Centroamérica/Haití/Diciembre 2020/prensa-latina.cu
A nivel mundial, dos tercios de los infantes no cuentan con conexión en sus viviendas, mientras que 759 millones de jóvenes entre 15 y 24 años corren con la misma suerte.
En Haití, el azote de la Covid-19 negó el derecho a la educación durante cuatro meses, por lo que un acceso más equitativo a la red de redes es una alternativa viable para el aprendizaje a distancia, señaló Raoul de Torcy, representante de la Unicef.
Destacó, además, que la brecha digital perpetúa las desigualdades existentes, en especial para quienes provienen de hogares pobres y comunidades rurales, quienes casi no tienen forma de ponerse al día.
El panorama es aún más complejo en la nación caribeña, donde los disturbios sociales y el descontento con el gobierno en 2019 privaron a los estudiantes de al menos dos meses de clases.
Se suma el creciente clima de inseguridad y la multiplicación de secuestros, particularmente en esta capital y otras ciudades departamentales.
A mediados septiembre la ONU expresó su preocupación por el impacto de la inseguridad y la crisis sanitaria en el sistema educativo nacional, además de las huelgas de los profesores.
También insistieron en el derecho a una educación con calidad, inclusiva y equitativa, que priorice a quienes se encuentran en situaciones vulnerables.