Page 72 of 112
1 70 71 72 73 74 112

El reconocimiento del líder educativo como agente de cambio

Mexicanos Primero

Sandra C. Amador Jiménez*

“Lo relevante no es el líder, sino el liderazgo, es decir, la capacidad de un grupo de personas de trabajar en equipo, motivando e influyendo para promover el cambio.”

Verónica, López, 2010

Reconocer a un@ director@ o supervisor@ escolar como un líder capaz de transformar una comunidad educativa, sólo será posible si él mismo asume su compromiso como agente de cambio y  desarrolla un liderazgo efectivo junto a su comunidad.

En Mexicanos Primero estamos convencidos de que los líderes escolares son los principales defensores y promotores del derecho a aprender de las niñas, niños y jóvenes desde la escuela. Así, las oportunidades de formación se vuelven trascendentales para apoyarles en su titánica tarea.

Por ello, en alianza con Fundación Banorte, el Tecnológico de Monterrey y la Universidad de Cambridge, desde hace casi tres años, impulsamos el Diplomado Internacional para Líderes Educativos Transformadores (DILET) como punta de lanza en el desarrollo de sus capacidades. El DILET tiene por objetivo fortalecer las capacidades de los líderes educativos con el fin de promover la docencia efectiva, el trabajo colaborativo y la práctica reflexiva, todo ello pensando en las niñas y niños que necesitan desarrollar su potencial de manera plena e integral.

En México la formación es clave para la transformación; sin embargo existe una carencia importante de oportunidades. Esto lo evidencía la Encuesta Internacional sobre la Enseñanza y el Aprendizaje (TALIS, por sus siglas en inglés; OCDE, 2014) ya que menciona que 8 de cada 10 directores no reportan haber sido formados en liderazgo antes de tomar su puesto. Por otro lado, en nuestra más reciente encuesta a 136 registros de directores y 38 supervisores al DILET en el nivel de preescolar en Hidalgo, encontramos que en el último año, 8 de cada 10 dicen no haber participado en formación sobre liderazgo escolar y aún más preocupante, 7 de cada 10 reportan que no han participado en cualquier programa de aprendizaje profesional en los últimos tres años.

Por lo anterior, resulta satisfactorio mencionar que seis estados de la república han apostado por el liderazgo escolar este año como un elemento fundamental para lograr las transformaciones que se requieren de acuerdo con sus contextos. Hidalgo, no fue la excepción.

Con orgullo, el 15 de noviembre del año en curso, reconocimos el esfuerzo de 144 líderes educativos. Est@s director@s y supervisor@s se gradúan tras seis meses de intenso trabajo académico, un compromiso que implicó sortear los obstáculos presentados en el proceso, como la carga de trabajo, problemas personales o de salud. Sin duda, esta Ceremonia de Graduación significará un logro personal y profesional en cada una de sus historias. Cabe mencionar que 95% están en proceso de evaluación por parte de la Universidad de Cambridge, Inglaterra, para obtener una certificación en Liderazgo Educativo, una distinción internacional que valora los contextos en los que desarrollan sus actividades. Esto impacta en 12,863 alumnos y 492 maestros.

Cabe mencionar que en esta generación 81% de los líderes educativos laboran en preescolares generales, 18% en preescolares indígenas y 1% en Centros de Atención Múltiple (CAM), lo que nos deja ver que aún hay mucho por hacer para que las oportunidades de formación lleguen de manera equitativa a todo tipo de modalidad. Asimismo se destaca que 78% de l@s directore@s y 80% de l@s supervisor@s llevan menos de diez años en la función, es decir que  DILET brinda herramientas a estos líderes educativos para transformar y mejorar su práctica de liderazgo desde los primeros años de servicio.

En este mismo sentido, reconocemos el apoyo y compromiso de la Secretaría de Educación del Estado de Hidalgo, quienes encontraron en DILET una oportunidad significativa de desarrollo profesional para los líderes educativos. Esto confirma la importancia de asumir responsabilidades conjuntas para el apoyo y valoración de los agentes de cambio.

Sin duda, será una gran oportunidad para reconocer, no solo la culminación de un proceso de formación, sino, además, el arduo trabajo día con día siguiendo sus decisiones, sus sueños y su entrega.

¡Qué privilegio apoyar a un líder escolar convencido de la importancia de cada una de las personas que está a su lado y de la gran responsabilidad que lleva consigo como agente de cambio! Sólo resta, desde sectores públicos, privados y la sociedad civil, seguir reconociendo y apoyando la labor y formación de l@s director@s y supervisor@s escolares hacia el desarrollo de un liderazgo incluyente, donde Tod@s podamos estar, aprender y participar.

_

*Coordinadora DILET en Mexicanos Primero

Fuente del articulo:  http://www.educacionfutura.org/el-reconocimiento-del-lider-educativo-como-agente-de-cambio/

Fuente de la imagen: http://www.educacionfutura.org/wp-content/uploads/2014/04/SEC.-EN-DIÁLOGO-NORA-M

Comparte este contenido:

El papel de la educación de personas jóvenes y adultas desde los CEAs

Por: EducaBolivia

La Educación Alternativa está orientada a completar la formación de las personas y posibilitar el acceso a la educación a los que por diversas razones no hubieran iniciado o concluido sus estudios en la Educación Formal.

 Esto se constituye en una nueva oportunidad para personas jóvenes y adultas que por diversos motivos no pudieron concluir su educación regular, como indica en el Art. 21 de la Ley 070, la Educación Alternativa “Comprende las acciones educativas destinadas a jóvenes y adultos que requieren continuar sus estudios; de acuerdo a sus necesidades y expectativas de vida y de su entorno social, mediante procesos educativos sistemáticos e integrales, con el mismo nivel de calidad, pertinencia y equiparación de condiciones que en el Subsistema Regular”.
Esta es la oferta educativa a la que pueden acceder personas desde los 15 años, siendo de carácter técnico-humanístico.
Las formas de aprendizaje propias de jóvenes y adultos están basadas en la experiencia; aprenden de la realidad, con ritmos de aprendizaje diversos y poseen conocimientos empíricos. Son personas con necesidades educativas específicas. El papel de su experiencia de vida juega un rol protagónico en su aprendizaje, por lo que éste debe producirse observando, comparando, relacionando lo conocido con lo nuevo por conocer, lo cual significa un mayor esfuerzo y tiempo para apropiarse del conocimiento.
Hombres y mujeres enfrentan barreras para acceder y mantenerse en los procesos de aprendizaje, asociadas a sus roles en la familia y la comunidad. Además, para ambos sus responsabilidades impiden incorporarse a modalidades educativas de larga duración y de funcionamiento rígido, así como asimilar conocimientos de aprendizaje que nada tienen que ver con su realidad familiar, comunitaria, productiva y de desarrollo ciudadano, ya que son poseedores de un sentido práctico para la vida.
Requieren de un clima especial de aprendizaje, siendo un factor determinante la/el maestra/o popular quien debe despertar confianza y ayudarle a superar la ansiedad, el miedo, la angustia y la inseguridad ante las actividades de aprendizaje.
En todo caso, los jóvenes y adultos aprenden de manera muy distinta a niños y niñas. De ahí que el modo de relacionarse con ellos y los métodos utilizados para producir aprendizajes, también tienen que ser diferentes. En función de eso, la Educación de Jóvenes y Adultos debe orientar sus contenidos, habilidades y capacidades a la gestión de la transformación de la comunidad, del desarrollo productivo a partir de las necesidades, demandas y potencialidades del contexto.
Comparte este contenido:

Antoni Zabala: “Enseñamos conocimientos, no a saber hacer“

22 de noviembre de 2017 / Fuente: http://blog.tiching.com/

Antoni Zabala

¿Cómo definiría las competencias básicas?
Las competencias son aquellas habilidades que nos permiten dar respuesta a los problemas que nos plantea la vida: situaciones personales, en contextos profesionales, en las relaciones sociales, etc. Para entender las competencias debemos tener en cuenta también que se estructuran por componentes factuales, conceptuales, procedimentales y actitudinales.

¿Cómo se aprenden?
Mediante la resolución de problemas cercanos a la realidad emocional del alumno. Es importante conocer los componentes que constituyen cada competencia para identificar las actividades de aprendizaje de cada uno de ellos. Por ejemplo, los factuales se pueden asimilar a través de la memorización, los conceptuales a partir de la elaboración y construcción, los procedimentales a partir de la práctica guiada, y los actitudinales a partir de modelos, vivencias, etc.

¿Y cómo se aplican?
Los cuatro componentes deben integrarse en la resolución de situaciones nuevas. Cuando pedimos que una persona sea competente, no pedimos solo que tenga la competencia, sino que sepa actuar de forma competente en contextos distintos a los que se han aprendido.

¿A qué se refiere exactamente?
Hay que tener la habilidad de entender la complejidad de la realidad, analizarla, identificar las vías de solución, seleccionar la más adecuada y finalmente aplicar la competencia. Es un procedimiento de procedimientos y precisamente ahí radica la complejidad de enseñar competencias: enseñamos conocimientos, pero no enseñamos a saber hacer.

Pero las competencias, ¿son un camino o un objetivo?
Yo creo que son un objetivo. Desde pequeños nos piden que seamos competentes, se nos plantean problemas y hay que darles respuesta. El término “competencia” aparece precisamente como consecuencia de una escuela que se ha centrado en los marcos teóricos y no en cómo dar respuesta a los problemas que plantea la comprensión e intervención en  la realidad.

¿Y cómo deberíamos cambiar de marco?
Ahí radica la gran dificultad, ¿cómo cambiamos un modelo que está basado en la asimilación del conocimiento a uno que desarrolle las habilidades para solucionar problemas? Un cambio de modelo así puede tardar hasta dos generaciones en llevarse a cabo, alargándonos en el tiempo unos 30 años. Hay que tener claro el modelo al que queremos dirigirnos para no hacer una transición en vano.

¿Cuántas competencias podemos identificar?
EL número de competencias puede ser infinito y es difícil ponerse de acuerdo. Yo creo que lo importante es identificar dos tipos. Por un lado, las que están relacionadas con las asignaturas que hemos considerado válidas y que hemos planteado toda la vida: las matemáticas, las ciencias sociales, las ciencias naturales, etc. Por otro lado, están las competencias para la vida, aquellas herramientas que van más allá del orden académico y que podemos utilizar para resolver situaciones cotidianas, personales e intrapersonales.

Pero los teóricos establecéis etiquetas concretas.
Sí, pero dependen del marco teórico al que te ciñas. En Cataluña, por ejemplo, identificamos ocho, pero se pueden subdividir. Lo interesante no es numerar competencias, sino trabajarlas. Lo más importante es saber qué tipo de ciudadanos queremos y establecer un sistema competencial que nos permita realizarnos como tal.

¿Desarrollar  competencias no es inherente al aprendizaje?
Cuando aprendes algo que es resultado de un problema que se te ha planteado y lo has resuelto, sí se puede decir que se ha desarrollado una competencia. Pero no podemos decir lo mismo de los aprendizajes dentro del sistema educativo. Tenemos una escuela que está dividida en materias que además han traicionado las propias materias.

¿A qué se refiere?
Estudiamos química por saber química, igual con la geografía, las matemáticas o la historia, en vez de aprender de todas estas disciplinas para aplicarlas al conocimiento de nuestro entorno. Sabemos formulaciones químicas, pero no sabemos aplicarlo a nuestra cotidianeidad. El objeto de estudio debería ser la vida, no la materia en sí.

Hay escuelas que están incorporando ya técnicas del aprendizaje por competencias. ¿Cómo valora sus resultados?
Creo que hay que diferenciar las escuelas que proceden de una tradición anglosajona, que solo deben profundizar en sus sistemas para incorporar las competencias, a tradiciones como la nuestra, que necesitamos hacer un cambio global de perspectiva. Las valoraciones deben hacerse poniendo en valor esta apreciación.

¿Nuestros centros educativos tienen margen para abordar este cambio?
El problema radica en los recursos de los que se dota el sistema para realizar cambios en algún sentido. Hay un déficit claro de herramientas y de materiales educativos, pero también en la formación del profesorado. Cuando se les plantea una actividad competencial, la mayoría se sienten inseguros y tienden a realizar aquellas actividades en las que se sienten más cómodos.

¿Qué pueden aportar las TIC al aprendizaje por competencias?
Creo que lo más interesante que pueden aportar es la posibilidad de adaptar los aprendizajes a las necesidades de cada alumno, es decir, a personalizar el aprendizaje. Son una buena herramienta para trabajar sobre la diversidad en las aulas. Los docentes se podrían liberar de algunas rutinas y dedicarse a otras acciones.

¿Qué cualidades destacaría de un buen docente?
En primer lugar, la capacidad empática: si no quieres a tus alumnos, mejor dedicarse a otra cosa. También es importante ser sensible a los cambios de la sociedad y del mundo, y mantener despierto el interés por aprender. Por último, el trabajo en equipo.

Fuente entrevista: http://blog.tiching.com/antoni-zabala-ensenamos-conocimientos-saber-hacer/

Comparte este contenido:

La resolución de problemas en las matemáticas

22 de noviembre de 2017 / Fuente: https://compartirpalabramaestra.org

Por: Robinson Conde Carmona

Herramientas necesarias y suficientes para desarrollar un buen trabajo, y presentar una propuesta que es nacida de un gran proceso científico por medio de la discusión. 

La Resolución de Problemas en las matemáticas es, quizás, el tema de investigación que tienen en su contenido la mayoría de las tesis de pregrado y postgrado, ya que es sin lugar a dudas, existe una problemática universal en esta línea (Socas, 2013), en muchos países se ha comprobado que el termino Resolución de Problemas tiene varios significados en muchos países, incluso dentro del mismo país, por ello no cualquiera puede referirse a este término sin hacer antes una revisión histórica y epistemológica de su significado en Educación Matemática (Törner, Schoenfeld y Reiss, 2008).

Según las Pruebas PISA 2015, 2012, 2009, 2006, y  2003, Colombia Históricamente ha tenido un bajo desempeño en Resolución de Problemas, además de eso Colombia es uno de país latinos con menores niveles en compresión Lectora (OCDE, 2016). A esto sumándole que según De Zubiría (2016) y la Fundación Alberto Meraní, el 93% de los estudiantes de 11° tienen la compresión  de un niño de 7 años, esto es importante porque la Resolución de Problemas, incluso en matemáticas tiene una estrecha relación con la compresión lectora, en ocasiones el estudiante tiene los conocimientos matemáticos suficientes para resolver el problemas, pero su problemas en compresión lectora en hacer análisis, inferencias, interpretaciones, de la información arrojada por el problema, provoca unos pobres resultados en la solución (Törner, Schoenfeld y Reiss, 2008).

Además de eso, muy pocos conocen la Heurística detrás de la resolución de problemas (Palarea, 2014). El modelo más clásico, pero aún vigente, de las fases por las que atraviesa la RPM (Resolución de Problemas Matemáticos) es el descrito por Polya (1945). Para él la RPM es un proceso que consta de cuatro fases:

  • Comprensión del problema
  • Planificación
  • Ejecución del plan
  • Supervisión

Por otro lado, en Colombia se hacen pruebas saber en 3°, 5°, 9° y 11° y se hacen pruebas pilotos para aplicarlas también en 7°, según los Estándares Básico en Matemáticas (2007) y el ICFES (2017), las pruebas y los Estándares tienen una estrecha relación, la prueba de tercero grado por ejemplo, no evalúa solo las competencias aprendidas en ese grado, sino también las aprendidas en 1° y 2°, así como la de 5° que evalúa también las aprendidas en 4°, o la de 9° que evalúa también las de 8° y así mismo las de 11° que evalúa también las de 10°. Esto es coherente con los Estándares que relaciona las competencias así (1°-3°), (4°-5°), (6°-7°), (8°-9°) y (10° y 11°).

Para superar las dificultades en la resolución de problemas no es suficiente con hacer un plan de mejoramiento, decir esto es incurrir en un adefesio pedagógico, o por lo menos a las medidas correctivas para este fenómeno, ese no debe ser el nombre que debe tomar (Socas, 2010), por ejemplo en 3° que es la primera vez que se enfrentan a las Pruebas Saber, los buenos resultados dependen de las políticas institucionales alrededor de estas pruebas, para que los resultados sean satisfactorios se necesita de una cultura y un recorrido desde 1°, solucionando problemas, la experiencia en la Resolución de Problemas durante esos tres años son fundamentales en los resultados.

Además de eso, dado que la Resolución de Problemas es una habilidad de pensamiento Superior (Lopez, 2012), es una habilidad que no todos desarrollan al mismo tiempo, con las mismas destrezas, con el mismo potencial, los estilos de aprendizajes son muy particulares a cada estudiantes, no podemos homogenizarlos en este sentido, hacerlo es desconocer es ser un ignorante hallazgos actuales en Educación.

Para impactar en el mejoramiento en la resolución de problemas en matemáticas, se necesita hacer un trabajo Investigativo riguroso, que permita encontrar las causas y los factores que están alterando esta situación, identificar cuáles son los obstáculos epistemológicos (Gedisa, 2001), que permitan hacer una re-orientación de los procesos y tomar decisiones y políticas que permitan que los estudiantes avancen significativamente en este horizonte. Pero, para hacer un trabajo de tal magnitud se necesita mucho tiempo por parte de los docentes, tiempo que a veces no se tiene por las excesivas carga laborales, y por cumplir a cabalidad con los programadores y contenidos del plan de área.

La investigación en resolución de problema en matemáticas se ha vuelto atractiva solo para el que puede desarrollarse desde fuera, cuenta con las herramientas necesarias y suficientes para desarrollar un buen trabajo, y por último presentar una propuesta, que es nacida de un gran proceso científico a través de la discusión (Teoría vs análisis de la información); y esto no se logra un simple o mejor dicho mal llamada Plan de mejoramiento, que termina siendo solo un maquillaje que no impacta significativamente los procesos dentro de la Educación.

Fuente artículo: https://compartirpalabramaestra.org/articulos-informativos/la-resolucion-de-problemas-en-las-matematicas

Comparte este contenido:

Quebrando el paradigma de hospedaje de un Sistema de Gestión de Aprendizaje (LMS) en su propio servidor

Por: Lars Janér

Es una nueva era para el aprendizaje. Las nuevas tecnologías alteran la industria en todo momento, y los administradores de educación superior aprovechan esta oportunidad para reevaluar todo, desde los programas que ofrecen hasta los sistemas utilizados para ofrecerlos. Uno de los temas más fundamentales en este proceso está centrado en el sistema de gestión de aprendizaje (en Inglés Learning Management System, LMS) que, no en vano, es una de las primeras herramientas que los administradores buscan actualizar.

Hasta hace poco, las instituciones de educación superior tenían opciones escasas de LMS. La mayoría de las escuelas optaba por sistemas de gestión de aprendizaje con servidores propios de de código abierto, pués esta opción está más de acuerdo con los principios educativos modernos, y la hospedaje en la institución parecía ofrecer más control. Todavía, hoy las instituciones abandonan cada vez más estos sistemas heredados (y con frecuencia  “toscos”) y los reemplazan con LMS nativos en la nube que cuentan con API abiertas, aprovisionamiento automatizado, interfaces muy fáciles de usar y seguridad impecable.

En estas páginas, exploraremos algunos de los motivos principales que desencadenan esta mudanza masiva.

EL VERDADERO COSTO DE LA TITULARIDAD

En el caso de las opciones “gratuitas” tradicionales de servidor propio, el código está disponible, pero existen muchos costos asociados. La mayoría de esos costos se relaciona con el personal administrativo necesario para ejecutar el sistema, pero hay además otros costos que  se acumulan rápidamente: hardware, gastos generales institucionales, el costo de oportunidad de no estar alineados con el aprendizaje del siglo XXI y costos imprevistos, asociados con la carga de ejecutar un sistema propio, tales como los gastos en brechas de seguridad, fallas e inactividad.

Al considerar todos los puntos asociados con estas opciones de software “gratis” hospedados en un servidor propio, muchas instituciones ya perciben que la palabra “gratuito” no hace honor a su significado, lo que provoca que reevalúen sus sistemas actuales y se trasladen a opciones más nuevas y mejores como Canvas.

Canvas es un sistema de gestión de aprendizaje basado en la nube, de fuente abierta y alojado en un servidor comercial que simplifica los costos al reunirlos  en una única suma total, y deja libre la atención de las instituciones y su equipo para enfocarse en desafíos más importantes. Las instituciones que han hecho recientemente la transición a Canvas desde otros LMS afirman que Canvas posee un valor sin precedentes cuando se trata de lo siguiente:

  • Disponibilidad: 99,9 % de tiempo de actividad con aprovisionamiento automatizado para un rendimiento máximo.
  • Confiabilidad: servidor, seguridad, respaldo y actualizaciones sin intervención del usuario.
  • Asistencia: servicio de nivel mundial y un amable equipo de asistencia.
  • Utilidad: más fácil de usar y mejor funcionalidad.

EL PODER DE LA NUBE

Los sistemas de gestión de aprendizaje popularmente conocidos para ejecución en servidores locales, tienen problemas para competir en la nueva era del software de gestión de aprendizaje basado en la nube. Un sistema de gestión de aprendizaje que es nativo de la nube significa que las instituciones no necesitan preocuparse por comprar, configurar y mantener hardware y software para el servidor. No necesitan dedicar personal valioso de TI al mantenimiento del LMS y no necesitan preocuparse por las brechas de seguridad, el tiempo de inactividad o la aplicación de actualizaciones y parches.

En su calidad de único LMS realmente nativo de la nube, Canvas ha experimentado un aumento de la popularidad en todo el mundo. Su arquitectura de múltiples usuarios aprovecha Amazon Web Services para distribuir servicios informáticos a pedido. Esto permite a Canvas ofrecer aprovisionamiento automatizado en condiciones de carga pesada, redundancia de datos y conmutación por error en todas las geografías, y actualizaciones sin intervención del usuario que no requieren tiempo de inactividad.

Además, cada vez se vuelve más claro el potencial de la nube para crear comunidades de usuarios más unidas. En la nube, todos tienen la misma versión: la más reciente. Los usuarios se benefician equitativamente de los avances, y todos hablan el mismo “idioma”.

Canvas tiene una de las comunidades de usuários en Educación más activas de la actualidad. Dentro de su comunidad en línea, los miembros comparten ideas y planes de lecciones, debaten temas sobre tendencias en educación, participan en actividades de desarrollo profesional, se conectan con otros usuarios y dan forma a la ruta de producto mediante sugerencias y votaciones.

Con la tecnología actual, las escuelas no deberían tener que preocuparse por mantener un sistema de gestión de aprendizaje. En su lugar, deberían utilizar esos recursos en iniciativas que influyan de manera fundamental en la enseñanza y el aprendizaje, tanto del presente como del futuro.

SEGURIDAD

Proteger los datos de profesores y alumnos es crucial para las instituciones de educación superior. En un mundo de piratas y fallas de servidores, el servidor propio puede poner en riesgo a las instituciones. Algunas instituciones han creado equipos dedicados para el tema y han invertido mucho dinero en infraestructura para ofrecer redundancia de datos y una seguridad minuciosa.

Esa clase de inversión es un lujo para la mayoría de las instituciones, y las que no pueden pagar un marco de seguridad propio exclusivamente para ese fin quedan en una posición precaria.

Canvas protege legalmente la privacidad del usuario al aprovechar el servicio de servidores en la nube más seguro disponible: Amazon Web Services. Además, Canvas emplea un equipo de seguridad de clase mundial exclusivamente dedicado a proteger los datos del cliente. Se hace una copia de seguridad de cada byte automáticamente casi en tiempo real, en múltiples centros de datos en diferentes geografías.

Canvas también es el único LMS que realiza auditorías de seguridad abiertas anualmente, en las que una compañía externa básicamente “piratea” la plataforma e informa todos los puntos débiles o vulnerabilidades.

Todo el informe es entonces publicado y aborda los problemas de inmediato. Adicionalmente, como Canvas es de fuente abierta en GitHub, el código está disponible para que cualquier persona lo analice. Este tipo de transparencia ayuda a los usuarios a sentir confianza en la seguridad de la base de código de este LMS, además del manejo de soluciones de seguridad.

ENFOQUE EN EL FUTURO

A medida que las instituciones evalúan sus sistemas y ofertas actuales, es importante que piensen en el futuro. En lugar de basar las evaluaciones únicamente en las condiciones actuales, las instituciones deben pensar en dónde necesitan estar dentro de 3 a 5 años. Por ejemplo, los profesores y los alumnos interactúan cada vez más a través de dispositivos móviles. ¿Su sistema de gestión de aprendizaje tiene aplicaciones móviles nativas?

Canvas se creó para un mundo móvil y ofrece un conjunto de aplicaciones móviles con funciones completas e integradas.

¿Y qué sucede con el video? Las investigaciones indican que el video es uno de los medios más populares para el aprendizaje en el hogar, en el trabajo y, más importante aún, en la escuela. Los profesores y los alumnos usan video en entornos de aprendizaje a niveles sin precedentes.

Al igual que Canvas, su LMS debería incluir funcionalidades esenciales de video tales como captura de video integrada, retroalimentación de video y la posibilidad de conferencias. El aprendizaje semipresencial y la educación a distancia siguen creciendo en popularidad, pero para  implementar estos métodos, las instituciones necesitan un sistema de gestión de aprendizaje moderno que sea fácil de usar, adaptable a las necesidades específicas de los alumnos y capaz de integrarse sin problemas con otros softwares populares.

Con la tecnología actual, las escuelas no deberían tener que preocuparse por mantener un sistema de gestión de aprendizaje. En su lugar, deberían utilizar esos recursos en iniciativas que influyan de manera fundamental en la enseñanza y el aprendizaje, tanto del presente como del futuro. El modelo de Canvas de fuente abierta comercial realmente es lo mejor de ambos mundos: ofrece a las escuelas la libertad de determinar cómo y con qué fin utilizan la plataforma, y proporciona acceso a una creciente comunidad que ayuda a mejorar el código del núcleo, lo que garantiza que el software mejore tan rápidamente como evolucionen los alumnos, los profesores y las prácticas educativas.

Canvas respalda iniciativas abiertas de muchas formas: educación abierta, estándares abiertos, contenido abierto, investigación abierta; no solo software de fuente abierta. Porque cuando se trata de enseñar y aprender, la transparencia es la única forma de avanzar.

Fuente: http://www.educacionfutura.org/quebrando-el-paradigma-de-la-hospedaje-de-un-sistema-de-gestion-de-aprendizaje-lms-en-su-propio-servidor/

Comparte este contenido:

Libro: Guía para la educación inclusiva. Desarrollando el aprendizaje y la participación en los centros escolares

España / 19 de noviembre de 2017 / Autor: Tony Booth y Mel Ainscow / Fuente: OEI

Resumen

La Guía para la educación inclusiva es una traducción de la 3ª edición revisada y ampliada del Index for Inclusion, de los profesores Mel Ainscow y Tony Booth. La obra busca ser un modelo formativo en la que a través de un conjunto de indicadores, orientaciones y preguntas, pretende ayudar a la reflexión de los equipos docentes, para llevar a la práctica los principios y valores que deben sostener una educación para todas y todos.

Índice

Prólogo a la edición en español

Agradecimientos

Contexto de la tercera edición del Index

Palabras de aliento

Parte 1ª. Una visión general del Index1

Parte 2ª. Un enfoque integrado para la mejora escolar en tu centro1

Una guía para la inclusión

Desarrollando un marco de valores

Estableciendo alianzas

Prestando atención al curriculum

Barreras, recursos y apoyos

La revisión de los materiales

Parte 3ª. Usar el Index para pasar a la acción

Rutas hacia la inclusión

Comenzando

Descubriendo juntos

Elaborando un plan

Pasando a la acción

Revisando los avances

Parte 4ª. Indicadores con preguntas

Dimensión A: Creando culturas inclusivas

A1: Construyendo comunidad

A2: Estableciendo valores inclusivos

Dimensión B. Estableciendo políticas inclusivas

B1: Desarrollando un centro escolar para todos

B2: Organizando el apoyo a la diversidad

Dimensión C. Desarrollando prácticas inclusivas

C1: Construyendo un curriculum para todos

C2: Orquestando el aprendizaje

Parte 5ª.  Marco de planificación y cuestionarios

Marco de planificación

Cuestionario 1. Indicadores

Cuestionario 2. El centro escolar de mi hijo

Cuestionario 3. Mi centro escolar

Cuestionario 4. Mi colegio

Parte 6ª. Recursos

Referencias bibliográficas

Documentos sobre derechos humanos ratificados internacionalmente

Fragmento

Es una enorme satisfacción para el equipo que formamos el “Consorcio para la Educación Inclusiva” (http://www.consorcio-educacion-inclusiva.es/) volver a estar implicados (como ya lo estuvimos hace doce años con motivo de la segunda edición), en la traducción, adaptación y difusión de un obra tan importante de los profesores Tony Booth y Mel Ainscow, como es la tercera edición del Index for InclusionDeveloping learning and participation in schools. Seguramente pocos trabajos hayan tenido tanto impacto internacional en la forma de pensar y actuar en favor de una educación más inclusiva como el Index, algo que queda de manifiesto en la gran cantidad de lenguas a las que está traducido y en las miles de referencias que, a la misma, se encuentran en la literatura sobre educación inclusiva.

Hoy sabemos bien que el concepto de educación inclusiva tiene muchos significados y lecturas algunas de ellas complementarias entre sí (pues se trata, en definitiva, de una determinada forma de entender la educación escolar que, por ello, compromete transversalmente a todos los elementos de un sistema educativo), pero también otras reduccionistas que no compartimos; por ejemplo, cuando se la identifica con la educación especial o solamente con la preocupación por determinados alumnos y alumnas en mayor riesgo de exclusión.

Lo que los profesores Ainscow y Booth nos vienen a decir –en particular este último, principal responsable de los importantes cambios que esta tercera edición incorpora–, es que tras las múltiples facetas o caras en las que se manifiesta y compromete la educación inclusiva hay un núcleo fundamental que les da sentido, y que no es otro que el conformado por un conjunto específico de valores y principios éticos vinculados a temas, tan importantes para cualquier proyecto de sociedad, como son su posicionamiento frente cuestiones como la diversidad humana, la sostenibilidad del planeta, la participación, los derechos o el cuidado de los más vulnerables, entre otros. Por estas razones, y cada día con más urgencia, es necesario un marco de referencia claro y preciso que ayude a los educadores (en la acepción más amplia del término educadores), a concretar y llevar a la acción a través de los diferentes sistemas de prácticas en los que interviene y del curriculum que implementan, el conjunto de valores a los que hace referencia la inclusión.

El Index, por usar el término abreviado con el que a lo largo de la obra nos referiremos a la Guía para la educación inclusiva. Mejorando el aprendizaje y la participación, aspira precisamente a cumplir esa importante función: servir de guía para docentes y equipos educativos ante dos tareas interdependientes. En primer lugar, para repensar cuáles son los valores que mueven su acción y sobre aquellos que realmente quisieran que lo hicieran. En segundo término, para iniciar y sostener procesos de mejora e innovación escolar guiados por los valores inclusivos que se someten a consideración en este trabajo. Las Partes 1, 2 y 3 del Index recogen precisamente estos análisis.

Como cualquier buena guía de viaje (y el símil del viaje es adecuado para la tarea de la mejora escolar), el Index puede ser utilizado de muchas maneras distintas y en ello reside, precisamente, su enorme riqueza y funcionalidad. Por un lado, es exhaustivo en su escrutinio de los múltiples aspectos que configuran las culturas, las políticas y las prácticas escolaressusceptibles de sostener, ¡o no ¡ valores inclusivos. Pero también permite un uso versátil y ágil, de forma que, del mismo, pueden sernos de utilidad inmediata solo algunos de sus indicadores o alguna de las múltiples preguntas que nos formulan los autores, con el deseo de que se puedan interrogar las prácticas y las razones y valores que las sostienen. Como en la anterior edición, la Parte 4 presenta ordenadas las dimensiones, los indicadores y las preguntas que configuran el grueso de la Guía, siendo destacable por su novedad la Sección C.1 dedicada a revisar la tarea de “construir un curriculum para todos”. En ella se hacen propuestas para repensar el curriculum, bajo el prisma de la imperiosa necesidad de promover un desarrollo sostenible y, con ello, poner freno al desastre medioambiental hacia el que parece que estamos irremediablemente abocados de no mediar, precisamente, un cambio radical en la educación de las nuevas generaciones. La sostenibilidad es condición necesaria y urgente para la inclusión.

Finalmente la Parte 5, proporciona, a modo de ejemplos, distintos Cuestionarios que podrían ser usados para promover la participación de los distintos agentes educativos (profesorado, familiares, alumnado), en los procesos de indagación y reflexión en juego, proceso interminable pero no por ello inabarcable. Será precisamente el buen hacer de los equipos directivos y de los grupos de coordinación de estas iniciativas quienes tengan como principal tarea ayudar a sostener un proceso que, poco a poco, debe hacer visible en el día a día, que la educación inclusiva no es una cuestión retórica sino posible.

Aunque la segunda edición que nosotros tradujimos y adaptamos tuvo una importante difusión, a pesar de los modestos recursos con la que acometimos esa tarea, estamos convencidos que la difusión de esta edición será mucho mayor y más eficaz, gracias al compromiso que en ello han asumido la Fundación Hogar del Empleado (FUHEM) y la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI). Ambas instituciones, desde su rol y contexto, están fuertemente comprometidas con el sentido y los valores de la educación inclusiva y ambas han dejado constancia de ello en los documentos que explicitan su visión, misión valores. Estamos muy agradecidos por su incondicional apoyo desde el primer momento en el que se les planteó este proyecto de edición y el mismo no es sino una muestra más de su firme apuesta por una educación de calidad para tod@s y con tod@s.

Por otra parte, esta edición estará disponible tanto en papel como en formato electrónico. La primera podrá adquirirse a través del servicio de ediciones de la FUHEM por aquellos que quieran tener “a mano” un material llamado a estar presente en las salas de profesores y los despachos de los departamentos de los centros escolares, ¡ojalá que manchada y arrugada por el uso! Pero es deseo de los autores –Tony Booth y Mel Ainscow– que su trabajo llegue al mayor número posible de destinatarios, minimizando las barreras que limiten su conocimiento y uso, y eso hoy lo facilita, como todos sabemos, Internet. Por ese motivo la obra estará disponible en distintas webs; la de la OEI, la de la FUHEM, la de la Index for Inclusion NetWorkpromovida específicamente por Tony Booth a tal fin y, por supuesto, en la del Consorcio para la Educación Inclusiva, así como en la de la Red de Colaboración para la Inclusión Educativa y Social (REDCIES), que también ha colaborado en este proyecto, toda vez que compartimos con sus miembros y con otras muchas “buenas gentes”, el sueño inalcanzable pero movilizador de que los centros escolares sean precursores de la sociedad inclusiva en la que nos gustaría vivir.

Consorcio para la Educación Inclusiva
http://www.consorcio-educacion-inclusiva.es/

 

Link para la descarga:

http://www.fuhem.es/media/educacion/File/Guia_Educacion_Inclusiva_FUHEM.pdf

 

Fuente de la Reseña:

http://www.oei.es/historico/publicaciones/detalle_publicacion.php?id=151

Comparte este contenido:
Page 72 of 112
1 70 71 72 73 74 112