ILGA Mundo: Lucas Ramón Mendos, Homofobia de Estado 2019: Actualización del Panorama Global de la Legislación (Ginebra; ILGA, diciembre de 2019).
A medida que nos preparamos para comenzar un nuevo año —y una nueva década— estamos orgulloses de presentar a nuestras organizaciones miembras y al público en general una actualización del Panorama Mundial de la Legislación del informe Homofobia de Estado. Esta actualización de fin de año nos ayudará a mantenernos al día con el progreso (y el retroceso) que hemos visto en todo el mundo desde el lanzamiento de la última edición de nuestro informe en lo que hace al derecho de la orientación sexual. En los últimos años hemos visto progresos sin precedentes como resultado de nuestra labor de promoción a nivel nacional, regional y mundial. Nunca antes nuestras comunidades habían alcanzado tal nivel de protección legal en tantos países de todo el mundo y tenemos numerosas razones para celebrar y alegrarnos. En más de 70 países, la orientación sexual ha sido expresamente consagrada en las regulaciones locales, las leyes y constituciones nacionales para protegernos de la discriminación. Las familias diversas están siendo reconocidas en un número cada vez mayor de jurisdicciones y se ha establecido una tendencia mundial hacia la despenalización de los actos sexuales consensuales entre personas del mismo sexo. Sin embargo, este es un momento en el que ser complacientes con nuestros logros es uno de los peores errores que podemos cometer.
Las tendencias polarizadoras que están teniendo lugar a escala mundial significan que, si bien cada vez más de nosotres vemos nuestros derechos legalmente reconocidos, más personas LGBTI también corren un mayor peligro de ser discriminadas, atacadas, perseguidas e incluso asesinadas. A medida que nos hacemos más fuertes, la oposición que siempre hemos encontrado está ahora reforzada y revitalizada con una nueva ola de resistencia de viejos y nuevos detractores. Nuestros logros están siendo atacados y presentados maliciosamente por actores anti-derechos, de derechas y conservadores como golpes amenazantes para la sociedad y como una desgracia para la humanidad como tal. Se están utilizando tácticas sofisticadas para presentarnos como una fuerza oscura que pretende usar, reclutar o adoctrinar a les niñes, como una conspiración impulsada por una ideología que busca destruir el tejido moral de la sociedad. Una amenaza que hay que detener. E incluso si estas afirmaciones extravagantes no nos suenan nuevas (sobrevivimos a ellas todos los días de nuestras vidas), ahora estamos —más que nunca— empezando a ver cómo su uso estratégico como mantra repetitivo en todos los rincones del mundo está cobrando impulso. Por mucho que nos gustaría informar sobre progresos incontestados, publicamos esta actualización del Panorama Mundial de la Legislación de nuestro informe de Homofobia de Estado con un sentimiento inquietante. Poco después de que lanzamos la 13ra edición del informe, Brunei conmocionó a nuestras comunidades —y al mundo entero— al promulgar una de las leyes más atroces de las últimas décadas.
Poco después, otro país africano se unió a la lista de países que nos criminalizan: Gabón. Otro ha defendido y mantenido inexplicablemente esas leyes (Kenia) y, en Asia y África, al menos otros tres países están considerando actualmente proyectos de ley para criminalizar que pronto podrán ver la luz (Indonesia, Guinea Ecuatorial y Egipto). Europa y América del Norte, dos regiones del mundo que habían mostrado claros signos de progreso constante, no están logrando mantenerse en esa tendencia y muestran signos angustiantes de retroceso en forma de jurisprudencia restrictiva, violencia implacable, feroz oposición a iniciativas legales para proteger nuestros derechos, las llamadas «licencias» para discriminar basadas en creencias religiosas y niveles inéditos de discursos de odio. Los esfuerzos para descriminalizar los actos sexuales consensuales entre personas del mismo sexo parecían haber ido mal en Oceanía y ningún país de la región parece estar tomando medidas claras para apoyar nuestros reclamos. En este contexto, lamentamos profundamente tener que informar que desde marzo de 2019 más de nosotres hemos sido ejecutades por amar a quienes amamos, encarcelados o arrestados bajo las leyes existentes en varios países. En cualquier caso, ser conscientes de todos estos intensos frentes de batalla no hace que nuestros logros sean menos importantes. Somos un movimiento resiliente y siempre nos hemos sobrepuesto, incluso en grandes adversidades. Nuestres hermanes en Botsuana nos dieron a todos una dosis invaluable de esperanza cuando lograron que se deroguen las disposiciones legales que nos convirtieron a todos criminales en ese país.
Nuestros hermanos en Taiwán reforzaron aún más ese sentimiento de alegría cuando el matrimonio igualitario se hizo realidad por primera vez en Asia, gracias a su incansable trabajo y luego de sobrevivir valientemente al duro golpe de un tenso referéndum que fue tan devastador para la comunidad local que incluso se cobró la vida de algunos de nuestros jóvenes más valiosos. Más países ahora nos protegen de la discriminación basada en la orientación sexual en sus constituciones y tienen disposiciones legales contra los crímenes de odio y la incitación al odio, la violencia y la discriminación. El desafío con estas leyes ahora es luchar por su aplicación efectiva. Ahora, a medida que más y más de nosotros organizamos y salimos a la calle por nuestra causa, a medida que presentamos demandas bien investigadas ante tribunales locales e internacionales y tenazmente incidimos ante los gobiernos nacionales y las organizaciones internacionales, también estamos dedicando tiempo a protegernos unos a otros y tomar más tiempo para el autocuidado y la sanación: una prioridad muy necesaria en tiempos de contrarreacción virulenta. Esperamos con entusiasmo lo que nos espera, aguardando numerosas oportunidades de cambio y mejora, pero también somos realistamente conscientes de que los desafíos son cada vez más frecuentes y exigentes. Esta realización, lejos de disuadirnos, nos llevará a superarnos a nosotres mismes y lograr aún más. Porque nuestras vidas están en juego. A todes les involucrades en la producción de esta actualización, nuestro sincero agradecimiento
Puede acceder al informe completo en el siguiente enlace:
ILGA_World_Homofobia_de_Estado_Actualizacion_Panorama_global_Legislacion_diciembre_2019