Los separados de sus trabajos son personas fichadas como ‘S’ por los servicios de seguridad, lo que significa que son investigadas a raíz de su potencial peligrosidad para la seguridad del Estado.
De acuerdo cifras oficiales, en toda Francia hay registrados alrededor de 20 mil casos de fichas ‘S’.
La Ministra precisó que las suspensiones de maestros y trabajadores fueron posibles gracias a la estrecha colaboración entre su cartera y el Ministerio del Interior.
En este sentido, explicó que cuando las fuerzas de seguridad identifican a algún individuo peligroso, de inmediato la información se transmite a las autoridades de educación para proceder a su rápida suspensión.
Agregó que en los casos separados hasta ahora, los hechos tangibles evidenciaban que podían ser peligrosos para los alumnos.
En los últimos meses varios atentados golpearon esta nación europea, y la mayor parte de los autores eran jóvenes identificados con versiones extremistas del Islam.
De ahí que las autoridades sitúen como prioridad la lucha contra los procesos de radicalización y para ello la escuela está considerada un espacio fundamental.
El próximo 1 de septiembre comenzará el nuevo curso escolar en el país custodiado por un fuerte dispositivo de seguridad que incluirá el despliegue de patrullas móviles y de tres mil efectivos.
Una buena parte de ese operativo se mantendrá activo durante los próximos meses para garantizar la tranquilidad en escuelas, colegios, liceos y universidades.