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Cambios en la SEP: El camino minado hacia los senderos de ninguna parte

Por: Miguel Ángel Pérez

Aún tengo presente uno de los anti-poemas de Efraín Huerta, “de seguro que voy por el camino que me lleva a la ninguna parte” Esto pasa actualmente en la SEP, pero que más que eso; lo peor que le pudiera pasar al actual gobierno es caer e incurrir en los mismos errores de los gobiernos anteriores a los que de pasada tanto han criticado, y como dice otro corrido están cayendo en los mismos errores.

Las aspiraciones políticas del actual grupo en el poder y de sus personas se han colocado por encima del proyecto educativo, las aspiraciones más nobles de la nación (que se supone están en la educación) han pasado a un segundo o a un tercer plano.

El pragmatismo de la maestra Delfina Gómez y de su jefe político para el próximo año, el objetivo de ganar (como sea) el EDOMEX el experimento previo a las elecciones del 2024, ello posiciona a la maestra Delfina, pero han coloca en una posición de vulnerabilidad la actual iniciativa de reforma en el diseño del marco curricular 2022.

A partir de una racionalidad sensata y mesurada uno pudiera pedir, que no se vaya nadie la educación es la prioridad número uno. Pero no es así, sus prioridades están colocadas bajo otra lógica y pensadas también para estar en otro lugar.

En estos momentos la educación pública de nuestro país en todas las fases y niveles y modalidades educativas es un laberinto cargado de experimentos. La educación básica con el Marco Curricular 2022, la educación media y superior con las invocaciones de las nuevas leyes y regulación legislativa la cual no termina de clarificar sus disposiciones institucionales.

De esta manera, ante los ojos de la sociedad siempre atenta y siempre inquisitiva, aparecen formas de improvisación en el manejo de los recursos y los procedimientos para tomar decisiones, podríamos afirmar que en este momento no existe una política pública clara que le dé sentido a las acciones, existe sí un cúmulo de buenas voluntades, de iniciativas ideológicas como nunca antes se había orientado y de un manejo no muy coherente en la administración educativa, debido a muchas personas y muchos talentos involucrados.

Lo que, sí se ve, es la improvisación, la ocurrencia un fuerte sello de sentido común, al hacer las cosas, desde el calendario escolar, la puesta en marcha del Plan 2022 que se desprende del marco curricular, la reforma en las Escuelas Normales, ¿de qué se trata? De seguir jugando al experimento pedagógico.

Me parece que la educación no es (o no debería ser) un juguete sexual que sirve para entretener al grupo en el poder. Es lamentable reeditar los vicios de administraciones anteriores, es lamentable reeditar un debate que consideramos superado, y que nos lleva a “los confines de ninguna parte”.

En dónde estamos parados hoy en día, de nuevo regresamos al punto cero de la iniciativa ¿en dónde estamos parados y hacia dónde queremos dirigirnos?  Es ahí en donde se terminan las respuestas.

Los próximos días se anunciarán cambios en la estructura de la SEP y llegará una nueva o un nuevo titular de la dependencia, el cual se hará cargo de asumir el compromiso de atender los últimos dos años del proyecto educativo de la 4 T.

Así de riesgoso y de lamentable, dos años para modificar una obra del presente hacia el futuro, es poco tiempo aún con lo mejor de los talentos, ¿o será que comienzan a prepararse para entregar el poder político y también sacrificar el proyecto educativo?

Personajes que no saben mucho de educación pero que sí tienen un alto nivel de sentido común dicen que el compromiso educativo debería de estar blindado y que trascender los sexenios y la política grillera que aparece sexenalmente y que se consume y nos consume

Vienen cambios de personajes, pero ¿qué es lo que cambiará verdaderamente en la educación pública de nuestro país?

Fuente: http://www.educacionfutura.org/cambios-en-la-sep-el-camino-minado-hacia-los-senderos-de-ninguna-parte/

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El fin del PNPC

Por: Miguel Ángel Casillas

Como ya lo habían anticipado desde el año pasado, hace unos días, el gobierno federal anunció el fin del Programa Nacional de Posgrados de Calidad (PNPC). En el futuro, el Sistema nacional de evaluación y acreditación que dependerá de la SEP, cuando funcione y tenga claros sus lineamientos, será quien determine la calidad y la acreditación de los programas de posgrado. En palabras del subsecretario de educación superior, esa evaluación, a diferencia del periodo neoliberal, dejará de ser punitiva, mercantilizada y competitiva, será un medio para la mejora continua y no un fin en sí misma.

A mediados de los años ochenta del siglo pasado dio inicio una época de crecimiento desregulado del posgrado, en ocasiones se ofrecían programas sin cuerpos docentes especializados o sin las instalaciones y los recursos indispensables; muchos de los programas eran fuentes de recursos autofinanciables para las instituciones y una posibilidad de un ingreso extraordinario para sus profesores, en una época de graves devaluaciones y penurias económicas. También a finales del siglo XX fue evidente la importancia estratégica de este nivel, tanto para formar a los cuadros especializados de las empresas públicas y privadas, como para la ampliación del número de académicos y científicos que reclamaba la expansión de la educación superior y su revaloración como herramienta indispensable para salir del subdesarrollo e incorporar a México a la sociedad del conocimiento.

En el contexto de un crecimiento desregulado del posgrado, donde proliferaban ofertas de muy dudosa calidad y con resultados educacionales muy pobres, el PNPC fue un eficaz instrumento de política pública para orientar el desarrollo de los programas y para determinar la distribución de las becas hacia los programas de mayor calidad. Legitimó sus decisiones en las evaluaciones de pares sobre la base de normas y reglas claras. En términos generales, acreditar la evaluación del PNPC garantizaba que los programas de posgrado se sostenían en núcleos académicos que constituían líneas de generación y aplicación del conocimiento, que sus profesores se distinguían por su alta calidad y reconocimiento académico, que debían tener sus programas y procedimientos públicos en sus páginas institucionales, que debían garantizar prácticas académicas rigurosas en el estudio y la producción de las tesis, que disponían de reglamentos, espacios físicos adecuados y ofrecían diversos recursos para el aprendizaje.

Muy pronto, el PNPC se fue volviendo un instrumento burocrático, cuadrado y rígido; que registraba y medía los indicadores principalmente de modo cuantitativo, que sobre valoraba la pertenencia de los profesores al Sistema Nacional de Investigadores, y que imponía una visión del posgrado que tenía como base a las ciencias naturales y a las ciencias duras. Frente a indicadores inflexibles hubo lugar para muchos absurdos y simulaciones. La acreditación de los programas, basada en la desconfianza, exigió cada vez más una exagerada documentación basada miles de evidencias.

La evolución reciente del posgrado ha dado como resultado un sistema segmentado y desigual. Por un lado, su matrícula se encuentra distribuida mayoritariamente en maestrías y especialidades principalmente del sector privado y la minoría en el nivel de doctorado. En contraste con la lógica de mercado, los posgrados de más alta calidad se encuentran en las universidades públicas y en los centros nacionales de investigación. Los posgrados profesionalizantes son mayoría en el sector privado, mientras que la mayoría de los posgrados de investigación se ubican en el sector público.

Al anunciar el fin del PNPC (https://www.youtube.com/watch?v=jMJh2GA8L8o), la directora del Conacyt explicó que será la SEP, a través del Sistema nacional de evaluación y acreditación quien acredite a los programas e instituciones; por su parte, el Conacyt distribuirá las becas de posgrado no de acuerdo con la acreditación ni la calidad de los programas, sino en las áreas prioritarias determinadas por el gobierno (salud, producción de alimentos, empresas públicas), en los programas de investigación de las instituciones de educación superior públicas (física, química, matemáticas, biología, medicina, ciencias sociales, ciencias agropecuarias, etc.), y hacia las áreas históricamente excluidas como las humanidades, las artes y las disciplinas creativas.

En el discurso se expone que esta decisión favorece a los estudiantes que solicitan la beca, que no se quiere dejar a nadie atrás ni a nadie afuera, y que se atenderán todas las solicitudes. En realidad, al entregar las becas sin intermediarios, el gobierno federal promueve un intercambio político directo con los estudiantes de posgrado con el fin de obtener lealtad hacia la 4T, como sucede ya con las becas de licenciatura y de otros niveles.

En su crítica hacia el pasado reciente, la directora del Conacy acusó que se privatizó el ejercicio de la formación de posgrados, denunció que se favorecieron áreas enfocadas al lucro. Cuestionó que en educación hay muchos posgrados de cuestionable calidad enfocados en fortalecer la mal llamada reforma educativa, es decir la privatización de la educación y que áreas como administración, finanzas, mercadotecnia y comercio internacional fueron favorecidas de manera indiscriminada, esto a costa de otras disciplinas: este fue un ataque permanente y fuerte a favor del debilitamiento de los posgrados en ciencias. De acuerdo con la directora de Conacyt el PNPC mostró una centralidad en la productividad académica, desvinculó la investigación científica de la atención de los problemas nacionales y el avance genuino del conocimiento y se convirtió en un objetivo de cuantificación productivista. Dijo que dejó de ser un tema con pertinencia nacional, con relevancia de Estado, para convertirse en un instrumento que desvirtuó lo académico y lo público.

Como ha sucedido con otros instrumentos de la política pública hacia la educación superior, el gobierno de la 4T ha decidido desaparecer el PNPC sin tener un programa que lo sustituya. Mientras, de modo arbitrario, sin reglas claras, públicas y legítimas, el Conacyt continuará distribuyendo las becas de posgrado en las áreas y en los programas que considere prioritarios.

Fuente: http://www.educacionfutura.org/el-fin-del-pnpc/

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El sector educativo en tiempos de la 4T. Estampas de la precariedad

Publicado en: Profelandia

Por: Columna ‘Cortocircuitos’

«En el fondo de toda esta situación de precarización generalizada que va más allá de lo estrictamente laboral, se erige una concepción, un modelo y un modo distinto de concebir el trabajo.»

Los trabajadores del sector educativo fueron de los que más apoyaron para que AMLO y Morena llegaran a ser gobierno. Tres años después, los hechos demuestran que el magisterio no ha recibido un trato precisamente digno, tampoco una solución rápida y efectiva a sus demandas, las cuales por cierto se acumulan.

Quien piense que los problemas provocados por todas las reformas educativas anteriores son cosa del pasado, se equivoca rotundamente; ahí están las múltiples protestas de diferentes grupos para recordárnoslo.

Tal vez la mayor diferencia entre las protestas de antes de AMLO y las de ahora, es que los motivos, los repertorios de protesta y los grupos movilizados no son únicamente los de la CNTE; la perspectiva que reducía los conflictos a dos bandos -SNTE o CNTE vs. Gobierno-, es insostenible. Por otra parte, y esto sí que es característico de la 4T, es la intención de minimizar e incluso invisibilizar estas luchas; a juzgar por las marchas, plantones, peticiones en plataformas realizadas por parte de docentes y trabajadores de educación básica, media y superior, se pretende tapar el sol con un dedo.

Esta vez nos interesa detenernos un poco en este asunto, echar una ojeada a las resistencias en sector educativo, a ese conjunto de luchas minimizadas, invisibilizadas y silenciadas, o al menos eso es lo que quisiera el autodenominado gobierno de la cuarta transformación.

¿Quiénes protestan, por qué protestan y cómo lo hacen? ¿Qué tienen en común los profes de los CADI, UBBJ, Proni, UNAM?  Pareciera que nada, quizá entre los mismos grupos movilizados existe la idea de que son iniciativas aisladas, desarticuladas, locales, atomizadas. En realidad, y así es como lo vemos, tienen mucho en común, más de lo que suponemos o alcanzamos a mirar; veamos por qué.

Estampas de la precariedad

  1. Los docentes de CAED. Según información oficial, existen en el país alrededor de 300 Centros de Atención para Estudiantes con Discapacidad (CAED), adscritos a distintos subsistemas de educación media. Constituyen una opción educativa de bachillerato no escolarizado para personas con discapacidad motriz, auditiva, visual y psicosocial. Las inscripciones están abiertas todo el año, son gratuitas, no se requiere examen de admisión y no hay límite de edad para incorporarse (http://sems.gob.mx/es_mx/sems/bnned_bachillerato_no_escolarizado_personas_discapacidad). Desde 2018, diversos medios han dado cobertura a las protestas y denuncias de los docentes de los CAED debido al retraso de hasta cinco meses en el pago de sus salarios (Tras protestas, la SEP promete cubrir adeudos con los CAED a más tardar el 20 de mayo).

Con la 4T, la situación no ha mejorado, todo lo contrario. Las Reglas de Operación (RO) del Programa para la Inclusión y la Equidad Educativa, ejercicio fiscal 2019, publicadas en la administración de Esteban Moctezuma Barragán, los docentes pasaron a ser identificados como asesores educativos, figura solidaria que recibe un apoyo económico (ojo, NO SALARIO), el cual está condicionado a las necesidades de operación y a la suficiencia presupuestal, consigna que aparece en todos los programas de política educativa actuales.

En marzo de 2019, a cien días del inicio del gobierno de AMLO, Maestros de escuelas para alumnos con discapacidad protestan en Palacio Nacional para exigir mejores condiciones laborales y administrativas; luego en octubre del mismo año, Realizan marcha para exigir recursos para CAED. En agosto de 2021, regresaron a clases presenciales con un adeudo de dos meses de salario (Sin contrato, regresan a clases maestros de estudiantes con discapacidad); en noviembre pasado, impulsaron una campaña de denuncia en redes sociales por el enésimo retraso en el pago del trabajo ya realizado  (https://twitter.com/Marod0/status/1466194882511343621?s=20). Los docentes de los CAED han protestado ante diversas autoridades y dependencias estatales y federales, han acudido a Palacio Nacional, han interceptado al presidente demandándole que no haya recortes al programa.

  • Teachers PRONI. Los profesores de inglés que trabajan en las escuelas públicas son contratados con recursos del Programa Nacional de Inglés (PRONI) como asesores externos. En agosto de 2018, Educación Futura publicó un artículo en el que se advertía sobre las deplorables condiciones en las que trabajan los teachers, así como sus efectos.  Con base en entrevistas y grupos de enfoque realizados en Guanajuato con maestros de inglés en nivel básico en junio de 2018, la autora comenta que los mismos maestros señalan que no son considerados como parte de la planta docente, no cuentan con un salón de clases asignado, no son invitados a los Consejos Escolares, ni a cursos de actualización, reciben escaso o nulo apoyo por parte del personal directivo y administrativo en sus escuelas, tampoco son invitados a las fiestas del día del maestro y de cierre de año (La (triste) situación de los maestros de inglés en el sistema público mexicano).

Con la llegada del gobierno de la 4T, este tipo de contratación y sus nefastas consecuencias, no ha cambiado un ápice. A ello se suma la constante amenaza de adoptar programas autoadministrables, lo que haría prescindibles a los teachers. Trabajar por contrato significa que carecen de prestaciones, se les paga únicamente las horas frente a grupo (Maestros PRONI: una reivindicación laboral pendiente). Los gobiernos van y vienen, pero ellos continúan trabajando en las mismas condiciones.

Frente a este panorama, han organizado un movimiento nacional denominado Teachers PRONI haciendo camino (Se unen teachers de todo el país en pro de la basificación). Sus demandas centrales son la regularización del pago de sus salarios y la basificación de todos los docentes. Recientemente, realizaron una manifestación en Acapulco Guerrero (Se manifiestan maestros de inglés en la capital; exigen basificación), levantando la voz para exigir su cumplimiento.

  • Profesores de asignatura UNAM. Con el pretexto de su tercer informe de gobierno, el uno de diciembre pasado AMLO convocó a un acto masivo para hacer una demostración de fuerza. Al día siguiente, contingentes de docentes de la UNAM se apersonaron en la mañanera para protestar por diversos motivos, echándole a perder al presidente el buen sabor de boca que seguramente le quedó luego de ver el zócalo repleto ( Maestros de la UNAM protestan en centro histórico de CdMx)

Los docentes de asignatura y adjuntos, agrupados en el movimiento #UNAMnoPaga, denunciaron desde el inicio del 2021, que en plena pandemia no les pagaban, que les entregaron cheques por la cantidad de 2 pesos, hubo retiro de prestaciones a más de treinta mil maestros de asignatura y salarios miserables. Del 23 de marzo al 24 de mayo, 22 planteles se fueron a paro en apoyo a este movimiento cuya principal demanda era la regularización en los pagos de la planta docente. No faltaron las represalias: 10 profesores de la FES Acatlán fueron despedidos luego de participar en el movimiento, y acusaron al director de emprender una campaña en su contra (Maestros de FES Acatlán acusan despidos tras paro)

  • Universidades del Bienestar Benito Juárez (UBBJ). Los despidos masivos, disminución de salarios, sobre carga de trabajo, cero prestaciones, retraso en el pago de salarios, entre otras problemáticas, ha sido denunciada una y otra vez por los mismos docentes afectados de las Universidades del Bienestar Benito Juárez (UBBJ). Prácticamente desde el inicio de este programa estrella de la 4T, esta ha sido la tónica; más detalles sobre la situación, pueden consultarse en los Cortos que hemos escrito sobre el tema ( La sargenta Raquel Sosa y Las falsas promesas de las Universidades del Bienestar) Los afectados han sostenido diversas reuniones virtuales, convocado a conferencias de prensa para plantear su situación; recientemente formaron la  Asamblea de trabajadores de UBBJ por los derechos laborales, espacio en el que mantienen contacto entre sí, circulan información y denuncian atropellos.
  • Personal de apoyo y asistencia a la educación (PAAE). Hace unos días, Profelandia publicó un artículo sobre el personal de apoyo y asistencia a la educación. A través de la descripción de tres casos, el autor muestra la situación por la que atraviesan estos trabajadores: años trabajando por contrato de honorarios, bajo la promesa de obtener una plaza base, prestaciones, servicios médicos, en resumen, certeza laboral. Al mismo tiempo, secretarias y auxiliares administrativos trabajan en medio de la zozobra, algunos prestan sus servicios en el sistema educativo desde hace una década o más; cuando termina su contrato por honorarios, siempre existe la posibilidad de que sus contratos provisionales no sean renovados y en consecuencia, corren el riesgo de quedar desempleados. (El PAAE: en el cajón del olvido) La virtud del autor es que logra visibilizar una situación sobre la que prácticamente se conoce nada.
  • Telebachillerato comunitario. Desde hace un año, docentes de telebachillerato agrupados en el Frente único Nacional de Trabajadores de Telebachillerato (Funttbc) han realizado protestas de distinto tipo y alcance (Con bloqueos en la CDMX protestan trabajadores de Telebachilleratos comunitarios), sin faltar manifestaciones en Palacio Nacional para demandar una mesa de diálogo con quien fuera secretario de educación. Se han opuesto al cierre de cien planteles de telebachillerato en Chiapas, demandan basificación y recursos para contar con aulas y espacios de trabajo dignos. Las protestas han escalado a tal punto que, en junio de 2021, incendiaron llantas y se enfrentaron a la policía que protegía la puerta principal de Palacio Nacional. Han sostenido reuniones con diversas autoridades locales y federales, mismas que consideran poco productivas.
  • Directores comisionados. El 10 de diciembre de 2020, directores de primaria del estado de Guerrero se manifestaron para exigir la regularización de sus plazas y demandaron una mesa de diálogo con el gobernador; su presencia exigiendo la regularización de su situación, se hizo notoria en octubre de ese año. Los directores movilizados informaron que eran alrededor de 1000 profesores en esa situación, de los cuales 200 decidieron agruparse en el Frente de Directores Encargados del Estado de Guerrero (FEDEG), a fin de iniciar la batalla legal y la lucha política para poner fin a su irregular situación. En conferencia de prensa aseguraron que las claves de director y supervisor se entregan discrecionalmente a personas allegadas a los funcionarios en turno. Informaron también que hay por lo menos mil 700 directores federales y más de 800 estatales que no cuentan con clave de director, y por lo tanto perciben salarios por debajo de la mitad de lo que les corresponde. En noviembre de este año se plantaron en Paseo de la Reforma para exigir el nombramiento de directores a 258 personas que se desempeñan como directores encargados en escuelas de educación básica, realizan funciones directivas y asumen responsabilidades como tales, pero reciben un salario como docente frente a grupo.

Sectores distintos, demandas similares, precariedad común

Hemos descrito unas cuantas estampas, son solo algunas, la lista es bastante más larga, Sin embargo, son suficientes para realizar preguntas necesarias. ¿Qué tienen en común todos estos casos? Muchas cosas: inseguridad laboral; carencia de prestaciones; salarios miserables, inversamente proporcionales a la cantidad de tareas y responsabilidades asignadas; pagos retrasados y a menudo reducidos; condiciones materiales de trabajo deplorables, en instalaciones prestadas; recortes presupuestales; despidos más constantes amenazas, veladas o abiertas, del término de contrataciones; desconocimiento laboral y desafiliación del sistema educativo; la figura de asesor como prestador de un servicio, se impone cada día más sobre la del docente que ya no es un profesional, mucho menos un trabajador con derechos y seguridad social.

En el fondo de toda esta situación de precarización generalizada que va más allá de lo estrictamente laboral, se erige una concepción, un modelo y un modo distinto de concebir el trabajo. Ahora se paga por trabajar, se compite entre iguales por migajas, se es afortunado si se tiene un trabajo, así sea mal pagado y esclavizante; además, el trabajo está en todas partes, nos acompaña hasta al baño, vivimos para trabajar y esta es una de las fuentes de tanto sufrimiento de nuestra sociedad.

La incertidumbre y la inseguridad, así como el miedo que provocan ambas, se nos presenta como único futuro posible para el que hay que prepararse. En realidad, no son parte de un destino inexorable que llegó de quién sabe dónde o surgió quién sabe cómo; son el fundamento sobre el que se erige y atiza la sobre explotación y en consecuencia, la precariedad del trabajo y la vida que hoy padecemos.


Publicado en Insurgencia Magisterial

Fuente: https://profelandia.com/el-sector-educativo-en-tiempos-de-la-4t-estampas-de-la-precariedad/

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Educación: Tercer año de gobierno

Por: Juan Carlos Miranda Arroyo

«Se requiere una política educativa focalizada y consistente para revalorar al magisterio nacional…»

A tres años del inicio del gobierno de la Cuarta Transformación (4T) de la vida pública del país, los principales pendientes se sostienen. Reducir la pobreza como estrategia doble: fortalecer la cohesión y recuperar la paz sociales (disminuir la delincuencia y la inseguridad). Lograr, como aparato de Estado, resultados positivos en el combate a la corrupción y la impunidad. Más allá de las operaciones que realiza el gobierno federal, me parece que son las instituciones del Estado mexicano, como la Fiscalía General y los poderes Legislativo y Judicial, las que habrían de dar resultados en esa dirección.

Hasta el día de hoy, no se ven claros tampoco los rasgos del cambio significativo de régimen de la 4T, en materia de educación pública. En lo que sigue expondré las evidencias y las razones por las cuales considero que “el no cambio” se ha establecido (en sus contenidos ni en sus formas) en el ámbito de la educación en México, al cumplirse tres años de la toma de posesión del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).

Lo he dicho antes y hoy lo sostengo: La iniciativa de reforma educativa del gobierno de AMLO ha sido “contestataria”, pues no ha existido, hasta ahora, un proyecto alternativo de educación que sea consistente y que contenga un nítido contraste con las políticas públicas anteriores.

En su lugar, el nuevo gobierno (2018-2024) concertó con las bases disidentes y sus dirigentes, los términos de la siguiente etapa de la reforma educativa. Así, el Acuerdo Nacional por la Educación y la llamada Nueva Escuela Mexicana parecen ser el resultado de una concertación con las fuerzas institucionales (dirigencia oficial del SNTE) y los representantes de la disidencia magisterial, a través de un discurso o una retórica cuyos contenidos eran más reivindicatorios de demandas gremiales (no a la reforma basada en una Evaluación Punitiva), que de un verdadero planteamiento alternativo o innovador, amplio, en materia de educación pública.

Con esa dinámica, que consistió en eliminar del texto constitucional y de la legislación educativa a la denominada “evaluación para la permanencia” en el puesto, a través de una mal diseñada evaluación de desempeño, (como lo ha señalado el doctor Ángel Díaz Barriga en varias publicaciones), se evidenció que la fuerza de la nueva reforma educativa (2019) estaría en su condición y en su derecho de “hacer caer” a la anterior. Aunque no calificaría a la actual reforma educativa de reaccionaria, sí diría que es contestataria, reactiva o producto de la concertación con las fuerzas políticas opositoras, sobre todo en el frente legislativo.

No encuentro cambios significativos ni trascendentes en el llamado Acuerdo Nacional por la Educación, cuando se mantienen intactos una serie de dispositivos que han dejado los gobiernos que emplearon políticas públicas de sello neoliberal en el ámbito educativo (léase, sobre todo, los gobiernos de Salinas, Zedillo, Fox, Calderón y Peña Nieto).

Esto lo digo en términos de la instalación de un discurso “pro-gerencialista” en el seno mismo de la escuela pública: La gestión de la Calidad como paradigma universal; la lógica de la Mejora Continua con pretensiones absurdas de “neutralidad ideológica”. (Lo mismo que ha sucedido con la noción de Competencias educativas).

Así, las ideas de la Calidad Total y del círculo de la Mejora Continua eran aceptadas, acríticamente, como nociones “naturales” o “sustanciales” a la vida de la escuela pública. ¿Acaso vinieron de otro lado esos desarrollos gerencialistas? ¿Los intentos de la “nueva gerencia” empresarial para gestionar y producir bienes y servicios, así como reconvertir los patrones del consumo y renovar los factores de la acumulación capitalistas, en una era de reactivación de las economías de la posguerra, era un “desarrollo natural”?¿No hay nada que discutir sobre la idea de la “mejora continua”?

El esquema de Estado mexicano, en la era de la 4T, no contempla polemizar con ese pasado gerencialista en particular (pienso en la mayoría legislativa de Morena y aliados políticos, en los funcionarios de alto nivel de la SEP, etc.). Todo lo contrario, se decidió caminar por el rumbo de la Mejora Continua en la educación; tanto así que creó, vía el Poder Legislativo y por iniciativa del Ejecutivo, una ley para la Mejora Continua de la Educación, así como una Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (como organismo público no autónomo), en sustitución del finado Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), que contaba con autonomía constitucional.

Mientras tanto, y pese a que los diseñadores institucionales de la 4T empezaron a hablar de “Excelencia” Educativa, sin un aparato conceptual que le diera sustento ni fundamento teórico-metodológico, durante estos tres años la educación pública ha estado ausente de un proyecto propio y alternativo.

Se abandonó, lamentablemente, el otro camino que quedaba y que consistía en discutir a fondo el modelo imperante o hegemónico de la “Calidad de la Educación” (que significaba evaluar las políticas públicas con orientación hacia la calidad, tal como la definen los organismos internacionales); eso se hizo, en vez de proscribir al concepto y colocar en su lugar a otro membrete, que carece de articulación y de consistencia conceptual: la llamada “Excelencia”.

Por otra parte, no es hora en que se aprecie un cambio orgánico en materia curricular. La maestras y los maestros de la educación básica, en específico, señalan que las indicaciones de las autoridades federales y estatales, es “continuar con lo dispuesto en 2017″, cuando se dio a conocer el llamado Nuevo Modelo Educativo de la pasada administración federal. Entonces ¿Cuáles son los elementos del cambio curricular que requiere la escuela pública en los niveles de la educación básica con el nuevo régimen? ¿Cuál es el sentido y el contenido (con sus respectivos métodos) del cambio en la educación media y superior en México en esta era transformadora? ¿Cuál es el horizonte al que llevará o sobre el cual se inspirará la 4T en materia educativa?

En el sector educativo se requiere, de manera urgente, una reorientación de las políticas públicas. Sobre todo, es necesario recuperar o relanzar, en los hechos, una política focalizada y consistente de revaloración del magisterio nacional. Ello significa, no sólo aumentar el salario de las maestras y los maestros, sino también poner en marcha un amplio programa de actualización magisterial y de fortalecimiento del trabajo que realizan los profesionales de la educación en servicio. Además de generar condiciones laborales más adecuadas (conectividad gratuita, apoyo en equipos electrónicos y de comunicación, etc.), de manera sobresaliente ante la reconversión (que llegó para quedarse) de la labor docente y directiva en las escuelas, que se ha dado durante las crisis sanitaria y económica. Y con ello no reivindico las improvisaciones que significaron los programas “Aprende en Casa” (SEP).

Obviamente, junto con lo anterior, el país demanda de una reorganización de las políticas públicas educativas dirigidas a la formación inicial de las maestras y los maestros de la educación obligatoria. El trato que se les ha dado a las escuelas normales, UPN y centros de actualización del magisterio, en el orden presupuestal, no es el que conviene al país. Todo lo contrario: el Estado mexicano tendría que ser el primero en cuidar los procesos de formación inicial de las y los profesores de la escuela pública, a través de instituciones formadoras de maestras y maestros fortalecidas y en permanente transformación. Esa es la inversión más sólida y consistente que puede lograr una nación. ¿De qué nos servirán instituciones educativas abandonadas para que lleven a cabo la gigantesca y estratégica tarea de transformar las prácticas docentes y directivas escolares, que son la base del sistema educativo nacional?

Restan poco menos de tres años para que concluya el periodo de este gobierno federal de la Cuarta Transformación. El proceso es complejo. No hay que olvidar que el empuje de una transformación social y del cambio de régimen político, si surge desde abajo, va. De lo contrario, dicha transformación social será sólo una ilusión.

En resumen, el país no cuenta con una plataforma alternativa clara en lo educativo, sino que, en todo caso, se han logrado delinear apenas unas políticas públicas que han buscado desmontar la parte del contenido legal de la anterior plataforma política; pero que, en los hechos, se vive como un “continuismo” para el conjunto del magisterio, en lo sustantivo del trabajo cotidiano que se lleva a cabo en las escuelas y en las aulas. Lo cual se suma como un elemento adicional a la crisis del reformismo educativo en México.

Juan Carlos Miranda Arroyo en Twitter: @jcma23

Fuente: https://profelandia.com/educacion-tercer-ano-de-gobierno/

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La nueva titular de la SEP bajo la sombra de Elba Esther Gordillo

Por: Pluma invitada

En la historia educativa de nuestro país, el estado de México se había convertido en el territorio de la Maestra como se le conoce a Elba Esther Gordillo Morales. No existía acción que no pasara por sus manos, Defina Gómez Álvarez, es originaria de dicho estado. En su trayectoria tuvo algo que ver con la Maestra y este acercamiento indirecto si se quiere, fue en las elecciones para gobernador en dicho estado. Delfina Gómez contendió en contra de Alfredo del Mazo, este último resultó ganador después de poner en juego toda la maquinaria electoral del PRI, Delfina tuvo el apoyo de Rafael Ochoa (operador político de la maestra) y de Ferrando González, yerno de la maestra, ambos forman parte de su círculo cercano.

Esta señal puede dar pie a enrarecer el análisis en la reciente designación de Delfina Gómez, como titular de la SEP y pocos días después del anuncio, el presidente López Obrador en la mañanera de 28 de diciembre hablaba de agilizar el relevo en la dirigencia del SNTE.

La disputa por la dirigencia nacional del SNTE, será sin lugar a dudas en el año 2021 uno de los puntos críticos que le tocará a Delfina Gómez, pero otros puntos sobre el estilo de gestión, también son importantes.

El Proyecto y el equipo

Se ha criticado fuertemente a administraciones anteriores por cambiar o relevar al titular de una de las dependencias más importantes a mitad del sexenio, la 4 Transformación y el gobierno de López Obrador ha caído en el mismo vicio ¿Por qué? ¿por tener un estilo de gestión incompatible con el antecesor Moctezuma Barragán al que tanto presumió AMLO? ¿o porqué ya están pensando en las elecciones del 2024?

El proyecto educativo del actual gobierno es un amplio acuerdo nacional por instaurar la Nueva Escuela Mexicana (NEM), los equipos de colaboradores son de distintos matices, desde los que vienen de gobiernos anteriores hasta ex militantes de izquierda institucional como es el caso de Luciano Concheiro en la Sub secretaria de Educación Superior. Bajo este contexto lo que surgen son muchas preguntas y unas pocas hipótesis.

¿Ratificará Delfina Gómez el equipo de trabajo que le hereda Moctezuma Barragán, o llevará a su gente? Con los nuevos personajes en la estructura superior de la SEP, ¿estos personajes serán cercanos a Elba Esther Gordillo? ¿Qué opinan los investigadores del país como el caso del COMIE o la masa crítica de académicos diseminados en las principales universidades el país? ¿la NEM tendrá continuidad o Delfina Gómez trazará nuevas líneas o nuevos ejes de desarrollo educativo para el país? ¿se hablará de una reforma de largo aliento en tan solo 3 años o todo quedará en parches y remiendos para salir al paso? ¿y qué hay con la deuda pendiente con el magisterio nacional?

Como podrá verse las preguntas son diversas surgidas de distintos flancos. El cambio o el relevo se venía venir, pero no con una designación que traerá mayores tensiones en el aparato educativo del país. Es difícil pensar en un personaje para un puesto tan ambicioso e igualmente comprometedor. Es plausible saber que la nueva titular de la SEP, es egresada de la UPN institución a la que yo pertenezco y que su extracción es haber sido maestra frente a grupo de educación primaria. que es la segunda mujer que ocupa ese cargo en toda la historia también es digno de aplaudirse. Pero después de ello, hay muy pocos argumentos que se tornen convincentes para ocuparse del segundo lapso del actual sexenio de la posición más importante de educación en este país.

Con los casi nulos elementos que manejo, la hipótesis que quisiera aventurar a futuro, es que Delfina Gómez caerá en una especie de pragmatismo político – pedagógico, echará mano de un grupo de colaboradores entre los que ya están y los que llegarán y la SEP servirá como plataforma de lanzamiento para el oportunismo y el futurismo político de MORENA. Poca Pedagogía y si mucha política es lo que se espera.

Solo nos resta esperar a que pasen los primeros meses del año 2021 para darnos cuenta cuál será el rostro y el estilo de gestión que le imprimirá Delfina Gómez al frente de la SEP.

A esperar…

Fuente: http://www.educacionfutura.org/la-nueva-titular-de-la-sep-bajo-la-sombra-de-elba-esther-gordillo/

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4T: Revolución pasiva en educación

Por: Mauro Jarquin

En su primera intervención pública, Delfina Gómez, futura titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), afirmó que, una vez que tome la dirección de la dependencia, no tenía contemplado cambiar nada. Lo anterior no debería resultar sorpresivo.

La salida de Esteban Moctezuma se anunció en un momento en el cual cimientos, estructura y fachada de la propuesta educativa de la 4T en tanto continuidad neoliberal, resultaban ya muy claros. Basta echar un vistazo a la reforma constitucional, al programa sectorial de educación, a las leyes secundarias, al presupuesto destinado al sector educativo en su conjunto y a la restructuración de la relación entre Estado y docentes.

La llegada de la maestra Gómez es el inicio de una nueva etapa discursiva en las labores de la SEP, guiada ahora por contenidos populares y de acercamiento con los problemas cotidianos de las escuelas, con miras a gestionar el rumbo ya iniciado.

Más que un paso hacia el fortalecimiento democrático del sector educativo, lo anterior representa un giro estratégico encaminado hacia la legitimación de la revolución pasiva que la 4T ha impulsado en la educación nacional.

La noción de revolución pasiva forma parte del repertorio conceptual de un sector de la izquierda latinoamericana que ha buscado caracterizar fenómenos denominados como populistas o relativos a lo nacional-popular durante la segunda mitad del siglo pasado o a la luz de los progresismos contemporáneos que han tenido lugar desde los años 90.

Una característica de estos gobiernos es que, ante procesos relevantes de movilización social, convienen en la permisividad de ciertas concesiones respecto a las exigencias de grupos subalternos organizados. Ello tiene como contraparte el hecho de que las pautas de apertura suponen los propios límites en la acción colectiva y las perspectivas de éxito de los movimientos, buscando con ello conducir el proceso organizativo y eventualmente desactivarlo o integrarlo al proyecto en el gobierno.

Las revoluciones pasivas conllevan dos dispositivos para gestionar la tensión entre la regresión y el cambio progresista inherentes a su desarrollo: transformismo (inclusión de organizaciones y liderazgos de movimientos al proyecto populista en el gobierno, aún anclados en la resistencia) y cesarismo (liderazgo carismático que permite modular el ímpetu movilizador). Con ellos, se busca generar un desempate ante una situación política que puede dirigir al caos o la catástrofe.

La Reforma Educativa de 2013 prendió fuego en la pradera del campo educativo nacional, generando una movilización magisterial que logró cuestionar profundamente el proyecto gerencial que grupos empresariales, sus ramificaciones de sociedad civil y sectores políticos liberales habían impulsado para reformar la educación nacional según una serie de intereses comunes.

Una vez que erráticamente la reforma se presumía muerta, la 4T entró en acción, pasando del momento bonapartista (https://www.jornada.com.mx/2019/03/24/opinion/008a1pol) a la consolidación de un proyecto de revolución pasiva en educación que consistía en mantener las bases del proyecto educativo neoliberal sin sus partes más agresivas.

Para ello, y pese a las disputas mediáticas, tendió rutas de acuerdo con grupos de interés y partidos de la oposición, mientras repetía, una y otra vez, que eran los docentes quienes gozaban de prioridad en el diseño de la política. Los sectores dominantes quedaron conformes con la reforma y el magisterio disminuyó su movilización autónoma.

La 4T decidió mostrar pautas de cambio: desvinculó la evaluación docente de la permanencia en el empleo tal cual estaba en la Constitución, intervino positivamente en la liberación de presos políticos y en la reinstalación de docentes cesados por persecución y abrió las puertas para un acercamiento inédito entre sectores magisteriales críticos de la reforma neoliberal y el gobierno federal. Lo que hizo fue básicamente restaurar las circunstancias hasta antes de 2013, salvo que ahora con el cobijo de una campaña mediática de revalorización docente, anzuelo de un nuevo proceso de subalternización. Algo políticamente certero y electoralmente redituable.

No obstante, dichas decisiones han tenido su contraparte en políticas contrarias a todo proyecto posneoliberal, que en general han tenido buena recepción gracias a un liderazgo impecable del Presidente y a la incorporación de cuadros magisteriales a la 4T: a) golpeteo continuo a la tradición normalista; b) consolidación de orden filantrocapitalista en educación; c) privatización del proceso de toma de decisiones; d) fomento a la mercantilización de los datos de millones de estudiantes y docentes por la vía de la digitalización, y e) endoprivatización educativa, mediante la conservación de criterios gerenciales en la evaluación del ejercicio educativo cotidiano.

La revolución pasiva en curso constituye un desafío para la organización autónoma de estudiantes y docentes. Resulta imperativo afrontarla apelando a lo mejor de la tradición organizativa del magisterio.

Profesor FFL-UNAM

Fuente e Imagen: https://www.jornada.com.mx/2021/01/17/opinion/010a1pol

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«Somos portadores del virus de la rebeldía»: el Ejército Zapatista anuncia gira por los continentes

Por: Tercera Información

Desde las montañas del sureste mexicano, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) ha anunciado un viaje alrededor del mundo por los 500 años de la «supuesta conquista» del territorio mexicano.

«Que navegaremos hacia las tierras europeas. Que saldremos y que zarparemos, desde tierras mexicanas, en el mes de abril del año del 2021. Que, después de recorrer varios rincones de la Europa de abajo y a la izquierda, llegaremos a Madrid, la capital española, el 13 de agosto del 2021 —500 años después de la supuesta conquista de lo que hoy es México—. Y que, inmediatamente después, seguiremos el camino», se lee en el comunicado firmado por el subcomandante insurgente Moisés.

La visita se hará con el fin de hablar al «pueblo español»; sin embargo, precisaron que esto no es para «amenazar, reprochar, insultar o exigir. No para demandarle que nos pida perdón. No para servirles ni para servirnos».Por el contrario, dijeron que la intención de la parada en la capital española es para expresarles «que no nos conquistaron. Que seguimos en resistencia y rebeldía».

Sin hacer alusión a las conmemoraciones anunciadas por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, que pretende que el 28 de septiembre de 2021 se celebre como el Día del Perdón a Pueblos Originarios, los zapatistas explicaron que otro de los motivos de su viaje a España es para decirles «que no tienen por qué pedir que les perdonemos de nada«.

«Ya basta de jugar con el pasado lejano para justificar, con demagogia e hipocresía, los crímenes actuales y en curso: el asesinato de luchadores sociales, como el hermano Samir Flores Soberanes; los genocidios escondidos detrás de megaproyectos, concebidos y realizados para contento del poderoso —el mismo que flagela todos los rincones del planeta—; el aliento monetario y de impunidad para los paramilitares; la compra de conciencias y dignidades con 30 monedas», enfatiza el mensaje.

«Nosotros, nosotras, nosotroas, zapatistas NO queremos volver a ese pasado, ni solos, ni mucho menos de la mano de quien quiere sembrar el rencor racial y pretende alimentar su nacionalismo trasnochado con el supuesto esplendor de un imperio, el azteca, que creció a costa de la sangre de sus semejantes, y que nos quiere convencer de que, con la caída de ese imperio, los pueblos originarios de estas tierras fuimos derrotados.

«Ni el Estado Español ni la Iglesia Católica tienen que pedirnos perdón de nada. No nos haremos eco de los farsantes que se montan sobre nuestra sangre y así esconden que tienen las manos manchadas de ella», se explica en el comunicado.

Las reflexiones del EZLN

En el anuncio, el EZLN también agregó una serie de reflexiones sobre la situación actual del mundo, a propósito del aumento de los feminicidios, de la puesta en marcha de los megaproyectos y del manejo de la pandemia de COVID-19 que hicieron algunos gobiernos.

«La aberración del sistema y su estúpida defensa del ‘progreso’ y la ‘modernidad’ se estrella contra una realidad criminal: los feminicidios. El asesinato de mujeres no tiene color ni nacionalidad, es mundial.  Si es absurdo e irrazonable que alguien sea perseguido, desaparecido, asesinado por su color de piel, su raza, su cultura, sus creencias; no se puede creer que el hecho de ser mujer equivalga a una sentencia de marginación y muerte», señala el mensaje.

Por otro lado, sostiene que la pandemia «no sólo mostró las vulnerabilidades del ser humano, también la codicia y estupidez de los distintos gobiernos nacionales» dado que los países no tuvieron en cuenta la larga duración de la pandemia.

«La muerte se convirtió así en una cifra que se pierde a diario entre escándalos y declaraciones. Un comparativo tétrico entre nacionalismos ridículos. El porcentaje de bateo y de carreras limpias que determina qué equipo, o Nación, es mejor o peor», subraya el comunicado.

Del mismo modo, informaron que en las comunidades zapatistas optaron por la prevención y la aplicación de medidas sanitarias que, en su momento, fueron consultadas con científicos.

A pesar de ello, reportaron el fallecimientos de tres de sus compañeros que presentaron dos o más síntomas asociados al COVID-19 y que tuvieron contacto directo con contagiados, además otras 9 personasn, quienes murieron en ese período, presentaron uno de los síntomas.

«No son culpa de la 4T o de la oposición, de neoliberales o neoconservadores, de chairos o fifís, de conspiraciones o complots. Pensamos que debimos haber extremado más todavía las precauciones», informaron a través de su página oficial.

Por último, el comunicado manifiesta que «frente a los poderosos trenes, nuestras canoas. Frente a las termoeléctricas, las lucecitas que las zapatistas dimos en custodia a mujeres que luchan en todo el mundo. Frente a muros y fronteras, nuestro navegar colectivo. Frente al gran capital, una milpa en común. Frente la destrucción del planeta, una montaña navegando de madrugada. Somos zapatistas, portador@s del virus de la resistencia y la rebeldía. Como tales, iremos a los cinco continentes».

Fuente e Imagen: https://www.tercerainformacion.es/articulo/internacional/07/10/2020/somos-portadores-del-virus-de-la-rebeldia-el-ejercito-zapatista-anuncia-gira-por-los-continentes/

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