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Innovar en educación

Por JOAN SUBIRATS

Debería preocupar que la falta de adaptación a los nuevos sistemas concentre el progreso en los sectores con más recursos

Son muchas las señales que indican que el sistema educativo, en su conjunto, no está siendo capaz de responder adecuadamente a las exigencias que está generando el cambio de época en el que estamos inmersos. Y ello es especialmente significativo dado el papel clave que el conocimiento juega en un nuevo escenario en el que muchas rutinas y formas de hacer van viéndose rápidamente arrinconadas. No es solo un problema de la enseñanza formal y obligatoria. Afecta a cualquier franja de edad y a cualquier espacio formativo. De la escuela infantil a la universidad pasando por la formación de adultos o continua. No hay que inventar la rueda. Se trata de aprovechar muchas prácticas y metodologías ya probadas y combinarlas con la imprescindible componente tecnológica que con tanta rapidez altera y transforma nuestras vidas.

Esa marea innovadora ha llegado al sistema educativo catalán. Bajo los auspicios de diversas instituciones como la Fundació Bofill, el Centre Unesco, la UOC o eduCaixa, se ha puesto en marcha Escola Nova 21. Las expectativas son importantes: “Generar un ecosistema educativo que dé respuestas a las necesidades del siglo XXI… creando un marco con las características educativas que debe tener una escuela avanzada”. La voluntad es contar con las escuelas que ya destacan por su capacidad de innovación y generar un sistema de aprendizaje cruzado y de acompañamiento que permita modificar de manera sustantiva los métodos y los contenidos del aprendizaje, situándolo en el nuevo escenario tecnológico. El documento de la Unesco, Repensar la educación, y sus precedentes (Informe Delors de 1996 y Faure de 1972) sirven de pauta.

Si algo ha quedado claro en estos años es que no todo el mundo quiere decir lo mismo cuando habla de innovación. Y también ha quedado claro, como siempre, que hay quienes ganan y hay quienes pierden en cada cambio generado. Desde una perspectiva crítica, se insiste en que dos parámetros a aplicar para diferenciar las distintas modalidades de innovación social que se propugnan (tanto desde la OCDE, el FMI o el Banco Mundial, como de movimientos sociales alternativos), son analizar el grado de impacto real que las propuestas de innovación generan en aspectos sustantivos relacionados con el bienestar ciudadano y sus condiciones de vida, así como examinar el cambio en las relaciones de poder pre-existentes. Las preguntas a hacerse son, por tanto, si las medidas innovadoras consiguen alterar de manera significativa temas clave hoy no resueltos en la enseñanza pública como son la equidad en el acceso a una educación creativa, que propicie la perspectiva crítica y la autonomía personal, y si eso lo hace cambiando los equilibrios de poder y de capacidad de decisión hoy existentes en el sistema de actores de la comunidad educativa. Nos debería por tanto preocupar, como bien dice el texto de la Unesco, que la falta de adaptación de los sistemas educativos acabe concentrando las dinámicas innovadoras en los sectores con más recursos y capacidades cognitivas y relacionales, incrementando así la desigualdad hoy ya significativa, como apunta el último informe del Síndic de Greuges.

Por otro lado, la perspectiva adoptada sigue estando básicamente centrada en la enseñanza, sin aspirar a modificar el conjunto del sistema educativo. No se trata de culpar a los promotores, sino de echar en falta perspectivas innovadoras similares en las universidades y en la formación de adultos, espacio este último que sigue estando dramáticamente desatendido. Es importante aprovechar la creciente preocupación por los desajustes entre prácticas tradicionales y entorno en transformación para replantear el papel de la educación. En el Informe de la Unesco se apunta a la necesidad de superar la división entre educación formal e informal, cuando los espacios formativos y de experimentación se multiplican y permiten experiencias educativas en procesos de “aprendizaje de servicio”, prácticas laborales o procesos de movilización social.

Pero también apunta ese informe a la necesidad de considerar la educación como un bien común. Como un derecho humano fundamental, garantizado por los poderes públicos, con la corresponsabilidad de cada comunidad, que asume así colectivamente la importancia del acceso de todos y la mejor provisión de ese bien común. El informe concluye: “El hecho de considerar la educación y el conocimiento como bienes comunes mundiales podría reconciliar el propósito y la organización del aprendizaje como una empresa social colectiva en un mundo cambiante”.

http://ccaa.elpais.com/ccaa/2016/12/03/catalunya/1480788069_988119.html

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Costa Rica:Arenas submarias y sistemas para purificar el agua brillaron en Feria Nacional de Ciencia y Tecnología

Centroamérica/Costa Rica/Noviembre de 2016/Autora: Patricia Recio/Fuente: La Nación

Sistemas de purificación del agua, arenas submarinas y hornos caseros hechos de barro, fueron algunos de los proyectos ganadores durante la final de la Feria Nacional de Ciencia y Tecnología 2016.

Esta actividad, que convoca a estudiantes de primaria y secundaria, tuvo lugar este año en las instalaciones deportivas de la Universidad de Costa Rica (UCR). Hoy en la mañana se realizó la premiación.

En total, 280 niños jóvenes de las 27 regiones educativas del país presentaron proyectos en Biología, Ciencias Ambientales, Ciencias de la Computación, Ciencias de la Tierra y el Espacio, Ciencias Sociales y del Comportamiento, Física y Matemática, Ingeniería y Tecnología, Salud y Medicina y Química.

Además, los centros educativos con modalidad indígena compartieron trabajos de investigación relacionados con su entorno y problemas locales.

Entre los trabajos reconocidos en secundaria, seis recibieron una mención a la innovación científica y tecnológica y tendrán la posibilidad de competir en el Costa Rica ISEF Challenge, coordinado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones (MICITT) e Intel.

Entre estos seis proyectos, junto a los seis elegidos el pasado jueves en Expo Ingeniería (feria que tuvo lugar en el Estadios Nacional con 119 estudiantes de colegios técnicos) se escogerá a quienes representarán al país en la próxima Feria de Ciencia e Ingeniería de INTEL (ISEF) que se realiza anualmente en Estados Unidos.

La Feria Nacional de Ciencia y Tecnología constituye la etapa final tras la clasificación que se hace primero a nivel de centros educativos, circuitos y regiones como parte del Programa Nacional de Ferias de Ciencia y Tecnología.

El objetivo de este programa es estimular el interés por la ciencia y la tecnología, así como el desarrollo del pensamiento crítico y creativo desde edades tempranas. Además, permite un acercamiento al conocimiento científico y tecnológico y muchos de ellos buscan solucionar problemáticas en su entorno.

El documento adjunto muestra el nombre de todos los proyectos ganadores.

Fuente: http://www.nacion.com/vivir/ciencia/MICITT-talento-cientifico-escolares-colegiales_0_1596840374.html

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El BID lanza un concurso de ilustraciones sobre historias de innovación en la región

Noviembre de 2016/Fuente: BID

El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) abre la convocatoria de ilustraciones «INKNOVATION» para dibujantes y artistas de América Latina y el Caribe que quieran ilustrar algunas historias de innovación en ámbitos científicos, tecnológicos y sociales que se dieron en la región con apoyo de programas del Banco. En concreto, el concurso busca que los postulantes capturen de manera creativa 10 proyectos de innovación. Cada participante podrá presentar un total 3 ilustraciones que se refieran a 3 proyectos diferentes.

Los temas de los proyectos a ilustrar tienen que ver, por ejemplo, con científicos que desarrollan vacunas y tratamientos para enfermedades que afectan a miles; empresas que apuestan a la tecnología para modernizar sus procesos; ingenieros que crean dispositivos que aportan a la productividad de diversas industrias; emprendedores que conciben nuevos modelos de negocio mediante tecnologías digitales, e innovadores sociales que transforman las vidas de aquellos más vulnerables.

Como premio, los finalistas del concurso (hasta un máximo de diez) tendrán sus ilustraciones publicadas en un libro de crónicas periodísticas a ser lanzado próximamente por el BID. Esta publicación, que será distribuida por la Editorial Planeta, cuenta con la participación de la reconocida periodista Leila Guerriero como editora, así como de talentosos cronistas latinoamericanos como autores.

Igualmente, aparte de que sus obras formen parte del libro, los finalistas recibirán tabletas de diseño digital profesional y los trabajos destacados tendrán menciones de reconocimiento. Un jurado constituido por evaluadores del ámbito de la cultura y la comunicación, internos y externos al BID, seleccionará las ilustraciones finalistas y ganadoras.

Además de visibilizar el talento de dibujantes de toda la región, este concurso en conjunto con el libro de crónicas a ser publicado constituye una invitación a reflexionar, desde las artes, la literatura y el periodismo, sobre el impacto de la innovación en el crecimiento económico y en la mejora de la calidad de vida de las personas.

Para más información relacionada con los reglamentos del concurso y para participar visite la web www.iadb.org/inknovation. La fecha límite para postular ilustraciones es el 30 de noviembre hasta las 11:59 p.m. (hora del este de los Estados Unidos).

Fuente: http://www.iadb.org/es/noticias/anuncios/2016-11-09/concurso-de-ilustraciones-sobre-innovacion,11636.html

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La ciencia no es un lujo

Por: Agustín Lage Dávila

En su discurso al inaugurar el Centro de Inmunología Mo­lecular el 5 de diciembre de 1994 Fidel dijo: «Es un orgullo en pleno periodo especial inaugurar este Centro que no es un lujo, es una promesa de salud para nuestro pueblo y es una promesa de ingresos para nuestra economía». Lo dijo con un énfasis muy evidente, y lo escuchamos muy de cerca.

Esa advertencia enfática nos hacía ver que existían (y aún existen) compañeros que piensan que la ciencia es un lujo, un gasto improductivo, o al menos no inmediatamente productivo, que solo pueden permitirse las sociedades opulentas del norte, o los diletantes del sur ; o quizá algo relacionado con un distante futuro de lo que podemos ocuparnos «después».

Son muchos de ellos buenos cuadros, empeñados en defender la Revolución y en hacerle frente con gran esfuerzo, a las presiones económicas de la vida cotidiana. Las urgencias económicas llevan a algunos (por suerte para Cuba, no a sus grandes líderes) a desarrollar una visión de corto plazo. Siempre hemos vivido bajo presiones económicas urgentes, primero por la economía dependiente, y pobre que heredamos del capitalismo periférico, a lo que se sumó luego el feroz bloqueo norteamericano contra Cuba, después la desaparición de la URSS y el periodo especial, y finalmente las tendencias actuales de la globalización neoliberal. Pocos países han vivido bajo presiones económicas de tal magnitud y duración. Y como dicen algunos compañeros con visión cortoplacista, para tener un futuro, primero hay que trabajar para llegar hasta ese futuro. Se les puede comprender, pero esa comprensión no nos exonera de decir que están equivocados, y de explicar porqué.

Y he aquí cuatro razones, dichas de manera muy directa, sin matices, precisamente con el objetivo de motivar el debate:

  1. No hay desarrollo económico posible sin inserción de la ciencia en la economía, no en nichos de excelencia, sino en toda la economía. En el mundo de hoy la producción de prácticamente cualquier cosa tiene un contenido de conocimientos y tecnología grande y creciente. Un componente esencial del desarrollo es el «valor agregado» de las producciones, es decir, la diferencia entre el valor de los insumos materiales y el valor final de lo producido. Esa diferencia la crea el trabajo, pero la función transformadora del trabajo depende cada vez más de los conocimientos y las tecnologías. Ningún país se desarrolla hoy produciendo mucho, con mucha gente y mucho esfuerzo, pero con escaso valor añadido.
  2. Sin capacidad científica no habría tampoco capacidad de asimilar tecnologías foráneas. La capacidad de utilizar el conocimiento y asimilar tecnologías de origen externo está cada vez más vinculada a la capacidad de generar conocimientos y tecnologías propios. No estamos ya en el siglo XX. El reforzamiento de las conexiones de la ciencia con otros procesos económicos y sociales contiene fenómenos relativamente nuevos, difíciles de comprender con los esquemas mentales del pensamiento económico clásico. En este siglo XXI las tecnologías cambian mucho y rápido. Es la práctica de producir conocimiento nuevo (y esto es «la ciencia») lo que habilita a una sociedad para interpretar, adaptar, mejorar y asimilar el conocimiento que se genera en otros países.
  3. Como país pequeño que somos, nuestra eficiencia económica depende de nuestra capacidad de insertarnos en la economía mundial, y eso solamente es posible con las palancas de la ciencia y la técnica. Es parte integrante de la defensa de la soberanía nacional. La palanca principal del crecimiento económico para Cuba no puede ser el tamaño de la demanda interna, como lo es para China, pues somos solamente 11 millones de cubanos. Tiene que ser nuestra inserción en la economía mundial; y esto no lo podemos hacer, como lo hacen los países petroleros por ejemplo, con recursos naturales que nosotros no poseemos. Nuestra inserción en las cadenas productivas transnacionales, y en los flujos mundiales de bienes, servicios y capitales habrá que hacerla con las palancas de la ciencia y la técnica.

Producir bienes de alto contenido tecnológico y valor añadido es poco rentable (con escasas excepciones) para la demanda interna de 11 millones de habitantes, por los altos costos fijos y de capital que tienen estas producciones. La disyuntiva es clara: o creamos capacidades para exportar productos de alto valor, o producimos bienes y servicios de escaso valor.

  1. 4. Sin una economía técnicamente desarrollada no es posible el Socialismo. Esta cuarta razón ha estado menos presente en nuestros debates pero es imprescindible traerla al centro. Ne­cesitamos ciencia y tecnología no solamente para desarrollarnos, sino también para que ese desarrollo sea socialista. El So­cialismo es una consecuencia objetiva del desarrollo de las fuerzas productivas. No era viable con las fuerzas productivas del siglo XIX, a pesar de la superioridad moral de la distribución socialista. Son las fuerzas productivas técnicamente avanzadas las que hacen imprescindible la socialización de la producción; y las que obtienen ventaja comparativa del contexto de educación, cultura y equidad social que solo puede provenir de la inversión presupuestada del estado socialista. Son las fuerzas productivas técnicamente avanzadas las que hacen inviable que sea el mercado la forma principal de relaciones entre las personas.

Una economía «de chinchales» enlazados por las fuerzas del mercado no sería solamente una economía más pobre, sino también menos soberana, y menos socialista.

Por eso tenemos que cuidar la ciencia, como cuidamos la salud, la educación y la cultura: siempre están en riesgo en periodos de dificultades económicas, porque la «racionalidad de mercado» no protege el largo plazo. Por eso tenemos que cuidar los recursos humanos que nuestro país ha creado en seis décadas de inversión social. Tenemos actualmente una de las tasas más elevadas de América Latina de doctores en ciencias con respecto a la población y necesitamos que esa fuerza pueda desplegar todas sus potencialidades.

Entonces el redespegue de la actividad científica y de la inversión en Ciencia, ciertamente e inevitablemente dañadas por el periodo especial y por el bloqueo, no es un lujo sino una urgencia. Tampoco es «teoría»: la centralidad de la ciencia para la construcción del Socialismo próspero y sostenible a que aspiramos tiene que reflejarse en el componente de ciencia y técnica de nuestros presupuestos anuales, y también en la estructura de costos de nuestras empresas; y gestionarse con instrumentos jurídicos y procedimientos concretos que incentiven, además de la producción eficiente de bienes y servicios, la producción eficiente de conocimiento autóctono, y sus conexiones con la economía y con el sistema educacional. Y no se puede evaluar el proceso con anécdotas. Los indicadores duros de porciento del PIB invertido en ciencia, producción de patentes y publicaciones científicas, formación de doctores, componente tecnológico de las exportaciones y otros, tienen que moverse. Y el Estado Socialista tiene que garantizar la direccionalidad del esfuerzo científico para que este respalde los objetivos y ejes estratégicos de nuestro desarrollo social y económico, que aprobamos en el 7mo. Congreso del Partido.

La buena noticia es que lo podemos hacer. Habrá que discutir mucho (y rápido) sobre los métodos concretos, pero lo podemos hacer, y el pueblo lo sabe.

A pesar de los emigrados geográficos y los emigrados mentales que andan por ahí, la masa grande y limpia de jóvenes científicos competentes, comprometidos con Cuba y motivados por su proyecto socialista, está presente, reclamando su puesto en la batalla. Y no son pocos.

Ellos responderán al esfuerzo social en ciencia con sus propios esfuerzos personales, como debe ser cuando se comprende que uno está implicado en las tareas grandes de la Patria. Eso nos dijo José Martí: «la razón, si quiere guiar, tiene que entrar en la caballería».

Fuente: http://www.granma.cu/opinion/2016-10-25/la-ciencia-no-es-un-lujo-25-10-2016-21-10-52

Imagen: http://www.unperiodico.unal.edu.co/dper/article/ley-de-ciencia-y-tecnologia-necesita-voluntad-politica.html

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Argentina: Continúa Infinito por Descubrir

América del Sur/Argentina/Noviembre de 2016/Fuente: Jujuy al dia

Estudiantes de nivel primario y secundario pertenecientes a distintas instituciones educativas de la provincia continúan recorriendo y participando de las propuestas que brinda el Centro de Innovación “Infinito por Descubrir” que depende del Ministerio de Educación de la provincia.

Infinito por Descubrir es una propuesta formativa innovadora que basa el aprendizaje en proyectos que combinan disciplinas como robótica, música y biotecnología con magia, pasión y amigos, fomentando la utilización de tecnologías y el desarrollo de habilidades como liderazgo, colaboración y pensamiento crítico.

Es un espacio de educación afuera de la escuela, al que los chicos y los jóvenes vienen, porque así lo deciden, a aprender, descubrir y experimentar diversas disciplinas de base tecnológica para descubrir vocaciones y talentos.

El equipo que integra Infinito por Descubrir ayuda a los estudiantes a hacer mejor lo que cada uno elige hacer, además acompaña en la búsqueda de sus pasiones y el desarrollo de sus capacidades para encontrar proyectos significativos.

Entre las instituciones que visitaron las instalaciones del Centro de Innovación se puede mencionar la Escuela de Educación Técnica Nº 1 “Escolástico Zegada”;  colegio “San Alberto Magno”, colegio “San Juan Bautista de La Salle”, Secundario Nº 36 de Monterrico, Bachillerato Nº 2 “Gobernador Jorge Villafañe”, escuela N° 178 “Nicolás Lamas” de Pampa Vieja, N° 38 “Juanita Stevens”, N° 171 “Monseñor Germán Mallagray” y N° 44 “José Ignacio Gorriti” de León.

Los estudiantes recorrieron los laboratorios de diseño, música, biotecnología, robótica, maker space y programación, donde pudieron desarrollar actividades propuestas por el equipo de Infinito, integrado por expertos, facilitadores y guías.

La convocatoria está abierta para niños y jóvenes de 6 a 18 años de edad de lunes a viernes de 9:00 a 17:00 horas y sábados de 14:00 a 18:00 horas, en  Ciudad Cultural del barrio Alto Padilla.

Por la mañana, el acceso es para las escuelas con invitación y por la tarde para los visitantes espontáneos. En todos los casos, la entrada es gratuita.

Fuente: http://www.jujuyaldia.com.ar/2016/11/03/continua-infinito-por-descubrir/

Imagen: https://diarium.usal.es/kathia_pitti/2012/10/23/proyecto-escolar-con-robotica/

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Panamá: De la exclusión al sistema de inclusión en educación

Panamá/03 noviembre 2016/Autor: Alexis Rodríguez Mójica/Fuente: La Estrella de Panamá

Con la creación de espacios que fomentan el aprendizaje, la experimentación científica, las habilidades tecnológicas y lingüísticas promueven el desarrollo integral.

La inclusión de los niños y niñas fuera de la escuela es uno de los seis objetivos y compromisos de educación para todos acordados en las Conferencias de Dakar (2000), Addis Abeba (2010) y Jomtien (2011).

En dichas Conferencias se exhortaba a los gobiernos a ampliar los esfuerzos en materia de inclusión e igualdad.

En Panamá, en las últimas décadas, siguiendo las directrices de las conferencias en educación, se impulsaron políticas dirigidas al cierre de la brecha en la cobertura. Existe un avance significativo en las áreas urbanas y rurales.

En el marco de las políticas de educación para todos, el acceso y la calidad de oferta educativa mejoró también en las áreas comarcales, en tanto se promovió un modelo de infraestructura escolar innovador con la creación de espacios que fomentan el aprendizaje colaborativo, la experimentación científica, las habilidades tecnológicas y lingüísticas, y promueven el desarrollo integral de los alumnos (BID 2015).

Sin embargo, persisten brechas de cobertura según niveles, áreas geográficas, grupos poblacionales y condiciones del servicio educación. Las brechas incluyen a niños, niñas y adolescentes en edad obligatoria de asistencia a la escuela que asistieron, pero abandonaron el sistema educativo; que ingresaron tarde; que no ingresaron. No obstante, la ausencia de registros estadísticos sobre la relación entre edad y grado escolar limitan la posibilidad de desarrollar políticas efectivas en materia de inclusión escolar dirigidas a cerrar las brechas y barreras que impiden el cumplimento de las metas en educación, vinculadas en su momento a los Objetivos de Desarrollo del Milenio (Consorcio de Estadísticas para el Desarrollo en el siglo XXI, Programa de trabajo 2009–2010 PARIS21, Reunión del Comité Directivo PARIS21, 5–6 junio 2008.).

En el caso de los niños, niñas y adolescentes fuera de la escuela, el Comité de Derechos del Niño hizo recomendaciones relevantes. En el apartado 63a.de las Observaciones finales del Comité de Derechos del Niño recomendó al Estado Panameño abordar la cuestión de los niños que no completan su educación y abandonan la escuela, ofreciendo segundas oportunidades y formación profesional para los niños que quedan fuera del sistema educativo formal (Comité de los Derechos del Niño 58º 2011).

Para el Comité la realidad de los niños, niñas y adolescentes fuera de la escuela es diversa.

Según el Comité, existen dos tipos de población y dos salidas para la política pública. Por un lado, abordar y enfocar el caso de los niños, niñas y adolescentes que no completan el ciclo escolar obligatorio y tampoco cumplen con la educación obligatoria.

MISIÓN Y VISIÓN DE FLACSO

La Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) es un organismo regional, instituido por la UNESCO para impulsar y satisfacer necesidades en el conocimiento de las Ciencias Sociales.

El Programa FLACSO-Panamá busca dotar a la población de análisis sobre los principales problemas que la aquejan, y contribuir con las estrategias de programas de solución.

Por el otro, afrontar y atender el caso de los niños, niñas y adolescentes que abandonan la escuela. Igualmente, el Comité reconoce la emergencia de dos tipos de políticas. El primer tipo de políticas estaría orientado hacia la segunda oportunidad para incorporarse al sistema educativo.

El segundo tipo de políticas se centra en la formación profesional.

INCLUSIÓN ESCOLAR FLEXIBLE

Las iniciativas dirigidas hacia la inclusión escolar y la segunda oportunidad tienen entre sus objetivos la superación de la rigidez y los factores de expulsión, sostenidos por dispositivos altamente verticales, estructurados y formalizados (OREALC/UNESCO 2009).

Por tanto, para garantizar la inclusión, es necesario modelar según las características de la población, espacios educativos, contenidos curriculares, formas de evaluación y apoyos al proceso educativo.

En materia de políticas y programas, la emergencia de la segunda oportunidad educativa incorpora en un primer momento, formas de detección temprana de problemas asociados al desempeño escolar, relaciones sociales al interior de la escuela, socioeconómicos, psicosociales; mientras que, en un segundo momento, estrategias de apoyo pedagógico, tutorías, atención psicosocial, becas o subsidios, entre otros (OREALC/UNESCO 2009).

De igual manera agrega al proceso educativo, espacios educativos alternativos que sirven de puente, tránsito y/o preparación para el retorno al sistema educativo formal en cualquiera de sus modalidades, equipos multiprofesionales, sistemas de tutorías y apoyo personalizado articulado con alianzas y soportes locales (OREALC/UNESCO 2009).

EXPERIENCIAS EN INCLUSIÓN ESCOLAR

Las experiencias de inclusión escolar flexible desarrolladas en distintas regiones del mundo indican que para alcanzar la inserción efectiva de los y las adolescentes fuera de la escuela es necesario estructurar un modelo de educación flexible orientado hacia: (1) el acompañamiento pedagógico del aprendizaje, (2) flexibilidad en los tiempos de aprendizaje y, por último, (3) acreditación de los aprendizajes.

Actualmente el desarrollo de las iniciativas orientadas hacia la inclusión escolar incluye soportes tecnológicos capaces de organizar contenidos curriculares, facilitando monitoreo, seguimiento y evaluación del conocimiento adquirido, e integrando pedagogías innovadoras (CEPAL 2012).

Con la incorporación de la tecnología se flexibiliza la presencialidad, se incorpora infraestructura tecnológica acorde a cada contexto, se aumenta la cobertura geográfica; se promueve la auto-educación, autogestión y se desarrollan de competencias; se adecuan programas académicos alternativos y complementarios (UDG Revista Apertura 2010). El proceso de escalamiento de la inclusión escolar tiene a su base, entre otros, la informática educativa; los aprendizajes colaborativos; las tecnologías de la información y comunicación; la conectividad educativa y aprendizaje en línea (Cepal 2012).

Por ello, al mismo tiempo que emergen las modalidades, se adecuan las formas de gestión y evaluación sin reducir los estándares de calidad en la educación.

PERSPECTIVAS

La reducción de la deserción y el abandono escolar requiere la identificación de los riesgos, barreras y determinantes asociados a las características socioeconómicas, académicas, personales e institucionales. En tanto fenómenos multidimensionales parecen desplegarse en la vida cotidiana de la sociedad panameña a partir de patrones y determinantes que se reproducen según contextos y relaciones entre comunidad, escuela y familia. Así como la permanencia escolar señala la existencia de éxitos sociales previos, la deserción escolar y el abandono escolar evidencian complejos mecanismos de exclusión e invisibilidad social. La ruptura del ciclo escolar desencadena sucesivas formas de exclusión, marginación y vulnerabilidad social con implicaciones directas en la inserción precaria (bajos niveles de educación, salarios y uso de tecnologías).

De allí que la inclusión de los niños y niñas fuera de la escuela sea una tarea urgente e inmediata para garantizar el desarrollo humano sostenible de la sociedad.

Fuente: http://laestrella.com.pa/panama/politica/exclusion-sistema-inclusion-educacion/23968354

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Eduy21: para educar mejor

Por. Antonio Mercader

La madre de todas las reformas es la reforma educativa”. Esta frase del historiador Gerardo Caetano fue una de las más acertadas entre las que se oyeron durante la presentación de Eduy21, una asociación privada dedicada a trabajar por la educación nacional. Una frase que de alguna forma evocaba aquella de Tabaré Vázquez pronunciada en su primer mandato sobre la trascendencia de la -prometida y nunca concretada- reforma del Estado.

Por supuesto que reducir, modernizar y agilizar el Estado uruguayo es una asignatura urgente, pero más lo es reformar la enseñanza. Eduy21, conformada por académicos, expertos y representantes de diversos sectores sociales, se propone colaborar en esa tarea en la que al país se le va, si no la vida, al menos buena parte de su futuro. Ya sea en la economía, la seguridad, la salud o el cuidado del medio ambiente, sus perspectivas dependerán de aquí en más de la formación que se brinde a las nuevas generaciones.

La presentación de Eduy21 dejó en claro esa preocupación por el porvenir. Aunque parezca un lugar común decir que el mundo cambia aceleradamente y que hay que prepararse para los cambios, más vale asumirlo entre todos y entender que con el sistema educativo actual vamos al despeñadero. Renato Opertti, un especialista de prestigio internacional y miembro de la nueva asociación, sintetizó así el objetivo: “Transmitimos conocimiento de forma magistral, pero el mundo que se viene necesita alumnos que produzcan conocimiento”.

El desafío no puede ser más acuciante.

El mundo laboral, tal como lo conocemos, está dejando de existir como lo muestran quienes predicen que de aquí a veinte años -o menos-, no se necesitarán la mitad de los puestos de trabajo que hoy existen. Basta ver cómo se manejan las grandes plantas productoras de celulosa en Uruguay -computación, robótica y logística mediante- para saber que ese vaticinio es correcto. Eso no significa que la educación deba rendir culto exclusivo a la tecnología, pues tan necesario como enseñar el dominio de los nuevos instrumentos es moldear ciudadanos de mente abierta, creativos, con sólida cultura y, sobre todo, emprendedores.

Uno de los principales responsables de esta oportuna iniciativa ciudadana, el maestro Juan Pedro Mir (ex-director de Educación), lo formula así: “Reconocer los cambios vertiginosos que estamos viviendo y que hace que nuestras instituciones fundamentales (familias, partidos políticos, Estado, agremiaciones, iglesias, y por supuesto sus instituciones educativas) se vean interpeladas y resignificadas”. Eduy21 parte de la base de que en esa labor debe participar no solo el sistema educativo sino “otros espacios que también están en crisis”.

“Para educar a un niño hace falta todo un pueblo”, reza un antiguo proverbio africano que resalta que la causa de la educación es de todos y no sólo patrimonio de las escuelas y los docentes. Ojalá que esta nueva institución que surge con el auspicio de tantas personalidades logre encolumnarnos a todos en una empresa que tiene al menos una parte del trabajo hecho: el diagnóstico de los males que afligen a la educación nacional. Ahora que sabemos lo que no hay que hacer en la enseñanza, Eduy21 puede ayudarnos a enderezar el rumbo.

Fuente: http://www.elpais.com.uy/opinion/eduy21-educar-mejor-enfoque-mercader.htm

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