Laura Poy Solano
La Jornada
A partir 2020 llegarán a decenas de escuelas de la zona conurbada del Valle de México las llamada Motolibrerías del Fondo de Cultura Económica (FCE), que con apoyo de una red de maestros promotores de la lectura buscarán fomentar no sólo el interés de los niños a la lectura, sino conocer una experiencia única: acercarse al mundo de los libros mediante un proyecto lúdico que involucra a narradores, cuentistas, autores y a la propia comunidad escolar, destacó el maestro Pedro Hernández Morales, uno de los principales impulsores de la propuesta y coordinador del programa de visitas del Librobús a las escuelas de la Ciudad de México.
El director general del FCE, Paco Ignacio Taibo II, detalló, ante profesores reunidos en la sede de la sección 9 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, el proyecto que impulsará a partir de 2020. “Se trata de siete Motolibrerías que llevarán hasta 500 libros a escuelas o zonas pequeñas, donde no es posible llegar con el Librobús, y con lo que esperamos duplicar el número de escuelas atendidas, para llegar, a más de mil”.
Se trata, explicó, de una moto que llevará una caja con paredes abatibles que permitan exhibir los textos. Indicó que aún están en la fase técnica de diseño de la Motolibrería, para después iniciar la capacitación del motolibrero, pues no sólo deberá conducir el vehículo, sino orientar a los lectores y hacerse cargo del cobro de los libros vendidos.
Anunció también que cada uno de estos vehículos llevará el nombre de un personaje histórico, de un artista destacado o de quienes han emprendido las grandes luchas por México. Por ello, propuso denominar a una motolibrería general Francisco J. Múgica, diputado constituyente, quien impulsó la redacción del artículo tercero plasmado en la Constitución de 1917, y del luchador social y maestro Misael Núñez Acosta.
Al respecto, Hernández Morales, destacó que este año se visitaron más de 200 escuelas públicas en la Ciudad de México y su zona conurbada como parte de las Jornadas de Fomento a la Lectura y Escritura, promovidas por el FCE, el cual llegó a planteles de educación básica y media superior donde 60 mil alumnos subieron a un Librobús y participaron 2 mil 400 maestros y mil 800 padres de familia.
Se trata de ofrecer, dijo, una experiencia en la que lo central no es vender libros, aunque se logró comercializar 42 mil textos. “Lo más importante es acercar la experiencia de la lectura a niños y adolescentes, por eso hacemos seguimiento y acompañamiento para que en cada escuela donde acude el Librobús, y próximamente la Motolibrería, se realicen actividades previas, durante y posteriores a la visita.
Se han generado talleres de lectura, creación de carteles, debates, presentaciones de libros, lectura en voz alta realizada por padres de familia e incluso los maestros promueven el ahorro entre los niños para que sean ellos quienes adquieran directamente algún texto que les guste.
Destacó que también se ha creado una red de profesores promotores de lectura. Hasta la fecha, indicó, se han capacitado a 200 maestros de 100 escuelas, en siete talleres de capacitación coordinados con la Secretaría de Educación Pública, el FCE y Educal.