Page 27 of 2454
1 25 26 27 28 29 2.454

Mundo – Humanidad: de la evolución a evitar la extinción

Humanidad: de la evolución a evitar la extinción

Los científicos en general suelen tomar como punto de inicio de la historia de la humanidad unos 65 millones de años atrás, con la aparición de los primeros primates. De todas formas, el último ancestro común entre el ser humano y el chimpancé, existió hace alrededor de 6 ó 7 millones de años.

Si bien los límites no son exactos, ya que durante mucho tiempo han ido conviviendo diferentes tipos de homínidos, la primera especie del género Homo apareció hace unos 2.5 millones de años y se dispersó gradualmente por Africa, Europa y Asia. En sus primeras manifestaciones se le conoce como Homo habilis, era robusto, ágil, caminaba erguido y tenía desarrollada la capacidad prensil de sus manos. Sabía usar el fuego, pero no producirlo, fabricó algunas herramientas y se protegía en cuevas. Vivía de recolectar semillas, raíces, frutos y ocasionalmente comía carne.

La especie que se desarrolló posteriormente a esta se denomina Homo erectus, hace 1.5 millones de años. Avanzó a una nueva etapa en la fabricación de herramientas llamada achelense y aprendió a conservar el fuego. Esta especie duró diez veces más tiempo de la que lleva sobre la tierra el ser humano moderno.

Una o más subespecies del Homo erectus evolucionaron hasta llegar al Homo sapiens neanderthalis (el hombre de Neanderthal), cuyos restos más antiguos tienen una edad de alrededor de 250 mil años. El hombre de Neaderthal desapareció bruscamente, y su lugar fue ocupado por los hombres modernos, hace unos (apenas) 50 mil años.

Por lo que podríamos decir que al menos durante unos cuantos millones de años de constante evolución, salvo por el uso de algunas herramientas rudimentarias y el manejo del fuego, los seres humanos hemos tenido un comportamiento muy similar al de otras especies animales.

Pero en los últimos 35 a 50 mil años, un breve lapso de tiempo en la historia, todo cambió. Esa capacidad de crear herramientas, se tradujo en la utilización de algunas de ellas como armas, el manejo del fuego también comenzó a tener nuevos usos y luego, poco a poco dejamos de ser nómades, recolectores de frutos y cazadores, para construir los primeros asentamientos, en los que la agricultura tuvo un papel preponderante.

Fue en esa etapa probablemente en la que comenzamos el camino del dominio de la naturaleza, ya no sólo sirviéndonos de los recursos que ponía a nuestra disposición de forma natural, sino modificándola para nuestro beneficio. Ya no sólo adaptándonos, sino adaptándola.

Los asentamientos fueron creciendo, a la agricultura se sumó la ganadería y el trueque o intercambio fue mutando a comercio. Históricamente ha habido muchos tipos diferentes de dinero, desde cerdos hasta conchas marinas. Sin embargo, el más extendido sin duda a lo largo de la historia ha sido el oro, hasta que hace unos 2700 años, comenzaron a acuñarse las primeras monedas, también de ese metal y de plata, y luego aparecieron los primeros bancos. Hasta allí, existía en el ser humano seguramente la ambición de poder, pero apareció una nueva ambición, la económica.

Luego de varios millones de años de una “natural evolución”, podría decirse que con un mínimo impacto ambiental, comenzamos a divorciarnos de la naturaleza. Durante estos pocos miles de años que nos anteceden, hemos rápidamente ejerciendo más y más poder, dominándola, adaptándola a nuestras necesidades, utilizándola y modificándola. Y especialmente desde el inicio de la revolución industrial, hemos pasado del uso, al abuso.

siendo tal el abuso que el ser humano está haciendo de la naturaleza, que hemos modificado el clima del planeta entero. Y eso en tan sólo unos segundos en términos de historia de nuestra especie.

La ambición económica, trajo aparejada la exacerbación del egoísmo, y del individualismo. Esos “nuevos valores” dieron lugar a la organización de la sociedad bajo sistemas economicistas, que rigen desde hace unos pocos cientos de años y hasta nuestros días, el destino de todo ser vivo sobre el planeta.

Estamos inmersos, social y culturalmente en un modo de vida que se encuentra centrado en la posesión, en la propiedad privada, en el dinero. Un modo de vida enfrentado a la naturaleza, que la degrada a pasos agigantados y que está reduciendo muchísimo las posibilidades de supervivencia de las próximas generaciones.

Nos estamos quedando sin tiempo para modificar el rumbo, estamos por estrellarnos y difícilmente podamos evitarlo. No quedan más opciones ya que un cambio radical en nuestro modo de vida, especialmente del 20 ó 30% de la población del planeta, que es la que está consumiendo el 80% de los recursos.

La mayoría de las personas que pertenecen a ese 20 ó 30% del que hablamos, son medianamente consientes de que nos encontramos ante una crisis ambiental que puede ser terminal. Pero el sólo ser consientes del problema, evidentemente no es suficiente. Y eso se debe a que por un lado ellos pueden satisfacer ampliamente todas sus necesidades, lo que les ofrece una comodidad de la que difícilmente alguien decidiría salir por su propi cuenta. Y por otro a que nuestras sociedades están constituidas de tal forma que son muy pocas las posibilidades concretas, de vivir de una forma más armónica con la naturaleza, sin que eso signifique exponernos a riesgos de todo tipo.

No existen prácticamente opciones a tratar de mantenernos amparados bajo la presunta (y falsa) seguridad que nos ofrece el sistema. No existen prácticamente planes desde los gobiernos del mundo, para modificar esa tendencia a permanecer inertes ante el desastre que se avecina. No surgen desde abajo, o no se les dan el espacio suficiente, ni apoyo económico o político a las propuestas y proyectos verdaderamente revolucionarios, que generen una profunda modificación de los paradigmas actuales.

Entonces, puestos entre la espada y la pared, más pronto que tarde, tendremos que elegir. Ha pasado ya el tiempo de quedarnos quietos, esperando soluciones mágicas. Una nueva era debe comenzar muy pronto, fundada sobre la reconciliación del ser humano con la naturaleza y un cambio radical en los valores que exacerba este sistema, hacia la cooperación, la solidaridad, la ética y tantos otros que hemos postergado como especie.

Una nueva era debe imponerse, si realmente decidimos evitar la extinción.

Por Ricardo Natalichio

Fuente de la Información: https://www.ecoportal.net/temas-especiales/humanidad-extincion/

Comparte este contenido:

República Dominicana: ¡J´accuse!… El 4% del PIB destinado a la educación está cayendo en saco roto

¡J´accuse!… El 4% del PIB destinado a la educación está cayendo en saco roto

“Yo acuso” (J´accuse) a quienes, pudiendo defender el 4%, se convierten en cómplices de quienes lo usan y, a veces, lo usurpan como si se tratara de un “saco roto” o un botín sagrado.

Los que lucharon  por el aumento del presupuesto a la educación a un 4% del PIB (entre los cuales me encuentro) jamás imaginamos que este “milagro”, que este logro, que esta conquista, iba a crear tantas desgracias al sistema educativo dominicano.

Como “ladrones que asechan en la noche oscura”, los avivatos del sector público y del sector privado fueron y van “por lo suyo”, que no es de ellos, sino del pueblo dominicano ya que proviene de los impuestos y otros ingresos públicos que pagamos. ¡J´accuse!

Aunque en honor a la verdad, hay que reconocer que las autoridades educativas actuales vienen defendiendo el buen uso del “milagroso 4%”, aunque no llega a la aplicación del 4% completo, excepto en el 2021 y en el 2023.

Amigos y enemigos del gobierno, de dentro y de fuera del mismo, le dañan la percepción socio-política en materia educativa. Contaminan el deseo y el compromiso de transparencia del Sr. presidente Luis Abinader, celoso vigilante de la transparencia en el uso de MM y de centavos. ¡Pruebas y evidencias sobran!

Como si se tratara de una piñata “de muchos colores”,  llena de cientos de millones de pesos (US$); suplidores, instituciones “becadas”, (entre ellas universidades públicas y privadas, la ADP, “embotellados”, “asesores” y otros muchos suplidores “suertudos” (menos la Asociación de Editores de República Dominicana, y otros pocos). Los poseedores de una suerte trampeada van a cobrar (o le “transfieren”) su “loto cada mes”, tratando de evitar la foto que se convierte en  evidencia de la gran suerte tramposa de los agraciados (o su antónimo)! J´accuse!

La ceguera y sordera educativa y social es tan tal que algunos, incluyendo políticos y candidatos, llegan a decir que el problema de la Educación consiste en “tiene demasiado dinero”, que es un ministerio pobre que se sacó la lotería (consignado en una ley que hay que revisar urgente), y que según dice el dicho popular “el pobre que se saca la lotería vuelve a ser pobre”. ¡J´accuse!

Y en los gastos e inversiones del MINERD, que deberían ser “sensatizados” por el Consejo Nacional de Educación (CNE), está ausente su verdadera labor de centinela, de veedor del 4%, Hay dispendios que no se le pueden achacar al Sr. presidente. Que son fallas o distracciones del MINERD y del Consejo Nacional de Educación. Solo 5 ejemplos:

  • Inversión en autobuses para estudiantes. Que dicho sea de paso es un programa virtuoso. Sólo en San José de Ocoa hay cuatro autobuses, pese a ese pueblo, bello y trabajador, solo tiene cuatro calles (llenas de gloria). 
  1. Desayuno y comida escolares. La prensa recoge, de todas las administraciones del MINERD, docenas de casos de envenenamiento causado por mala manipulación de alimentos. Uno de los programas más controversiales, sin que las controversias sean reflexionadas por un “think tank”: muchos niños llevan su propia merienda. Los estudiantes comen sentados en el suelo, no hay inversión en comedores. Los estudiantes comen y desayunar sin desarrollar competencias sociales y buenos hábitos. No hay mesas, ni servilletas, ni tenedores. Y en este renglón hay muchas acusaciones más.
  1. Formación de maestros. Pese a contratar, mediante “becación” a 16 universidades que tienen la carrera de Pedagogía, la formación de profesores por parte del MINERD es de baja calidad. Allá adentro tampoco tienen “las cosas claras” sobre lo que van a exigir a los “suplidores pedagógicos”. Mientras los avances en la formación docente habla de STEAM, el MINERD todavía habla de STEM (que no es la misma cosa, la A hace la diferencia). No se habla de investigación-acción en el aula, Filosofía para niños, creatividad, niños con habilidades de superdotados, aulas inclusivas, Enfoque basado en Competencias, Aula 4.0, Maestro 4.0, Inteligencias múltiples, Objetivos de Desarrollo Sostenible y otras obligadas innovaciones que deben asimilar y aplicar los docentes del siglo xxi.
  1. Libros de textos vs. Computadoras. Ignorando el sabio equilibrio de utilizar ambos medios proporcionalmente, un exministro amenazó con “quemar libros” para llenar las aulas de computadoras, sabedor de que ni habría suficientes computadoras para los estudiantes y los profesores y que muchos de ellos no sabían usarlas (analfabetos digitales). Libros de textos: ¡cuántos crímenes se cometen en tu nombre! ¡Todo niño tiene derecho a tener un buen libro de texto! Se le otorgó a 15 universidades y Ongs, sin licitación y sin capacidad para elaborar libros de texto, “el privilegio excesivamente bien pagado” para elaborar los libros de texto para las escuelas públicas con el doctor el doctor Manuel Núñez a la cabeza. ¡Tremenda aberración, los hechos hablan!
  1. Construcción de escuelas: Muchas las construidas, muchas más por construir. ¡Sin calidad, sin imaginación, infraestructura poco moderna, con alambres de púa, desvinculadas de la comunidad, sin comodidades para los docentes y los estudiantes, sin huertos (hidropónicos) y muchísimos defectos más (oportunidades de mejora, ¡No tienen nada que envidiar a una cárcel moderna de las construidas aquí!

Con estas “acusaciones” no busco enrostrar irresponsabilidades no solicitadas o denostar al gobierno, al MINERD o a la Escuela Pública” (estudié en escuelas públicas, que eran diferentes). “Yo acuso” (J´accuse) a quienes, pudiendo defender el 4%, se convierten en cómplices de quienes lo usan y, a veces, lo usurpan como si se tratara de un “saco roto” o un botín sagrado.

Deseo que el 4% nos permita “crear una escuela pública de calidad” a cual manden sus hijos todos los funcionarios públicos, todos los funcionarios del MINERD y todos hijos de los maestros que componen la ADP (cosa que no sucede ahora).

Una escuela pública donde los hijos de los trabajadores y los pobres no reciban una educación de segunda o tercera categoría, una escuela pública democrática y de calidad garantizada para los que tienen menos.

Una escuela  pública tan efectiva y atractiva que evite que el 50% de los egresados del bachillerato no abandonen los estudios y se queden en las calles con las esperanzas acribilladas por la exclusión, convertidos en Ni Nis y en candidatos a la delincuencia.

Comparte este contenido:

UNICEF: Hacia la erradicación de la poliomielitis

Hacia la erradicación de la poliomielitis

Estamos más cerca que nunca de erradicar la poliomielitis, pero los brotes y los obstáculos aún no han desaparecido

La poliomielitis, la enfermedad viral mortal que llegó a ser la causa principal de la parálisis de una gran cantidad de niños en todo el mundo, está a punto de ser erradicada. Desde 1988, el número de niños con poliomielitis ha disminuido un 99%.

UNICEF ayuda a vacunar contra la enfermedad a más de 400 millones de niños de todo el mundo cada año.

Para eliminar por completo la poliomielitis, cada niño de cada familia debe estar vacunado: sin embargo, miles de niños siguen sin haber recibido la vacuna contra la enfermedad.

Además de las interrupciones de las campañas de vacunación debido a la pandemia de COVID-19, muchos de estos niños viven en zonas aisladas, frágiles y afectadas por conflictos, lo cual hace aún más difícil poder llegar a los niños para proporcionarles vacunas. Además, las poblaciones masivas de migrantes y refugiados, las discrepancias acerca de la calidad de las campañas de vacunación y la desinformación sobre las vacunas son otros factores que dificultan los esfuerzos para erradicar la enfermedad.

Debido al descenso de la cobertura de la inmunización infantil en todo el mundo, se ha producido un aumento de los brotes de poliomielitis y la enfermedad ha resurgido en países que llevaban décadas sin registrar ningún caso. Su propagación a escala mundial es una dura realidad que debe recordarnos que, hasta que no desaparezcan todas las formas de poliomielitis, los niños y niñas de todos los países siguen en peligro.

El mundo está a un paso de erradicar la poliomielitis, pero sigue habiendo grandes obstáculos que convierten esta etapa final en la más difícil.

Comparte este contenido:

Enfrentando los Retos Futuros de la Educación Secundaria

Enfrentando los Retos Futuros de la Educación Secundaria

La educación secundaria desempeña un papel crucial en la preparación de los estudiantes para la universidad, la carrera y la vida en general. Sin embargo, en un mundo en constante evolución, la educación secundaria enfrenta una serie de retos que deben abordarse para garantizar que todos los estudiantes tengan acceso a una educación de calidad que los prepare para los desafíos del futuro. En este artículo, exploraremos algunos de los retos más apremiantes que enfrenta la educación secundaria y analizaremos posibles soluciones para superarlos.

Adaptación al Cambio Tecnológico

Uno de los mayores retos para la educación secundaria es mantenerse al día con el rápido avance de la tecnología. A medida que la tecnología continúa transformando la forma en que vivimos, trabajamos y nos relacionamos, es fundamental que las escuelas secundarias integren de manera efectiva la tecnología en el aula. Esto puede incluir la adopción de dispositivos móviles, el uso de plataformas en línea para la enseñanza y el aprendizaje, y la incorporación de habilidades digitales en el currículo escolar.

Preparación para el Mundo Laboral

Otro desafío importante es preparar a los estudiantes para el mundo laboral. Esto implica no solo proporcionarles las habilidades académicas necesarias, sino también desarrollar habilidades blandas como el pensamiento crítico, la resolución de problemas, la comunicación efectiva y la colaboración. Además, es importante que los estudiantes adquieran experiencia práctica a través de pasantías, proyectos de servicio comunitario y otras oportunidades de aprendizaje experiencial que les permitan aplicar sus conocimientos en contextos del mundo real.

Promover la Salud Mental y el Bienestar

La salud mental y el bienestar son aspectos críticos de la educación secundaria que requieren una atención especial. Los adolescentes enfrentan una serie de desafíos emocionales y sociales durante esta etapa de sus vidas, y es importante que las escuelas secundarias proporcionen apoyo y recursos adecuados para ayudarlos a enfrentar estos desafíos. Esto puede incluir la disponibilidad de consejeros escolares, programas de educación sobre salud mental, y actividades extracurriculares que promuevan el bienestar físico y emocional de los estudiantes.

Preparación para los Desafíos Globales

En un mundo cada vez más interconectado, es importante que la educación secundaria prepare a los estudiantes para enfrentar los desafíos globales, como el cambio climático, la desigualdad económica y la migración. Esto puede implicar la integración de temas globales en el currículo escolar, la participación en proyectos de aprendizaje basados en problemas y la promoción de la conciencia global y la ciudadanía activa entre los estudiantes.

 

Fuente:https://www.redem.org/enfrentando-los-retos-futuros-de-la-educacion-secundaria/

 

 

Comparte este contenido:

Opinión | Aprender a través del amor (o de su ausencia)

Por: Andrés García Barrios

 

Decía Paulo Freire que “Nadie se salva solo, nadie salva a nadie: todos nos salvamos en comunidad”. Y para lograr su proeza, propone el gran pedagogo brasileño, esa comunidad tiene que ir primero a la escuela.

En artículos anteriores hablé del autodidactismo radical de personas que vienen al mundo en situaciones de dificultad extrema y que desde que nacen tienen que aprender a sobrevivir. Los retos que enfrentan ─decía yo─ son como los del ratoncito de la fábula, que cayó en una cubeta de leche y desesperado por salir, pataleó, sin saber que la leche se haría crema espesa y él podría impulsarse sobre ésta para salvarse. Igual que él, son muchos los que, en mayor o menor medida, enfrentan la vida como un reto de supervivencia, del cual son también muchos los que salen triunfantes (donde “salir triunfantes” no significa ni mucho menos crear condiciones cómodas sino simplemente, como digo, sobrevivir). Los que lo logran, empiezan una vida de duras lecciones, que otros más privilegiados enfrentarán mucho después, incluso ya de adultos.

Todos sabemos que entre los privilegios que se puede tener al nacer, el mayor de todos es llegar a un contexto de amor. Ser amado es el recurso básico, es decir, el que le permitirá a la persona aprovechar plenamente todos los que lleguen después, incluyendo el alimento (los trastornos alimenticios se generan en contextos en que la comida ─leche materna o cualquier otra─ llega al niño en medio de turbulencias afectivas).

Desde mi punto de vista ─y neurocientíficos como Antonio Damasio estarán de acuerdo conmigo─, es ese sentimiento vital el que, desde el momento de venir al mundo, nos indica nuestra situación en éste (situación favorable o desfavorable) y nos impulsa a hacer frente y  a abrirnos paso entre intercambios humanos, retos y peligros: la frase de Paulo Freire “aprendemos siempre” debe tomarse en sentido literal y aludir a un siempre que empieza con el nacimiento.

Cabe mencionar que una cosmología y una antropología un poco más radicales nos permiten fantasear que este sentimiento no sólo está en el origen de lo humano sino en el de todo lo existente. Según tal visión, una especie de esencia a la que podemos llamar amor, estaría también en el origen del universo. El rechazo inmediato que estas palabras pueden suscitar en algunos de mis lectores debe tomar en cuenta que no son arbitrariedades anticientíficas, sino que forman parte de reflexiones antiguas que no todos los científicos y filósofos actuales consideran superadas. Ciertamente la corriente fisicalista (que despacha en un dos por tres todo lo que suene a “alma”) se reirá de estas fantasías y se molestará de que las exprese aquí con tanta simpleza. Sin embargo, creo que este tipo de cosas deben decirse así, sin ambages ni complicaciones, en el entendido de que las argumentaciones que se puedan hacer en ambos sentidos serán una verdadera pérdida de tiempo y que la fe espiritual y la fe fisicalista se resuelven en no más de un par de palabras (“Dios existe” ─frase angular en la filosofía de Karl Jaspers, por cierto─ o “Dios no existe”). Extenderse más de eso carece por completo de sentido, a menos que uno encuentre gran satisfacción en discutir inútilmente hasta dejar pasmado al otro. Creo que lo más que se puede hacer es argumentar por qué nuestra fe (teísta o fisicalista, insisto) es legítima, en el sentido de que no hay ningún razonamiento que pueda desdecirla. Pero comprobar que uno tiene razón y que el otro está equivocado, es una cuestión estéril, como todo lo interminable (lamento que mis palabras no rindan homenaje al recientemente fallecido Daniel C. Dennet, uno de los Cuatro jinetes del apocalipsis ateo ─como ellos mismos se llaman─, incansable pensador que dedicó buena parte de su vida a razonar acerca de por qué para explicar este mundo no hace falta otra cosa que la física de lo inanimado).

Quizás menos estéril será afirmar que lo que todos buscamos día a día es aprender a orientar fructíferamente nuestro sentimiento vital, es decir a encaminarlo hacia un florecimiento personal, social y ecosistémico.

Hay personas que tienen la fortuna de nacer en nichos donde su amor encuentra tierra más o menos fértil, es decir, un contexto amoroso que los recibe con el pecho abierto, y en el que van adquiriendo de forma casi natural habilidades de comunicación, solidaridad y autopreservación, y otras que parecen mágicas como la intuición, el humor y la creatividad poética. Y digo que se adquieren de forma “casi natural” porque, aunque solemos creer que la experiencia amorosa se comparte por mera contigüidad (como si con tener en brazos al bebé se le “recibiera” plenamente), ese encuentro en realidad se lleva a cabo a través de señales de comunicación que indican al otro los caminos más confiables para el intercambio (son señales que transitan en ambos sentidos pero que en la madre pueden estar mejor estructuradas y funcionar ya como verdaderos ejemplos).

Es así como llegamos a un concepto de educación en el que madres/padres e hijas/hijos (y luego, por extensión, estudiantes y docentes) nos mostramos unos a otros, a través de ejemplos, los caminos que pueden llevarnos al florecimiento; es decir, nos enseñamos mutuamente las formas más eficientes de percibir y entender las circunstancias, aprovechar las oportunidades y enfrentar retos y peligros. Se trata, como digo, de una enseñanza mutua (¿quién negará que los hijos también enseñan a los padres, y los alumnos a los maestros?), en la que los que llevamos más tiempo en el planeta tenemos, sólo por veteranos, más ventajas que los que van llegando.

Ahora bien, esta bella perspectiva del intercambio amoroso no nos debe hacer olvidar a aquellos que, como el ratón de la fábula, nacen en condiciones de emergencia. No hay nada peor (todos lo sabemos) que un amor que está ahí para darse a manos llenas ─como el que trae consigo el bebé─, y que no es recibido. No se me ocurre otra metáfora que la del pataleo del ratón para ejemplificar de qué manera el bebé solitario salvaguarda su amor vital y lo irradia alrededor para ver si alguien le corresponde. Si el entorno es propicio, ese pataleo puede crearle una plataforma que lo salve para la vida. De ocurrir, su primera lección habrá sido ya, de entrada, no claudicar ni siquiera en las condiciones más difíciles. Sin embargo, no resulta trivial la gran desventaja que esta lección también trae consigo: por lo general, a un ser humano así, cuando crezca, será difícil convencerlo de la necesidad a veces vital de la derrota: pidámosle que se abra a la posibilidad del fracaso e intentará deshacerse de nosotros, incluso de forma agresiva y hasta con violencia.

Ciertamente, este radical autodidactismo, que nos hace fuertes pero desconfiados, no está inexorablemente destinado a perpetuarse y en algún momento puede abrirse a formas de enseñanza/aprendizaje que incluyan el amor a otros y de otros. Para que eso ocurra es necesario que grandes carencias y grandes privilegios se compensen unos a otros. Basta ver la magistral película Pena de muerte, con Sean Penn y Susan Sarandon, y dirigida por Tim Robbins, para descubrir cómo un sentimiento vital que se ha resguardado en las más oscuras sombras aprende a resurgir cuando alguien le tiende afuera los brazos para orientarlo y recibirlo. Ciertamente, quien se coloca en posición de orientador/receptor de alguien en carencia extrema, debe ser fuerte; pero si logra mostrarle una ruta confiable, tendrá por recompensa un encuentro vital que no se puede llamar sino renacimiento.

Nosotros ─como docentes y padres─ no tenemos que buscar encuentros tan radicales (de hecho, una buena opción sustituta es ver la película y conmovernos hasta el tuétano: se llama Dead man walking, en inglés). Sin embargo, sí podemos acudir a quienes tenemos cerca (hijos, alumnos), que por lo general sólo precisan de nuestra confianza para dar eso que tanto se reservan.

Me gustaría acabar este texto proponiendo una idea para otra película, ésta de fantasía. Trata sobre un ser que está perdido entre las más oscuras sombras y de una heroína que ─empoderándose de sus privilegios─ desciende hasta él para mostrarle el camino de vuelta. Al regreso, aquel ser soterrado y oscuro va mostrando su escondida belleza hasta emerger como un sol en la superficie. No se me escapa que el tema de esta película ya está muy visto; de hecho, creo que es el tema de todas las películas, aún más, de todo drama humano (a veces con las variantes de que el sol no logra salir y que la heroína ─o heroíno, o heroíne─ oscurecen junto con él). No creo que añadiría nada que el héroe y la heroína aparecieran no como personas individuales sino como una comunidad entera: el asunto también ha sido representado y está en el fondo de las historias, tal como empezamos a aceptar en esta era posmoderna: “Nadie se salva solo, nadie salva a nadie: todos nos salvamos en comunidad”, como decía también Paulo Freire.  ¿Añadiría algo que para lograr su proeza esa comunidad tuviera que ir primero a la escuela (como propone el gran pedagogo brasileño)? No creo: ¡ya lo han intuido tantas otras puestas en escena que empiezan con el pueblo preparándose para la hazaña!

Para mi guion, pues, tendré que conformarme con el tan traído y llevado arquetipo en que los seres humanos, necesitados de dar su amor a otros, pierden un día la esperanza y tienen que aprender juntos a recuperarla.

¡¿No les parece extraño que, después de tantos años de esfuerzo en soledad, ni los autodidactas nos salvemos de tan trillada verdad?!

Fuente de la información e imagen:  https://observatorio.tec.mx

Comparte este contenido:

El rol de la Inteligencia Artificial en la educación básica

Por: Melissa Guerra Jáuregui

Desde sus inicios en 1956, la Inteligencia Artificial (IA) ha revolucionado todos los campos científicos, tecnológicos e industriales. Sin embargo, poco se ha discutido sobre su despliegue en la educación básica, ya que el enfoque principal se ha puesto sobre el nivel medio y superior.

Es importante destacar que la implementación de esta tecnología en la educación básica va más allá del uso de apps o plataformas integradas en el aula, puesto que ésta ha reformulado los procesos de enseñanza-aprendizaje a un nuevo nivel, llevando a cambios importantes dentro y fuera del aula, destacando el diseño curricular y las competencias digitales.

A su vez, se deben tomar en cuenta las limitaciones y las repercusiones éticas del desarrollo e implementación de la IA a nivel básico, esto para que los derechos humanos de los niños y las niñas no sean trasgredidos.

La educación básica y la Inteligencia Artificial (IA)

Alfabetización digital

Uno de los términos clave para entender el rol de la IA en la educación a nivel básico es la alfabetización digitalde la cual se desprende otra en inteligencia artificial. De acuerdo con la UNESCO, la alfabetización digital se refiere a “la capacidad de acceder, gestionar, comprender, integrar, comunicar, evaluar y crear informaciones mediante la utilización segura y pertinente de las tecnologías digitales para el empleo, un trabajo decente y la iniciativa empresarial”.

Alfabetización en IA

Por su parte, la alfabetización/instrucción en inteligencia artificial (AI literacy) se define como la capacidad de interactuar asequiblemente con la IA mediante el aprovechamiento de herramientas, sistemas y marcos de la misma, con el fin de resolver problemas de manera efectiva y ética dentro de una amplia gama de contextos socioculturales. Otros estudios la definen como un conjunto de competencias que permiten evaluar, comunicar y colaborar de forma efectiva y crítica con esta tecnología.

Además, se destaca que la alfabetización en IA tiene tres elementos esenciales:

  1. La comprensión de las capacidades de esta tecnología.
  2. Su utilización para resolver problemas.
  3. Su aplicación en contextos socioculturales.

¿Por qué es importante la alfabetización?

Como principio ético, la inclusión de la alfabetización en IA expone la importancia de educar a las infancias y jóvenes para que estén informados, con el fin de que tomen buenas decisiones respecto al uso de la inteligencia artificial en sus vidas.

Algunos estudios sugieren que la alfabetización en esta tecnología es relevante para las niñas y los niños, puesto que gracias a esto se mejoran muchos aspectos del desarrollo infantil, por ejemplo, la teoría de la mente, la indagación, la creatividad y las emociones, así como la investigación colaborativa. Además, la implementación de herramientas con esta tecnología en las primeras etapas de las aulas de educación preescolar han demostrado efectos prometedores.

Además de ser end-users, los niños y las niñas necesitan un enfoque educativo diferente gracias a los avances en tecnología de los últimos tiempos. Sin embargo, diferentes estudios señalan que integrar su presencia en el currículo ha sido un tema desafiante, ya que implica cambios en la forma de enseñar y aprender, aunado a que existe poca investigación sobre esta en ambientes educativos de nivel básico.

Existen varias iniciativas que llaman a “tomar acción” ante la creciente necesidad de la educación básica por incluir la alfabetización en IA, lo cual implica el diseño, la fundamentación pedagógica, la implementación (es decir, quécuándo cómo), la evaluación, los objetivos, las competencias, la preparación docente, actualizaciones, etcétera.

La iniciativa “Cinco Ideas Principales en IA” (five big ideas in AI) fue propuesta por el trabajo conjunto de la Association for the Advancement of Artificial Intelligence (AAAI) y la Computer Science Teachers Association (CSTA). En esta se presentaron recomendaciones para la enseñanza de esta tecnología en la educación básica. Dicha iniciativa define lo que los estudiantes deben aprender sobre IA, robótica y machine learning (ML).

Otra iniciativa es el SEAME modella cual es una clasificación de alto nivel sobre conceptos y habilidades para categorizar recursos de aprendizaje de IA para la educación básica y la investigación.

¿Para qué enseñar con IA?

Se distinguen varias razones por las cuales la enseñanza con esta integración en educación básica es relevante:

  1. Conocer y comprender las competencias básicas de esta tecnología y utilizar sus aplicaciones es fundamental para que todas las personas se conviertan en alfabetizados en IA en el mundo digital actual.
  2. Las niñas y los niños deben estar capacitados para comprender, utilizar y evaluarla con un propósito determinado.
  3. Las infancias deben tener la capacidad de comprender sus funciones básicas, especialmente cuando en su experiencia cotidiana aparecen juguetes integrados con ésta.
  4. Las nuevas generaciones ya están creciendo con ella, resultando en un impacto en sus vidas.
  5. Se debe asegurar que su uso sea seguro y efectivo.
  6. La IA requiere una nueva forma de pensamiento.
  7. Se puede empoderar a las y los niños, mediante las oportunidades que brinda esta tecnología, para lograr o potenciar cambios.
  8. Se requiere una fuerza laboral capacitada en inteligencia artificial.

¿Cómo se puede enseñar con IA?

Hoy en día existe una línea difusa sobre cómocuándo y qué implementar en el quehacer educativo, puesto que, aunque existen plataformas y apps con integraciones de IA, eso no quiere decir que sean la totalidad de los cambios que se requieren para potenciar la calidad educativa a nivel básico con inteligencia artificial.

Varios estudios indican que durante la educación preescolar, la integración de esta tecnología en juguetes, tales como robots y kits (para programar), apoyan en los primeros pasos de su desarrollo en su alfabetización en el uso de esta tecnología. A saber, otras herramientas que están siendo utilizadas para la implementación de IA en el aula de educación básica son: PopBots, Teacheable Machine, Jobo Robot, Anki Cosmo Bot, PlushPal, RoBoHon, PictoBlox, entre otros.

Mediante la gamificación con IA (juegos como «piedra, papel o tijera», actividades lúdicas y música) los estudiantes desarrollan el andamiaje necesario para aprender sobre sistemas de conocimiento (knowledge-based systems), machine learning bajo supervisión e IA generativa, adquiriendo y reconociendo los conocimientos básicos sobre la inteligencia artificial y sus implicaciones éticas.

Ahora bien, en términos de diseño instruccional para integrar la alfabetización en IA, se requieren de varios aspectos, tales como la pedagogía, el contenido, las herramientas/material de clase, la evaluación, etcétera.

Aunque no existe un conjunto de lineamientos globales para desarrollar un currículo de esta forma, puesto que cada país tiene contextos educativos y culturales diferentes, se pueden revisar sugerencias/recomendaciones para comenzar a construir un plan estratégico, pedagógico y tecnológico que apoye la calidad educativa, conforme a los principios y normas que se requieran para cada caso.

Algunos autores sugieren lineamientos para la enseñanza de IA en el aula, con un enfoque en ciencia y matemáticas: Aprendizaje y Enseñanza de IA (K-12 AI Learning and Teaching), Integración de la IA en programas STEM, Idiomas y Ciencias Sociales (K-12 AI Education Integration into STEM, Language Arts and Social Science Education), Desarrollo Profesional en IA para Maestros y Administrativos (K-12 AI Professional Development for Teacher and Administrators) y Evaluación (K-12 AI Assesment).

Hay que recalcar que la alfabetización no requiere que los estudiantes aborden términos o temas complejos, o que adquieran capacidades complejas de programación y ML, sino que desarrollen bases sólidas para comprender las capacidades, límites, aplicaciones y consideraciones éticas de la inteligencia artificial, con el fin de que los estudiantes puedan desarrollarse plenamente en la era digital.

Desafíos de la enseñanza a nivel básico con IA

Aunque parezca sencillo de realizar, sí existe una complejidad al momento de desplegar un currículo integrado con IA, puesto que no hay que perder de vista los objetivos de aprendizaje, ni tampoco la mera aplicación de actividades con apps o plataformas con esta tecnología solo por creer que eso sería una “innovación”.

Con o sin IA, el diseño instruccional, los planes, clase, los métodos, etc., deben tener un objetivo. Se debe tener cuidado para no caer en un círculo vicioso de “aplicación infinita de actividades con inteligencia artificial”, pero que no tienen ningún propósito dentro de los procesos de aprendizaje. A saber, esta debe ser tomada en cuenta como herramienta y no como un sustituto de algo.

Entre los retos más importantes se encuentran los siguientes:

  • El déficit de conocimientos, habilidades, confianza y actitudes sobre IA de los profesores
  • La falta de un currículo robusto e integrado con esta tecnología
  • Poca información sobre los lineamientos para implementar los procesos de enseñanza-aprendizaje adecuados con IA

También se debe considerar que, tanto el profesorado como la comunidad estudiantil deberán desarrollar competencias relacionadas con el mundo digital actual, por lo que el reto se hace cada vez mayor.

Competencias del docente

En este apartado se enuncian algunas de las competencias que las y los profesores deben considerar:

Competencias del estudiante

Existen varios marcos de referencia que distinguen ciertas competencias que las y los niños deben desarrollar:

Cabe destacar que existen competencias específicas, por ejemplo: la interpretación de datos, entender el funcionamiento y aplicaciones de machine learning, distinguir entre IA general y débil (narrow AI), entre otras.

La alfabetización es relevante hoy más que nunca, puesto que las nuevas generaciones entrarán a un mercado laboral totalmente diferente gracias a esta. Los niños y las niñas están creciendo dentro de ambientes sumamente tecnológicos gracias al uso de apps con integraciones de IA, por ende, no solo es importante el impacto que esto puede tener en ellos, sino también las implicaciones negativas como la desinformación o el exceso de información, el uso de sus datos (siendo estos menores de edad), así como sugerencias no apropiadas para su edad (en referencia al uso de chatbots o similares).

Asimismo, se debe considerar el bienestar del profesorado, puesto que la falta de lineamientos o pautas sobre IA, la falta de confianza debido al déficit de competencias digitales, el nulo o poco desarrollo de un currículo robusto e integrado con IA pueden perjudicar más que potenciar la calidad educativa, resultando en un burnout interminable debido a la poca organización y planeación por parte de las altas esferas educativas.

Fuente de la información e imagen:  https://observatorio.tec.mx

Comparte este contenido:

Lectura, escritura y libertad

Por: Silvia Valle Tépatl

Con la escritura inicia la historia, pues la representación de los sucesos dio lugar a conservar vestigios de los hechos. Quedaron registrados el lugar, el tiempo, las acciones, la emoción que acompaña el sentimiento humano, porque la escritura como representación de nuestro pensamiento también recoge la emoción de quien dice algo de manera escrita. En la producción académica en torno a cómo las niñas y los niños aprenden y se apropian de la lengua escrita, destacan las de Lev Vigotsky (1885-1934), con la teoría sociocultural, y la de Jean Piaget (1896-1981), quien inspiró a Emilia Ferreiro a desarrollar su propuesta sobre la psicogénesis de la lengua escrita (1983).

Las nuevas propuestas pedagógicas que estos desarrollos teóricos han generado sobre el aprendizaje de la lectura y la escritura no han sido suficientes, pues al paso del tiempo su apropiación sigue siendo una tarea compleja. ¿Cuántos no recordamos el pánico de la hoja en blanco? Pensar qué, para qué o para quién escribir; imaginar el tipo de mensaje que emitiremos de manera gráfica y entendible para quien lo lea, son tareas que en muchas ocasiones se tornan complicadas.

Sea por el tipo de escuela o por las formas de enseñar y aprender en las aulas, constantemente se ven a la lectura y escritura separadas del contexto y de la realidad de quien aprende, pasando por alto que tienen que ver con lo que pensamos, con lo que sentimos, con lo que sabemos, con nuestra experiencia de vida y con lo que observamos en un tiempo y en un espacio determinados; en síntesis, tienen que ver con lo que somos. Para escribir y leer recurrimos a la parte cognitiva, pero también evocamos lo social, lo que hay a nuestro alrededor en nuestra cultura y ambiente: familia, amistades, compañeras y compañeros de escuela, comunidad y lugar donde vivimos.

Cuando hablamos de lectura y de escritura nuestro pensamiento nos remite a la escuela; sin embargo, el desarrollo de ambas habilidades rebasa sus fronteras, porque las encontramos, entre otros sitios, en la casa, los comercios, en los empaques de los productos que con- sumimos, en los nombres de las calles, en los anuncios, y en nuestros teléfonos celulares. No obstante, la escuela es un espacio privilegiado para propiciar el gusto y apreciar el placer por la lectura y la escritura.

Esta concepción es considerada por la Nueva Escuela Mexicana en el currículo actual, pues además de demandar la participación activa y comprometida de estudiantes, docentes, familias y autoridades educativas para que niñas, niños y adolescentes desarrollen su autonomía, su pensamiento crítico, y vivan en armonía con la naturaleza, propone como estrategia didáctica el trabajo por proyectos y un eje articulador –Apropiación de las culturas a través de la lectura y la escritura– que promueve una alternativa viable para darle a la lengua escrita su papel central.

Propiciar que niñas y niños lean y escriban, ayudar a mejorar los textos de las y los jóvenes, es procurar una sociedad más justa y libre, formar ciudadanas y ciudadanos críticos y transformadores de su realidad.

Editorial publicado en Boletín ‘Educación en Movimiento’ del mes de abril de 2024 de Mejoredu.

Fuente de la información:  https://revistaaula.com

Comparte este contenido:
Page 27 of 2454
1 25 26 27 28 29 2.454