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Venezuela adecuará sistema educativo a la diversificación económica

América del sur/Venezuela/14 Junio 2018/Fuente:Prensa Latina

El ministro de Educación, Elías Jaua, destacó hoy la voluntad de impulsar la adecuación del sistema educativo para contribuir a la diversificación de la economía de Venezuela, con el fin de superar la dependencia del petróleo.
Durante su programa radial Encuentro popular, transmitido por YVKE Mundial, el titular subrayó que la única manera de eliminar el modelo rentista petrolero y construir un modelo económico diversificado es preparar a las nuevas generaciones para ese fin.

En tal sentido, abogó por universalizar la enseñanza técnica profesional, unas de las propuestas incluidas en el Plan de la Patria, programa de gobierno para el período 2019-2025, elaborado a partir de las propuestas de la población.

Jaua insistió en la necesidad de avanzar hacia una revolución educativa y preparar a las nuevas generaciones a cultivar la tierra para producir alimentos, a innovar en las ramas de la ciencia, la tecnología y la electrónica, entre otros frentes productivos.

El también dirigente socialista llamó al pueblo a organizarse en el combate contra las redes delictivas que afectan los servicios básicos a la población, así como a frenar los atropellos de sectores que utilizan bienes del Estado para sus pretensiones desestabilizadoras.

Fuente: http://www.prensa-latina.cu/index.php?o=rn&id=186915&SEO=venezuela-adecuara-sistema-educativo-a-la-diversificacion-economica
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Redes horizontales de docentes: MRP 3.0

Por: Saray Marqués

Algunas sobreviven desde hace más de una década, ofreciendo a los docentes lo que en estudios como TALIS y PISA algunos echan en falta: Más conocimiento de lo que otros colegas hacen en sus clases, ‘feedback’ entre iguales, formación y colaboración a pie de aula. Son las redes horizontales de docentes.

A veces es PISA; otras, TALIS. Nos hablan de un docente español al que le cuesta abrirse, que le observen los colegas, recibir críticas para su mejora pedagógica. El ambiente es bueno, pero lo de trabajar en equipo es otra historia. El 87% no ha pisado el aula de un compañero, frente al 45% de media de la OCDE. Sin embargo, el “mi aula, mi reino” va cediendo frente al concepto de claustro virtual, cortesía de las redes horizontales de docentes.

A ellas se llega por la competencia o la madurez digital en tiempos del long life learning y del personal learning environment (“Dime con quién te conectas y te diré cómo aprendes”). Las primeras datan de hace poco más de una década, pero la lista es inabarcable: Novadors, EABE, Aulablog, Espiral, YoconEuterpe… por lo que esta pretende ser solo una aproximación al fenómeno de la mano de algunas de las personas que estaban ahí viéndolo nacer.

La red como refugio

Mediada la década de 2000, recuerda la profesora de la Facultad de Educación de la Universidad de Murcia, Linda Castañeda: “En lo educativo, Twitter, Facebook, y otras específicas, que entonces eran el desierto, empiezan a moverse muchísimo… Las redes de profesores aparecen de forma muy explosiva. Y no es solo formación lo que buscan, o la que buscan va más allá de un curso: tiene que ver con estar juntos, con reconocerse, con trabajar desde el aula, con tener un sitio, con no estar solo”.

Entonces, continúa la experta, con una penetración de la tecnología en las aulas muy desigual, muchos de aquellos profesores se sentían el friki del centro, mientras que en la red daban con gente con la que se identificaban. Surgen las primeras redes y se organizan las primeras quedadas, que en algún caso cuentan con apoyo oficial, pero que se caracterizan sobre todo por su horizontalidad: son de y para docentes.

“La preocupación entonces era eminentemente metodológica, muy tecnológica, pero luego esto va cambiando”, señala Castañeda. Los encuentros lograban afluencias multitudinarias, de 400, 500 personas de las 17 CCAA. Se abrían las inscripciones y a la hora estaba todo lleno.

Hoy, aquel movimiento ha logrado perdurar, “con más visión crítica, sin tanta obnubilación por las posibilidades didácticas de la tecnología”. En Novadors, donde Castañeda participa, desde hace unos años cuentan con una conferencia plenaria no ya sobre innovación educativa sino sobre política educativa.

También cambian las circunstancias de sus miembros: “Muchos de esos llaneros solitarios han mutado en directores, jefes de estudios… Han decidido no esperar a que se mueva, sino moverlo ellos. Y tenemos personas que entraron tímidamente, con un blog pequeñito, y hoy son ponentes, divulgadores, formadores”.

¿La pertenencia a estas redes puede hacer sobredimensionar el fenómeno? “Seguimos siendo pocos porque no somos todos, pero cada vez somos más, y ya no nos preguntamos tanto cómo usar la pizarra digital sino qué tipo de aprendices estamos generando; el compromiso social y político se abren paso”, sentencia Castañeda, que ve estas redes como un movimiento de rebeldía y acompañamiento que reacciona frente al inmovilismo. Un arma de doble filo: “Lo apuntaba Francisco López Blanco, director del Grupo de Software Educativo en la Consejería de Educación de Extremadura, en el reciente congreso Transformación Digital Educativa: “Los innovadores ahora mismo son muy baratos para las instituciones, porque sacan tiempo de su tiempo personal, con un coste cero para el sistema, que luego los luce como profesores excepcionales, pero que en realidad está haciendo dejación de funciones en favor del papel cada vez más protagonista de fundaciones o empresas privadas que no deben sustituir al Estado”.

¿Los nuevos MRP?

Para Iñaki Murua no es tan peregrina la comparación de estas cibercomunidades de aprendizaje, como él prefiere llamarlas, con los Movimientos de Renovación Pedagógica (MRP). Con el toque, claro, de la tecnología, cada vez más sencilla y transparente, que permite romper los límites del espacio y del tiempo para dar con personas con tus mismas inquietudes: “Las cibercomunidades parten de intereses comunes, no nacen por obligación, –en procesos formativos formales también pueden surgir, pero pocas siguen vivas cuando el curso termina– igual que los MRP. Estás ahí porque quieres, no porque nadie te mande… Sí, las veo un tipo de agregado similar”.

¿Por qué un docente acaba en una de estas redes? Porque necesita sentirse parte de una comunidad. Pero cuidado con la apertura solamente a la externa: “Que tu claustro virtual no te lleve a olvidar que formas parte de un claustro real”, alerta Murua, que recuerda la metáfora de Dan Lortie de los centros educativos como cajas de huevos en que todos están en su sitio pero sin tocar al de al lado.

Fotografía: @itziarlopez_ / Aulablog

Que un docente recale en ellas viene dado, además, por otros factores que Murua enumera, como el grado de cultura de colaboración, un contexto facilitador –no suelen ayudar las jornadas inabarcables y las dificultades para conciliar vida laboral y familiar y cierta capacidad: “Que el ordenador no te dé calambre”–. Pero, aun con eso, en su investigación descubrió que persisten las resistencias: “Muchas personas siguen prefiriendo tomarse un café con alguien que compartir sus debilidades con otra persona que quizá trabaja en un centro público como el suyo, en una población y contexto similar, pero a quien no conocen. Cuesta todavía expresar el “no sé cómo se hace”. En otros casos, no se tiene conciencia de que lo que se hace merece la pena, como aquella maestra que dudaba sobre si contarle a un doctorando que se había puesto en contacto con ella cómo usaba WhatsApp con los alumnos. “A veces, el profesor no tiene ni tiempo ni ganas de compartir, porque cree que lo que hace es muy ‘normalito’”, prosigue el experto.

Los rasgos diferenciadores

Otro experto, en este caso en un MRP, Julio Rogero, ve más de un rasgo diferenciador con estas redes: “Nacen de la inquietud horizontal de muchos profesores, pero en su continuidad suelen buscar el reconocimiento, lógico y legítimo, de la Administración, y suelen ser redes referidas no a todo un proceso transformador del sistema educativo, sino a aspectos parciales, con gran dominio de lo tecnológico, o centrarse en metodologías llamadas nuevas aunque la mayoría no lo sean”. Por el contrario, “los MRP buscan la transformación global, hacia un sistema educativo emancipador y liberador, y creen que se puede y debe hacer desde el ámbito de lo público, que donde mejor se plasma es en el espacio de la escuela de titularidad pública, por lo que aspiran a la construcción de una escuela pública con un modelo y paradigma alternativo a los dominantes en este momento”.

Aparte, señala Rogero cómo es frecuente que en esas redes, nacidas de forma horizontal, intervengan cada vez más las grandes corporaciones. “Hay algunas que en otro tiempo defendían lo público y se han desvirtuado, y también pueden surgir nuevas porque lo impone la patronal para estar a la altura del mercado, que hoy exigen esas metodologías, no realmente porque el profesional sienta esa inquietud… Aunque también puede haber profesionales en la pública a los que estas redes les están ayudando a salir de la frustración que produce la rutina diaria, la imposición del currículo y formas de hacer muy controladas desde la inspección”, concede.

Si para Rogero una diferencia entre los MRP y las redes horizontales de docentes es la convicción en la defensa de la escuela pública, Charo Fernández, que fuera presidenta de Aulablog, menciona como una de sus proezas en estos 13 años “la capacidad de unir a gente de todo tipo, con mesas redondas en que una monja intervenía al lado de alguien de la marea verde, y todo el mundo hablaba de lo mismo, de mejorar el día a día del alumno; ahí nos encontramos todos”.

Otra de las proezas, para ella, es que siga llegando gente nueva. O que los ponentes acudan a los encuentros sin cobrar. Su germen fue una cita en Roa de Duero, del que surgió la Declaración de Roa para la incorporación de las TIC en el aula. “Nos conocíamos de los comentarios en los blogs. Éramos un grupito de profesores que veía que ahí había potencial, la mayoría ni teníamos internet en las aulas. Quisimos ponernos cara y Luis Barriocanal sugirió Roa”, comienza Fernández.

Aquello tuvo mucho más recorrido del que pensaban, y así han llegado hasta hoy, con unas características entre las que Fernández cita la “una organización muy desorganizada”: “Decimos que somos líquidos. Los nuevos lo ven todo tan desestructurado que al principio creen imposible que las cosas salgan”.

César Poyatos (Aulablog) asegura que si está ahí es “por crecimiento profesional y personal”, “por contar con un espacio de confianza y aprendizaje, donde compartir, construir de manera conjunta”, y porque los que empezaron siendo compañeros unidos por la innovación educativa han terminado siendo amigos.

Para él, la horizontalidad es lo que mejor define Aulablog, mayoritariamente conformada por docentes, pero abierta a personas de otros campos. “Funcionamos por nodos a escala local y nos reunimos una vez al mes para compartir recursos: puede ser un compañero o compañera que prepara una acción formativa, otro que quiere llevar a cabo en su aula un proyecto con móviles y no sabe cómo empezar, y nos explica sus objetivos, y le aportamos feedback. O puede que ya lo esté haciendo y quiera mejorar el año que viene”, explica Poyatos.

Aparte de estas sesiones, también hay eventos por todo el territorio (de gamificacióncoachingvisual thinkingescape room educativo…), y el encuentro anual. “Todos los que estamos queremos compartir y formarnos, la prueba está en que alguna institución nos ha ofrecido certificar esa formación y preferimos que no, que la gente que venga no lo haga por el sexenio, los créditos, el certificado”, proclama Poyatos, que insiste en la autogestión y autorregulación como clave de Aulablog.

Fotografía: Novadors

Todo cambia

Desde EABE, Lola Urbano habla de cambios: “EABE, Novadors, Aulablog, Espiral… movimientos en distintas zonas de España que han evolucionado de manera diferente y que tienen en común que todos ya no son como al principio”.

“Hoy gana la mercantilización de la educación incluso cuando no nos damos cuenta. Desde mi punto de vista de escuela pública resulta agotador participar en ese juego y, al mismo tiempo, no tener autonomía para poder jugar en igualdad de condiciones con las escuelas privadas, concertadas o no”, apunta.

En su día, “estos movimientos nacieron para dar cabida a un montón de gente que necesitábamos un sitio seguro donde dar rienda suelta a nuestras capacidades y posibilidades de cambio, y también al deseo de tener una educación de calidad real. Un sitio donde aprender a gestionar todo eso sin la presión de la Administración ni de los colegas”. Hoy, “los frikis de entonces hemos mutado en equipos directivos más sumisos de lo que quisiéramos y en equipos directivos que cambian cosas que pareciera que no se podían cambiar… Sí se puede, aunque no luzca mucho ni lo sepa nunca nadie”.

Por su parte, Toni Solano, otro friki entonces hoy director, recuerda el panorama de las tecnologías educativas –“bastante desolador”– de hace poco más de una década –“recursos digitales escasos, pocas experiencias de éxito, docentes aislados que tenían que autoformarse, nulo reconocimiento de las administraciones”– y cómo “encontrar a colegas en las redes que compartían recursos, experiencias, hallazgos y dudas resultó fundamental para muchos docentes que eran minoría en sus claustros”.

No ve tan alejados Solano los mundos de esas redes y de los MRP, dado que “muchos de los profes que conozco están en uno y otro”, y percibe como elemento aglutinante en los orígenes la blogosfera educativa: “Fueron movimientos que surgieron de la interacción entre docentes, no de los intereses de empresas o instituciones. Casi todos sus miembros fundacionales tenían o tienen un blog en el que compartir sus reflexiones, y los premios Espiral Edublogs jugaron un importante papel como catalizador”.

Algunos de esos blogs dejaron de actualizarse hace tiempo, pero muchos de esos “ilusionados de hace 10 años” siguen estando convencidos de que “la aparición de internet y los avances en conectividad y portabilidad van a marcar un antes y un después en los procesos de enseñanza-aprendizaje”: “No nos resignamos a señalar exclusivamente como culpables del fracaso a elementos externos a la escuela, y por ello hemos asumido nuevas responsabilidades, intentando que ese cambio social y tecnológico vaya acompañado de un cambio metodológico”.

Al retrotraerse, Solano repara en la generosidad de los primeros tiempos: “Todos compartíamos recursos en abierto y de manera altruista. En eso quizá hayamos perdido con la entrada de empresas que pugnan por colocar sus productos en las aulas y buscan a cabezas visibles para ello…”.

Fuente: http://eldiariodelaeducacion.com/blog/2018/06/11/redes-horizontales-de-docentes-mrp-3-0/

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Traducirán a lenguas nativas perdón por escuelas indígenas en Canadá

América del Norte/Canadá/13 Junio 2018/Fuente: Prensa Latina

La ministra de Asuntos Indígenas, Carolyn Bennett, afirmó hoy que traducir a siete idiomas originarios la disculpa oficial con los sobrevivientes de las escuelas residenciales en Canadá resulta un nuevo paso en el proceso de reconciliación nacional.

El 10 de junio de 2008, la Cámara de los Comunes analizó un histórico documento en el que el entonces primer ministro Stephen Harper (2006-2015) pidió perdón en nombre del gobierno federal por uno de los más oscuros capítulos de la historia del país, los pensionados para niños indígenas, el último de los cuales cerró sus puertas en 1996.

La disculpa se ha traducido a siete idiomas para su distribución y publicación en el sitio web Verdad y Reconciliación. Los idiomas son: Mohawk, Plains Cree, Western Ojibway, Mi’kmaq, Inuktitut, Dene y Algonquin, precisó la funcionaria.

Además, Bennett anunció que los videos educativos sobre dichos acontecimientos también estarán listos para su uso en las escuelas a partir de septiembre, algo que calificó de otro pequeño paso en el camino hacia la reconciliación.

Es importante que los indígenas escuchen estas palabras en sus propios idiomas. También ayudará a continuar la educación sobre el legado destructivo de las escuelas residenciales y ayudará a promover los idiomas que tantos estudiantes y familias perdieron como resultado de estas experiencias pasadas, argumentó.

La titular de Asuntos Indígenas reconoció que persisten los efectos de tal trauma, lo cual ha llevado a una serie de problemas en las comunidades indígenas, desde la adicción al alcohol y las drogas hasta las altas tasas de encarcelamiento.

Por su parte Evelyn Korkmaz, sobreviviente de la escuela residencial St. Anne en Albany, Ontario, dijo que el gobierno tiene la obligación de mejorar las condiciones de vida de los pueblos indígenas.

A su juicio, no hay excusa para que no haya agua potable, las viviendas estén infestadas de moho, exista mala atención médica y se mantengan altas tasas de suicidio en las reservas.

Es una vergüenza. Debemos, como pueblos indígenas y como canadienses, dar un paso al frente y trabajar juntos para mejorar las vidas de los pueblos originarios, sostuvo Korkmaz.

Desde finales del siglo XIX y hasta casi las postrimerías del XX, más de 150 mil menores de comunidades nativas fueron arrancados de sus familias y enviados a pensionados, en su gran mayoría dirigidos por comunidades religiosas, a fin de adquirir las costumbres y prácticas de los blancos.

Unos tres mil 200 niños murieron, la gran mayoría antes de 1940, debido a enfermedades como la tuberculosis, según el informe presentado en 2015 por la Comisión de la Verdad y la Reconciliación.

Las condiciones sanitarias eran tan malsanas que el índice de mortalidad allí era cinco veces más elevado que en el resto de la población. El informe de la Comisión califica lo sucedido de genocidio cultural.

Fuente: http://www.prensa-latina.cu/index.php?o=rn&id=186375&SEO=traduciran-a-lenguas-nativas-perdon-por-escuelas-indigenas-en-canada
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Los ayuntamientos y el trabajo de la convivencia (1)

Por: Pedro Uruñuela 

El de la convivencia es un tema que nos ha de ocupar a todas y todos. Por eso son muchos los ayuntamientos que están realizando una labor importante de coordinación del territorio frente a este problema.

Desde hace años son muchos los ayuntamientos que se implican en el fomento de la convivencia en su ámbito municipal, potenciando, intensificando y coordinando actuaciones a favor de la misma. Resultaría muy difícil mencionar todas estas iniciativas puestas en marcha y sería injusto no mencionar a muchos municipios muy implicados en este trabajo.

El compromiso de los ayuntamientos es una garantía de éxito de los programas de convivencia. No se trata de poner en marcha una acción puntual y aislada. Se trata más bien de actuar a nivel general, de manera sinérgica, potenciando las acciones propuestas en cada centro, ayudando a su puesta en marcha y poniendo de manifiesto que, realmente, el trabajo de la convivencia es una tarea común, que nos afecta e interpela a todos y a todas.

En este último mes he tenido el honor de participar en dos iniciativas de fomento de la convivencia, a partir de las peticiones que nos llegaron a la asociación CONVIVES. Se trata de las iniciativas de dos municipios de la Comunidad de Madrid: el Ayuntamiento de Arganda del Rey y el de Móstoles.

Desde la concejalía de Educación del municipio de Arganda del Rey se ha presentado el Plan Estratégico Municipal de Convivencia Escolar 2017-2020, fruto de la discusión y participación de los distintos centros educativos de la localidad a lo largo de este curso. Como señala el propio ayuntamiento, educar para la convivencia supone fomentar la cultura de paz a través de la promoción de valores y hábitos de convivencia democrática, con especial énfasis en la participación, el diálogo y la corresponsabilidad de todos los miembros de la comunidad educativa. Todo esto implica el fomento y desarrollo de valores como el respeto a los demás, la tolerancia, la empatía, el desarrollo de actitudes cívicas y la honestidad, entre otros.

Dos son las principales preocupaciones que han llevado a la concejalía de Educación a poner en marcha esta actuación: la problemática en torno al acoso y maltrato entre iguales y, sobre todo, la necesidad de garantizar la convivencia pacífica entre el alumnado, fuera y dentro de los centros educativos. De esta forma, el trabajo de la convivencia supera una de las limitaciones más importantes en las que se suele caer, reducir e identificar el trabajo de la convivencia con la erradicación del acoso entre iguales. Por el contrario, entendiendo que la eliminación de las situaciones de maltrato es un primer paso importante y necesario, el Plan Estratégico Municipal se plantea objetivos y actuaciones ambiciosas, para llevarlas a cabo a lo largo de los tres próximos años, hasta el 2020.

Cuatro son los objetivos que se plantea el Plan. En concreto,

  • Coordinar las actuaciones de los centros educativos y otras que se están llevando a cabo en el municipio en materia de convivencia escolar.
  • Mejorar la concienciación y prevención en materia de acoso y convivencia escolar.
  • Asesorar y acompañar a las familias y centros educativos en la prevención e intervención en las dificultades de convivencia.
  • Mejorar la formación de todos los miembros de la comunidad educativa en temas de convivencia

El Plan Estratégico municipal concreta también cinco líneas de actuación prioritarias, describiendo en cada una de ellas la caracterización de dicha medida, los objetivos que persigue, y las acciones concretas que se van a impulsar desde dicha medida. Así, se quiere poner en marcha la creación del Observatorio Municipal de la convivencia escolar, que recogerá toda la información relacionada con la convivencia en el municipio, haciendo visibles todas las iniciativas llevadas a cabo por los centros educativos. Esto llevará a propuestas concretas de actuación formuladas a partir de la detección de las necesidades y a la evaluación permanente del trabajo de la convivencia en el municipio. El registro de las acciones puestas en marcha, la elaboración de un protocolo para la recogida de información o la realización de informes periódicos sobre el estado de la convivencia son alguna de las actuaciones recogidas en esta medida.

La segunda línea de acción va a suponer la creación de un Departamento de Asesoramiento en el Ayuntamiento, que dé apoyo y soporte a los centros educativos y las familias. Se trata de apoyarles en la búsqueda de las respuestas más adecuadas a las necesidades detectadas en cuanto a la convivencia, creando un espacio donde poder tratar todas estas situaciones. Para ello, se creará y determinará el funcionamiento de este Departamento, estableciendo su protocolo de actuación y dándole la visibilidad que necesita ante los centros y las familias.

La tercera línea de acción busca la puesta en marcha de actividades formativas, presenciales o a distancia, en el municipio y los centros escolares. Se busca el impulso de acciones formativas que vinculen el conocimiento teórico con la práctica, dando recursos específicos para atender a grupos especialmente vulnerables.

La cuarta línea de acción va a consistir en la puesta en marcha de un concurso de “buenas prácticas” en materia de convivencia escolar y mejora del clima educativo. Se busca, así, sacar a la luz las distintas actuaciones llevadas a cabo por los centros escolares y motivar a su profesorado para la realización de un buen trabajo en convivencia.

Por último, como quinta línea de acción se propone la puesta en marcha de un soporte web que facilite el acceso a la información de las distintas actividades, para fomentar así la concienciación sobre estos temas y para facilitar los recursos y experiencias útiles para el trabajo de la convivencia.

El Plan ha establecido ya su temporalización y, en su presentación aporta también referencias sobre múltiples recursos, desde bibliografía a recursos digitales, mencionando experiencias de interés que pueden ser adaptadas y replicadas fácilmente por los centros. Pueden consultarse aquí.

Este primer curso las actuaciones se han centrado, de manera preferente, en la prevención del maltrato y acoso entre iguales, llevando a cabo una campaña de concienciación en toda la comunidad educativa sobre sus consecuencias y repercusiones en aquellos que lo padecen. Con la colaboración de la Escuela Municipal de Cine, han desarrollado seis videos sobre el acoso, material muy importante para su visión y discusión en los distintos centros docentes.

Sin embargo, no se han quedado en las acciones de prevención del acoso y maltrato. Considerando que estas situaciones de maltrato son síntoma de algo más importante, la falta de desarrollo de la convivencia, tienen planificada otras actuaciones para los sucesivos cursos, buscando poner en marcha otro tipo de acciones con el alumnado (refuerzo de sistemas de mediación, alumnado ayudante, etc.). Se da así cabida a un enfoque global y positivo de la convivencia, sin limitarse a situaciones concretas de quiebra de la convivencia y superando los enfoques puramente reactivos.

Deseamos a la concejalía de Educación y al Ayuntamiento de Arganda todo el éxito posible en el desarrollo de este Plan. Es un buen ejemplo del compromiso por la convivencia que puede plantearse cualquier municipio, y de la concreción de diversas actuaciones que pueden llevarse a cabo en este campo. Son muchos los municipios comprometidos en este trabajo, como veremos en el próximo artículo al analizar otra experiencia diferente, pero de gran interés también, la llevada a cabo por el Ayuntamiento de Móstoles.

Fuente: http://eldiariodelaeducacion.com/convivenciayeducacionenvalores/2018/06/12/los-ayuntamientos-y-el-trabajo-de-la-convivencia-1/

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¿Y si empezamos a desmontar la LOMCE por los currículos?

Por: Guadalupe Jover

Iniciar la derogación de la LOMCE por los reales decretos que establecen el currículo de Primaria y Secundaria es posible desde el punto de vista legislativo. Tendría la ventaja de partir de un acuerdo inicial en torno a su inadecuación y desmesura y afectaría a una cuestión de enorme relevancia en el día a día de docentes y estudiantes.

“Hay que derogar la Lomce. Mientras, hay que adoptar medidas urgentes para suspender sus efectos más nocivos como las reválidas”, rezaba un tuit de la ministra Celáa de noviembre de 2016 que estos días inunda las redes. Adelante. Y a continuación, ¿por qué no empezar a desmontar la LOMCE hincándole el diente a los currículos? La propuesta tiene tres puntos a su favor: es técnicamente posible, podría concitar un gran consenso de partida y mejoraría, con efecto inmediato, las condiciones de aprendizaje de los estudiantes.

Técnicamente es posible. Los currículos se fijan en un real decreto, y por tanto no necesitan pasar por el Parlamento para derogarse o promulgarse. Hay precedentes. La Ley Orgánica de Calidad de la Educación con que el Partido Popular puso punto final a la LOGSE en diciembre de 2002 vino precedida del Real Decreto 937/2001 que modificaba el currículo de ESO o del Real Decreto 3474/2000 por el que se modificaba la estructura de bachillerato y sus enseñanzas mínimas, entre otros. A diferencia de entonces, el objetivo ahora no es sustituir las preferencias de unas minorías parlamentarias por las de otras, sino, bien al contrario, procurar un consenso que sustraiga lo que se aprende en las escuelas a los vaivenes políticos.

Frente a otros aspectos de la LOMCE no menos importantes aunque sí más proclives a la confrontación, para este debate partimos al menos de un punto inicial de acuerdo: los actuales currículos son inabarcables, trasnochados en muchos de sus postulados y caóticos. Inabarcables en su exhaustividad: listados enciclopédicos clasificados por asignaturas por los que se cabalga al galope sin respetar los ritmos de los aprendices y sin poder alumbrar apenas -salvo contadas excepciones- proyectos de trabajo que integren y den sentido a los diferentes contenidos. Ante la imposibilidad de abarcarlo todo, acaban por imponerse los consagrados por las rutinas escolares y por quienes están detrás de las editoriales de libros de texto. Son trasnochados porque no dan respuesta a las necesidades formativas de niñas, niños y adolescentes y a los desafíos del mundo en que vivimos. Ni siquiera, en muchos casos, a los avances de las disciplinas de referencia. Y son caóticos porque han sido concebidos como un conjunto de piezas aisladas que pretenden ensamblarse sin coherencia alguna entre las partes. Cómo pretender así miradas globalizadas y transdisciplinares si quienes los fraguaron jamás trabajaron en equipo.

Los decretos curriculares, con ser una de las dimensiones de la legislación educativa que tiene un efecto más directo en el día a día de los estudiantes, suelen gestarse en el silencio más absoluto -sin discusión ni debate, sin luz ni taquígrafos- y a toda prisa. Son las editoriales las que azuzan al gobierno de turno para que se los filtre cuanto antes para tener listos -a menudo también en medio de una precipitación escandalosa- los manuales del próximo curso. Las leyes se suceden pero los libros de texto, casi idénticos a sí mismos, permanecen.

Nos hemos dado de bruces con una coyuntura esperanzadora. Un nuevo Gobierno y una nueva ministra abren el horizonte a la posibilidad de dar respuesta a esa demanda social -y a ese compromiso parlamentario- de derogar la LOMCE. Pero en este tiempo hemos aprendido también que las cosas no pueden hacerse desde la confrontación y la revancha, y menos aún de espaldas a la ciudadanía. Por eso se nos antoja que iniciar el proceso de derogación de la LOMCE por aquello que suscita de entrada -de entrada al menos- mayores dosis de acuerdo podría ser una manera inteligente y radical de transformar un sistema educativo a todas luces obsoleto y segregador.

Y como el proceso, para hacerlo bien, será lento, proponemos la conformación cuanto antes de equipos de trabajo sólidos, de carácter interdisciplinar, de perfiles diversos, capaces de repensar el diseño curricular de la que haya de ser la nueva ley educativa. Si es verdad que hay coordenadas que irremediablemente han de sostener nuestra vida en común -el feminismo, la ecología, el diálogo intercultural, la noviolencia-, si hay pilares irrenunciables en una sociedad democrática -la participación, la inclusión, la equidad-, si la cualificación profesional de las nuevas generaciones es tan deseable como su bienestar personal y la cohesión social… los currículos habrán de ser coherentes con estas premisas. Y si el desacuerdo empieza por esos postulados, habrá de arrancar de ahí el diálogo social. Necesitamos tejer conjuntamente los cimientos para que el edificio resultante sea firme y duradero.

Lo que reclamamos, en fin, es que el debate sobre los currículos sea genuinamente democrático y escape, al fin, tanto a la dejadez y la precipitación como a la presión de unos grupos de poder -político, económico o religioso- que tradicionalmente vienen imponiendo su interesada mirada sobre el mundo a la ciudadanía en general y a la comunidad educativa en particular.

Fuente: http://eldiariodelaeducacion.com/blog/2018/06/12/y-si-empezamos-a-desmontar-la-lomce-por-los-curriculos/

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Paraguay: UE ratifica respaldo para la transformación educativa en Paraguay

América del Sur/Paraguay/12.06.18/Fuente: www.paraguay.com.

La Unión Europea ratifica su pleno compromiso con el sector educativo de Paraguay y está a disposición del país para apoyar la transformación educativa que pretende lograr un mejor futuro para todos.

Así lo afirmó el embajador Paolo Berizzi, en la apertura de la “Semana de la Educación”, que inició este miércoles 6 de junio bajo organización de Juntos por la Educación. Igualmente, habló de la necesidad de buscar un “pacto social para la Educación”.
“Celebramos que la educación sea una prioridad del Gobierno actual y del Gobierno entrante. Todo esto nos anima de cara al futuro”, expresó Berizzi en el encuentro que se desarrolla hasta el viernes en el marco de la Feria Internacional del Libro, que se lleva a cabo en el Centro de Convenciones del Mariscal López Shopping.
Berizzi participó de la apertura de la actividad junto con el ministro de Educación y Ciencias, Raúl Aguilera Méndez, y el presidente de la organización Juntos para la Educación, Raúl Gauto, quien en la presentación destacó el respaldo de la Unión Europea para la realización de la “Semana de la Educación”, que tiene como objetivo analizar la situación educativa paraguaya de cara al futuro.
“Hay que empezar a hacer todos estos temas, que no solo se hable, sino que se haga. Que se empuje fuerte el tema educativo”, indicó el embajador Berizzi, al momento de detallar que la Unión Europea destina más del 50% de colaboración bilateral con Paraguay a la educación. Precisó que del 2014 al 2020, la UE invertirá unos 85 millones de euros, más de 100 millones de dólares, solo para el sector educación en Paraguay.
“Todo esto es para cooperar en el desarrollo, en la implementación de la política nacional del país en la educación, no para imponer un modelo educativo que viene desde afuera, sino para sostener las ideas de Paraguay, su política, en el marco del Plan Nacional de Educación 2014 y la Agenda Educativa 2013-2018”, explicó.
Comentó que entre las metas principales en este sector están el mejoramiento del acceso a la educación y los casos de egresos del sistema educativo; reducir las brechas de desigualdad a través de más participación educativa de niños y niñas y jóvenes en las zonas rurales; y la calidad de la enseñanza con el fortalecimiento el sistema de evaluación docente y el currículum pertinente para una alta profesionalización. Asimismo, como otro punto de las metas, mencionó la necesidad de un acuerdo nacional entre todos los sectores. Mencionó, en ese sentido, que es necesario “un pacto social para la educación, donde varios sectores de la sociedad, ministerios, Gobierno, sociedad civil, sector privado, reconozcan su rol y su responsabilidad hacia el sector educativo”.
Explicó que todo el esfuerzo está relacionado a la búsqueda de un desarrollo sostenible y recordó los objetivos del milenio. “Antes se comprometían los cooperantes; ahora para los objetivos de desarrollo sostenible se comprometen todos en la sociedad, no solo el sector público; todos debemos intentar ayudar a nuestra sociedad a lograr estos objetivos. En esto, la sociedad civil y el sector privado juegan un rol importante”, recalcó.  Respecto a la participación ciudadana, el embajador Berizzi indicó que se pretende “visibilizar la opinión de la sociedad civil, promover una conversación de pares donde la ciudadanía pueda opinar e incidir en las políticas públicas”.
La Unión Europea respalda actualmente el proceso de transformación educativa en Paraguay con un programa de transferencia no reembolsable firmado en el 2016 de 46 millones de euros, comprendidos en tres componentes: un apoyo presupuestario; un proyecto de asistencia técnica, y el respaldo a la sociedad civil para promover la participación ciudadana (En el marco de este tercer componente, se desarrolla la “Semana de la Educación” organizada por Juntos por la Educación).

Fuente de la noticia: http://www.paraguay.com/salud-y-educacion/ue-ratifica-respaldo-para-la-transformacion-educativa-en-paraguay-178883

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El movimiento de la Universidad de Córdoba, la hora de los pueblos y la Universidad actual

Por: Heriberto Rivera

Por estos días de junio 2018, se estarán cumpliendo los cien años de la llamada Reforma de Córdoba, hecho de gran trascendencia para Nuestra América. Dicho acontecimiento, a diferencia de como lo han querido presentar los sectores del conservadurismo, no solamente fue una rebelión de corte académico, así como tampoco fue un evento espontaneo; por el contrario, fue un acontecimiento emancipatorio (Tatian, 2018), en los albores del siglo XX, con orientaciones hacia la justicia social, la redención del pueblo que buscaba subvertir los valores impuestos por la sociedad, el clero y los privilegiados de la clase dominante proveniente de la “chaucocracia”.

El movimiento de Córdoba, si bien nació a partir de reclamos estudiantiles y pedagógicos, inmediatamente  sus ideas  se prolongaron en un ideal político antiimperialista y en un proyecto social de unidad con la clase trabajadora.

Para algunos pensadores, los tiempos académicos no son los tiempos de la revolución, pero en el caso de la gesta de los jóvenes de la Universidad de Córdoba de la  sureña Argentina del año 1918, ambos tiempos confluyen, pues la  necesidad de una formación más allá de los textos y de los claustros universitarios, eran sin duda el ansiado momento de  búsqueda de MAESTROS, que estuvieran a tono con los cambios que para el momento se venían dando  en el mundo, aunque entrando tardíamente al siglo XX; situación ésta que marchaba aunada, aunque muchos no lo refieran así, a la consolidación de la “hora americana”, de hacer realidad el sueño de nuestros libertadores, Bolívar, San Martín y Rosas, así como tantos otros que batallaron entre la vida y la muerte, con la pluma y con la espada, para forjar la gran Patria Americana.

La herencia del movimiento de Córdoba, trasciende lo académico en lo que las tres misiones principales se refiere a  la universidad  como son docencia, investigación y extensión, de hecho su “influencia más profunda estará marcada por una reaparición en escena del ideal revolucionario americano de fines del siglo XVIII y principios del siglo XIX contribuyendo a la recuperación de la necesidad de una identidad común y del destino de Patria Grande que habían soñado Bolívar Y San Martín para una  América Unida e independiente”(Pittelli y Hermo, 2010).

Reivindicar el movimiento de Córdoba es extraerlo  de los claustros del oscurantismo académico en la que lo ha colocado la ortodoxia, es rescatarlo de las homilías republicanas que siempre han pretendido desnaturalizar el verdadero sentido del subversivo movimiento de los estudiantes de Córdoba en la  oportunidad de su aniversario.

Así mismo, es rescatar la firmeza revolucionaria de su líder fundamental Deodoro Roca que fue el ideólogo principal de la Reforma Universitaria de 1918 y que en 1920 propuso suprimir el doctorado cuarenta años antes que el mayo francés, cuestionado los exámenes, constituyendo una pedagogía socialista, antiautoritaria a partir de la propia pedagogía latinoamericana.

Ciertamente Deodoro Roca fue la pluma más inspirada del movimiento autor del manifiesto liminar que llego a tener proyección de carácter internacional.

En ese sentido, según Pittelli y Hermo (2010) expresan que el movimiento de Córdoba llego a influir en el Mayo francés de tal forma  que la “herencia de Deodoro Roca afloraría en la enorme rebelión de los 60 y 70 y su influencia sería universal, a tal punto que como reconociera Daniel Cohn Bendit, “la rebelión juvenil europea del Mayo francés estaría inspirada  directamente por  su pensamiento, incluso textualmente en alguna de sus consignas tales como << a los exámenes responda con preguntas>> o <<prohibido prohibir>> estampados en los muros de París”.

El ideario de la reforma universitaria argentina se adelanto 50 años al clima cultural europeo, fue un movimiento con mayor  sustrato político superando en muchos aspectos al movimiento francés,  éste por el contrario dio  inicio a lo que algunos llaman la cultura del espectáculo y de los grafitis. “Precursoramente, Deodoro Roca, se esforzó por conjugar a tres pensadores que volverían a ocupar la escena en los años sesenta: Marx, Freud y Nietzsche” (Kohan, 2011).

En el campo pedagógico, suficiente razón tiene Néstor Kohan (2011) al establecer que la obra precursora de Deodoro Roca sienta las bases para una “pedagogía socialista centrada en la libertad y no en la disciplina autoritaria, en una relación entre maestro y alumno dinámica y no mecánica, horizontal y ni vertical. Muchísimos años después, algunas de estas ideas serán trabajadas por el pedagogo brasileño Paulo Freire en su pedagogía del oprimido”.

En este contexto, se hace necesario recuperar la memoria  de aquellos  hitos históricos que sedimentaron el movimiento de alta política, pedagógica y social surgida en la Universidad de Córdoba, así como su vigencia y la situación actual de la  universidad venezolana del siglo XXI.

Los protagonistas del movimiento de Córdoba, estaba compuesto por estudiantes, profesores de la universidad, ubicados muy lejos del reformismo e iniciaron una revolución que con el paso del tiempo fue traicionada y vulnerada; el engendro de los estudiantes de Córdoba, estaba impregnado del espíritu de la lucha de la independencia forjada cien años atrás; por cierto una independencia aún inconclusa.

Realizar el presente escrito tiene la intención, siguiendo el camino de la historia, él cual es la verdad, ser testigo del pasado, que supere el hábito de algunos historiadores de convertir a los grandes acontecimientos y sus protagonistas en muñecos de cartón, en esterilizarla para que sea menos incomodo su recuerdo y rememoración.

El movimiento de Córdoba, trasciende el hecho meramente pedagógico, rompe las cuatro paredes del claustro universitario y se planta como un movimiento político social que tuvo la intención de desgarrar los “virreinatos espirituales” que seguían dominando a las universidades luego del proceso de independencia. (Tünnermman, 2008).

Dentro de ese marco, la Reforma de Córdoba, permitió que por primera vez en Latinoamérica, la Universidad fuese al reencuentro con su pueblo y lograra asumirse como efectivamente  consigue  convertirse en un gran movilizador social, en el gran catalizador para proyectar los cambios sociales y político que emergen de la sociedad que se abre pasos a codazo entre los  amarres de la tradición que paralizaban los avances planteados.

El movimiento de Córdoba, inicia la vía de originalidad latinoamericana en el campo político, económico y social, pudiéndose afirmar que hoy a cien años de su surgimiento, sus planteamientos tienen aún plena vigencia y no se han extinguido por el paso de los años.; los jóvenes de Córdoba, tuvieron la valía y el coraje de “enfrentar a la universidad europeísta que, con contadas excepciones, culturalmente sometida al pensamiento impuesto e importado por las metrópolis y considerablemente reacia a problematizar la necesaria “hora americana”.

El ímpetu y la osadía e irreverencia  estudiantil decidieron enfrentar a un régimen universitario anacrónico “fundado sobre una especie de derecho divino” en la que por siglos el saber y la verdad fueron monopolios de élites sociales que, para perpetuarse en sus privilegios pretendieron y aún pretenden mantener celosamente bajo su control las claves del conocimiento y de las ciencias, que de esa manera se tornan en instrumentos de dominación y vasallaje.(Márquez, 2003).

Comentario aparte merece equiparar y  hacer notar la especie de “derecho divino” si se iguala con la infausta  política del “Destino Manifiesto”, el caballito de batalla que los Estados Unidos en su afán de imponer el capitalismo en todo el mundo han usado para aislar, invadir, derrocar gobiernos y masacrar a los pueblos resistentes.

Ese “derecho divino” lamentablemente aún persiste en la universidad en pleno siglo XXI, el cual se expresa en los grupos y parcelas de poder de corte academicistas que persisten en imponer modelos educativos inspirados en el norte y otros centros hegemónicos. Ese “derecho divino”, que se manifiesta  a través de una visión epistemológica colonial que media las relaciones jerárquicas y organizativas sobre la cual se ha montado la universidad tradicional venezolana. (Portillo y Memdez, 2017).

Las propuestas del manifiesto Liminar de Córdoba, tuvieron siempre sus enemigos, que hicieron retroceder los avances, contando para ello con gobiernos que lograban abortar los cambios y transformaciones; por esa razón, es que en las llamadas universidades tradicionales e históricas, los cantos  conventuales alejan las posibilidades de servir al pueblo, guardando bajo llave sus saberes y sus estudiantes  cuidan sus cerrojos; de tal forma que hoy en pleno siglo XXI, la universidad continua tercamente por ser una abadía benedictina.

En Venezuela, las influencia del movimiento de Córdoba nacida de la inspiración estudiantil no tuvieron cabida en los años inmediatos luego de 1918 debido  ala situación política dominante en esos años- dictaduras como forma de gobierno- dicha ascendencia aparece apocadamente por los años 1946, siendo  “la primera vez en nuestro país que oficialmente se toma en cuenta al estudiantado en funciones relacionadas con el gobierno y la administración de las universidades”(Márquez; 2003). El Estatuto Orgánico de 1946  estableció,  por primera vez en el país, la representación de los estudiantes en el Consejo universitario, los Consejos de Facultad y las Asambleas de Facultad. Dicho Estatuto, fue ratificado por gobierno de Delgado Chalbaud el 23 de diciembre de 1948, vigente  hasta que la junta de gobierno interviene la UCV mediante decreto 321 del 17 de octubre de 1951 es derogado el estatuto orgánico de 1946.

Por cierto en ese tiempo la godarria merideña tuvo a su representante más acérrimo cuando años mas tardes fue nombrado rector de UCV Eloy Dávila Celis de infausto recuerdo pues cuando fue rector de la ULA tuvo gran desprestigio por su actuación despótica y represiva  como rector, contra quien se habían  producido graves disturbios en aquella universidad.

Pero el movimiento que se acerco con más aproximación a la impronta de la  reforma de Córdoba , guardando las distancias, fue el movimiento de Renovación Académica que estalló en 1969 en la Universidad Central de Venezuela y otras universidades autónomas, dicho movimiento alcanzó según Márquez (2003) “niveles muy radicales y entre sus objetivos la renovación perseguía la revisión a fondo de los planes y programas de estudio; la llamada auditoria académica, por lo cual los estudiantes harían la evaluación de sus profesores en razón de sus condiciones éticas y de su rendimiento académico, la ampliación de la representación estudiantil en las funciones electorales y de cogobierno, hasta hacerla paritaria con la delos profesores, y la participación de los empleados y obreros de la Universidad en dichas funciones” .Esto ultimo constituye un justo reclamo que hace la comunidad universitaria en los actuales momentos.

Dicho movimiento de renovación académica fue la expresión del momento estructural donde el poderoso movimiento estudiantil más allá de los partidos acompañados de docentes y trabajadores impulsaba la renovación que había colocado en evidencia pública el agotado modelo de universidad.

Ese movimiento renovador de Venezuela, cincuenta años después, se planteo lo que en su momento hicieron los jóvenes de Córdoba, querían según el profesor Nelson Méndez “una universidad para el mañana, desprendida del conservadurismo institucional y del peso de los intereses de poder establecidos, que anunciase y prefigurase rumbo a la Venezuela socialista futura”.

En ese sentido se debe tener presente, según lo mantiene López (2017) que “sobre la Renovación (académica) influyó igualmente las luchas universitarias que en América Latina se habían suscitado a partir del movimiento de Reforma Universitaria en Córdoba, Argentina, en 1918. Desde Córdoba, la autonomía universitaria[2] se hizo sinónimo de reforma (Febres Cordero, 1959:17), y la reforma universitaria se hizo sinónimo de progreso social (Roa y Núñez Tenorio,1971:18). Entendiendo por autonomía universitaria la independencia de la institución con respecto al Estado, tanto en lo académico como lo administrativo (Pinto, 1990: 65)” (www.aporrea.org/educacion/a241119.html.05-02-2017).

Esta aspiración fue ahogada, la convirtieron en un cono inaudible tanto por sectores de la derecha y de la izquierda, calificándola  de   alucinación  voluntarista y utópica; según narra el profesor Méndez, protagonista y fuente viva de ese momento “sus enterradores le enfrentaron un proyecto para hoy, respetuoso de las tradiciones de ayer y de la hegemonía reinante, eficiente y racional ante la demanda de la sociedad contemporánea, donde la institución operaría como servidor técnica, productiva y virtuosa que como faro de inteligencia critica y creación alternativa”.

Para ser rigurosos con la historia, La reforma de Córdoba en su momento también fue combatida por los sectores de la izquierda conservadora  y según Rivera (1952), “tildaron a la Reforma de movimiento pequeño burgués reaccionario” conceptos que se pueden entender si partimos de la falta de identificación  real de la unificación de los pueblos ignorada por los seguidores en aquel tiempo de la antigua  URSS. “Obviamente  la ceguera de los socialistas y comunistas frente a la Reforma de Córdoba fue parte de su ceguera frente a la cuestión nacional”.

El movimiento de renovación académica centro sus esfuerzos a la critica del saber que se impartía en la universidad, el cual era visto como elemento responsable de que la institución fuese incapaz de dar respuestas a los problemas sociales que en Venezuela comenzaba a suscitarse como la creciente migración interna producto del abandono del campo y el crecimiento exponencial de los cordones de miseria que comenzaban a tomar lenta y persistentemente  los núcleos urbanos. (Negrón, 2007)

Ese movimiento que enfrento y señalo con gallardía  la alternativa ante la profunda crisis de la Universidad rebatió con grandeza las objeciones tecnocráticas y al realismo que  proclamo la imposibilidad/inutilidad de transformar la Universidad  sin que le país cambie.

Según Carlos Tünnermman (2008), académico y estudioso aquilatado sobre la Reforma de Córdoba, la propuesta de los estudiantes de Córdoba, en su manifiesto Liminar, en ese sentido nos relata que “el concepto de autonomía sustentado por el movimiento de Córdoba era muy amplio: implicaba el reconocimiento del derecho de la comunidad universitaria a elegir sus propias autoridades, sin interferencia de extraños; la libertad de cátedra; la designación de los profesores por procedimientos puramente académicos que garantizara su idoneidad. Incluso se llego a recomendar la búsqueda de un mecanismo que permitiera a la universidad su autofinanciamiento (autarquía patrimonial), a fin de evitar las presiones económicas por parte del estado o de otras fuentes de ingreso, que en determinado momento podían hacer irrisoria la autonomía formal”; agregando que “mas tarde yante la constante amenaza de parte de las fuerzas públicas, se incluyo la inviolabilidad de los recintos universitarios. Con esto el concepto de autonomía adquirió característica que no sedan en otra parte del mundo”.

Ante la realidad de hoy, justo es reconocer los grandes avances que en su momento inspiraron los estudiantes de Córdoba, pero también se reconoce que los efectos permanentes de las democracias funcionales  y liberales y de dictaduras como forma de gobierno, convirtieron y desvirtuaron los postulados de Córdoba en valores ajenos a la vida de la Universidad.(Muñera,2011).

En Venezuela ante la necesidad de continuar adaptando la universidad a los interese de el modelo neoliberal, ya anteriormente en 1970 habían reformado la Ley de universidades de 1958- con la cual coartaron la autonomía, fue nombrada por el gobierno de turno  la Comisión Redactora  del Anteproyecto de Ley de Educación Superior del año 1981, lo que con eufemismo  llamaron la comisión de los sesenta por el numero de sus miembros,tuvo la intención de proponer una Ley para superar la distorsión y desvirtuación en la cual se mantiene hasta el sol de hoy. Dicha propuesta de la reforma fue engavetada por el gobierno de entonces a la cabeza del cual se encontraba Jaime Lusinchi y su partido Acción Democrática. Una vez el proceso de  transformación universitaria fue abortado y silenciado por los interese político partidistas.

Esa desviación se fundamenta en suficientes razones para estar distorsionados. El sistema educativo venezolano sufre un flagelo de la “distorsión” ( en esencia no es otra cosa que la contradicción de la estructura social del país), que se manifiesta en problemas como el analfabetismo (25%); la deserción escolar (el rechazo o exclusión del usuario por el sistema educativo), la poca inclinación hacia carreras técnicas; la formación de profesionales y técnicos sin planificación; docentes sin actualización de conocimientos, y la tendencia formar individuos para servir de empleados y no como agentes creadores”. De allí que “el resultado es un hombre sin iniciativas para el cambio o la transformación social, victima y producto del esquema intelectualista y del modelo educativo que no propicia la participación del estudiante en la solución de los problemas.”(Ortega y Otero,1986).

La universidad latinoamericana, cuya  aspiración de originalidad fue distorsionada durante buena parte del siglo XX “ocupó su tiempo en búsqueda de certezas, apegada al paradigma newtoniano y en producir con vehemencia verdades absolutas y rígidas”(Escotet); agregando además el precitado autor de la cita anterior, que en consecuencia, al estudiante se le ha venido formando para un mundo inmutable y predecible, a pesar de que el corazón y el cerebro intuían cambios profundos y enormes agujeros negros.

Al perder el camino de su originalidad, la universidad consolido  la idea de progreso con la mirada puesta en los centros de poder y sus pretensiones, de tal forma que la consecuencia lógica de la universidad venezolana se vio reflejada en la construcción de una política educativa para la sumisión y formación de estudiantes acríticos que los hace fértiles para el consumismo.

Dentro de ese marco se desarrollaron  los contenidos curriculares basados en formas de aproximación a la realidad dictada en otras latitudes, obviando su riqueza cultural, por tanto las investigaciones responden dentro de este paradigma principalmente a una visión capitalista, basada en una visión reduccionista de nuestros países marginando la diversidad  nacional y la pluralidad  de actores.

El nuevo siglo arropado con grandes y excelentes contribuciones entre las cuales destacan las de Heisenberg, Ilya Pregogine (estructuras disipativas), Geymonat, Piaget, Morín, Moscoviei, Dussel, Buenaventura Dos Santos así como otros científicos y humanistas de nuestro tiempo, promete moverse hacia concepciones menos dogmáticas y por ello  menos deterministas.

La Universidad reclama, sin negar la relevancia de los epistemes de visión eurocentristas, de  incorporar otras visiones epistémicas que vinculen a la universidad  una visión critica de la realidad con la inclusión de una visión desde  abajo, plural, diversa a partir de las formas de aprehensión del pueblo en todas sus expresiones.

En ese sentido la critica al eurocentrismo no es para hacer valer  otros centros, sino para procurar como los sostiene Buenaventura Dos Santos, un reconociendo de otras culturas de probada riqueza discursiva y reflexiva, que tienen su propia metodología para hacer aportes al conocimiento y su difusión. Se trata de la Universidad donde se conjugan y condensa todo el conocimiento.

La universidad, ha vivido muchas veces al reverso de la sociedad, del sistema productivo y del propio sistema de ciencias y tecnología, aunado al distanciamiento entre la escuela secundaria y la universidad. Esa universidad que aspiró a ser puntal de la lucha de los pueblos, ser su redentor, que aspiró y fue durante un corto tiempo popular, autónoma y democrática, al tomar distancia del movimiento de Córdoba, se fue transformando en un círculo de la aristocracia de la educación, donde “el estudiante también empeñado en la búsqueda más que de aprendizaje, en  busca de certificaciones profesionales, está convertido en un negocio de la academia” (Escotet).

La praxis educativa ofrecida en la educación universitaria venezolana debe estar centrada en la pertinencia, colaboración y solidaridad, pues las universidades, en estos momentos, padeciendo todos los males del cientificismo: rigidez en sus programas de estudios, escasa capacidad de respuesta a las demandas sociales, poca capacidad para atender lo que escapa del método verificable universal, excesivo disciplinarismo y concretismo, que parcelan el conocimiento y lo disgregan, perdiendo el sentido y orientación de la realidad y dirigiendo el conocimiento cada vez más hacia la especialización de la especialidad, es decir, a la «super-especialización», sin ninguna conexión con el contexto social.

La universidad del siglo XXI, requiere con urgencia ser transformada; la autonomía, hoy reconocida con  carácter constitucional, no puede convertirse en poder supraestatal, a pesar de que su origen fue político, ya que fue producto de la movilización social, durante este tiempo la influencia de los partidos políticos ha sido-para bien o para mal- determinante, hasta el punto de hoy día sigue siendo manipulada por los mismos factores que la adaptan a sus intereses particulares, donde a pesar de los cambios instituidos a partir de Córdoba, todavía tiene bemoles como las cátedras que se obtienen como un “derecho” de sucesión,  irremediablemente esta situación necesita un cambio de estructuras.

La Reforma  Universitaria de Córdoba, al irrumpir en la posibilidad de construir otra sociedad, una nueva sociedad, donde el ser humano sea su centro, ha tenido muchos enemigos, pues la tradición y su intereses de clase es impedir que  las instituciones se transformen para bien de la humanidad; hoy muchos conversos quieren minimizar la acción estudiantil de Córdoba y se refieren a ella como un mito sin mayor trascendencia.

La fraternidad nacida entre generaciones de estudiantes en defensa de los ideales reformistas, de la enseñanza laica, de la autonomía universitaria y la solidaridad con los pueblos latinoamericanos sometidos al vasallaje de los imperios colonialistas, no fue un mito. Tampoco fue mitológica la heroica participación de los reformistas enfrentando los sistemas dictatoriales  y las democracias abstractas que anularon la autonomía universitaria y abolieron las garantías constitucionales, así como en defensa de la enseñanza pública de la universidad autónoma, popular y democrática, por la cual seguiremos luchando.

Si reconocemos que somos parte de un mundo plural, diverso y multicultural,  obliga al hombre educado a ser capaz de lograr la aprehensión de la realidad en la búsqueda de la utopía.

“EDUCAR, NO ES ENSEÑAR AL QUE NO SABE, ES DECUBRIR AL QUE NO EXISTE”

Bibliografía:

Aritz Recalde. Reflexiones sobre la Reforma  Universitaria del año 1918: Siete hipótesis para el Análisis.

Escotet, M. Desafíos de la Educación Superior En Una era de Transición.

Kohan, N. (2011).La Reforma Universitaria en el siglo XXI.

Luquez, E. A los cien años de la Reforma Universitaria. Proceso de Alta Política (1918-2018). En ffyl.uncuyo.edu.ar

Márquez, A. Autonomía Universitaria y Revolución. DIKAIOSYNE, nº 10. Universidad de Los Andes. Mérida.2003.

Muñera, L. La Reforma de Córdoba y el Gobierno de las Universidades Públicas en América Latina. Ciencia política nº 12, julio-diciembre 2011.

Méndez, N (1995). La Renovación en la Universidad Central de Venezuela. Erase una vez el futuro.

Negrón, J (2007). Saber y Poder: El proceso de Renovación Universitaria en la Universidad Central de Venezuela (1967-1970). Boletín Antropológico, año 25, nº 71, septiembre-diciembre, 207. ISSN: 1325-2610.

Ortega, K y Otero, M. (1986).El Fin de La Comedia. Consideraciones acerca del Anteproyecto de Ley de Educación Superior.

Pittelli, C y Hermo, J. (2010). La reforma Universitaria de Córdoba (Argentina) de 1918. Su influencia en el origen de un renovado pensamiento emancipatorio en América Latina.

Portillo, M y Memdez, J (2017). De la Universidad que tenemos a la  Universidad necesaria. Un estudio desde el pensamiento decolonial. Fondo editorial UNERMB.

Rivera, E. La Reforma Universitaria. Edición electrónica: Marxists Internet Archive, noviembre 2002.

Tünnermann, C. (2008). Noventa años de la Reforma de Córdoba (1918-2008), Buenos Aires, CLACSO.

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