Por:univision.com/04-08-2017
La AMPR, que representa a más de 40,000 maestros puertorriqueños, se unirá en capacidad de estado a la American Federation of Teachers para tratar de sobrellevar los cortes y duras condiciones que ha sufrido la educación pública en la isla.
El sindicato nacional de maestros de Estados Unidos, American Federation of Teachers (AFT), votó este jueves a favor de incorporar a la Asociación de Maestros de Puerto Rico (AMPR) a su organización, en un intento por mejorar las condiciones de la educación pública en la isla.
Puerto Rico enfrenta una deuda de 70,000 millones de dólares que ha devastado la economía y la educación pública. Desde mayo, la AFT ha ayudado a la AMPR con recursos, consejería legal y la planificación de reuniones con miembros del Congreso en Washington para buscar algún alivio económico para la isla, y en particular, para los profesores.
Actualmente, casi 46% de la población de Puerto Rico vive en la pobreza, y para los niños, esta tasa es de 58%, casi tres veces más que la tasa de pobreza para los niños en el resto de Estados Unidos, según datos del Buró del Censo.
Además, la media de ingresos es tan solo 19,000 dólares al año en la isla, comparado con unos 53,000 en el continente, y los salarios de los profesores no han aumentado en nueve años, a pesar de que el costo de vida sí lo ha hecho.
La incertidumbre para estos maestros viene de muchos frentes. Sus pensiones están en riesgo y hasta 184 escuelas públicas cerrarán este año para ahorrar costos. Según estimados de la AFT, esto desplazaría a más de 27,000 estudiantes, desde kinder hasta duodécimo grado, y dejaría sin trabajo a más de 2,000 personas. El sistema público de universidades también se enfrenta a cortes de presupuesto de hasta 50%.
“Por años nos han dejado atrás mientras que otros profesionales han visto mejoras en sus condiciones de trabajo, en sus salarios y beneficios, mientras a nosotros nos niegan seguridad social”, dijo la presidenta de AMPR, Aida Díaz, en un comunicado
La presidenta de la AFT, Randi Weingarten, afirmó que como organización se interesan por los ataques contra profesores en cualquier parte del país, sobre todo en temas de justicia social y económica contra medidas de austeridad y privatización.
«La gente de Puerto Rico no causó esta crisis», aseguró Weingarten, «pero fueron forzados a llevar la mayoría de la carga por las acciones de inversionistas y negocios irresponsables de los gobiernos».
Díaz comentó que, al ser parte de AFT, los maestros boricuas podrían «trabajar mano a mano para mejorar nuestras condiciones y reclamar lo que se nos ha negado. Al final, el sistema de educación solo mejorará cuando a los profesores nos traten como los profesionales que somos”.