Por Pedro Muller
Si de verdad crees que ese número es tan importante, entonces, lamentablemente la llevamos cuesta arriba, en Latinoamérica en promedio se tiene un CI o IQ de 85 en donde según esas métricas tener 100 es un estándar; de acuerdo a esta fuente: El Salvador tiene un promedio de 80 (país donde yo vivo ), Guatemala tiene 79, Honduras es de 81, etc., ¿cómo te quedo el ojo? creo que ya te estas sintiendo más tonto después de leer esto.
Definitivamente coeficiente intelectual está relacionado directamente con las economías de los países mientras más pobre el país y menos inteligentes, tiene sentido ¿o no?; factores como la cultura, educación, entran en juego, incluso el libro de CI y la desigualdad global argumenta genética como un factor que influye en la inteligencia, controversial la verdad.
Pero que tan importante es el rol de la inteligencia en nuestra vida, ¿será que podemos alcanzar éxito sin ser inteligentes?, ¿está la inteligencia relacionada con el dinero?, ¿de verdad existen ventajas al ser inteligente?, ¿la felicidad y la inteligencia van de la mano?.
Malcom Gladwell en su libro “outliers” (fueras de serie) hace la analogía que la inteligencia es como la altura en un partido de baloncesto, argumenta tienes que tener cierta “altura mínima” para poder jugar en la NBA, pero cuando cumples con los requisitos, no siempre el más alto es el mejor jugador y la altura deja de ser relevante; Michael Jordan uno de los mejores jugadores de todos los tiempos cuenta con 1.98m de altura, la cual es considerada como promedio en ese deporte; cualidades como su velocidad, rebotes, puntería, etc. lo complementaron para que se destacara como estrella.
Entonces si el coeficiente intelectual no lo es todo ¿cuál es la forma más elevada de inteligencia?

Hay factores como la sabiduría, voluntad, conciencia, creatividad y las emocionesque no se pueden medir dentro de una prueba de coeficiente intelectual; la inteligencia es tan amplia que puede ser aplicada a muchas áreas de la vida, pero no necesariamente de la manera más adecuada; por ejemplo un físico puede que aplique toda su inteligencia a resolver problemas físicos y sea muy bueno en eso; pero que tenga un enfisema pulmonar y que sin embargo, sea un fumador compulsivo.
Gladwell comenta sobre una prueba realizada por Liam Huson la cual no pretendía medir la inteligencia analítica sino algo diferente y más cerca a la creatividad; se analizaron las respuestas de “el uso de los objetos” de dos alumnos de diferentes escuelas; dichos objetos eran un ladrillo y una manta, las respuestas fueron las siguientes:
Poole: Ladrillos: para romper escaparates, ayudar a sostener una casa, para un juego de la ruleta rusa y si te quieres a la vez mantener en forma, para sostener bien una cama pon un ladrillo en cada esquina, para romper botellas de coca cola vacías.
Manta: para ponerla en una cama, para tapar cuando se tenga sexo ilícito en los bosques, como una tienda de campaña, para hacer señales de humo, como vela de barco, como trineo, substituto de una toalla, como un objetivo para una práctica de tiro al blanco, para atrapar gente saltando de un edificio en llamas.
Florence: Ladrillos: construir cosas, tirar. Manta: para mantenerse caliente, apagar o suavizar un fuego y como camilla improvisada. De los dos ¿cuál crees que tenía mayor coeficiente intelectual?, para tu sorpesa era Florence, ¿Cuál te pareció más interesante?
He visto mucha gente que no se considera “inteligente”, lo primero que dicen es: “yo la verdad no soy bueno para esto”, “a mí no me fluye”, “yo no le entro a eso”, pues yo me pregunto ¿Canto tiempo se le ha dedicado para llegar a esa conclusión?, ¿Qué tantas ganas le han puesto?
Me recuerdo una vez de una señora ya mayor que dijo “a mí la tecnología no me entra”; luego le comentan que la única manera de comunicarse con su nieta es por medio de una video conferencia utilizando una computadora y le preguntan si estaría dispuesta a aprender a utilizarla; ella dijo: ¡por mi nieta sí!, entonces no es un tema de inteligencia, es un tema de motivación y quererlo hacer.
La verdad a inteligencia vas más allá de toda métrica, cuando te das cuenta y entiendes que se resume a la habilidad de resolver problemas, el mundo mismo se vuelve tu laboratorio; simplemente hay que salir y aprender tanto a fallar como a tener éxito, para luego repetir y seguir desarrollándote no solo en inteligencia, sino en todo sentido como persona; he ahí en donde de verdad se encuentran los súper poderes y esa es la máxima representación de inteligencia; puede que en el partido de baloncesto algunos sean más altos que tú y la tengan más fácil, pero lo que importa al final es jugar el partido y terminar ganando; como dicen por ahí: en la carrera de la vida no es el que llega primero, sino el que sabe llegar.
Fuente: http://pedromuller.com/2015/04/26/el-culto-al-coeficiente-intelectual/
Fuente de la imagen: https://pixabay.com/static/uploads/photo/2014/10/29/12/08/artificial-intelligence-507813_960_720.jpg