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En el colegio aprendí de decisiones y a vivir en Democracia

07 de septiembre de 2016 / Por: Josefina Santa Cruz / Fuente: http://opinion.cooperativa.cl/

Como consecuencia de nuestra preciada libertad, las personas debemos tomar decisiones constantemente. Esta habilidad nos permite participar en la vida cotidiana, social y política, y convertirnos en ciudadanos. Tomar decisiones requiere ante todo valorar esta capacidad y al mismo tiempo es exigente en habilidades cognitivas, emocionales y conductuales que se pueden aprender. Si la escuela ofrece la posibilidad de aprender a tomar decisiones, entonces ésta no es una habilidad heredada, sino que todos los niños pueden tener acceso a ella.

Para tomar decisiones hay que haber aprendido a recoger evidencia (información), organizarla, evaluar su credibilidad, distinguir lo relevante de lo accesorio, planificar, adelantar escenarios posibles, analizar, evaluar consecuencias en el mediano y largo plazo, escuchar a otros, empatizar, autorregular la emoción y la conducta, y escucharse a uno mismo.

Cuando enseñamos a nuestros estudiantes por qué debemos elegir y cómo podemos hacerlo, les entregamos herramientas para ser ciudadanos comprometidos, participantes e informados.

Quienes han sido educados en el arte de tomar decisiones, sabrán reconocer dos cosas: que cada opción implica perder algo, pues elegimos esto y no lo otro y que la disyuntiva casi nunca es entre las dos posibilidades más aparentes. En nuestras salas de clase, podemos enseñar a reconocer la tercera opción—la que está “fuera de la caja”—la menos evidente.

Lee Shulman y David Perkins, en el libro Education and a Civil Society: Teaching Evidence-Based Decision Making, señalan que para aprender a ser ciudadanos se necesita haber adquirido tres tipos de hábitos: de la mente, de la práctica y del corazón. En otras palabras, se requiere educar el intelecto, regular la conducta y desarrollar un cariño genuino por un tipo de comunidad y de sociedad en que las personas participan, toman decisiones y se respetan mutuamente.Hago notar que la palabra elegida por estos autores es hábito, es decir costumbre, tendencia.

La realidad actual nos demuestra que los estudiantes han aumentado su participación y eso es un buen primer paso. Pero no es suficiente. Porque para convertirnos en ciudadanos es necesario hacerlo de manera informada, educar el intelecto, para ser capaces de tomar decisiones responsables.

La Democracia no es un regalo, es una conquista que hay que cuidar; el trabajo de los profesores es enseñar a sus alumnos a ejercer esa participación, a cuidar y enriquecer esta democracia desde la sala de clases, espacio donde se aprende a tomar decisiones.

Fuente artículo: http://opinion.cooperativa.cl/opinion/politica/en-el-colegio-aprendi-de-decisiones-y-a-vivir-en-democracia/2016-06-20/064356.html

Foto: http://previews.123rf.com/images/fornax/fornax1104/fornax110400001/9202043-Representaci-n-3D-de-toma-de-decisiones-de-car-cter–Foto-de-archivo.jpg

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El equilibrio del planeta

24 de agosto de 2016 / Por. Augusto Costa Zabaleta / Fuente: http://www.cronica.com.ec/

La naturaleza es sabia, el equilibrio del planeta radica y se fundamenta en la existencia de los reinos: animal, vegetal y mineral; el reino animal representado por el ser humano, dotado de sentidos, del intelecto y la razón; el animal inferior por excelencia incentivo; el vegetativo con características propias de vida, crecimiento fructificación, y el reino mineral, con fuerzas intrínsecas de la materia, representado por el átomo.

El ser humano que ocupa el peldaño privilegiado en la escala de los seres vivos, con sus atributos especiales, por su perfección, un alma intelectiva, que tiene la capacidad de deliberar y tomar decisiones, integrado por la esencia que radica en el mismo ser y de la substancia de que esta integralmente formado; es decir espíritu y materia.
El reino animal incentivo, el reino vegetal y el mineral, son la base y el fundamento para regular el equilibrio, la armonía, la biodiversidad y la ecología; la pureza del aire y los raudales del líquido vital; así como la temperatura ambiental de planeta y las estaciones; destruir, matar o afectar en cualquier forma y el hábitat de plantas y animales, constituye desestabilizar las leyes y requerimientos naturales.
La matanza de animales es una práctica condenable; “podemos juzgar el corazón de una persona por la forma en que trata a los animales” es la expresión del filósofo Immanuel Kant, ese sabio concepto es de una permanencia constante y vigente; la Alternativa más viable para una solución inteligente a esta deshumanización y desvaríos improcedentes, es aplicar con y ponderación, el control, la regulación y los requisitos a cumplirse para la tenencia de nuestras mascotas, con la vigilancia de las instrucciones competentes reguladoras de este parámetro. (O).

Fuente artículo: http://www.cronica.com.ec/opinion/columna/columnista/item/13694-el-equilibrio-del-planeta

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Lo que los juegos de rol pueden aportar a educación

Por Pablo Espeso.

Allá por la década de los 90 estaban muy estigmatizados por la sociedad, pero afortunadamente las cosas han cambiado considerablemente. Es así hasta tal punto que muchos piensan en que los juegos de rol en educación aportan algunas características excepcionales, siendo una herramienta y un ejercicio recomendable de probar tanto en el aula como en actividades ajenas al territorio escolar.

El uso de los juegos de rol en educación ha sido ampliamente estudiado por el sector científico, tanto como una herramienta terapéutica como de un modo más general y también dentro del contexto formativo. La conclusión es clara: los juegos de rol permiten promover de forma magnífica algunas aptitudes, y sobre ellas vamos a hablar a continuación. ¿Por qué deberíamos integrar juegos de rol en el ámbito educativo? Por las siguientes razones.

Promueven la creatividad y la imaginación

Hay cientos de juegos de rol disponibles en el mercado, cada uno de ellos con un contexto y una serie de peculiaridades que lo hacen diferente. Aquí hablaremos de forma genérica:los juegos de rol promueven la creatividad y la imaginación.

Pan de desayuno @ PixabayAl igual que una novela nos obliga a adentrarnos en un mundo sólo narrado a través del texto, en un juego de rol no existen representaciones estáticas sobre las situaciones, ni sobre los mundos. Aunque podemos utilizar algunas imágenes o vídeos como soporte a las explicaciones del director de juego, el gran peso de la acción dependerá de la imaginación que tengan los chavales.

Os levantáis y acudís a vuestro desayuno en la posada. Compuesto por un té local y un par de rebanadas recién cortadas con mermelada. A vuestra derecha, una mesa de comerciantes de lana discute sobre su siguiente parada en el camino.

Nos obligan a tomar decisiones

En un juego de rol cada participante hará un papel en el juego, y estará constantemente tomando las decisiones que tome su personaje. Estas decisiones a las que generalmente no tienen acceso en el mundo real, pero que podrán —de hecho, deberán— afrontar en su aventura.

Camino de madera @ PixabayJunto con las decisiones, deberán anteponerse de los posibles peligros que pronto llegarán. ¿Adentrarse en una cueva para capturar un tesoro, o quedarse fuera con el miedo de que aparezca una araña gigante?

Tras dos horas a lomos de vuestro caballo de viaje, el camino se bifurca. A la izquierda iréis a la ciudad principal de la región; a la derecha, a un pequeño pueblo del que habéis oído están sucediendo cosas extrañas. ¿Qué camino elegís?

Responsabilidad

Los que hemos jugado al rol en alguna ocasión sabemos que a los personajes se les termina cogiendo cariño. Mucho cariño, mayor cuanto más juegas con ellos. Es necesario ser responsable y también tomar decisiones responsables tanto para uno mismo como para el grupo.

Cofre @ PixabayLo que suceda en el juego dependerá de las decisiones que se vayan tomando a lo largo de él. No lucharás contra el troll del pantano si no pisas la charca (no siempre, al menos), y muchas veces es mejor esquivar algunas trabas que el director de juego propone, antes que enfrentarse a ellas.

Estás viendo, en una esquina de la habitación, un cofre de acero. Por el aspecto parece que puede contener algo valioso, aunque hay una insignia en uno de los bordes. Pertenece a Doña Beatriz de Mendoza. ¿Qué haces con el cofre?

Trabajo en equipo

Uno de los principales objetivos de los juegos de rol en educación —y también como afición— es el de colaborar para llegar a un fin. Parte de lo que hablamos en los diferentes apartados de este texto implican el trabajo en equipo, necesario y en muchas ocasiones fundamental para poder conseguir las misiones encomendadas.

Carro @ PixabayEl trabajo en equipo no sólo consiste en que nuestros personajes cooperen, también los participantes en el juego de rol deberán hablar entre ellos, debatir y discutir qué hacen, cómo lo hacen y… el por qué lo hacen.

Mientras dormís, dos goblins os asaltan en vuestro pequeño campamento, y les sorprendéis mientras os están robando la comida que guardábais para el viaje en el interior del carro. Observáis también que de los dos goblins, uno tiene una herida en la pierna y seguramente no pueda correr, pero el otro parece bastante atlético. ¿Qué hacéis?

Matemáticas, por supuesto

Y sobre todo mucho cálculo mental. Los juegos de rol suelen estar basados en sistemas estadísticos y de probabilidades: por ejemplo, trepar por un muro depende de la agilidad del personaje, con lo que si es muy ágil tendrá un bonificador. Se tira un dado (para el factor aleatorio), se suma y se contrasta con la dificultad de trepar esa pared. Sí, hay paredes fáciles y paredes muy difíciles.

Caballos @ PixabayTodas estas operaciones se realizan casi de forma continua durante una partida de rol, y esto implica que nuestra mente estará activa para poder hacerlas lo más rápido posible. Hay sistemas más fáciles y otros más difíciles, pero lo importante es que todos se basan de un modo u otro en fundamentos matemáticos. Y, como tal, mejoraremos nuestro cálculo numérico.

Estás persiguiendo a otro jinete que, por lo que te está pareciendo, es muy veloz. Sabes que tu corcel también lo es, pero el problema está en que nunca te han enseñado a montar un caballo a estas velocidades. Debes hacer una tirada de agilidad, más tu habilidad de montar a caballo, y en total debe superar una dificultad mayor a 20.

Experiencias en la vida

Los juegos de rol nos permiten adentrarnos en todo tipo de ideas y propuestas narrativas, y esto implica también que algunas veces se acierta, y otras no. Aprendes cuando tomas una mala decisión: si hubiésemos robado el cofre de Doña Beatriz de Mendoza del que hablábamos antes, tal vez nos hubiese pillado la guardia y nos hubiesen metido en los calabozos durante una temporada larga.

Fuego @ PixabayLos juegos de rol en educación nos proponen experiencias de las que aprender y luego aplicar en el día a día. Evidentemente es un mundo ficticio del que no habrá represalias en la vida real, pero que sí nos permitirá reflexionar sobre lo ocurrido. Todo esto según sea la historia que el director de juego quiera plantear, por supuesto.

Veis fuego en una de las cabañas del pueblo en el que os encontráis. Os acercáis y sois los primeros en llegar y comprobar que la casa está completamente en llamas; veis a una pareja a escasos metros de la puerta, por fuera, ambos con cara de preocupación. “Nuestros hijos Dan y Anne continúan dentro, no nos ha dado tiempo a sacarlos” dicen, antes de romper a llorar.

Fuente: http://www.educaciontrespuntocero.com/recursos/juegos-de-rol-en-educacion-beneficios/37670.html

Imagen: https://1d10enlamochila.files.wordpress.com/2015/05/img_7081.jpg

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La prospectiva tecnológica

Por: Jenyree Alvarez  / Fuente: http://revistaeducacionvirtual.com/

La prospección tecnológica se ha aplicado ampliamente como instrumento de políticas por los gobiernos de todo el mundo durante los últimos decenios. Por ejemplo, Japón ha estado efectuando prospecciones en el plano nacional, otros países europeos como Alemania, los Países Bajos y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte también han llevado a cabo ejercicios de prospección, y un número cada vez mayor de países en desarrollo ha realizado también ejercicios de prospección tecnológica.

En el contexto actual de globalización, competencia y el creciente cambio tecnológico, los ejercicios de prospectiva pueden ayudar a los países en desarrollo a detectar oportunidades para una futura especialización tecnológica y productiva que les permita actualizarse, dar un gran salto y seguir avanzando. Además, habida cuenta de su potencial para configurar el cambio tecnológico y el crecimiento económico, los ejercicios de prospección se deberían preparar y realizar de manera coherente con las estrategias nacionales de desarrollo, incluido el desarrollo industrial.

Es así, como las numerosas dimensiones en las que las innovaciones emergentes en las TIC, pueden presentar retos y oportunidades para las políticas de desarrollo. Es por ello, que los ejercicios de prospección tecnológica pueden ayudar a prever las tendencias tecnológicas y preparar respuestas sociales proactivas y adecuadas.

La importancia del uso de la prospectiva tecnológica radica en que:

  1. Orienta la formulación de políticas y toma de decisiones
  2. Promueve la cooperación en Ciencia, Tecnología e Innovación.
  3. Establece prioridades
  4. Genera visiones e imágenes del futuro
  5. Promueve el debate público
  6. Identifica oportunidades de investigación e inversión
  7. Alienta el pensamiento estratégico y de futuro
http://www.camara.es/
http://www.camara.es/

http://oa.upm.es/22189/1/Prospectiva_Tecnologica.pdf

Medina Vásquez, Javier y Ortegón Edgar (2006). Manual de prospectiva y decisión estratégica: bases teóricas e instrumentos para América Latina y el Caribe. CEPAL e Instituto Latinoamericano y del Caribe de Planificación Económica y Social (ILPES). Área de Proyectos y Programación de Inversiones. Chile

 

Fuente: http://revistaeducacionvirtual.com/archives/2035

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Las buenas decisiones no son buenas por casualidad (ni las malas tampoco)

El 15 de enero de 2009, el piloto de un Airbus 320 de US Airways salvó la vida de 153 pasajeros en una proeza que Clint Eastwood pronto llevará al cine. Chesley Sullenberger, alias Sully, se convirtió en un héroe nacional cuando realizó lo que se consideró como una obra maestra al amerizar sobre el rio Hudson, en Nueva York. ¿Suerte? ¿Milagro? Ninguna de las anteriores. Tenía el conocimiento necesario para tomar las decisiones adecuadas, fruto de 40 años de experiencia y aprendizaje (incluyendo muchas horas de simulador de vuelo) y de la obsesión de su aerolínea por la seguridad. Lo más probable es que cualquier otro piloto no hubiese conseguido el mismo resultado. Los pasajeros estaban en las mejores manos posibles. En Chile, el escándalo del puente Cau Cau ha estado plagado de tantos errores, que se ha optado por su demolición para construirlo de nuevo sin que haya sido inaugurado. Este vergonzoso desastre, que costará a los contribuyentes 42 millones de dólares, no ocurrió por casualidad sino como consecuencia de una serie de malas decisiones de gestión por falta de conocimiento.

Es obvio que para decidir necesitas conocimiento. No puedes hacer aquello para lo que no tienes conocimiento.

Nos pasamos cada minuto de cada día tomando decisiones. Todo lo que haces está precedido por una decisión que tomas, casi siempre inconscientemente. Mientras tendrías serios problemas para explicarme cómo hablas o cómo escribes, no te cuesta nada ejecutar dichas operaciones porque es el inconsciente quien gobierna nuestras acciones. En el ámbito laboral, nos pagan por tomar decisiones: si tu porcentaje de “aciertos” es razonable, tu empresa te mantiene, si ese porcentaje es bueno, te promociona, si es genial te puedes hacer millonario pero si es malo, te despide.

Muchas decisiones son triviales, como elegir la ropa que nos pondremos o el camino para llegar a la oficina. Otras son más sofisticadas como calcular el precio de una propuesta para un cliente o planificar un emprendimiento. Tu vida depende de tu capacidad de tomar buenas decisiones. Lo apasionante de las decisiones es que no averiguas si son buenas o malas hasta después de tomarlas. Si revisas tu trayectoria, hay decisiones que seguramente hoy, con el conocimiento que tienes y que entonces no tenías, abordarías de otra manera. No podemos juzgar una decisión solo por los resultados sino que hay que considerar el contexto, la información disponible y lo que sabías en ese momento.

Es obvio que para decidir necesitas conocimiento. No puedes hacer aquello para lo que no tienes conocimiento. Si definimos conocimiento como “la experiencia que te permite tomar decisiones y actuar”, entonces el propósito de la gestion del conocimiento consiste en asegurarse que las personas tengan el conocimiento que necesitan, en el momento oportuno, para tomar la mejor decisión posible. En una secuencia de la película “En busca del arca perdida”, Indiana Jones, se enfrenta con un guerrero armado con un alfanje. La escena finaliza abruptamente porque el protagonista tiene un conocimiento tecnológico (pistola) contra el que su adversario no puede competir. Los resultados que obtenemos son fruto de las decisiones que tomamos que, a su vez, dependen del conocimiento que tenemos. El principal objetivo de cualquier organización no es otro que proveer conocimiento de forma permanente a sus integrantes, porque de esa manera mejoran los resultados. No es una tarea difícil, tan solo hay que saber qué hace cada persona, qué conocimiento necesita, donde está y como disponibilizárselo.

Si es tan sencillo, ¿por qué ocurre tan pocas veces? Porque, como vimos con la fórmula de la Coca Cola, confundimos proveer información con proveer conocimiento. El conocimiento no es lo que sabes sino lo que haces con lo que sabes. En tu trabajo no basta con saber muchas cosas, necesitas aplicarlas. Aunque sepas lo que hay que hacer para adelgazar, lograrlo es muy diferente. Por ende, proveer información a los colaboradores es condición necesaria pero no suficiente. Te puedo regalar un libro de cocina pero si no sabes cocinar no te servirá de gran cosa. Solo la persona que tiene conocimiento puede utilizar la información para decidir y actuar eficientemente. El conocimiento no es algo que tienes sino algo que haces. Yo no quiero más información (tengo demasiada) sino la que necesite cuando me haga falta, según el contexto y la decisión que deba tomar.

¿Cómo ocurre el proceso de toma de decisiones? Innumerables especialistas han analizado las múltiples variables que intervienen: cómo nos influyen los sesgos, los paradigmas o las falacias y por supuesto, cómo nos condicionan las emociones

¿Cómo ocurre el proceso de toma de decisiones? Innumerables especialistas han analizado las múltiples variables que intervienen: cómo nos influyen los sesgos, los paradigmas o las falacias y por supuesto, cómo nos condicionan las emociones. Desde el punto de vista del conocimiento, lo fundamental es entender que la toma de decisiones es un proceso inconsciente. Nuestro cerebro intenta economizar y, dado que pensar consume mucha energía, trata siempre de reutilizar lo que ya sabe. En la mayor parte de los casos, tu cerebro trabaja por ti sin que tú te des cuenta (y no siempre a tu favor). El proceso comienza con un Objetivo que deseas alcanzar (sin objetivo, no hay necesidad de decidir). Para lograrlo, trazas un Plan que se descompone en Actividades. Para ejecutar cada Actividad necesitas tomar Decisiones y para cada Decisión necesitas Conocimientos. Muchas veces, lo que tenemos son varios objetivos que compiten entre sí y que debes priorizar: Cuando planificas un viaje en avión, no solo decides en función del precio del billete o de la aerolínea sino que consideras los horarios, las escalas, si puedes usar millas o si te cobran extra por la maleta.

Para añadir incertidumbre, tendrás que asumir que nunca contarás ni con toda la información ni con todo el tiempo que desearías.

Siempre que tomas una decisión estás “prediciendo el futuro”: te basas en tu experiencia (lo que ocurrió las veces en que te viste expuesto a una situación semejante en el pasado), eliges la alternativa que tiene mayores probabilidades y esperas que se produzca determinado resultado. Nuestra mente hace esos cálculos de forma muy limitada si lo comparamos con las maquinas (la película El Código Enigma muestra como Alan Turing ya tuvo que recurrir a la computación durante la segunda guerra mundial para descifrar las claves de comunicación de los nazis). Cuando tus predicciones se cumplen y tus decisiones te conducen a alcanzar los objetivos que te habías propuesto, significa que cuentas con conocimiento valioso que te convierte en un experto. Los expertos ven cosas evidentes que para los neófitos son invisibles. Años atrás, realizamos un maravilloso proyecto con agricultores y durante una visita a terreno, uno de ellos contempló el cielo y nos dijo: “en media hora va a llover”. Todos miramos incrédulos a un cielo que, a los ojos de cualquier mortal, se veía azul y radiante. 30 minutos después, la atmósfera había cambiado completamente y una espesa capa de amenazantes nubes negras comenzó a descargar agua.

¿Cómo llega el conocimiento que necesitas a tu cerebro para decidir? El proceso de construir conocimiento se llama aprendizaje. Cuanto más aprendes, más conocimiento tienes lo que te facilita la toma de buenas decisiones. Hay 2 momentos relevantes para aprender:

Antes de llegar a tu organización: Se supone que el colegio, la universidad y tu experiencia de vida te entregaron el conocimiento que justifica que tu empresa te contrate.

Durante el desempeño de tu trabajo: En esta etapa, tu organización se responsabiliza de tu aprendizaje, tanto formal como informalmente. Aquí también podemos hablar de 2 instancias

  1. Preventiva: Se trata del conocimiento que necesitas incorporar para que estés preparado cuando llegue el momento de utilizarlo. Esta actividad se llama formación y el elemento más conocido son los cursos y, cada vez más, las comunidades de aprendizaje y práctica.
  2. Just in Time: Es el conocimiento que necesitas para tomar decisiones instantáneas. En ese caso, tu empresa te debe garantizar acceso inmediato a expertos (mediante herramientas como páginas amarillas, mentoring, listas de correo) y también a bases de conocimiento con experiencia sistematizada (buenas prácticas, casos, historias, lecciones aprendidas). Para que eso sea posible, tu organización tiene que estar diseñada con el propósito de ayudarte a tomar las mejores decisiones posibles, suministrándote todo el conocimiento que ha ido recogiendo de las buenas y malas decisiones que se han tomado millones de veces en el pasado. Y para que el circulo sea virtuoso, después de que tú tomes tus decisiones, estás “obligado” a entregar a la empresa el conocimiento de lo que aprendiste para que otros lo aprovechen.

Si la mayor parte de las decisiones son inconscientes, ¿cómo me aseguro de que las personas tengan el conocimiento adecuado y lo apliquen instintivamente? Hay casos (pocos) en que tus decisiones son racionales, tienes tiempo para investigar, analizar y priorizar antes de decidir. En la mayoría de ocasiones, tu respuesta es automática. Si queremos ser eficientes, necesitamos que el conocimiento también sea inconsciente. El secreto para conseguirlo está en la práctica repetida hasta que seas capaz de decidir sin pensar, como muestra este artículo. “Cuanto más practico, más suerte tengo” es un dicho muy popular entre los deportistas. Todo conocimiento inconsciente empezó siendo consciente en primer lugar. Recuerda el proceso para aprender a conducir un coche. Cuando recién te dieron el carnet, tenías que estar atento a cada detalle mientras que miles de horas y miles de kilómetros después, conduces sin pensar. El cerebro es un músculo que se entrena y el conocimiento se hace inconsciente mediante la práctica, lo que requiere tiempo y motivación. El famoso eureka, el momento “aha”, ocurre cuando la mente consciente descubre lo que el inconsciente ya sabía.

¿Cuándo la gestión del conocimiento es importante para ti? Cuando vas a tomar una decisión para la que no tienes conocimiento o te sientes inseguro. Una decisión se vuelve consciente cuando tienes dudas respecto de las alternativas, lo que te obliga a pensar. En ese momento, estás abierto a recibir conocimiento de otros que hayan tenido esa misma experiencia previamente y la hayan resuelto exitosamente. Y eso es justamente lo que tu empresa está obligada a proveerte si de verdad cree en gestionar el conocimiento como un activo estratégico. Aquel conocimiento que me permite alcanzar mis objetivos, se convierte en una buena práctica ya que cada vez que lo utilizo en condiciones de contexto similares, me asegura ese mismo resultado. Cuando el resultado no es el esperado, el conocimiento se etiqueta como una mala práctica, algo de lo que puedo aprender una lección y decidir de manera distinta la próxima vez. El método de ensayo y error es parte de la estrategia de toma de decisiones ya que, al carecer de claridad respecto de cuál puede ser el desenlace, tomas una decisión y vas haciendo seguimiento del resultado de forma que aquello que no funciona, lo vas corrigiendo y aquello que funciona, lo vas fortaleciendo.

Conclusiones

Las recientes inundaciones que colapsaron Santiago no fueron una cuestión de mala suerte sino de malas decisiones. El Leicester City acaba de ganar la liga inglesa pero no por casualidad sino por una serie de buenas decisiones que vienen tomándose desde hace 1 año.

No hay 50 años ininterrumpidos de mala o buena suerte. Lo que eres, está en función de las decisiones que has tomado y lo que serás, depende de las decisiones que tomes de aquí en adelante. En tiempos de cambio rápido, hay que tomar decisiones continuas sobre temas complejos lo que te obliga a tener el conocimiento preciso para equivocarte lo menos posible. No puedes tomar buenas decisiones de forma consistente sin conocimiento. Por eso, el conocimiento es lo más importante que te puede proveer tu empresa. Cada organización necesita evaluar continuamente qué saben sus integrantes y qué necesitan saber y asegurarse de colocar a las personas con el conocimiento adecuado para las tareas y decisiones que deben tomar. El esfuerzo de aprender y gestionar el conocimiento solo tiene sentido si está dirigido a ayudarte a tomar las decisiones adecuadas porque eso significa menos riesgos, menos costos y más eficiencia.

Si quieres que tus empleados tomen las mejores decisiones, prepárales de antemano pero sobre todo, facilítales acceso al conocimiento que necesiten, en el momento que lo necesiten. Aprendemos de la experiencia y las decisiones de otros para mejorar las nuestras. El inconsciente es el que guía nuestras acciones pero solo aprende de una manera: por experiencia repetida.

Ante tanta innovación que nos rodea, solo te adaptas si aprendes. Las decisiones que has venido tomando durante tu carrera no servirán para siempre. Si el mundo fuese estable y no cambiase, aprender sería una actividad limitada: una vez sabes lo que te hace falta, ya tienes suficiente para el resto de tu vida. Pero como el mundo cambia, necesitas aprender constantemente. En una sociedad cuya complejidad solo se incrementa, se necesita desarrollar habilidades de toma de decisiones. ¿Quién te enseña a decidir?

Fuente: http://momentocero.cl/blog/2016/05/las-buenas-decisiones-no-son-buenas-por-casualidad-ni-las-malas-tampoco/

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OREALC/UNESCO Santiago presenta libro para apoyar la toma de decisiones sobre políticas educativas en América Latina

La Oficina Regional de Educación para América Latina y el Caribe (OREALC/UNESCO Santiago) lanzó en Cartagena de Indias el texto Recomendaciones de Políticas Educativas en América Latina en base al Tercer Estudio Regional Comparativo y Explicativo (TERCE).

27.05.2016 – UNESCO Office in Santiago

Con este documento, los resultados del TERCE se aterrizan en un nivel conceptual y práctico, orientado a los hacedores de políticas educativas, relevando el valor de una evaluación masiva no solo para la investigación y diagnóstico de los resultados, sino también para el diseño de políticas sectoriales en educación.

De acuerdo a la OREALC/UNESCO Santiago, para que el derecho a la educación se materialice, se requiere tanto del compromiso político y financiero de los gobiernos como de herramientas técnicas que ayuden a monitorear el grado de satisfacción de ese derecho. Es por ello que la UNESCO lanzó el 27 de mayo de 2016 el documento Recomendaciones de Políticas Educativas en América Latina en base al Tercer Estudio Regional Comparativo y Explicativo (TERCE), instrumento técnico en apoyo a la toma de decisiones en materia de política educativa.

El lanzamiento tuvo lugar en el marco del curso Evaluación Educativa para el Diseño de Programas y Políticas en la Agenda E2030, organizado por la Oficina Regional de Educación para América Latina y el Caribe (OREALC/UNESCO Santiago) y la Cooperación Española, en Cartagena de Indias, Colombia.

De acuerdo a Atilio Pizarro, jefe de la Sección de Planificación, Gestión, Monitoreo y Evaluación de la OREALC/UNESCO Santiago, las políticas educativas son la herramienta que poseen las autoridades para generar cambios en los sistemas escolares, las que permiten mejorar las oportunidades de aprendizaje de los estudiantes. “Las políticas requieren nutrirse de evidencia empírica y modelos conceptuales que ayuden a comprender la realidad en cada país, así como la naturaleza y magnitud de los desafíos educativos que se enfrentan”, señaló.

Pizarro agregó que esta publicación es un esfuerzo de la UNESCO y del Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad de la Educación (LLECE) para contribuir a la garantía del derecho a la educación, en el marco de los compromisos de Educación para Todos.

Principales aspectos del libro

Según la UNESCO, la toma de decisiones debe estar basada en evidencia y anclada a algunos modelos conceptuales que permitan interpretar de manera adecuada la realidad. Este documento cumple con ese propósito, puesto que posee la característica fundamental de traducir las conclusiones extraídas de la evidencia del estudio TERCE en política y la práctica educativa. En ese sentido, la evidencia empírica que aporta el estudio muestra los principales factores que influyen en el logro de los aprendizajes, los cuales representan desafíos concretos de política educativa.

A lo largo del documento se plantean líneas de acción y recomendaciones específicas para cada tema diagnosticado previamente en el libro de factores asociados del TERCE. Las recomendaciones de política presentadas en cada sección del documento son fundamentadas en la revisión de la literatura reciente y se refuerzan con ejemplos específicos de políticas aplicadas en los 16 sistemas educativos que participaron en el estudio TERCE. Esta evidencia es desarrollada en dos niveles de tomas de decisión de política educativa: local y nacional, como respuesta a la demanda constante de instrumentos alternativos que se adapten a distintos contextos económicos y sociales.

Con este documento, los resultados del TERCE se aterrizan en un nivel conceptual y práctico, orientado a los hacedores de políticas educativas, relevando el valor de una evaluación masiva no solo para la investigación y diagnóstico de los resultados, sino también para el diseño de políticas sectoriales en educación.

Los hallazgos en base al TERCE entregan dos grandes aportes: identifican áreas clave de intervención para los tomadores de decisiones, basándose en sólida evidencia empírica; a la vez que los resultados de estas investigaciones invitan a tomar acciones urgentes para aminorar las desigualdades en educación.

Opiniones:
Francisco Enrich, director de Seguimiento y Evaluación de Políticas Públicas del Ministerio del Poder Popular para la Educación de Venezuela.
“Actualmente, cada día la toma de decisiones de los actores políticos, de los decisores, necesitan más respaldo tecno-político en sus funciones y para ello hay distintos instrumentos que tienen que ser valorados en un nivel técnico medio para poder efectivamente llegar con unas políticas efectivas a la población de manera focalizada, con rigurosidad”

Gerardo Gómez, viceministro de educación superior de Paraguay: “Es muy relevante la relación entre lo que implica trabajar con evidencias, es decir, desarrollar el aspecto técnico y conjugar eso con la cuestión política de contexto. Para nosotros es una experiencia muy pertinente, porque muchas veces hemos tenido que abdicar en lo técnico frente a los problemas que se plantean a nivel político; es decir, hay que saber explicar lo que se hace técnicamente en el sistema educativo y eso no siempre es posible, así que las recomendaciones han sido muy pertinentes en ese sentido”.

David Otero Mendieta, coordinador nacional del LLECE de Nicaragua. “El estudio que se ha hecho considero que es importante para poder continuar con las mejoras de la calidad educativa de nuestros países. Realizar estos estudios permite que se elaboren materiales para hacer acciones de política con evidencias que permitan mejorar la docencia, los currículos, los ambientes pedagógicos, los materiales de apoyo a la enseñanza”.

Más información

Fuente: http://www.unesco.org/new/es/santiago/press-room/single-new/news/presentan_libro_para_apoyar_la_toma_de_decisiones_sobre_politicas_educativas_en_america_latina/#.V0s1JDXhDIU

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