Page 10 of 40
1 8 9 10 11 12 40

África oriental y central, la educación bajo ataque: 1,9 millones de niños que se ven obligados a abandonar la escuela

Redacción: Tyn Panamá

Son 9.272 las escuelas cerradas por la creciente inseguridad en 8 Países, tres veces al año 2017. Dice que la última preocupante informe de UNICEF, «la Educación en situación de riesgo en África occidental y central». Más de 1,9 millones de niños han sido forzados a dejar la escuela en África occidental y central, debido a que el aumento de los ataques y las amenazas de violencia en contra de la educación en toda la región.

Déficit de los fondos de 72%. los niños que viven en zonas de conflicto en África occidental y central representaron el 1 niño de 4 en todo el mundo en necesidad de asistencia humanitaria, incluida la educación y otros servicios que son críticos para el aprendizaje. Sin embargo, hasta el 12 de agosto hubo un déficit de fondos por valor de 72% en el fin de adelantar programas de apoyo a estos niños.

Triplicado en tres años, el cierre de las escuelas. hasta junio De 2019, 9.272 las escuelas han sido cerradas en Burkina Faso, Camerún, Chad, República centroafricana, la República Democrática del Congo, Malí, Níger y Nigeria, debido a la inseguridad. – el triple de la cifra registrada a finales de 2017. En Camerún, más de 4.400 son las escuelas se cerraron con fuerza, más de dos mil en Burkina Faso, más de 900 en Malí. Los cuatro Países afectados por la crisis en la cuenca del Chad – Camerún, Chad, Níger y Nigeria, que se mantuvo aproximadamente en el mismo alto nivel, que van desde 981 1.054, entre el final de 2017 y junio de 2019.

métodos de enseñanza nuevos y flexibles. Con más de 40 millones de niños de entre 6 y 14 años de edad pierden su derecho a la educación en África occidental y central, es esencial que los gobiernos y sus socios están trabajando para diversificar las opciones disponibles para una educación de calidad», dijo Marie-Pierre Poirier, Director regional de UNICEF para África occidental y central. «Modelos de enfoques apropiados culturalmente, innovador, integrador y flexible, que cumplen con los estándares de calidad de aprendizaje, puede ayudar a llegar a muchos niños, especialmente en situaciones de conflicto» .

¿Qué estás haciendo con UNICEF. Trabajar con las autoridades y las comunidades educativas para sostener las oportunidades para el aprendizaje de las alternativas, incluyendo los centros de aprendizaje, la comunidad, los planes de estudio escolares, radio, tecnologías para la enseñanza y el aprendizaje y las iniciativas de aprendizaje en las comunidades religiosas. UNICEF también proporciona herramientas para los profesores que trabajan en lugares peligrosos, psicosociales y de apoyo y asistencia para los niños en edad escolar que llevan las cicatrices emocionales de la violencia.

Las directrices de la Relación. 
– Los Estados están obligados a proteger la educación, el apoyo y la aplicación de la Declaración sobre seguridad en las escuelas.
– la enseñanza y el aprendizaje debe estar orientado a la construcción de la paz y en apoyo de la educación de las niñas.
– Todos los niños, incluidos los niños refugiados, migrantes y personas desplazadas, que debe ser capaz de continuar aprendiendo.
– los padres y la comunidad deben ser socios esenciales para garantizar que los niños, especialmente las niñas, tengan acceso a una educación de calidad.
– los gobiernos donantes deben participar en la financiación multianual y flexible para el apoyo a la educación en situaciones de emergencia y crear vínculos con la planificación en la educación en el largo plazo.

«La República va a luchar siempre en defensa de la libertad de información, a sus lectores y a todos aquellos que tienen en el corazón los principios de la democracia y de la convivencia civil»

Fuente: http://www.tynpanama.com/opinion/Africa-oriental-y-central-la-educacion-bajo-ataque-19-millones-de-ninos-que-se-ven-obligados-a-abandonar-la-escuela-h5456.html

 

Comparte este contenido:

Myanmar: Ciudadanos de ninguna parte

Asia/Myanmar/22 Agosto 2019/El país

Desde inicio del éxodo de los rohingyas, su situación como refugiados sigue siendo preocupante

Jannatul Firdous, de cinco años, está sumida en sus pensamientos. ¿Cómo describir el significado de su nombre? Jannatul Firdous significa cielo –el mejor cielo– un significado profundo, la niña lo sabe y quiere hacerlo bien. “El cielo es un lugar donde los niños pueden jugar”, empieza la pequeña mientras su mamá Salima, de 26 años, la mira con una dulce sonrisa. “Hay muchas flores”, continúa. “Hay un gran estanque de agua. El cielo es un lugar feliz”.

Jannah a menudo se traduce en el Corán como “cielo”. Jannatul Firdous es el nivel más alto de cielo del Islam.

El campamento 13 en Myanmar, donde ahora vive Jannatul, no es el cielo y dista mucho de serlo. Los niños juegan en la tierra, levantando un polvo que flota en el aire caliente de la tarde. Está muy lejos del exuberante y verde campo que rodeaba la casa de la que huyó en Myanmar; tal vez sea de ahí de donde provenga su idea del cielo. Aquí no hay estanques y Jannatul debe cargar agua en contenedores pesados desde una toma de agua relativamente cercana, por una escalera empinada hasta el refugio improvisado de su familia.

Jannatul vive en el campo de refugiados más grande y densamente poblado del mundo, en Cox’s Bazar, Bangladesh. De su casi un millón de residentes, más de la mitad son niños. La mayoría de las personas aquí son rohingya, un grupo perseguido, predominantemente musulmán y una minoría de Myanmar, que ha sufrido discriminación en su país durante varias décadas, incluyendo la denegación de la ciudadanía.

El campamento 13 es uno de los 33 subconjuntos dentro del megacampamento. Es un espacio superpoblado, hogar de 41.000 personas, ciudadanos de ninguna parte, la antítesis del lugar feliz con el que sueña Jannatul.

Refugiados de segunda

Jannatul y su madre van de un lado a otro por el campamento de refugiados. El 55% de sus residentes son menores.
Jannatul y su madre van de un lado a otro por el campamento de refugiados. El 55% de sus residentes son menores. JON WARREN WORLD VISION

Las niñas y las mujeres llegaron a Bangladesh con cicatrices físicas y emocionales que probablemente nunca terminarán de curarse. Un informe de la Alta Comisión para los Refugiados de Naciones Unidas en 2018 titulado Cultura, contexto y salud mental de los refugiados rohingya detalla cómo las mujeres sufrieron abusos, fueron violadas y obligadas a prostituirse en Myanmar.

Cuando estalló la violencia en su aldea, en agosto de 2017, la familia de Salima se separó: «Jannatul acabó conmigo, pero no sabía qué había pasado con mi esposo y mis otros hijos», dice su madre. «Más tarde, los vi muertos». Mohamed, de 30 años, recibió un disparo; su hijo, Hafej, de 2 años, y su hija, Kalima, de 1 año, también fueron asesinados. Su expresión se nubla de dolor mientras lo cuenta. En un momento del relato Salima extiende su teléfono para mostrar una foto de Kalima y Hafej, sonriendo junto a su hermana mayor, Jannatul.

¿Por qué los rohingya no son refugiados comunes?

En 1982, Myanmar aprobó una ley que excluía a muchas etnias de la condición de raza nacional oficial. Como resultado, a los rohingya se les negó la ciudadanía, lo que les convirtió en uno de los grupos de apátridas más grande del mundo, y se les sometió a restricciones en el matrimonio, el tamaño de la familia, el empleo, la educación, la elección religiosa y la libertad de movimiento. Por poner un ejemplo, en algunas ciudades del norte de Myanmar, a los rohingya se les permite tener solo dos hijos.

Ante esta situación miles de personas se vieron obligadas a huir a Bangladesh, donde están más seguros y tienen más libertad pero se enfrentan a restricciones por parte de un país que no es signatario de la Convención de las Naciones Unidas sobre los Refugiados de 1951 y, por lo tanto, no les reconoce como refugiados. Sin la condición de refugiado legal, los rohingya en Bangladés no pueden trabajar, vivir fuera de los campamentos o emigrar a otros países. Los niños no pueden ir a la escuela; y las mujeres y los menores son objeto de abuso, como la trata de personas, el trabajo infantil, el matrimonio infantil, la violencia de género y otras formas de explotación.

Espacios Seguros para Niños

Jannatul llega a uno de los espacios seguros para niños, lo más parecido a un colegio que pueden tener.
Jannatul llega a uno de los espacios seguros para niños, lo más parecido a un colegio que pueden tener.JON WARREN WORLD VISION

Situado en el corazón del campamento, el Espacio Seguro para Niños al que acude Jannatul es un centro alegre, a menudo ruidoso, pintado de un color naranja chillón. Fueron los propios menores quienes decidieron llamar a este espacio –Surjoful– en honor de algo simbólico que dejaron en Myanmar: los girasoles. Según sus profesores, Jannatul sencillamente brilla en este espacio cuando tiene la oportunidad de cantar, bailar o recitar pequeños poemas.

La pequeña es una de las favoritas del personal, nos confiesa su maestra, Farjana Faraz Tumpa, de 20 años. Algunos niños prefieren quedarse con sus madres, aún son muy pequeños y necesitan sentirse acompañados por un familiar, aunque sea haciendo cola para recibir la ayuda diaria. Pero Jannatul no se pierde ni un día de “cole”, porque estos centros son lo más parecido a un colegio que estos menores han visto en muchos meses.

El 55% de los refugiados rohingya son menores. Niños y niñas que se enfrentan a diario a la violación de sus derechos; violencia física y sexual, explotación, matrimonio infantil, problemas psicosociales y de salud mental, trata y secuestro de niños, trabajo infantil y un largo etcétera. Niños de segunda, niños de ninguna parte e invisibles para el mundo.

Fuente e imagen: https://elpais.com/elpais/2019/08/15/3500_millones/1565888791_003001.html

Comparte este contenido:

Deshumanización y guerras en el mundo

Por: Víctor Arrogante

Los conflictos armados producen desigualdad y millones de personas desplazadas y refugiadas. La concienciación de lo que ocurre en el mundo empieza con la información, pero es tanta y tan poco rigurosa que no se termina de entender la dimensión de la tragedia, salvo por las cifras escandalosas. Escuchamos hablar en los medios de la guerra de Siria y Afganistán, Irak, Yemen, República Democrática del Congo, Libia o Somalia, pero existen más guerra en el mundo, sobre las que va disminuyendo la información, hasta su desaparición total.

En la actualidad, se están dando los niveles más altos de desplazamiento registrados. Según datos de ACNUR; 70,8 millones de personas, se han visto obligados a abandonar su hogar. Entre ellos 25.9 millones de refugiados de los que más de la mitad son menores de 18 años. También hay millones de apátridas a quienes se les niega la nacionalidad y el acceso a derechos básicos como la educación, la atención médica, el empleo y la libertad de circulación. En el mundo, casi una persona es desplazada por la fuerza cada dos segundos, como resultado de un conflicto o persecución.

La guerra en Siria es una de las más largas y cruentas de la región. Por el tamaño y la población del país, ha generado una de las crisis de refugiados más graves desde la Segunda Guerra Mundial. Todo empezó en el año 2011, cuando miles de personas pidieron en las calles la dimisión del presidente Asad y que se realizaran diversas reformas políticas. Los opositores tomaron fuerza y se creó el Ejército Sirio Libre. Con el paso del tiempo entraron en escena los partidarios del yihadismo y el Estado Islámico. En el año 2014 se formó una coalición internacional liderada por Estados Unidos que comenzó a bombardear al Estado Islámico. El país se dividió en zonas, unas controladas por el régimen de Asad y otras por los rebeldes.

Tras ocho años de guerra, la ONU está tratando de crear un comité para redactar una nueva constitución, el primer gran paso para lograr la paz definitiva. En 2019, ocho años después del inicio de los combates, 6,1 millones de personas están desplazadas de sus hogares y 5,6 millones son refugiados en otros países de la región. La cifra de refugiados sirios aumenta cada día, en la mayor crisis de refugiados en el ámbito mundial de los últimos 25 años. Aunque países como Turquía, Líbano y Jordania han abierto sus puertas a las personas que huyen de los bombardeos en Siria, la ayuda humanitaria escasea tras tantos años de conflicto.

Azotado por la guerra y la violencia política desde los años 70 del siglo XX, Afganistán ha sido uno de los grandes focos de inestabilidad y desplazamientos forzados en Asia Central. Tras la salida de las tropas soviéticas en 1989, comenzó una nueva etapa de violencia interna que culminó con la intervención de la OTAN en 2001. En octubre de 2017 se cumplieron 16 años desde que Estados Unidos bombardeara por primera vez Afganistán tras los atentados del 11 de septiembre. En este tiempo se han sucedido tres presidentes: George W. Bush, que declaró la guerra; Barack Obama, que la dio por terminada sin éxito en el año 2014; y Donald Trump, que ha visto cómo se han intensificado las acciones terroristas en los últimos meses. Para presionar en las negociaciones de paz, los Talibanes impiden a las ONG hacer su trabajo, cerrando clínicas y centros de ayuda.

El conflicto en Irak entre grupos armados y fuerzas gubernamentales, en los últimos años ha generado que en 2018 hubiera 1,8 millones de desplazados internos en el país, de los que el 53% son niños. A finales de 2017, la ofensiva gubernamental para recuperar el control de la ciudad de Mosul llevó al conflicto a su punto álgido. Aunque el país no se encuentra totalmente pacificado y muchos desplazados siguen sin poder regresar a sus casas, Irak fue el país con mayor número de retornados en 2018, con 945.000. Antes, el 20 de marzo de 2003, se produjo la llamada guerra de Irak, segunda guerra del Golfo, o conocida como Operación Libertad Duradera. El Estado Islámico ya no tiene el control efectivo de territorios, pero se mantiene fuerte en zonas desérticas o montañosas, desde donde lanza ataques estratégicos contra líderes tribales y políticos, tratando de aumentar la tensión entre las comunidades árabes y kurdas.

Se da la circunstancia de que una parte importante de la sociedad española se manifestó en contra del apoyo a la intervención en Irak, mostrado por el entonces presidente del gobierno José María Aznar. Este hecho y los atentados del 11-M, entre otros, motivaron un cambio de gobierno en el que el PSOE obtuvo mayoría tras las elecciones generales el 14 de marzo de 2004. Una de las primeras medidas del nuevo Gobierno, fue ordenar la retirada de España de Irak, restando apoyo internacional a la ocupación. La coalición comandada por Bush, no encontró ninguna de las armas de destrucción masiva que fue el engaño para invadir Irak. (Ver Guerra de Irak, participación de España y armas de destrucción masiva).

Yemen, con más de cuatro años de guerra, se ha convertido en el escenario de una de las peores crisis humanitarias del planeta. El alto el fuego en Hodeidah en 2018 disminuyó significativamente la cifra de muertes de civiles, pero no así en otras zonas del país. La extensión del conflicto, el colapso de la economía, la inseguridad alimentaria y el derrumbamiento de los servicios públicos básicos, han generado que el 80% de la población necesite ayuda humanitaria para sobrevivir. La ONU alerta de que la hambruna en Yemen, podría ser la peor de los últimos 100 años en el mundo. El 53% de la población no tiene nada que comer y más de un millón y medio de niños sufren desnutrición aguda. La guerra se ha cebado con los más débiles, en uno de los países más pobres del mundo.

Yemen sufrió un golpe de Estado en 2014, y la guerra se ha convertido en un conflicto que enfrenta a las diferentes entidades que quieren formar el gobierno. En este caso también ha intervenido el Estado Islámico y Al-Qaeda. El problema se agravó cuando una coalición de estados árabes dirigida por Arabia Saudí comenzó a bombardear el país en el año 2015. Tras cinco años de guerra, servicios básicos como la Sanidad o la Educación prácticamente ya no existen. Además, según la ONU, hay más de tres millones de desplazados y el 80% de la población necesita ayuda. Los más pequeños, como siempre, se llevan la peor parte. Unicef ha calificado el país como «un infierno en la tierra» para los niños, donde miles de ellos se están convirtiendo en niños soldado.

Si hay una guerra que no termina nunca es la de la República Democrática del Congo. Comenzó en el año 1996 y todavía perdura, produciendo personas refugiadas, hambre y muerte. La tensión aumentó gravemente a raíz de la negativa del presidente Kabila a dejar el poder después de haber sucedido a su padre en el año 2001. La guerra ha arrasado los campos de cultivo, han aumentado los precios y miles de personas se han visto obligadas a dejar sus casas. En julio de 2019, la OMS ha calificado como emergencia internacional un nuevo brote de ébola. Esto se une a un brote de sarampión con más de 115.000 afectados. Guerra interminable, epidemias, campamentos de refugiados superpoblados e insalubres, donde la situación es desesperada.

Otro conflicto vivo es el de Libia, que se encuentra a un paso de la guerra civil y amenaza a toda la región, sin signos de una paz en un futuro cercano. El panorama muestra una probable fragmentación del país. Durante 2019 ha ido fortaleciéndose el Ejército Nacional de Libia, una facción bajo el mando de Khalifa Haftar, opositor al gobierno reconocido internacionalmente, que cada vez cuenta con menos territorio bajo su control. El ENL ha ampliado su presencia e influencia en el sur de Libia desde mediados de enero. Ha firmado la paz con grupos armados tuareg y se ha enfrentado con otros, para mantener el control de campos petrolíferos.

Somalia, considerado como ejemplo paradigmático de estado fallido, lleva en guerra interna desde los años 90 del siglo pasado. La mayor parte del país está fuera de control del Gobierno, que en los últimos años ha logrado recuperar su influencia en el sur del país tras una ofensiva apoyada por la Unión Africana. A la violencia armada hay que sumar los estragos del cambio climático. Más de 2 millones de personas se han convertido en desplazados a causa de la sequía, las inundaciones y el propio conflicto. Esto ha provocado que la población desplazada se duplique hasta los 2,6 millones.

En la medida que EEUU deja de liderar el orden internacional, más países tratan de reforzar su influencia, mediante la intromisión en conflictos de otros Estados. Desde el inicio del siglo XXI las guerras se han multiplicado principalmente en África y Oriente Medio, conflictos que provocan un mayor número de desplazamientos forzados y víctimas en pleno 2019; conflictos interminables que tienen consecuencias muy graves sobre los países y especialmente sobre, la población civil, que es siempre la principal damnificada y las mujeres son las principales víctimas de los conflictos armados.

Más de 24.000 niños fueron asesinados, heridos, mutilados, reclutados a la fuerza y secuestrados, o sufrieron abusos sexuales y otras violaciones de sus derechos humanos durante el año 2018, según el último Informe Anual del Secretario General sobre Niños y Conflictos Armados. De esa cifra, más de la mitad corresponde a quienes perdieron la vida o quienes resultaron con graves heridas, como la pérdida de algún miembro de su cuerpo, principalmente por incidentes de fuego cruzado, restos de explosivos de guerra, minas terrestres y otras acciones de combate perpetradas tanto por grupos no estatales, como actores estatales y fuerzas multinacionales.

La paz es el estado ideal de armonía, libertad, seguridad en un mundo democrático. Podemos construir un mundo en el que impere la paz, la justicia y la solidaridad, trabajando de manera colectiva, enriqueciéndonos con las diferencias culturales y aprendiendo cada día. Somos responsables de crear un mundo mejor.

Fuente: https://www.rebelion.org/noticia.php?id=259296

Comparte este contenido:

El dalái lama defiende el derecho esencial de los hijos de refugiados

Asia/India/11 Julio 2019/Fuente: Sputnik news

Los hijos de los refugiados deben tener la posibilidad de estudiar, señaló el dalái lama, líder espiritual del budismo tibetano, en la conferencia internacional ‘La educación humana en el tercer milenio’.

«En la Tierra hoy día viven 7.000 millones de personas, es un mundo global de dependencias mutuas, uno de sus problemas son los refugiados que llegan a Europa y otras regiones. Si les cierran el camino será un acto inmoral, es necesario darles techo y comida, pero lo esencial estriba en garantizarles la asistencia médica y los estudios para sus hijos», dijo.

También indicó que es importante inculcar a la gente joven la idea de que después de recibir la instrucción deben regresar a su patria para reconstruirla.

La conferencia ‘La educación humana en el tercer milenio’ se celebró el 8 de julio en Dharamsala, India, donde se encuentra la residencia del dalái lama.

Es la primera etapa de un ambicioso proyecto del mismo nombre calculado para tres años y apoyado por este líder religioso.

Como su punto culminante se planea convocar en 2021 un foro con participación de centenares de expertos de diversos países y aprobar la Declaración de la Educación Humana en el Tercer Milenio, así como elaborar las respectivas recomendaciones para los pedagogos.

En la conferencia tomaron parte unos 20 destacados especialistas en materia de enseñanza procedentes de Rusia, India, Bangladés, Alemania, el Reino Unido, Finlandia, EEUU, Brasil, México y Australia.

Ellos dijeron compartir la opinión del dalái lama de que es necesario cambiar el enfoque materialista de la educación, dominante hoy día, e inculcar a los niños desde la más tierna edad «la higiene de las emociones», la compasión y el altruismo.

Fuente: https://mundo.sputniknews.com/sociedad/201907091087944247-dalai-lama-defiende-derechos-hijos-refugiados/

Comparte este contenido:

Escuelas refugio. En el mundo hay 35,4 millones de niños refugiados y su salvación está en la educación, pero las escuelas han sufrido más de 14.000 ataques

Redacción: Hispanidad

Son más de la mitad del total de población refugiada (70,8 millones de personas) y representan el colectivo más vulnerable.

El pasado 20 de junio se celebró el Día Mundial de las Personas Refugiadas, que ascienden a 70,8 millones en el mundo. Dentro de este colectivo, 35,4 millones son niños refugiados y para estos, de forma mucho más relevante que para el resto de menores que no han tenido que dejar su tierra ni su hogar, la educación es su futuro. El problema es que se han registrado más de 14.000 ataques a las escuelas en 34 países entre los años 2013 y 2017.

Incluso en contextos tan difíciles como los que supone refugiarse en otro país a causa de la guerra o la violencia, para los niños el hecho de ir al cole es una necesidad básica. La escuela es un lugar seguro, necesario, que ofrece protección y educación, que acoge y permite aprender, jugar, encontrar nuevos amigos y construir nuevos espacios seguros de paz y convivencia. Pero dado que también son objeto de ataques, la organización sin ánimo de lucro Entreculturas ha lanzado la campaña ‘Escuela Refugio’, con el fin de reivindicar que las escuelas sean espacios de paz y libres de violencia, para que se garantice el derecho a la educación en situaciones de conflicto y refugio.

La campaña ‘Escuela Refugio’ reivindica que las escuelas sean espacios de paz y libres de violencia, para que se garantice el derecho a la educación en situaciones de conflicto y refugio

“Si venís, los amigos seremos nosotros”; “Quiero contarte que me gusta mi colegio, aprendo mucho y puedo jugar con mis amigas” o “La escuela para mí es un lugar bonito” son algunos de los mensajes que niños refugiados de la escuela primaria del campo de refugiados de Kinama (Burundi) y alumnos del colegio Nuestra Señora de la Paloma de Madrid han escrito y dibujado sobre cómo les gustaría que fueran las escuelas del mundo. Esta ha sido una de las propuestas de la campaña ‘Escuela Refugio’.

Burundi y República Democrática del Congo son dos de los 34 países que sufren ataques a la educación. Sanganyi Namangala Tamy, refugiada congoleña en el campo de refugiados de Kinama (Burundi) y vicepresidenta del Comité de Refugiados, ha señalado que “hay menos lugares para estudiar durante la guerra”. “El 10 de octubre de 2008, en mi casa en Rutshuru, en el norte del Kivu (República Democrática del Congo), mataron a mi marido, a dos de mis ocho hijos y me violaron. Fui secuestrada por rebeldes que me llevaron al bosque donde pasé un mes sirviendo como ama de casa, sufrí violencia sexual y física. En tiempos de guerra todo es posible. El derecho de los niños a la educación se ve vulnerado, porque donde hay conflictos, las escuelas son tomadas por los atacantes como lugares de guerra, para almacenar sus armas o como bases militares; las puertas y escritorios son usados como calefacción; y los niños son reclutados como luchadores. La juventud es el futuro del mañana, pero sin una educación básica, es difícil tener un futuro”, ha explicado.

La juventud es el futuro del mañana, pero sin una educación básica, es difícil tener un futuro, destaca la refugiada congoleña Sanganyi Namangala Tamy

En el campo de personas refugiadas de Kinama (Burundi), Sanganyi colabora con el Servicio Jesuita a Refugiados (JRS) y con Entreculturas para sensibilizar a los jóvenes sobre la importancia de la educación, especialmente la de las niñas. François Xavier Nsababandi, director de Proyectos de Educación y Medios de Vida de Entreculturas y del SJR en Burundi ha afirmado que “el JRS interviene en cinco escuelas de campos de refugiados, que deben estar a salvo de los ataques. En países que viven guerras, vemos que las escuelas son destruidas, incluso los estudiantes son asesinados. Por todo ello, trabajamos en zonas de conflicto para acompañar, proteger y defender a los refugiados para garantizar su derecho a la educación. Las escuelas nunca deben ser objeto de ataque, sino lugares de paz, libres de violencia y un refugio seguro”.

Los niños y jóvenes que son víctimas de conflictos internacionales e internos no solo están aumentando, también son cada vez más prolongados y afectan a más personas. Desde hace 10 años, el número de desplazados forzosos no ha parado de crecer, hasta alcanzar los actuales 70’8 millones. Además, uno de cada cuatro niños sin escolarizar vive en un contexto afectado por crisis.

Entre los más de 14.000 ataques a la educación en 34 países, en al menos 18, estos se han dirigido contra niñas y mujeres. Y es que el camino a la escuela también supone un grave peligro para niñas y jóvenes, pues pueden ser sorprendidas, secuestradas y atacadas sexualmente. “En Entreculturas, con programas de cooperación al desarrollo y de ayuda humanitaria, trabajamos para proteger las escuelas y que estas estén libres de violencia. Lo hacemos en muchos países del mundo, como Sudán del Sur, República Democrática del Congo, República Centroafricana, Burundi, Venezuela y Colombia”, ha comentado Pablo Funes, coordinador de Cooperación de Entreculturas. Entre los testimonios que reflejan que la educación salva vidas, ha referido el de la refugiada congoleña Sanganyi, que conoce de primera mano la importancia de que las escuelas sean refugio.

Por su parte, Irene Ortega, coordinadora de Ciudadanía de Entreculturas, ha señalado que la campaña ‘Escuela Refugio’ lanza una propuesta con dos palabras: ‘incide’ y ‘expresa’. “Para incidir, hacemos una serie de recomendaciones al Gobierno, entre ellas, que alinee sus políticas exteriores, de cooperación y ayuda humanitaria con la Declaración sobre Escuelas Seguras y las Directrices para su implementación, así como que diseñe, apoye e implemente políticas y programas encaminados a garantizar las escuelas como espacios seguros y de protección en contextos de emergencia”, ha explicado. Y para ello, “es imprescindible destinar el 0,7% de la Renta Nacional a Ayuda al Desarrollo y de esa cifra, un 10% a la Acción Humanitaria, de la que un 4% debe ser para educación en emergencias”. La elección de la palabra ‘expresa’ se debe a que “no solo las personas con responsabilidades políticas pueden hacer algo, de hecho, lo harán en la medida en que la ciudadanía se lo demande, por lo que esta ha de estar unida y expresarse como una verdadera sociedad global dada la interdependencia que hay entre las personas”.

La escuela es un día sin violencia, una oportunidad para elegir un futuro, un sueño por cumplir, dignidad y respeto, acogida y protección para millones de niños.

La escuela no es solo una escuela. En concreto, representa un día sin violencia, una oportunidad para elegir un futuro, un sueño por cumplir, dignidad y respeto, acogida y protección para millones de niños, especialmente los que viven en situación de refugio o de desplazamiento forzoso. Por todo esto, el mundo no se puede quedar sin hacer nada.

Fuente: https://www.hispanidad.com/publirreportaje/en-el-mundo-hay-35-4-millones-de-ninos-refugiados-y-la-educacion-es-su-futuro-pero-las-escuelas-han-sufrido-mas-de-14-000-ataques_12011089_102.html

Comparte este contenido:

Niños rohingya: cuando el islam radical se convierte en la única educación

Asia/Myammar/06 Junio 2019/Fuente: France24

¿Alguien habla todavía del millón de refugiados rohingya? Ese pueblo musulmán que huyó las masacres étnicas cometidas por el ejército en Myanmar vive ahora en el campo de Kutupalong, el más grande del mundo, más poblado que la ciudad francesa de Marsella.

En su mayoría los refugiados no pasan de 18 años. Esa generación crecerá sin país, sin posibilidad de regreso y casi sin educación. Los jóvenes solo pueden contar con algunas clases dadas por oenegés. La religión tomó el relevo. Un grupo islamista radical, Hefazat el Islam, goza de cada vez mayor influencia y ya cuenta con 350.000 alumnos en los campos de Kutupalong.

Fuente: https://www.france24.com/es/20190605-ninos-rohingya-islam-radical-educacion

Comparte este contenido:

Gobiernos recortan ayuda a la educación: Unesco

Redacción: El Nuevo Siglo

La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), en su último Informe de Seguimiento de la Educación Global (Informe GEM), publicado este martes, cuestionó el compromiso global para lograr el objetivo de educación a nivel mundial aprobado por la ONU, en vista de que los gobiernos recortaron las ayudas financieras.

El informe indicó que las ayudas a la educación se han estancado, ya que solo han crecido un 1% al año desde 2009. Otros donantes no han cumplido su promesa a la ONU de mantener el 0,7% de su ingreso nacional bruto para la ayuda extranjera.

Reino Unido ha reducido su ayuda a la educación en un 29%, del cual el 60% fue una disminución en la asignación a la educación básica. En 2016 Reino Unido era el segundo mayor donante al total de educación básica. Sin embargo, cayó al cuarto lugar en 2017.

De manera similar, en 2017 Estados Unidos eliminó una ayuda de USD 13.200 millones, que se redujo en un 2% en comparación con el 2016.

Alemania, el principal donante

Alemania ha estado a la cabeza de la lista de donantes para promover la educación, ya que desembolsó USD 2.000 millones en 2017, seguida por Estados Unidos, con USD 1.500 millones, y Francia, con USD 1.300 millones.

Francia incrementó su financiamiento por un monto de USD 207 millones en 2017, en comparación con el año anterior.

Pero la mayor parte de la ayuda educativa de Alemania y Francia está dirigida a becas y costos imputados para estudiantes de países en desarrollo para invitarlos a estudiar en sus instituciones educativas.

“Si se excluyen estos elementos, el resto de la ayuda a la educación es testigo de una disminución, en un 5%, lo que representa USD 534 millones, en comparación con el año 2016. La ayuda a la educación secundaria también ha disminuido en un 2% y la ayuda a la educación básica en un 8% entre 2016 y 2017”, subrayó un comunicado emitido por la Unesco.

Promesas que no se cumplen

La cuota que se destina a la educación cayó de un máximo del 10,7% al 7,1% en 2017, por lo que el informe de las Naciones Unidas señala que la educación se ha convertido en un tema al que los socios del desarrollo le deben dar prioridad.

De los 10 países principales desarrollados que forman parte de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Reino Unido es el único país que reserva el 0,7% de su ingreso nacional bruto a la ayuda extranjera.

Manos Antoninis, director del Informe GEM, advirtió que esta tendencia es alarmante. “Los gobiernos de los países de bajos ingresos gastan un promedio del 16% de sus presupuestos en educación, mucho más que los países más ricos… Sin la acción de los donantes para apoyarlos, es menos probable que puedan mantener un objetivo educativo tan ambicioso”, sostuvo Antoninis.

“Se ha hablado mucho sobre las grandes ambiciones desde 2015, cuando se estableció nuestra nueva agenda educativa y, sin embargo, los donantes están cambiando el dinero, jugando con diferentes formas de gastar una suma fija, pero sin dar más”.

El papel de Turquía

Al elogiar los esfuerzos de Turquía por acoger una gran población migrante, especialmente de Siria, el informe de la Unesco estimó que se necesitaban 80.000 maestros adicionales para enseñar a todos los niños migrantes sirios.

El informe también señaló que menos países están identificando explícitamente el estatus de refugiado en los censos escolares, mientras que Turquía fue una excepción, ya que en ese país el 93% de los refugiados sirios viven fuera de los campamentos.

Desde 2018, Turquía alberga a 1 millón de niños refugiados en edad escolar.

“El gobierno complementó su sistema de información de gestión educativa en las escuelas públicas con un sistema paralelo para estudiantes extranjeros que supervisa los centros de educación temporal. Después de que se introdujo una política para incluir estos centros en el sistema educativo nacional, la tasa neta de matriculación primaria de estudiantes sirios aumentó de 25%, en 2014, a 83%, en 2017”, explicó el informe.

Papel de los filántropos y ONG

El informe identifica el papel de los filántropos, las organizaciones no gubernamentales (ONG) y las organizaciones religiosas que establecieron escuelas informales, con personal docente voluntario que ofrece instrucción en árabe mediante el uso del currículo sirio modificado. Pero mencionó que no estaban regulados, que operaban fuera del sistema nacional con un control de calidad y con una estandarización de certificación limitada.

De acuerdo con el reporte, el gobierno turco ordenó a todos los centros ofrecer 15 horas de instrucción en idioma turco por semana para preparar a los estudiantes para las escuelas turcas.

El proyecto recibió una financiación de EUR 300 millones como parte de los EUR 3.000 millones de la Unión Europea destinados para los refugiados en Turquía, utilizados para cubrir los costos de construcción de escuelas, impartir cursos de idioma árabe y turco, proporcionar transporte escolar gratuito y materiales educativos.

Inclusión de los refugiados en el sistema educativo nacional

“Turquía, que alberga el mayor número de refugiados del mundo, se ha comprometido a incluir a todos los refugiados sirios en su sistema educativo nacional para 2020 y ya los ha incluido en su sistema de protección social, asegurando que se beneficien de un programa de transferencia de dinero condicional que anteriormente estaba disponible solo para los nacionales”, señala el informe GEM.

Turquía, junto con Chad e Irán, también asume costos sustanciales para garantizar que los refugiados sudaneses, afganos, sirios, así como provenientes de otros países, asistan a la escuela junto con los estudiantes nacionales.

Para facilitar el proceso por medio del cual los migrantes podrían aprovechar las oportunidades de educación, el informe señaló que el gobierno turco ha aligerado los requisitos de documentación para los sirios que desean inscribirse en la educación superior.

El país también ha eliminado las restricciones que exigen que los niños sirios presenten un permiso de residencia turco antes de la inscripción.

Fuente: https://www.elnuevosiglo.com.co/articulos/05-2019-gobiernos-recortan-ayuda-la-educacion-unesco

Comparte este contenido:
Page 10 of 40
1 8 9 10 11 12 40