Argentina/08 de Enero de 2018/El Día
No pueden menos que causar preocupación las conclusiones surgidas de un informe realizado por organizaciones civiles y gubernamentales, acerca de la existencia de más casos de contenido racista, que invitan al odio hacia terceros, presentes en las distintas redes de internet. Según surgió de ese trabajo hay cada vez más páginas que instigan a detestar a minorías sexuales o posteos que atacan a grupos religiosos, como parte de un hostigamiento virtual que, al decir de los especialistas, se torna por estos días “imparable”. Cabe señalar que este fenómeno virtual se ajusta en sus características a una tendencia expresa en la realidad, reflejada en el hecho de que también crecen las denuncias sobre casos de discriminación según lo atestiguan distintas delegaciones territoriales del Inadi.
Las publicaciones detectadas en Inernet, ofensivas y cargadas de odio contra terceros, no son consideradas como casos aislados, sino ejemplos de tantísimos posteos y páginas que promueven la violencia y el racismo en el universo digital. Según entidades que monitorean el tema, en infinidad de publicaciones en la web se pueden leer mensajes que atentan contra los derechos y la dignidad de las personas, ya sea por motivos raciales, religiosos, de sexo, nacionalidad o de pertenencia a determinado grupo social.
De acuerdo a un trabajo difundido en los últimos días por el Observatorio de Internet del Inadi, el principal motivo de discriminación en las redes sociales es el religioso, con un porcentaje que llega casi al 22 por ciento, seguido por cuestiones de género (15 por ciento), racismo (12 por ciento) y diversidad sexual (10 por ciento). El director del Inadi afirmó que, a pesar de que la Argentina es ejemplo de diálogo interreligioso desde su formación como Estado, ahora “es necesario reforzar ese diálogo porque la discriminación existe, desde el que dibuja una esvástica hasta el que agrede a un musulmán”.
Se destacó también que, así como crecen los grupos que promueven mensajes discriminatorios, las redes sociales son también el lugar para que muchos chicos pacten peleas o se encuentren simplemente para acosar a otro. A este último ejemplo se lo conoce como cyberbullying, una adaptación de lo que hasta no hace tanto se conocía como la agresión entre los adolescentes y niños en situación escolar y que ahora define a ese mismo hostigamiento a través de mails, blogs, redes sociales o imágenes digitales. Pero esta forma de atormentar con impunidad salió de la escuela y se expandió entre adolescentes y adultos.
Lo cierto es que eliminar un contenido racista o que incite al odio hacia un tercero en Internet no es algo sencillo. Porque cuando se lo consigue denunciar, el mismo contenido ya fue replicado en otros sitios y se extendió así a toda la Web en una difusión muchas veces imparable. De allí la necesidad de que se conforme una sólida red educativa en torno al manejo de las redes sociales.
Se ha dicho ya en innumerables ocasiones –ante desviaciones impropias en el uso de una herramienta tan maravillosa como es la de Internet- que es preciso inculcar en los usuarios, muy en especial en los menores de edad, que son quienes con más intensidad actúan en ellos, principios rectores de buena conducta y de respeto y tolerancia a todas las diversidades. En el caso del odio racial, demasiado ha sufrido la humanidad por ese flagelo causante de los más graves crímenes de la historia.
Fuente: http://www.eldia.com/nota/2018-1-4-1-22-8-inquietante-informe-sobre-contenidos-racistas-en-las-redes-opinion