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Cuando vas a la escuela, ¿aprendes?

 Autor: Mariana Kaipper Ceratti 

Un estudio revela que las deficiencias en los sistemas de enseñanza globales, incluida Latinoamérica, profundizan las desigualdades y propone medidas para mejorarlos

¿En algún momento hiciste un curso y sentiste que no aprendiste nada? Si la respuesta es «sí», imagínate multiplicar esa sensación por muchos años. Y si a eso le sumamos que de ese conocimiento nunca aprendido dependen tus posibilidades de mejorar de vida. ¿Cómo te sientes?

Las sensaciones de fracaso e impotencia, entre otras, acompañan a millones de estudiantes pobres de países en desarrollo que no saben leer, escribir correctamente o hacer una operación de aritmética, incluso después de varios años de escolarización. Además de nacer en desventaja debido a la pobreza, a su género o a una discapacidad, llegan a la edad adulta sin las aptitudes más básicas para la vida.

Algunos datos del último Informe de Desarrollo Mundial(WDR 2018, por sus siglas en inglés), del Banco Mundial, revelan las disparidades que existen entre los estudiantes ricos y pobres de un mismo país y entre esos mismos alumnos y los de una economía desarrollada. Estos son algunos de los hallazgos más notables:

  • Hay una crisis global de aprendizaje. La escolarización sin aprendizaje es una gran injusticia ya que está fallando particularmente a aquellos estudiantes que necesitan una buena educación para tener éxito en la vida.
  • La base de datos mundial sobre la calidad de la educación, recientemente actualizada, sugiere que, en los países de ingresos medios y bajos, más del 60% de los niños evaluados no lograron alcanzar habilidades mínimas en matemáticas y lectura. Mientras que, en los países ricos, casi todos los niños superaron ese nivel. (Ver gráfico)

Cuando vas a la escuela, ¿aprendes?
  • Las estadísticas globales no tienen en cuenta a los 260 millones de niños que, por motivos de conflicto, discriminación, discapacidad y otros obstáculos, no están matriculados en la enseñanza primaria o media.

Según el documento, la crisis global de aprendizaje no solo impide a estos jóvenes tener salarios mayores –de entre un 9% y un 11% más, en el caso de América Latina y el Caribe (véase el gráfico abajo)–, sino que también profundiza las diferencias entre ricos y pobres.

Cuando vas a la escuela, ¿aprendes?

¿Es posible revertir esta tendencia? Según el WDR 2018, sí, pero es necesario un trabajo extenso para mejorar todos los factores vinculados al aprendizaje.

El estudio, que se basa en los datos obtenidos en consultas extensas a gobiernos, institutos de investigación y desarrollo, organizaciones de la sociedad civil y sector privado en 20 países, plantea algunos desafíos y recomendaciones para América Latina y el Caribe, así como para todo el mundo en desarrollo.

Evaluar el aprendizaje

Cuando se trata de la educación primaria, América Latina es la región en desarrollo que más mide los resultados del aprendizaje. Sin embargo, la evaluación de los primeros años de la enseñanza media –una etapa importante que prepara al joven para niveles más avanzados de instrucción– no recibe la misma atención.

Para enfrentar la crisis de aprendizaje en todo el mundo, la primera recomendación del WDR 2018 es tener más y mejores sistemas para medirla y definir prioridades. Según los autores, no basta con atenerse a los indicadores de aprendizaje: es importante «identificar los factores decisivos que la impulsan, como la preparación del alumno, las competencias de los profesores, la calidad de la gestión escolar, el nivel y la equidad del financiamiento (para la educación)». ¿Y por qué no existen más y mejores maneras de evaluar el aprendizaje? Por obstáculos de carácter técnico y político, señala el estudio.

Construir políticas basadas en evidencias

Las investigaciones realizadas en todo el mundo han identificado una serie de medidas que de hecho contribuyen al aprendizaje. Una de ellas es garantizar el pleno desarrollo de los niños a través de la nutrición, la estimulación y los cuidados en la primera infancia, como se viene haciendo en Chile. A lo largo de la vida escolar también funcionan las medidas que reducen el costo de la escolarización y usan herramientas complementarias –como la merienda o las transferencias de efectivo para las familias que tienen hijos estudiantes– para aumentar la motivación y el esfuerzo. Otra actividad que suele traer buenos resultados es, para compensar el hecho de que muchos jóvenes completen la enseñanza básica sin las habilidades necesarias, ofrecerles clases de apoyo y recuperación antes de que ellos continúen avanzando en sus cursos.

Hacer de la educación una causa colectiva

El informe enfatiza que mejorar el aprendizaje rápidamente es viable cuando se convierte en una prioridad y cita a Chile y Perú como ejemplos de países que han asumido compromisos serios y recientes en ese sentido. «El aprendizaje ha mejorado a lo largo del tiempo, no siempre uniformemente, pero lo suficiente para mostrar que las reformas del sistema valen la pena».

Para movilizar a la población, despertar un sentido de responsabilidad colectiva e impulsar la voluntad política, es necesario tener información y evaluaciones de calidad sobre la enseñanza local, según el WDR2018. Finalmente, el estudio incentiva el involucrar a los ciudadanos en todas las etapas de la mejora de los sistemas de enseñanza, desde el diseño hasta la implementación de las políticas.

Fuente del Artículo:

https://elpais.com/internacional/2017/10/25/america/1508886607_063266.html

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Cambiemos la educación: La neurociencia da la razón a las pedagogías alternativas

Por: Ecoportal

Últimamente se está hablando en muchos medios de comunicación de los aportes que la neurociencia está realizando al campo de la educación. ¿Pero cuáles son estos aportes? ¿Son realmente relevantes? ¿Nos sirven a nosotros, los que estamos cada día dentro de la escuela o es pura teoría que queda reflejada en un libro?

¿Qué estudia la Neurociencia en el campo educativo?

La neurociencia es la ciencia que estudia al cerebro humano y cómo se producen los aprendizajes en él. Por lo tanto aplicada a la educación es una herramienta básica para conocer y entender los mecanismos del aprendizaje y cómo interaccionar con él. Es decir, cómo abrazarnos al aprendizaje sin tener que enfrentarnos a él ni luchar por querer fijarlo en el cerebro.

Como profesional, o más bien aprendiz de la enseñanza, esto me parece algo totalmente revolucionario. Lo que nos plantea la neurociencia es la evidencia, que no creencia, científica acerca del funcionamiento del cerebro. Gracias a su estudio y conocimiento podemos saber qué factores son determinantes para que aquello que queremos que aprendan los niños en la escuela se haga de manera eficaz y duradera.

Toda persona que se dedique al trabajo con niños debería conocer estas evidencias científicas. Así que desde aquí hago un reclamo a las universidades para que por favor pongan esta asignatura tan indispensable en la carrera de magisterio.

Los factores facilitadores de aprendizaje

Voy a comentarle (humildemente pues no soy una experta en la materia) algunos de estos factores “facilitadores de aprendizaje”. Todos ellos estudiados a través de una formación realizada con David Bueno i Torrens, neurocientífico, al que aconsejo que siga si está interesado en conocer más.

Los períodos críticos

A medida que nuestro cerebro va madurando, se ha descubierto que existen unos períodos en los que determinados aprendizajes son más sensibles a ser adquiridos en un momento que en otro. 

Esto no quiere decir que pasado este período no se pueda adquirir un aprendizaje, gracias a la plasticidad de nuestro cerebro se puede hacer pero costará más.

Por ejemplo con la lectura y la escritura.

El cerebro no está especialmente sensible a adquirir estos aprendizajes hasta los 6/7 años, sin embargo en algunas escuelas se cuelgan medallas porque hay niños que desde los 3 años ya saben escribir. Es cierto, estos niños, aprenden a escribir a los 3 años, momento no sensible para su aprendizaje, a través de una insistencia agotadora, que no sería necesaria si se esperase a que el cerebro estuviera preparado para ello.

En la adolescencia el cerebro es básicamente emocional, es lógico que a muchos adolescentes les cueste centrarse en determinadas asignaturas como química, física, biología…

neurociencia, educación, pedagogía, cerebro, neurotransmisores

La emoción activa el aprendizaje

Si un aprendizaje tiene una alto contenido emocional, es más probable que sea adquirido que otro al cual no hay ninguna emoción vinculada.

Esto tiene que ver con nuestra amígdala. La información con contenido emocional pasa por el sistema límbico donde se encuentra la amígdala. La amígdala es una de las partes más primitivas del cerebro y se activa ante eventos que considera importantes para la supervivencia, lo que favorece un recuerdo de manera más eficiente. Además con la emoción se crea oxitocinaserotonina y adrenalina, neurotransmisores necesarios para realizar nuevas conexiones neuronales.

La sorpresa, por ejemplo, es otro factor que activa la amígdala.

La práctica en diferentes contextos

La neurociencia nos dice también que cualquier contenido se asimila mucho mejor cuando podemos ponerlo en práctica en diversas situaciones.

Esto favorece la mielinización de las conexiones neuronales, haciéndolas más rápidas y de mejor acceso.

La influencia del adulto

Otro factor interesante es el de la actitud del adulto.

Se puede empatizar mucho mejor con alguien que tiene una actitud de “vamos a aprender” que con quien tiene una de “vengo a enseñar”. Las neuronas espejo predisponen a aprender cosas nuevas si se mantiene una actitud de respeto y empatía.

La capacidad atencional

Nuestro cerebro es incapaz de mantener la atención de manera continua.

De los 3-6 años son capaces de 5 a 8 minutos y la de los adultos es de 15 a 18 minutos.

¿Cómo se puede pretender tener a grupos de niños sentados durante horas, impasibles, y que encima atiendan?

Ya no comento nada de donde queda el aprendizaje… Se necesitan realizar descansos. Es cierto que hay contenidos que resultan tan motivadores para un niño que no puede despegarse de ellos durante horas, pero aquí ya intervienen otros factores como la emoción, la realización, el afán de superación…

Cuando dejas a un niño que conecte realmente con su necesidad puedes darte cuenta de cuándo tiene suficiente con una cosa o cuándo necesita más de otra. Es una auténtica maravilla poder observarlo.

Muchas veces, cuando algún niño ha hecho un verdadero esfuerzo cognitivo se va al exterior durante un buen rato a correr y saltar en la cama elástica. Nuestro cerebro consume oxígeno y glucosa cuando realiza este tipo de esfuerzos, para poder recuperarlo necesita de movimiento físico.

Hay muchas escuelas que ya están llevando a cabo este tipo de aciertos. Escuelas que llevan a cabo metodologías activas, que respetan los períodos y fases de desarrollo de manera individualizada, en los cuales los aprendizajes transcurren de manera espontánea, sin imposición externa, desde el verdadero afán de curiosidad del niño, otorgando el verdadero protagonismo de la educación a quién corresponde.

Ecoportal.net

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CADE: ¿Cómo lograr una educación inclusiva?

Por: Hugo Ñopo

En este intercambio de e-mails, Mariana Rodríguez Risco  y Hugo Ñopo discuten diferencias y hallan puntos coincidentes para abordar el imprescindible desafío de mejorar la educación en el Perú.

¿POR DÓNDE EMPEZAR?

Estimado Hugo:
Contagiada del entusiasmo por la clasificación al Mundial, me pregunto: ¿por qué no pensar en un Perú que juegue el partido de la
educación en las ligas mayores? Veo un sector educativo que ha logrado grandes avances, desarrollado capacidades y tiene un gran potencial.

Me podrán acusar de exceso de optimismo; sin embargo, no soy ciega a las dificultades. Las cifras muestran grandes avances en cobertura en todos los niveles. ¡Gol a favor de la inclusión educativa!

Lamentablemente la cobertura no ha sido acompañada por la calidad, que quedó concentrada en unas pocas instituciones educativas en Lima y grandes ciudades. Pero, ¿por qué no se expandieron llevando calidad a todo el Perú? En mi opinión, quedaron atrapados en su “zona de confort” por complacencia, falta de competencia, burocracia y políticas educativas desacertadas que, por cierto, aún persisten. ¡Autogol a la inclusión educativa en calidad!

Tenemos un sistema educativo con gran potencial, pero está maniatado. Hay tres nudos: 1) eliminar la sobrerregulación que genera burocracia y corrupción, empoderando a los líderes y gestores educativos, 2) poner en valor al maestro, y, 3) construir la institucionalidad, eliminando la existencia de instituciones educativas al margen de la ley.

Saludos,
Mariana

Querida Mariana:
Comparto tu entusiasmo y optimismo. Tenemos una oportunidad de oro. Este período debe fortalecernos como nación. Se viene construyendo un relato valioso acerca de la fe en los talentos de las personas, el trabajo en equipo, la perseverancia y la pasión en la búsqueda de los objetivos. Estas son precisamente las habilidades que
se requieren para el éxito en el futuro. Ojalá sepamos aprovechar esta oportunidad.

Dicho esto, también es conveniente una dosis de realismo. Será muy difícil enfrentar exitosamente los retos del desarrollo con el estado actual de nuestro sistema educativo.

Algo debe cambiar. ¿Qué priorizar? De los tres puntos que planteas, claramentetomo uno: los docentes. La institucionalidad también es importante, pero creo que esta la construyen las personas. Por eso priorizo al maestro.

Me gustaría ver mejor tu punto acerca de “la sobrerregulación que lleva a burocracia y corrupción”, especialmente si tomamos en cuenta que esto afecta a un cuarto de la matrícula en educación básica regular.

Así que te planteo un reto interesante. Dame una lista con diez ejemplos de lo que planteas.

Un abrazo,
H.

Mariana Rodriguez y Hugo Ñopo

Mariana Rodriguez y Hugo Ñopo. (Foto: Archivo El Comercio)

LA REGULACIÓN EN LA MIRA

Hugo:
Coincido, ¡el maestro sin duda! Urge desarrollar capacidades pedagógicas, atraer talento joven con vocación docente, e innovar el currículo de los programas de educación. Sin embargo, son miles de
maestros y están repartidos por todo el Perú, un gran porcentaje tiene más de 50 años. ¿Dosis de realismo? ¿Por dónde empezar?
Empoderando a los gestores y directores de los colegios, como en el caso de Fe y Alegría, que está logrando buenos resultados, dándoles más autonomía con rendición de cuentas. En ellos recaería la tarea de convocar y formar a excelentes maestros y de liderar el cambio, rompiendo la inercia en la que nos encontramos.

La sobrerregulación aplasta las iniciativas de mejora e innovación de los buenos colegios, ya que genera burocracia, estandariza y coloca ‘camisas de fuerza’, impone reglas y requerimientos excesivos, en muchos casos imposibles de cumplir. Gestores y directores de colegios te pueden dar muchos ejemplos del calvario que atraviesan.

Sí, estamos frente a una oportunidad de oro que debemos saber aprovechar. Trabajemos una regulación “en su justa medida” y en la institucionalidad. Son condiciones indispensables para la construcción de un sistema educativo de clase mundial.

Un abrazo,
Mariana

Mariana:
En un país con alta informalidad, la sobrerregulación suele ser un espejismo. Recordemos que gran parte de la regulación vigente
no se respeta (instituciones que funcionan en condiciones de hacinamiento, encima de chifas, casinos, etc.). Eso hace que, lamentablemente, justos paguen por pecadores. Por eso creo que para el mercado de servicios educativos, la urgencia está en la difusión de
información que nos permita distinguir el trigo de la paja.

Coincido con tu posición acerca del empoderamiento de gestores y directores de colegios. Pero si nos preguntamos por las capacidades de esos directores, volvemos al punto de partida del diagnóstico. La clave está en la selección. Es necesario poner vallas muy altas para el ingreso a la carrera docente (y, por ende, a la directiva). Para eso hay que atraer talento joven. La ventana de oportunidad está dada. De aquí al bicentenario uno de cada seis docentes habrá superado la
edad de jubilación. Pero, ¿cómo atraerlos a una profesión cuyo salario promedio está en el tercio inferior de la población? Aquí también
hay una responsabilidad de algunos empresarios. A nivel nacional, los profesores de escuelas privadas perciben salarios que son 27% inferiores a los de escuelas públicas. Con esta presión hacia abajo de los salarios difícilmente podremos salir del hoyo.

H.

EL ROL DE LOS MAESTROS

Estimado Hugo:
El sector educación tiene altos índices de ilegalidad e informalidad, reflejo de una problemática del país. La regulación ‘casuística’ intenta ponerle coto y no solo no lo consigue, sino que perjudica al sistema.
Con la mala hierba también mueren nuestros mejores frutos. Pero, vamos encontrando coincidencias: la transparencia de información es una respuesta efectiva para separar el trigo de la paja.

Como dice el Banco Mundial, la calidad de la educación es tan buena como la calidad de sus docentes. Urgen mejoras salariales, sin las cuales, iniciativas para atraer talento joven no serán efectivas. Esto es
necesario mas no suficiente. En los CADE Educación 2016 y 2017 se planteó promover un nuevo enfoque en la carrera de educación, una gran campaña nacional para revalorizar la carrera docente (60% de los peruanos no recomendaría a sus hijos ser maestro), y formar redes de colegios públicos a cargo de directores experimentados.

Para ello, se requiere consenso nacional, voluntad política y trabajo colaborativo (público y privado). Lo que me genera optimismo
es que estoy observando, como nunca antes, a la educación como un tema prioritario en la agenda nacional, un sentido de urgencia compartido, y un mayor acercamiento y confianza entre los sectores público y privado.

Mariana

Querida Mariana:
Creo que un momento en el que, efectivamente, se priorizó a la educación fue ese par de años en los que la inversión educativa
como porcentaje del PBI subió de 3% a 3,7% (2013-2015). Ojalá tengamos un nuevo período de crecimiento de la inversión. Lo necesitamos para poner en niveles competitivos los salarios de nuestros maestros.

Mientras tanto, conviene también aprovechar el momento tan interesante por el que pasa nuestra sociedad global.

Vivimos en un mundo en el que, cada vez más, la tecnología juega un rol central como herramienta para las comunicaciones y almacenamiento de información. Los sistemas educativos tienen mucho por ganar aquí.

Para aprovechar bien esta oportunidad vale la pena tener claridad sobre el rol de la tecnología y el rol del docente. La tecnología puede ser utilizada de manera costo-eficiencia para la transmisión de
información.

Con el maestro, por su lado, vale la pena avanzar hacia un modelo educativo en donde su rol es fundamentalmente formador:de mentalidades críticas, de eternos aprendices, de trabajadores en equipo, de buenos ciudadanos.

Saludos,

Fuente: https://elcomercio.pe/cade/cade-lograr-educacion-inclusiva-noticia-477539

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Cuando la consigna es violar

La violación sexual es una agresión cruel, física y psicológicamente devastadora

Por: Carolina Vásquez Araya

Los números son contundentes, miles de niñas, niños y adolescentes son violados cada día en cualquier escenario: la intimidad de su hogar, el ámbito académico, la parroquia, el camino a la escuela, el contexto de una guerra. No importa dónde, su integridad es amenazada con la sola presencia de un hombre dispuesto a agredirlos en cuanto la oportunidad le sea propicia. Parece una historia de terror pero sucede cada día en cualquier punto del globo, oculto por el miedo y la vergüenza.

¿De dónde surgió la idea de que las niñas son presas a disposición del cazador? ¿Cuándo se reformaron los códigos y las leyes para proteger a los depredadores sexuales para interpretar -con cómplice benevolencia- su costumbre de cometer ese horrendo crimen contra víctimas indefensas como un rasgo de virilidad? La violación es una de las peores formas de violencia contra una niña o una mujer, constituye un acto vil cuyas consecuencias van mucho más allá de la destrucción de la autoestima, la marcan en todos los aspectos de su vida y definen sus relaciones futuras.

En esta especie de holocausto lento contra la niñez también toma parte protagónica el pensamiento patriarcal instalado en innumerables comunidades, el cual permite a los padres dar a sus hijas menores en matrimonio aun en contra de leyes establecidas para evitarlo. No solo las entregan a un adulto en contra de su voluntad, sino que además cobran por ese intercambio transformándolas en simple mercancía, convencidos de que las mujeres están destinadas a servir y no tienen derecho a tomar decisión alguna respecto de su vida y su destino.

Entonces es cuando todo esfuerzo por generar cambios en el imaginario colectivo adquiere una enorme relevancia, es cuando los movimientos feministas adquieren un impulso adicional al enfrentar los prejuicios y la oposición pétrea de un patriarcado destinado a extinguirse por opresivo, violento, discriminatorio e ilegal. Es cuando se toma conciencia de los mensajes sutiles destinados a construir barreras y crear guetos con el único propósito de impedir el empoderamiento de las mujeres en todos los escenarios de la vida pública y privada. Es cuando toca involucrarse de manera directa desvelando los mitos y destruyendo todos esos estereotipos con los cuales hemos sido programados desde la niñez y hemos reproducido con las sucesivas generaciones.

Se han escuchado los testimonios escalofriantes de soldados confesando que “violar era la consigna”. Violar a todas las mujeres, incluidas las niñas más pequeñas, porque la violación es una táctica de guerra para continuar la ruta estratégica del miedo y la destrucción psicológica del supuesto enemigo. Es decir, niñas, adolescentes y mujeres debían ser destruidas en su esencia, en su intimidad, privadas de su libertad para obligarlas a servir en los oficios más denigrantes posible, sin haber cometido delito alguno. Mujeres cuya única falta es encontrarse en el camino de los invasores. Así es hoy y así ha sido a lo largo de la historia.

Entonces, ¿con qué argumentos se pretende invalidar la lucha de las mujeres por sus derechos sexuales, educativos, sociales, laborales y económicos? ¿Cómo es posible negar la desigualdad en la participación política –tribuna esencial para incidir en el rumbo del país- y marginar al sector femenino de todas las decisiones importantes para una nación? ¿Con qué autoridad se esgrime el discurso antifeminista en un país donde el embarazo infantil es un rasgo de identidad? Es hora, entonces, de cambiar la consigna: “las niñas se respetan, no se violan, no se matan”.

*Fuente: https://www.rebelion.org/noticia.php?id=238968

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El papel de la motivación en el aprendizaje

Por: EducaBolivia 

Se entiende por motivación el conjunto de variables intermedias que activan la conducta y/o la orientan en un sentido determinado para la consecución de un objetivo. Se trata de un proceso complejo que condiciona en buena medida la capacidad para aprender de los individuos. Es lo que mueve a la persona en una dirección y con una finalidad determinada; es la disposición al esfuerzo mantenido por conseguir una meta. Constituye, por tanto, un factor que condiciona la capacidad para aprender. Al igual que los intereses, depende en parte de la historia de éxitos y fracasos anteriores de la persona pero también del hecho de que los contenidos que se ofrezcan para el aprendizaje tengan significado lógico y sean funcionales.

En la motivación que un estudiante llegue a tener desempeña un papel fundamental la atención y el refuerzo social que del adulto (docente, padres de familia) reciba. Por eso son importantes las expectativas que los adultos manifiestan hacia el individuo y las oportunidades de éxito que se le ofrezcan.

Además hay que considerar la motivación como una amplia capacidad que precisa enseñar valores superiores como la satisfacción por el trabajo bien hecho, la superación personal, la autonomía y la libertad que da el conocimiento. También, la motivación es una cuestión de procedimientos que implica un trabajo importante, utilizar autoinstrucciones, relacionar contenidos, trabajar en equipo, etc. Y por último, exige conocimiento sobre el riesgo que se corre en caso de fracasar en el intento o por el contrario, y más importante, la satisfacción que supone la obtención del éxito.

Motivaciones: intrínseca y extrínseca

Podemos distinguir dos tipos de motivación: una intrínseca que hace referencia a que la meta que persigue el sujeto es la experiencia del sentimiento de competencia y autodeterminación que produce la realización misma de la tarea y no depende de recompensas externas. Es el caso del niño que aprende la lista de jugadores de un equipo de fútbol porque realmente le llama la atención, le motiva, significa algo para él, y lo hace sin pretender ninguna recompensa, la aprende porque sí. Y la motivación extrínseca que estaría relacionada con la realización de la tarea para conseguir un premio o evitar un castigo. Como cuando un hijo ordena su habitación con el único fin de salir antes con los amigos y no porque realmente es necesario estar en un espacio ordenado porque resulta más cómodo. O como cuando se ofrecen para un mandado para acercarse al quiosco o tienda y comprarse alguna golosina, etc.

Causas de la desmotivación

Las causas en el individuo son muy variadas. Hay que buscar fundamentalmente en la estimulación que recibe o ha recibido la persona en su historia de aprendizaje personal. Podemos encontrar explicación a esta pregunta en factores como la familia como primer agente, pero también en el condicionamiento de un medio social desfavorecido, los fracasos escolares que arrastre. La desmotivación supone la existencia de limitaciones contra las que es muy difícil luchar y vencer tales como las bajas expectativas y atribuciones inadecuadas, falta de hábitos, prejuicios, falta de conocimiento y habilidades y un largo etcétera frente a los que es difícil obtener algún cambio.n.

Por todo lo anterior es importante destacar que la educación no debe limitarse a transmitir conocimientos, sino que debe además ser capaz de transmitir valores y actitudes positivas hacia la actividad escolar. Además debemos apuntar que los sujetos con alta motivación persisten más en la tarea y por tanto es más probable que alcancen sus metas, hacen juicios independientes y se proponen retos sopesando cuidadosamente sus posibilidades de éxito, y el propio éxito alcanzado refuerza su forma adecuada de afrontar las tareas.

¿Qué es estar motivado?

Los docentes saben que la motivación es consecuencia de la historia de aprendizaje. Hay que promover la motivación intrínseca, el proceso es interactivo. Estos autores se preguntan ¿QUÉ ES ESTAR MOTIVADO? Para motivar a un individuo en el estudio, como en cualquier otra actividad, es necesario poner en juego un conjunto de estrategias concretas. Un primer paso en el medio escolar es hacer las clases atractivas a través, por ejemplo, de actividades lúdicas, novedosas, sorprendentes, pero dependiendo del nivel educativo en que nos encontremos, sabemos que las situaciones escolares son con frecuencia arduas y requieren disciplina y esfuerzo. Es sabido que el trabajo escolar requiere esfuerzo, y debemos desterrar que el esfuerzo es sinónimo de aburrimiento; es necesario llegar a la conclusión que vale la pena esforzarse en actividades que realmente merezcan la pena.

Causas de la desmotivación

Las causas en el individuo son muy variadas. Hay que buscar fundamentalmente en la estimulación que recibe o ha recibido la persona en su historia de aprendizaje personal. Podemos encontrar explicación a esta pregunta en factores como la familia como primer agente, pero también en el condicionamiento de un medio social desfavorecido, los fracasos escolares que arrastre. La desmotivación supone la existencia de limitaciones contra las que es muy difícil luchar y vencer tales como las bajas expectativas y atribuciones inadecuadas, falta de hábitos, prejuicios, falta de conocimiento y habilidades y un largo etcétera frente a los que es difícil obtener algún cambio.

La desmotivación está en la base del fracaso escolar y, con frecuencia también, en los problemas de disciplina. Los problemas de motivación en el aula tienen difícil solución.

Por otro lado, no es correcto pensar que la actuación del adulto se base casi exclusivamente en invocar la disciplina o la voluntad como una habilidad que debe ejercitar el alumno con el fin de obtener los objetivos planteados.

¿Cuáles son las fuentes principales de motivación?
Los autores antes mencionados afirman en el mismo artículo que la familia es la primera variable y la más constante. La disposición para el aprendizaje se le inculca a la persona a través de las preguntas que se le hacen, los comentarios, sirviendo de modelo y ejemplo de conducta y actitud.

La familia es la primera variable y la más constante; la disposición para aprender se la enseñamos a nuestros hijos con nuestras preguntas y comentarios, o siendo modelo o ejemplo en nuestra vida cotidiana. En el ámbito familiar podemos llegar a citar tres aspectos que tienen una influencia destacada en la motivación escolar de los hijos: su actitud ante el conocimiento y la escuela, el tipo de relación afectiva que establece con su hijo, y las destrezas y habilidades que despliega para motivarle y ayudarle en el trabajo escolar.

En el ámbito escolar sabemos que mientras que hay estudiantes que realmente animan y ayudan al proceso de enseñanza y aprendizaje, otros, por el contrario dificultan o entorpecen, por lo que debemos reconocer que todo lo que se realiza en la escuela tiene una influencia mutua, existe una interdependencia entre la actuación del profesor y el comportamiento y actitudes que manifiesta el alumnado en general.

Como conclusión de este apartado hay que decir que la motivación la debemos entender como una capacidad más de la personalidad del individuo que es educable y que se puede desarrollar, pero que a su vez, exige una adaptación a muy distintos niveles. Para empezar a motivar a una persona hacia los estudios hay que considerar su historia e ir poco a poco sin pretender grandes avances de inmediato puesto que contamos con limitaciones ya citadas anteriormente. Los cambios precisan tiempo, son lentos. Para conseguirlos hace falta que las ayudas no desaparezcan, sean constantes.

Estrategias concretas para mejorar la motivación

Sobre todo en el ámbito escolar pero de interés para el ámbito familiar. Esperamos que estas estrategias ayuden al lector a tener una idea más clara de mejoras motivacionales:

  • Evitar las críticas negativas ante los intentos de colaboración de los estudiantes.
  • Estructurar la docencia en el aula de forma no excesivamente autoritaria mezclando la directriz del docente con la aceptación de las decisiones de los alumnos.
  • Programar trabajos en grupo o sesiones donde cada alumno pueda colaborar según su nivel.
  • Valorar positivamente los comportamientos de trabajo o de estudio o en su defecto las aproximaciones.
  • El reconocimiento del éxito de un estudiante o de un grupo motiva más que el reconocimiento del fracaso y si aquel es público mejor.
  • Programar los contenidosy enseñarlos de forma que los alumnos puedan comprenderlos y aplicarlos con un nivel medio de dificultad.
  • Cuidar de que los alumnos con un bajo nivel de motivación consigan pequeños éxitos académicos para que aspiren en un futuro próximo hacia metas que exigen esfuerzos superiores.
  • Tener presente que los alumnos con baja motivación, en un principio suelen manifestar cierta resistencia a abandonar su deficiente situación motivacional puesto que temen que el posible cambio pueda aumentar su, ya de por sí, precaria situación.
  • Fomentar el trabajo cooperativo frente al competitivo.
  • Presentar tareas asequibles a las posibilidades de los alumnos.
  • Programa las actividades de la clase de forma que los alumnos puedan frecuentemente tomar decisiones. El docente que da autonomía en el trabajo promueve la motivación de logro y la autoestima, aumentando así la motivación intrínseca.
  • Promover actividades en las que los riesgos de fracaso son moderados.
  • Programar sesiones de diálogo por grupos de manera que los alumnos menos motivados puedan expresar sus opiniones sin miedo a ser rechazados por sus compañeros.
  • Realizar actividadeso trabajos fáciles para los alumnos poco motivados, de manera que pueda valorar sus éxitos y su relativa dedicación.

*Fuente:http: //www.educabolivia.bo/index.php/docente/practica-docente/4744-el-papel-de-la-motivacion-en-el-aprendizaje-2

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Los aprendizajes clave: el “vocho” rojo de la SEP. (2ª. Parte)

Por: Abelardo Carro Nava

En mi pasada entrega, abordé el tema del modelo educativo próximo a entrar en vigor en el Sistema Educativo Mexicano (SME), a partir de una metáfora que se desprendió de la que en su momento nos compartió Manuel Gil Antón, sobre la reforma educativa en México y, en la cual, éste aludió a ese camión (SEM) y al tránsito que ha tenido por más de 50 décadas. Le recomiendo vea el video que se encuentra en el canal de YouTube en el enlace que le comparto en estos momentos (https://www.youtube.com/watch?v=odqJfJ9lOJ4).

Así, decía, ese camión durante este sexenio, concibió un hijo cuyo nombre da entrada al título de estas líneas: el “vocho” rojo; un hijo que para efectos prácticos, no es otra cosa más que los aprendizajes clave que la SEP propuso hace unos meses. Ya di cuenta de ello, repito, en mi pasada entrega.

Pues bien continuando con dicho análisis, en el documento “Aprendizajes clave para la educación integral”, se especifica que éste tiene un enfoque socioconstructivista, el cual considera la interacción social del aprendiz, planteando la necesidad de explorar nuevas formas de lograr el aprendizaje [Ojo, con la idea “explorar” nuevas formas de lograr el aprendizaje], que no siempre se han visto reflejadas en el aula [ojo también con la contradicción que se encuentra en esta aseveración porque como sabemos, cada contenido se desarrolla dependiendo de los estilos de aprendizaje, el contenido, los elementos del contexto, etc. Es decir, no siempre se tienen que ver reflejadas en el aula esas formas de aprendizaje]. Considera al aprendizaje como participación o negociación social, un proceso en el cual los contextos sociales y situacionales son de gran relevancia para producir aprendizajes (SEP: 33).

De esta forma, la SEP plantea la necesidad de trabajar mediante un aprendizaje basado en preguntas, proyectos y problemas, el cual considera los intereses de los alumnos y los fomenta mediante su apropiación e investigación (SEP, 2017), o bien, a través de un aprendizaje colaborativo, cooperativo y los modelos de aula invertida (SEP, 2017), para que el estudiante lleve a cabo parte del proceso de aprendizaje por cuenta propia y fuera del aula.

Sí, todo eso lo considera el enfoque y propuesta que elaboró la SEP; sin embargo, la experiencia – y ellos deberían de saberlo – nos dice que abordar el aprendizaje de esta forma, también tiene ciertos inconvenientes entre los cuales, señalo algunos de ellos: el ritmo de avance es lento con relación al contenido (en este caso del aprendizaje clave) que se considere abordar, esto, por el nivel cognoscitivo de cada educando; son muchos los estudiantes que desean trabajar individualmente porque su intelecto (por los diversos factores que en éste influyen tales como: los familiares, económicos, culturales) es mayor al resto; falta de interés y seriedad por aprender, lo que ocasiona que la participación no sea homogénea (y no tiene porqué serlo, sin embargo como sabemos, en el aula son variables las participaciones de los integrantes de un equipo, por ejemplo); la evaluación bajo este esquema suele causar problemas porque los alumnos la consideran en exceso subjetiva, sobre todo, en grupos de discusión cuando un alumno del mismo equipo participa más que el otro; los padres de familia suelen inconformarse porque no observan un “rápido” avance en los aprendizajes de sus hijos”; en fin, insisto, son varias las desventajas que de este esquema se desprenden, obviamente, las ventajas podemos deducirlas de los mismos.

Ahora bien, si usted analiza con detenimiento la explicación que he realizado hasta el momento, tal parece que esta propuesta no precisamente enfoca su atención en el aprendizaje sino en la didáctica que debe y tiene que desarrollarse para el logro del mismo. Aquí cobra sentido ese “tránsito didáctico” al que aludía en mi anterior entrega, y que más allá de una probable discusión en términos epistemológicos que pudiéramos emprender en estos momentos (por aquello de que el docente es el responsable de dirigir, coordinar, orientar y monitorear los procesos de enseñanza o también, por aquello de que el docente es un mero facilitador del aprendizaje), tendríamos que pensar y repensar cuáles son las condiciones bajo las cuales el docente viene abordando los contenidos en México, los métodos y metodologías que emplea, los enfoques que considera para el abordaje de los temas, en fin, toda esa didáctica que atinadamente Ángel Díaz Barriga continuamente comparte sobre este asunto, pero que comparte en términos de lo que él en 2016 denominó como un modelo “muy idealizado”, sencillamente porque el esquema propuesto por la SEP no pone los pies en la tierra, cito: “en el cuarto informe de gobierno, se reporta que hay cerca de 179 mil escuelas públicas en el país, números más, números menos; y que en estas 179 mil escuelas, lo que encuentras son 638 mil carencias físicas, por ejemplo: falta de pizarrón, falta de agua corriente, problemas en los baños, problemas de señalización… si se sacara un promedio muy grueso se estas cifras, en cada escuela pública mexicana hoy encontraríamos, por lo menos, tres carencias que, evidentemente, dificultarían el desarrollo y aprendizaje de los contenidos planteados” (Recuperado de http://www.blackmagazine.mx/diaz-barriga-para-el-nuevo-modelo-educativo-hay-que-poner-los-pies-en-la-tierra/), además del desarrollo profesional del docente.

¿Cómo se espera que el profesor desarrolle estas estrategias si las realidades de ese México que he planteado condicionan los procesos de enseñanza y de aprendizaje?, ¿cómo se espera que se logren los resultados esperados si la formación inicial de docentes ha estado supeditada a lo que las autoridades determinen desde la DGESPE (ver estudio La Educación Normal en México. Elementos para su análisis)?, ¿cómo se espera que los aprendizajes clave, que son otra cosa más que los aprendizajes esperados, sean desarrollados por los profesores si en cada escuela que existe en México su planta docente la integran profesores que fueron formados con diferentes programas de estudios en las escuelas normales y la capacitación que han recibido no ha sido satisfactoria?, ¿cómo se espera que los aprendizajes calve sean desarrollados si los profesores no han recibido adecuados programas de profesionalización docente en áreas de una supuesta gestión personal del conocimiento? Segundo gran golpe al “vocho rojo”. ¿Se desvieló el motor?

Para concluir con esta serie de ideas, deseo aterrizar una más que me parece pertinente en estos momentos, porque con seguridad con lo expuesto, usted se siente angustiado (a) porque la perspectiva que he presentado hasta el momento, contiene un dejo de pesimismo, producto de esa realidad que estamos viviendo; si ustedes me preguntaran ¿qué podemos hacer entonces si por un lado tenemos una curricula que no acaba de considerar en su estructura todos los problemas que he señalado, y por el otro, a un docente que sufre a diario las tensiones que son producto de atracción y contracción que generan, no uno sino varios “cuerpos” contra él, y que afectan su desempeño docente?

La respuesta, aunque obvia, y tal vez nada innovadora, tienen que ver con ese empoderamiento del docente y del trabajo que realiza a diario en sus centros escolares. La misma experiencia que he tenido en todos estos años, y que me ha llevado a recorrer algunas entidades del país para trabajar algunos cursos, talleres y conferencias con mis apreciados maestros de todos los niveles educativos, me ha dejado claro que, la valoración de su trabajo, el reconocimiento de la labor que realizan, la motivación que pueda generárseles, la humildad y sencillez con la que pueda hablárseles son, entre otras cuestiones, elementos fundamentales para que éstos reconozcan, revaloren y resignifiquen su profesión y la labor que realizan en sus salones y escuelas.

Planteamiento sencillo, pero que está cargado de sentido si consideramos que desde hace algunos años, al maestro se le ha satanizado, se le ha golpeado, se le ha ofendido, se le ha ninguneado.

No, no es una defensa a ultranza esta idea. Sé y tengo claro que en el magisterio hay de todo y todo se comparte y reparte, sin embargo, aludiendo a una idea que hace unos años nos compartía Esteve en su texto “La aventura de ser maestro”, considero que todos debemos ser capaces de generar que el docente, así como lo hacemos con nuestros alumnos, descubra nuevamente el amor por su trabajo, que lo descubra y lo redescubra, que lo viva y reviva intensamente.

Luego, tampoco debemos dejar de lado otra idea que me parece de lo más pertinente, la fortaleza de instituciones capacitadoras, actualizadoras y profesionalizantes (de los maestros) en cada uno de los estados de la República Mexicana. Hay que voltear a ver a los Centros de Actualización del Magisterio, a los Centros de Maestros, a las Escuelas Normales, a la Pedagógica Nacional, en fin, a todas aquellas instituciones que por años han tenido ese contacto con lo que acontece en las escuelas de nivel básico y con las tendencias y corrientes pedagógicas que se vienen abriendo paso en el mundo. Esto, con el propósito de que brinden esa capacitación, actualización y profesionalización “presencial” de los profesores y profesoras de México. Buscar formas y mecanismos que le permitan al magisterio entregar mejores resultados es lo pertinente o, ¿no es eso lo que gritan a los cuatro vientos desde la Calle de República de Argentina?

Una idea más, y con la cual deseo terminar, tiene que ver con la sentida exigencia que desde hace más de 5 años se le viene planteando al gobierno, apertura le llamaremos; la intransigencia y los oídos sordos, nada bueno traen consigo, y créanme, si este país se ha mantenido en calma ante la serie de abusos, crímenes, fechorías de quienes han estado en el poder, ha sido por los maestros. Pero también, si el país ha logrado que la educación no toque fondo por la serie de realidades que les he expuesto hace unos momentos, también ha sido por los maestros.

Su labor está ahí, a veces en silencio, pero es una labor que no podemos despreciar ni denostar, porque si alguien hemos aprendido, ha sido de un maestro.

Nota: tanto la 1ª como la 2ª parte, son un extracto de la conferencia magistral que, gracias a la invitación que la Escuela Normal Superior de México me realizó en días pasados, la presenté el pasado 27 de febrero en las instalaciones de dicha escuela.

Fuente del Artículo:

Los aprendizajes clave: el “vocho” rojo de la SEP. (2ª. Parte)

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La educación puertorriqueña en el laberinto del coloniaje

Por Doris Pizarro Claudio

Desde principios del siglo XX, la educación ha sido uno de los pilares de la colonización material y subjetiva implantada por Estados Unidos después de la invasión de 1898. Si bien la mayor parte de la población puertorriqueña comenzó a disfrutar del acceso a una educación que mejoró sus condiciones materiales de vida, esto- en la intersubjetividad ha representado una forma de mayor explotación y de opresión sostenida por la dependencia, la colonialidad y por una imagen de superioridad de sus colonizadores. Ello, con la complicidad de los sectores colonialistas del patio.

El tema de la Reforma Educativa ha sido uno de los engaños más evidentes y demagógicos de las administraciones estodolibristas y anexionistas para sostener esa colonialidad y el dominio político a través de las políticas sociales. En las últimas tres décadas – hemos enfrentado imposiciones de reformas sin coherencia, sin reconocimiento y participación de la comunidad escolar y de la ciudadanía en general; con una profunda intención de perpetuar la dependencia de exorbitantes cantidades de fondos federales. Simultáneamente, el sistema educativo ha sido un espacio de corrupción y de intereses partidistas de muchas batatas políticas.

Las llamadas reformas educativas han adolecido de debilidades muy serias. No han contado desde sus inicios con la participación de la comunidad escolar (personal docente y no docente, familias, representantes de las comunidades de entorno o de las voces del estudiantado, para quienes tiene las mayores implicaciones). No ha existido consenso o articulación para establecer los contenidos o prioridades de esas reformas.

Como las políticas educativas anteriores, esta que se discute ahora, el P del S 825, carece de coherencia porque ha sido construída para satisfacer los intereses de lucro del mercado y el capital neoliberal; para adelantar agendas político- partidistas hacia la estadidad y para beneficio de sectores de la sociedad civil o intermediarios del capital que velan guiras ante la transformación del estado benefactor. Son muchos los intereses económicos y la ideología conservadora que se han compactado detrás de esta reforma. Los menos beneficiados o serán las familias que dependen de la educación pública, las comunidades agredidas en sus espacios para los llamados proyectos de desarrollo y ensayo de políticas sociales neoliberales y los amplios sectores que enfrentamos el derrumbe del modelo colonial capitalista. Porque la educación sigue como el proyecto vital de país, para el presente y el futuro, que nos permitirá mejores condiciones de vida individual y colectiva.

El interés por las políticas educativas federales y su botín económico es acompañado de una indiferencia y desgano por una filosofía educativa basadas en principios éticos que acerquen la educación a las necesidades apremiantes del pueblo puertorriqueño. Afortunadamente, han existido sectores y organizaciones que han rescatado la filosofía humanista de Eugenio María de Hostos, la educación liberadora de Paulo Freire y la visión decolonial de Fanon, Memmi, entre otros(as) para desarrollar un lente activo para una educación crítica y liberadora que retan el deterioro educativo desde adentro y desde afuera de las aulas.

En esa tensión el país va perdiendo su mejor potencial: la juventud. Cada vez corremos un mayor riesgo de enajenar ese valioso recurso para la reconstrucción del país, golpeado por desastres naturales, por una Junta de Control Fiscal, por el saqueo institucional y premeditado de su patrimonio nacional; así como el paso lento de sus sectores conscientes para desarrollar estrategias concertadas. No obstante, vemos que en diversos sectores comunitarios se avanza en esa dirección, con un espíritu de solidaridad y trabajo increíble. Reine la esperanza con la resistencia y la acción.

Antecedentes a la propuesta actual

La Constitución aprobada para 1952, consignó la educación como un derecho de cada ciudadano o ciudadana, el cual debe ser provisto por el estado. Se proclamó un sistema de educación laico, democrático y gratuito para los grados primarios y secundarios. A la par, la educación se constituyó privilegiadamente en un instrumento para la reproducción de la fuerza de trabajo y el capital, enfocado este en la inversión que se multiplicada en diversas áreas de la economía y que sostenían el proyecto colonial.

Para el 1985, el Gobernador Rafael Hernández Colón encomendó un estudio sobre las condiciones educativas del país el cual demostró que no se estaba se alcanzando los resultados educativos esperados. A partir de ello, en 1990 se aprobó la Reforma Educativa que dio lugar a la Ley 68 y creó el Instituto de Reforma Educativa. Este esfuerzo no duró mucho pues para 1993 se aprobó la Ley 18, la cual institucionalizaba un proyecto piloto que designaba a 14 escuelas como escuelas de la comunidad. A ese momento, el personal escolar, estudiantado y familias alegaron desconocer el concepto de autonomía escolar y escuelas de la comunidad ya que no se les tomó en cuenta a la hora de aprobar la Ley 18, según la investigación de Correa Soto, Irizarry Andújar y García Rivera (1995)1. La imposición de la Ley 18 generó protestas magisteriales de parte de la Federación de Maestros. En poco tiempo, tan cercano como 1999 todas los planteles del sistema público se transformaron en escuelas de la comunidad, prescrita por la Ley Orgánica del Departamento de Educación (Ley 149).

La Ley Orgánica del Departamento de Educación- propuesta para derogarse ahora en el Proyecto 825 de la Cámara de Representantes-, contempla la descentralización y la autonomía educativa. Establece que las escuelas pertenecen a las comunidades, que tomará en cuenta sus problemas y que estas tendrán participación en las decisiones escolares, administrativas, gerenciales, curriculares y presupuestarias, así como ingerencia en la selección y evaluación de sus programas y de su personal. La ley, que en su letra resulta positiva, no ha sido institucionalizada adecuadamente, como se conoce a saciedad.

Algunos atributos para una reforma educativa

La descentralización, autonomía, la participación y la toma de decisiones basadas en una perspectiva de derechos humanos, al igual que la evaluación y rendición de cuentas por las responsabilidades que se asumen son atributos del ejercicio de ciudadanía. La ciudadanía implica la capacidad de transformar las políticas y los entornos mediante la acción social y política de las personas y los grupos. Visualizando la escuela como comunidad, podemos concebir una ciudadanía educativa, que contribuya a orientar y transformar los procesos pedagógicos y el clima escolar. Es difícil concebir la construcción y el ejercicio de una ciudadanía educativa, sin el ejercicio de una verdadera autonomía inclusiva que tome en cuenta a todos los sectores de la comunidad escolar, que le facilite incidir mediante la participación verdadera en los procesos de formulación de sus políticas y estrategias.

A nivel institucional, hay que mirar la imagen que se construyen de las personas, de su cultura y de sus historias, la horizontalidad con que se relacionan los grupos, la distribución del poder, el respeto por sus derechos y por su participación. Todo esto conforman algunos atributos de ciudadanía y constituyen referentes para analizar las políticas. En Puerto Rico, estos criterios han estado ausente de las reformas educativas.

La Ley Orgánica del Departamento de Educación (Ley 149)

La ley 149 dice tener al estudiante como su centro, a la par que describe las funciones de los sujetos educativos, desde el Secretario de Educación, el director o directora, el estudiantado, las familias, la comunidad y sus instituciones de apoyo. Da espacio para que otros sectores comunitarios y académicos interesados en la educación puedan integrarse como colaboradores(as). Establece la figura de los consejos escolares como los organismos llamados a elaborar y decidir la organización, las directrices educativas y el uso de sus recursos con toda la comunidad escolar. Sin embargo, esa función se vio afectada por las imposiciones de los distritos y regiones educativas, las cuales intervenían y se sentían con el poder de alterar las decisiones de las escuelas basándose en criterios muchas veces de costo-beneficio. O sea, que mientras se dejaba el dinero a compañías privadas, a nivel institucional se pretendía hacer menos con menos. En el P de S 825, por más que se diga, esas decisiones se dejaran a los niveles gerenciales de las entidades educativas certificadas.

Así, podía decirse que la ley 149 propiciaba en el papel procesos de construcción de ciudadanía, autonomía y participación según han afirmado diversos sectores. Pero terminó como un deseo, perpetuando las jerarquías y fragmentando el sistema educativo. Permitiendo desigualdades entre los servicios y recursos que se asignaban a las escuelas. Sucedió que la descentralización se utilizó para privatizar y subcontratar servicios, que dejaba una buena tajada económica a compañías privadas de dudosa reputación contratadas para dar servicios con poca o ninguna fiscalización del Departamento de Educación. La educación quedó enajenada de su centro, por lo cual tuvo que recurrir a construir desde su precariedad, diversas opciones focales para enfrentar su deterioro. Entre esas medidas se encuentran las escuelas alternativas, los centros de tutorías para exámenes de escuela superior y otras opciones educativas, algunas de carácter residual.

Han existido opciones dentro de la educación pública que cumplen con un nivel de eficiencia y que toman en cuenta las necesidades del estudiantado y sus familias, como las escuelas Montessori y las especializadas. Estos planteles cuentan con sus propias cartas circulares y presupuestos óptimos. Pero definitivamente no han estado accesibles a la mayoría del estudiantado del sistema público. Se ha justificado que existan diferencias en el presupuesto y en las oportunidades de las escuelas alternativas por las experiencias de vida y las formas de aprendizaje de sus participantes. Pero se trata de derechos universales. Tenemos que incluir la falta de recursos entre los factores para el abandono escolar de amplios sectores estudiantiles, a la par con las condiciones de pobreza en el hogar y en sus comunidades y hacer justicia por ello.

Así las cosas, muchas escuelas en comunidades de pocos recursos carecen de tecnología y otras oportunidades, como sería agilizar el nombramiento de los maestros(as). Estos sectores están en desventajas en relación con los antes mencionados. Son marginados o excluidos. Luego se les estigmatizaba por los resultados de las pruebas estandarizadas y por el Plan de Mejoramiento. Por diversas razones, incluyendo la emigración y otras dificultades de acceso muchas escuelas van perdiendo matrícula, las cierran; y sus estudiantes, en un mayor porcentaje –van quedando fuera de las nuevas ofertas, acordadas a la carrera. Y eventualmente quedan también fuera del mundo del trabajo.

La desigualdad de los servicios educativos entre las escuelas especializadas y las escuelas en barriadas y residenciales pobres; la ausencia de una filosofía educativa y formas de aprendizaje que tomen en cuenta nuestro contexto y que den al traste con el paradigma de la colonialidad y la dependencia son factores críticos a la hora de una reforma. Sin embargo, vemos como esos factores de desigualdad, colonialidad y dependencia, se acentúan en el Proyecto 825, al pretender adelantar una agenda anexionista, federalizando aun más las políticas educativas.

La ciudadanía educativa sobre el tapete.

El concepto de ciudadanía es un referente para el análisis e implantación de las políticas educativas. Se construye el concepto de ciudadanía educativa a partir de la participación de la comunidad escolar en las decisiones sobre la filosofía educativa, la gerencia y administración, el uso del presupuesto, la selección y evaluación del personal escolar, así como en los procesos de rendición de cuentas por las decisiones asumidas. Se requiere además una actitud crítica hacia la gestión del estado, horizontalidad entre los sectores educativos, la valoración de los esfuerzos, al igual que solidaridad y reciprocidad. Se apela a una dimensión ética para posicionarse alrededor de los asuntos educativos y del país. Dónde está todo esto en el P del S 825, si se impone de una manera antidemocrática, discriminatoria , colonizadora y excluyente?

En dicho proyecto, se utiliza el discurso donde se destaca la visión económica- empresarial de la educación y se destaca la promoción de la educación ocupacional y técnica, que el individuo pueda- a partir de salida de la escuela, integrarse al mundo laboral, interés al cual no podemos oponernos. Desde inicios del proyecto se destaca el interés de alinear el proceso educativo puertorriqueño con las estrategias y programas de Estados Unidos. De ahí que se establezcan las Oficinas Regionales Educativas que corresponde al modelo de las Local Educations Agencies (LEA). Es el modelo de las charters. Las oficinas regionales estarán a cargo de un superintendente quien orientará la política en su región correspondiente. Este estará a cargo de designar los directores y otro personal, los programas, y el proceso para establecer las escuelas alianzas como se designa a las charters. Las escuelas alianzas serán escuelas administradas por las Entidades Educativas Certificadas, con quienes se negociará los términos del contrato (Carta Constitutiva). Se establece además el Consejo Escolar ( Exposición de motivos, p.12) y un Programa de voluntarios que apoyará los esfuerzos de las escuelas. El proyecto establece un per capita por estudiante, que se pasará a la agencia privada que administre la escuela. Se menciona una mayor atención a programas y servicios para el estudiantado de diversidad funcional. Es encomiable que se considere, pero la historia de discrimen e insensibilidad ante los problemas sociales, como se ha visto con el Huracán María, me impide confiar en que lo harán. Dentro de la demagogia que caracteriza la propuesta legislativa, se incluyen también la libre selección de escuelas y el programa de vales educativos(p.15), declarado insconstitucional hace unos años por el Tribunal Supremo.

Vemos que la autonomía educativa, un factor clave de la reforma, que le han negado históricamente a las escuelas- se otorga en bandeja de plata a las Entidades Educativas Certificadas, entiéndase las instituciones que asumirán la responsabilidad de las escuelas alianzas, o las charters. El P del S 825 toma el concepto de la Carta Constitutiva para convertirlo en un contrato de privatización. Igual toma el mecanismo de los consejos escolares, para proponerlo como una instancia de participación cuando el verdadero poder lo tienen las agencias que administrarán las escuelas y que recibirán un per capita por estudiante. Se impone con ello una visión mercantilista, empresarial donde el presupuesto público, se transfiere al sector privado, como es el caso de las alianzas público privadas (app). Igual se desarticulan las organizaciones sindicales, eliminando sus conquistas y derechos laborales.

En resumen, esta ley representa mayor federalización de la educación y un mayor riego a la fiscalización dado el pretendido achicamiento del estado. Y si faltara algo, no ha tomado en cuenta las críticas y resultados de muchas de escuelas charters en Estados Unidos, algo que merece atención de todos y todas en un espacio más amplio. Alerta con este proyecto que destruye el sistema de educación pública y le convierte en un negocio!

1La escuela de la comunidad en Puerto Rico. El efecto que tiene la implantación de la Ley 18 sobre la pr’actica del trabajo social escolaren cinco de las trece escuelas intermedias y superiores que funcionaban bajo esta ley a abril de 1995. Universidad de Puerto Rico, Escuela Graduada de Trabajo Social Beatriz Lassalle.

Fuente del Artículo:

http://www.claridadpuertorico.com/content.html?news=372AFD3FD78DC4FEDE682B29FF3D9C7F

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