Informe temático sobre Pobreza y Derechos Humanos de la CIDH subraya el papel fundamental de la educación

El “Informe sobre pobreza y derechos humanos en las Américas”subraya la persistente situación de pobreza y pobreza extrema que afecta seriamente el goce efectivo de los derechos humanos, así como el riesgo de retroceso sobre algunos logros que ya se habían alcanzado y, con base en este panorama, presenta una serie de recomendaciones dirigidas a los Estados a fin de reducir la pobreza y garantizar que los derechos humanos sean debidamente respetados y protegidos.

Con informaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)

Entre las preocupaciones se señala la tendencia al estancamiento en materia de la reducción de la pobreza y que, en términos de desigualdad, la región de América Latina y el Caribe continúa siendo la más desigual del mundo. De acuerdo con el PNUD, diez de los quince países más desiguales del mundo se encontrarían en América Latina.

El informe señala que los obstáculos que enfrentan las personas, grupos y colectividades que viven en situación de pobreza se amalgaman entre sí, siendo particularmente afectadas las mujeres, niños, niñas y adolescentes, las personas indígenas, poblaciones afrodescendientes, migrantes, personas privadas de libertad, personas con discapacidad, población LGBTI y las personas mayores.

En lo que respecta al derecho a la educación, el informe subraya varios puntos. Así por ejemplo señala que la ausencia de una educación sexual integral vulnera la autonomía reproductiva de las niñas, adolescentes y mujeres jóvenes, y que la ausencia de contenidos que informan y educan a las niñas sobre educación sexual hace que la sexualidad se perciba como un tabú, que se debe silenciar porque es algo negativo y que no se debe compartir, ni denunciar cuando se cometen abusos. Agrega que la mayoría de niñas madres abandona la escuela y que la realización del derecho a la educación de las adolescentes y jóvenes embarazadas y madres se enfrenta a una práctica discriminatoria muy extendida en los sistemas educativos de los países latinoamericanos.

Los/as niños/as que viven en la pobreza tienen más probabilidades de abandonar los estudios, o de ni siquiera asistir a la escuela, siendo las niñas las que se ven privadas con más frecuencia que los niños del derecho a la educación. En los barrios y zonas más afectados por la pobreza, la calidad educativa con frecuencia suele ser deficiente y supone que en la práctica la educación no cumpla su importante cometido.

Otro de los puntos que se resalta es que, a pesar de que se ha logrado un aumento en la asistencia escolar de los niños y niñas indígenas de todos los grupos de edad, persisten brechas significativas entre la asistencia escolar de niños y niñas indígenas o no indígenas, y que la probabilidad de que los niños o niñas indígenas terminen la educación primaria y secundaria sigue menor que la de los/las no indígenas.

Según el informe, la población afrodescendiente se encuentra entre los grupos más empobrecidos del continente, siendo actualmente unos 150 millones de personas, lo que equivale al 30% de la población total, las que enfrentan serias limitaciones en el goce del derecho a la educación. Con respecto al derecho a la educación, la información disponible evidencia que la discriminación racial es un determinante en el goce limitado de ese derecho.

El informe también aborda la situación de la educación de las personas con discapacidad y las personas LGBTI, destacando el fuerte vínculo que existe entre pobreza, exclusión y violencia por prejuicio, y llamando la atención sobre la discriminación y violencia contra niñas, niños y jóvenes con orientaciones sexuales e identidades de género diversas. “Los Estados tienen la obligación de garantizar que sus políticas de educación estén especialmente diseñadas para modificar patrones sociales y culturales de conducta, contrarrestar prejuicios y costumbres, y para erradicar prácticas basadas en estereotipos de personas LGBTI que pueden legitimar o exacerbar la violencia por prejuicio”, señala.

Algunas cifras mencionadas en el Informe:

• en América Latina y el Caribe, más de 80 millones de niños, niñas y adolescentes viven en situación de pobreza o pobreza extrema, lo que representa más del 45% de la población menor de 18 años.

• 1 de cada 5 niños/as vive en condiciones de pobreza extrema, lo que equivale a más de 32 millones en la región.

• los/as niños/as indígenas y afrodescendientes son los/as más afectados/as por la condición de pobreza: 1 de cada 3 niños/as indígenas y afrodescendientes vive en extrema pobreza y 2 de cada 3 en pobreza.

• 1,4 millones de niños/as nunca ha asistido a la escuela.

• el 5,6% de los y las niños/as de la región ha abandonado la escuela (10 millones).

• los/as niños/as que viven en la pobreza tienen más probabilidades de abandonar los estudios, o de ni siquiera asistir a la escuela.

• las niñas se ven privadas con más frecuencia que los niños del derecho a la educación

Acceda al informe completo aquí

Fuente de la noticia: http://v2.campanaderechoeducacion.org/es/noticias/817-2017-12-22-14-18-08.htm

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