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Colombia: Parche Maestro 2020: inclusión e innovación educativa

América del sur/Colombia/Octubre 2020/eldiariolaeducacion.com

  • 25 cafés/sesiones de ideación, 10 experiencias de maestros y maestras, seis conversaciones, tres charlas, 25 talleres, una presentación de materiales, dos paneles, cinco países. En total, 1.054 participantes inscritos a cafés/sesiones de ideación y talleres (el resto de actividades se ofrecieron en abierto); pertenecientes a 201 instituciones educativas, ubicadas en 101 municipios colombianos. Este ha sido Parche Maestro 2020, Escuela de verano para, por y de docentes, celebrada entre el 7 y el 11 de septiembre. ¿Celebrada dónde? De manera virtual, “en la red”, debido a la situación de pandemia en que nos encontramos, aunque, en ciertos momentos, se llegó a tener la sensación de que era presencial.

La segunda edición de Parche Maestro se planteó dos elementos claves del quehacer docente: cómo mantener y acrecentar los vínculos entre docentes e instituciones educativas para favorecer una educación que continúe ocupándose de la inclusión social de diversos grupos o poblaciones, y cómo poner en escena el rol de las tecnologías educativas y, por extensión, otras prácticas de innovación educativa, discutiendo sus alcances y reflexionando sobre los asuntos que se pueden o no resolver apelando al uso de plataformas digitales.

Esta segunda edición ha tenido, en su agenda oculta, otro objetivo: ir más allá de los límites locales y regionales, a los que se limitó en su primera edición. Así, podemos decir que la Escuela de verano Parche Maestro ha devenido en un evento educativo colombiano.

La celebración del Parche ha tenido un centro gestor de las redes de comunicación, Medellín; ha contado con unos destinatarios iniciales, las y los docentes de la regiones de Antioquia, Cauca, Córdoba y Santander; ha sumado participantes de otros Departamentos de Colombia (Valle del Cauca, Urabá). Igualmente, han participado maestras y maestros de México y Argentina. Han aportado ideas y reflexiones expertos y expertas de Argentina, Colombia, España, México y Uruguay. Ha contado con dos entidades organizadoras e impulsoras, Fundación Proantioquia (Medellín) y Fundación Kreanta (Barcelona); y con diversos aliados institucionales: USAID (Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional), Grupo Diverser (Universidad de Antioquia), Secretaría de Educación de la Gobernación de Antioquia; sin olvidar en esta alianza a otras entidades que han aportado su apoyo, como el Instituto Humboldt, Plan Ceibal (Uruguay), INSOR (Instituto Nacional para Sordos, que se encargó de la interpretación mediante el lenguaje de signos), Parque Explora, Fundación Compartir, Comfama (Caja de Compensación Familiar de Antioquia), Bancolombia, Editorial Magisterio, Gatoloko Films y Fábula Historias.

Es, pues, una característica significativa a destacar: si el pasado año Parche Maestro, celebrado presencialmente, tuvo un alcance geográfico limitado, este año, gracias a la virtualidad, ha llegado a lugares de la ruralidad colombiana que, de otra manera, hubieran quedado sin poder participar. Ello ha sido posible gracias a que se han dedicado recursos a fortalecer las conexiones digitales, vía Internet, de las instituciones educativas, de manera que las y los docentes pudiesen conectarse con mayor seguridad y fiabilidad.

Además del importante alcance que, en cuanto al número de participantes y de territorios tan diversos, ha tenido Parche Maestro, creemos que, por su carácter singular, es interesante resaltar dos de las actividades realizadas: la exposición de experiencias de maestras y maestros y los cafés/sesiones de ideación.

Las experiencias han representado un verdadero punch vivencial. Maestras y maestros, con atrayentes y hondas reflexiones sobre su quehacer docente, se han desnudado pedagógicamente ante sus iguales y han hablado sobre cómo utilizan en el aula los recursos digitales, el arte, el juego, los museos, el género, el color de la piel, el cuerpo, las emociones. Con un lenguaje directo, el propio de “pares”, han explicado cómo trabajar todas esas temáticas, con qué instrumentos cuentan para ello y qué resultados han obtenido. Han sido verdaderos relatos pedagógicos que nos han enseñado a interpretar el mundo escolar desde el punto de vista de unos protagonistas comprometidos y comprometidas, que han mostrado sus historias de vida diaria en las aulas.

Esta exposición de las Experiencias ha contribuido a poner de manifiesto el saber silencioso construido en la práctica escolar por unos actores que, habitualmente, tienen pocas posibilidades de mostrarlo públicamente y ponerlo al alcance de otros maestros y maestras (proceso colaborativo). A su vez, la explicación pública de las propias experiencias ha servido para que los y las protagonistas realicen un ejercicio reflexivo sobre su propio proceso docente (autoconfianza) que les puede permitir reorientar sus prácticas en el aula (innovación).

Los cafés/sesiones de ideación son una iniciativa que rompe con el rol tradicional de una persona experta que, en mesa redonda, en conferencia o charla, trasmite saberes de forma horizontal, tutti quanti. En este caso, se trata de una conversación “a demanda previa”, centrada en los intereses de un colectivo (miembros de una misma institución o un grupo de docentes del mismo nivel educativo), en la que se mezclan saberes, geografías, paisajes y “obstinación pedagógica” (a decir de Carina Kaplan). Es un espacio para tejer vínculos en grupo, en equipo; para generar relaciones y complicidades interpersonales; para crear un clima de trabajo y compartir valores.

Cada café/sesión ha contado con la participación de una persona experta, pero ha correspondido al equipo directivo desarrollar un liderazgo con el cual se ha conseguido que cada docente se convierta en colaborador de los demás, de acuerdo con el proyecto de centro y que entienda su proyecto como parte del todo. Los cafés/sesiones de ideación persiguen generar confianza en el seno de la institución educativa, permiten a los docentes el aporte creativo, la colaboración con la institución y con sus pares, e involucrarse con sus fortalezas y debilidades. En algunos casos, la acción desarrollada durante el café/sesión de ideación tendrá continuidad y fortalecimiento posterior.

Con este bagaje, Parche Maestro 2020 ha marcado también el inicio de una “escuela de verano permanente”, un continuum formativo y de intercambio de saberes y experiencias entre pares que estará (está) vivo y dinámico a lo largo de cada día del año. Ha dejado de ser únicamente un evento anual para convertirse además en un espacio permanente de diálogo, de “parcheo”, de estar con otros y otras docentes de manera relajada, tranquila, en buen ambiente, compartiendo. Hoy, ese espacio pueden encontrarlo en www.parchemaestro.com. Les invitamos a visitarlo y hacer uso de sus contenidos.

Fuente e imagen tomadas de: https://eldiariodelaeducacion.com/educacionesenmovimiento/2020/10/21/parche-maestro-2020-inclusion-e-innovacion-educativa/

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Colombia: Así es el piloto de regreso a clases en el que participarán 19 colegios de Bogotá

América del Sur/Colombia/18-10-2020/Autor(a) y Fuente: www.elespectador.com

Según una encuesta realizada por el Distrito, el 7,5 % de los padres está de acuerdo con que se retomen las clases presenciales este año, mientras que el 92,5 % coincide en que se haga en 2021. Estas son las medidas que se implementarán en estas instituciones educativas.

Desde hace algunos meses la Administración de Claudia López anunció la destinación de parte del cupo epidemiológico que tiene la ciudad (la capacidad que tiene la capital de habilitar actividades sin que se sature la atención en UCI) para retomar las clases presenciales en colegios públicos y privados. A este llamado solo respondieron 203 instituciones educativas, razón por la cual la mandataria redestinó el cupo y permitió que se abrieran otras actividades como los gimnasios y las iglesias.

No obstante, esta administración persevera en consolidar avances que permitan retornar a la presencialidad en las aulas, es por esto que este jueves brindó detalles del piloto que adelantará la ciudad en las semanas del 19 al 26 de octubre.

En imágenes: Estudiantes de algunos colegios de Bogotá vuelven a las aulas en modelo de semipresencialidad

“Al 14 de octubre, el Distrito ha evaluado y habilitado la reapertura de 203 instituciones educativas que solicitaron la revisión de sus protocolos para el regreso a clases voluntario y concertado con sus comunidades. Estos son: 109 jardines infantiles y colegios privados, 45 Instituciones de Educación Superior (IES), 48 Instituciones de Educación para el Trabajo y el Desarrollo Humano (IETDH) y 1 centro de formación del SENA”, informó la Secretaría Distrital de Educación.

Gracias al trabajo que han adelantado profesionales y directivos de la Secretaría de Educación, en conjunto con familias, estudiantes y trabajadores de las instituciones educativas, se logró definir una ruta de trabajo conjunta con los 19 colegios oficiales que decidieron adoptar una reapertura en modo piloto. “Esta medida cuenta con el consentimiento de padres y madres de familia y fue avalada por el Consejo Directivo de cada institución”, detalló la Secretaría de Educación.

Estas instituciones se encuentran en las localidades de KennedySantaféCiudad BolívarBosa, Rafael UribePuente ArandaSan Cristóbal y Usme. La idea es que en cada uno de estos centros educativos se avance en la implementación de las medidas que regirán en todos los colegios para el calendario escolar de 2021.

“La propuesta está diseñada para que asistan entre 30 y 200 estudiantes, dependiendo de la matrícula de cada institución. Entre ellos, los jóvenes que hacen parte de las pasantías en el SENA para que terminen su formación técnica y, en otros casos, estudiantes de grados 10 y 11 para que realicen actividades prácticas en diversas materias”, detalló el despacho.

Para este plan se han conformado equipos de apoyo, los cuales acompañarán de manera directa a cada una de estas instituciones en la fase de aislamiento, además de visitar los espacios escolares para que el regreso se haga en condiciones de seguridad y bienestar. Estos son los equipos:

– Equipo de adopción de protocolos: responsable de ayudar en la adaptación de protocolos de cada colegio en 2020 y 2021 y resolver o tramitar las dudas que surjan en el marco de la adopción de lineamientos.

– Equipo de espacios escolares seguros: responsable de ayudar a los colegios en la revisión de espacios escolares, inventario de equipamientos (baterías de baños, lavamanos), ventilación, señalización, demarcación, distanciamientos. Compra y entrega de insumos de bioseguridad para las personas, demarcación de espacios y elementos de bioseguridad de uso institucional (tapetes, termómetros, jabón, alcohol).

– Equipo de apoyo socioemocional:  responsable de la gestión de situaciones críticas, rutas para el restablecimiento de derechos y acompañamiento pedagógico para el fortalecimiento de la salud mental.

– Equipo de bienestar escolar: responsable de acompañar el ingreso y salida de estudiantes, toma de temperatura y activación de protocolos casos covid-19. Incluye el transporte mencionado en los protocolos.

– Equipo de flexibilización escolar:  responsable de acompañar procesos de flexibilización curricular, apoyo a las dinámicas que mantienen la estrategia ‘Aprende en casa’, el aprendizaje en la presencialidad y el trabajo autónomo.

Una encuesta realizada por el Distrito, de la que participaron 55.800 padres, madres y cuidadores, 24.100 jóvenes y 18.600 niños y niñas, muestra que el 7,5 % del primer grupo está de acuerdo con que se retome la presencialidad este año, mientras que el 92,5 % coincide en que se debe hacer en 2021.

Por otra parte, el 42,5 % de los niños y niñas consultados quieren regresar al colegio este año, mientras que el 37,5 % desea hacerlo el próximo año. “Esto evidencia una disyuntiva entre la preocupación de los padres, pero también la necesidad de niñas y niños de retomar sus clases. Somos respetuosos de los órganos de gobierno escolar y de la voluntad de padres, madres, niñas, niños y jóvenes. En la consulta está expresada, mayoritariamente, la opinión sobre realizar la reapertura en el 2021, por eso nos estamos preparando desde ya”, concluyó la secretaria de Educación, Edna Bonilla.

Fuente: https://www.elespectador.com/noticias/bogota/asi-es-el-piloto-de-regreso-a-clases-en-el-que-participaran-19-colegios-de-bogota/?cx_testId=14&cx_testVariant=cx_1&cx_artPos=1#cxrecs_s
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Visibilizar a víctimas LGTBI del conflicto es el inicio de la reparación: Colombia Diversa

Fue entregado un informe a la Comisión de la Verdad con relatos de personas que sufrieron la violencia en distintos territorios.

Marcela Sánchez, directora de la organización Colombia Diversa que defiende los derechos de las personas LGBTI (lesbianas, gais, bisexuales, trans e intersexuales), aseguró que ya fue presentado un informe ante la Comisión de la Verdad con relatos de víctimas del conflicto armado pertenecientes a esta población, en el que se evidencia que hubo discriminación.

Sánchez dijo que no se trata de hechos aislados en medio de la situación de violencia que ha vivido el país por décadas y buscan que se visualice esa problemática y se implementen acciones en pro de las personas afectadas y discriminadas, como el primer paso de su reparación.

Asimismo, la directora afirmó que este fue un ejercicio bastante complejo teniendo en cuenta que las historias se tratan sobre vulneraciones y sexualidad, por lo que hay temor en quienes cuentan sus propias vivencias de violencia.

«Había casos de trabajos forzados para corregir la feminidad en los hombres, hubo violencia sexual, por supuesto, hubo control de los cuerpos, de los horarios, de las relaciones de pareja. Hubo también desplazamiento, homicidios», dijo.

«Se comparten muchas de las formas de violencia contra otras poblaciones en el conflicto: las mujeres, la población afro, los campesinos, pero en general el patrón es la discriminación. Lo que queremos poner como motivación de esa violación de los DD.HH. es la discriminación«, añadió.

Sánchez indicó que «primero, fueron todos los actores armados, tanto paramilitares como Ejército y guerrillas. Hay diferencias regionales; por ejemplo, en dónde hay más narcotráfico o control social y político de la guerrilla. Esto genera actos distintos».

Adujo, además, que una buena forma de reparar a las víctimas de la violencia, quienes hacen parte de esa población. Es que se conozca qué pasó en el conflicto y por qué se dieron los hechos de esa forma.

«Este informe es significativo justamente porque las víctimas en primer lugar quieren que los victimarios les digan qué paso y por qué pasó esto. Ese sería el primer acto de reparación y reconciliación», afirmó.

«Hay sanciones para quienes no digan la verdad y esperamos que la JEP también reconozca ese patrón o incluso pudiese pensarse en un caso nacional de violencia contra todas las formas de la sexualidad, incluida la violencia sexual contra las mujeres y la violencia reproductiva«, sentenció.

Finalmente, la directora de Colombia Diversa aseguró que se deben dar avances en cuanto a la visibilización de esas víctimas del conflicto armado, ya que se debe dar un enfoque diferencial porque los enfoques de la violencia fueron distintos.

Fuente: https://www.rcnradio.com/colombia/visibilizar-victimas-lgtbi-del-conflicto-es-el-inicio-de-la-reparacion-colombia-diversa

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“Golpes no, cariño sí”: el llamado para que el castigo físico se prohíba cuanto antes

Por: Semana Educación

El castigo físico quedó a un paso de ser prohibido, lo que preocupa a algunos padres por considerar que limita su autonomía. Ángela Rosales, directora de Aldeas Infantiles SOS Colombia, organización que apoya esta ley, explica por qué no se debe criar a ‘correazos y palmadas’.

“Si quieres ciudadanos buenos, cría niños felices”, decía el famoso escritor británico Óscar Wilde. Para que los niños y niñas sean felices, tenemos que librarlos de la violencia y el maltrato.

Un paso adelante en ese camino es la aprobación del proyecto de Ley contra del castigo físico, humillante y denigrante contra niños, niñas y adolescentes, que actualmente se debate en el Senado.

Una ley de ese tipo se vuelve tan necesaria cuando la violencia contra los niños y niñas es una situación normalizada en muchas familias. Según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, 2018) el 64 % de los niños y niñas menores de 15 años en América Latina experimentan regularmente algún tipo de disciplina violenta y casi 1 de cada 2 niños y niñas experimentan el castigo físico.

En Colombia, las leyes para proteger a los niños y niñas existen, pero son insuficientes. Tanto así que los indicadores de violencia infantil crecen año tras año. La Constitución en su artículo 44 establece la vida, la integridad física y la salud como derechos fundamentales de los niños, señalando que serán protegidos de toda forma de abandono y violencia física o moral. También, el Código de Infancia y Adolescencia habla de la protección de los niños y niñas, aunque no es clara la prohibición del uso de la violencia.

En concordancia, el proyecto de Ley contra el castigo físico contiene lo que se conoce como ACCIONES AFIRMATIVAS, que se utilizan en el mundo entero para lograr la igualdad y disminuir los índices de violencia contra determinados grupos poblacionales, como se hizo, por ejemplo, a través de la Ley 1257 de 2008 en favor de las mujeres.

Más allá de lo que existe en la norma, hay suficiente evidencia científica que muestra el daño que este tipo castigo hace en la vida del niño, no solo a corto, sino a largo plazo. Así, las repercusiones negativas del castigo físico no se limitan a la niñez, sino que la persona las vive aún en la adultez. El castigo físico constituye una violación de los derechos del niño y la niña, atropellando su dignidad humana e integridad física, y en muchos casos, poniendo en peligro su vida. A pesar de constituir una práctica común en muchas familias, que consideran que la educación requiere de violencia, en definitiva, los castigos físicos y humillantes producen daños emocionales, baja autoestima, resentimiento, rabia, miedo, sentimientos de tristeza, soledad y abandono, y les enseña que la violencia es la forma adecuada para resolver conflictos.

Los niños y niñas no comprenden cómo a quienes más aman es a quienes más deben temer y terminan por asociar el amor con el dolor. Por tanto, las evidencias científicas son un llamado al Estado, las familias y la sociedad civil en su corresponsabilidad, para que comprendan la necesidad de tomar medidas preventivas y legales.

Por estas y otras razones, el articulado que defendemos no es para limitar, recriminar o castigar a los padres o madres. Por el contrario, sus derechos, sus deberes y su autonomía son respetados. Lo que se busca es impulsar toda una estrategia pedagógica de transformación cultural, mediante la cual, padres, madres y cuidadores puedan contar con herramientas para la crianza sin violencia. Precisamente, una crianza positiva, a través de la cual, los padres y madres amen a sus hijos e hijas por lo que son y no por lo que hacen, y así se lo expresen. Para ello, se valen de la comunicación, la reflexión y el apoyo emocional como los principales medios educativos. Sin duda, la crianza positiva también establece normas y reglas para la convivencia familiar, mismas que son explicadas clara y sencillamente a niños y niñas, y que se cumplen de manera consistente. En muchos países hay generaciones que han sido criados sin violencia, y constituyen sociedades más pacíficas.

Ya es hora que la violencia contra los niños y niñas deje de ser normalizada en nuestro país y pasemos a formar parte de los 56 países a nivel mundial que ya han adoptado este tipo leyes, en concordancia con las obligaciones internacionales de protección de los niños y niñas. Existen formas positivas de enseñar, corregir o disciplinar a los niños, que son mejores para su desarrollo y que contribuyen a forjar unas relaciones basadas en la confianza y el respeto mutuo. Este tipo de leyes fortalecen el rol de la familia, y dan un lugar preponderante a las relaciones positivas entre padres e hijos. Claro, este cambio depende de que los adultos estén dispuestos a salir de sus formas aprendidas de relacionamiento con los niños, para empezar a mirarlos desde el respeto y los consideren prioritarios. Estamos ante un escenario en donde muchos que vivieron la violencia y hoy la justifican, deben hacer conciencia para dar una oportunidad a una niñez sin golpes.

Es evidente que la educación genera desarrollo, por tanto, familias más educadas en una crianza positiva serán capaces de desarrollar mejores niños y niñas y, a futuro, una mejor sociedad, respetuosa de los derechos humanos de los niños y niñas. Golpes, no. Cariño sí.

Fuente: https://www.semana.com/educacion/articulo/golpes-no-carino-si-el-llamado-para-que-el-castigo-fisico-se-prohiba-cuanto-antes/202027/

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Colombia: Por desconfianza en las instituciones las mujeres y la población LGBTIQ no denuncian hechos de violencia

América del Sur/Colombia/11-10-2020/Autora: Ariadne Agamez Lombana/Fuente: www.publimetro.co

Las mujeres y la población LGBTIQ no denuncian la violencia de la que son víctimas por temor a la revictimización y a la dificultad a tener justicia.

La revictimización y la dificultad del acceso a la justicia son las principales razones. Por desconfianza en las instituciones las mujeres y la población LGBTIQ no denuncian hechos de violencia.

Las mujeres y la población LGBTIQ no denuncian la violencia

De acuerdo con la Personería de Medellín durante lo corrido del 2020 se ha registrado un aumento en el número de llamadas para reportar hechos asociados a la violencia intrafamiliar.

Por tal motivo, la Personería creó el Observatorio de Mujeres y Diversidades Sexuales y de Género.

Las acciones de seguimiento, vigilancia y atenciones del Observatorio estarán orientadas bajo cinco líneas estratégicas: violencias y acceso a la justicia; salud, derechos sexuales y derechos reproductivos; trabajo y autonomía económica; educación y equidad y mujeres, sectores sociales LGBTIQ y participación política”, indicó Lina María Giraldo, coordinadora del Observatorio de Mujeres y Diversidades Sexuales y de Género de la Personería de Medellín.

Las cifras son contundentes y con corte al 2 de octubre de 2020, según el informe de la Alcaldía de Medellín, en la ciudad se han reportado 4978 casos de violencia intrafamiliar contra las mujeres, lo que representa el 74% de los casos.

En total se han reportado 6772 casos de violencia intrafamiliar, siendo las comunas de mayor incidencia: Manrique, con 788 casos, y Robledo, con 612.

«Si se observan de cerca la cifras de incidentes reportados en la Línea 123 Línea Mujer, los datos reflejan un aumento significativo en la búsqueda de ayuda por parte de las mujeres. Lo que se puede establecer en la lectura de los datos es una disminución en las denuncias que llegan a las Comisarías de Familia, lo que refleja las barreras o dificultades para el acceso a la justicia relacionadas en su mayoría con las realidades propias del confinamiento», señaló Giraldo.

La población LGBTQ

Esta población también demuestra sentir desconfianza en las instituciones del Estado. Es por esto que las mujeres y la población LGBTIQ guardan silencio frente a las agresiones de las que han sido víctimas.

Algunas autoridades no tienen una perspectiva sobre las violencias basadas en género, lo que no les permite brindar una atención clara y pertinente a quienes en un momento determinado tomen la decisión de interponer una denuncia”, agregó la funcionaria.

Fuente e Imagen: https://www.publimetro.co/co/noticias/2020/10/09/desconfianza-las-instituciones-las-mujeres-la-poblacion-lgbtiq-no-denuncian-hechos-violencia.html

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La protesta es un derecho que no debe prohibirse ni limitarse

Por: Manuel Humberto Restrepo Domínguez

 

El 14 de noviembre del año de 1152 A.C, ocurrió una protesta civil reconocida como la primera huelga de la historia (ngenespañol.com; otras fuentes datan el año 1166), contra el reinado de Ramsés III. Sesenta artesanos se negaron a realizar su trabajo en el Valle de los reyes y se movilizaron ante el faraón gritando que tenían hambre y sed, que no tenían vestidos, ni pescado, ni legumbres. En 1886 más de 350.000 trabajadores en las calles de Haymarket (Estados Unidos) convocados por la Federación del Trabajo denunciaron las jornadas de trabajo de 14 horas y reclamaron por salarios y bienestar. Allí por primera vez ocurrió un final con disturbios, luego que un “desconocido” arrojara una bomba matando un policía, lo que degeneró en una masacre con resultado de 38 obreros asesinados con las armas del estado, más un centenar lesionados y el ahorcamiento de varios dirigentes sindicales al año siguiente, según el dictamen de un cuestionado proceso judicial.

      En enero de 1905 obreros y campesinos unidos con la clase media rusa protestaron contra el imperio del Zar Nicolás II, hubo tomas de tierras y actos de desobediencia que terminaron con una marcha pacífica que derivo en el “domingo sangriento” provocado con las armas del estado, lo que apresuró la capitulación del Zar (semana.com, 2015). Del final del siglo XX se destacan las huelgas asociadas a líderes, Walesa en Polonia en 1980, le creo fisuras al gobierno comunista de entonces y lo llevó a la firma de un acuerdo para el reconocimiento de derechos consagrados en las convenciones de la OIT y; Lula Da Silva, con los obreros metalúrgicos reclamó por sueldos y garantías, fueron protestas duramente reprimidas con las armas del estado, pero la capacidad organizativa triunfó con la creación del partido de los trabajadores (PT) que en las urnas convirtió a Lula en presidente.

       La protesta es una facultad de la sociedad y la huelga un derecho de los trabajadores, ambos insertos en la declaración de derechos del hombre y del ciudadano de 1789, en la que los ricos y poderosos se reservaron la propiedad y los excluidos del poder la rebelión, civil para demandar garantías y armada para acabar la tiranía. La huelga y la protesta social llegaron mezcladas en 1948 a la declaración universal de derechos humanos y cumplen la misión de indicar el grado de respeto y responsabilidad del estado con los derechos humanos, pero a la vez ponen en evidencia la fortaleza de las instituciones democráticas para evitar y prevenir el uso abusivo o violento del poder público contra sus ciudadanos (manifestación pacífica, civiles DDHH, 2014).

       Protesta y huelga son constitutivas de la libertad y están amparadas por estándares internacionales tales como que los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a la manifestación pacífica o que la protesta no requiere autorización previa por ser expresión de inconformidad, insatisfacción, indignidad o resistencia ante políticas o conductas de los poderes públicos que afectan derechos. Son prácticas de restricción indebidas por parte del estado la prohibición, imposición de obstáculos, exigencia de requisitos innecesarios, penalizar o enmarcar en delitos de terrorismo o desestabilización, como también expedir leyes para dificultarla, tipificarla como delito, interferirla, censurarlas o ejercer amenazas físicas o psicológicas contra sus participantes o presumir de antemano su carácter desfavorable o descalificarlas como actos de desorden público o justificar una respuesta violenta de los cuerpos de seguridad. Prohibirlas es ilegitimo e ilegal, incluso inmoral. Por eso es reiterativo pero necesario repetir mil veces, que los derechos son de los pueblos y la obligación de ofrecerles garantías, respetarlos y hacerlos respetar es del estado sin perder su neutralidad.

       En Colombia la protesta esta consignada en el art. 37 de la constitución, que la reconoce como un medio legitimo para la defensa, construcción y reivindicación de derechos. En ella se integran derechos de reunión, asociación, expresión y movilización y la huelga derechos laborales, a la vida, la dignidad y el bienestar. Protesta y huelga son parte de históricas conquistas sociales y aunque sean afectadas con disturbios ocasionados por “desconocidos” e intervenidas con «brutalidad aprendida”, son una herramienta de dialogo, un punto de llegada luego de haber agotado otras vías de solución.  En ningún disturbio esta permitida la fuerza utilizada en la guerra contra enemigos en combate y si ocurre debe ser juzgada a la luz de los derechos humanos y donde hay conflicto armado con las reglas del DIH, que implican la no prescripción de los delitos cometidos con las armas del estado.

       Para la OIT la huelga y la protesta son medios legítimos fundamentales de los que dispone la ciudadanía para promocionar y defender sus intereses económicos, sociales o culturales.  “La encuesta Global de la CSI 2013, reveló que más del 90% de los ciudadanos defiende los derechos y el 99% de los ciudadanos apoya el derecho a la huelga para defender mejores salarios, condiciones de trabajo y salud y seguridad” (ituc-csi.org) y el pacto internacional de derechos económicos, sociales y culturales de 1966 suscrito y firmado sin reservas por Colombia el 29 de octubre de 1969, obliga al estado y al gobierno a respetar y hacer respetar los derechos allí consignados y lo conmina a establecer mecanismos para su protección y garantía y a no privar al pueblo de sus medios de subsistencia.

      Las ultimas protestas sociales y la del próximo 21 de octubre de 2020, reclaman del estado y del gobierno garantías para proteger y realizar los derechos humanos y en especial el derecho a vivir, a no ser asesinados, a un nivel de vida adecuado con alimento, vivienda, agua, salud, educación, empleo, seguridad, paz y dignidad y una mejora continua de las condiciones de existencia. Pretender reglamentar, condicionar, sujetar o “exterminarla” degenera el orden democrático. Las demandas –cada una en su contexto- son similares a las que enfrentó el Faraón Ramsés III, hace 1800 años y por lo que se conoce, sin ocurrir en democracia, la permitió sin censura ni uso de las armas de su reino para disolverla, ni de amenazas para disuadirla. Las huelgas y protestas son una ganancia común, son garantías de convivencia humana para vivir con derechos, están amparadas en la carta internacional de derechos humanos, la declaración universal de derechos humanos y el pacto internacional de derechos civiles y políticos y pretender prohibirlas o limitarlas, sería irracional, ilegal e ilegitimo.

P.D. Resulta “inconcebible” la incitación al odio e inequívoca afectación de la salud mental en época de pandemia, la aparición de grandes vallas en defensa de “Uribe Libre”, con letreros como: “No permitamos que el comunismo y la izquierda se tomen el estado”. Cada letra incita a otro rio de sangre…

Fuente: Rebelión

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¿Cuántos colegios han reabierto en Bogotá?

América del sur/Colombia/semana.com

Desde la primera semana de septiembre, la Alcaldía anunció el proceso para que los más de 1.700 colegios privados y 400 públicos de la ciudad retornaran a la presencialidad. A la fecha, el regreso de los estudiantes ha sido a cuentagotas.

“La discusión no es si los colegios quieren o no volver a clase, sino si realmente pueden porque tienen las condiciones. Algunos querrán volver y no podrán cumplir los protocolos, y otros sí podrán hacerlo”, dijo en su momento Fernando Vita, coordinador Nacional de la Mesa de Educación Privada, cuando el Ministerio de Educación publicó los protocolos para la reapertura de las instituciones educativas.

Lo dicho por Vita hoy toma más vigencia que nunca, dado que a pesar de que en todo el país los colegios ya pueden iniciar con sus planes de reapertura, la realidad es que solo una inmensa minoría ha podido hacerlo.

Por ejemplo, en Bogotá, la Alcaldía dispuso desde la primera semana de septiembre un sitio web para recibir las propuestas de colegios y jardines que estuvieran planeando retomar la presencialidad. Hoy, un mes después, es claro que son muy pocas las instituciones educativas que han dado ese salto.

En el caso de los colegios y jardines privados, en la capital hay registrados 1.740 en los que estudian cerca de 530 mil jóvenes. De ese total, 121 instituciones manifestaron su intención a la Alcaldía de reabrir. De ellas, 92 culminaron el proceso y tienen el aval para hacerlo, pero solo 71 ya lo hicieron.

En el caso de las 399 instituciones públicas, que acogen a más de 790 alumnos, ninguna ha iniciado formalmente el proceso para reabrir. Cabe recordar que el retorno del sector público enfrenta un desafío adicional: la Federación Colombiana de Educadores (Fecode) se mantiene en su posición de “no a la presencialidad” por considerar que no existen las garantías para un retorno seguro.

El hecho de que pocas instituciones se la jueguen por la presencialidad tiene dos factores principales: primero, el miedo de los padres (solo un 12 por ciento está dispuesto a enviar a sus hijos a estudiar presencialmente), y, segundo, aplicar los protocolos de bioseguridad no es una tarea barata.

Carlos Ballesteros, presidente de la Confederación de Asociaciones de Padres de Familia, coincide en que son pocos los colegios en capacidad de cumplir con los protocolos que den completa tranquilidad a las familias. “Colegios campestres o de estratos altos no tendrán problemas, pero ¿cómo hará la inmensa mayoría de colegios?”, se cuestiona.

Martha Castillo, presidenta de la Confederación Nacional de Asociaciones de Rectores y Colegios Privados (Andercop), dice que actualmente la mora en el pago de matrículas de esa asociación, que aglomera a cerca de 1.000 instituciones, se acerca al 75 por ciento y la deserción de estudiantes llega al 20 por ciento, lo que hace imposible hacer las inversiones para reabrir. “La inmensa mayoría de colegios privados del país son de estratos medios, que son los más afectados por la pandemia”, dice.

Los que ya reabrieron

Camilo Camargo, rector del Colegio Los Nogales (mejor del país por el ranking Col-Sapiens), explicó que los primeros días de presencialidad se están centrando en que los niños se familiaricen con los protocolos de bioseguridad. Reconoció que para cumplirlos el colegio tuvo que hacer inversiones adicionales, todo con el fin de que los padres tengan tranquilidad.

En Bogotá, las instituciones pueden funcionar máximo en un 35 por ciento de capacidad, razón por la que la institución se acomodó al modelo de alternancia. Explicó que en el retorno a la presencialidad se tuvo en cuenta que el 80 por ciento de los padres de los cerca de 1.000 alumnos estuvo de acuerdo con el regreso a las aulas.

Por su parte, Juan Pablo Aljure, presidente del colegio Rochester, primero del país en reabrir, explicó que obtuvieron el aval para funcionar presencialmente en plena pandemia gracias a una inversión de 400 millones de pesos en 24 baterías de puntos de lavado, desinfección y secado de manos con sensores inalámbricos, cámaras de reconocimiento facial, verificación de temperatura y señalización en todo el colegio. Además, adecuaron los salones para albergar 16 estudiantes por clase con una distancia de dos metros entre cada uno.

Finalmente, el rector Camargo entregó las cinco acciones fundamentales que cualquier colegio que quiera reabrir debería aplicar.

  • Hacer el diagnóstico de signos y síntomas en toda la comunidad educativa.
  • Lavado de manos cada 2 o 3 horas; cuando no hay posibilidad de agua potable, usar gel antibacterial con las especificaciones adecuadas.
  • Uso de tapabocas.
  • El distanciamiento físico, la distancia social. Entre uno y dos metros de distancia con otras personas.
  • Limpieza y desinfección.

Fuente: https://www.semana.com/educacion/articulo/cuantos-colegios-han-reabierto-en-bogota/202059/

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