Por: Educación 3.0
El proceso acelerado de digitalización ha afectado al bienestar de estudiantes, docentes y familias, que tienen dificultades para combinar la vida virtual con la desconexión digital.
Una de las principales consecuencias de la pandemia de la Covid-19 ha sido la digitalización de la sociedad. El consumo de pantallas y las horas delante de dispositivos electrónicos se dispararon notablemente durante el confinamiento. A esto se le suman el teletrabajo y la educación virtual que hace que el día a día de muchas personas gire en torno al mundo digital. Esta situación puede afectar a la salud mental y emocional si no se sabe gestionar adecuadamente. Por ello es necesario más que nunca saber desconectar y centrarse en el mundo real.
Con el objetivo de que estudiantes, docentes y familias sean capaces de combinar lo mejor posible la vida virtual con la digital, Marta Calderero, profesora colaboradora de los Estudios de Psicología y Ciencias de la Educación de la UOC ofrece algunas claves:
1. Reorganiza tu realidad: diseña tu hogar y tu entorno de trabajo para que te sientas cómodo interactuando en el entorno físico y el virtual, con mobiliario adecuado para el uso de la tecnología y también espacios donde la desconexión esté asegurada.
2. Aplica una desconexión digital intermitente: intenta incluir en tu rutina diaria el hábito de desconectar unos treinta minutos dos o tres veces al día; de este modo conseguirás que tu cerebro se recargue de energía. También es muy recomendable establecer unos límites de uso de los programas y dispositivos, ya que perdemos mucho tiempo al día consultando continuamente el móvil y comprobando si hemos recibido nuevos correos electrónicos. Haz un esfuerzo y elimina todas las distracciones, como suscripciones y notificaciones innecesarias.
3. Potencia el optimismo: al principio del día consulta las cuentas de redes sociales que contengan información inspiradora, pues te ayudarán a reducir el sesgo atencional negativo que generan las noticias que copan los titulares del día.
4. Vive experiencias únicas: siempre que sea posible, prioriza las relaciones sociales en el contexto físico, y cuando las lleves a cabo en el entorno virtual es mejor que intentes conectar con personas más que con información impersonal.
5. Participa en comunidades que tengan tus mismos intereses: aunque parezca que la felicidad es un concepto unipersonal, la percepción de felicidad colectiva tiene mucho peso en nuestro bienestar. Por ello es muy recomendable que aproveches el entorno digital para conectar con aquellas personas que, aunque viven lejos de ti, comparten tus mismas aficiones. En este sentido, las redes sociales pueden ser una herramienta muy positiva.
Fuente: https://www.educaciontrespuntocero.com/opinion/desconexion-digital/