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Nuevos propósitos de 2020, el año de la educación en valores

Por: Educación 3.0

Elaborar una lista de buenos propósitos para trabajar valores como la igualdad, el compromiso social o el fomento de la lectura con el objetivo de incentivar el pensamiento crítico es un buen plan para comenzar el año. Para ello, te invitamos a participar en diversas iniciativas promovidas por distintas organizaciones para concienciar a tu alumnado.

La educación en valores debe estar presente en la vida de niños y jóvenes de todas las edades y en todos los ámbitos. En el aula puede transformarse en una serie de propósitos con los que comenzar un nuevo año profundizando y concienciando acerca de diversos aspectos.

La solidaridad, la empatía o el compromiso social son valores con los que los estudiantes del presente pueden llevar a cabo cambios que transformen su futuro. Así lo muestran los distintos movimientos sociales a favor del planeta y la conciencia medioambiental, como Fridays For Future encabezado por la activista Greta Thunberg, o las manifestaciones a favor del feminismo en muchos países del mundo.

De este modo, y desde clase, se pueden seguir los siguientes propósitos para alcanzar una mayor inclusión, igualdad o conciencia medioambiental entre el alumnado:

1.   Trabajar la sostenibilidad medioambiental

Mision #plasticfree

El comienzo del año significa seguir preocupándose por la responsabilidad ambiental como parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). En su necesidad de atravesar todos los ámbitos, tiene que estar presente en las escuelas para lograr un impacto positivo y permanente en la comunidad educativa y cívica. Esta concienciación se puede ver en iniciativas como la de Leroy Merlin, que por cuarto año consecutivo pone en marcha su programa de educación ambiental. En esta edición, Misión #plasticfree, el programa se ha propuesto que alumnado y profesorado reflexionen sobre su patrón de consumo hacia posturas más sostenibles y responsables con el medioambiente.

2.   Fomentar la inclusión

Once Upon a time

No sólo hay que centrarse en el entorno que nos rodea. Para que los propósitos de este año sean verdaderamente responsables también hay que enfocarse en las personas, en todas y cada una de ellas. Aquí es donde entran en juego conceptos como el de inclusión y solidaridad que concursos como el del Grupo Social ONCE quieren desarrollar. Este año, su 36 edición “ONCE Upon a time: La mirada de tod@s” pretende romper con el modelo que trata de forzar a las personas a encajar de manera rígida y sin profundizar en su contexto personal, emocional y social. ¿Cómo? A través de la innovación pedagógica que permite que los estudiantes sean protagonistas de su propia educación.

3.   Poner la responsabilidad en el centro

Abanca propósitos educación en valores

La característica común de estos valores es la responsabilidad. Desarrollar este concepto en los centros es otro de los objetivos a conseguir y para ello se deberían abordar todas sus dimensiones. La educación debe fomentar tanto la responsabilidad social como la económica e introducirlas en el aula es muy sencillo si se cuenta con la ayuda de programas de sensibilización. El que lleva a cabo la Fundación CASER “La Misión, por la inclusión ¡pasa a la acción!, quiere fomentar a través de la investigación una mayor conciencia social en clase. Por su parte, la 2ª ed Segura-Mente de Abanca es una iniciativa sobre educación financiera pensada para ayudar a que los estudiantes adquieran una capacidad crítica en cuanto a la asunción de responsabilidades y toma de decisiones. En este punto, se habla del fomento de la cultura de la prevención, necesaria en los futuros adultos.

4.   Trabajar la igualdad en los centros educativos

Tú puedes ser lo que quieras Barbie propósitos educación en valores

Uno de los propósitos más claros es trabajar por la igualdad de todas las personas: incluso las más pequeñas reivindican su lugar en el mundo y reclaman tener más referentes femeninos, escasos en los libros de texto. Una injusticia histórica con la que ha querido romper por ejemplo la 2º edición del programa educativo de Barbie. Bajo el lema “Tú Puedes Ser lo Que Quieras”, recupera a las profesionales olvidadas y ayuda a que el alumnado se plantee sin límites su futuro, trabaje en colaborativo y reflexione sobre lo que quiere ser.

5.   Leer más y fomentar la lectura en el alumnado

Agus& Monsters propósitos educación en valores

Es necesario fomentar la lectura en los más pequeños. En los libros también encontramos un altavoz social que se dirige directamente a la generación que transformará el futuro como se muestra en concursos editoriales como el de Casals, que presentó el año pasado la 5ª edición del concurso educativo de dibujo Agus& Monsters, una iniciativa para fomentar la creatividad y la animación entre niños y niñas.

Fuente e Imagen: https://www.educaciontrespuntocero.com/noticias/nuevos-propositos-2020-ano-educacion-valores/122327.html

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¿Qué hacer en caso de una crisis en un centro educativo?

Por: Paulette Delgado

¿Están preparados los docentes para afrontar este tipo de situaciones? ¿Cómo saber qué hacer en caso de un ataque en un centro educativo?

Aunque la escuela debería de ser un lugar seguro para los estudiantes y personal educativo, no siempre es así. El pasado 10 de enero, por ejemplo, ocurrió una balacera en Torreón, México, además de los más de 40 tiroteos que ocurrieron en Estados Unidos tan solo en 2019. Ante este tipo de ataques violentos en centros educativos, ¿de qué manera deben actuar los docentes ante situaciones de peligro?

En 2012, el Gobierno de México publicó el “Manual de Seguridad Escolar”, una publicación que como parte del programa Escuela Segura, contiene instrucciones sobre qué deben de hacer los docentes y directivos en caso de inseguridad. A siete años de su publicación, muchas instituciones siguen sin tener una estrategia de seguridad escolar.

El manual está enfocado a escuelas y consejos escolares. Para los estudiantes, el manual sugiere que los temas de seguridad sean vistos dentro de las clases de Formación Cívica y Ética.  Se enfatiza en el manual que, al momento de encontrarse en una situación de peligro, todas las acciones deben tener un sentido pedagógico; seguir procedimientos no es suficiente, se necesita una estrategia que ayude a tornar esa situación en una oportunidad de crecimiento personal y social para toda la comunidad, incluyendo a los padres.

Para lograr transformar una situación de peligro o crisis en aprendizaje, se necesita la participación de toda la comunidad en conjunto con las autoridades. Esta cooperación permitirá proteger física y emocionalmente a todos, brindar la atención necesaria en caso de secuelas y apoyar a los padres de familia y a los estudiantes en los procedimientos legales y psicológicos que necesiten.

Para lograr esta unidad todos deben de participar. Los alumnos deben de aprender sobre el autocuidado, qué hacer en caso de estar en una situación de peligro, participar en los simulacros y crear campañas de concientización. Esto los ayudará a saber cuales son sus capacidades y qué tanto pueden ayudar a docentes y compañeros.

En el caso de los padres, más allá de cuidar a sus hijos y cooperar con la comunidad, deben evitar divulgar chismes o  información proporcionada por la institución educativa. Además, el manual sugiere reunirse en la escuela en momentos de inseguridad y tratar de evitar acciones emocionales que pueden poner en riesgo a los demás.

La comunidad cerca de cualquier institución educativa  también tiene un papel importante, principalmente, el de no esparcir rumores así como ofrecer refugio para alumnos, docentes y padres de familia. Aunado a eso, pueden servir como conexión externa con el mundo en caso de que la escuela cierre sus puertas, así como la vigilancia del área y advertir a los maestros o autoridades en caso de notar algo extraño.

El papel de las autoridades recae en proteger a la población. Deben informar a la comunidad educativa sobre lo que está ocurriendo, promover acciones preventivas, ayudarlos a detectar las zonas seguras en la escuela, enseñar tanto a alumnos como a docentes sobre cómo manejar evidencia y cómo denunciar sin ponerse en riesgo. En caso de una emergencia, deben acudir rápidamente a las instalaciones educativas.

Aunque cada escuela es diferente, las decisiones que se tomen deberán enfocarse en la enseñanza de habilidades clave como la autorregulación, saber qué actitudes pueden ser de riesgo, aprender a resolver conflictos de manera pasiva y a fomentar los derechos humanos, el respeto, la solidaridad y más valores que pueden salvar sus vidas y la de sus compañeros.

Al inicio de cada ciclo escolar, cada escuela debe elaborar una autoevaluación de los problemas y riesgos que enfrentan. También es necesario definir estrategias para manejar posibles situaciones de seguridad que incluyan:

  • Asignar responsables

  • Fortalecer la protección uno del otro

  • Establecer redes de comunicación con los padres

  • Incluir a Protección Civil (o entidad similar, dependiendo del país) en el  Consejo Escolar

  • Organizar brigadas

  • Tener señales de alerta secretas, como timbres o palabras clave para alertar a otros maestros

  • Hacer constantemente simulacros con Protección Civil o Seguridad Pública presente y documentar las situaciones de riesgo para trabajar sobre ellas

  • Revisar constantemente los reglamentos de seguridad, incluido el “Manual de Seguridad Escolar

  • Tener un directorio con los contactos de las autoridades y miembros de la comunidad que pueden ayudar, estos contactos deben estar a la mano

Igual que es importante tener un plan de acción durante y después de una crisis, al finalizar la situación de riesgo se deben de analizar las consecuencias materiales, físicas y emocionales. El estallido de una bala o la sensación de un temblor se van, pero el miedo, ansiedad, estrés y más problemas emocionales, se quedan, por lo que es importante hablar de lo sucedido con el alumnado y profesorado y tratar de convertir la situación en aprendizaje. Tener una bitácora de los hechos donde se registre qué sucedió, cómo se manejó, qué se hizo bien y qué se puede mejorar, ayudará a aprender de estas situaciones.

A continuación señalamos algunos ejemplos más específicos de qué hacer en circunstancias de inseguridad:

¿Qué hacer en el caso de rumores de hechos violentos?

Esparcir rumores puede generar tensión y pánico entre la comunidad. El “Manual de Seguridad Escolar” recomienda que para evitar este tipo de problemas es importante tener  buena comunicación con las autoridades y fuentes confiables de información. Una vez que se tienen los datos verídicos, distribuirlos a los padres de familia y a la comunidad a través de medios de información internos como pueden ser el correo electrónico, hablando directamente por teléfono con los padres o a través de un comunicado en el portal de la escuela. Entre mejor comunicación exista entre la comunidad sobre el tema o acontecimiento, menos tensión se generará. El manual enfatiza que la clave es no esconder información. La escuela también debe encargarse de acudir a las autoridades para que se proceda a investigar el rumor y descubrir si es un peligro real.

¿Qué hacer en caso de armas dentro de la escuela?

Para evitar incidentes con armas, el manual recomienda evitar no tenerlas al alcance de los hijos. Esto incluye navajas u otras herramientas que puedan ser usados como armas. Si de igual forma nos encontramos con que un alumno porta un arma, tratar de averiguar las intenciones del alumno: ¿fue para intimidar o para impresionar a alguien? ¿La quiere mostrar? ¿Es para atacar a otros?

Si no es una situación de peligro, el docente o alguien de su confianza, debe tratar de hablar con el alumno sin tratarlo como delincuente, ver de qué manera pueden ayudarlo y hablar con sus padres. En caso de que el alumno sí esté amenazando usando un arma, es necesario tomarlo en serio y buscar que lo llevó a actuar así. ¿Acaso el alumno sufre de bullying? ¿Quiere atacar a alguien en específico? ¿Ha intentado herirse a si mismo?

El riesgo aumenta si el alumno ha presentado comportamientos violentos anteriormente, ha tenido tendencias suicidas, viene de un entorno de violencia familiar o ha amenazado en ocasiones anteriores. En medida de lo posible, el maestro debe intentar de hablar con él y brindarle soluciones, sin violencia, y buscar el apoyo de un psicólogo. Nunca se debe regañar, juzgar o hacer movimientos repentinos al agresor, siempre se debe tratar de tratarlo con integridad. Es necesario hablarle a sus padres e informar a las autoridades.

En el caso de un tiroteo escolar, Larry Banaszak, Jefe de Policía en Otterbein University, aconseja seguir los siguientes pasos: correr, esconderse, crear una barricada, y solo como último recurso, atacar. El último paso solo aplica en el caso de que el atacante ya esté en el aula y no haya manera de correr o esconderse. Banaszak recomienda que el primer alumno en ver la pistola o arma grite: “¡arma!” y todos los demás compañeros, al mismo tiempo, comiencen a lanzar libros u objetos al atacante para que se le dificulte darle a un blanco. Mientras unos compañeros estén aventando objetos, otros deben intentar tumbar al tirador mientras que otros intenten quitarle el arma. Una vez que logren desarmarlo, ya sea el maestro o sus compañeros, deben inmovilizar al atacante, ya sea sentándose en cada una de sus extremidades en lo que llegan las autoridades.

La única manera en la que esta técnica de ataque funciona es si se les enseña a los alumnos cómo actuar a tiempo. Como se mencionó anteriormente, los alumnos deben saber si tienen la fuerza suficiente para taclear al atacante, lanzar objetos o quitar el arma, así como estar en control de sus emociones y no dejar que el pánico los domine. Por su parte, el Manual de Seguridad Escolar del Gobierno de México también describe qué hacer en caso de balaceras cerca de la escuela, amenazas de explosivos y más situaciones de riesgo en centros escolares.

¿Cómo mantener la calma?

Si los maestros no autorregulan sus emociones, no podrán ayudar a sus alumnos. Es por eso que es importante que los docentes  aprendan a manejar sus emociones y saber cómo actuar en situaciones de riesgo. Lo ideal es crear una clase donde se hable del autocontrol emocional, en donde puedan participar tanto docentes como alumnado, para que puedan reconocer  sus fortalezas y debilidades emocionales y de esta manera evaluar si tienen la capacidad de mantener la calma en este tipo de situaciones. Los simulacros pueden ayudar a saber cómo actuar y son una buena oportunidad para enseñar técnicas de respiración y análisis de situaciones de peligro y crisis. Después de un simulacro es importante preguntarse:  ¿Qué sienten? ¿De qué manera están hablando? ¿Cuál es su actitud? Siempre es importante tratar de no gritar y no dejar que el miedo los paralice.

La importancia del bienestar socioafectivo de la comunidad

Si el docente no se encuentra bien emocionalmente, no podrá ayudar a sus alumnos. Tras una  crisis, normalmente los esfuerzos se centran en el alumno y no en la comunidad escolar. El manual del Gobierno de México recomienda que los docentes tengan una junta en un ambiente cálido, de preferencia, para hablar de cómo se sintieron, evaluar lo que pasó y buscar la manera de hacerlos sentir seguros para que puedan seguir protegiendo a los alumnos. Este tipo de reflexión permite a los docentes valorar y reconocer que, aunque no tienen el control, sí cuentan con las herramientas necesarias para sobrellevar una crisis.

Por último, el manual vuelve a insistir en la importancia de la unidad de la comunidad. Es importante recordar que la escuela no está sola. Si se unen tanto padres de familia, personas cercanas a las instalaciones escolares, y las autoridades, es más fácil prevenir una crisis y actuar de la mejor manera posible en caso de que llegue a ocurrir.

Fuente: https://observatorio.tec.mx/edu-news/que-hacer-en-caso-de-crisis-escuelas

Imagen: Clker-Free-Vector-Images en Pixabay

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Cuentos para trabajar la inclusión en casa y en los centros

Por: ABC Sociedad

La maestra Pilu Hernández Dopico ofrece algunas ideas para progenitores y docentes.

La inclusión educativa es un tema muy recurrente en los últimos tiempos. Pero, ¿sabemos lo que significa realmente? Pilu Hernández Dopico, maestra, asegura que a menudo se confunde inclusión con integración. «La inclusión educativa significa incorporar a todos los alumnos en la comunidad educativa, independientemente de su condición, raza, género o religión», añade la responsable del blog «El Pupitre de Pilu». Es que todos los que pertenecen a una misma aula, trabajen lo mismo independientemente de sus características físicas, psíquicas, psicológicas, sociales y/o culturales.

Para ello, propone cuentos dónde trabajar la inclusión en casa y en los centros:

1. «¿De qué color lo ves?», de Laia Membrive: Manuel es un niño que tiene daltonismo. No entiende por qué el otoño le gusta tanto a la gente. A él no le parece tan bonito, todas las hojas tienen el mismo color. Este libro ayuda a comprender que todo es especial para cada persona, aunque sea diferente.

2. «El curioso incidente del perro a medianoche», de Mark Haddon: Christopher Boone es un joven de 15 años con Síndrome de Asperger y conoce las capitales de todos los países del mundo. También es capaz de recitar los números primos hasta el 7.507, pero no tiene habilidades sociales. El libro relata en primera persona la historia de cuando Christopher intenta resolver un crimen.

4. «Los zapatos de Marta», de Meritxell Margarit y Marta Montañá: Marta, una niña con espina bífida, tiene dificultades para andar y se ve en la necesidad de utilizar unos zapatos especiales y bastones. El cuento descubre características de esta discapacidad y hará partícipes a los lectores de los valores que vive Marta junto con su hermano Lucas y su amigo Nico.

5. «María cumple 20 años», de Miguel Gallardo: es un libro en el que el autor muestra la relación de María, que tiene TEA, con el mundo. Relata el mes y medio de veraneo padre-hija.

6. «¡Alex, basta ya!», de Lidia Arroyo: un niño inquieto se enfada cuando no consigue lo que quiere y nunca acaba lo que empieza. Interesante relato de esta familia a la hora de salir de casa.

7. «Mi hermana Lola», de Miguel Gallardo: Javier habla de su relación con su hermana Lola que tiene discapacidad intelectual.

8. «Un bicho raro», de Emilio Urberuaga y Paz Rodero: un cuento interesante para reflexionar sobre las rarezas que nos atribuyen los demás. También para aceptar y explicar nuestras diferencias.

9. «Mis amigos especiales», de Francisco Capdevila Blanco: este cuento habla sobre descubrir nuevos amigos, de niños con discapacidades físicas y psíquicas, y cómo ellos pueden enseñarnos muchas cosas.

10. «Piedras en los bolsillos», de Marta Brule: narra la historia de superación de una madre a la que su hijo le han diagnosticado cáncer. Marta cuenta en primera persona su positividad y amor hacia su hijo.

Fuente e Imagen: https://www.abc.es/familia/educacion/abci-cuentos-para-trabajar-inclusion-casa-y-centros-202001130048_noticia.html

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Honduras. El Abrazo a las Defensoras de Derechos Humanos

Por: Tercera Información

Internacional/Prensa Comunitaria

El Abrazo estuvo presente en lugares, espacios y territorios simbólicos de las luchas que fueron pensados con anticipación por su importancia histórica y también política, considerando que son lugares donde las defensoras realizan una defensa cotidiana que data de muchos años.

Comunicado Misión Internacional de Solidaridad Feminista

“Ninguna mujer tiene porque estar sola, hay que defendernos entre nosotras”

El día 20 de enero de 2019 dio inicio la Misión Internacional Feminista El Abrazo, integrada por 52 defensoras que forman parte de 28 organizaciones provenientes de redes, movimientos sociales, comunidad LGTBI y organizaciones indígenas y negras de 13 países. Nos movilizamos a siete territorios: Santa Bárbara, Copán, La Esperanza, El Progreso, Tela y Tocoa para encontrarnos en las diversas luchas que realizamos las defensoras de derechos humanos y abrazar a nuestras compañeras defensoras de Honduras, mujeres campesinas e indígenas de los pueblos Garífuna, Tolupán, Misquito, Maya Chortí y Lenca, así como también luchadoras de comunidades rurales y urbanas.

El reconocimiento de las identidades políticas y las luchas de las defensoras formó parte fundamental de los encuentros. Escuchándonos nos dimos cuenta de que no existe una lucha en la que las mujeres no estemos presentes. Fuimos testigas de la potencia transformadora de las defensoras de Honduras, capaz de enternecer al mundo, y de su fuerza y convicción para hacer frente a la más brutal dictadura, al empresariado transnacional, a los terratenientes y a las alianzas criminales de los Estados y sus falsas democracias. Presenciamos como las defensoras realizan una lucha por la vida frente a la explotación capitalista, racista y patriarcal. Nombrar la defensoría que realizan implica compartir sus historias y experiencias particulares y cotidianas, las cuales también son colectivas, porque su lucha es por el bien común y la realizan rodeadas de otras mujeres, de sus comunidades, de sus pueblos y organizaciones.

La presencia de la Misión en el territorio hondureño tuvo una fuerza política muy importante por el momento histórico que se transita. El 27 de enero se cumplía un año de la instauración de la dictadura en Honduras y el 25 del mismo mes se reconoce el día de la Mujer Hondureña en memoria al proceso organizativo y de resistencia de las mujeres por sus derechos políticos, cumpliéndose 64 años de aquella lucha que libraron en un contexto de fuerte movilización popular y lucha social en la que las mujeres jugaron un papel protagónico en la defensa de los derechos laborales y la liberación de los presos políticos, tal como en la actualidad.

Las defensoras, que viajaron desde el Sur Centro y Norte de Abya Yala, fueron recibidas en Honduras con mucha calidez, la cual se evidenció en cada detalle y cuidado con que fueron recibidas. Tener en cuenta los horarios, reservaciones, aceites aromáticos para incrementar la sensación de seguridad a su llegada; brindar información detallada sobre las rutas y defensoras que conoceríamos, procurar una alimentación adecuada y placentera, buscar espacios seguros y armoniosos para estar juntas son algunos de los cuidados que estuvieron presentes desde el inicio como parte vital del cuidado colectivo.

Foto: Misión Internacional de Solidaridad Feminista

Las compañeras de nuestros países hermanos, territorios mesoamericanos, llegaron con sus maletas llenas de emoción y expectativas por el encuentro con otras defensoras de diversas luchas. Caras nuevas y conocidas, abrazos y sonrisas circularon por los reencuentros con quienes se comparten contextos y resistencias como mujeres y defensoras.

Foto: Misión Internacional de Solidaridad Feminista

Agradecimientos infinitos a las compañeras enlaces de los territorios que forman parte de la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos y al equipo técnico de la misma, quienes prepararon las actividades y conversatorios en las comunidades, rompieron las imposiciones de las fronteras patriarcales y coloniales para realizar este espacio que nos permitió juntar complicidades y la solidaridad que alimenta la fuerza individual y colectiva de nuestras luchas.

La Misión Feminista

El Abrazo estuvo presente en lugares, espacios y territorios simbólicos de las luchas que fueron pensados con anticipación por su importancia histórica y también política, considerando que son lugares donde las defensoras realizan una defensa cotidiana que data de muchos años.

Las defensoras recibieron a la Misión en zonas urbanas y rurales, que en su mayoría son territorios que se encuentran bajo amenaza permanente debido a la depredación y saqueo por parte de empresas extractivas nacionales y extranjeras de los recursos naturales (nombrados bienes comunes por las defensoras).

Las playas, las montañas, los ríos y una gran variedad de animales también forman parte de la red de la vida que se encuentra en estos territorios en disputa.

Los testimonios y las luchas de las defensoras hondureñas los pueden ver completos en la boletín informativo “El Abrazo”, a través de esta publicación que recoge experiencias de la misión.

Fuente e Imagen: https://www.tercerainformacion.es/articulo/internacional/2020/01/23/honduras-el-abrazo-a-las-defensoras-de-derechos-humanos

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Aprendizaje conectivo: un nuevo camino al conocimiento

Por: Sofía García-Bullé

Las interconexiones entre lo que pasa dentro y fuera de la escuela son la clave para mantener a los alumnos motivados.

La Dra. Mizuko Ito comenzó su conferencia magistral en el CIIE 2019 con una anécdota muy peculiar. Relató una experiencia con su hijo en la que el joven jugaba Starcraft justo antes de la hora de dormir. Al momento de terminar la sesión de juego, él imprimió un texto que se llevó para leer. Cuando Ito le preguntó de qué se trataba el contenido impreso, su hijo respondió que era un cuento de fan fiction dentro de la universo ficcional de Starcraft. Al preguntar esto, la profesora de antropología de la Universidad de California, en Irvin, descubrió algo crucial que jugaría un papel importante en el futuro educativo de su hijo: sus aficiones.

La teoría del aprendizaje conectivo sostiene que la educación no es un proceso lineal, es un conjunto de interconexiones que construyen la estructura cognitiva en la que los estudiantes se apoyan para absorber y entender información nueva. Como tejidos de un organismo, los intereses y pasiones de los alumnos trazan el camino hacia las áreas que más desean aprender y en las que muy posiblemente se desarrollarán profesionalmente en el futuro. Bajo este contexto, es necesaria no solo una transferencia de conocimiento, sino la vivencia educacional que los mantenga motivados, activos y prestos a aprender.

La Dra. Ito argumentó que el involucramiento de los estudiantes es un asunto crítico para mantener la calidad de la experiencia educativa, y explicó que este involucramiento va en descenso a medida que los estudiantes avanzan a través de los grados en su carrera académica. Para cuando llegan a la universidad, el 45 % de los estudiantes reportan aprender poco durante los primeros dos años de formación universitaria, simplemente porque no están involucrados. Sus intereses personales y lo que los motiva no está conectado con lo que aprenden en la educación formal.

Como punto de partida para compartir esta apatía, Ito propone hacernos una serie de preguntas: ¿Dónde están los jóvenes? ¿Qué les gusta hacer? ¿Qué podemos hallar en común entre lo que les gusta hacer y lo que necesitamos enseñarles para convertirse en lo que quieren ser? Estas son los cuestionamientos base del aprendizaje conectivo.

“No es suficiente que tu hijo palomee un par de criterios en la lista de lo que aprenden en la escuela, tienen que tener intereses, tienen que salvar el mundo un par de veces, tienen que tener unos cuantos miles de seguidores en YouTube o Facebook”.

De acuerdo a un reporte de Common Sense Media, los adolescentes de 13 a 18 años pasan 7 horas y 22 minutos al día detrás de una pantalla, solo para entretenimiento, ya que este tiempo no incluye actividades como deberes escolares o comunicaciones del día a día. Interactuar en línea y consumir contenidos digitales ya no es solo algo que los jóvenes hacen, es lo que los hace a ellos. Es en internet donde comienzan a recibir sus primeras instancias de información; esta información les ayuda a definir sus intereses y estos intereses a elegir los pares con los que van a convivir  y aprender en conjunto.

Ito comentó que ser simplemente el “portero” de este mundo digital y limitar el tiempo en línea de nuestros hijos y alumnos, coarta la oportunidad de conocer la manera en que estas interacciones y contenidos los ayudan a formar las estructuras cognitivas que podrían aprovechar al momento de aproximarse a la educación formal. Se pierde la conexión entre aquello que motiva a los jóvenes a aprender y los conocimientos, que nos toca a nosotros enseñar.

Quizás la parte más poderosa de la conferencia magistral a cargo de Ito no fueron las estadísticas ni los datos contundentes que usó para mostrar el impacto de esta desconexión entre lo que los estudiantes quieren aprender y lo que nosotros necesitamos enseñarles; sino los testimonios  que ejemplificaron lo que pasa cuando existe una relación directa entre lo que el estudiante ama hacer y lo que necesita aprender para desarrollarse.

Tal testimonio era el de una estudiante de la escuela Quest to Learn, quien cursaba secundaria y amaba Minecraft. Ella y su primo pidieron a su escuela formar un club extra curricular del videojuego. Fue en este club donde la alumna aprendió a hacer videos de Minecraft y utilizó las habilidades técnicas y sociales aprendidas para mejorar en la esfera de la educación formal.

Otro ejemplo es el de Manjit, de 18 años, quien no consideraba que podría tener un futuro como escritor hasta que conoció el trabajo de jóvenes como él que escribían fan fiction. También presentó el caso de  Katie, de 14 años, a quien no le emocionaba la lectura ni la redacción, hasta que encontró una comunidad de fans de One Direction que escribían en la plataforma Wattpad.

“No es suficiente que tu hijo palomee un par de criterios en la lista de lo que aprenden en la escuela, tienen que tener intereses, tienen que salvar el mundo un par de veces, tienen que tener unos cuantos miles de seguidores en YouTube o Facebook”, dice Ito, y explica que hay un sin fin de eventos que suceden fuera de la escuela y que son cruciales para el desarrollo cognitivo y emocional de los estudiantes. La profesora agregó que maestros y expertos en educación aún están descubriendo cómo conectar los intereses, interacciones y comunidades que motivan a los estudiantes a aprender con la educación formal.

Sin duda, un trabajo complejo, pero podemos empezar preguntando a nuestros alumnos qué les gusta hacer fuera de la escuela y descubrir junto con ellos lo que aprenden haciendo lo que aman.

Fuente: https://observatorio.tec.mx/edu-news/aprendizaje-conectivo-mizuko-ito

Imagen: fancycrave1 en Pixabay

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Las anteriores guerras políticas de la derecha con la educación encallaron en los tribunales

Por: Daniel Sánchez Caballero/David Lombao

El PP de Rajoy convirtió su oposición a la asignatura Educación para la ciudadanía en una batalla contra el Gobierno de Zapatero que embarrancó en el Supremo.

Vox y el PP han elegido cuál va a ser la primera batalla contra el nuevo Gobierno: la defensa del mal llamado ‘pin parental’, o lo que es lo mismo, que los padres tengan capacidad para vetar la asistencia de sus hijos a actividades contrarias a sus convicciones morales o éticas. No se trata de contenidos extraescolares sino de charlas y jornadas formativas que están incluidas en el currículum de los centros. La ofensiva, ideada por Vox y a la que se ha sumado el líder del PP, Pablo Casado, ha atrapado a Ciudadanos, socio de ambos en varios gobiernos autonómicos, que después de amagar con que apoyaría la medida ahora se posiciona en contra.

Primero el partido de Santiago Abascal y después el PP haciendo seguidismo de la extrema derecha han decidido convertir la polémica surgida en Murcia en un ariete para su oposición nacional. En esa comunidad autónoma, el partido de extrema derecha reclama que se instaure ese veto previo en la Educación como condición irrenunciable para votar a favor de los presupuestos. El PP lo apoya y Ciudadanos de momento titubea. Aunque la medida aún tiene que debatirse y aprobarse, el gobierno murciano ya ha dado pasos en ese sentido obligando a lo centros a que pidan autorización de los padres para ciertas actividades.

En síntesis, ese veto parental consiste en dar a los padres el poder de rechazar ciertos contenidos educativos si consideran que no se adecúan a sus convicciones morales, ideológicas o religiosas. Los padres de los alumnos tendrían conocimiento previo del contenido de esas actividades y podrían solicitar por escrito que sus hijos no participen. Aunque podría afectar a cualquier tipo de actividad, la iniciativa –una de las medidas estrella del programa de Vox– está centrada en cargar contra las charlas sobre diversidad e igualdad.

El Gobierno ya ha enviado un requerimiento al Ejecutivo murciano para que dé marcha atrás. Sin respuesta por parte de la administración murciana, la ministra de Educación, Isabel Celáa, ha decidido este lunes poner un plazo a ese requerimiento: tienen un mes para «restaurar la legalidad». El siguiente paso será acudir a los tribunales con el argumento de que la medida es contraria a una norma de rango superior, y por tanto la comunidad autónoma no tiene competencias. Además, en el texto que ha remitido, el Ministerio recuerda que la decisión del Gobierno murciano contraviene varios tratados internacionales.

Diferencias en el PP

Casado ya ha hecho de esta polémica el centro de sus discursos públicos y de sus ataques al nuevo Gobierno de PSOE y Unidas Podemos. El líder del PP, una vez superado el ensayo fallido de la moderación, ha pasado a equiparar la defensa del Gobierno de las charlas sobre diversidad e igualdad al adoctrinamiento de países comunistas: «¿Me están diciendo que es como dicen a las familias en Cuba, que los niños son de la revolución? ¿Vamos a llegar a que los niños también delaten a sus padres cuando no son buenos revolucionarios como pasa, a día de hoy, en Cuba?».

Mientras tanto, dirigentes del PP hacen ver que se trata de un problema artificial. El consejero de Educación de Madrid hizo públicas este lunes algunas cifras: contó que entre 1,2 millones de alumnos, la Comunidad de Madrid había registrado una única queja, que la administración investigó y que se quedó en nada.

Desde Galicia el presidente Alberto Núñez Feijóo pidió no «banalizar» sobre asuntos que requieren un debate sereno, dando a entender que él –que está a las puertas de unas elecciones y necesita exprimir su perfil más centrista– no va a hacer seguidismo de Vox. El PSOE, por su parte, ya ha anunciado que presentará iniciativas en parlamentos regionales y en otras instituciones para retratar a las derechas.

Mientras Feijóo se desmarca, su jefe de filas sí está decidido a abrazar una estrategia conocida en la derecha: hacer de la Educación un terreno de batalla política. El problema para Casado es que la vía judicial, que ya atisba la ministra, no siempre ha salido bien a un PP que ha encallado en los tribunales.

El Supremo rechazó que quepa objeción de conciencia

El caso más claro es el de la asignatura de Educación para la Ciudadanía, que introdujo el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Como ahora, el PP liderado por Mariano Rajoy centró todos sus esfuerzos en cargar contra esa materia y convertir su lucha en una supuesta batalla por la libertad individual. Se estaba acabando 2006 cuando se conoció el contenido de la asignatura como parte de la nueva ley, la LOE. La materia era obligatoria y respondía a una recomendación del Consejo de Europa, que afirmaba que era esencial para promover una sociedad libre, tolerante y justa.

A los sectores más conservadores les faltó tiempo para denunciar que la asignatura tenía «un contenido moral y político de un sesgo muy determinado», como alertó el Gobierno de la Comunidad de Madrid, entonces presidido por Esperanza Aguirre. Centenares de familias apelaron a un supuesto derecho a la objeción de conciencia para pedir que sus hijos no cursaran la asignatura. Elementos como la educación sexual, las familias monoparentales u homosexuales o el laicismo se cuestionaron como inapropiados e invasivos en la educación de los niños.

El asunto escaló y acabó en los tribunales, que fueron sentenciando en diferentes sentidos. Tuvo entonces que pronunciarse el Tribunal Supremo, que en 2010, tras dos días de deliberaciones –cuando había 114 objetores, según un recuento de El País–, unificó doctrina y estableció por 22 votos a 7 que no era posible acogerse al derecho a la objeción de conciencia para una asignatura. Sí pedía el Alto Tribunal que se controlara el contenido de los manuales de la asignatura.

Esta imposibilidad de hacer objeción de conciencia educativa es la misma a la que alude el Ministerio de Educación en el requerimiento que le ha hecho a Murcia para que retire el veto parental de Vox. Finalmente, la polémica acabó cuando el PP llegó al poder y eliminó la asignatura al aprobar la LOMCE.

Feijóo, el precursor del veto parental

Hay otro precedente que acabó en los tribunales y que también apostaba por el veto parental, aunque en este caso sobre la educación lingüística. Fue también durante el Gobierno de Zapatero. En Galicia, el introductor de la exigencia de control paterno sobre las aulas fue el PP durante su breve estancia en la oposición al gobierno de PSdeG y BNG que dirigió la Xunta entre 2005 y 2009.

En ese contexto de movilización prácticamente continua del PP de Mariano Rajoy contra el Ejecutivo de Zapatero sobre cuestiones territoriales, el entonces nuevo líder de los populares gallegos, Alberto Núñez Feijóo, se aferró a una bandera que su antecesor, Manuel Fraga, nunca había utilizado en sus casi dos décadas como presidente: la de una supuesta «imposición» del gallego en Galicia. Fue ahí donde encajó su propia versión de un veto parental que acabaron tumbando los tribunales.

En unos años en los que el PPdeG llegó a temer que parte de su voto urbano fuese a parar a la entonces emergente UPyD de Rosa Díez, los de Feijóo decidieron romper la baraja del consenso lingüístico que habían estado a punto de firmar con el Ejecutivo de socialistas y nacionalistas. Además de alentar manifestaciones y otras protestas, el candidato Feijóo lanzó una propuesta en aras de la «libertad». «En el sobre de matrícula meteré una casilla para que los padres elijan el idioma de las asignaturas troncales», aseguró en una entrevista con El País pocos días antes de las elecciones gallegas de 2009.

El programa electoral del partido, no obstante, matizaba la promesa. Se trataba de «escuchar, a través de procedimientos reglados, la opinión de los padres en relación con las materias que se impartirán en cada idioma», indicaba. Asumía, en esencia, las reivindicaciones de pequeños grupos como la asociación denominada Galicia Bilingüe, que exigían a la Xunta que permitiera a las familias del alumnado decidir el idioma en que eran impartidas las materias escolares y excluir el gallego si padres o madres así lo determinaban.

De este modo, diez años antes de que Vox lanzase su exigencia de veto parental, Feijóo ya equiparaba «libertad» con permitir que las familias determinasen el funcionamiento de las aulas en función de su ideología. Cuando, pocos meses después de lograr la Presidencia de la Xunta, anunció los rasgos generales de lo que presentó como «decreto del plurilingüismo», su promesa ya no era esa «casilla en el sobre de matrícula», sino repetir una encuesta a las familias como la que la Consellería de Educación había realizado en los meses previos y cuyos resultados íntegros no había divulgado. El plan, había explicado Feijóo, consistía en una «consulta que se realizará cada cuatro años y que orientará el reparto horario» de materias entre lenguas.

Cuando, en mayo de 2010, vio la luz el texto íntegro del decreto, la encuesta estaba presente, aunque restringida a la enseñanza infantil. Fue en este punto en el que entraron en juego los tribunales. Entidades de defensa del gallego, sindicatos y la Real Academia Galega recurrieron el decreto ante el Tribunal Superior de Justicia de Galicia. En varias sentencias, los jueces rechazaron frenar el conjunto de la norma, pero sí la controvertida encuesta y otros aspectos vinculados a la misma.

Concretamente, el TSXG determinó que la Xunta estaba «vulnerando la configuración del derecho fundamental a la educación» recogido en la Constitución, puesto que «los poderes públicos tienen encomendada la programación general de la enseñanza, de cuya potestad la Administración (…) no puede abdicar, sometiendo la votación un aspecto tan fundamental como la lengua». La elección familiar, matizaba, se restringe únicamente a la decisión de si el alumnado cursa o no la materia de Religión.

Después de aquellas sentencias, que también suprimían el artículo que otorgaba «libertad al alumnado para utilizar en las manifestaciones oral y escrita la lengua oficial de su preferencia», con independencia del idioma de la asignatura, la Xunta se embarcó en una batalla legal y, al mismo tiempo, continuó distribuyendo encuestas lingüísticas a las familias del alumnado de Infantil. Pero su resultado, afirmó, ya no sería «vinculante». «Seguiremos haciendo las consultas, pero no producen efectos legales porque las sentencias lo impiden, pero será determinante para que nosotros adoptemos una decisión u otra», había asegurado el presidente de la Xunta.

Información publicada en eldiario.es

Fuente e Imagen: https://eldiariodelaeducacion.com/blog/2020/01/21/las-anteriores-guerras-politicas-de-la-derecha-con-la-educacion-encallaron-en-los-tribunales/

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Excelencia mortal: no en cualquier escuela

Por: Hugo Aboites

Un nuevo patrón de violencia escolar: estudiante niño o adolescente que dispara a compañeros y maestra y se suicida. Ocurrió recientemente en Torreón en una institución privada donde, por cierto, la excelencia en la educación es una realidad (Colegio Cervantes), pero ya antes (enero 2017) en Monterrey, también en otra escuela privada –nuestro compromiso es la excelencia académica– (Colegio Americano del Noroeste), una profesora y estudiantes resultaron heridos y muerto, por mano propia del agresor de 15 años.

Se insiste en hacer llegar (al estudiante) tan lejos, tan rápido, con tanta amplitud y profundidad co-mo su competencia le permita, para garantizar al menos esta tensión hacia la excelencia (fun4us.org/2017/09/16/educar-en-la-excelencia-y-el-valor-del-esfuerzo/). Una tensión que sobre todo se ha desarrollado en privadas que se precian de su alto nivel académico y social y que hace que algunos niños y jóvenes –que ya por otras razones están en situación extrema– lleven a cabo una agresión tan mortal como las que ahora vemos. Es el mensaje más fuerte de enojo y desesperanza que puede enviar un niño de 11 años o un adolescente ante una institución que siente que lo agrede profundamente. Lo cierto es que la escuela de excelencia no se preocupa por cuidar; exige, castiga, demanda sin contemplación y, puede romper los delicados balances y procesos que constituyen el paso del niño a joven. La muerte de estos estudiantes es un aviso de que la tensión por la excelencia, a muchos, muchos más, causa daño y hace sufrir profundamente y lleva a situaciones terribles. Ahí está el caso de la jovencita estudiante del ITAM quien hace alrededor de un mes, agobiada por la humillación sufrida a manos de un profesor y de una institución de excelencia que no la protege y que extraoficialmente se describe como no para débiles, muere al día siguiente en un ataque de angustia y epilepsia, en brazos de su madre. Y sus compañeros confirman la presión, cómo los lleva al borde y denuncian la indiferencia institucional (Román y Sánchez Jiménez, La Jornada 20/12/19). Indiferencia también cuando dos estudiantes de excelencia del Tec de Monterrey son asesinados por soldados a las puertas del plantel y luego presentados como narcos armados hasta los dientes –como se titula el documental de 2019–. Allí se muestra como la institución no los defiende y en una placa sólo hace constar vagamente su fallecimiento. En la misma institución, pero en el plantel Sur de la Ciudad de México cinco estudiantes mueren en el sismo de 2017 al caerles encima un paso elevado mal construido y sus padres se quejan del desdén de sus autoridades. Y la misma actitud en el Colegio Rébsamen, en las escuelas Maciel. Es una paradoja, pero los socialmente más protegidos están hoy más expuestos que los estudiantes de una escuela pública.

Es posible que no por mucho tiempo. En la pública hasta ahora las muertes han sido accidentales o resultado de un conflicto específico con un profesor o compañero, y sin suicidio. Tal vez contribuye a esa diferencia el hecho de que en la pública el discurso y la práctica de la calidad y excelencia han sido duramente cuestionados y objeto incluso de protestas y movilizaciones nacionales muy importantes del magisterio (CNTE). Y gracias a eso hasta ahora no prospera con igual fuerza el cultivo de la voluntad y del esfuerzo individual, de la competencia, el logro, la tensión y el desprecio por los débiles.

En la pública y privada, sin embargo, la violencia no se resuelve sólo con Mochila segura, o señalando a los padres de familia. Si la violencia ocurre en la escuela, contra la escuela, contra sus maestros y estudiantes es por algo que está ocurriendo en la escuela. Y es el crecimiento durante décadas de la ideología de la calidad y la excelencia, pero, lo peor: que la SEP de la 4T, aliada a la derecha, llevó la excelencia a rango constitucional y luego, sola, a las leyes secundarias y ahora la propone en la Ley General de Educación Superior. Ahí, fortalece y da legalidad (ar-tículo 6) a los requisitos y exámenes de selección orientados a sólo admitir a los mejores y fortalecer una atmósfera que justifica las posturas más hostiles contra niños y jóvenes. Como muestra el texto enmarcado que en cada aula de una escuela pública para adolescentes, les advertía: “Si… / haces ruido y escándalo/ manchas el piso/ dejas huellas de vandalismo/ no estudias y no aprendes,/ no eres estudiante digno/ no mereces nuestro respeto/ no tienes ningún valor como persona/ no acreditas tu condición humana/ no te queremos en nuestra comunidad/ no vale la pena hacer nada por ti. Únicamente gente de calidad y excelencia para un Aprendizaje Enseñanza y Servicios de CALIDAD Y EXCELENCIA: La Dirección” (Sic) (ver Aboites, H. La medida de una nación: 511). El texto fue descartado, pero no la ideología que lo hizo florecer.

*Profesor-investigador UAM-X

Fuente: https://jornada.com.mx/2020/01/18/opinion/016a2pol

Imagen: Michal Jarmoluk en Pixabay

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