnología”. Una gestión exitosa del aprendizaje en la virtualidad “pasa necesariamente por prever un diseño pertinente, didácticamente fundamentado, flexible, ajustado a la naturaleza del aprendizaje en la virtualidad”.

Comprender la red

Alejandra Fernández expone un tema muy novedoso en el campo de la educación y que se refiere a la importancia de la curaduría de contenidos. “Se entiende la curaduría (que no curación) como el proceso de buscar, encontrar y seleccionar contenidos con el objetivo de organizarlos en porciones para uso de una institución, organización o colectivo”.

Ana Beatriz Martínez González y Nayesia María Hernández Carvajal sugieren cuatro tipos de competencias digitales (e-skills): “1.-Tecnológica: alfabetización y apropiación pertinente, uso y gestión de dispositivos. 2.-Comunicativa: relacionarse y colaborar en entornos digitales. 3.-Informacional: evaluación, curaduría de contenidos. 4.-Aprendizaje: generar conocimiento en procesos y productos, al transformar la información en conocimiento y utilizarlo de manera adecuada”.

Para Omar Miratía las redes sociales cumplen con algunas funciones en el ámbito educativo. Tres de ellas: “1.-Se pueden compartir contenidos de forma libre y abierta bajo licencia: Creative Commons. 2.- Permiten compartir y socializar la información y el conocimiento. 3.- Fomentan los valores de trabajo colaborativo y cooperativo”.

Saber más en un click

Yoraima Salazar, Milagros Cruz y María del Carmen Martínez proponen, entre otros asuntos, un decálogo sobre el uso de las redes sociales:

1. Lee las condiciones de aviso legal y política de privacidad.

2. Trata con respeto a los otros usuarios.

3. Solo debes descargar los contenidos, copiar o imprimir cualquier contribución para tu uso personal y privado.

4. Toma conciencia de tu reputación on-line.

5. Respétate y respeta al resto de usuarios en tu comportamiento.

6. Aprende a expresar emociones y estados de ánimo.

7. Resuelve con firmeza la presión de grupo: tú eres el dueño de tus decisiones.

8. Reflexiona antes de publicar datos personales en internet.

9. Si algún contenido es inconveniente, o de alguna manera algo lesiona los derechos del usuario (información, privacidad, etc.) usa las herramientas de denuncia.

10. Las redes ofrecen distintas opciones para configurar la privacidad.

Reportes y redes

Antonio Silva Sprock y Julio Ponce Gallegos estudian la influencia de los estilos de aprendizaje en la generación de técnicas instruccionales. Hay que entender la cotidianidad escolar, la forma en que están aprendiendo los alumnos y la modalidad de estrategia educativa que puede resultar más apropiada en un momento dado.

Raymond Marquina destaca las ventajas sobre el uso de dispositivos móviles y de las redes sociales. “Una estrategia educativa que plantee el uso adecuado de redes sociales y dispositivos móviles para el desarrollo de actividades de aprendizaje fuera del aula de clases, permite a los estudiantes aprovechar mejor el tiempo libre fuera de la institución con la intención de invertir el aula (flipped classroom) y desarrollar en conjunto con el profesor las actividades de mayor valor”.

El trabajo de Jacqueline Panvini se enmarca en el campo de la educación para la salud. “La experiencia de la comunidad virtual de aprendizaje para la Puericultura y Pediatría, dirigida en un principio a los estudiantes del cuarto año de Medicina de la Escuela José María Vargas de la Facultad de Medicina de la UCV, proporcionó resultados altamente satisfactorios e inesperados, los cuales pudiesen reproducirse en otras asignaturas”.

Gustavo Mizraim González se refiere a la influencia de las redes sociales en la comunicación organizacional. “Las redes sociales se han convertido en una herramienta de comunicación e información imprescindible en las empresas. Por esto la gestión de las organizaciones requiere estar cada vez más focalizada en el uso de las tecnologías 2.0, sin perder las relaciones interpersonales y la adecuación de las redes a la cultura corporativa”.

Sobre las redes sociales en la escuela de Economía de la UCV, María Rita Amelii reporta lo siguiente: “Con respecto a la actividad desarrollada por los profesores, al momento de este estudio unos pocos manifiestan utilizar las redes sociales, y los que así lo hacen, las valoran como medios para mantenerse comunicados, por lo tanto, no podemos decir que su uso ha permeado la actividad docente aún”.

Pedro Certad constató que las redes sociales son eficaces en el manejo de los conceptos básicos de la química en bachillerato. “Siendo la química una ciencia ubicada en las ciencias abstractas, la adopción de estas estrategias ayuda a la comprensión de conceptos y experiencias, acercándolos a través de la búsqueda y la indagación a este conocimiento. Asimismo, en esta búsqueda se despiertan habilidades y actitudes que conforman entonces las competencias científicas en el estudiante”.

P.D. Reconocimiento muy especial a las profesoras Ana Beatriz Martínez González y Nayesia María Hernández Carvajal de la Universidad Central de Venezuela, quienes han hecho posible la compilación académica de una serie de trabajos teóricos y empíricos sobre Redes sociales: comunicación y educación. No es cualquier tipo de compilación la que nos brindan estas distinguidas profesoras. Se observa en este libro la “convergencia disciplinaria entre la educación y la comunicación” a lo Henry Jenkins y, desde luego, la presencia de la “inteligencia colectiva” del filósofo Pierre Lévy. En esta dirección, Ana y Nayesia afirman: “en este libro se expone el producto del trabajo colaborativo que venimos realizando alrededor del uso de las tecnologías de la información y la comunicación en la educación superior un grupo de colegas de diversas facultades de la Universidad Central de Venezuela conjuntamente con la Universidad de Los Andes y la Universidad Metropolitana”.

Fuente del Artículo:

http://www.el-nacional.com/noticias/entretenimiento/redes-sociales-comunicacion-educacion_229762

Comparte este contenido:

Redes sociales e ideología

Por: Marcelo Colussi

En algún Congreso sobre Medios Alternativos se decía que “La evolución de la Web, el surgimiento de los medios alternativos, las redes sociales de Internet, así como los blogs y wikis, crean nuevas posibilidades para la comunicación social y política. Este nuevo escenario comunicativo a nivel internacional demanda cada vez más la creación de condiciones para maximizar su aprovechamiento”. Sin caer en empobrecedores maniqueísmos ni valoraciones moralizantes, ni tampoco en triunfalismos exagerados que pierden la verdadera dimensión de las cosas, digamos que toda esta amplia batería de nuevas tecnologías ofrece interesantes posibilidades si lo pensamos desde una perspectiva transformadora, quizá revolucionaria incluso, al mismo tiempo que no se pueden desconocer sus peligros latentes. El reto está en ver cómo se navega en esas aguas y se puede llegar a buen puerto.

Las llamadas Tecnologías de la Información y Comunicación -TICs- son especialmente atractivas, y con mucha facilidad pueden pasar a ser adictivas (de la real necesidad de comunicación fácilmente se puede pasar a la “adicción”, más aún si ello está inducido, tal como sucede efectivamente). En una investigación que se hizo vez pasada en Guatemala sobre este tópico se preguntó a jóvenes usuarios de estas tecnologías -de distinta extracción social, de ambos sexos, con edades de entre 17 y 25 años- si al estar haciendo el amor reciben una llamada a su teléfono celular, ¿qué harían? Muchos y muchas (alrededor de un 75%) respondieron que, sin dudarlo, contestarían. No hay dudas que estamos ante un importante cambio de actitudes.

Estamos invadidos por una cultura del uso de lo digital; se nos ha dicho incluso, interesadamente o no, que la llamada “Primavera árabe”, por ejemplo, se provocó por la catarata de mensajes de texto transmitidos en los teléfonos móviles y por el uso de las llamadas redes sociales. ¿Las nuevas revoluciones, entonces, se construirán sobre la base de realidades virtuales que movilizan a las masas? En Guatemala los movimientos cívicos anticorrupción del 2015 que terminaron sacando del poder a presidente y vicepresidenta se generaron casi exclusivamente a través de redes sociales (luego se supo que hubo ahí una monumental manipulación, habiéndose creado cantidad de perfiles falsos desde donde se lanzaron las convocatorias).

Dejamos aquí el análisis político pormenorizado tanto del movimiento de los pueblos árabes como lo que se jugó en Guatemala, porque no es el espacio adecuado para tratarlo, pero no podemos menos de indicar que estas nuevas modalidades comunicacionales tienen una fuerza decisiva. En la actualidad vivimos una cierta entronización de lo digital que puede llevarnos a verlo como panacea. De todos modos, más allá de la interesada prédica que identifica a las TICs con una nueva pretendida solución universal, no hay dudas que tienen algo especial que las va tornando imprescindibles.

Estar “conectado”, estar todo el tiempo con el teléfono celular en la mano, estar pendiente eternamente del mensaje que puede llegar, de las redes sociales, del chat, constituye un hecho culturalmente novedoso. ¿Quién perteneciente a una generación anterior a la actual respondería afirmativamente a la pregunta arriba citada, respecto a la intimidad de su vida sexual y el uso de un teléfono?

La definición más ajustada para un teléfono celular (lo mismo se podría decir de las TICs en general) es que, poseyendo el equipo en cuestión -teléfono, computadora, acceso a internet- se está “conectado”, que es como decir: “estar vivo”. Definitivamente todas estas tecnologías van mucho más allá de una circunstancial moda: constituyen un cambio cultural profundo, un hecho civilizatorio, una modificación en la conformación misma del sujeto y, por tanto, de los colectivos, de los imaginarios sociales con que se recrea el mundo. Eso nos abre forzosamente la pregunta: ¿constituyen también un arma política? ¿Son un instrumento más para el cambio social? La revolución socialista (pensemos que eso, aunque hoy día esté supuestamente “pasado de moda”, sigue siendo una posibilidad), ¿puede beneficiarse de estos instrumentos?

Lo importante a destacar es que esa penetración que tienen las TICs no es casual. Si gustan de esa manera, es por algo. Como mínimo se podrían señalar dos características que le confieren ese grado de atracción: a) están ligadas a la imagen, y b) permiten la interactividad en forma perpetua.

La imagen juega un papel muy importante en las TICs. Lo visual, cada vez más, pasa a ser definitorio. La imagen es masiva e inmediata, dice todo en un golpe de vista. Eso fascina, atrapa; pero al mismo tiempo no da mayores posibilidades de reflexión. La lectura cansa. Se prefiere el significado resumido y fulminante de la imagen sintética. Ésta fascina y seduce. Se renuncia así al vínculo lógico, a la secuencia razonada, a la reflexión que necesariamente implica el regreso a sí mismo”, se quejaba amargamente Giovanni Sartori (1). Lo cierto es que el discurso y la lógica del relato por imágenes están modificando la forma de percibir y el procesamiento de los conocimientos que tenemos de la realidad. Hoy por hoy la tendencia es ir suplantando lo racional-intelectual -dado en buena medida por la lectura- por esta nueva dimensión de la imagen como nueva deidad.

Junto a eso cobra una similar importancia la fascinación con la respuesta inmediata que permite el estar conectado en forma perpetua y la interactividad, la respuesta siempre posible en ambas vías, recibiendo y enviando todo tipo de mensajes. La sensación de ubicuidad está así presente, con la promesa de una comunicación continua, amparada en el anonimato que confieren en buena medida las TICs. (Muchos “tímidos” consiguen pareja por su intermedio. Eso es un hecho. Además, a partir de ese anonimato, cualquiera se puede permitir cualquier cosa, opinar, decir lo que jamás diría cara a cara, insultar, provocar, etc., etc.).

La llegada de estas tecnologías abre una nueva manera de pensar, de sentir, de relacionarse con los otros, de organizarse; en otros términos: cambia las identidades, las subjetividades. ¿Quién hubiera respondido algunas décadas atrás que prefería contestar el teléfono fijo a seguir haciendo el amor?

Hoy día la sociedad de la información, por medio de estas herramientas, nos sobrecarga de referencias. La suma de conocimiento, o más específicamente: de datos, de que se dispone es fabulosa. Pero tanta información acumulada, para el ciudadano de a pie y sin mayores criterios con que procesarla, también puede resultar contraproducente. Puede afirmarse que existe una sobreoferta informativa. Toda esta saturación y sobreabundancia de ¿información?, y su posible banalización, se ha trasladado a la red, a las TICs en general, inundando todo. De una cultura del conocimiento y su posible apropiación se puede pasar sin mayor solución de continuidad a una cultura del divertimento, de la superficialidad. Las TICs permiten ambas vías. Se ha hablado, entonces, de intelicidio. Parecería que las redes sociales contribuyen mucho a eso: el olvido (¿o la muerte?) del pensamiento crítico. La opinión política, el análisis pormenorizado, la reflexión profunda se va reemplazando por un tuit de 150 caracteres.

Si bien las TICs se están difundiendo por toda la sociedad global, quienes más se contactan con ellas, las utilizan, las aprovechan en su vida diaria dedicándole más tiempo y energía, y concomitantemente viéndose especialmente influenciados por ellas, son los jóvenes. Es evidente que la globalización en curso uniforma criterios sin borrar las diferencias estructurales; de ahí que, diferencias mediantes, las generaciones actuales de jóvenes son todas “hijas de las TICs”, o “nativos digitales”, como se les ha llamado. “Aquello que para las generaciones anteriores es novedad, imposición externa, obstáculo, presión para adaptarse –en el trabajo, en la gestión, en el entretenimiento- y en muchos casos temor reverencial, para las generaciones más jóvenes es un dato más de su existencia cotidiana, una realidad tan naturalizada y aceptada que no merece siquiera la interrogación y menos aún la crítica. Se trata en efecto de una condición constitutiva de la experiencia de las generaciones jóvenes, más instalada e inadvertida a medida que se baja en la edad” (2)

En esa dimensión, lo importante, lo definitorio es estar conectado y siempre disponible para la comunicación. De esa lógica surgen las llamadas redes sociales, espacios interactivos donde se puede navegar todo el tiempo a la búsqueda de lo que sea: novedades, entretenimiento, información, aventura, etc., etc. En las redes sociales, usadas fundamentalmente por jóvenes, alguien puede tener infinitos amigos. O, al menos, la ilusión de una correspondencia infinita de amistades. En esa línea, creemos importante no dejar de hacer notar que la superficialidad no es ajena a buena parte de la cultura que generan las TICs. De ahí que debe verse muy en detalle cómo estas tecnologías comportan, al mismo tiempo que grandes posibilidades, también riesgos que no pueden menospreciarse. La cultura de la ligereza, de lo superficial y falta de profundidad crítica puede venir de la mano de las TICs, siendo los jóvenes -sus principales usuarios- quienes repitan esas pautas. Sin caer en preocupaciones extremistas, no hay que dejar de tener en vista que esa entronización de la imagen y la inmediatez, en muchos casos compartida con la multifunción simultánea (se hacen infinitas cosas al mismo tiempo), puede dar como resultado productos a revisar con aire crítico: “en términos mayoritarios [los jóvenes usuarios de TICs] adquieren información mecánicamente, desconectada de la realidad diaria, tienden a dedicar el mínimo esfuerzo al estudio, necesario para la promoción, adoptan una actitud pasiva frente al conocimiento, tienen dificultades para manejar conceptos abstractos, no pueden establecer relaciones que articulen teoría y práctica”. (3)

Pero si bien es cierto que esta cibercultura abre la posibilidad de esta cierta liviandad, también da la posibilidad de acceder a un cúmulo de información y a nuevas formas de procesar la misma como nunca antes se había dado, por lo que estamos allí ante un fenomenal reto.

Los medios alternativos de comunicación -como el presente, en el que se está leyendo este texto, y que hacen uso de la red, de todas estas nuevas herramientas digitales- son un granito de arena más en la larga y continuada lucha por un mundo mejor. Hoy, caído el Muro de Berlín, y con él muchas esperanzas, no hay dudas que el campo popular está un poco (bastante) falto de ideas claras, de referentes precisos en la batalla por esas transformaciones. Los ideales de algunas décadas atrás, si bien no han desaparecido, quedaron golpeados. La fabulosa ola neoliberal que todavía nos sigue afectando ha significado un golpe muy grande para la izquierda, para el campo popular, para la ideología de la transformación.

En ese marco, la cultura digital que ha llegado con una fuerza fabulosa, abre un reto: obviamente, en tanto tecnología, no es “buena” ni “mala”. Plantearlo así es sumamente reduccionista, equivocado en definitiva. Pero no se puede dejar de considerar cómo funciona, quién la maneja, qué papel juega para los grandes poderes globales como negocio y como mecanismo de control social. La posibilidad de construir ahí un espacio alternativo está abierta.

Eso, sin dudas, implica una lucha (¿hay acaso algún aspecto de lo humano que no la implique?), pues los grupos de poder utilizan este instrumental con fines de conservadurismo, para que nada se altere. Y por cierto que lo saben hacer muy bien. De hecho cada vez más asistimos a un uso mentiroso de estas posibilidades tecnológicas. Por lo pronto, en forma creciente y en todas partes del mundo, la práctica política se basa en el más repugnante engaño bien montado, mercadológicamente ofrecido. “ En la sociedad tecnotrónica el rumbo lo marcará la suma de apoyo individual de millones de ciudadanos incoordinados que caerán fácilmente en el radio de acción de personalidades magnéticas y atractivas, quienes explotarán de modo efectivo las técnicas más eficientes para manipular las emociones y controlar la razón ”, pedía el polaco-estadounidense Zbigniew Brzezinsky. Y así es, pues cada vez más asistimos a la creación de los llamados “perfiles falsos” en las redes sociales por parte de los políticos y/o las usinas ideológicas para hacer creer lo que no es (que los políticos tienen muchos seguidores, que la población los ama, que está de acuerdo con su accionar, inoculando ideología, diezmando el pensamiento crítico. ¿Queda claro por qué lo de intelicidio?). ¿Por qué una gran cantidad de personas en todo el mundo repite lo que repite sin cuestionárselo? Que en Venezuela hay una narcodictadura, por ejemplo; que los misiles nucleares norcoreanos son peligrosos para la paz mundial, pero no así los estadounidenses, solo para poner algunos patéticos ejemplos. El engaño sigue estando presente en el ejercicio del poder, y las redes sociales (atractivas, envolventes, fáciles de usar) lo permiten muy ampliamente. O más aún: lo estimulan a niveles exponenciales.

No debemos dejar de tener en cuenta que se han abierto ciertos canales para una relativa democratización de la información. En cierto sentido, todos podemos dejar nuestra marca en la red de redes, decir, denunciar, hacer evidentes ciertas cosas. Pero no hay que olvidar que ese fabuloso espacio virtual también está hiper controlado por los enormes poderes de siempre, que el tráfico satelital no lo maneja el campo popular, que tecnológicamente dependemos de unos pocos servidores que manejan ese tráfico. La ilusión de creer que la revolución se agota en una pantalla es un peligro. Bienvenidas las tecnologías digitales, sin duda. Aprovechémoslas, conozcámoslas en profundidad, saquémosle el máximo posible de provecho. Pero estemos conscientes que la organización popular, que la revolución socialista no son cuestiones puramente técnicas. La tecnología, si no está al servicio de la causa del Ser Humano como especie, sigue siendo un mecanismo de dominación.

Los medios alternativos de comunicación son un elemento más de un prolongado combate popular en pro de un mundo con mayor justicia, combate que por cierto no ha terminado aún, que ha perdido quizá la batalla de estas últimas décadas, pero no la guerra.

____________________

NOTAS

  1. Sartori, Giovanni. Homo videns. La sociedad teledirigida. Ed. Taurus. Barcelona, 1997.
  1. Urresti, Marcelo. Ciberculturas juveniles. La Crujía Ediciones. Buenos Aires, 2008.
  1. Estévez, C. La comunicación en el aula y el progreso del conocimiento , en Urresti, Marcelo. 2006.

Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=238790&titular=redes-sociales-e-ideolog%EDa-

Comparte este contenido:
Page 32 of 47
1 30 31 32 33 34 47